UNIVERSIDAD TECNOLÓGICA DEL PERÚ

EL PROGRAMA ‘’HABLANDO HUEVADAS’’ ATACA A LAS PERSONAS CON

DISCAPACIDAD AUTISMO

Docente

SANDRA MILENA CESPEDES MELO

INTEGRANTES

CARLITA DIANELY VÁSQUEZ DELGADO

JULIO EMILIO COLONIA MACUCACHI

LIZVANNI LISSETH LEÓN MENDOZA

MARYORY BETZABETH ANAYA LOPE

SHELVIN SCARLETH VASQUEZ GUILLEN

Lima, 4 DE FEBRERO DE 2023

 EL PROGRAMA ‘’HABLANDO HUEVADAS’’ ATACA A LAS PERSONAS CON

DISCAPACIDAD AUTISMO

Los comediantes Jorge Luna y Ricardo Mendoza, los cuales dirigen el programa “Hablando

huevadas” fueron criticados por la falta de ética que presenta el programa, ya que en uno de

sus shows se burlaban de las personas con discapacidad para ser más específicos hacia las

personas con autismo. A pesar de que se sabe desde un inicio que el programa usa el «humor

negro» como medio para entretener a sus espectadores, sin embargo, en varias ocasiones sus

chistes son criticados debido a que agreden la dignidad humana. Por consiguiente,

nuevamente la Defensoría del Pueblo expresó su desagrado hacia el programa y pidiendo

apoyo de Conadis y la Municipalidad de Miraflores. Pese a todo lo expuesto, las autoridades

no se han hecho presente y el programa sigue transmitiendo con normalidad y a su vez

ganando más espectadores. Por lo tanto, ¿Cree que la ética y los derechos humanos están

siendo afectados? Sí, se vulneran los derechos humanos y la ética, ya que la integridad física,

psíquica y moral de las personas está siendo afectada. A continuación, argumentaremos

nuestra postura basándonos en los derechos humanos, dilema de la ética, de que va la ética y

límites éticos.

En primer lugar, el programa “Hablando huevadas”, dirigido por Jorge Luna y Ricardo

Mendoza, han sido duramente criticados debido a que se evidenció comentarios

discriminatorios hacia las personas con discapacidad, pues este no sería el primer caso. Son

varias víctimas que usan su discapacidad como burla por parte de estas personas que al

parecer no están del todo informas sobre esta condición, por consiguiente, generen

estereotipos erróneos.

Por otro lado, estos personajes carecen de límites éticos, aunque sabemos que todos tenemos

derecho a la libertad de expresión, pues en este caso se han excedido en su libre expresión

generado que no haya respeto por la integridad de aquellas personas que padecen de autismo.
Asimismo, para la defensoría del pueblo y la población causa indignación de cómo estas

personas que son figuras públicas realizan este tipo de comentarios desatinados. Que en lugar

de ello debería ser tema de conciencia. Tal como lo menciona Miguel Giusti “Esta

experiencia de la mesura en la convivencia humana, y la convivencia de los límites que no

deberían sobrepasarse para hacerla posible”. Los límites son necesarios porque ayudan a

respetar la integridad humana.

En segundo lugar, si bien es cierto que en la mayoría de las ocasiones las personas en estado

de vulnerabilidad brindan su consentimiento al programa para ser objeto de burla, se debería

regular y moderar el tipo de “bromas” que se hace. En este contexto, en múltiples programas

se evidencia que público menor de edad acude a estos shows y por supuesto también lo

consumen digitalmente. De modo que se normaliza la denigración hacia las personas en

estado de vulnerabilidad, puesto que no todas son propensas a tomar con humor su condición.

“Hablando huevadas” debe tener en cuenta el impacto social que genera actualmente debido

al volumen masivo de gente que los sigue en redes, de manera que si bien es cierto su tipo de

humor tiende a ser oscuro y gozan de libertad de expresión, se debe tomar este derecho con

ética y responsabilidad.

Las personas vulnerables son personas como todas las demás, quienes lamentablemente

nacen en condiciones desfavorables, quienes día a día luchan por llevar sus vidas con

normalidad. Son casos dignos de admiración y una fuente amplia de inspiración, ya que con

menos recursos llegan a lograr lo que muchas personas “normales” no pueden.

