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Las pautas proponen que el niño duerma solo siguiendo una rutina fija, con 20 minutos de compañía inicial y visitas breves si llama, aumentando el tiempo entre visitas. Se enfatiza la necesidad de mantener la calma, no ceder ante berrinches y reforzar la conducta madura del niño.
Las pautas proponen que el niño duerma solo siguiendo una rutina fija, con 20 minutos de compañía inicial y visitas breves si llama, aumentando el tiempo entre visitas. Se enfatiza la necesidad de mantener la calma, no ceder ante berrinches y reforzar la conducta madura del niño.
Las pautas proponen que el niño duerma solo siguiendo una rutina fija, con 20 minutos de compañía inicial y visitas breves si llama, aumentando el tiempo entre visitas. Se enfatiza la necesidad de mantener la calma, no ceder ante berrinches y reforzar la conducta madura del niño.
- Acostarse todos los días a la misma hora, siguiendo un orden fijo
(vaso agua, lavar dientes, leer…). Buscar estímulos que le ayuden a sentirse tranquilo inicialmente (puerta abierta, luz en el pasillo…) - Posible acuerdo: en la habitación de Mario, 20 minutos tumbados juntos para hablar, mimos, leer juntos… pasados los 20 minutos la madre le da las buenas noches y se va. - Si Mario quisiera argumentar o debatir para cambiar el plan, no entrar en discusión con él, repetir con tranquilidad la pauta a seguir y salir de la habitación “Mario, te estás haciendo mayor y sabes que tienes que dormir solo, buenas noches” (tono tranquilo y afectivo, sin alterarse. - Si Mario llama porque no puede dormir, se entrará en la habitación y se repetirá la frase tranquilizadora en tono cariñoso, sin alterarse pero sin ceder, y se vuelve a salir de la habitación. Seguir la siguiente pauta temporal: - 1ª vez que llama: entrar a los 4 minutos - 2ª vez: a los 5 minutos - 3ª vez: a los 7 minutos
- Intentar pensar entre los dos en situaciones y momentos en los que
Mario pueda sentir los sentimientos de seguridad y cercanía que siente cuando duerme con su madre, pero que sean más adecuados a su edad (leer en el sofá juntos algo que le guste, hacerle un masaje, cocinar algo juntos…)
- Es necesario tener claro que al principio Mario se va a oponer a esta
situación, y que se van a dar situaciones difíciles (rabietas, dormir en el suelo…) Cuando se den estas conductas se espera a que termine el momento de “reto a la autoridad”, y se le invita a que vaya a su cama nuevamente, recordándole que dormir solo es una meta que se han propuesto los dos, y que les va a hacer sentirse orgullosos y satisfechos a ambos. - Es importante estar seguros de que estamos dispuestos a afrontar las situaciones difíciles que van a surgir, si hay dudas es mejor no empezar la intervención, porque varios fracasos sobre el mismo tema hacen muy difícil su solución. No buscar escusas para saltarse el plan un día (tiene fiebre, ha visto una película de miedo…)
- Evitar hablar del tema del sueño constantemente durante el día, y
que Mario no escuche a otros adultos preguntar por el tema. Los primeros días se puede repasar con Mario lo que se va a hacer, antes de irse a dormir, para que él anticipe la situación y se predisponga a cumplir su parte.
- Llevar un registro de conducta para analizar la evolución y modificar
posibles problemas. Posibilidad de tachar cada día de éxito, y si alcanza 21 días seguidos durmiendo solo (tiempo estimado para crear un hábito), se puede buscar un premio de actividad (ir juntos a algún sitio, hacer alguna actividad juntos, que venga un amigo a dormir a casa…).
- Si tras varios días de éxito hay un fracaso, ponerse en contacto
telefónico inmediato con la orientadora, para valorarlo e intentar motivar a Mario.
- MUY IMPORTANTE reforzar con halagos y felicitaciones todas las
conductas de Mario que indiquen madurez y autonomía, mostrar nuestra alegría por lo mayor que se está haciendo y por comprobar que es capaz de hacer las cosas POR SI MISMO.