Está en la página 1de 11

UNIVERSIDAD DE GUAYAQUIL

FACULTAD DE CIENCIAS MÉDICAS


CARRERA DE MEDICINA

CÁTEDRA DE UROLOGÍA

.
TEMAS:

TUMORES GENITO-URINARIOS:
TUMORES DEL TRACTO URINARIO SUPERIOR,
MEDIO E INFERIOR, TUMORES GENITALES.

INTEGRANTES:
CRUZ CONTRERAS SHEYLA CRISTINA
DIAZ SANTILLÁN JOSÉ ALEXANDER
ESTRADA CEVALLOS CHRISTIAN
FRANCO BOURNE ARIANA LISSETTE
GARCÉS MARTÍNEZ PAMELA NICOLE
GARZÓN MACIAS NELLY SORAYA
IDIARTE VILLACÍS KATTIA ELIZABETH
JARAMILLO ALALEO MARCO TULIO

GRUPO 10 – SUBGRUPO 2
DOCENTE:
DR. SÁNCHEZ VILLACRÉS FRANK ROGER
DÉCIMO SEMESTRE
2022-2023 CII
TUMORES GENITOURINARIOS
TUMORES DEL TRACTO URINARIO SUPERIOR
NEOPLASIS PARENQUIMATOSAS RENALES
ONCOCITOMA RENAL
El oncocitoma renal tiene un espectro de comportamiento que va de benigno a
maligno. Compuesto por células epiteliales grandes con citoplasma eosinofílico con
gránulos finos, los oncocitomas se presentan en varios órganos y sistemas de
órganos
ANGIOMIOLIPOMA
El angiomiolipoma es un tumor benigno raro del riñón que se ve en dos poblaciones
clínicas distintas. Los angiomiolipomas se encuentran en 45 a 80% de los pacientes
con esclerosis tuberosa y suelen ser bilaterales y asintomáticos.
OTROS TUMORES RENALES BENIGNOS RAROS
Algunos otros tumores renales benignos son muy raros, como leiomiomas,
hemangiomas, lipomas y tumores de células yuxtaglomerulares.
ADENOCARCINOMA RENAL (RCC)
Las causas del adenocarcinoma renal son desconocidas. Se han mencionado entre
ellas a las exposiciones ocupacionales, las aberraciones cromosómicas y los genes
supresores de tumores. Presenta la tríada descrita de manera clásica de hematuria
macroscópica, dolor en la fosa renal y masa palpable.
TRATAMIENTO
A. Medidas específicas.
Enfermedad localizada: Nefrectomía radical.
Enfermedad diseminada: Cirugía, radioterapia, modificadores de la respuesta
biológica, tratamiento dirigido
NEFROBLASTOMA (TUMOR DE WILMS)
Es el tumor renal sólido más común de la infancia, y representa casi 5% de los
cánceres infantiles, Los tumores suelen ser unicéntricos, pero ocurren en cualquier
riñón con la misma frecuencia.
Entre los síntomas comunes a la presentación se incluyen dolor y distensión
abdominales, anorexia, náuseas y vómito, fiebre y hematuria.
TUMORES RENALES SECUNDARIOS
El riñón es un sitio frecuente de diseminación metastásica de tumores sólidos y
hematológicos. La enfermedad metastásica secundaria en los riñones tiende a ser
un evento tardío. El tratamiento está determinado por la respuesta de la neoplasia
primaria
CARCINOMAS VESICALES
INCIDENCIA
El de vejiga es el segundo cáncer más común de las vías genitourinarias. Es
responsable de 7% de los nuevos casos de cáncer en hombres y 2% en mujeres. La
edad promedio de diagnóstico es 65 años. En ese momento, casi 75% de estos
canceres se localizó en la vejiga; 25% se han diseminado a los ganglios linfáticos
regionales o a sitios distantes.
Factores de riesgo
El tabaquismo es responsable de 65% de los casos en hombres y 20 a 30% en
mujeres. En general, los fumadores tienen casi 2 a 3 veces más riesgo de padecer
cáncer vesical que los no fumadores y, al parecer, está relacionado con la dosis. Se
piensa que los causantes son alfa y beta-naftilamina, que se secreta en la orina de
los fumadores. Quienes trabajan con sustancias químicas, tintas, hule, petróleo, piel
