INSPECCIÓN OCULAR

INTRODUCCIÒN

Actualmente a nivel mundial, están ocurriendo una serie de hechos delictivos que
ha conllevado a muchos especialistas en la materia a constituir equipos
multidisciplinarios para estudiar las causas que puedan estar influyendo en el
aumento del índice delictivo. Indistintamente de las causas criminológicas lo cierto
es, que día a día, la comisión de hechos punibles va en aumento.

Venezuela no está ajena a esta situación y diariamente ocurren hechos que son
investigados por los organismos encargados de la investigación Criminal, aplicando
nuevos métodos técnico-científicos para lograr el esclarecimiento de los hechos y
llegar hasta el culpable o culpables para ser colocados a la orden de los
organismos jurisdiccionales a fin de que les sean aplicadas las sanciones
correspondientes.

Ahora bien, cada vez que ocurre un hecho punible, está presente un sitio de
suceso o sitio de relación criminal, el cual en muchos de los casos no es tratado
con la importancia debida. Tanto la evidencia física como el sitio del suceso, son
temas que se encuentran íntimamente relacionados entre sí, por cuanto en la
generalidad de los delitos en la escena del crimen se hallarán evidencias físicas
producto del resultado del crimen perpetrado, cuyo estudio y análisis permitirán en
primer lugar, determinar la comisión de un hecho punible y en segundo lugar,
establecer la relación directa o indirecta con el victimario, el medio de comisión y
la victima. Las evidencias físicas halladas en el sitio de relación criminal, servirán
de fundamento (bien como elementos de convicción, o como elementos de
prueba) para la acusación fiscal y defensa del imputado, en consecuencia serán
consideradas y valoradas por el juez al momento de decidir para absolver o
condenar al imputado. Es obvio pues, la importancia que revisten ambos temas
para el proceso penal y por ende para todos los sujetos procesales que intervienen
en él, llámese Ministerio Público, Defensa o Juez.
La preservación y resguardo del sitio del suceso, son fundamentales para una
buena investigación penal, pues de allí depende en gran medida que el
investigador pueda responder sin lugar a dudas a las preguntas Qué? , Quién? ,
Cuándo? , Dónde?, Cómo?, Con qué? y Por qué? se cometió el hecho punible,
estableciendo de este las circunstancias de tiempo, modo y lugar del hecho.

En el tema objeto de estudio, la criminalística juega un papel fundamental, toda

vez que con los resultados de los análisis técnicos-científicos, se auxilia a los
órganos de administración de justicia, procurando los elementos probatorios
identificadores y reconstructores conducentes a establecer la verdad de los hechos
que se investigan.

El estudio de los elementos materiales de prueba permite establecer la forma

como ocurrieron los hechos, analizando todos sus fenómenos, desde la primera
maniobra hasta los actos consumatorios. Por otra parte, el autor o los autores
durante el itercriminis, utilizan gran variedad de agentes mecánicos, químicos,
físicos y biológicos, cuyo análisis cuantitativo, cualitativo y comparativo, necesitará
de metodología, tecnología y conocimiento de las disciplinas científicas que
constituyen la criminalística general.

De igual forma, el investigador del lugar de los hechos debe proteger, observar y
fijar el lugar. Sin embargo, conocer l

as técnicas para la recolección de las evidencias físicas no basta. El experto que

practica la criminalística de campo debe aplicar conocimientos vastos y vigentes de
otras disciplinas científicas de la criminalística general, con el objeto de tener bases
técnicas para aplicar la metodología específica y razonar científicamente sobre el
valor de cada una de las evidencias físicas, por irrelevantes que parezcan.

El presente trabajo explica de manera clara y sencilla lo que se entiende por el

sitio de suceso y cuál es su importancia tanto en la investigación de un delito
criminal como para la Criminalística.
 1. CONCEPTO.

El sitio del suceso no es otra cosa que el lugar físico en el que ha sucedido
ocurrido un hecho que pudiera resultar delictuoso.

Otra definición frecuentemente utilizada es “lugar en que ha ocurrido un hecho de

interés criminalístico”, y en ocasiones se le agrega el adjetivo “policial”, sin
embargo para nuestro quehacer como estudiosos de la ciencia forense, debemos
dejar de lado los conceptos que se acercan a la labor de las policías, puesto que en
esos casos se seguirán los procedimientos previamente establecidos en los cuerpos
reglamentarios y manuales de las instituciones.

Gutiérrez (2008), lo denomina Lugar del Hecho y lo define como: “el sitio o espacio
en donde se ha cometido un acto ilícito, y en donde se encuentran los indicios y
evidencias. También se le conoce como el lugar del delito, la escena del crimen, o
el escenario del delito; el propósito fundamental de su estudio es el de lograr tanto
la reconstrucción del hecho como su verdad histórica”.

