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ÁREA DE CIENCIAS DE LA SALUD

MED 220 - Laboratorio de Anatomía Patológica II

CASO CLÍNICO NO.1

Sustentado por:

Nicole Santos - 1099326


Michelle Dalder - 1098528
Albert Feliz - 1097884
Katherine Quispe - 1092614
Juan Fermín - 1096592
Angelica Cañas - 1095065

Sección 71
Docente: Dra. Ada Guerrero
Monitora: Jannara Rosario

Fecha de entrega:

Martes 27 de Septiembre del 2022


Santo Domingo, República Dominicana
CASO CLÍNICO

Femenina de 80 años acude a la consulta por presentar tos, y dolor pleurítico


durante las últimas 4 semanas. Exploración física, Pcte. Afebril, se auscultan
crepitantes en lóbulo inferior de pulmón izquierdo, Radiografía de tórax
muestra área de opacificación mal delimitada en lóbulo inferior izquierdo, tras
un mes de tratamiento antibiótico, su salud no mejora, persistiendo la lesión
radiológicamente, se decide realizar punción aspiración con aguja fina guiada
por TC del lóbulo inf. Izquierdo del pulmón, mostrándose aspecto histológico.
Descripción Microscópica

A la observación de la microscopía de este Adenocarcinoma de pulmón con


patrón lepídico, se puede notar la presencia de un crecimiento lepídico (células
neoplásicas que se asemejan a neumocitos tipo II que crecen a lo largo de la
superficie de los espacios aéreos alveolares), con células atípicas que recubren
los tabiques alveolares y también se pueden observar células tumorales
desprendidas en los alvéolos.

Dco. Histopatológico

Tomando en cuenta:
● Los signos y síntomas presentados por la paciente dígase, tos y dolor
pleurítico durante las últimas 4 semanas.
● Lo observado en la exploración física, fue que por medio de auscultación
se escucharon unas crepitantes a nivel del lóbulo inferior del pulmón
izquierdo.
● La respuesta del sistema de la paciente frente al uso de antibióticos quien
no presentó mejoría.
● Lo observado en imágenes radiográficas es un nódulo mal delimitado
(característica maligna) que presenta opacificidad en el lóbulo inferior
izquierdo del pulmón.
● Y por último lo observado en la biopsia de pulmón a nivel microscópico
donde vemos células tumorales desprendidas en los alvéolos.

Llegamos a la conclusión de que estos hallazgos y dichas características son


compatibles con un adenocarcinoma de pulmón de patrón lepídico.

Estudios complementarios

Varios autores aseguran que es difícil clasificar con precisión una lesión como el
adenocarcinoma de patrón lepídico por el método de biopsia de aguja fina. Esta
prueba sirve para confirmar si hay presencia de un cáncer o no, pero el muestreo
puede afectar la interpretación ya que es posible que no todos los patrones
tumorales estén presentes en el material citológico. Por ende, es recomendable
hacer pruebas complementarias.

Biopsia a cielo abierto

Esta es una técnica que consiste en una cirugía para poder extraer un pequeño
pedazo de tejido pulmonar. Se realiza biopsia a cielo abierto y se ordena un
reporte histopatológico, en el cual el patólogo podrá observar la muestra y
determinar si cumple con las características diagnósticas.

En este caso servirá de complemento para poder ver de una manera más amplia
cómo está afectado el tejido y poder ver lo que serían los patrones de
crecimiento de una manera más clara.

Inmunohistoquímica

Para poder confirmar que es un adenocarcinoma, es importante poder realizar


pruebas de inmunohistoquímica. Las cuales tendrán los siguientes posible
resultados:

● Citoqueratina 7 +
● Citoqueratina 5 –
● Citoqueratina 20 –
● Marcadores neuroendocrinos +-
● TTF-1 +

Radiografía

Mediante este estudio de imágenes se pueden mostrar anomalías definidas.


Estas sirven de complemento para poder determinar el estado de invasión del
adenocarcinoma, en estadios tempranos y no invasivos, este adenocarcinoma
con patrón lepídico suele adoptar una morfología de nódulo pulmonar solitario
asintomático, mientras que en una etapa avanzada hay una micro diseminación
canalicular con variada sintomatología.

Tomografías computarizadas

El uso de tomografías computarizadas también es utilizado. Si en esta prueba se


observa uno o varios nódulos subsólidos mayores de 5mm, ya sea puro o
semisólido, se recomienda incluir entre las posibilidades diagnósticas el
adenocarcinoma de patrón lepídico.

Mediante la tomografía computarizada, se puede puede conocer el estadio


del cáncer y ayuda a encontrar el lugar correcto para tomar una muestra para
la biopsia, además de esto sirve como prueba control para darle seguimiento
al cáncer posterior a la finalización del tratamiento.
Si existen dudas acerca de las características radiológicas del nódulo, se
recomienda la resección de la pieza completa, y la anatomía patológica dará la
respuesta definitiva.

Tomografía por emisión de positrones (PET SCAM)

Esta tomografía en pulmón hace referencia a un examen imagenológico, en el


cual se utiliza una sustancia radiactiva, denominada marcador para buscar una
patología en los pulmones, como por ejemplo un cáncer en el pulmón.En esta
podemos ver esencialmente la actividad de las células dentro de los pulmones.

