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La educación musical y la formación de sujetos políticos

INTRODUCCIÓN
Asistimos a un momento de la historia de nuestro país inédito. Por un lado, evidenciamos
grandes manifestaciones, protestas, marchas, disturbios, paros, entre muchas; al igual que
lo ambiguo y difícil que resulta intentar caracterizar o ubicar en el espectro político dichas
manifestaciones realizadas por grupos espontáneos, diversos y con demandas muy
específicas y sectorizadas; que, sin embargo, no son solo expresiones de inconformidad,
es participación política en un contexto de democracia. Por el otro, encontramos una
narrativa desde los medios de comunicación tradicionales, con una clara línea que
pretende vilipendiar y descalificar cualquier expresión de participación que no sea la de
asistir a las urnas.

En este sentido el arte, tanto como medio de comunicación como de manifestación, ha


tomado un papel protagónico no solo para exponer demandas e inconformidades frente a
la sociedad y sus problemas; sino que ha sido la herramienta para contrainformar y
romper cercos comunicacionales.

Esto nos lleva a reflexionar entorno a el papel que juegan las artes, en específico la
música, y de qué manera su enseñanza -y práctica en sí- puede aportar no solo a la
transformación de la sociedad como fin máximo, sino a la politización y formación de
sujetos con capacidad de intervención en la misma y en el cultura. Valdría preguntarse:
¿Es factible que la educación musical sea orientada hacia la construcción de sujetos
políticos? ¿Es el músico un trabajador de la cultura o un simple instrumento de la
interpretación, creación y reproducción de sonidos? ¿Es la educación-creación musical
participación política?

LA ENSEÑANZA DE LA MÚSICA Y SU POTENCIAL TRANSFORMADOR

La música tiene un potencial enorme para brindar herramientas colectivas e individuales


para la transformación social. La enseñanza musical que sea capaz de romper las fronteras
de su existencia per se, por medio de una transdisciplinariedad que permita pensar, más
allá de crear músicos excepcionales, sujetos críticos, artistas comprometidos con
capacidad de reconocerse en un contexto histórico.
Y es que el quehacer pedagógico y el musical, están ligados directamente al plano de lo
público, de la participación; se es educador musical en el aula, en la calle, en la casa, en las
plazas y en cualquier otro lugar donde se establezcan relaciones sociales; en últimas, los
lugares donde la política transversaliza la vida misma. En este sentido Esperanza Londoño,
profesora de la Universidad Pedagógica Nacional escribe:
“El arte esta llamado a ser el motor de ese cambio social, está llamado a tomarse lo
público y tomarse no solo la calle o los espacios no convencionales, sino tomarse los
espíritus y las consciencias, las universidades y las escuelas, todos los ámbitos de
realización de la cotidianidad de los seres huma-nos, todos aquellos espacios en los cuales
[el músico pedagogo] se realiza como ser social, esto es, lo público. Debe quitársele el
espacio que los medios le robaron a lo público. Las artes y las ciencias...resignifican el
desarrollo de la ciudadanía y permiten entenderla como una nueva forma de hacer
política”

Por tanto, música y práctica pedagógica están ligadas a la participación, y por tanto, a la
política.

“Esto es lo que hace al arte subversivo, pues imagina o crea otras realidades, convirtiendo
esa imagina-ción, sueño o fantasía en un “acto en potencia”, esto es, pensar una realidad
alternativa a la actual; el solo imaginarlo o soñarlo ya es una realidad. Es un acto
transformativo en potencia, en primera instancia, del individuo que lo propicia, pero así
sigue invadiendo a otros, por eso es subvertor de la realidad”

Nos invita así la profesora Esperanza Londoño con este párrafo a asumir el arte, por tanto,
la música, como la posibilidad de romper con el esquema preestablecido de sociedad. De
romper la narrativa hegemónica que desde las esferas más privilegiadas se pretende
naturalizar.

