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ENVEJECIMIENTO

NORMAL
Y
PATOLÓGICO
CAMBIOS COGNOSCITIVOS DURANTE
ENVEJECIMIENTO NORMAL
Mientras mayor es la edad, más irregular es la
ejecución. Mientras que algunas personas siguen
presentando una ejecución relativamente alta,
otras muestran una caída acelerada.
PERCEPCIÓN

Se asocia con una serie de cambios


sensoriales y perceptuales distintivos. La
agudeza visual y auditiva disminuyen. Un
alto porcentaje de personas mayores de 65
años son hipermétropes, es decir, presentan
pérdida de la visión cercana.
HABILIDADES VISOMOTORAS
Tareas como ensamblaje con cubos (Waugh y
Barr, 1980) y dibujo de figuras tridimensionales
y complejas tienen un alto grado de dificultad
en personas de edad avanzada

.Asimismo, la lentitud con que se reconocen figuras


incompletas y los errores en la copia de figuras
bidimensionales y tridimensionales tienen relación
con la edad. Otros problemas, como los de
segmentación (pobre integración de los elementos) y
perseveración son muy frecuentes en ellas (Veroff,
1980).
MEMORIA
Este deterioro de la memoria es lento en el envejecimiento normal, pero
acelerado en caso de demencia

Uno de los aspectos más sobresalientes en la memoria del anciano es


la dificultad para recordar hechos recientes, a pesar de describir con
relativa facilidad eventos antiguos, en particular los relacionados con
situaciones emocionales.

La capacidad de la memoria operativa o memoria de trabajo es otro


factor que parece alterarse con la edad.
TIEMPOS DE REACCIÓN
Y ATENCIÓN
La lentificación de las respuestas es
una característica central del proceso
de envejecimiento. El nivel general de
actividad motora disminuye y los
ancianos tienen respuestas lentas
LENGUAJE
El desempeño en pruebas verbales no varía
notablemente con el paso del tiempo. Como
norma general, se asume que los procesos
verbales son muy resistentes al envejecimiento,

En general, se acepta que los efectos de la


edad sobre el lenguaje no son evidentes sino
a partir de los ochenta años (Emery, 1985).
INTELIGENCIA

El término “inteligencia” es difícil de definir. Sin embargo, no hay duda de


que, al menos en su acepción psicométrica, ciertos componentes de la
inteligencia disminuyen con la edad, en tanto que otros se mantienen
estables e incluso se incrementan. En términos generales, se considera
que los puntajes en subpruebas que miden habilidades verbales y que sean
parte de la llamada “inteligencia cristalizada”, tienden a mantenerse
estables e incluso a progresar; por el contrario, los puntajes en pruebas
visomotoras y de razonamiento espacial, que constituyen lo que se
denomina “inteligencia fluida”, alcanzan un máximo en algún momento de
la adultez y después van en declive en la tercera edad.
CAMBIOS EMOCIONALES
La tendencia a la depresión
constituye la alteración
afectiva más frecuente en la
senectud. Los estados
emocionales pueden afectar
el funcionamiento
cognoscitivo.
CAMBIOS ANATOMOPATOLÓGICOS
Con la edad se registran cambios en el tamaño del cerebro, que parecen más evidentes a
partir de los 50 años. Al parecer, el volumen cerebral alcanza su pico máximo hacia los 20
años, para luego iniciar una caída lenta pero gradual (Muller et al., 1998).

también cambian algunas funciones


En apariencia, las áreas cerebrales más psicofisiológicas. El flujo cerebral se reduce
susceptibles al envejecimiento son el en algunas zonas (Krausz et al., 1998), la
hipocampo y los lóbulos frontales. actividad electroencefalográfica (EEG)
ENVEJECIMIENTO
PATOLÓGICO: DEMENCIA
La demencia constituye un
síndrome caracterizado por el
deterioro progresivo de las
funciones cognoscitivas:
memoria, lenguaje, habilidades
visoperceptuales, de
razonamiento, etc.,
vinculados a cambios
emocionales y
comportamentales generales
(Rosselli, 2003).
TIPOS
DE
DEMENCIA
DEMENCIA DE TIPO ALZHEIMER
CAMBIOS COMPORTAMENTALES
 Los pacientes con demencia suelen presentar cambios comportamentales.
La anosognosia es una de las características de la DTA. El paciente no
tiene evidencia o conciencia de la enfermedad que padece.