Por su parte, Del Giudice (2009), distinguen entre el sitio del suceso y la escena
del crimen. Para los autores el sitio del suceso es “el lugar público o privado donde
se haya perpetrado la comisión de un hecho punible de acción pública, donde se
registra la distribución geográfica, espacial y referencial del lugar del hecho; así
como todas aquellas áreas que se encuentren relacionadas con el hecho objeto del
proceso. Mientras que, la escena del crimen, es el espacio físico del sitio del
suceso, donde se perpetró específicamente el hecho punible”.

De manera que, el sitio del suceso o sitio de relación criminal, no sólo comprende
el lugar concreto donde se perpetró el hecho; sino que extiende su análisis y
evaluación hacia aquellas áreas donde fue planificado el hecho, el sitio simulado, el
sitio de liberación y, otros. Igualmente, incluye toda la superficie comprometida en
el hecho, áreas colindantes y conexas que sean susceptibles de ser procesadas
criminal y científicamente con la finalidad de que proporcionen las informaciones
pertinentes de incuestionable valor para el cabal desenvolvimiento de la
investigación penal.

2. IMPORTANCIA.

La protección, preservación y aseguramiento del sitio del suceso por parte de los
órganos de investigación penal, reviste de vital importancia, toda vez que el mismo
constituye prueba fehaciente de la perpetración del hecho punible, y porque
representa la fuente principal proveedora de pruebas; pues por lo general se
recaban más del 90% de las evidencias físicas y de los objetos involucrados
obtenidos en el lugar y en la escena del crimen, así como, en los distintos
escenarios que se desprendan del hecho.

El estudio y análisis criminalístico del sitio del suceso es una actividad probatoria
de sustancial importancia para la investigación penal, y por ende para la
investigación criminal y criminalística. Elementos como, las pisadas del victimario,
la existencia del intercambio de sustancias entre el autor y las evidencias
manipuladas, la relación con la víctima, con el medio empleado para la comisión
del hecho, con el medio de locomoción y otros elementos a estudiar se localizan en
la escena del crimen. Ello es así porque el espacio físico involucrado en la comisión
de un hecho punible posee generalmente la particularidad de absorber en
cualquier área de su extensión vestigios, residuos, rastros, trazas, impresiones o
huellas del contacto, relación, reciprocidad e intercambio existente entre una
superficie sólida móvil y una superficie sólida fija, sin descartar que, ambas
superficies puedan ser móvil-móvil. A partir del estudio de esta secuencia se podrá
determinar el sitio natural del hecho, el sitio de liberación, el sitio de intercambio,
de coartada, etc. De modo que, la generalidad de las evidencias físicas se localiza
en la escena del suceso, bien en el cuerpo de la víctima, en posesión del presunto
autor, así como en las áreas relacionadas. Por lo que antes de proceder a la
colección de los hallazgos, los funcionarios encargados de la investigación han de
programar un plan metodizado de búsqueda en atención a la naturaleza del hecho
y a las condiciones físicas del sitio. Tales actuaciones en el lugar del suceso se
deben programar tomando en cuenta lo siguiente:

 Consideraciones acerca del tipo y cantidad de material necesario.

 Cada objeto o material debe ser marcado por el propio funcionario
que colecta la evidencia.
 Los materiales colectados deben ser preservados en recipientes o
envases adecuados, debidamente embalados en forma individual.
 Los embalajes deben ser rotulados o etiquetados con la necesaria
información identificativa.

Ese primer abordaje al sitio del suceso es sustentado, entre otras cosas, con la
inspección técnica y constituye el primer eslabón de la cadena de custodia que
garantiza la autenticidad de la prueba, de allí la importancia de preservar, fijar,
recabar y remitir las evidencias físicas halladas en el lugar. De la correcta
aplicación de los procedimientos técnicos para practicar las actividades antes
mencionadas, dependerá la legalidad, licitud y autenticidad de la prueba, aspectos
éstos fundamentales para establecer la responsabilidad penal de una persona
comprometida en el hecho.

De aquí se desprende la importancia que reviste el espacio físico que facilita a los
órganos de investigación penal los medios materiales fijados por los sujetos y
objetos, activos y pasivos involucrados en la comisión del hecho punible. Por tanto,
la escena del crimen constituye, en primer lugar, un extraordinario sistema de
información y análisis criminalístico de incalculable valor; y en segundo lugar,
porque del sitio del suceso, los hechos están sustentados por el procesamiento de
las pruebas físicas y testimoniales indispensables para establecer; por un lado, la
configuración objetiva y precisa de la circunstancia del hecho con el objeto de
calificar correctamente el precepto jurídico; y por el otro, para descubrir la verdad
e identificar al autor o autores del hecho.
3. CLASES.

