TEMA 45.

LA EJECUCIÓN FORZOSA.
Se regula en el libro ‍III de la LEC (artículos ‍517 ‍a ‍747), que se estructura en los siguientes títulos:
1.º Títulos ejecutivos (donde se regula cuáles son los títulos ejecutivos y algunos presupuestos de la ejecución).
2.º Ejecución provisional.
3.º Ejecución: disposiciones generales (las partes, el órgano competente, el despacho de la ejecución, la oposición a la
ejecución y la impugnación de los actos de la ejecución, así como la suspensión de la ejecución y su término).
4.º Ejecución dineraria.
5.º Ejecución no dineraria.
6.º Medidas cautelares (que no son materia exclusiva de la ejecución, ya que también pueden solicitarse durante el
curso del proceso declarativo e incluso antes de la demanda).

CONCEPTO Y NATURALEZA
En cuanto al concepto, ésta se define como aquella actividad procesal desarrollada por las partes y el juez que tiene
por objeto llevar coactivamente a su cumplimiento lo declarado en una sentencia o en ciertos títulos equiparables a la
misma que llevan aparejada ejecución según la LEC.
Naturaleza. Está compuesto por actos jurídicos pero TB materiales.
De esto se deduce que las diferencias fundamentales entre el proceso declarativo y el de ejecución son las siguientes:
1) El proceso declarativo tiende a declarar un derecho, mientras que el de ejecución se dirige a la realización de la
prestación.
2) En el proceso declarativo se solicita del órgano jurisdiccional una declaración de voluntad; en el de ejecución lo
que se pide es una manifestación de voluntad.
3) En el proceso declarativo se debate; en el de ejecución se actúa.
4) Finalmente, se trata de una actividad independiente del proceso de cognición ya que este último no constituye
antecedente necesario del proceso de ejecución sin perjuicio de que el proceso de cognición preceda al proceso de
ejecución en cuyo caso la ejecución forzosa no es una fase del proceso declarativo sino un proceso distinto.

EL TÍTULO EJECUTIVO Y SUS CLASES

Se regula en el título ‍I del libro ‍III (artículos ‍517 ‍a ‍523).
517. 1. La acción ejecutiva deberá fundarse en un título que tenga aparejada ejecución.
2. Sólo tendrán aparejada ejecución los siguientes títulos:
1.º La sentencia de condena firme.
2.º Los laudos o resoluciones arbitrales y los acuerdos de mediación, debiendo estos últimos haber sido elevados a
escritura pública de acuerdo con la Ley de mediación en asuntos civiles y mercantiles.
3.º Las resoluciones judiciales que aprueben u homologuen transacciones judiciales y acuerdos logrados en el
proceso, acompañadas, si fuere necesario para constancia de su concreto contenido, de los correspondientes
testimonios de las actuaciones.
4.º Las escrituras públicas, con tal que sea primera copia ; o si es segunda que esté dada en virtud de mandamiento
judicial y con citación de la persona a quien deba perjudicar, o de su causante, o que se expida con la conformidad de
todas las partes.
5.º Las pólizas de contratos mercantiles firmadas por las partes y por corredor de comercio colegiado que las
intervenga, con tal que se acompañe certificación en la que dicho corredor acredite la conformidad de la póliza con los
asientos de su libro registro y la fecha de éstos.
6.º Los títulos al portador o nominativos, legítimamente emitidos, que representen obligaciones vencidas y los
cupones, también vencidos, de dichos títulos, siempre que los cupones confronten con los títulos y éstos, en todo caso,
con los libros talonarios.
7.º Los certificados no caducados expedidos por las entidades encargadas de los registros contables respecto de los
valores representados mediante anotaciones en cuenta a los que se refiere la Ley del Mercado de Valores, siempre que
se acompañe copia de la escritura pública de representación de los valores o, en su caso, de la emisión, cuando tal
escritura sea necesaria, conforme a la legislación vigente.
8.° El auto que establezca la cantidad máxima reclamable en concepto de indemnización, dictado en los supuestos
previstos por la ley en procesos penales incoados por hechos cubiertos por el Seguro Obligatorio de Responsabilidad
Civil derivada del uso y circulación de vehículos de motor.
9.º Las demás resoluciones procesales y documentos que, por disposición de esta u otra ley, lleven aparejada
ejecución.