y en imprentas tienen mayores riesgos. Entre los carcinógenos ocupacionales
específicos se incluyen bencidina, beta-naftilamina y 4-aminobifenil y el periodo de
latencia entre exposición y desarrollo del tumor puede ser prolongado. Pacientes
que han recibido ciclofosfamida para el tratamiento de varios carcinomas también
están en mayor riesgo. llevan al desarrollo de cáncer vesical, pero es probable que
sean múltiples y pueden relacionarse con la activación de oncogenes y la
inactivación o perdida de genes supresores de tumores, La pérdida del cromosoma
9 en varios tumores de un paciente individual
apoya el concepto de que cambios genéticos en el cáncer vesical representan un
“defecto de campo” entre otros.
Histopatología
Casi 98% de todos los canceres vesicales son epiteliales, y la mayor cantidad de
ellos son carcinomas de células de transición (TCC). Casi 5% son adenocarcinomas
o carcinomas epidermoides.
Urotelio normal
El urotelio normal está integrado por 3 a 7 capas de epitelio de células de transición
que descansa sobre una membrana basal compuesta por matriz extracelular. Las
células epiteliales tienen un aspecto variable: las células basales son células de
proliferación activa que descansan en la membrana basal; las células luminales, tal
vez la característica más importante del epitelio vesical normal, son células más
grandes con aspecto de paraguas que están unidas entre sí por uniones
intercelulares herméticas. Mas allá de la membrana basal esta un tejido conectivo
liso, la lámina propia, en que pueden identificarse de manera ocasional fibras de
musculo liso. Estas fibras deben distinguirse de elementos musculares más
profundos y extensos que definen la verdadera capa muscular propia.
B. Papiloma/PUNLMP
La Organización Mundial de la Salud identifica al papiloma como un tumor papilar
con un fino tallo fibrovascular que da soporte a la capa epitelial de las células de
transición con grosor y citología normales (Epstein, et al., 1998). A estos se les
denomina también neoplasias uroteliales papilares de bajo potencial maligno o
punlmp. Los punlmp son un trastorno benigno raro que no requiere tratamiento
agresivo.
C. Carcinoma de células de transición
Casi 90% de todos los canceres vesicales son tcc. Con más frecuencia, estos
tumores aparecen como lesiones papilares, exofiticas; con menos frecuencia,
pueden ser sésiles o ulceradas. Mientras que estas últimas suelen ser superficiales,
las sésiles a menudo producen invasión. cis es reconocible como epitelio plano,
anaplásico. El urotelio carece de polaridad celular normal, y las células contienen
núcleos grandes, irregulares e hipercromáticos con nucleolos de gran tamaño.
D. Carcinoma que no afecta a células de transición
1. Adenocarcinoma: los adenocarcinomas representan < 2% de todos los canceres
vesicales. Los adenocarcinomas primarios de la vejiga pueden verse precedidos por
cistitis y metaplasia. En el aspecto histológico, los adenocarcinomas secretan moco
y pueden tener patrones glandulares, coloides o de sello en anillo. Mientras que los
adenocarcinomas primarios suelen surgir a lo largo del piso de la vejiga, los que
surgen del uraco se presentan en el domo. Ambos tipos de tumor suelen localizarse
en el momento del diagnóstico, pero a menudo hay invasión muscular. La
