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SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0399/2018-S1

Sucre, 13 de agosto de 2018

SALA PRIMERA
Magistrada Relatora: MSc. Karem Lorena Gallardo Sejas
Acción de libertad

Expediente: 23362-2018-47-AL
Departamento: Santa Cruz

En revisión la Resolución 05/2018 de 23 de marzo, cursante de fs. 35 a 37 vta.,


pronunciada dentro de la acción de libertad interpuesta por José Franz Avilés
Corcuy en representación sin mandato de Aida Martínez Molina contra Carlos
Martín Camacho Chávez, Juez de Instrucción Penal y Anticorrupción
Tercero; y, Ángel Burgoa, Jefe Policial de San Julián, ambos del
departamento de Santa Cruz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Mediante memorial presentado el 21 de marzo de 2018, cursante de fs. 2 a 5 vta.,


la accionante, por intermedio de su representante, manifiesta lo siguiente:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

En la gestión 2016, los representantes de la empresa “CIAGRO S.R.L.”


presentaron denuncia contra su persona por la presunta comisión del delito de
estafa, proceso con el cual jamás fue notificada; sin embargo, en el mes de
noviembre -no refiere de que gestión-, el Juez de Instrucción Penal y
Anticorrupción Tercero de Santa Cruz -hoy demandado- emitió una resolución
declarándola rebelde y contumaz, disponiendo la emisión del mandamiento de
arraigo y de aprehensión en su contra, sin proceder a la publicación de edictos
para notificarla con dicha declaratoria de rebeldía; pese a ello, en cumplimiento de
la indicada resolución de rebeldía, el 2 de febrero de 2018 la mencionada
autoridad judicial expidió mandamiento de aprehensión en su contra, siendo
entregado a la abogada de la aludida empresa “CIAGRO S.R.L.”, mismo que fue
ejecutado el 20 de marzo del citado año, cuando se encontraba en las oficinas de
la Policía de San Julián, bajo el argumento de que existía una orden judicial;

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empero, no le hicieron entrega de la copia pertinente, siendo conducida a celdas
policiales donde la mantuvieron detenida hasta primeras horas de la madrugada,
sin permitirle amamantar a su hijo de diez meses de edad. En horas de la
mañana, Ángel Burgoa, “Jefe” Policial de San Julián, le impidió alimentar al
referido menor señalando que él y otro infante de un año y diez meses debían ser
entregados a sus familiares o caso contrario los remitiría a la Defensoría de la
Niñez y Adolescencia.

El 21 de marzo de 2018, a horas 8:30 fue trasladada a la carceleta de la Estación


Policial Integral 8 “Zona Norte – Los Tusequis”; y, a horas 9:30 fue conducida
ante el Juez ahora demandado, quien a pesar de tener conocimiento que se
encontraba detenida, celebró dos audiencias previas, entre ellas, una de
resolución de incidentes donde no había personas privadas de libertad.

Instalada la audiencia de aplicación de medidas cautelares, el Fiscal de Materia indicó


que no tenía elementos para fundamentar su solicitud, y estaba a la espera de que le
remitan los antecedentes de otro proceso para demostrar que el esposo de la
accionante se encontraba con detención preventiva por otra deuda, elemento que
demostraría un riesgo procesal para justificar la aplicación de la detención
preventiva; corrido en traslado, a través de su abogado defensor expresó su
oposición a tal petición por encontrarse fuera de norma por la prolongación de
tiempo que implicaría; en todo caso, se resuelva previamente sus incidentes de
aprehensión ilegal y sobre la incompetencia de dicho Juez demandado en razón
de materia y territorio; en ese merito, la autoridad referida, dispuso la suspensión
de la audiencia, fundamentando que era medio día y hora de almuerzo, a objeto de
que el Fiscal de Materia pueda conseguir los documentos que necesitaba para fundar
su imputación y la solicitud de aplicación de medida cautelar, disponiendo que entre
tanto permanezca en la carceleta del mismo edificio judicial, determinación contra la
cual interpuso recurso de reposición sin que la misma sea resuelta dándose por
concluida la audiencia.

Asimismo señala que, la privación de su libertad fue ilegal y arbitraria, al


ejecutarse un mandamiento “…emitido 4 meses atrás…” (sic), sin que fuera
diligenciada a través del juzgado de San Julián; puesto que, cuando se ejecuta un
mandamiento de aprehensión en otro asiento judicial distinto al de su emisión,
debe realizarse mediante comisiones instruidas y por el “Tribunal” en ejercicio de
sus funciones, aspectos que no acontecieron en el presente caso; además, la
privación de libertad se convierte en un objetivo por sí mismo y no se encuentra
ligada al cumplimiento de una obligación.