Clases. Hay títulos judiciales (1, 3, 8, 9) y no judiciales (el resto; a su vez: parajudiciales (2) y contractuales (4, 5, 6,
7, factura electrónica si las partes así lo acuerdan expresamente, debiendo constar el carácter de título ejecutivo en la
factura y en el acuerdo, que se documentará en un anexo (art. 2ter Ley 56/2007, 28 dic))).
1
Sentencia de condena firme. Las sentencias solo constituyen un título ejecutivo si: — son de condena — y firmes,
aunque cabe la ejecución provisional de las sentencias de condena no firmes. El artículo ‍521 dice:
1. No se despachará [la] ejecución de las sentencias meramente declarativas ni de las constitutivas.
2. Mediante su certificación y, en su caso, el mandamiento judicial oportuno, las sentencias constitutivas firmes
podrán permitir inscripciones y modificaciones en registros públicos, sin necesidad de que se despache [la] ejecución
[esto es lo que se conoce como ejecución impropia].
3. Cuando una sentencia constitutiva contenga también pronunciamientos de condena, estos se ejecutarán del modo
previsto para ellos en esta ley.
4. Las sentencias firmes dictadas en acciones colectivas o individuales por las que se declare la nulidad, cesación o
retractación en la utilización de condiciones generales abusivas se remitirán de oficio por el órgano judicial al Registro
de Condiciones Generales de la Contratación para su inscripción [apartado añadido por la Ley ‍5/2019, de 15 de
marzo]».

Títulos contractuales. 520. 1. Sólo podrá despacharse ejecución por cantidad determinada que exceda de
4,5,6,7

50.000 ptas [300,50€]: 1En dinero efectivo. 2En moneda extranjera convertible, siempre que la obligación de pago en
la misma esté autorizada o resulte permitida legalmente. 3En cosa o especie computable en dinero.
2. El límite de cantidad señalado en el apartado anterior podrá obtenerse mediante la adición de varios títulos
ejecutivos de los previstos en dicho apartado.

EL TÍTULO EJECUTIVO EUROPEO.

Se regula en el Reglamento‍(CE) ‍805/2004, del Parlamento Europeo y del Consejo, de 21 de abril de 2004, por el
que se establece un título ejecutivo europeo para créditos no impugnados. El reglamento instaura un régimen de
ejecución inmediata, sin que se requiera ninguna declaración de ejecutabilidad y sin posibilidad alguna de impugnar
su reconocimiento (artículo ‍5). En España, la disposición final ‍21.ª de la LEC regula la aplicación en España del
Reglamento.

El ámbito de aplicación es similar al del Reglamento 1215/2012, al que nos referiremos en el siguiente epígrafe.
A estos efectos, de acuerdo con el art. 3. 1. El presente Reglamento se aplicará a las resoluciones, transacciones
judiciales y documentos públicos con fuerza ejecutiva sobre créditos no impugnados.
Se considerará no impugnado un crédito si:
el deudor ha manifestado expresamente su acuerdo sobre el mismo, mediante su admisión o mediante transacción
aprobada por un órgano jurisdiccional o celebrada en el curso de un procedimiento judicial ante un órgano
jurisdiccional; o bien
el deudor nunca lo ha impugnado, con cumplimiento de los pertinentes requisitos procesales de la ley del Estado
miembro de origen, en el marco de un procedimiento judicial; o bien
el deudor no ha comparecido ni ha sido representado en la vista relativa a dicho crédito después de haber impugnado
inicialmente el crédito en el transcurso del procedimiento judicial; o bien
el deudor lo ha aceptado expresamente en un documento público con fuerza ejecutiva.