 En etapas muy tempranas puede expresar que está sufriendo cambios en


su memoria y demostrar cierta angustia o depresión; sin embargo, con el
avance de la enfermedad se mostrará indiferente a ésta e incluso tratará
de justificar sus defectos (por ejemplo, si se le pregunta quién es el
presidente actual, dirá que no le interesa la política, a pesar de que su
profesión se lo demande). Se han descrito, por igual, ideas paranoides en
relación con los familiares.
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
 Al revisar las alteraciones que caracterizan el perfil neuropsicológico del envejecimiento
normal y del envejecimiento patológico observado en la DTA, se deben considerar los
siguientes criterios diagnósticos:
 1) las alteraciones en la memoria inmediata podrían sugerir una DTA, mientras que en el
envejecimiento normal se conserva el necesario volumen de memoria inmediata;
 2) las personas normales se benefician de formas de recobro dirigido, lo cual confirma que hay
un defecto de evocación o recuperación de la información. En la DTA se debe comprobar que
hay un defecto tanto en el almacenamiento como en el recobro de nueva información. Las
técnicas de recobro dirigido no son útiles a estos pacientes;
 3) el lenguaje es una capacidad que suele conservarse durante el envejecimiento normal; de
haber anomia, ésta es moderada. En la DTA aparecen parafasias y la tendencia a un habla
vacía. Asimismo, las pruebas de fluidez verbal en categorías fonológicas se encuentran
disminuidas;
 4) la presencia de errores intrusivos, perseverativos y confabulatorios se orientan hacia una
DTA;
 5) en el envejecimiento normal la escritura espontánea y al dictado no presenta mayores
problemas, mientras que en la DTA ésta se encuentra alterada;
 6) la agnosia topográfica y la anosognosia sugieren un envejecimiento patológico.
CAMBIOS NEUROBIOLÓGICOS Y MANEJO
 En el inicio de la enfermedad las alteraciones
cognoscitivas son mínimas, con excepción de
las serias dificultades para abstraer y
conceptualizar. La memoria se encuentra
relativamente bien conservada. A medida que
avanza la enfermedad hay alteraciones en el
lenguaje, disminuye la iniciativa verbal, se
reduce la producción lexical y se tiende a la
perseveración, las estereotipias verbales y la
ecolalia. La incontinencia urinaria es más
común en las etapas iniciales de la
enfermedad de Pick. También se pueden
advertir características propias del síndrome
de KluverBucy (hiperoralidad, conducta
sexual inapropiada y placidez).
ENFERMEDAD DE PICK
La enfermedad de Pick y la DTA involucran sobre
todo la corteza cerebral, y a pesar
de que una y otra muestran procesos de deterioro
un tanto similares en su evolución,
la enfermedad de Pick tiene características clínicas
propias. Su prevalencia es
de cinco a 10 veces menor a la de la DTA .

