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Nutrición
Nombre:
Docente:
María Rojas
Curso:
2do Enfer- C
Son aquellas sustancias que proporcionan energía al organismo para un buen funcionamiento, y
otros elementos necesarios para reparar y construir estructuras orgánicas, para promover el
crecimiento y para regular procesos metabólicos.
Entre otras muchas funciones, participan en la formación de todo tipo de estructuras, promueven
el crecimiento e intervienen en numerosos procesos metabólicos. Pero hay otro aspecto
diferencial respecto a los micronutrientes, y es que los macronutrientes se encargan de
proporcionar energía a tu organismo.
Los principales macronutrientes son los carbohidratos, las proteínas y las grasas. El matiz es que,
pese a ser necesarios en cantidades elevadas, estos elementos no proveen energía, ya que no
poseen aportación calórica.
CARBOHIDRATOS
Los carbohidratos son moléculas de azúcar. Junto con las proteínas y las grasas, los carbohidratos
son uno de los tres nutrientes principales que se encuentran en alimentos y bebidas.
Una vez que ingresan al organismo, los glúcidos se convierten en glucosa, la principal fuente de
energía que tenemos los seres humanos, así como también la encargada de metabolizar las grasas
y proteger los tejidos nerviosos.
Son una fuente importante de energía y proceden fundamentalmente de los vegetales. La ingesta
en un adulto sano recomendada es de 3-5 g/kg/día. Aportan 4 kcal/gramo.
Se dividen en:
Monosacáridos: son los más simples; constan de 3-6 átomos de carbono.
Oligosacáridos: formados por menos de 10 moléculas de monosacáridos.
Polisacáridos: formados por más de 10 moléculas de monosacáridos.
Tipos de carbohidratos
Hay tres tipos principales de carbohidratos:
PROTEÍNAS
Las proteínas ayudan en la construcción de los tejidos y en algunos procesos anabólicos. Las
proteínas son moléculas formadas por la unión de aminoácidos. Existen muchas proteínas y cada
una tiene su propia función, aunque en general, su principal cometido es estructural, ya que
conforman células, tejidos, huesos… En ocasiones, si no podemos obtener energía mediante otros
nutrientes, las proteínas también pueden encargarse de esta tarea.
Son los componentes de las estructuras de las células. Las necesidades de un adulto sano y
sedentario son 0,8-1 g/kg/día. Nos aportan 4 kcalorías/gramo. Se recomienda entre un 10-15%
del total de las calorías de la dieta en forma de proteínas en una dieta equilibrada.
Tipos de proteínas
Dependiendo de la composición química: hay proteínas simples y proteínas conjugadas,
también conocidas como heteroproteínas. Las simples se dividen a su vez en
escleroproteínas y esferoproteínas.
Según su fuente de origen: De origen animal y vegetal
Las proteínas pueden ser de origen animal o vegetal. Las primeras son una excelente fuente de
zinc, hierro hemínico, vitaminas del complejo B y aminoácidos esenciales, se digieren con más
facilidad y aportan todos los aminoácidos esenciales.
Sin embargo, un alto consumo de proteínas de origen animal se asocia a un mayor riesgo de
mortalidad y desarrollo de complicaciones para la salud cardiovascular. Aunque las proteínas de
origen vegetal suelen percibirse como una fuente de proteína incompleta al contener una menor
o nula cantidad de alguno de los aminoácidos limitante, es posible obtener proteínas de alta
calidad mediante la combinación de fuentes vegetales. Tanto la proteína de origen animal como
vegetal son ricas en péptidos funcionales que pueden actuar como factores inmonumoduladores,
antitrombóticos, e hipocolesterolémicos, entre otros. La producción de proteínas vegetales
implica un impacto ambiental considerablemente menor, en comparación con la producción de
proteínas de origen animal. Por consiguiente, es necesario avanzar en la producción y la
promoción de alternativas de alimentos, fuente de proteína vegetal, que suplan las necesidades
nutricionales de la población y disminuyan el coste para el medio ambiente asociado a la
producción y consumo de proteínas de origen animal.
GRASAS
Son el nutriente energético por excelencia. Este grupo está formado por los triglicéridos, los
fosfolípidos y el colesterol. Constituyen el 30-35% de una dieta equilibrada. Aportan 9 kcal/gramo.
El colesterol es una grasa que se encuentra exclusivamente en los alimentos de origen animal. El
exceso de colesterol en la dieta conlleva, al igual que los ácidos grasos saturados y los de
configuración TRANS, un aumento del colesterol LDL y desciende el colesterol HDL, con elevado
riesgo cardiovascular. En definitiva, se convierte en una mala compañía para las personas con
diabetes. No debemos tomar más de 150 mg. al día de colesterol con la alimentación y menos del
10% del valor calórico total de nuestra dieta puede venir de las grasas saturadas
¿CÓMO CALCULAR MACROS?
Primero debes averiguar qué cantidad de energía gasta tu cuerpo solamente por estar en
funcionamiento: es lo que se conoce como metabolismo basal. Es una serie muy sencilla de
operaciones, pero te ofrecemos este ejemplo de una mujer de 40 años que pesa 75 kg y mide 1,65
m.
Además, según la actividad física que realices, debes multiplicar esta cantidad por:
La mujer de nuestro ejemplo necesita consumir diariamente como mínimo 1.820,25 kcal. Además,
suele hacer ejercicio dos veces a la semana, por tanto, multiplicamos su metabolismo basal por
1,375 y obtenemos 2.502,84 kcal que debe consumir diariamente.
¿CÓMO APLICARLO A TU DIETA?
Sabiendo las kilocalorías que necesitas consumir diariamente, solo te quedan unos pocos cálculos
más para repartir tu consumo de macronutrientes según las recomendaciones de una dieta
equilibrada y saludable. En nuestro ejemplo, del total de 2.502,84 kcal necesarias, el reparto sería: