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Using drawing in play therapy: A jungian approach

Uso del dibujo en la terapia de juego: un acercamiento jungiano

Uso de dibujos en la terapia de juego

La importancia del juego en los niños recae en que esta es la forma en que ellos pueden
explorar el mundo externo, desarrollando así sus capacidades y habilidades. Por otra parte, el
juego es su forma de externalizar su mundo interno, ya que no cuentas con las habilidades
verbales necesarias para hacerlo. De este el juego viene a ser el medio en que los niños pueden
conectar el mundo externo y su mundo interno.

Diversos autores plantean la importancia de dejar que las terapias de juego sean guiadas
por los niños, otorgándoles un espacio seguro en el que se sientan libres de expresar como se
sientes, ya que ese es el foco, la auto-expresión. El terapeuta debe reflejarle al niño lo que salga
durante del juego, dejando así que el niño pueda hacer el proceso de resolver su problema. El arte
y el juego serían una forma de automonitorearse y autoevaluación, puesto que el proceso de crear
implica el desarrollo de habilidades interpersonales, mejorar el comportamiento, reducir el estrés,
aumentar la autoestima y la atención en sí mismo, creando así el camino hacia el insight.

El uso e importancia del dibujo en terapia recae principalmente desde el psicoanálisis (en
1800), al ser visto como un medio de traer al consciente material inconsciente, siendo el dibujo
una herramienta proyectiva que permite conocer las percepciones, actitudes o personalidad del
niño.

Dibujos jungianos

Jung plantea que el fin de la terapia es “hacer consciente el material inconsciente,


haciéndolo más entendible para el paciente”, estableciendo un equilibrio entre ambos. Más que la
técnica utilizada, la importancia recae en la comprensión que tiene el terapeuta sobre “la
naturaleza de la psique, el sentido del juego, y el fin último de la terapia”. Los terapeutas jungianos
alientan al paciente a empoderarse de lo único en cada uno de ellos mismos.

El niño puede trabajar en sus conflictos (internos y externos) en la medida que el


terapeuta otorgue libertad en la sesión de juego y empatice con el niño. La meta del terapeuta es
lograr que el paciente se valore a sí mismo, empoderándose.

Al igual que en el psicoanálisis, los dibujos espontáneos son vistos como una expresión que
permite la sanación, puesto que es una comunicación proveniente desde el inconsciente. Además,
el dibujo espontáneo es una forma de expresión segura para el paciente.

Dibujos en serie

Estos permiten una visión más completa del mundo interior del niño. Idealmente incluyen
nula o poca dirección del terapeuta, pero ello depende de las necesidades del paciente. El niño
dibuja cada semana, dibujar regularmente en presencia del terapeuta, activa el potencial sanador,
se expresan los conflictos y se resuelven. Las preguntas comúnmente realizadas son: ¿cómo te
sentirías en este dibujo?, Cuéntame una historia, ¿cuál es la enseñanza de este dibujo/historia?,
Dime un sentimiento asociado al dibujo. Estas sesiones avanzan gradualmente en profundidad,
partiendo desde el reflejo hasta llegar al insight.

Dibujo del rosal

Se realiza una imaginería en la cual se visualiza un rosal, luego este debe ser dibujado lo
más parecido posible a la imagen en mente. Niños que necesiten mayor estabilidad podrían
acentuar las raíces y estructura del tronco. Capullos y flores significarían un mejor concepto de la
realidad y madurez. Rosas completamente desarrolladas indicarían una vida prospera. Cualquier
daño en el rosal implicaría algún grado de daño o perturbación emocional. Antes de realizar
interpretaciones es necesario conocer la situación actual del niño, y preguntar sobre el rosal.

Dibujos de bitácora

El paciente dibuja lo que el deseé, pudiendo agregar frases a las distintas imágenes, como
si fuera una bitácora/revista. Se le realizan preguntas al igual que en los dibujos en serie.

The shark with a Golden heart. A family aquarium


El tiburón con el corazón de oro. Un acuario familiar
El caso trata sobre Bonita y sus hijos, Frances (12) a quien la mamá describe como una
niña adorable y una gran fuente de apoyo, Samuel (10), descrito como estudioso y callado, y
Carlitos (6), a quien se describe como hiperactivo y llevado a su idea, la mamá se siente
sobrepasada por la situación con él, ya que no sabe cómo manejarlo y se encuentra agotada, por
lo cual decide iniciar el proceso terapéutico. Bonita además, relata que hace 7 años falleció su
esposo, Francisco, en un accidente, y que poco tiempo después se da cuenta de que está
embarazada. Entonces la relación con Carlitos siempre ha sido diferente, inconscientemente había
algo de rechazo (igual había estado pensando en separarse del papá antes de todo lo que paso).