En tercer lugar, la Defensoría del Pueblo rechaza expresiones emitidas hacia el autismo por

los conductores de ‘Hablando huevadas’, este se pronunció mediante sus redes sociales

mostrando su rechazo y pidiendo a las autoridades a tomar cartas en el asunto, los

conductores hicieron referencia al autismo asegurando que Jorge Luna había ‘descubierto’
que era autista por medio de un test de internet, esta explicación es la que ha sido rechazada

por la Defensoría del Pueblo, pues son los especialistas quienes deben encargarse de los

diagnósticos, este tipo de comentarios traen consecuencias, ya que con su llamado ‘’ humor’’

dañan a las personas que lo padecen.

La ética, pues, tiene una estrecha relación con los diversos y múltiples modos de vivir de las

personas, con las distintas maneras en que se expresa la vida humana, con lo que significa ser

humano; y eso, muchas veces, puede parecer indefinible, innombrable, señala Cuenca (2015).

Lo que nos comparte el autor es que cada ser humano al nacer tiene que convivir con otros y,

partir de esto, aprender a comprender, sin desestimar, las diferentes condiciones y formas de

expresión de los demás.

También este ‘’programa’’ desinforma a la audiencia sobre el TEA, cabe recalcar que en los

últimos años existe más información acerca del autismo a diferencia de otros, pese a que no

se realizan estudios con frecuencia, por ello, se debe trabajar como sociedad para comprender

y capacitarnos sobre este trastorno; el escaso número de profesionales, la poca o nula

planificación hacia la educación inclusiva y la información sobre el autismo son algunos de

los principales puntos que se deben atender con prioridad.

Asimismo, los comentarios emitidos por los conductores de este ‘’ programa’’ exponen a las

personas con TEA a la discriminación por su capacidad intelectual, por el hecho de padecer

de ello los miran como ‘’objetos de burla’’, las personas autistas deben ser respetadas,

aceptadas y valoradas en nuestras sociedades, esto puede lograrse mediante el respeto, la

protección y la realización de sus derechos y libertades fundamentales.

Lo de saber vivir no resulta tan fácil porque hay diversos criterios opuestos respecto a qué

debemos hacer, señala Savater (1991). Lo que nos transmite el autor es que cada ser humano

vive de diferentes maneras libremente y a pesar de que existen fuerzas terceras que amenazan
nuestra libertad, como las enfermedades, no significa una limitación o una forma de abuso

para que terceros se burlen o abusen de la condición presente.

En conclusión, la discapacidad no debería de ser tema de burla, ya que dichas mufas generan

discriminación y prejuicios hacia aquellos que presenta estas discapacidades. El humor negro

hacia dichas personas puede llegar a incomodarlas y sentirse excluidas con ese tipo de

bromas debido a que se rompe límites éticos y abusan vacíos legales como es la libertad de

expresión, puesto que dicha libertad está siendo usada para sin ética ni responsabilidad. Se

recomienda que en estos casos dar un llamado de atención y no alentar a la mufa. Se sugiere

informar correctamente las condiciones TEA y tomarlo como un tema serio. Por último, es

recomendable que el público sea más empático y no apoyen a artistas que usas a las personas

como objetos de burla. Opinamos que, ningún derecho es absoluto, por ende, el derecho a la

libertad de expresión puede ser limitado, cuando afecta a otros derechos, de forma que

denigren la integridad de otro, entonces el humor negro no debería de ser usado como cortina

de humo y al igual que los derechos se regulan, el programa también debe limitarse y

regularse, ya que todas las personas merecen respeto independientemente de sus condiciones

diferentes a lo considerado como algo “normativo”.

Referencias
Cuenca, M. (2015). El dilema de la ética: entre el ser y el deber ser, la libertad y el
reconocimiento del otro.
El Congreso. (1959, 09 de Diciembre). LA DECLARACIÓN UNIVERSAL DE LOS
DERECHOS HUMANOS. Lima: NACIONES UNIDAS.
Giusti, M. (2007). El sentido de la ética. Debates de la Ética contemporánea. En M. Giusti.
Savater, F. (1991). Ética para Amador, capítulo 1.