"VUELVEN AL

ARMARIO EN
EL TRABAJO"
KAREN ITZEL JIMENEZ HIDALGO
 ¿Qué es la
Discriminación
LGBT en el Lugar
de Trabajo?
La mitad de las personas LGBTI manifiestan haber vivido
situaciones de acoso, hostigamiento o discriminación en el
trabajo al menos una vez. De igual forma, una cuarta parte
de las personas LGBTI en quince empresas incluyentes
todavía se siente poco o nada en confianza para hablar
sobre su vida personal
Es increíble saber que la discriminación hacía las personas de la comunidad
LGBT en el lugar de trabajo es donde ocurre con mucha frecuencia. En lo
siguiente están las estadísticas que reportan las personas LGBT sobre la
discriminación laboral.
El 27% de las personas transgénero que tuvieron o solicitaron un empleo
en 2020 dijeron que no las contrataron, les negaron un ascenso o que las
despidieron por su identidad de género
El 10% de las personas transgénero han renunciado a un trabajo debido a
un entorno poco acogedor.
El 8% de los empleados LGBT dicen que la discriminación afecta
negativamente sus entornos de trabajo.
Más del 75% de los empleados transgénero toman medidas activamente
para evitar ser maltratados en el lugar de trabajo.
La discriminación LGBT ocurre cuando se le niega empleo, es despedido, no le
dan un ascenso o se le niega una compensación (o se le compensa de manera
incorrecta) debido a su orientación sexual, sexo o sexo expresado, o estado de
relación. También ocurre cuando usted es acosado en el lugar de trabajo o
forzado a trabajar en un entorno de trabajo hostil. No se lo puede discriminar
por estar en una relación con personas del mismo sexo, por reasignación de
sexo (o porque tendrá reasignación de sexo en el futuro).
DERECHOS LABORALES
DE LAS PERSONAS
LGBT
El artículo 23 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos,
aprobada por las Naciones Unidas en 1948, establece que:
Toda persona tiene derecho al trabajo, a la libre elección de su trabajo,
a condiciones equitativas y satisfactorias de trabajo y a la protección
contra el desempleo.
Toda persona tiene derecho, sin discriminación alguna, a igual salario
por trabajo igual.
Toda persona que trabaja tiene derecho a una remuneración
equitativa y satisfactoria, que le asegure, así como a su familia, una
existencia conforme a la dignidad humana y que será
complementada, en caso necesario, por cualesquiera otros medios de
protección social.
La OIT señala que algunas de las
manifestaciones de discriminación
en el lugar de trabajo por motivos
de orientación sexual, identidad de
género y características sexuales
son:
Violencia verbal, psicológica y física, además de enfrentar
manifestaciones de odio.
Discriminación en el lugar de trabajo si consta o se sospecha
que son lesbianas, gays, bisexuales o trans.
Denegación de empleo, despido, denegación de ascenso.
Acoso: bromas indeseables, indirectas y comentarios
tendenciosos, abuso verbal, chismes difamatorios, apodos,
intimidación y hostigamiento, falsas acusaciones de pedofilia,
frases insultantes en lugares visibles, llamadas telefónicas
insultantes, mensajes anónimos, daños a los bienes, chantaje,
violencia e incluso amenazas de muerte..
Autoexclusión (por ejemplo, cuando las personas LGBTI evitan
ciertos empleos, carreras o empleadores por temor a sufrir
discriminación por su orientación sexual).
ACABAR CON LA DISCRIMINACIÓN
LABORAL A LAS PERSONAS LBGTI
En México se observan prácticas discriminatorias en todos los niveles contratación, ascenso,
prestaciones y permanencia, con consecuencias graves para el crecimiento de las personas y del
Estado. Para las personas LGBTI, la exclusión sistemática en el empleo, que usualmente convive
con la marginación en otros ámbitos, niega el acceso a una vida digna. Por ello, en Comparad
estamos convencidos que erradicar la discriminación puede tener un impacto positivo en los planes
de vida de millones de personas.
La inclusión también generaría ganancias para las y los empleadores. Primero, quienes trabajan
en lugares incluyentes rinden más: pasan menos tiempo preocupados por la discriminación,
muestran más compromiso y menos complicaciones de salud o ausentismo. Segundo, las políticas
incluyentes mejoran la imagen corporativa, pues el público valora los negocios que no marginan a
la diversidad sexual y de género. Y tercero, las estrategias de prevención evitan gastos
innecesarios, puesto que las reparaciones por actos de discriminación tienden a ser costosas. Ser
incluyente permite aprovechar mejor el capital humano, aumentar la productividad y reducir
costos legales.
¿Por qué ser una
empresa inclusiva?
Ser una compañía libre de discriminación no debe plantearse
como objetivo principal para tener buena imagen o publicidad,
ya que una empresa inclusiva genera grandes beneficios para
la salud, cultura y estructura de la organización.
Estos son algunos aspectos importantes sobre inclusión:
Aumenta el compromiso.
Genera sentido de pertenencia y empatía.
Crea actitud positiva y proactiva.
Aumenta la productividad.
Mejora la imagen corporativa.
Crea una zona segura y de convivencia.
Genera mayor entendimiento del mercado.
Mejores prácticas El equipo de ADIL nos menciona que entre las primeras acciones que las empresas
suelen adoptar se encuentran:

para ser una La implementación de políticas de no discriminación, de no acoso o de equidad de

empleo.

empresa de La sensibilización de adoptar valores incluyentes hacia la población LGBT.

El acceso a prestaciones y beneficios igualitarios.

inclusión laboral El acceso a programas de desarrollo profesional que busquen atraer, retener y
potenciar el talento.

LGBT
La configuración de grupos de colaboradores de esta población y aliados para
difundir la voz de esta dentro y fuera de la organización.

La creación e implementación de actividades relacionadas para visualizar las

prácticas y acciones de mercadotecnia hacia el exterior.
Asimismo, existen certificaciones que te avalan como una compañía inclusiva, y una
de las más importantes en México es la certificación HRC Equidad MX, un programa
avalado por Human Rights Campaign y ADIL, que destaca las políticas y prácticas
relacionadas con la inclusión de la comunidad LGBT+ en los lugares de trabajo.
Esta certificación califica tres aspectos:
1. Adopción de políticas de no discriminación LGBT.
“Estar certificado bajo estos esquemas sienta
2. Creación de red de empleados y aliados LGBT o consejos de diversidad e
las bases de un cambio que eventualmente
podremos ver hacia su cultura, sus formas, sus inclusión.
métodos e impactar de manera positiva en favor 3. Participación en actividades públicas para apoyar a la comunidad LGBT.
de la inclusión con todas las personas”,
compartió el fundador de ADIL.