Al conocer a Carlitos, la terapeuta observa que efectivamente es un niño sumamente


energético, puesto que ella también termina agotada con las sesiones, sin embargo, Carlitos
mantiene un comportamiento adecuado y cooperativo en sesiones, y siendo principalmente el
arte en donde él se expresa mayormente. Se trabajó individualmente con Carlitos, logrando
establecer un buen vínculo. Eventualmente comienza a trabajar la Terapia filial (mamá-hijo), en
donde le enseña a la madre a jugar de forma no directiva pero estructurada con su hijo. Esta
técnica primero se realiza bajo la supervisión del terapeuta, eventualmente se les pide que lo
hagan en casa.

En cuanto Bonita logra un mejor manejo con Carlitos, se inicia la terapia familiar, y se
realiza el Acuario familiar. Esta técnica la terapeuta la realiza en 3 sesiones: la 1ra es para hacer el
pez, la 2da es para decorarlo y presentarlo, y la 3ra para hacer el acuario/mar y contar una
historia. Carlitos y su familia disfrutan mucho realizando de la actividad, Carlitos decide hacer un
tiburón, lo cual preocupa a la mamá, pero al momento de decorarlo, él le incluye un corazón de
oro. También surge el tema sobre la pérdida del papá, siendo un momento muy emotivo para la
familia, en la que toman la decisión de incluirlo en el acuario de forma simbólica como una estrella
de mar.

Se hace un seguimiento de la familia. Bonita expresa que la relación con Carlitos ha


mejorado, que ahora ella es la mamá que el necesitaba que ella fuera y él necesitaba atención,
finalmente la terapeuta hace la metáfora con el corazón de oro “ahora no es solo el corazón de
Carlitos el que brilla”
*El texto en sí es más lindo, pero no me resulto lindo en el resumen :c *

Healin traumatized children: Creating illustrated storybooks in family therapy


Sanando a niños traumatizados: creación de historietas en la terapia familiar
Aquellos eventos que amenazan la salud física o emocional de un niño pueden ser vividos
como traumas, no obstantes estos suelen ser comunes, ya que pueden ser eventos ajenos a la
familia o la misma interacción que se da dentro de ella, pérdidas, situaciones
imaginadas/anticipadas, o eventos que le pueden ocurrir a otra persona. El trauma puede incluir
una fuerte combinación de componentes emocionales o conductuales, hasta dificultades
psicológicas como pesadillas o ansiedad, entre otras.

Si bien existe un debate respecto a cómo debería desarrollarse la terapia frente al trauma,
existe el consenso en ciertos puntos:

1) El evento/estimulo no debe estar sucediendo.


2) Disponibilidad de apoyo emocional y apego en las relaciones.
3) Una terapia específica para el trauma, ello incluye:
- Alentar a la expresión de emociones asociadas al trauma
- Clarificar las ideas que puedan llevar a una atribución negativa sobre si o los
demás.
- Enseñar sobre prevención
- Desmitificar el estigma asociado y el aislamiento, a través del conocimiento de
la experiencia de otras víctimas
4) Re-experienciar el trauma en un ambiente seguro, con el fin de promover la habituación a
la ansiedad, desarrollando estrategias de afrontamiento.

Para trabajar el trauma en los niños, se requiere que estos mantengan un rol activo durante la
terapia, no obstante, con los niños en la etapa preescolar aún no han desarrollado por completo
sus habilidades verbales, esto resulta difícil, ya que el componente comunicacional adquiere gran
importancia durante la terapia. Además, es posible que a temprana edad tampoco sea pueda
acceder a las memorias traumáticas mediante el lenguaje.

Desarrollo infantil
*Empieza esta parte con una explicación biológica que mucho no entendí, pero dice algo así como que para acceder a la
memoria en los niños se hace a través de lo visual, o sea, dibujos. Ello por las funciones cerebrales que tienen los
pequeños y ahí ya fue demasiada biología para mi*

Entre los 2 – 7 años, el desarrollo cognitivo se caracteriza por la capacidad de comenzar a


usar símbolos, como el juego simbólico, la imitación, dibujar, imaginación, y el lenguaje. Esto es
resultado del desarrollo del hemisferio izquierdo del cerebro a los 3 años. El desarrollo de la
memoria declarativa/verbal (la que almacena los hechos) y la habilidad de establecer secuencia
entre los hechos, sucede desde los 2 años y medio aprox. La habilidad de hablar sobre el estado
emocional surge en los años posteriores. La comprensión del tiempo ocurre entre los 3.5-4 años, y
lograr establecer relaciones temporales entre los 5 y 11 años. No es si no hasta los 10-12 años en
que se desarrolla el pensamiento abstracto, y los niños pueden pensar más allá de lo que sucede o
sucedió.