supervivencia a cinco años suele ser < 40%, a pesar del tratamiento quirúrgico
agresivo.
2. Carcinoma epidermoide: el carcinoma epidermoide representa entre 5 y 10% de
todos los canceres vesicales en Estados Unidos y suele relacionarse aquí con
antecedentes de infección crónica, cálculos vesicales o uso crónico de sondas.
HISTORIA NATURAL Y SELECCIÓN DE TRATAMIENTO
TUMORES DEL TRACTO URINARIO INFERIOR
HIPERPLASIA PROSTÁTICA BENIGNA BPH
La bph es el tumor benigno más común en hombres, y su incidencia está
relacionada con la edad. La prevalencia de bph histológica en estudios de autopsias
se eleva a casi 20% en hombres entre 41 y 50, a 50% en hombres de 51 a 60, y a >
90% en hombres mayores de 80 años.
DATOS CLÍNICOS
Los síntomas de bph pueden dividirse en obstrucción y de irritación. Los síntomas
obstructivos son dificultad para iniciar la micción, reducción de la fuerza y el calibre
del chorro, sensación de vaciado incompleto de la vejiga, doble vaciado (micción por
segunda vez antes de 2 horas después de la micción previa), esfuerzo para orinar y
goteo posterior a la micción. Los síntomas de irritación son polaquiuria, tenesmo
vesical y nocturia.
El cuestionario de autoaplicación desarrollado por la American Urological
Association (aua) es válido y confiable para identificar la necesidad de tratar a los
pacientes y vigilar su respuesta al tratamiento.
DIAGNÓSTICO
Se requiere un análisis de orina para excluir infección o hematuria y la medición de
la creatinina sérica para evaluar la función renal, la imagenología de las vías
superiores (ecografía renal o urografía mediante tomografía computarizada, la trus
es útil para determinar el tamaño de la próstata en hombres que planean someterse
a cirugía prostática, la cistoscopia no se recomienda por rutina para determinar la
necesidad de tratamiento, pero puede ayudar a elegir el método quirúrgico en
pacientes que optan por tratamiento invasor, la medición de la velocidad de chorro,
la determinación de orina residual posmicción y los estudios de flujo de presión se
consideran opciones. Las cistometrografías y los perfiles urodinámicos están
reservados para pacientes en quienes se sospecha enfermedad neurológica o
quienes han respondido mal a la cirugía de próstata.
TRATAMIENTO
Tratamiento quirúrgico
1. Resección transuretral de la próstata
2. Incisión transuretral de la próstata
3. Vaporización transuretral de la próstata
(TUVP)
4. Enucleación de la próstata con láser de
holmio (HoLEP)
5. Prostatectomía simple (subtotal)
CARCINOMA DE PRÓSTATA
DATOS CLÍNICOS
SÍNTOMAS
La gran mayoría con CaP en etapa temprana son asintomáticos. La presencia de
síntomas a menudo sugiere enfermedad con avance local o metástasis. Las quejas
de micción obstruida o irritante pueden deberse a crecimiento local del tumor en la
uretra o el cuello de la vejiga o de su extensión directa en el trígono de la vejiga. La
metástasis en los huesos puede causar osteodinia.
ANTÍGENO ESPECÍFICO DE LA PRÓSTATA Y OTROS MARCADORES
TUMORALES
Un psa “normal” se ha definido por tradición como ≤ 4 ng/ml, y el valor predictor
positivo de un psa sérico entre 4 y 10 ng/ml es de 20 a 30%. En el caso de niveles
mayores de 10 ng/ ml, el valor predictor positivo aumenta de 42 a 71.4%.
DIAGNÓSTICO Y EVALUACIÓN