La principal importancia que tiene esta clasificación, está relacionada con la mejor
o peor posibilidad de dar adecuada protección al lugar para preservar el material
relacionado con los hechos, y a las facilidades de fijación y rastreo del mismo. Se
distinguen los siguientes:

3.1. Sitio del Suceso Cerrado: Existen dos condiciones para caracterizar este
tipo de espacio físico donde se perpetró el hecho punible:

 El espacio físico objeto de estudio debe estar totalmente cubierto a su

alrededor, pudiendo estar protegido por puertas, paredes, ventanales,
muros y techo. Ej: habitación, baño, etc.
 La segunda condición que caracteriza el sitio cerrado, se precisa por la
relación existente entre las condiciones meteorológicas y el medio ambiente
y las evidencias físicas. De una manera u otra el medio ambiente influye
desfavorablemente sobre las evidencias físicas, especialmente las
sustancias, fluidos, trazas, polvos, huellas y residuos, contaminándolas,
deteriorándolas o perdiendo parcial o totalmente las evidencias.
3.2. Sitio del Suceso Abierto: La condición sine qua non para que un espacio
físico sea considerado abierto, es diametralmente opuesta al sitio del suceso o
escena del crimen cerrado, es decir, el sitio del suceso está al aire libre, en vía
pública, de fácil acceso. Ejm: jardín, campo, calle, etc. La particularidad de este
tipo de espacio físico es que las evidencias físicas tienen un contacto directo con
las condiciones meteorológicas y el medio ambiente. Igualmente permite el libre
acceso de curiosos, lo que trae como consecuencia la contaminación, el deterioro,
pérdida total o parcial de las evidencias físicas, tales como: sustancias, fluidos,
trazas, residuos, huellas afines. Es por ello, que se recomienda a los órganos de
investigación penal abordar de inmediato este tipo de sitio de suceso y proceder
con premura a la protección, resguardo y preservación de los objetos activos y
pasivos y realizar la inspección del lugar con la inmediatez que requiera el caso y
asegurar el estado y la conservación de las evidencias.
3.3. Sitio del Suceso Mixto: Es aquel espacio físico donde se combinan las
características de los sitios antes descritos. Ej.: pasillo, hall, balcón, etc.

La clasificación del sitio del suceso y de la escena del crimen dependerá

proporcionalmente de la determinación de la secuencia lógica, concordante y
congruente partiendo del establecimiento preciso del lugar real, verdadero u
original del hecho, con la indicación de la relación existente entre el área o las
áreas objeto de estudio y los objetos involucrados en el hecho. De allí que se
pueda determinar y dejar constancia de los distintos escenarios o modalidades del
sitio del suceso, a saber:

 Sitio de Liberación
 Sitio Simulado o de coartada
 Sitio de Ejecución
 Sitio de Planificación
 Sitio de cautiverio
 Sitio de almacenamiento (depósito)
 Sitio de Trasbordo, entre otros.

Todos pueden ser abiertos, cerrados y mixtos.

4. FUNDAMENTOS LEGALES Y CRIMINALÍSTICOS.

De acuerdo a la Ley del Cuerpo de Investigaciones Científica, Penales y

Criminalísticas y a la recién aprobada Ley Orgánica del Servicio del Policía y del
Cuerpo de Policía Nacional, el órgano principal en materia de investigaciones
penales es el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas, y por
tanto es éste el encargado de practicar las funciones técnicas y científicas
tendentes a recabar y procesar las pruebas físicas y testimoniales, indispensables
para descubrir la verdad y determinar la responsabilidad penal del autor. El
estudio, análisis, evaluación e interpretación criminalística del sitio de la relación
criminal, corresponde al campo de acción de la ciencia criminalística descriptiva
que abarcan las inspecciones, los reconocimientos técnicos, los siniestros y los
barridos criminalísticos.

No obstante, como bien es sabido, la titularidad de la acción penal y la dirección

de la investigación, le fue atribuida, de conformidad con la Constitución y la Ley, al
Ministerio Público. De allí que, el artículo 283 del Código Orgánico Procesal Penal,
contemple:

“El Ministerio Público, cuando de cualquier modo tenga conocimiento de la

perpetración de un hecho punible de acción pública, dispondrá que se practiquen
las diligencias tendientes a investigar y hacer constar su comisión, con todas las
circunstancias que puedan influir en su calificación y la responsabilidad de los
autores y demás partícipes, y el aseguramiento de los objetos activos y pasivos
relacionados con la perpetración.”

El artículo 284 ejusdem, reza:

“Si la noticia es recibida por las autoridades de policía, éstas la comunicarán al

Ministerio Público dentro de las 12 horas siguientes y sólo practicaran las
diligencias necesarias y urgentes.

Las diligencias necesarias y urgentes estarán dirigidas a identificar y ubicar a los

autores y demás partícipes del hecho punible, y al aseguramiento de los objetos
activos y pasivos relacionados con la perpetración”.