Es por ello que acceder a recuerdos a través del lenguaje sería prácticamente imposible en
niños menores, además que, con la aparición del estrés o la ansiedad sus capacidades tienden a
disminuir o bloquearse.

Unirlos a la conversación familiar

Ante tal escenario, es que los terapeutas han desarrollado diversas técnicas para incluir a
los niños en las conversaciones, como lo es el uso del arte, títeres, dibujo, role playing, juego,
entre otros. El uso de muñecos debe ser a partir de los 3.5-4 años, ya que desde esas pueden verse
representados en un objeto.

El juego es visto como un proceso sanador, visto como una forma en que los niños puedan
traer sus emociones a la superficie y enfrentarlas, logrando controlarlas o abandonarlas. El juego
no es directivo, y el terapeuta se encarga de reflejar el juego y emociones para que el niño pueda
hacer el insight.

El uso del arte y los dibujos

Los niños tienden a almacenar la experiencia traumática a través de imágenes, están


pueden ser expresadas mediante el arte, es aquí en donde la espontaneidad de los niños es vista
como un recurso a la hora de trabajar en terapia familiar. Dibujar es agradable para los niños, por
lo cual logra que se puedan asociar otras emociones al trauma, facilitando así la desensibilización y
proceso de elaboración de éste. Es un espacio transicional que le devuelve el control de la
situación al niño y la sensación de autoeficacia. Es también a través del dibujo donde se puede
trabajar la narrativa con la familia, creando una narrativa coherente sobre el trauma pasado. Crear
una historieta en familia ayuda al niño a ordenar secuencialmente los hechos y explorar las
emociones asociadas.

Historia de las “historietas”

En los años 50 para preparar a los niños que serían dados en adopción es que se empiezan
a trabajar los “libros de vida”, en donde el niño junto con su cuidador agregaban datos desde el
nacimiento al presente, incluyendo cartas, imágenes, premios, etc., y las emociones,
pensamientos, asociados a estos eventos. No es sino hasta los años 70 en que se comienza a
considerar como una técnica específica de terapia, que permitía la elaboración del trauma y
entregaba al niño la sensación de valer. En los años 80 se crea la técnica de “jugar a dibujar una
historia”, con el fin de comprometer más a los niños en la terapia al involucrar las técnicas de
dibujo y contar una historia. En esta técnica dibujan el niño y su terapeuta. Lograr recordar el
evento tal como fue, considerar las emociones asociadas, y lograr otorgarle un significado, es lo
que resulta ser sanador y permite la resolución del trauma. Compartir las imágenes y experiencia
con la familia resulta en una “revelación conjunta”, lo cual disminuye los sentimientos de
alineación, siendo particularmente importante para los niños, quienes tienden a sentirse solos con
sus problemas y se culpan a sí mismos por lo sucedido.
Uso de historietas en niños con traumas

La técnica comienza a utilizarse en los hospitales infantiles psiquiátricos, con niños de


entre 3 – 14 años, con traumas complejos, dificultades emocionales, conducta inadecuada,
dificultades académicas, problemas familiares, violencia doméstica, etc. Estaban siendo tratados
de forma individual o en conjunto con sus familias, y algunos iban a clases durante el día. Qué
tanto la familia logra conectar con actividades de arte es observable desde la primera actividad, y
de ser positivo se les explica que se trabajara con el arte como una forma de elaborar el trauma y
comprender como se organizan en la familia para trabajar juntos.

Las historietas se trabajan en papel tamaño carta (se puede negociar con la familia el
tamaño de la hoja), que eventualmente se juntaran para hacer un libro. Las reglas básicas para
trabajarlo en familia es que todos debe participar, respetar los dibujos, las diferentes vivencias y
diversos puntos de vista. No se permite que ningún familiar cambie o corrija el dibujo de otro. Es a
partir de las diferencias que comienza la conversación. La historia se puede comenzar desde un
punto anterior al trauma (por ejemplo, cómo se conocieron los papás) con el fin de disminuir la
ansiedad en el niño y disfrutar de la actividad. Cada página representa un segmento de la historia,
generalmente solo se hacen dibujos o se puede describir brevemente algún hecho en la historieta.
El terapeuta facilita el proceso realizando preguntas al niño y su familia. El uso de esta técnica le
da estructura a las sesiones, lo cual disminuye la ansiedad en las familias y le otorga mayor sentido
de control al niño en el proceso terapéutico. Finalizada la terapia, el libro el niño puede llevárselo
a casa. En el caso de padres separados (cuando no se puede trabajar en conjunto), se puede crear
un libro con cada uno de ellos.