 BIOPSIA DE PRÓSTATA
 GRADUACIÓN Y ESTADIFICACIÓN: El de Gleason es el sistema de
graduación más empleado. Se basa en el aspecto bajo el microscopio de
baja potencia de la arquitectura glandular.
IMAGENOLOGÍA
1. Ecografía transrectal
2. Resonancia magnética nuclear (MRI) endorrectal
3. Imagenología axial (CT, MRI)
4. Gammagrafía ósea
TRATAMIENTO
CÁNCER LOCALIZADO
A pesar de las controversias continuas, lo que queda claro es que muchos hombres
con tumores de bajo riesgo son candidatos a vigilancia activa; quienes tienen
tumores con riesgo bajo a intermedio deben recibir monoterapia local (cirugía o
radiación) y quienes tienen tumores de riesgo más elevado suelen necesitar
tratamiento multimodal, ya sea por radiación con tratamiento hormonal o cirugía
seguida de manera selectiva por radiación, dependiendo de la patología y de
resultados anteriores de psa.
METÁSTASIS
Tratamiento endocrino inicial: Se sabe bien que la mayor parte de los carcinomas
prostáticos son dependientes de hormonas y que la gran mayoría de los hombres
con CaP metastásico responden al principio a varias formas de privación de
andrógenos. El uso de una clase de fármacos (agonistas de lhrh) ha permitido la
inducción de la privación de andrógenos sin orquiectomía o administración de
dietilestilbestrol.
TUMORES DE URETRA
Los tumores de uretra, benignos y malignos, en adultos de ambos sexos, son una
entidad poco frecuente.
EPIDEMIOLOGÍA
Tanto las neoplasias benignas como malignas de la uretra son raras. Representan
menos del 1% de las neoplasias. Su pronóstico depende de la localización
anatómica y grado de invasión.
FACTORES DE RIESGO
No se sabe con exactitud los factores de riesgo de la génesis de los tumores de la
uretra, pero se cree que los procesos inflamatorios crónicos tienen un papel
importante en su desarrollo como flogosis crónica uretral, estenosis uretral, etc.
PATOLOGÍA
Los tumores de la uretra bulbo-membranosa son más frecuentes, representan el
60% de todos los cánceres de la uretra masculina, seguido de los ubicados
en la uretra peniana, que representan el 30% del total de los casos. El
tipo histológico más frecuente es el carcinomaespinocelular, que representa
el 80% de estos tumores. Los adenocarcinomas ocurren en el 5% de los
casos, y el resto son tumores uroteliales primarios menor al 30%.
CUADRO CLÍNICO
El cáncer inicial de uretra puede no presentar síntomas. Sin embargo, en muchos
casos, los tumores son avanzados y los síntomas dependen de su ubicación. Los
tumores de la uretra distal son más fáciles de identificar.Los tumores proximales se
presentan tardíamente con el diagnóstico de obstrucción urinaria, lo que contribuye
a la aparición de un absceso periuretral, y las fístulas uretrocutaneas y compromiso
de la piel del pene o perineal.
DIAGNÓSTICO
El detalle en la historia clínica y examen físico, incluyendo la palpación rectal y
bimanual de la región pélvica son obligatorios. Se debe realizar una uretrocistografía
retrógrada y miccional cuando hay sospecha de estenosis uretral. Un diagnóstico
definitivo de neoplasia maligna de la uretra se establece mediante biopsia de
lesión, obtenidos directamente.
TRATAMIENTO
El tratamiento depende del sexo, el estado general del paciente, el estadio y la
localización del tumor. La extirpación quirúrgica del tumor es el tratamiento de
elección.
PRONÓSTICO
Las personas con tumores superficiales y de localización distal tienen un buen
pronóstico, mientras que aquellos con tumores proximales e invasivos evolucionan
desfavorablemente.
TUMORES GENITALES
TUMORE DE PENE
EPIDEMIOLOGÌA Y FACTORES DE RIESGO
Representa menos del 1% de los cánceres entre los varones en los Estados Unidos
y se reportan de 1 a 2 nuevos casos por cada 100 000 hombres. En áreas como
África y regiones de Sudamérica, el carcinoma peneano puede corresponder a 10 a
20% de todas las lesiones malignas, este trastorno ocurre mayormente en hombres
de 50 y 60 años.
El factor etiológico que se relaciona más a menudo con el carcinoma peneano es la
mala higiene. La enfermedad es casi desconocida en circuncidados cerca del
nacimiento.
PATOLOGÌA
A. LESIONES DERMATOLOGICAS PRE CANCEROSAS
o Suele verse una placa blanca que afecta al meato.
o La exploración histológica revela acantosis, hiperqueratosis y paraqueratosis.
Esta lesión puede preceder al carcinoma peneano o presentarse de manera
simultánea con éste.
o La balanitis xerótica obliterante es un parche blanco que se origina en el
prepucio o el glande y suele afectar al meato,se observa con más frecuencia en
diabéticos de mediana edad.
o La exploración microscópica revela epidermis atrófica y anormalidades en el
depósito de colágeno.
o Los condilomas acuminados gigantes son lesiones con forma de coliflor que
surgen del prepucio o el glande.