I.1.2. Derechos y principio supuestamente vulnerados

La accionante, a través de su representante sin mandato, alega la lesión de sus


derechos a la libertad, a la defensa, al debido proceso y al principio de legalidad,
citando al efecto los arts. 115, 116.I y II, 117.I, 119, 121, 180 de la Constitución
Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

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Solicita se conceda la tutela, y se declare nula e ilegal su aprehensión y todos los
actos que se hayan realizado basados o fundados en actos vulneradores de sus
derechos, disponiendo su libertad inmediata.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 23 de marzo de 2018, según consta en el acta


cursante de fs. 32 a 34 vta., se produjeron los siguientes actuados:
I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

La accionante, por intermedio de su abogado, ratificó su demanda y ampliándola


manifestó que: a) El mandamiento de aprehensión ejecutado, se libró por una
autoridad incompetente puesto que, de acuerdo con los antecedentes, el caso se
trata del cobro de una deuda por parte de una empresa que presentó denuncia por
la presunta comisión del delito de estafa contra Ángel Pinto Aceituno y su persona,
razón por la cual en audiencia se planteó excepción “en razón de materia” y de falta
de acción, siendo resuelta el 18 de octubre de 2016 por la autoridad ahora
demandada, dictando Resolución de declinatoria de competencia disponiendo la
remisión del expediente a conocimiento del Juez Civil y Comercial llamado por ley, así
como el archivo de obrados; es decir, el Juez ahora demandado reconoció que se
trata del cobro de adeudos que no corresponde al ámbito penal, fallo que no fue
apelado y adquirió ejecutoria, empero, fue reactivado sin que el Ministerio Público
considere esta situación; b) Los hechos, el préstamo, el lugar de ejecución del
crédito y dónde se pagaría la deuda es en la localidad San Julián, que tiene su
asiento judicial y Juez de instrucción penal según prevé el art. 49 del Código de
Procedimiento Penal (CPP), por lo que en el caso existe incompetencia incluso en
razón de territorio; c) El mandamiento de aprehensión fue emitido a raíz de una
declaratoria de rebeldía sin que la parte civil o el Ministerio Público la ejecuten
hasta el 2 de febrero de 2018; d) Los actos realizados en otros distritos deben
respetar la jurisdicción y competencia del lugar donde se van ejecutar, toda vez
que la Policía y la Fiscalía están asignados a un ámbito territorial, debiendo
solicitar cooperación directa diligenciando órdenes instruidas; e) El mandamiento
de aprehensión no fue entregado al Ministerio Público ni al Policía encargado de la
investigación, sino a la parte civil para que lo ejecute donde y cuando quiera, más
aún debe tenerse presente que el mismo fue librado en la ciudad de Santa Cruz
de la Sierra; f) La audiencia de aplicación de medida cautelar se instaló cerca las
doce del mediodía, donde intentó interponer el incidente sobre ilegalidad de la
aprehensión porque no se le entregó una copia del mandamiento de aprehensión,
misma que debió ser resuelta de acuerdo con lo establecido por la “S.C. 957/2003”;
empero, el Juez demandado impidió que lo haga cediendo la palabra al Fiscal, quien
señaló haber solicitado un expediente de otro proceso seguido contra su esposo
por la misma empresa a efecto de acreditar riesgos procesales, impetrando la
suspensión de la audiencia, a lo cual se opuso la defensa solicitando se rechace y
se pronuncie sobre el incidente, pero la autoridad demandada pospuso dicha
actuación para del mismo día a horas 15:00, ínterin en el cual se planteó la
presente acción de defensa; g) Cuando se reinstaló la audiencia se volvió a

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plantear el incidente de ilegalidad de la aprehensión y las excepciones de
incompetencia en razón de territorio y materia, y la inexistencia de legitimación
activa, señalando la autoridad jurisdiccional que “…no hay legitimación activa…”
(sic) y declarando improcedentes los incidentes planteados, otorgando la palabra
a la Fiscal de Materia, quien presentó el cuaderno de investigaciones del proceso
de su esposo, que no guarda relación con el caso; h) Las medidas sustitutivas
otorgadas resultan excesivas en razón a que debía trasladarse a la ciudad de
Santa Cruz de la Sierra a firmar semanalmente, considerando que tiene dos hijos
pequeños, “…la única concesión que se hizo es que firmara en San Julián…” (sic);
y, i) Se encuentra ilegalmente perseguida y procesada por un Juez que declinó
competencia, por lo que el mandamiento de aprehensión es nulo.

