Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Integrantes:
NOMBRE ESTUDIANTES:
N° Alumno Master Grupo :
1 Isabel León Poblete B
2 Maribel González Rojas B
3 Javier Marín Orrego B
4 Felipe Díaz Quintana A
5 Katherine Martínez Martínez B
Definición Alternativa: N° 3
Destinatarios:
Expectativas profesionales:
En los últimos 30 años y tal como indican las Bases Curriculares para la
Educación Parvularia:
Titulo:
Objetivo general :
Objetivos específicos :
Propuesta de mejora
Meses Marzo Abril Mayo Junio Julio Agosto Septiembre Octubre Noviembre Diciembre
Actividades
x
Presentación del programa
Período sensibilización x x
Presentación y aplicación de instrumento x x
autodiagnóstico
Reflexión critica para la pertinencia local x x x
según el nivel de desarrollo
socioemocional arrojado por el
instrumento en cada estamento
Aplicación de estrategias diversificadas x x x x x x
para el desarrollo sociemocional según
categoria que arroja el instrumento
Seguimiento y evaluación de estrategias x x x x x x
aplicadas
Evaluación final, categorización, x
presentación de resultados y
proyecciones de la comunidad
JUSTIFICACIÓN:
Durante muchos años, se presentó una dualidad entre razón y emoción, como si
fueran dos entidades que viven y se expresan por separado. Incluso en nuestros días,
podemos escuchar prejuicios como que “las mujeres son más emocionales”. Y en
realidad, no es que las mujeres sean “más emocionales”, sino que son emocionales. Y
también los hombres, niñas, niños, y todas las personas desde nuestro nacimiento hasta
el último respiro: Vivimos en un mundo emocional que convive, en el mejor de los casos,
con manifestaciones racionales.
¿Qué son las emociones? Humberto Maturana (2001), nos dice que “…son
disposiciones corporales dinámicas que definen los distintos dominios de acción en que
nos movemos […] Cuando uno cambia de emoción, cambia de dominio de acción”.
Por su parte António Dámasio (2018), indica que son “…programas de acción
razonablemente complejos […], detonados por un objeto identificable o un evento, un
estímulo emocionalmente competente”. Además, “Aparecen evolutivamente como una
condición de sobrevivencia, para el bienestar y equilibrio homeostático de las especies”,
agregando que “Por ser programas de acción son altamente estereotipados, y por ello
podemos hablar de emociones primarias universales: sorpresa, miedo, felicidad, asco,
tristeza, enojo”.
Debemos reconocer que las emociones están presentes desde la más tierna infancia,
necesitando ser distinguida como una energía que moviliza, que expresa, confiando en
que hay un otro que lo acoge y reconoce la expresión de su “ser” como legítima, que
puede acompañarle y educarle en la expresión libre y sincera de sus miedos, dolores,
tristezas, ansiedades y desborde de dicha.
Rafael Bisquerra (2003), indica que la Educación, en su concepto más amplio, debe
preparar para la vida, teniendo como finalidad el desarrollo humano, y esto implica
responder a las necesidades sociales. Para Bisquerra, la Educación Emocional es “un
proceso educativo, continuo y permanente, que pretende potenciar el desarrollo de las
competencias emocionales como elemento esencial del desarrollo integral de la
persona, con objeto de capacitarle para la vida. Todo ello tiene como finalidad aumentar
el bienestar personal y social”.
¿Qué sabemos sobre la educación emocional pre-escolar en Chile? Tal vez, una de las
orientaciones más alarmantes y que a la vez nos invitan a trabajar con entusiasmo en
esta temática, es presentada por Rescorla y cols. (2011), quien realizó un análisis en 24
países para evaluar y comparar los problemas conductuales y emocionales de pre-
escolares, encontrando que los pre-escolares chilenos presentaron los mayores
puntajes en el total de problemas (que consideran evaluaciones en distintos ámbitos).
Entonces, no hay duda de la urgente necesidad de abordar las emociones que nacen en
el proceso de desarrollo de los niños y niñas en el primer ciclo de su etapa escolar y
necesidades que fluyen desde ella. Hay cambios significativos que surgen de las
emociones y necesidades más profundas como son: la adaptación y la inclusión, los
vínculos, entre otros.