¿Y la enseñanza qué?
Es donde debemos, como primera medida, asumir el proceso enseñanza como un acto
político, lejos de ser neutral y equilibrado, es un escenario de conflicto y de disputa. El
educador está pugnando a la familia, la iglesia, el estado, la televisión; todas estas con
posiciones claras y políticamente orientadas al mantener el orden o estatus quo. Por
tanto, asumirlo de otra manera sería obviar una realidad con una fuerte carga ideológica.

Partiendo de esta premisa, podemos afirmar que la enseñanza de la música implica un


posicionamiento frente a la realidad, ya sea que se asuma como tal y se planteen
escenarios para que sea un medio eficaz para la transformación; como que, por omisión,
se pretenda desligar de cualquier dinámica de participación o política, asumiendo de
manera inerte el devenir histórico, al mejor estilo de los indiferentes.

A modo de conclusión, quiera dejar un ejemplo concreto que aterrice un poco las ideas
esbozadas.
Vientos del sur – Casa cultural de potosí

Desde el año 2012 se viene tejiendo una propuesta de educación musical desde la Casa
cultural de Potosí en Ciudad Bolívar. Desde los principios de las músicas comunitarias y la
educación popular (Descentralización, horizontalidad, reconocimiento de relaciones
dialógicas en el proceso de enseñanza, música en función de las necesidades comunitarias
y no del arte en sí, posibilidad de dialogar entorno a los saberes propios), cuyo principal
objetivo es la construcción de tejido comunitario y la formación de sujetos políticos.
En ese sentido el acto en sí de la interpretación y la estética musical tienen un segundo
lugar para dar paso al proceso mismo entorno al aprendizaje. En donde por medio de la
enseñanza de músicas tradicionales y del sentir latinoamericano se reflexiona entorno a la
realidad, a los mensajes mismos de la música, así como al contexto en el cuál fueron
creadas y en el cuál van a ser interpretadas.
Esta concepción de la educación riñe directamente con lo que Giroux plantea como la
educación tradicional o conservadora “La enseñanza para muchos conservadores a
menudo es tratada simplemente como un conjunto de estrategias y habilidades para
utilizar con el fin de enseñar la materia pre-especificado. En este contexto, la enseñanza
se convierte en sinónimo de un método, técnica o la práctica de un entrenamiento en
habilidades artesanales”. Para dar paso a una pedagogía que reconozca y se posicione con
claridad frente al mundo en el que vivimos.

Referencias
¿De qué manera se relacionan democracia, participación y violencia?
https://www.cepchile.cl/cep/opinan-en-la-prensa/sylvia-eyzaguirre/violencia-y-
democracia
¿De qué manera comunica el arte en tiempos de manifestaciones?
https://www.eltiempo.com/bogota/grafiti-y-arte-urbano-en-el-paro-nacional-en-bogota-
612675
¿De qué manera califican los medios las manifestaciones violentas?
https://www.semana.com/nacion/articulo/vandalismo-prepago-las-evidencias-del-dinero-
sucio-detras-de-la-violencia/202151/
¿Qué es la contrainformación?
https://economipedia.com/definiciones/contrainformacion.html
¿De qué manera se ve la realidad a través del arte?
https://revistas.pedagogica.edu.co/index.php/revistafba/article/view/1107/1114
¿Qué implicaciones comunitarias, culturales y políticas tiene la enseñanza de la música?
https://revistas.pedagogica.edu.co/index.php/revistafba/article/view/1936/1887
¿De qué manera se tramitan los rezagos de la violencia por medio del arte?
http://www.scielo.org.co/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0121-51672011000100002
Postulados de la educación popular e ideas entorno al proceso educativo
https://www.emagister.com/blog/pedagogia-alternativa-la-educacion-popular-de-paulo-
freire/#:~:text=Educar%20no%20es%20una%20pr%C3%A1ctica,algo%20neutro%2C
%20inamovible%20y%20apol%C3%ADtico.

La educación como acto político y crítico


https://educacionparalasolidaridad.com/2017/05/07/una-entrevista-critica-con-henry-
giroux/
Relación educador-educando, educación para transformar un contexto específico

https://fhcv.files.wordpress.com/2014/01/freire-pedagogia-del-oprimido.pdf

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