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ELABORACIÓN DE OBJETIVOS

1. DEFINICIÓN Y CARACTERÍSTICAS

Los objetivos son enunciados que expresan las metas que se desean lograr o alcanzar, luego de realizar una
determinada acción. Los objetivos pueden plantear: a) metas finales de aprendizaje, b) metas de proceso de
investigación, c) metas de un proceso de diagnóstico o, d) de un proceso de intervención. En todos estos casos los
objetivos deben describir el resultado que se desea obtener, NO las acciones que se deben llevar a cabo para
alcanzarlos.

Varios autores coinciden con la definición anterior:

“Es algo que se desea conseguir porque será la demostración de que se ha aliviado o
resuelto el problema que padecen una serie de sujetos o unidades” (Fernández
Ballesteros, 2000).

Es “una meta; un tipo de conocimiento que se pretende alcanzar” (Tamayo, 1999;


Flores y Tobón, 2004).

“Corresponden a metas, propósitos y logros” (Hurtado Barrera, 2000).

2. ¿QUÉ CARACTERÍSTICAS SUELEN TENER LOS OBJETIVOS ELABORADOS CORRECTAMENTE?

a) En su redacción, los objetivos suelen ser claros, sencillos, acotados y medibles.

b) En su redacción, éstos están planteados como un fin y no como un medio.

c) Se describen como metas alcanzables, considerando las condiciones con que se cuenta, y/o se podría contar.

d) Se expresan en forma de verbos en infinitivo. Por ejemplo: diseñar, elaborar.

e) Especifican un solo resultado esperado. Al respecto, un error que se comente con frecuencia en la redacción de
objetivos se podría ejemplificar del siguiente modo: supongamos que se ha pensado en un estudio cuyo objetivo es
“Indagar en estrategias de evaluación auténtica que puedan mejorar la retroalimentación de resultados”. Si leemos el
objetivo una vez más, nos podemos preguntar ¿qué es finalmente lo que se desea alcanzar este estudio: indagar en
estrategias de evaluación auténtica o mejorar la retroalimentación de resultados? Adicionalmente, se puede observar
que en un solo objetivo se ha propuesto el logro de metas que apuntan a distintos ámbitos, ya que el objetivo de
“indagar en estrategias de evaluación auténtica”, está orientado al diagnóstico o al logro de un proceso de investigación;
mientras que el objetivo de “mejorar la retroalimentación de resultados”, apunta al logro de una acción.

f) Al leerlos resultan coherentes con etapas previas de una determinada tarea. Por ejemplo, si se plantean objetivos para
diseñar una intervención, éstos deben ser coherentes con el análisis previo de las necesidades y del problema
diagnosticado; si se plantean las metas que se quieren lograr con el proceso de recolección o producción de
información, éstos deben ser coherentes con una propuesta metodológica y/o teórica previa; si se plantean objetivos de
aprendizaje, éstos deben ser coherentes con un modelo de aprendizaje.
3. CLASIFICACIÓN

Ya sea que se planteen objetivos orientados a la investigación, al diagnóstico o a la intervención, éstos se clasifican en
generales y específicos.

3.1. Objetivo general: Enuncia el resultado final que transforma un problema o hipótesis central. En el caso de la
investigación, el objetivo general determina el o los alcances del estudio y operacionaliza la pregunta de
investigación. También informan sobre la finalidad de una acción, respondiendo a la pregunta, ¿qué es lo que se
pretende? (Banz y Valenzuela, 2004; Lucero y Valenzuela, 2017).

3.2. Objetivos específicos: Corresponden a los logros parciales que deben llevar a para la consecución del objetivo
general. Los objetivos específicos sirven de guía para conducir las acciones o el desarrollo de estudios por
etapas. En el caso de la investigación, los objetivos específicos deben dar respuesta en su conjunto a la pregunta
de investigación (Banz y Valenzuela, 2004; Lucero y Valenzuela, 2017).

Los objetivos específicos deben ser (Lucero y Valenzuela, 2017):


 Dirigidos a los elementos básicos del problema, hipótesis central o constructo propuesto. Por ejemplo, si el
objetivo general es “Mejorar los procesos de retroalimentación de desempeños de los estudiantes”, para
elaborar los objetivos específicos hay que preguntarse ¿qué elementos se pueden desagregar del constructo
“retroalimentación de desempeños”?
 Medibles y observables.
 Claros y precisos.
 Seguir un orden metodológico y/o lógico.
 Deben ser operativos.

El siguiente esquema sintetiza la clasificación presentada:

Objetivos Metas finales


generales Formulación amplia y global

Objetivos Logros parciales


específicos

4. ¿CUÁLES SON LOS VERBOS QUE SE UTILIZAN PARA LA ELABORACIÓN DE OBJETIVOS?

