Está en la página 1de 4

UNIVERSIDAD MICHOACANA DE SAN NICOLÁS

DE HIDALGO
Cuna de héroes, crisol de pensadores

Unidad 2 Estructura celular

“Protoplastos, esferoplastos y formas L”

MICROBIOLOGÍA I

Facultad de Químico Farmacobiología

5to Semestre. Sección: 07

Prof: MC. Luis Fernando Núñez García


Realizado por:
 Jesús Emmanuel Jaime Muñoz

Ciclo escolar: 22/23


Morelia, Michoacán. 18 de octubre de 2022.
Microbiología I
La forma bacteriana está determinada por la estructura de su pared celular, que puede modificarse fácilmente para
sobrevivir a las condiciones ambientales. El peptidoglucano y varias proteínas del citoesqueleto ubicadas en la pared
celular bacteriana juegan un papel importante en la formación de las células bacterianas y en el cambio de su forma.
Estas formas bacterianas anormales se denominan formas deficientes en la pared celular, que se han clasificado
como protoplastos y esferoplastos, según el grado de pérdida de los componentes de la pared celular.
Las diferentes partes de las plantas (hojas, raíces, polen, etcétera) o los diferentes tejidos vegetales que se originan
a partir de éstas, pueden utilizarse para obtener células que carecen de pared celular, denominadas protoplastos.
La pared celular vegetal se divide en pared primaria y pared secundaria, que varían en composición química, grosor
y propiedades físicas. Pero en ocasiones, cuando se desea hacer experimentos de transformación genética –que
requieren introducir ADN foráneo en una célula vegetal– la pared puede ser un problema, por lo que es necesario
eliminarla. Un protoplasto es una célula vegetal a la cual se le ha removido completamente la pared celular, mediante
métodos mecánicos o enzimáticos y su origen es de una bacteria gram positiva. Observados al microscopio, los
protoplastos presentan una forma esférica, con el citoplasma rodeado por una membrana plasmática; en el interior
de la célula se puede visualizar el núcleo. Uno de los factores que también afecta el aislamiento, rendimiento y
viabilidad de los protoplastos es el estado fisiológico del tejido de la planta de la cual se parte. Para obtener
protoplastos de excelente calidad, las plantas deben ser cultivadas en condiciones controladas, y en ocasiones es
necesario proporcionarles un pretratamiento con hormonas vegetales (fitohormonas). Normalmente, para aislar
protoplastos, el material vegetal (hoja, callo y suspensiones celulares) debe incubarse con la mezcla enzimática
durante 4 a 18 horas, a una temperatura de 28 °C, en oscuridad y con agitación ligera para liberar los protoplastos
del tejido. Los protoplastos pueden aislarse por medios mecánicos, por métodos enzimáticos o por una combinación
de ambos Esta contracción se logra mediante el uso de soluciones salinas como cloruro de potasio, sulfato de
magnesio o azúcares-alcoholes (manitol). El proceso de separación de la membrana plasmática de la pared celular
es llamado plasmólisis. Los protoplastos se han aplicado en estudios de procesos de transporte y división celular,
morfogénesis, mutagénesis, selección, transformación genética por hibridación o fusión somática, e introducción
de ADN foráneo por métodos biológicos y directos, entre otros. Sin embargo, tal vez las aplicaciones más recientes
de estas células sin pared sean en el estudio de mecanismos de ARN (ácido ribonucleico) de interferencia y en el
aislamiento de núcleos para la localización de metales tóxicos.
Por otro lado, los esferoplastos son estructuras esféricas, osmóticamente sensibles, derivadas de una bacteria gram
negativa a la que se le ha removido parcialmente su pared celular. Generalmente las células bacterianas se
encuentran en ambientes que pueden tener diferentes concentraciones de solutos. La mayoría de estos ambientes
tienen concentraciones más bajas (hipotónico) que el interior de la célula, siendo aproximadamente 10 milimolar
(mM). En este caso el agua pasa de los sitios de baja concentración de solutos a los de alta concentración y ocurre
el proceso de ósmosis. Así pues, existe una constante tendencia en toda la vida célula bacteriana a que entre agua
por lo que la célula podría hincharse y explotar sino existiera la fuerte y resistente pared celular.
La eliminación de la pared bacteriana puede lograrse con hidrólisis con lisozimas o al bloquear la síntesis de
peptidoglucano con un antibiótico como penicilinas. En los medios de cultivo con protección osmótica, tales
tratamientos liberan protoplastos en las células bacterianas grampositivas y esferoplastos de las gramnegativas (los
esferoplastos retienen la membrana externa y peptidoglucano). Si tales células son capaces de crecer y dividirse, se
denominan formas L; éstas son difíciles de cultivar, por lo común requieren un medio de cultivo sólido con agar,
además de encontrarse en un medio con la concentración osmótica adecuada. Las formas L se producen con mayor
facilidad con la administración de penicilina que con lisozimas, lo que sugiere la necesidad de peptidoglucanos
residuales. Algunas formas L pueden cambiar a su forma bacilar normal al eliminar el estímulo inductor. Así, son
capaces de reiniciar la síntesis normal de la pared celular. Otras son estables y nunca presentan reversión. El factor
que determina su capacidad para la reversión puede, de nuevo, ser la presencia de peptidoglucano residual, el cual
en condiciones normales actúa como cebador para su propia biosíntesis.
Página 2|4
Protoplastos, esferoplastos y formas L
CONCLUSIÓN

PROTOPLASTOS ESFEROPLASTOS FORMAS L

Gram positivas y
ORIGEN Gram positivas Gram negativas
Gram negativas

Capaces de
PARED Sin pared (removida Removida
reiniciar la síntesis
CELULAR totalmente) parcialmente
de la pared

Osmóticamente Osmóticamente Osmóticamente


ÓSMOSIS
sensibles sensibles sensibles

Pleomórficas (y
Esférica (aun cuando Esférica (aun cuando
FORMA pueden cambiar a
se originan de bacilos) se originan de bacilos)
su forma bacilar)

Página 3|4
Microbiología I

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
 Poot, W. (2013). ¿Qué son los protoplastos y para qué sirven?. Revista ciencia. [pdf]. Sitio web:
https://www.revistaciencia.amc.edu.mx/images/revista/64_3/PDF/Protoplastos.pdf
 Brooks, G. F., Butel, J. S., Ornston, L. N., Jawetz, E., Melnick, J. L., & Adelberg, E. A.
(2016). Microbiología médica de Jawetz, Melnick y Adelberg (27ʹed. en español.). México: El Manual
Moderno. Pág: 30
 M. T. Madigan, J. M. Martinko, J. Parker. Brock . Biología de los Microorganismos. 14 ed (2015) Ed.
Prentice Hall-Pearson Education.
 Porres, J. (2010). Esferoplastos, protoplastos y formas L. Revista Médica Univ Navarra.
 PatrickR. Murray, PhD., Ken S. Rosenthal, PhD., George S. Kobayashi, PhD., Michael A. Pfaller, MD.
2002. "MICROBIOLOGÍA MÉDICA"., 7ª Edición., Ed. Mosby.
 Corrales, F. (2000). Patogenecidad de las formas L de Nocardia. Scielo. Sitio web:
http://ve.scielo.org/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1315-25562000000100002

Página 4|4

También podría gustarte