I.2.2. Informe de la autoridad y funcionario policial demandados

Carlos Martín Camacho Chávez, Juez de Instrucción Penal y Anticorrupción Tercero


de Santa Cruz, por informe cursante a fs. 17 y vta., solicitó se deniegue la tutela,
señalando que: 1) La audiencia pública fijada para el 21 de marzo de 2018, no se
instaló debido a que existían dos audiencias señaladas con anterioridad y con
aprehendido; asimismo, el Ministerio Público informó que no contaba con el
cuadernillo de investigación para poder fundamentar su imputación,
reprogramándose dicha actuación para el mismo día a horas 15:00, llevándose a
cabo y concluyendo a horas 19:20; y, 2) Cursa en obrados la notificación practicada
a la ahora accionante la cual se realizó mediante edictos de prensa y, al no
presentarse dentro del tiempo hábil señalado por ley, se la declaró rebelde, por Auto
425/2017 de 30 de noviembre, librándose el correspondiente mandamiento de
aprehensión, por ello no se vulneró ni violentó derechos ni garantías.

Deibi Cruz, Secretario de la Estación Policial Integral 8 “Zona Norte – Los Tusequis”
del departamento de Santa Cruz, presentó informe de 22 de marzo de 2018,
cursante a fs. 9, señalando que realizadas las indagaciones y preguntas a los
encargados de las distintas oficinas especializadas del Comando Departamental de
la Policía, no se encontró a la mencionada accionante ni registro de aprehensión,
arresto y mucho menos cumpliendo permanencia en recinto policial.

Ángel Burgoa, Jefe Policial de San Julián del departamento de Santa Cruz, no
presentó informe escrito ni se hizo presente en audiencia, pese a su citación cursante
a fs. 18.

I.2.3. Resolución

El Tribunal de Sentencia Penal Decimosegundo de Santa Cruz, constituido en


Tribunal de garantías, mediante Resolución 05/2018 de 23 de marzo, cursante
de fs. 35 a 37 vta., concedió la tutela solicitada, disponiendo: i) Llamar
severamente la atención al Juez demandado; toda vez que, su proceder no se
adecúa conforme a derecho, siendo lo actuado nulo, ii) La nulidad de todo lo obrado
a partir de la ejecutoria del Auto de 18 de octubre de 2016; iii) La libertad
irrestricta de la accionante y se levanten todas las medidas cautelares dictadas

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en su contra; iv) Pase a conocimiento “…a la disciplina de la Policía Nacional…”
(sic), las violaciones y vulneraciones de las que fue objeto la accionante, como
también se remita antecedentes al Ministerio Público, en razón a que Ángel Burgoa
puso en peligro la vida de un recién nacido; y, v) En ejecución de sentencia se
califiquen las costas y costos del proceso constitucional, determinación asumida bajo
los siguientes fundamentos: a) De la revisión del cuaderno procesal remitido por
el Juez demandado, se tiene que el 18 de octubre de 2016, dictó Auto
interlocutorio definitivo declarando probada las excepciones de incompetencia en
razón de materia y falta de acción; y, deliberando en el fondo dispuso la remisión del
expediente a conocimiento del Juez Civil y Comercial llamado por ley, Auto que fue
notificado a las partes el 2016, mismo que no mereció recurso de apelación alguno,
por lo que adquirió calidad de cosa juzgada; b) Los actos jurídicos realizados a partir
de la ejecutoria del aludido Auto, son nulos de pleno derecho, siendo que no se
puede concebir en un Estado democrático y de derecho que la autoridad
jurisdiccional demandada cometa semejantes actos aberrantes que van en contra del
mismo ordenamiento jurídico y vulneran los derechos fundamentales de las
personas, además del principio de seguridad jurídica; c) Respecto a las vulneraciones
cometidas por los agentes policiales, no es posible que en uso del ius puniendi, el
Ministerio Público con apoyo policial se preste para ejercer algún tipo de coerción
o extorción a los ciudadanos, más aun, cuando el Auto referido era de su
conocimiento, conforme el principio de unidad, buscar que el Juez actúe de
manera equivocada es inducir en error a la autoridad jurisdiccional, asimismo, en
la ejecución del mandamiento de aprehensión se vulneraron derechos
fundamentales de la impetrante de tutela; d) El Código de las Familias y el
Proceso Familiar y la Constitución Política del Estado, establecen la primacía del
interés superior del niño, niña o adolescente y su pleno ejercicio, al no haber
permitido que el menor de edad se alimente con el seno materno no sólo vulneran
los derechos de la peticionante de tutela, sino que flagrantemente se lesionaron
los derechos a la vida y a la salud de ese recién nacido; y, e) El Juez demandado
de manera aberrante y sin garantizar los derechos fundamentales de la
accionante, aceptó el requerimiento fiscal y suspendió una audiencia de medida
cautelar sin que exista causal para ello, peor aún conoce la causa penal a pesar
de haber declinado competencia por Auto de 18 de octubre de 2016, pasando por
alto su propia resolución y mediante un nuevo Auto declaró infundadas las
excepciones presentadas por la impetrante de tutela dictando más bien la
aplicación de medidas cautelares en su contra.

