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Origen de las notas musicales

INTRODUCCIÓN

Toda la música que existe se encuentra compuesta por unidades individuales de sonido


que se caracterizan por una frecuencia determinada.
La música no es más ni menos que la combinación en el tiempo de una gran cantidad de
sonidos, muchos de los cuales pueden ser simultáneos.

Distintos estudios han revelado que desde el principio de los tiempos ha habido
producciones musicales que han trascendido de manera histórica a través del Arte o de la
Religión. A raiz de esto se tuvo que inventar algún método de escritura para así preservar
las creaciones artísticas que con el tiempo han perdurado gracias a dicho método.

DESARROLLO

Así nace el concepto de notas musicales, pues una nota musical es un símbolo particular
que nos remite a un único sonido componente de una composición musical. Esto significa
que las notas musicales son a la música lo que las letras son al texto escrito.
Las notas se pueden identificar por una gran variedad de símbolos que nos transmiten
información sobre su duración en el tiempo, sus matices sonoros y sobre cómo han de
ejecutarse. Algunos de los nombres que reciben las mismas según su duración en el
tiempo son: redondas, blancas, negras, corcheas, semicorcheas, fusas y semifusas.
Interesantemente los nombres de las notas musicales derivan del poema Ut queant laxis
del monje benedictino friulano Pabll el Diácono, específicamente de las silabas iniciales del
himno a San Juan Bautista. Las frases de este himno, en latín rezan así:

Utqueant laxis
Resonare fibris
Mira gestorum
Famuli torum
Solve polluti
Labii reatum
Sancte Ioannes

(En español, significa “Para que tus siervos puedan exaltar a plenos pulmones las
maravillas de tus milagros, disuelven los pecados de labios impuros, San Juan”).

Ut: para que


Queant resonare: puedan cantar
Mira gestorum: de los milagros
Famuli tuorum: los siervos tuyos
Laxis fibris: a pleno pulmón
Sancte Johannes: San Juan
Solve reatum: disuelve los pecados
Polluti labii: labios impuros

En la grabación de los monjes benedictinos de Santo Domingo de silos se dice


erróneamente que el himno es anónimo.

Fue el monje Guido D’Arezzo, considerado el padre de la música, quién desarrolló una
aproximación en la notación actual, a las asignar los nombres a las notas excepto a la
séptima nota, si, que entonces era considerada un tono diabólico (diáblus in música) y
desarrollar la notación dentro de un patrón de cuatro líneas (tetragrama), y no una sola
como se venía haciendo anteriormente.
Hacia el siglo XVI se añadió la nota musical sí, derivado de las primeras letras de Sancte
loanes, en el siglo XVII el francés Giovan Battista Doni decidió cambiar el nombre de la
nota ut debido a su difícil pronunciación en el solfeo y fue cuando Ut se convirtió en do qué
es la primer sílaba de su apellido DOni y así es como se le llama hoy en día.
También en este proceso se añadió una quinta línea a las cuatro que se utilizaban para
escribir música, llegando a la forma en que hoy lo conocemos, llamada pentagrama
(música).
Luego de las reformas y modificaciones llevadas a cabo en el siglo XVI, las notas pasaron
a ser las que se conocen actualmente: do, re, mi, fa, sol, la, y si.

CONCLUSIÓN

El origen de las notas musicales data de las primeras décadas del Siglo XI, cuando el
monje benedictino Guido D´Arezzo usó un himno que se solía cantar en las vísperas de la
celebración de San Juan Bautista y tomó las primeras letras de cada párrafo para crear
estas notas.

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