B. CARCINOMA IN SITU (ENFERMEDAD DE BOWEN, ERITROPLASIA DE


QUEYRAT)
o carcinoma epidermoide in situ que suele afectar al tallo del pene
o La lesión aparece como una placa roja con incrustaciones.
o La eritroplasia de Queyrat es una lesión aterciopelada, roja, con ulceraciones
que suele afectar al glande.
CARCINOMA INVASIVO DEL PENE
Representa la mayoría de los cánceres peneanos. Suele originarse en el
glande, y los sitios restantes, en orden de frecuencia, son el prepucio y el
tallo. El aspecto puede ser papilar o ulcerativo. El carcinoma verrugoso es
una variante del epidermoide, esta lesión tiene aspecto papilar.
DATOS CLÌNICOS
SIGNOS Y SÌNTOMAS
o Quejidos
o Área de induración o eritema con ulceración
o Pequeño nódulo o crecimiento exofìtico
o Dolor, secreción micción irritante y hemorragia.
o La lesión primaria debe caracterizarse en tamaño, ubicación y afectación
posible del cuerpo corporal.
o Hipertrofia puede ser secundaria a inflamación o dispersión.

DATOS DE LABORATORIO
o Anemia y leucocitosis en pacientes con tumor presente desde tiempo a otras
o infección local extensa.
o Hipercalcemia.

IMAGENOLOGÌA
o Cxr.
o gammagrafía ósea
o Ct de abdomen y pelvis.

DIAGNÒSTICO DIFERENCIAL
chancro sifilítico puede estar presente como una ulceración indolora. La exploración
sexológica y de campo oscuro debe establecer el diagnóstico. Por lo general, el
chancroide suele aparecer como una ulceración dolorosa del pene.
Los cultivos seleccionados para Haemophilus ducreyi deben identificar la causa. Los
condilomas acuminados aparecen como lesiones exofíticas, suaves, con forma de
“racimo de uvas”, en cualquier lugar del tallo o el glande. La biopsia puede distinguir
esta lesión del carcinoma, si hay duda.
TRATAMIENTO
LESIONES PRIMARIAS
La biopsia es obligatoria para establecer el diagnóstico, el tratamiento va a cariar
acorde su patología, además de la ubicación y la lesión. La aplicación de crema de
fluoro uracilo o el tratamiento con láser de neodimio es eficaz para cis y preserva el
pene.
En el caso de lesiones que afectan el glande o el tallo distal, se ha sugeridopor
tradición la penectomía parcial con un margen de 2 cm para reducir la recurrencia
local. En el caso de lesiones que afectan el tallo proximal o cuando la penectomía
parcial produce un muñón peneano de longitud insuficiente para la función sexual o
para dirigir el chorro urinario, se ha recomendado la penectomía total con
uretrostomía perineal.
GANGLIOS LINFÀTICOS REGIONALES
Sujetos que se presentan con adenopatía inguinal se les debe someter a
tratamiento de la lesión primaria seguida por un curso de 4 a 6 semanas s de
antibióticos orales de amplio espectro.
Los pacientes que tienen al principio ganglios negativos, en el entorno clínico, pero
que luego desarrollan ganglios palpables en este mismo entorno deben someterse a
linfadenectomía ilioinguinal unilateral. A los pacientes que tienen tumor inoperable y
metástasis inguinal voluminosa se les trata con quimioterapia (cisplatino y 5-
fluorouracilo)
ENFERMEDAD SISTEMICA
Cuatro antineoplásicos muestran actividad contra carcinoma peneano: bleomicina,
metotrexato, cisplatino y 5-fluorouracilo. Sin embargo, no se han reportado
respuestas a largo plazo.
OTROS TUMORES PENEANOS
Se han reportado casos esporádicos de melanoma, carcinoma de células basales y
enfermedad de Paget. La incidencia de sarcoma de Kaposi del pene está
aumentando por la creciente prevalencia del virus de la inmunodeficiencia humana.
Aparece como una pápula dolorosa en el glande y el tallo con decoloración azul-
púrpura. Estas lesiones tienden a ser radiosensibles