I.3. Trámite procesal en el Tribunal Constitucional Plurinacional

Al no haber obtenido consenso en Sala, de conformidad al art. 30.I.6 de la Ley del


Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP), se procedió a convocar al Presidente de
este Tribunal a fin de dirimir con su voto el caso en análisis.

II. CONCLUSIONES

De la revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se


establece lo siguiente:

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II.1. Del informe presentado por el Juez de Instrucción Penal y Anticorrupción
Tercero de Santa Cruz, se tiene que la audiencia de aplicación de medidas
cautelares señalada para el 21 de marzo de 2018 en horas de la mañana, no
fue instalada en razón a que existían dos audiencias fijadas con anterioridad,
una de ellas con aprehendido; asimismo, el Ministerio Público le informó la
aprehensión de Aida Martínez Molina -ahora accionante- así como el hecho de
que no tenía en su poder el cuadernillo de investigaciones para fundamentar la
imputación, momento en el cual se encontraba en el salón de audiencias con
aprehendidos de otro proceso, reprogramando dicha audiencia para el mismo
día a horas 15:00. Por otro lado, también refiere que la notificación a la
imputada se la realizó por edictos de prensa “…y al no presentarse dentro del
tiempo hábil señalado por ley, y al no presentarse a la audiencia de medidas
cautelares se la declaró rebelde mediante Auto Nro. 425/2017 de fecha 30 de
noviembre…” (sic), librándose el correspondiente mandamiento de
aprehensión (fs. 17).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

La accionante, a través de su representante sin mandato, denuncia lesión de sus


derechos a la libertad, a la defensa, al debido proceso y al principio de legalidad; toda
vez que: 1) El Juez demandado: i) Emitió un mandamiento de aprehensión sin tener
competencia, en razón a que por Auto de 18 de octubre de 2016, declaró probadas las
excepciones de incompetencia y falta de acción interpuestas en el proceso penal
seguido por la empresa “CIAGRO S.R.L” contra su persona y su esposo, declinando
competencia al Juez Civil y Comercial llamado por ley al tratarse del cobro de una
deuda, archivando la causa penal; ii) Suspendió la audiencia de medidas
cautelares, en contra de la norma, a solicitud el Ministerio Público, determinación
contra la cual interpuso recurso de reposición que no fue resuelto; y, iii) Declaró
improcedente su incidente de aprehensión ilegal; y, 2) Por su parte el funcionario
policial demandado: a) Ejecutó el mandamiento de aprehensión en la localidad de
San Julián cuando el mismo fue emitido por una autoridad de la ciudad de Santa
Cruz de la Sierra, sin que esté diligenciado mediante comisión instruida; b) Le
impidió dar de lactar a su hijo menor de un año amenazándole con entregarlo junto
a su otro hijo de un año y diez meses a la Defensoría de la Niñez y Adolescencia si
no se los entregaba a sus familiares; y, c) No le otorgó una copia del mandamiento
de aprehensión.