Procedimiento. Se exige en primer término, que la autoridad de origen, a petición de parte, certifique el título como
un “título europeo” (artículo 6), que se expedirá de conformidad con el formulario normalizado que consta en el
Anexo I al Reglamento (artículo 9).
El derecho aplicable al procedimiento será el del Estado miembro donde se solicite la ejecución. El acreedor debe
aportar una copia de la resolución, una copia del certificado del título ejecutivo europeo y, en caso necesario, una
trascripción o traducción del certificado a la lengua oficial del Estado miembro de ejecución (artículo ‍20).

Competencia para la ejecución en España (d. ‍f. ‍21.ª, ‍5, de la LEC): «La competencia territorial para la ejecución
de resoluciones, transacciones judiciales y documentos públicos certificados como título ejecutivo europeo
corresponderá al juzgado de primera instancia del domicilio del demandado o del lugar de ejecución».

Denegación de la ejecución. El artículo ‍21 dispone:

1. «A instancia del deudor, el órgano jurisdiccional competente del Estado miembro de ejecución denegará la
ejecución si la resolución certificada como título ejecutivo europeo es incompatible con una resolución dictada con
anterioridad en un Estado miembro o en un tercer país, siempre que:
a) la resolución anterior tenga el mismo objeto y se refiera a las mismas partes,
b) y […] se haya dictado en el Estado miembro de ejecución» o sea reconocible en él,
c) «y no se haya alegado y no haya podido alegarse la incompatibilidad para impugnar el crédito durante el
procedimiento judicial en el Estado miembro de origen.
2. El título ejecutivo europeo y la resolución en que se base no podrán en ningún caso ser objeto de revisión en
cuanto al fondo en el Estado miembro de ejecución».
EJECUCIÓN DE RESOLUCIONES EXTRANJERAS EN EL ESPACIO JUDICIAL EUROPEO

Con carácter general, la eficacia extraterritorial de las decisiones extranjeras en el ámbito de la Unión Europea se
regula en el Reglamento ‍(UE) ‍1215/2012, del Parlamento Europeo y del Consejo, de 12 de diciembre de 2012,
relativo a la competencia judicial, el reconocimiento y la ejecución de resoluciones judiciales en materia civil y
mercantil (Bruselas ‍I ‍bis). Sucedió al Reglamento ‍44/2001.
También existe el Convenio de Lugano de 30 de octubre de 2007, que tiene el mismo ámbito de aplicación, que era
paralelo al Reglamento ‍44/2001, y que, salvo alguna particularidad como el exequatur, coincide con el ‍1215/2012.

Ámbito de aplicación. 1R. El presente Reglamento se aplicará en materia civil y mercantil con independencia de la
naturaleza del órgano jurisdiccional. No se aplicará, en particular, a las materias fiscal, aduanera ni administrativa, ni a
la responsabilidad del Estado por acciones u omisiones en el ejercicio de su autoridad (acta iure imperii).

Reconocimiento. 36.1. Las resoluciones dictadas en un Estado miembro serán reconocidas en los demás Estados
miembros sin necesidad de procedimiento alguno » (artículo ‍36.1). Es decir, opera el principio del reconocimiento
automático.
La parte que desee invocar en un Estado miembro una resolución dictada en otro Estado miembro deberá presentar: ‍a)
‍una copia de la resolución, que reúna los requisitos necesarios para ser considerada auténtica, y ‍b) ‍el certificado
expedido» por el órgano jurisdiccional de origen conforme a un modelo anexo (artículos ‍37.1 ‍y ‍53).

Ejecución. 39. Las resoluciones dictadas en un Estado miembro que tengan fuerza ejecutiva en él gozarán también de
esta en los demás Estados miembros, sin necesidad de una declaración de fuerza ejecutiva , lo que supone la
supresión del execuátur.
A efectos de la ejecución [‍ …], el solicitante facilitará a las autoridades de ejecución competentes: ‍a) ‍una copia de la
resolución y ‍b) ‍el certificado expedido» por el órgano jurisdiccional de origen conforme a un modelo anexo, «que
acredite que la resolución tiene fuerza ejecutiva y que contenga un extracto de la resolución, así como, en su caso,
[la] información pertinente sobre las costas impuestas en el procedimiento y el cálculo de los intereses»
(artículos ‍42.1 ‍y ‍53).