Estas autoridades de policía no son otras sino los denominados por la Ley del
Cuerpo de Investigaciones Científica, Penales y Criminalísticas, “Órganos de
Apoyo”, los cuales tienen, entre otras funciones: realizar actividades encaminadas
a resguardar el sitio del suceso, impedir que las evidencias, rastros o materiales
desaparezcan, protegiendo el estado de las cosas de tal forma que no se
modifiquen, hasta llegar la autoridad competente.
Finalmente, el artículo 300 de la norma adjetiva penal, establece que:

“Interpuesta la denuncia o recibida la querella, por la comisión de un delito de

acción pública, el Fiscal del Ministerio Púbico, ordenará, sin pérdida de tiempo, el
inicio de la investigación, y dispondrá que se practiquen todas las diligencias
necesarias para hacer constar las circunstancias de que trata el artículo 283…”

De allí que, se puede decir que con el inicio de la investigación criminal se

desprende de ipso facto la investigación criminalística con el estudio, análisis,
evaluación e interpretación del sitio del suceso y de la escena del crimen. A partir
de ese instante, el Ministerio Público, los investigadores, los especialistas, el
propietario o encargado del lugar y los testigos habilitados para presenciar el acto,
conducidos por el encargado de la investigación, procederán sin dilación a
practicar las diligencias y los procedimientos encaminados a detectar las evidencias
físicas relacionadas con el hecho, con el autor, la víctima y el medio empleado para
la comisión; así como aquellas evidencias físicas que no guardan relación, vinculo o
nexo con las evidencias antes descritas que deberán ser estudiadas, analizadas y
evaluadas con exhaustividad, ya que, se pudiera estar en presencia de nuevos
hechos que pudieran dar otro giro a la investigación.

Es de suma importancia que se observe el acto donde se pondrá en práctica la

metodología adecuada, de acuerdo a los parámetros indicadores de las
condiciones, tipos o clasificación de la escena del crimen. Los funcionarios deberán
estar capacitados para detectar mediante la secuencia lógica, concordante y
congruente de los elementos pre y post criminalísticos conjuntamente con la
aplicación de los principios que rigen la ciencia criminalística y la teoría del
absurdo, los factores que pudieron haber alterado, modificado o contaminado
(voluntaria o involuntariamente) el sitio del suceso con el fin de reiniciar la
reconstrucción del hecho.
5. LA EVIDENCIA FÍSICA Y SU RELACIÓN CON EL SITIO DE RELACIÓN
CRIMINAL.

Como bien se sabe, las evidencias físicas están representadas por un conjunto de
medios, objetos, cosas y efectos materiales que se desprenden de la perpetración
de un hecho punible de acción pública, las cuales se deben someter
necesariamente a estudios experimentales cuyos resultados se deben encaminar a:
esclarecer el hecho, descubrir la verdad y a identificar e individualizar al autor y al
medio empleado para la comisión del hecho. La evidencia física por si sola no es
prueba, es tan solo un elemento que imperativamente se debe procesar; es por
esto que ningún objeto involucrado en el hecho se debe subestimar por muy
insignificante que parezca. En la etapa de investigación penal, se deben tomar en
consideración los principios o criterios criminalísticos, tales como: de
correspondencia, de trasferencia o intercambio de sustancia, de la secuencia lógica
concordante y congruente, y otros criterios que permitan relacionar una evidencia
física con el sitio de relación criminal.

6. EVIDENCIAS FÍSICAS LOCALIZADAS CON MAYOR FRECUENCIA

SEGÚN LA NATURALEZA DE LOS DELITOS.

La localización de las evidencias dependerá de las características o naturaleza del

hecho y del sitio de relación criminal, algunas de ellas encontradas con mayor
frecuencia son las siguientes:

 Impresiones dactilares, latentes, positivas y negativas.