A diferencia de la DTA, la enfermedad de Pick se


inicia con cambios comportamentales, como
irritabilidad y desinhibición, o bien con apatía e
indiferencia. Conductas como deambular sin rumbo
fijo, actividades compulsivas y repetitivas,
desinhibición sexual, falta de iniciativa
(apragmatismo), glotonería y oralismo, son
frecuentes en estos pacientes. La presencia de
cambios comportamentales en la primera etapa
puede llegar a suponer que se trata de una
enfermedad psiquiátrica.
DEMENCIA VASCULAR
La demencia vascular o demencia por infartos
múltiples (DIM) es el segundo tipo más frecuente de
demencia después de la DTA y se caracteriza por
síndromes heterogéneos con alteraciones
neuropsicológicas diferentes, dependientes de la
región cerebral afectada y del tamaño de los vasos
sanguíneos comprometidos. Los infartos repetidos
corticales y subcorticales conducen a un deterioro
cognoscitivo de tipo demencial. En la demencia
vascular cortical predominan las alteraciones
afásicas, amnésicas, agnósicas y apráxicas, mientras
que en las formas subcorticales prevalecen la
lentificación, el olvido y la depresión. La demencia
conocida como estado lacunar o síndrome de
Binswanger se debe a infartos muy pequeños,
subcorticales y diencefálicos.
CARACTERÍSTICAS DE LA
DEMENCIA VASCULAR
 Inicio súbito
 Deterioro escalonado
 Evolución fluctuante
 Conservación relativa de la personalidad
 Antecedentes de problemas vasculares
 y/o hipertensión arterial
 Síntomas y signos neurológicos
 y/o neuropsicológicos focales
 Otros signos de arteriosclerosis
ENFERMEDAD DE
PARKINSON
En 1817 James Parkinson incluyó la triada temblor, rigidez y
bradicinesia en la enfermedad que lleva su nombre. El temblor es
primordialmente de reposo y compromete manos, tobillos y/o cabeza.
Al aumentar el tono muscular se produce la rigidez que aparece en
los músculos flexores; esta rigidez le confiere al paciente la postura
característica de inclinación hacia adelante con ligera flexión de las
rodillas, cuello y hombros.
problemas motores se manifiestan en una dificultad para iniciar los
movimientos y una gran lentificación en la ejecución de los mismos.
El control fino del movimiento está severamente alterado, así como
la coordinación y la falta de mímica.
La inexpresión facial (hipomimia), la bradicinesia y la rigidez dan la
apariencia de debilidad y letargia. El habla pierde su entonación y su
prosodia, y aparece un lenguaje disártrico. En etapas avanzadas de
la enfermedad, el paciente puede sufrir cambios mentales que,
sumados a sus dificultades motoras, constituyen una demencia de
tipo subcortical con defectos leves de atención y en las funciones
ejecutivas.
DEMENCIA DE LOS CUERPOS DE
LEWY
Ésta suele iniciarse entre los 60 y 70 años de
edad y se caracteriza por síntomas
parkinsonianos y defectos neuropsicológicos de
tipo fronto-subcortical con alteraciones en la
atención. Histológicamente presenta los
llamados cuerpos de Lewy, que también
aparecen en casos de enfermedad de Parkinson
e incluso en individuos normales sin demencia.
La semejanza entre la demencia de la
enfermedad de Parkinson y la demencia de los
cuerpos de Lewy llevó a sugerir que estos
trastornos tienen una etiología común.
ENFERMEDAD DE HUNTINGTON
Constituye otra entidad degenerativa del sistema
nervioso central que se transmite en forma
autosómica dominante y se caracteriza por la
presencia de movimientos coreiformes y cambios
cognoscitivos o comportamentales de tipo
psicótico. El trastorno es resultante de un gen
anormal en el cromosoma 4, con una expresividad
de 100% que afecta a los descendientes en un
50% de probabilidad; se espera que la mitad de
los descendientes de una persona enferma la
desarrollen, con una incidencia igual para uno y
otro sexo. La edad de inicio de la enfermedad es
variable, pero la mayor incidencia se encuentra
en la cuarta o quinta décadas de vida.
ENFERMEDAD DE WILSON
Samuel Alexander Kinnier Wilson describió en 1912 una
enfermedad autosómica recesiva que aparece por lo común
a los 20 o 30 años y afecta el hígado y el sistema nervioso
debido a un defecto en el metabolismo del cobre. Los signos
y síntomas neurológicos de pigmentación de la cornea,
rigidez, temblor, disartria, disfagia y movimientos coreicos
pueden acompañarse de alteraciones comportamentales. Si
el paciente no recibe tratamiento puede desarrollar un
cuadro demencial con características subcorticales: apatía,
problemas para recordar y mengua de su capacidad
cognoscitiva. Sin embargo, un tratamiento oportuno con
drogas que permitan eliminar adecuadamente cobre (la
penicilamina) puede revertir de manera parcial el deterioro
cognoscitivo
NEUROSÍFILIS
Constituye un ejemplo de demencia infecciosa,
como resultado de la invasión del sistema
nervioso central por el Treponema pállidum. Los
síntomas demenciales pueden aparecer 15 o 20
años después de que se adquiere la infección. El
comienzo de la enfermedad se caracteriza por
cambios de conducta, como irritabilidad,
desinhibición, apatía y descuido personal; en esta
etapa, el paciente puede ser diagnosticado como
psicótico porque presenta ideas delirantes.
Posteriormente, aparecen alteraciones motoras,
temblor facial y disartria. La demencia por
neurosífilis puede tratarse con penicilina; los
síntomas se revierten por completo si el
tratamiento se inicia a tiempo.
ENFERMEDAD DE JACOB-CREUTZFELDT
Es una enfermedad infecciosa muy poco frecuente. Se
caracteriza por un deterioro intelectual y motor
rápidamente progresivo que produce la muerte en un lapso
de nueve a 12 meses, en promedio. Esta enfermedad
pertenece al grupo de las encefalitis espongiformes, junto
con el Kuru y el scrapie y aparece entre los 50 y 60 años. En
los niños es muy rara. Se cree que esta enfermedad es
transmisible, y se debe a un prion. Los síntomas iniciales
pueden ser neuropsicológicos, con alteraciones en la
memoria y en el lenguaje o con cambios comportamentales.
Las alteraciones neurológicas aparecen con rapidez y
pueden ser la primera manifestación clínica; se advierten
reflejos anormales, espasticidad, distonías, movimientos
coreicos y descargas mioclónicas que conforman un severo
deterioro y llevan al paciente a la muerte en corto tiempo.
Hasta el momento no existe tratamiento para curarla.
HIDROCEFALIA NORMOTENSA
El término hidrocefalia se refiere al aumento en el tamaño de los ventrículos, ya sea
como consecuencia de una obstrucción en el flujo del líquido cefalorraquídeo o como
compensación de una atrofia cortical. En la hidrocefalia normotensa aparece una
obstrucción que puede ser secundaria a un trauma, una infección o un tumor. Con la
obstrucción, aumenta la presión sobre los ventrículos laterales y éstos se ensanchan
para adaptarse a la nueva condición; conforme ello ocurre, la presión del líquido
cefalorraquídeo vuelve a la normalidad. El cuadro clínico se caracteriza por
alteraciones en la marcha, incontinencia de esfínteres y deterioro cognoscitivo