En consecuencia, corresponde analizar, en revisión, si tales argumentos son


evidentes a fin de conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. De la incompetencia.- Efectos

La Ley del Órgano Judicial -Ley 025 de 24 de junio de 2010- determina la


estructura organizativa judicial atendiendo su naturaleza, estableciendo
entre otros aspectos las distintas jerarquías y atribuciones competenciales
de cada instancia jurisdiccional; en ese contexto, conforme prevé el art. 12

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de la citada Ley, competencia “Es la facultad que tiene una magistrada o
magistrado, una o un vocal, una jueza o un juez, o autoridad indígena
originaria campesina para ejercer la jurisdicción en un determinado
asunto”; es decir, delimita las funciones de dichas autoridades a objeto de
que conozcan y sustancien un determinado conflicto, ya sea por la
naturaleza en sí de las cosas o de los hechos, o de acuerdo a las personas
involucradas en el asunto a resolverse.

De acuerdo con la doctrina, existen ciertos criterios jurídicos en virtud de los


cuales se delimita el conocimiento y tramitación de un asunto específico a un
determinado órgano jurisdiccional excluyendo a los demás, recurriéndose para
ello a las normas de competencia objetiva, territorial y funcional; por la
primera, se toma en cuenta la materia sobre la que versa el proceso (penal,
civil, familiar, agroambiental, etc.), en tanto que la segunda establece que
juzgado o tribunal es competente territorialmente según la atribución
otorgada en función a las prerrogativas territoriales fijadas por las leyes
procesales; mientras que por la última, se establece cuál es la autoridad
judicial competente -según sus competencias objetivas y territoriales- para
resolver una determinada situación en un específico momento procesal, en
razón a su característica dinámica donde se evidencia la existencia de
diversas fases como las instancias primera, segunda o de recursos
extraordinarios; las cautelares o preventivas y la de ejecución.

Ahora bien, definidos los parámetros competenciales de las autoridades


judiciales, conviene efectuar algunas precisiones normativas respecto a la
incompetencia de los Jueces o Tribunales en materia penal, teniéndose que
el adjetivo penal, regulando este tópico inherente a la administración de
justicia, establece:

“Artículo 46.- (Incompetencia). La incompetencia por razón de materia será


declarada, aún de oficio, en cualquier estado del proceso. Cuando se la
declare, se remitirán las actuaciones al juez o al tribunal competente y,
cuando corresponda, se pondrán los detenidos a su disposición.

La inobservancia de las reglas de la competencia por razón de materia


producirá la nulidad de los actos.

(…)

Artículo 308.- (Excepciones). Las partes podrán oponerse a la acción penal,


mediante las siguientes excepciones de previo y especial pronunciamiento:

(…)

2) Incompetencia

(…)

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Artículo 310.- (Incompetencia). Esta excepción podrá promoverse ante el
juez o tribunal que se considere competente, o ante el juez o tribunal que
se considere incompetente y que conoce el proceso. En el último caso
deberá resolverse antes que cualquier otra excepción”.

Bajo este contexto normativo, cuando un Juez o Tribunal asume conocimiento


de una determinada causa sobre la cual carece de competencia objetiva
(razón de materia), de conformidad con lo previsto en las reglas de
procedimiento penal, de oficio o a solicitud de parte deberá declarar su
incompetencia mediante resolución motivada y fundamentada de forma
expresa, la cual una vez ejecutoriada impedirá que dicha autoridad vuelva a
conocer y pronunciarse sobre el asunto del cual se determinó su
incompetencia, con el efecto lógico del cese de conocimiento del asunto
jurídico y la remisión de antecedentes ante la autoridad llamada por ley para
la controversia, bajo sanción de nulidad -en caso de la omisión de remisión-
de los actuados ejecutados de forma posterior; toda vez que, en observancia
del principio de legalidad, las precitadas normas de competencia tiene
carácter de orden público y, por ende, no son susceptibles de modificación
ya sea por las partes o por los órganos judiciales.