El procedimiento de ejecución se rige, en general, por el derecho del Estado miembro requerido (artículo ‍41). 40.
Toda resolución con fuerza ejecutiva conllevará la facultad de aplicar las medidas cautelares previstas en la legislación
del EM requerido. 2. No obstante lo dispuesto en el apartado 1, los motivos de denegación o de suspensión de la
ejecución con arreglo al Derecho del EM requerido serán aplicables en la medida en que no sean incompatibles con
los motivos mencionados en el art. 45.

Denegación. 45.1.A petición de cualquier parte interesada, se denegará el reconocimiento de la resolución:

a) si el reconocimiento es manifiestamente contrario al orden público del Estado miembro requerido;
b) cuando la resolución se haya dictado en rebeldía, si no se entregó al demandado cédula de emplazamiento o
documento equivalente de forma tal y con tiempo suficiente para que pudiera defenderse, a menos que no haya
recurrido contra dicha resolución cuando pudo hacerlo;
c) si la resolución es inconciliable con una resolución dictada entre las mismas partes en el Estado miembro requerido;
d) si la resolución es inconciliable con una resolución dictada con anterioridad en otro Estado miembro o un Estado
tercero entre las mismas partes en un litigio que tenga el mismo objeto y la misma causa, cuando esta última
resolución reúna las condiciones necesarias para su reconocimiento en el Estado miembro requerido,
o e) en caso de conflicto de la resolución con lo dispuesto las normas sobre foros de competencia exclusiva y
algunos foros especiales en materia de seguros, de contratos celebrados por los consumidores y de contratos
individuales de trabajo.
46. La ejecución de una resolución se denegará, a petición de la persona contra la que se haya instado la ejecución, por
cualquiera de los motivos mencionados en el artículo 45.

Por otro lado, también como el Reglamento ‍805/2004, en ningún caso la resolución podrá ser objeto de revisión en
cuanto al fondo en el Estado de ejecución (artículo ‍52).

Además, el art. 54. Dispone que si una resolución contiene una medida o una orden que no es conocida en el
ordenamiento jurídico del Estado miembro requerido», no cabe la denegación, sino que «la medida o la orden se
adaptará, en lo posible, a una medida u orden conocida en el ordenamiento jurídico de dicho Estado miembro que
tenga efectos equivalentes y persiga una finalidad e intereses similares».
Finalmente, la forma y el procedimiento en que los jueces y tribunales españoles han de aplicar el citado reglamento
se regula en la disposición final ‍25.ª de la LEC, introducida por la Ley ‍29/2015, de 30 de julio.

Existen otros reglamentos que regulan la eficacia extraterritorial en materias concretas (esencialmente las que se
excluyen del ámbito del ‍1215/2012): — Reglamento ‍2019/1111, en materia matrimonial y de responsabilidad
parental— Reglamento ‍650/2012, en materia de sucesiones mortis causa. — Reglamento ‍4/2009, en materia de
obligaciones de alimentos.
Todos imponen el principio del reconocimiento automático, pero, salvo el de alimentos, exigen el execuátur.

Ejecución de títulos extranjeros (artículo ‍523).

1. Fases. Según la doctrina del derecho internacional privado (por ejemplo, ESPLUGUES MOTA), la eficacia
extraterritorial de las decisiones extranjeras sigue un procedimiento trifásico, consistente en:
1) El reconocimiento, que consiste en reconocer a la decisión de que se trate los mismos efectos que tiene en el
Estado de origen.
2) La declaración de ejecutabilidad o execuátur, que consiste en atribuir fuerza ejecutiva a la decisión de que se
trate. El execuátur no hace falta para conseguir inscripciones o modificaciones en registros públicos.
3) La ejecución propiamente dicha.
El artículo ‍523. 1. Para que las sentencias firmes y demás títulos ejecutivos extranjeros lleven aparejada ejecución en
España, se estará a lo dispuesto en los tratados internacionales y a las disposiciones legales sobre cooperación
jurídica internacional». La materia viene regulada en la Ley ‍29/2015, de 30 de julio, de cooperación jurídica
internacional en materia civil, que derogó los artículos ‍951 y siguientes de la LEC de 1881.