Es habitual que se utilicen verbos como “describir”, “determinar”, “demostrar”, “examinar”, “especificar”,
“indicar”, “analizar”, “estimar”, “comparar”, “valorar” y “relacionar” en el planteamiento de objetivos
(Hernández, Fernández, Baptista, 2014). No obstante, la elección del verbo dependerá de la orientación de
la acción que se quiera llevar a cabo.
Por ejemplo, si se desea levantar información para diagnosticar una problemática, levantar necesidades, o
bien, realizar una investigación, cualquiera de los verbos mencionados inicialmente pueden resultar muy
útiles. Pero, si a partir de esos resultados de investigación o de las necesidades detectadas se proponen
objetivos para intervenir, los objetivos deben estar orientados a “aumentar”, “mejorar”, “potenciar” y/o
“promover” una variable.
A continuación se enuncian verbos utilizados con frecuencia en la formulación de objetivos de investigación (Hurtado
Barrera, 2000):

Verbos ¿Qué se desea alcanzar?


Analizar Estudiar un elemento en forma detallada, distinguiendo y separando sus partes para conocer su composición.
Asociar Establecer relación entre personas o cosas.
Clasificar Ordenar o disponer por clases.
Comparar Medir los atributos de dos o más objetos para descubrir y estimar sus diferencias o semejanzas.
Cuantificar Expresar numéricamente una magnitud.
Describir Representar a uno o más personas o elementos por medio del lenguaje y de las mediciones tomadas en el
estudio, refiriendo o explicando sus distintas partes, cualidades o circunstancias.
Determinar Señalar, fijar algo para algún efecto (para una descripción o comparación), ya sea una medida que los
represente, un efecto, entre otros.
Establecer Dejar demostrado y firme un principio, una teoría o una idea.
Identificar Reconocer si una persona o cosa es la misma que se supone o se busca.
Jerarquizar Ordenar de manera graduada algo (ideas, criterios, caracteres, datos, entre otros).
Medir Definir numéricamente una cantidad con su respectiva unidad.

Tabla n°1. Verbos utilizados con frecuencia en la formulación de objetivos de investigación.

Para la elaboración de objetivos de conocimientos y conductas, Bloom (1956) propuso una taxonomía jerárquica de
objetivos, la cual plantea que el logro de aprendizajes en niveles superiores dependerá del logro previo de aprendizajes
en niveles inferiores. Algunas actualizaciones de esta taxonomía incluyen seis niveles de aprendizaje, los cuales se
grafican en la siguiente tabla junto a algunos verbos que pueden resultar de apoyo para la elaboración de sus objetivos
(Krathwohl, 2002):

Nivel de aprendizaje Verbos (acción clave)

Crear Diseñar, formular construir inventar, crear, componer generar, derivar modificar, desarrollar.

Elegir, apoyar relacionar, determinar defender, juzgar calificar, comparar contrastar, argumentar
Evaluar
justificar, apoyar convencer, seleccionar, evaluar.

Clasificar, desglosar categorizar, analizar diagramar, ilustrar criticar, simplificar contrastar, diferenciar,
Analizar
asociar.

Aplicar Calcular, predecir, aplicar, resolver, ilustrar, usar, demostrar, determinar, modelar, realizar, presentar.

Comprender Explicar, parafrasear, replantear, dar ejemplos originales de, resumir, comparar, interpretar, discutir.

Recordar Enumerar, recitar, describir, definir, nombrar, combinar, citar, recodar, identificar, etiquetar.
 
Tabla n°2. Niveles de aprendizaje y verbos asociados.
5. REFERENCIAS

Banz. C. y Valenzuela M. (2004). Intervención psicoeducativa en la escuela y el rol de psicólogo educacional. Santiago:
Ediciones Universidad Diego Portales.

Flores, R. y Tobón, A. (2004). Investigación educativa y pedagógica. Bogotá: Mc Graw Hill.

Hernández Sampieri, R.; Fernández, C y Baptista, M. P. (2014). Metodología de la investigación (6ta Edición). México D.F:
Mac Graw Hill Education.

Hurtado Barrera, J. (2000). Metodología de la investigación holística (1ª Edición). Caracas: Fundación Sypal.

Krathwohl, D. (2002). A Revision of Bloom’s Taxonomy: An Overview. Theory Into Practice, 41(4), 212-218, DOI:
10.1207/s15430421tip4104_2

Lucero, Y. y Valenzuela, R. (2017). “Conceptos y recomendaciones prácticas para la formulación de Hipótesis y Objetivos”.
Documento elaborado para el Diplomado metodología de la Investigación. Facultad de Medicina. Universidad de
Chile. Recuperado de http://pediatrianorte.med.uchile.cl/investigacion/cursos/Hipotesis%20y% 20objetivos .pdf

Tamayo, M. (1999). La investigación (3ª Edición). Bogotá: Arfo Editores.

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