UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA Y TECNOLÓGICA DE COLOMBIA

FACULTAD CIENCIAS DE LA SALUD

NEUROPSICOLOGÍA

Ana Camila Acosta, Diana Sofía Sánchez

CUADRO COMPARATIVO ENVEJECIMIENTO NORMAL Y PATOLÓGICO

ENVEJECIMIENTO NORMAL ENVEJECIMIENTO PATOLÓGICO

 Existe deterioro en alguna actividad compleja.
(Envejecimiento normal vs patológico)
- Ante una persona con quejas de memoria, cabe comparar
su situación con los datos de la mayoría de personas de su
misma edad y estimar “cuánto se aleja de la normalidad”.
(Ayuso, Ederra, Manubens, Nuin, Villar y Zubicoa, 2007)
Memoria
- Existe evidencia de que la memoria semántica se deteriora
- El deterioro no es de la intensidad suficiente como para el
diagnóstico de demencia. (Envejecimiento normal vs
patológico)
- Cuando se comprueba que la alteración no es únicamente de
memoria sino que están afectadas otras funciones intelectuales
(orientación, lenguaje, cálculo, capacidad de abstracción y
planificación) y este interfiere en la capacidad de desarrollar
las actividades cotidianas, estamos ante una demencia.
(Ayuso, Ederra, Manubens, Nuin, Villar y Zubicoa, 2007)
 Un déficit en la memoria semántica evaluada con tareas de
denominación es altamente sugestivo de un déficit patológico
 muy poco o nada en el envejecimiento fisiológico. (Pascual,
Casadevall, Santos, Ríos, Fernández y López, 2001)
- La edad avanzada se relaciona con disminución en la
capacidad de memoria y aprendizaje. Se incrementa la tasa de
olvido y la vez disminuye la capacidad para adquirir nueva
información, y se produce de manera lenta en el
envejecimiento normal. (Ardila y Roselli, 2007)
- El envejecimiento personal, el cumplir muchos años, no es
una enfermedad. (Martínez y Moya, 2001). Además, existe
baja probabilidad de enfermedad y discapacidad, junto a
un alto funcionamiento cognitivo, capacidad funcional y
compromiso activo con la vida (Fernández, Machado y
León, 2009)
- Hay datos epidemiológicos consistentes a favor de que cuanto
mayor sea el nivel educativo que se alcanza en la vida, menor
será la probabilidad de sufrir demencia en edades avanzadas.
Los mecanismos biológicos implicados en esta beneficiosa
asociación pueden ser varios, pero entre ellos destaca que a
mejor educación y estado socioeconómico corresponde menor
enfermedad vascular cerebral. (Martínez y Moya, 2001)
bien en el lenguaje (afasia) o bien en el almacén-lexicón
semántico, lo que es indicativo de patología en el neocórtex
temporal asociativo (enfermedad de Alzheimer, demencia
semántica) y nunca por envejecimiento fisiológico. (Pascual,
Casadevall, Santos, Ríos, Fernández y López, 2001)
 En pacientes con DTA se reduce la capacidad de memoria a
corto plazo, ya que poseen un incremento en la tasa de olvido,
en especial para estímulos visuales. (Ardila y Roselli, 2007)
- Pero la condición de ser mayor de 65-70 años es un terreno
abonado para que surjan las enfermedades
neurodegenerativas. (Martínez y Moya, 2001)
- El ambiente, a través de la educación recibida, el medio en el
que se vive, las infecciones de la infancia, las condiciones de
nutrición, la riqueza o deprivación sensorial y emocional,
interactúan decisivamente con los genes, en la aparición de
enfermedades como el Alzheimer. (Martínez y Moya, 2001)
- El envejecimiento comporta un cambio en la forma del
hipocampo. La pérdida del volumen normal ocurre sobre todo
en la cabeza del hipocampo y el subículo. (Jurado, Mataró y
Pueyo, 2013)
- En ancianos normales la pérdida de sustancia gris es del 0,11
al 0,18% al año y es más prominente en los giros frontal
inferolateral, temporales medio y superior posterior y las áreas
parietales posteriores. (Jurado, Mataró y Pueyo, 2013)
- La atención sostenida o capacidad de mantener la
vigilancia en el tiempo es un proceso atencional simple que
no se ve afectado en el envejecimiento normal. (Jurado,
Mataró y Pueyo, 2013)
- Por lo que respecta al lenguaje, se considera que es la
función menos afectada por el envejecimiento normal.
- Aunque las funciones lingüísticas son poco afectadas por el
envejecimiento normal, los ancianos normales pueden tener
fallas discretas en su capacidad de hallar palabras, también se
advierte una tendencia a la reducción en el repertorio lexical y
un incremento en los tiempos necesarios para recuperar
información verbal. (Ardila y Roselli, 2007).
- En la enfermedad de Alzheimer la mayor pérdida ocurre
además en la parte lateral del cuerpo. (Jurado, Mataró y
Pueyo, 2013)
- En la enfermedad de Alzheimer es mayor en temporal medial
y cingulado posterior. (Jurado, Mataró y Pueyo, 2013)
- La atención sostenida o capacidad de mantener la vigilancia
en el tiempo es un proceso atencional simple que se ve
afectado. (Jurado, Mataró y Pueyo, 2013)
- El lenguaje puede verse afectado en el envejecimiento
patológico (anomia). Puede evolucionar en distintas
manifestaciones afásicas (ecolalia, palilalia) hasta derivar en
una afasia global con incapacidad de emitir y comprender
lenguaje alguno. (Junqué y Jurado, 2009 citado en Jurado,
Mataró y Pueyo, 2013).
- La desintegración del lenguaje es considerada un signo
importante de deterioro patológico. En el caso de las
demencias seniles (DTA) se advierte un franco deterioro
lexical, evidente en la dificultad para encontrar palabras