EJECUCIÓN DE LAUDOS ARBITRALES NACIONES Y EXTRANJEROS

Los laudos arbitrales son títulos que llevan aparejada la ejecución (artículo ‍517.2.2.º de la ‍LEC). Su ejecución se
regula en los títulos V
‍ III y IX (artículos ‍44 ‍y ‍45 y 46) de la Ley ‍60/2003, de 23 de diciembre, de Arbitraje.

NACIONALES. «La ejecución forzosa de los laudos se regirá por lo dispuesto en la Ley de Enjuiciamiento Civil y en
este título» (artículo ‍44).
Compentencia. 8LA. Será competente el J1ªInst del lugar en que se haya dictado.
Ejecución. Las únicas especialidades que contiene la Ley de Arbitraje en esta materia son las señaladas en su
artículo ‍45, sobre la suspensión de la ejecución del laudo cuando se ejercite la acción de anulación:
45LA. 1. El laudo es ejecutable aun cuando contra él se haya ejercitado acción de anulación. No obstante, en ese caso
el ejecutado podrá solicitar al tribunal competente la suspensión de la ejecución, siempre que ofrezca caución por el
valor de la condena más los daños y perjuicios que pudieren derivarse de la demora en la ejecución del laudo. La
caución podrá constituirse en cualquiera de las formas previstas en el párrafo ‍2.º del artículo ‍529.3 de la Ley de
Enjuiciamiento Civil. Presentada la solicitud de suspensión, el tribunal, tras oír al ejecutante, resolverá sobre la
caución. Contra esta resolución no cabrá recurso alguno.
2. El LAJ alzará la suspensión y ordenará que continúe la ejecución cuando conste al Tribunal la desestimación de
la acción de anulación, sin perjuicio del derecho del ejecutante a solicitar, en su caso, indemnización de los daños y
perjuicios causados por la demora en la ejecución, a través del 712 y ss. LEC.
3. El LAJ alzará la ejecución, con los efectos previstos en arts. 533 y 534LEC, cuando conste al Tribunal que ha sido
estimada la acción de anulación.

EXTRANJEROS.
Compentencia. 8LA. Para el reconocimiento será competente la Sala de lo Civil y de lo Penal del TSJ de la CA del
domicilio o lugar de residencia de la parte frente a la que se solicita el reconocimiento. Para la ejecución será
competente el J1ªInst con arreglo a los mismos criterios.

46LA. 1. Se entiende por laudo extranjero el pronunciado fuera del territorio español. 2. El exequátur de laudos
extranjeros se regirá por el Convenio sobre reconocimiento y ejecución de las sentencias arbitrales extranjeras, hecho
en Nueva York, el 10 jun 1958, sin perjuicio de lo dispuesto en otros convenios internacionales más favorables a su
concesión, y se sustanciará según el procedimiento establecido en el ordenamiento procesal civil para el de
sentencias dictadas por tribunales extranjeros.

ConvNY. El solicitante presentará demanda y original o copia debidamente autenticada de la decisión o convenio
arbitral y su traducción al castellano, en su caso. Causas tasadas de denegación de reconocimiento y ejecución: Si, al
firmar el convenio arbitral, alguna de las partes estaba sujeta a alguna incapacidad; Si la parte contra la que se invoca
el laudo arbitral no fue notificada de la designación del árbitro o del procedimiento arbitral ; Si el laudo resolvió
cuestiones no previstas en el compromiso; Si el tribunal arbitral o el procedimiento arbitral no se han ajustado al
compromiso, o, en defecto de tal acuerdo, a la ley del país donde se haya desarrollado el arbitraje; Si el laudo arbitral
ha sido anulado o suspendido por una autoridad competente del país donde se hubiera dictado .