Sin duda, en este nivel inicial, habrá niños y niñas que asumirán de mejor manera los
desafíos y dificultades que les presenta el nuevo territorio y espacio humano. No
obstante, no son los recursos individuales de cada niño o niña lo que está en juego aquí,
sino un sistema que acoja la singularidad y promueva una propuesta flexible,
significativa y acertada a las reales emociones y necesidades del grupo humano.
Debemos distinguir en este proceso, que la educación, tiene como objetivo principal y
esencial el desarrollo humano positivo, armonioso, genuino. (Delors “La Educación
Encierra un Tesoro, pág nº9)
Se deben escoger estrategias para potenciar una educación que enseñe a vivir mejor
mediante el conocimiento, la experimentación y la formación de una cultura personal.
Donde todos los talentos y capacidades de creación estén en busca de un proyecto
personal. Donde se comprenda primero a sí mismo para luego poder comprender al otro
con sus particularidades. En este mismo sentido, la Unesco nos presenta 4 Pilares de la
Educación que son (Delors, Jacques1994, La Educación Encierra un Tesoro, pág.
Nº36):
Aprender a Conocer: comprendiendo el mundo que lo rodea, para poder vivir con
dignidad. Su justificación es el placer de comprender, conocer, descubrir.
Estos 4 Pilares del conocimiento, deben ser atendidos igualitariamente para que la
experiencia de la educación sea globalizadora y que dure toda la vida.
3.- Autocontrol, a través del cual, se motivará al niño y niña a que aprenda a gestionar
sus emociones, canalizándolas de manera efectiva y positiva.
En Chile, la Fundación Liderazgo Chile, pionera en educación emocional, plantea que la
importancia de comenzar la educación emocional desde el tramo de sala cuna se
fundamenta desde una mirada de las neurociencias, que se basa en comprender que
las funciones intelectuales del niño son entendidas desde el mundo emocional y que
esta dimensión es fundamental en el proceso del aprendizaje (FLICH, 2021a).
Por otra parte, un programa de educación emocional puede traer diversos beneficios
tanto a nivel personal como social. En este sentido, PamGershon y John Pellitteri
(2018), evaluaron distintos programas de educación socioemocional en pre-escolares,
encontrando mejoras cuantificables en habilidades socioemocionales, reducción de
conductas de riesgo y mejoras en el desempeñoo académico.
Por otra parte, es clave el trabajo que se desarrolle con las familias: padres, madres y
cuidadoras, deben también recibir herramientas que les permitan criar y nutrir cuerpo y
alma. El cómo se cría, muchas veces tiene directa relación al cómo fuimos criados, y si
esa crianza carga con estímulos negativos, se corre el riesgo de que las nuevas
generaciones reciban también esta pesada carga. Miles de personas alrededor del
mundo, incluso en el ámbito de la educación, creen que “un buen palmazo no le hace
mal a nadie”, “un buen palmazo ayuda a enderezar a los niños porfiados” o que “a los
niños de ahora les hace falta un palmazo (chancletazo, correazo) para que aprendan a
respetar a la autoridad”. La educación emocional, puede transformarse en un elemento
protector de la seguridad afectiva y emocional, incentivando el desarrollo de un apego
seguro para las nuevas generaciones y asegurándose justamente de dejar atrás mitos y
estructuras antiguas de la crianza que no tienen ningún sustento biológico o psicológico
y que generan todo lo contrario a lo que algunas personas creen.
Diversos autores (John Bowlby 1980, 1973, 1969) coinciden en que la fase de apego y
vinculación temprana se relacionan a futuro con las conductas de las personas y como éstas
se desarrollan en la sociedad. Como proyecto queremos promover desde la génesis de los
procesos educativos la formación emocional, de una manera pertinente y acorde a las
realidades locales de cada institución, con una mirada ética y con altas expectativas en las
personas con las que deseamos desarrollar esta iniciativa.
Dámasio António (2018). “El extraño orden de las cosas: La vida, los sentimientos y la
creación de las culturas”. Ediciones Destino ISBN: 9788423353415