 Manchas de sangre.
 Huellas de pisadas humanas, calzadas, descalzas, positivas, negativas e
invisibles.
 Huellas de pisadas de animales, positivas, negativas e invisibles.
 Huellas de neumáticos, por aceleración, rodada y frenado o desplazamiento,
pueden ser positivas o negativas.
 Huellas de herramientas, principalmente en robos, en puertas, ventanas,
cajones de escritorios, cajas fuertes, chapas, cerraduras, picaportes, etc
 Otro tipo de fracturas, en autos por colisiones, volcaduras o arrollamientos,
también en objetos diversos por impactos o contusiones.
 Huellas de rasgaduras en ropas; pueden indicar defensa, forcejeo o lucha.
 Huellas de labios pintados sobre papel klennex, ropas, tazas, cigarrillos,
papel, etc.
 Huellas de dientes y uñas, conocidas como mordidas o estigmas ungueales
respectivamente, en luchas, riñas o delitos sexuales.
 Etiquetas de lavandería y sastrería en ropas, son de utilidad para identificar
su procedencia y probablemente la identidad de desconocidos.
 Marcas de escritura sobre las hojas de papel subyacente a la escrita,
recados póstumos o anónimos, amenazas escritas o denuncias.
 Armas de fuego, armas blancas, proyectiles, casquillos, huellas de impactos,
orificio por proyectil, rastros de sangre, manchas de sustancias, etc.
 Apéndices pilosos humanos o de animal, o sintéticos, fibras de tela,
fragmentos de ropas, polvos diversos, cenizas, cosméticos.
 Orificios en ropas y piel humana, huellas de quemaduras por flamazos o
fogonazos, tatuajes o quemaduras de pólvora por deflagraciones, huellas de
ahumamientos, esquirlas, etc.
 Instrumentos punzantes, cortantes, contundentes, punzó-cortantes. punzó-
contundentes, corto contundentes, etc., en hecho consumados con arma
blanca.
 Huellas de cemento para pegar suela u objetos diversos (inhalantes
volátiles), manchas de pintura, grasa, aceite, costras de pintura, manchas
de diésel, huellas de arrastramiento, huellas de impactos, acumulaciones de
tierra, fragmentos de accesorios, residuos de marihuana, tóxicos,
sedimentos medicamentosos» maculaciones diversas, etc.
  Polvos metálicos, limaduras, aserrines, cal, yeso, cemento, arena, lodo,
tierra, etc.

7. TRATAMIENTO CRIMINALÍSTICO DEL SITIO DE RELACIÓN

CRIMINAL Y SU IMPORTANCIA

En la investigación de un hecho punible, el sitio de relación Criminal reviste, como

se dijo antes, de una gran importancia, esto debido a que es allí donde se
encuentran las evidencias que mediante su análisis nos van a permitir llegar hasta
el o los autores del hecho. Esto es fundamental en la investigación criminalística,
puesto que la falta de cumplimiento a cabalidad de esta etapa, puede facilitar la
impunidad de un hecho delictuoso.

Esta idea ya es acuñada por Hans Gross, en su Manual del Juez de Instrucción
publicado en 1893 en Austria. Si queremos reconstruir, con cierta seguridad, un
hecho delictuoso o identificar al infractor, es necesario, en primer lugar, preservar
y conservar el lugar de los hechos. El proteger y conservar el lugar de los hechos,
permite que el escenario del posible delito permanezca tal cual lo dejó el infractor,
a fin de que toda la evidencia física conserve su situación, posición y estado
original.

Aún cuando algunos investigadores señalan que no siempre hay indicios en el

lugar de los hechos, es preciso recordar, para desmentir esta aseveración, el
"Principio del Intercambio” de Locard, distinguido investigador francés, el que
señala:

“Al cometerse un delito, siempre hay un intercambio de evidencia entre el lugar y

el actor”.
Por lo tanto, cuando un investigador dice que no encontró indicios, no es porque
no existan, sino porque no se han sabido buscar. En nuestro país esta función la
cumple, como ya se dijo, el órgano de investigaciones por excelencia como es el
Cuerpo de Investigaciones científicas, penales y criminalísticas, pero debido a la
presencia de policías preventivas, las cuales poseen un número mayor de
funcionarios, pero no están preparadas para cumplir con la función de protección
del sitio del suceso, en muchos casos contaminan y hasta modifican los sitios de
relación criminal, ocasionando daños irreversibles a las evidencias sin que existe
correctivos para ello.

De allí que, el estudio y análisis criminalístico del sitio de relación criminal es una
actividad probatoria de sustancial importancia para la investigación penal y por
ende para la investigación criminal, como se ha dicho a lo largo del presente
trabajo. De allí que, se pueden señalar algunos pasos fundamentales que
preliminarmente pueden seguir los investigadores, expertos o peritos, que
ayudaran a preservar el sitio y a soslayar su modificación involuntaria:

 Proteger, resguardar, asegurar el lugar y la escena del crimen.

 Acordonar el área dependiendo de la magnitud del hecho.
 Asegurar los objetos, activos y pasivos involucrados en el hecho.
 Identificar y asegurar a las personas relacionadas con el hecho.
 Realizar la inspección del sitio de relación criminal.
 Impedir el acceso y exceso de funcionarios policiales.
 Efectuar los descartes pertinentes.