III.2. Análisis del caso concreto

La accionante, por intermedio de su representante sin mandato, denuncia


lesión de sus derechos a la libertad, a la defensa, al debido proceso y al
principio de legalidad; toda vez que: 1) El Juez demandado i) Emitió
mandamiento de aprehensión sin tener competencia, en razón a que por Auto
de 18 de octubre de 2016, declaró probadas las excepciones de incompetencia
y falta de acción interpuestas en el proceso penal seguido por la empresa
“CIAGRO S.R.L” contra su persona y su esposo, declinando competencia al
Juez Civil y Comercial llamado por ley al tratarse del cobro de una deuda,
archivando la causa penal; ii) Suspendió la audiencia de aplicación de
medidas cautelares, en contra de la norma, a solicitud el Ministerio Público,
determinación contra la cual interpuso recurso de reposición que no fue
resuelto; y, iii) Declaró improcedente su incidente de aprehensión ilegal; y,
2) Por su parte el funcionario policial demandado: a) Ejecutó el
mandamiento de aprehensión en la localidad de San Julián cuando el mismo
fue emitido por una autoridad de la ciudad de Santa Cruz de la Sierra, sin
estar diligenciado mediante comisión instruida; b) Le impidió dar de lactar a
su hijo menor de un año amenazándole con entregarlo junto a su otro hijo de
un año y diez meses a la Defensoría de la Niñez y Adolescencia, si no los
entregada a sus familiares; y, c) No le otorgó una copia del mandamiento de
aprehensión.

III.2.1. Sobre las actuaciones del Juez demandado

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Si bien, en esta acción de defensa no se cuenta con los
antecedentes del caso, se tendrá presente lo referido por el Tribunal
de garantías ante cuyo colegiado se presentó el cuaderno de control
jurisdiccional conforme se tuvo dispuesto por Auto de admisión de
21 de marzo de 2018 (fs. 6). En tal contexto se tiene que, dentro del
proceso penal seguido por el Ministerio Público a denuncia de la
empresa “CIAGRO S.R.L.” contra la hoy accionante y otro, el 18 de
octubre de 2016 la autoridad jurisdiccional emitió el Auto
interlocutorio definitivo por el cual declaró probadas las excepciones
de incompetencia en razón de materia y falta de acción disponiendo
la remisión del expediente a conocimiento del Juez en materia Civil y
Comercial llamado por ley; Resolución que, previa notificación de las
partes involucradas en el proceso penal, no fue objeto de
impugnación por alguna de ellas, adquiriendo ejecutoria,
antecedente procesal que fue examinado y considerado por el
Tribunal de garantías y sirvió de sustento a la decisión adoptada en
la Resolución venida en revisión.

De lo referido ut supra, se tiene que la defensa de la accionante, con


anterioridad al motivo que hoy nos ocupa, en la gestión 2016
interpuso una excepción de incompetencia en razón de materia
que fue resuelta expresamente por el Juez de Instrucción Penal
Primero de Santa Cruz, quien en observancia de sus facultades
para conocer el asunto llevado a su conocimiento, mediante
Resolución de 18 de octubre del citado año, determinó declararse
incompetente en virtud a que consideró que el litigio devenía de
una cuestión civil, disponiendo además la remisión del expediente a
la mencionada vía a objeto de que en la misma se resuelva el
asunto, entendiéndose que la jurisdicción penal y, en especial la
nombrada autoridad, ya no tenía competencia para resolver o
pronunciarse sobre cualquier otro motivo dentro de la causa
considerada de orden civil.

En ese orden, el 21 de marzo de 2018, en horas de la mañana


cuando debía llevarse a cabo la audiencia de aplicación de medidas
cautelares, la accionante puso en conocimiento del Juez demandado,
la aprehensión ilegal que hoy denuncia a través de la presente
acción de defensa y las incidencias sobrevinientes de la emisión del
mandamiento de aprehensión emergente de la falta de competencia
alegada; aspectos que no fueron considerados por la mencionada
autoridad -según sostiene la prenombrada- toda vez que difirió la
realización de la audiencia para horas de la tarde; decisión contra la
cual habría interpuesto recurso de reposición que no hubiese
merecido respuesta alguna; siendo dicha suspensión también ahora
cuestionada, pese a que debió resolver el incidente de aprehensión
ilegal y los demás incidentes sobre incompetencia, procediendo a
instalar el acto por la tarde, actuado en el cual se hubiera insistido

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en el planteamiento del incidente de ilegalidad de la aprehensión
reiterando la incompetencia antes mencionada y otros incidentes
como la falta de entrega de una copia del mandamiento de
aprehensión y que la misma se ejecutó en la localidad de San Julián
sin requerirse de colaboración mediante orden instruida debido a
que, el citado mandamiento emanó de una autoridad con asiento en
la ciudad de Santa Cruz de la Sierra, con la denunciada
incompetencia en razón del territorio, resolviendo la autoridad
demandada declarar improcedentes los citados incidentes, para
luego ceder la palabra al Ministerio Público a efectos de que motive
y fundamente la pretensión sobre la imposición de medidas
cautelares.