Caso 1 Eli (4): Eli es un niño que vive con su mamá y la nueva pareja de esta. Ha sido expulsado del
jardín y derivado a terapia por rabietas incontrolables, agresividad hacia su familia, no escuchar
instrucciones, incapacidad para relacionarse con sus compañeros, labilidad emocional,
hiperactividad y dificultades con el sueño. Los roles se encontraban invertidos en su casa, siendo él
quien establecía las reglas. Eli fue testigo de la relación caótica y violenta entre sus papás (papá
con ideación suicida, autolesiones, intento suicida, VIF grave del papá a la mamá). El 1er capítulo
de libro fue sobre la relación entre los papás antes de que naciera Eli, lo cual le permitió a él
escuchar a su mamá hablando de forma positiva sobre el papá. El 2do capitulo trato sobre Eli y su
mamá tras la separación. Eli tendía a dibujarse entre sus papás, grande y sin brazos (no tener
poder sobre la situación). Durante las sesiones del 2do capitulo aumento la ansiedad de Eli. El 3er
capitulo trato sobre el acoso del papá hacia la mamá tras la separación, en donde Eli expreso el
miedo que sintió por la integridad de la mamá. La mamá ayudo a Eli a clarificar los eventos
ocurridos durante ese periodo, además ello le ayudo a ella a entender las reacciones emocionales
de su hijo. El 4to capitulo trato sobre la nueva pareja de la mamá y su integración a la familia, ya
que Eli se sentía excluido. El utilizar esta técnica fue útil para explicarle a Eli las situaciones que los
adultos vivieron de una forma más simple y que él pudiese entender, junto con expresar sus
emociones.

Caso 2 Lee (6): Lee vivía con sus papás y su hermano menor de 3 años, todos de origen chino. Fue
derivado a terapia desde el colegio por diversos problemas como agresividad, no seguir
instrucciones, dificultad para mantener la concentración, etc. Su historia estuvo marcada por
grandes separaciones (de familiares) por irse de su país, de China a Australia, en donde fueron
tiempos difíciles ya que sus papás pasaban poco tiempo con el mientras intentaban adaptarse e
integrarse a este nuevo sistema. Los padres no eran conscientes de las necesidades emociones de
Lee, manteniendo una relación más bien distante. Lee desarrollo una depresión. Sus síntomas se
acrecentaban cuando su padre debía viajar por su trabajo. El libro de Lee comenzaba en China
cuando sus padres se conocieron, se habló de las tradiciones de su país. El 2do capitulo hablo de la
separación de sus abuelos por el cambio de país, ello le ayudo a los papás a entender las
emociones de Lee asociadas a las separaciones. Eventualmente esto llevo a los papás a observarse
a sí mismos y ver cómo ellos también se habían visto afectados por la migración. La mamá
aprendió a contener a Lee.

Caso 3 Bradley (11): Un niño que vivía con su mamá y padrastro. Fue derivado por sintomatología
ansiosa, ideación suicida, enuresis, dificultades en el sueño y falta de habilidades sociales. A los 2
años fue diagnosticado con TDAH, y a los 3 años sus papás se separaron debido a VIF de la cual
Bradley fue testigo, desde entonces no tuvo contacto con su papá. Hacer el libro ayudo al niño a
observar su ansiedad y entender porque habían ocurrido tales eventos. Bradley mantiene cierto
rechazo y resistencia ante la actividad, hasta que en el 1er capitulo la madre habla sobre su
nacimiento y la relación con su papá, captando la atención de Bradley. El 2do capitulo trato sobre
la separación, cuando la madre junto con Bradley abandona el hogar. Eventualmente se tratan los
temas de alcoholismo e ideación suicida de la madre, ante lo cual presenta resistencia y se debe
pausar la actividad por varias sesiones. Más adelante comprende como sus problemas están
afectando a su familia, y decide iniciar un proceso terapéutico individual.

Dificultades encontradas

Esta técnica resulta de gran ayuda para los terapeutas independiente de su orientación
teórica. En la experiencia del autor, esta técnica es muy compatible con la terapia estructural y la
terapia familiar (Milan). Los dibujos se pueden utilizar como una forma de ayudar a la familia en su
narrativa, y ayudar a los niños a acceder su memoria, utilizando los conocimientos de la familia
para clarificar y dar sentido a memorias traumáticas fragmentadas o confusas.

Si bien las familias tienden a disfrutar de esta actividad, también es posible encontrar
dificultades. Puede ser que algunas familias se encuentren demasiado ansiosas, tengan miedo de
ser analizados por sus dibujos, o no validen técnicas que no sean médicas. Se ha logrado si,
trabajar con padres ansiosos al explicarles que esta es una técnica integral para el proceso de
sanar, que les permitirá encontrar soluciones. Si presentan resistencia a las actividades artísticas,
entonces es mejor buscar técnicas que estén más asociadas a sus creencias, intereses.

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