Criminalisticamente hablando, luego de proteger el lugar, se debe:

 Identificar el sitio de relación criminal para clasificarlo y planificar el

abordaje del sitio a través del método más conveniente, según sea el caso.
A saber: Barrido visual, Abanico concéntrico, zig-zag, mixto, peinado de
terreno.
  El reconocimiento del sitio debe ser planificado y coordinados por los
funcionarios competentes, a fin de encontrar las evidencias físicas o testigos
del delito. Por lo tanto, en la planificación del reconocimiento se debe
determinar objetivos que se van a buscar, tomar nota de las pruebas que
pueden ser fáciles de destruir, como huellas de zapato en el polvo, pisadas,
etc.
 Una vez que se realice el reconocimiento del sitio, se deben fijar las
evidencias (siempre en relación a puntos fijos: puertas, ventanas, columnas,
alumbrados eléctricos, etc.).dicha fijación se realiza a través de notas,
videograbadoras, fotografías (generales y específicas), levantamiento
planimétrico, etc.
 Redactar una descripción narrativa del sitio del suceso, lo que en la práctica
se corresponde con la inspección técnica, en donde se incluya: fecha, hora y
lugar del reconocimiento; condiciones del tiempo y nivel de luz, identidad de
los demás participantes en el reconocimiento, tareas asignadas al personal,
condición y posición de las evidencias encontradas.
 Finalmente se procede a colectar, embalar, rotular las evidencias físicas
encontradas en el sitio de relación criminal para su posterior remisión al
laboratorio correspondiente, cuidando claro está, la cadena de custodia.

Son precisamente los métodos y técnicas especiales utilizados por la criminalística

en el sitio de relación criminal lo que en definitiva proporcionará la prueba
determinante de la demostración del hecho punible y los elementos de convicción
de la perpetración del hecho, lo que en definitiva servirán para fundamentar la
acusación y defensa del imputado, y lo que considerará el juez al momento de
decidir, bien para absolver o condenar al acusado. De allí la importancia y valor
incalculable de dar el tratamiento criminalístico adecuado al sitio de relación
criminal.
8. PASOS METODOLÓGICOS.

Este punto se encuentra relacionado con el tratamiento criminalístico del sitio de

relación criminal, toda vez, que el tratamiento criminalístico implica seguir métodos
y técnicas, que podrían variar dependiendo de la naturaleza del hecho, las
condiciones del lugar y las evidencias que se encuentren en el mismo.
Obviamente, se debe contar con el equipo e implementos necesarios para
desarrollar la metodología de la investigación criminalística en el sitio de relación
criminal, los llamados kits o estuches básico debe contener: equipo para reactivar
huellas latentes, material químico, equipo para la toma de impresiones dactilares,
recipientes y utensilios para colectar y embalar evidencias, material para etiquetar
o identificar evidencias. En la práctica se observa la falta o carencia de dichos
equipos o implementos básicos por parte del órgano de investigación penal
(CICPC). Los pasos metodológicos se refieren a la protección, observación, fijación,
colección, embalaje, etiquetaje, traslado al laboratorio y cadena de custodia, que
se explanaran a continuación.

8.1. PROTECCIÓN O PRESERVACIÓN.

Como ya se dijo, para poder determinar lo que ha sucedido en el sitio de relación

criminal y poder reconstruir el hecho, se hace imprescindible estudiar y evaluar el
sitio, así como las evidencias halladas en el mismo, lo cual se hace materialmente
imposible cuando la escena del crimen no ha sido protegida y conservada
adecuadamente. Para proteger y preservar correctamente el lugar, se hace
necesario que la primera comisión policial que arribe al lugar, cuide que nadie
toque, mueva, tome o camine en la escena. Una vez protegido y conservado el
lugar, se debe aguardar a los funcionarios competentes, en este caso, C.I.C.P.C,
quienes realizaran un reconocimiento inicial.
8.2. OBSERVACIÓN.

La observación consiste en el examen completo, metódico y meticuloso del lugar,

con el fin de encontrar todos los indicios y evidencias posibles para determinar su
relación con el hecho. Para que la observación tenga éxito se debe considerar:
programar las actividades a llevarse a cabo en el lugar, especificar funciones y
responsabilidades del personal, el plan de trabajo dependerá de las características
generales del lugar, actuar con ética y profesionalismo, no subestimar ninguna
evidencia, establecer métodos de observación (por zonas, cuadrantes, zig-zag,
mixto, etc.).

8.3. FIJACIÓN.

Se refiere al aseguramiento de todos los indicios o evidencias físicas halladas en el

sitio de relación criminal, con el objeto de contar con un registro que pueda ser
utilizado en cualquier momento e incluso que el mismo forme parte de la
investigación previa. Antes de que un objeto, sustancia o material sea tocado,
debe ser fijado con exactitud en el área de la escena a través de apropiadas
mediciones y secuencias fotográficas. Se debe recordar que un objeto que haya
sido movido de su sitio, no podrá ser colocado de nuevo en posición
absolutamente original. De allí que existan varias maneras de realizar dicha
fijación:

