Universidad de Oriente

Núcleo De Anzoátegui
Unidad de Cursos Básicos
Departamento De Humanidades
Asignatura: Ética
Profesor: Mons. Carlos Viña
Bachiller: José Girot

Reflexión Capitulo II de Ética Para Amador: Ordenes

costumbres y Caprichos

En nuestra vida cotidiana, nos enfrentamos a situaciones que no hemos

elegido y que nos ponen a prueba. A veces estas situaciones nos obligan a tomar
decisiones difíciles, donde nos sentimos atrapados entre dos opciones que no nos
gustan o que nos generan conflictos internos. Por ejemplo, un empleado puede
tener que elegir entre seguir trabajando en un ambiente tóxico y estresante o
renunciar y buscar otro trabajo.

En estos momentos, es importante ser conscientes de que tenemos la

capacidad de elegir cómo reaccionar ante lo que nos pasa. Aunque preferiríamos
no tener que elegir, todavía debemos decidir qué es más importante para nosotros
en ese momento y actuar en consecuencia.

Sin embargo, cada decisión que tomamos está influenciada por nuestros
motivos, que pueden ser de diferentes tipos. Algunos motivos pueden ser externos,
como las órdenes de un jefe o las costumbres de nuestra cultura, mientras que otros
pueden ser internos, como los caprichos o las preferencias personales.

Es importante reflexionar sobre nuestros motivos y cuestionarlos para

determinar si están alineados con nuestros valores y objetivos. Por ejemplo, una
persona puede tomar la decisión de estudiar una carrera universitaria porque es lo
que se espera de ella en su familia, pero en realidad, sus verdaderos intereses son
en otra área completamente diferente. Al cuestionar sus motivos, puede tomar una
decisión más informada y elegir un camino que se alinee mejor con sus verdaderas
pasiones y metas.

Además, es importante tener en cuenta que no siempre somos libres de elegir

nuestro camino. A veces estamos condicionados por factores externos e internos
que escapan a nuestro control. Por ejemplo, una persona puede querer dejar su
trabajo para empezar su propio negocio, pero no tiene los recursos financieros para
hacerlo. En estas situaciones, es importante ser realista y encontrar maneras de
trabajar con los recursos que tenemos disponibles para avanzar hacia nuestros
objetivos.

En conclusión, aunque no podemos elegir lo que nos sucede en la vida, sí

podemos elegir cómo reaccionamos ante ello y cómo actuamos en consecuencia.
Al ser conscientes de nuestros motivos y cuestionarlos, podemos tomar decisiones
más informadas y tener un mayor control sobre nuestras vidas.