El primer síntoma lo constituye la marcha apráxica,


que se realiza en pequeños pasos y se conoce como
marcha magnética, pues la persona no puede
levantar los pies del piso, como si estuviera adherida
a él; sólo por orden verbal del examinador —”levante
el pie derecho, ahora el izquierdo...”, etc.— se puede
caminar—. Más tarde, se manifiesta incontinencia
de esfínteres, que en principio puede ser una
urgencia urinaria. Las alteraciones cognoscitivas y
comportamentales constituyen el último síntoma.
DEMENCIA EN LA ENCEFALOPATÍA
DEL VIRUS DE INMUNODEFICIENCIA
HUMANA
La encefalopatía del virus de inmunodeficiencia humana (VIH) se caracteriza por
lentificación del pensamiento, escasa capacidad de concentración, apatía y olvidos
frecuentes. Los pacientes presentan defectos en el aprendizaje verbal y difícilmente
utilizan agrupaciones semánticas. A medida que la enfermedad progresa se incrementa
la bradicinesia, y aparecen ataxia, hipertonía y debilidad motora, para terminar en un
cuadro de acinesia. Estos trastornos motores y cognoscitivos se acompañan de cambios
comportamentales —apatía, aislamiento social y decremento de la espontaneidad—,
conformando un franco cuadro demencial al que se denomina encefalopatía VIH o
complejo demencial adquirido.
OTROS TIPOS
DE DEMENCIA
Hay una serie de condiciones patológicas que pueden llevar a cuadros de
compromisocerebral difuso, y por lo tanto a demencia, como los hematomas
secundarios a traumatismos leves, las neoplasias, y las propias condiciones tóxicas y
metabólicas del paciente. El hematoma subdural crónico intervenido quirúrgicamente
puede revertir por completo el cuadro demencial. Se sabe, por ejemplo, que los
boxeadores presentan un cuadro demencial secundario a los microtraumatismos que
reciben durante su carrera (demencia pugilística).
Las neoplasias, en particular de los lóbulos frontales, producen un deterioro global de
la función cognoscitiva y comportamental del individuo. Según las características del
tumor, su resección puede revertir o por lo menos detener temporalmente el cuadro
demencial. Una enfermedad tropical frecuente en ciertas regiones del mundo es la
cisticercosis, que en ocasiones puede invadir el sistema nervioso.
A su vez, la neurocisticercosisnes la presencia de quistes de tenia en el tejido cerebral,
los ventrículos o las meninges. Cuando los cisticercos invaden el tejido cerebral se
advierten severos cambios neuropsicológicos de tipo demencial (Rosselli et al., 1988). El
tratamiento oportuno con fármacos permite mejorar notablemente la sintomatología
neuropsicológica.

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