 Fijación fotográfica: La fotografía es importante en la investigación, ya que,

se cuenta con un registro exacto y permanente del sitio de relación criminal.
Por tanto, se deben tomar lo más pronto posible (el mismo día de la
inspección técnica) y se deben fijar aspectos generales y específicos o
detallados de todo lo que se considere pertinente.
 Fijación escrita: Descripción de cada uno de los detalles que se encuentran
en el sitio del hecho, mediante una narración escrita. Este reporte debe
contener una descripción de lo general a lo especifico de manera objetiva y
precisa, conteniendo la ubicación del hecho, en tiempo y lugar,
 identificación de la víctima, testigos, bienes afectados, posición y
orientación del cadáver, si fuere el caso, etc. Esta fijación escrita en
Venezuela está representada por la inspección técnica al sitio del suceso, la
cual, puede ir acompañada de la fijación fotográfica, como parte integrante
de dicha inspección.
 Fijación planimétrica (Levantamiento planimétrico): Que pronto será
sustituido por la infografía y por los planos tridimensionales, constituye un
medio de apoyo complementario de la inspección técnica u ocular
practicada en el sitio de relación criminal o de cualquier otro procedimiento
donde sea requerida esta actividad de sustento probatorio. Esta fijación
comprende la representación del lugar del hecho mediante un diagrama
para establecer un registro permanente de los objetos, condiciones,
relaciones de distancia y tamaño, etc. Se lleva a cabo mediante un croquis
donde se muestre la ubicación de todos los aspectos importantes del sitio
de relación criminal.
 Fijación mediante moldeo: Se utiliza para obtener la reproducción en tres
dimensiones de las huellas de pisadas de vehículos u otros, con el propósito
de tener una réplica de indicios que pueden ser destruidos por las
condiciones ambientales, o para una posterior comparación con los objetos
sospechosos. Este método es poco o nunca usado en Venezuela.

8.4 COLECCIÓN.

La razón por la cual se proscribe tocar o mover cualquier objeto en el sitio del
suceso, o caminar por el área en estudio, es obvia si se consideran los cambios
que podrían ocurrir, principalmente los relacionados con fenómenos de
contaminación, deterioro, destrucción o alteraciones de las características o rasgos
distintivos en los elementos de la escena. Por la misma razón, cuando surge el
momento de proceder con la colección de las evidencias físicas, el manejo de las
mismas se debe realizar con la precaución de evitar tan lamentables
consecuencias. Ahora bien, con la finalidad de asegurar la obtención de resultados
concluyentes en los análisis, toda muestra representativa debe ser colectada. En el
manejo de las evidencias físicas se debe tomar en consideración lo siguiente:

 Todo instrumento o medio utilizado para colectar una evidencia, debe ser
lavado meticulosamente antes y después de su uso. Ello por cuanto muchas
sustancias tienen la propiedad de adherirse con firmeza a la superficie de
tales instrumentos, originando la contaminación del material a ser
estudiado.
 Se debe cuidar en no añadir materiales que pueden proceder de la ropa o
cuerpo del pesquisa o funcionario que colecta la evidencia, tales como
fibras, pelos, sudor, huellas dactilares, etc.
 Como regla general, se deben colectar todos los materiales que tienen o
podrían tener alguna relación con el caso que se investiga.
 Los objetos muy pequeños deben ser siempre colectados mediante el uso
de pinzas. En tal sentido se evitará la fractura del material, pérdida o
cualquier alteración capaz de originar deterioro.
 Al manipular objetos grandes y pesados, se deben tomar las debidas
precauciones con respecto a las áreas de significación para la pesquisa.
 Especial atención se ha de tener con aquellas superficies en las cuales se
sospecha la presencia de huellas dactilares latentes.

Con ciertas excepciones, las evidencias físicas se deben colectar mediante la

práctica de una ordenada secuencia, de un procedimiento metodizado, en atención
a la naturaleza y al tamaño del objeto, así como al tipo y cantidad de material.
Asimismo, cada objeto o material debe ser procesado de manera integral antes de
ser atendido el siguiente hallazgo. Las evidencias físicas se deben colectar de
acuerdo al siguiente orden:

1. Los primeros objetos a colectarse son aquellos cuerpos grandes y móviles.

(armas de fuego, conchas, proyectiles, documentos, fragmentos de vidrio, etc.).
2. En segundo lugar, se deben colectar los materiales menos visibles (fibras,
pelos, trazas de sustancias, limaduras, etc.).

3. En tercer lugar, se deben colectar aquellos materiales que requieren un

tratamiento especial, los cuales se hallan generalmente en superficies
intransportables, y cuya obtención exige la práctica de un determinado
procedimiento (diferentes tipos de manchas, la colección en bloque de un proyectil
alojado, etc.).

4. Finalmente, se debe proceder con la activación y desprendimiento de las

huellas dactilares latentes.

No obstante, dependerá de cada caso en particular la alteración o modificación del

orden antes descrito en la colección de evidencias.