Una TEP puede ser una forma de ayudar a detectar el cáncer y conocer su
estadio. Además de esto algo que es muy importante, esta tomografía nos puede
permitir conocer el estadio, la ubicación del cáncer, y si este se ha diseminado,
es decir, ver si el cáncer pulmonar, se propagó a otras zonas del pulmón o en
otras partes del cuerpo.

Otro motivo para usar esta fotografía, es que esta ayuda a diagnosticar cáncer
pulmonar, cuando otras pruebas no lograron dar con una imagen clara que les
permita hacer un diagnóstico. Adicionalmente, la TEP permite determinar si una
neoplasia en los pulmones, previamente observada en una TC, es o no
cancerosa.

Imágenes por resonancia magnética (RM)


Este estudio consiste en una inyección de un colorante especial vía endovenosa,
antes o durante la prueba de resonancia magnética. El colorante también puede
administrarse en forma de comprimido o líquido para tragar. La característica
que tiene este colorante, es que actúa sobre el tumor, haciendo que este adquiera
un brillo en las imágenes dejándolo al descubierto. Mediante esta prueba se
puede dar con la localización del pulmón, la metástasis del cáncer de pulmón, y
medir el tamaño que posee el tumor. Sin embargo, algo que hay que tener en
cuenta es que las imágenes por RM no son muy eficaces a la hora de tomar
imágenes de partes del cuerpo en movimiento, como vendrían siendo los
pulmones, que se mueven con cada respiración. Debido a esto la RM se usa con
poca frecuencia para examinar los pulmones. Pero esta puede ser útil para
detectar si el cáncer de pulmón se ha diseminado al cerebro o a los huesos.
Dco. Diferencial

Debido a que esta patología se caracteriza por una gran producción de moco que
se manifiesta clínicamente con expectoración abundante hace que se pueda
confundir el cuadro:

● Sarcoidosis: Este se puede confundir debido a que se forman los llamados


granulomas en el pulmón
● Bronconeumonía (sobre todo en su etapa inicial)
● Fibrosis focal: Tienen síntomas similares, pero se diferencia en el dolor
en articulaciones y músculos, acropaquia de manos y pies.
● Carcinoma mucinoso: Este puede mostrar un patrón de crecimiento
lepídico prominente; sin embargo, la mayoría de los casos tendrán áreas
de invasión y deben clasificarse como adenocarcinoma mucinoso
invasivo.
● Hiperplasia adenomatosa atípica: es una lesión pequeña (< 5 mm) que se
caracteriza por neumocitos displásicos que revisten las paredes
alveolares, que son ligeramente fibróticas.
● Hemangioma esclerosante: Comúnmente muestran hemorragia, lagos de
sangre, agregados de histiocitos, inflamación crónica, estructuras
laminares.

Reseña de la patología (Adenocarcinoma de pulmón con patrón de


crecimiento lepídico)

El adenocarcinoma (AC) de pulmón es el tipo histológico más frecuente de


cáncer de pulmón (CP).El Adenocarcinoma con patrón de crecimiento
lepídico es un subtipo de adenocarcinoma de pulmón con características
epidemiológicas diferentes y mejor pronóstico en comparación al de Cáncer de
pulmón microcítico. Se dice que un AC tiene un crecimiento lepídico cuando
se produce una proliferación de células neoplásicas que revisten las
superficies de las paredes alveolares preservando la arquitectura pulmonar.

Aunque no es muy frecuente ya que representa solamente del 1-9% de los


cánceres pulmonares, se conoce como la forma más común que se presenta en
personas no fumadoras fundamentalmente en mujeres e individuos asiáticos.
Su origen también se da debido a una mezcla de células bronquioalveolares,
células claras y de neumocitos tipos II que son los encargados de la producción
adecuada del surfactante pulmonar y de su posterior liberación a los alvéolos. El
mismo es un tumor de crecimiento lento que se origina, en una zona de la
periferia del parénquima pulmonar, o sea, en la región terminal
bronquioalveolar.

Debido a su localización este Adenocarcinoma puede presentarse asintomático


hasta un 61% de los pacientes en el momento del diagnóstico. Las formas más
comunes de presentación radiológica fueron nódulo pulmonar solitario, masa
pulmonar; infiltrado parenquimatoso, en menos ocurrencia nódulos múltiples,
derrame pleural.

La sobrevida a los 5 años para el grupo global de pacientes es alrededor de 65%.


En caso de una resección completa la sobrevida es más favorable con una muy
baja incidencia de recurrencia. Sin embargo, si el adenocarcinoma es multifocal,
puede llevar al enfermo hasta la muerte. Las posibilidades de supervivencia
aumentan notablemente cuando afecta solamente el pulmón izquierdo. En toda
instancia se considera la cirugía ya sea lobectomía o neumonectomía y no
requiere de ningún tratamiento adyuvante. Se descarta de entrada el tratamiento
quirúrgico en caso que el tumor presente secreción y alteración del Factor de
crecimiento de fibroblastos (FGF-1).

Cabe resaltar que este adenocarcinoma era previamente conocido como


Carcinoma Bronquioalveolar (BAC). Hasta que en el 2011 este término fue
revisado y finalmente en el 2015 la organización mundial de la salud publicó su
nueva clasificación de tumores pulmonares. Considerando así el término BAC
como obsoleto.

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