A partir de dichos actuados y conforme se tiene de los argumentos


expuestos por el Tribunal de garantías que tuvo acceso al cuaderno
de control jurisdiccional, tal declaratoria de improcedencia, aun
cuando no conste en antecedentes la Resolución, resulta fuera de
los marcos lógico razonables y normativos, puesto que existe un
pronunciamiento expreso anterior que determinó remitir la causa a
la jurisdicción civil; y, ante la decisión de la mencionada autoridad
judicial hoy demandada de continuar con la tramitación de la
solicitud de imposición de medidas cautelares impetrada por el
Ministerio Público, así como el hecho anterior de haber ordenado la
emisión del mandamiento de aprehensión sin previa revisión de los
antecedentes, incurrió en inobservancia e incumplimiento de la
disposición procesal legal contenida en el segundo párrafo del
art. 46 del CPP, desconociendo su propio pronunciamiento sobre la
referida incompetencia en razón de materia pese a los reclamos
expresados por la defensa de la impetrante de tutela; en ese
sentido, al resolver la situación jurídica de la nombrada, vulneró el
debido proceso entendido como garantía de la legalidad procesal; es
decir, aquel conjunto de requisitos que de manera inescindible
deben ser observados y cumplidos en todas y cada una de las
instancias procesales, ya sean administrativas o judiciales, con la
finalidad de que las personas puedan asumir su defensa de forma
adecuada ante cualquier tipo de acto emanado que pueda afectar
sus derechos.

Debe tenerse presente que, dada la preponderancia del derecho a la


libertad, cualquier solicitud vinculada con el mismo merece una
atención minuciosa y adecuada, como acontece en el caso concreto,
donde una vez expuestos los pormenores de la existencia de una
Resolución ejecutoriada sobre la incompetencia de la autoridad
judicial para tramitar cualquier actuado como el cuestionado
mandamiento de aprehensión, compelía al Juez de la causa hoy
demandado, efectuar la revisión de los antecedentes a efectos de
verificar estos extremos, y determinar no continuar con la

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tramitación de la causa al ser nulos los actuados procesales
posteriores a la emisión del Auto interlocutorio definitivo de 18 de
octubre de 2016, conforme se tiene señalado en el Fundamento
Jurídico III.1 de la presente Sentencia Constitucional Plurinacional,
situación que no aconteció en el caso en examen; toda vez que, del
informe presentado por el Juez demandado se tiene que el mismo se
limitó a considerar que se notificó a la imputada mediante edictos de
prensa y que ante su incomparecencia a la audiencia de medidas
cautelares se la declaró rebelde por Auto 425/2017 de 30 de
noviembre, dando cuenta de este modo también que continuó con la
sustanciación del proceso penal así como emitió el mandamiento de
aprehensión; y, pese a que fue advertido del error en el acto
procesal de 21 de marzo de 2018, aun así decidió continuar con la
celebración de la audiencia de aplicación de medidas cautelares,
actuaciones que devinieron también en la vulneración al debido
proceso y al principio de legalidad vinculado con el derecho a la
libertad, en el entendido de que, por mandato del art. 46 del
adjetivo penal, la incompetencia declarada conlleva la remisión de
actuados al Juez o Tribunal competente; es decir, impide que la
autoridad incompetente efectúe cualquier otro actuado y, en caso de
sustanciarlo, provocará la consecuente nulidad de obrados; motivos
por los cuales corresponde conceder la tutela impetrada disponiendo
la nulidad de las actuaciones posteriores a la emisión del Auto
Interlocutorio Definitivo de 18 de octubre de 2016.

En cuanto concierne a las demás denuncias efectuadas por la


accionante relacionadas con la actuación del Juez demandado,
corresponde la abstracción de las mismas por derivar de la emisión
del mandamiento de aprehensión por autoridad incompetente, dado
que las problemáticas subsecuentes tienen su génesis en la referida
incompetencia y por ende en su nulidad conforme la normativa
precedentemente citada.

Respecto al derecho a la defensa en vinculación con el derecho a la


libertad, corresponde denegar la tutela sobre el mismo debido a que
la accionante ejercitó este derecho de manera activa efectuando sus
reclamos pertinentes, que si bien no fueron oídos de la manera
correcta por la autoridad judicial demandada, no implica que la
misma le impidiera hacer uso de los medios y mecanismos previstos
por la normativa procesal, conforme la propia accionante sostuvo en
su demanda constitucional cuando refirió que sus incidentes fueron
declarados improcedentes.