Por otra parte, es dable destacar que, la experiencia ha demostrado que la causa
más frecuente que impide la práctica de exámenes completos y meticulosos, es el
manejo inadecuado de las evidencias físicas halladas en el sitio de relación
criminal. Por consiguiente se hace imperativo que todo pesquisa responsable de
esta fase de la investigación criminal, ejercite un extremo cuidado en el manejo de
los hallazgos, cualquier omisión o ligereza podrá entorpecer el esclarecimiento de
la verdad. Algunos factores que influyen en los análisis y conclusiones finales son:
Materiales insuficientes, materiales inadecuados, materiales contaminados,
materiales deteriorados, materiales destruidos, materiales no especificados.

8.5. EMBALAJE.

Se debe tener presente lo siguiente:

 Cada objeto o material se debe manejar con cuidado y debe ser embalado
en forma individual. Nunca las evidencias se deben mezclar entre si. No se
deben unir o poner en contacto las superficies que serán sometidas a
estudio, las mismas se deben proteger por separado.
  En todo caso, el envase o receptáculo utilizado para un embalaje, no debe
estar contaminado con sustancias o materiales extraños.
 El envase debe ser del tamaño apropiado.

8.6. ETIQUETAJE.

Este punto se refiere a que todo envase, caja o recipiente que contenga una
evidencia física, se debe etiquetar en un sitio conveniente de su superficie exterior
visible. Dichas etiquetas deben incluir información (Número de investigación,
contenido, cadena de custodia, etc.) que contribuyan a identificar el objeto o
material.

8.7. TRASLADO AL LABORATORIO.

Una vez que la evidencia ha sido marcada, preservada, embalada y etiquetada, se

traslada al laboratorio. Los cuidados referentes al transporte de las evidencias,
están relacionados con la protección a la contaminación, deterioro o pérdida. Esto
es, el traslado al laboratorio, tribunal u otra oficina competente, por ej. La
Dirección Técnico-Científica del Ministerio Público, se debe practicar de tal forma
que se garantice la inalterabilidad de su statu quo y cuidando la cadena de
custodia de la cual se hablará de seguida.

8.8. CADENA DE CUSTODIA.

La cadena de custodia la constituye la práctica de una serie de pasos,

movimientos, procedimientos, tratamientos, vigilancias y controles, concatenados y
relacionados entre si, que garantiza la autenticidad de la prueba, desde que la
evidencia física es recabada en el sitio de relación criminal, hasta que es exhibida
en el juicio oral y público. El objeto de la cadena de custodia es garantizar que la
evidencia física involucrada en el hecho, se mantenga inalterable tal cual como se
halló en el lugar del hecho. En aquellos casos, donde la evidencia física para ser
recabada in situ, o procesada experimentalmente en los laboratorios, deba sufrir
alguna modificación o manipulación en el área del hallazgo, se debe dejar
constancia expresa de ello en el acta de investigación, inspección y en la experticia
correspondiente.

Para garantizar el cabal desenvolvimiento de la investigación penal se deben

aplicar adecuada y correctamente los procedimientos metodológicos necesarios
para constatar la existencia de la debida aplicación de la cadena de custodia, así
como vigilar y controlar las evidencias físicas durante su recorrido en las distintas
fases del proceso.

El fundamento legal de la cadena de custodia se encuentra en el artículo 202 del

C.O.P.P y en el artículo 26 de la Ley de los Órganos de Investigaciones científicas,
Penales y criminalísticas.

8.9. SOLICITUD EXPERIMENTAL.

Toda solicitud de análisis de una evidencia física debe ir acompañada del

memorando correspondiente, en el cual se identificará la autoridad que lo solicita,
la naturaleza del delito, se especificará la prueba técnica requerida y lo que se
busca con la misma, el número de investigación con la que la misma se encuentra
relacionada, además debe ir acompañada de su respectiva cadena de custodia.
 CONCLUSIONES

1. El estudio de las evidencias físicas suministra las bases científicas para

encaminar con buenos principios toda investigación, y obtener fundamentalmente
la identificación e individualización del o los autores, las pruebas de la comisión del
hecho y la reconstrucción del mecanismo del hecho. Del adecuado, cuidadoso y
minucioso manejo de las evidencias físicas halladas en el sitio de relación criminal,
dependerá el éxito de la investigación penal, criminal y criminalística.

2. La protección, preservación y aseguramiento del sitio del suceso por parte de

los órganos de investigación penal, reviste de vital importancia, toda vez que el
mismo constituye prueba fehaciente de la perpetración del hecho punible, y
porque representa la fuente principal proveedora de pruebas. De allí, se desprende
la relevancia de la presencia del representante fiscal, como director de la
investigación penal, en el sitio de relación criminal, pues ello garantizaría la licitud,
legalidad y libertad de las evidencias físicas localizadas en la escena del crimen.
 BIBLIOGRAFIA CONSULTADA

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Venezuela, 38.536 (Extraordinaria), Octubre 04 de 2006.

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