- Una paradoja del envejecimiento es que la frecuencia de
afectos negativos y la incidencia de depresión en realidad
decrecen. Los ancianos son capaces de regular sus afectos
negativos focalizando sus recursos en la meta y usando
estrategias adecuadas a su edad, como la atención (Mather,
2012, citado en Jurado, Mataró y Pueyo, 2013).
- Se conserva la lectura, la escritura y el cálculo. (Jurado,
Mataró y Pueyo, 2013).
- Se logran realizar tareas diarias manuales. (Jurado, Mataró y
Pueyo, 2013).
(anomia), en estados de demencia avanzados el lenguaje se
puede convertir en un habla vacía, carente de palabras de
contenido semántico, para terminar en un estado de
semimutismo o de mutismo. (Ardila y Roselli, 2007).
- Pueden presentar en la demencia síntomas depresivos como:
Tristeza, anhedonia, sentimiento de ser una carga, falta de
esperanza, etc., que provocan malestar significativo, además
de falta de interés, motivación, sentimiento, emoción o
preocupación. (Jurado, Mataró y Pueyo, 2013).
- En la escritura se observa inicialmente disortografía,
omisiones, substituciones, etc. En la lectura, aparecen
dificultades de comprensión y omisiones, substituciones y
errores espaciales. El cálculo se pierde en todas sus
modalidades y llama la atención el desconocimiento del valor
del dinero. Los números pierden su valor simbólico (Junqué y
Jurado, 2009, citado en Jurado, Mataró y Pueyo, 2013).
- El paciente es incapaz de hacer los gestos necesarios para
manipular objetos comunes. Las dificultades práxicas relativas
al vestirse aparecen primero para ponerse la ropa y más tarde
para quitársela. Afectan sobre todo al orden de colocación de