III.2.2. Con relación a la actuación del Jefe Policial de San Julián del
departamento de Santa Cruz

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Respecto al primer y tercer reclamo, en sentido de que ejecutó el
mandamiento de aprehensión en la localidad de San Julián cuando el
mismo fue emitido por una autoridad de la ciudad de Santa Cruz de
la Sierra, sin estar diligenciado mediante comisión instruida; y, que
no se le entregó copia del mismo, su análisis carece de relevancia
constitucional al devenir de un actuado nulo conforme los
entendimientos precedentemente desarrollados, toda vez que,
establecer que algún reclamo sobre los actos desplegados por el
mencionado funcionario policial debieron efectuarse ante la
autoridad competente, resulta insubsistente debido a que se
evidenció que el Juez demandado carecía de competencia para
emitir el referido mandamiento de aprehensión y por ende de
conocer y sustanciar cualquier otro acto procesal o ejercer el control
jurisdiccional.

Sin embargo de ello, no se puede dejar de lado el reclamo


relacionado con el hecho de que el mencionado funcionario policial
impidió a la accionante dar de lactar a su hijo menor de un año
amenazándole con entregar junto a su otro hijo de un año y diez
meses a la Defensoría de la Niñez y Adolescencia si no eran
entregados a sus familiares, al respecto, es necesario recordar que
todos los niños merecen una protección especial y reforzada de sus
derechos conforme establece el art. 2 de la Declaración de los
Derechos del Niño; así su derecho a la vida y a la salud merecen ser
reconocidos de manera inmediata sin espera de una determinación
expresa emitida por una autoridad, todos en general deben tomar
en cuenta que en aquellas situaciones donde se encuentre de por
medio un menor, se requiere considerar ciertas medidas que
protejan estos derechos o tomar actitudes diligentes, constituyendo
exigencias que en el caso de análisis, corresponde sean
consideradas, para lo cual resulta importante señalar que la
alegación de lesividad puesta de manifiesto por la impetrante de
tutela no fue rebatida de forma alguna por la parte demandada,
circunstancia que bajo los parámetros de protección de este grupo
vulnerable, permite concluir en la evidencia de lo denunciado, con la
consecuente afirmación de que no es permisible privar a un menor
de edad de ser alimentado mediante lactancia materna, pues de ello
puede depender su supervivencia; en ese sentido, la actuación del
funcionario policial codemandado al impedir que la hoy accionante
alimente a su hijo lactante, puso en riesgo la vida y salud del menor
con implicancia en su subsistencia, correspondiendo conceder la
tutela con relación a este motivo.

En consecuencia, el Tribunal de garantías, al conceder la tutela solicitada, obró


en parte de forma correcta.

POR TANTO

12
El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera; en virtud de la
autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado y los arts. 12.7 de la Ley
del Tribunal Constitucional Plurinacional y 44.1 del Código Procesal Constitucional, en
revisión, resuelve CONFIRMAR en parte la Resolución 05/2018 de 23 de marzo,
cursante de fs. 35 a 37 vta., pronunciada por el Tribunal de Sentencia Penal
Decimosegundo de Santa Cruz; y en consecuencia:

1º CONCEDER en parte la tutela solicitada con relación al Juez demandado


respecto a la lesión del debido proceso, y al principio de legalidad, vinculados

13
CORRESPONDE A LA SCP 0399/2018-S1 (viene de la pág. 12).

con el derecho a la libertad, disponiendo la nulidad del mandamiento de


aprehensión al haber sido emitido sin competencia por la autoridad judicial
demandada; asimismo, con relación al funcionario policial codemandado
conforme los argumentos precedentemente señalados;

2º DENEGAR la tutela con relación al derecho a la defensa y sobre las demás


actuaciones reclamadas dada su insubsistencia, conforme los entendimientos
precedentemente desarrollados.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional


Plurinacional.

Al no existir consenso en Sala dentro del presente caso, dirime el Dr. Petronilo
Flores Condori, Presidente; siendo de Voto Disidente la Magistrada MSc. Georgina
Amusquivar Moller.

Fdo. Dr. Petronilo Flores Condori


PRESIDENTE

Fdo. MSc. Karem Lorena Gallardo Sejas


MAGISTRADA

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