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FACULTAD DE CIENCIA DE LA SALUD

ESCUELA PROFESIONAL DE MEDICINA HUMANA

FISIOPATOLOGÍA DE LA INSUFICIENCIA
CARDIACA.
INTRODUCCIÓN:

La insuficiencia cardiaca es la incapacidad del corazón para bombear sangre


hacia todos los tejidos periféricos, de manera que estos tejidos se vuelven
incapaces de cumplir con sus funciones metabólicas de forma adecuada.

CAUSAS:

Existen diferentes causas que pueden provocar una insuficiencia cardiaca,


pero nos vamos a centrar en las tres causas más importantes de esta
patología:
1. Hipertensión: Va a provocar una sobrecarga de presión.
2. Enfermedad valvular: Va a provocar una sobrecarga de presión y de
volumen.
3. Infarto de miocardio: Va a provocar una disfunción regional.

INSUFICIENCIA CARDIACA CON EYECCIÓN REDUCIDA


Conocida también como insuficiencia cardiaca sistólica, predomina la
disfunción sistólica global del ventrículo izquierdo, el cual se contrae poco
y se vacía de manera inadecuada lo que provoca aumento del volumen y
presión diastólica y disminución de la fracción de eyección (≤ 40%).
Provoca desperfectos en la utilización y aportación de energía, en las
funciones electrofisiológicas y en las interacciones con los elementos
contráctiles, con alteración de la modulación intracelular del calcio y la
producción de cAMP.

INSUFICIENCIA CARDIACA CON EYECCIÓN PRESERVADA


También llamada insuficiencia cardíaca diastólica, el llenado del VI se ve
afectado de tal forma que provoca un aumento de la presión de fin de
diástole del ventrículo izquierdo, ya sea en reposo o durante el esfuerzo,
pero mantiene un volumen de fin de diástole normal. Además, la fracción
de eyección permanecen normales (≥ 50%).
La restricción marcada al llenado del ventrículo izquierdo puede ocasionar
un volumen tele diastólico ventricularmente bajo y, por lo tanto, causar un
bajo CO y síntomas sistémicos. Además, el compromiso de la relajación del
ventrículo izquierdo (proceso activo), el aumento de la rigidez ventricular,
una valvulopatía o una pericarditis constrictiva da como resultado una
disfunción diastólica que es reconocida como causa de insuficiencia
cardiaca.

INSUFICIENCIA CARDIACA CON EYECCIÓN INTERMEDIA


Las sociedad internacionales han propuesto recientemente el concepto de
insuficiencia cardíaca con fracción de eyección media, pues los paciente
presentaban una fracción de eyección del ventrículo izquierdo del rondaba
del 41% al 49%. La situación de este grupo aún no está clara, pues puede
ser una población distinta o una mezcla de pacientes con ICpFE o ICrFE.

INSUFICIENCIA VENTRICULAR IZQUIERDA


En la insuficiencia cardíaca asociada con disfunción ventricular izquierdo, el
dióxido de carbono disminuye y aumenta la presión venosa pulmonar. Por
otra parte, el ventrículo izquierdo suministra la mayor parte de la potencia
de bombeo del corazón, por lo que es más grande que las otras cámaras y
es esencial para un funcionamiento normal.
INSUFICIENCIA VENTRICULAR DERECHA
En la insuficiencia cardiaca asociada a disfunción del ventrículo derecho, la
presión venosa sistémica aumenta y favorece la extravasación de líquido y
la consiguiente formación de edema, especialmente en los órganos
dependientes del cuerpo y abdominales.

RESPUESTA CARDIACA:
En la Insuficiencia cardiaca, la función sistólica del ventrículo izquierdo
necesita una precarga más elevada para mantener el gasto cardíaco. Como
consecuencia, los ventrículos se remodelan con el paso del tiempo. Durante
el remodelado, el ventrículo izquierdo se torna menos ovoide y más
esférico, se dilata y se hipertrofia y el ventrículo derecho se dilata y puede
hipertrofiarse. Al principio, estos cambios son compensadores, pero en
algún momento la remodelación se asocia a resultados adversos porque los
cambios acaban finalmente aumentando la rigidez y la tensión mural
durante la diástole (es decir, aparece disfunción diastólica), lo que
compromete la función cardíaca, especialmente durante episodios de
sobreesfuerzo físico. El aumento de la tensión mural genera mayor
demanda de oxígeno y acelera la apoptosis de las células miocárdicas. La
dilatación de los ventrículos también puede producir una insuficiencia
mitral.