TUMORES TESTICULARES
El cáncer de testículo es generalmente primario. En raras ocasiones puede ser
secundario a leucemia o linfoma. Se divide según su origen histológico en tumores
de células germinales, que representan el 90-95 %, teniendo estos como precursora
la neoplasia in situ, excepto el seminoma espermatocítico; el restante 10 %
corresponde a tumores de células no germinales.

Con fines prácticos, pronósticos y terapéuticos, los tumores de células germinales


se subdividen en tumores seminomatosos y tumores no seminomatosos. Estos
tienen como precursora la neoplasia in situ y corresponden, según la nueva
clasificación, a los tipos 2. Los tumores no seminomatosos representan el 40 % de
los tumores de células germinales. Es el caso de nuestro paciente. Dentro de este
grupo encontramos el carcinoma embrionario, el saco vitelino, la coriocarcinoma y el
teratoma. Este último se caracteriza por ser quimo y radio resistente. Si bien se
describía que la presencia de carcinoma embrionario era un elemento de mal
pronóstico y era tomado en cuenta para la decisión terapéutica, se ha visto que su
porcentaje se relaciona con la probabilidad de invasión linfovascular. Hoy en día el
factor de riesgo más importante en los tumores no seminomatosos tanto para
recidiva local como para la presencia de enfermedad metastásica es la evidencia de
invasión linfo vascular en la pieza.

TUMORES DEL EPIDÍDIMO


Representan el 5% de las masas escrotales y son mayoritariamente benignos. El
estudio patológico asociado al análisis inmunohistoquímico de la lesión extraída por
vía inguinal permite establecer el diagnóstico de certeza y el tratamiento en la
mayoría de los casos. Teniendo en cuenta la infrecuencia de estas lesiones, no
existe consenso en relación con la indicación de un tratamiento adyuvante:
quimioterapia, radioterapia o vaciamiento ganglionar.

BIBLIOGRAFÍA
1. McAninch J.W., & Lue T.F.(Eds.), (2014). Smith y Tanagho. Urología general,
18e. McGraw Hill. https://accessmedicina.mhmedical.com/content.aspx?
bookid=1487&sectionid=96831497
2. Laura Velarde Ramos, Reynaldo Gómez Illanes. Tumores de la uretra en el
adulto. Rev Chil de Urol. 2013;2(78): 38 – 47.
3. Giwerc, A., & Masson, A. (2019). Quistes y tumores del epidídimo. Elsevier.
Recuperado 29 de enero de 2023, de
https://www.sciencedirect.com/science/article/abs/pii/S1761331019427199
4. Ventura, L. (2019). Encares clínicos de urología. Cátedra de Urología. Recuperado
29 de enero de 2023, de
https://catedradeurologia.edu.uy/wp-content/uploads/2022/08/Encares-clinicos-de-
Urologia.pdf#page=41

También podría gustarte