- Se conservan las capacidades visoespaciales. (Jurado, Mataró
y Pueyo, 2013).
- En la vejez, la agudeza visual y auditiva disminuyen. Un alto
porcentaje de personas mayores de 65 años son hipermétropes
(presentan pérdida de la visión cercana), además de presentar
dificultades para adaptarse a la oscuridad y para discriminar
diferentes niveles de iluminación, ya que la pupila disminuye
con la edad. (Ardila y Roselli, 2007).
- Las cataratas, y La hipoacusia son particulares de esta
edad, sin embargo, en cuanto a el olfato y el gusto no
parecen cambiar mucho a través del tiempo. (Ardila y
Roselli, 2007).
las prendas. En la vida diaria se aprecia un abandono de tareas
manuales como coser, cocinar o cambiar un enchufe y
finalmente la total incapacidad de llevar a cabo cualquiera de
estas actividades. (Jurado, Mataró y Pueyo, 2013).
- El paciente se pierde en espacios poco frecuentes o situaciones
inusuales. Más adelante no podrá orientarse ni en su casa,
confundiendo habitaciones. Durante el curso de la EA
aparecen trastornos del reconocimiento de caras u objetos.
(Jurado, Mataró y Pueyo, 2013).
- En pacientes con edad avanzada se puede encontrar agnosias
visuales, alteraciones visoperceptivas, desorientación espacio-
temporal entre otras. (Portellano, 2005).
 - El nivel general de actividad motora disminuye y los ancianos
tienen respuestas lentas, es decir el tiempo entre la
presentación de un estímulo y la aparición de la respuesta
correspondiente es lenta, característico de la edad avanza.
(Portellano, 2005)
- En la etapa senil, estas personas están constantemente
sometidas a acontecimientos comunes como la enfermedad
o muerte del cónyuge, limitaciones físicas generales entre
otras lo que puede explicar manifestaciones depresivas, sin
embargo, cuando esta es severa se trata de una condición
psicológica. (Portellano, 2005)
- En la enfermedad de parkinson los problemas motores se
manifiestan en una dificultad para iniciar los movimientos y
una gran lentificación en la ejecución de los mismos. (Ardila y
Roselli, 2007)
- Son más vulnerables y tienen mayor riesgo de presentar
trastornos psicopatológicos que la población general,
caracterizada por depresión, euforia e incontinencia
emocional. (Ardila y Roselli, 2007)
- En la enfermedad de Parkinson son frecuentes la apatía, falta
de atención, dificultades de concentración y entre un 25 y un
40% presenta depresión, episodios depresivos mayores o
distimias. (Ardila y Roselli, 2007)

Referencias
Ardila, A. & Rosselli, M. (2007). Neuropsicología clínica.

https://www.academia.edu/31361303/Ardila_Alfredo_Y_Rosselli_Monica_Neuropsicologia_Clinica (pp .227-253)

Ayuso T, Ederra MJ, Manubens JM, Nuin MA, Villar D, Zubicoa J. (2008). Abordaje de la demencia. Guía de actuación en la coordinación
Atención Primaria-Neurología. ARCHIVO PDF. /Guiaabordajedelademencia.pdf.
Envejecimiento normal vs patológico. ARCHIVO PDF.
/Envejecimiento%20normal%20vs%20patologico%20[solo%20lectura]%20[Modo%20de%20compatibilidad].pdf.
Fernández, C., Machado, M. y León, M. (2009). Deterioro cognitivo ligero como predictor de envejecimiento exitoso. GEROINFO. 4- 1.
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Jurado, M., Mataró, M. y Pueyo, R. (2013). Neuropsicología de las enfermedades degenerativas. Síntesis.
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Martínez, J. y Moya, M. (2001). Factores de riesgo de enfermedad de Alzheimer en Martínez, J. Robles, A. AULA MÉDICA. Alzheimer:
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Pascual, L., Casadevall, T., Santos, S., Ríos, C., Fernández, T., y López, E. (2001). Deterioro cognitivo y demencia. Parámetros clínicos en
Martínez, J. Robles, A. AULA MÉDICA. Alzheimer: teoría y práctica (pp. 19-32).
Portellano, J. (2005). Introducción a la neuropsicología. https://clea.edu.mx/biblioteca/files/original/43a9d63fc649d7606bd928a7bdf87ca7.pdf

(pp. 319-341)