RESPUESTAS HEMODINÁMICAS:
Al disminuir el gasto cardíaco, se mantiene el aporte de oxígeno a los tejidos
gracias al incremento de la extracción de oxígeno de la sangre y, en
ocasiones, la desviación de la curva de disociación de la oxihemoglobina
hacia la derecha para favorecer la liberación de oxígeno.
La reducción del gasto cardíaco asociada con el descenso de la presión
arterial sistémica activa reflejos barorreceptores arteriales, que
incrementan el tono simpático y disminuyen el tono parasimpático. Como
consecuencia, la frecuencia cardíaca y la contractilidad miocárdica
aumentan, las arteriolas en lechos vasculares específicos se contraen, se
produce una venoconstricción y se retiene sodio y agua. Estos cambios
compensan el deterioro de la función ventricular y ayudan a mantener la
homeostasis hemodinámica en los estadios iniciales de la insuficiencia
cardíaca. Sin embargo, estos cambios compensadores aumentan el trabajo
cardíaco, la precarga y la poscarga, reducen la perfusión coronaria y renal,
promueven la acumulación de líquido con congestión de los órganos,
estimulan la excreción de potasio y pueden inducir necrosis de los
miocardiocitos y arritmias.

RESPUESTAS RENALES:
A medida que la función cardíaca se deteriora, el flujo sanguíneo renal
disminuye debido al bajo gasto cardíaco. Además, aumentan las presiones
venosas renales, lo que ocasiona congestión venosa renal.
La hipoperfusión renal (y tal vez el menor estiramiento arterial sistólico
secundario al deterioro de la función ventricular) activa el sistema renina-
angiotensina-aldosterona (SRAA) el cual a su vez aumenta la retención de
sodio y agua y el tono vascular renal y periférico.
El sistema renina-angiotensina-aldosterona-vasopresina la cual es una
hormona antidiurética activa una serie de efectos a largo plazo que pueden
ser perjudiciales para el organismo.
La angiotensina II empeora la insuficiencia cardíaca al generar
vasoconstricción y al incrementar la síntesis de aldosterona promueve la
reabsorción de sodio en la porción distal de la nefrona y además estimula
el depósito vascular de colágeno y la fibrosis.
La angiotensina II puede estar comprometida en el desarrollo de hipertrofia
vascular y miocárdica y contribuir al remodelado del corazón y los vasos
periféricos, con probable agravamiento de la insuficiencia cardíaca.
En la insuficiencia cardíaca con disfunción renal progresiva (como la
secundaria al consumo de fármacos para el tratamiento de la insuficiencia
cardíaca), se observa un agravamiento de la insuficiencia cardíaca conocido
como síndrome cardiorrenal.

RESPUESTAS NEUROHUMORALES:
En condiciones de estrés, las respuestas neurohumorales ayudan a
incrementar la frecuencia cardíaca y a mantener la tensión arterial y la
perfusión de los órganos, pero la activación crónica de estas respuestas
afecta de manera negativa la conservación del equilibrio normal En
respuesta al descenso de la tensión arterial, se secreta vasopresina por la
acción de varios estímulos neurohormonales.
La mayor concentración de vasopresina reduce la excreción renal de agua
libre, lo que puede contribuir a la hiponatremia asociada con la insuficiencia
cardíaca. En los pacientes con insuficiencia cardíaca y tensión arterial
normal, las concentraciones de vasopresina fluctúan. El aumento del
volumen y la presión auricular estimula la secreción de péptido natriurético
auricular; el péptido natriurético cerebral (tipo B) Se secreta en los
ventrículos en respuesta al estiramiento ventricular. Estos péptidos
estimulan la excreción renal de sodio, pero en los pacientes con
insuficiencia cardíaca, el efecto se amortigua por el descenso de la presión
de perfusión renal, la disminución del número de receptores y, tal vez, la
mayor degradación enzimática
El corazón insuficiente también experimenta cambios metabólicos
caracterizados por aumento de la utilización de los ácidos grasos y
reducción del uso de la glucosa, que pueden convertirse en blancos
terapéuticos.
CAMBIOS ASOCIADOS CON EL ENVEJECIMIENTO:
Generalmente la IC afecta alrededor de 1-2% de personas mayores en
países desarrollados ya que en esta edad aumenta la prevalencia de
insuficiencia cardiaca. Hay cierta complejidad en diagnosticar dicha
enfermedad en esta población ya que a estos pacientes se agregan otras
patologías como lo son las principales causas de la IC en adultos en las
cuales se consideran la hipertensión y la enfermedad coronaria.
La IC se puede clasificar según la fracción de eyección puede ser conservada
(FE>50%) en la que suele existir hipertrofia ventricular concéntrica (se
asocia con la hipertensión arterial, obesidad, diabetes, etc.) o disminuida
(FE<40%).
En esta población ocurre la mayor prevalencia de disfunción diastólica que
va a estar relacionado con pérdidas que comprometen la relajación cardiaca
por esto mismo es que frecuentemente sean problemas de fallos diastólicos
los que se relacionen con adultos mayores.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS:
➢ https://www.msdmanuals.com/es-pe/professional/trastornos-
cardiovasculares/insuficiencia-card%C3%ADaca/insuficiencia-
card%C3%ADaca

➢ https://medlineplus.gov/spanish/ency/article/000158.htm

➢ https://www.youtube.com/watch?v=eRYfsjisnks

➢ https://revistamedicasinergia.com/index.php/rms/article/view/5
67/999

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