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Integración sensorial y sistema vestibular:

Experiencia sensorial e integración sensorial Las experiencias sensoriales incluyen tocar, moverse,
controlar el cuerpo, ver, oír y elevarse contra la gravedad. Pero no son experiencias aisladas, porque
los sentidos trabajan juntos. Cada sensorio interacciona con los otros para componer un cuadro
completo de quiénes somos, dónde estamos y qué hay a nuestro alrededor. A través de la integración
sensorial, el cerebro produce esta composición completa y organiza la información sensorial para
nuestro propio uso. En muchos de nosotros, esta integración sensorial se sucede de manera
automática, inconsciente, sin esfuerzo. En algunos, este proceso es ineficaz y demanda esfuerzo y
atención con pocas garantías de éxito. Cuando esto ocurre, las metas que nos proponemos no se
alcanzan de manera fácil. La integración sensorial provee una información crucial para ser utilizada
después, cuando los aprendizajes y las conductas sean más complejas.

Las sensaciones auditivas y las vestibulares se unen con la percepción corporal y otras funciones
para permitir que el niño hable y entienda el lenguaje. Las visuales se unen también con las tres
básicas (propioceptivas, táctiles y vestibulares) para dar al niño una percepción visual detallada y
precisa y una coordinación visomanual. En el cuarto nivel, todo se junta para adquirir las funciones
de un cerebro completo: la habilidad para la organización y la concentración, la autoestima, el
autocontrol, la especialización de ambos lados del cuerpo y del cerebro…

Dice textualmente Ayres (1983, 61) que «ninguna de estas funciones se desarrolla sólo a una edad.
El cerebro del niño procesa cada nivel de la integración sensorial durante toda la infancia. A los dos
meses, su sistema nervioso opera bastante en el primer nivel de integración, un poco menos en el
segundo y no tanto en el tercero. Al año, el primer y segundo niveles son los más importantes,
mientras que el tercero empieza a serlo un poco más. A los tres años, todavía está trabajando en el
primero, segundo y tercero, y empieza con el cuarto. A los seis años, el primer nivel debería estar
completo, el segundo casi completo, el tercero todavía activo y el cuarto empezaría a ser
importante. El niño aprende las mismas cosas una y otra vez, primero gateando, después andando y
más tarde montando en bicicleta». (1)

SISTEMA VESTIBULAR

Ontogenia del Sistema Vestibular

• Embriológicamente, los órganos del sistema vestibular y auditivo se desarrollan del mismo tejido.
• El tracto lateral vestibuloespinal madura a los 6 meses de nacido – Reflejo Landau
• Respuesta Vestíbulo-ocular madura rápidamente en el primer año de vida.

SISTEMA VESTIBULAR PERIFÉRICO

• Receptores localizados en el oído interno, conectado al órgano auditivo (ej, cóclea)


• Responde a aceleración angular de la cabeza, gravedad, movimientos lineales, y posiblemente a
vibración.
Su participación en la dinámica postural y equilibratoria se produce, principalmente, a través de tres
reflejos: el reflejo vestíbulo-ocular, el reflejo vestíbulo-espinal y el reflejo optocinético

SISTEMA VESTIBULAR CENTRAL

• Integra información sensorial del espacio personal (senales somatosensoriales, propioceptivas,


visuales, y auditivas) con señales del espacio extracorporal (visual y auditivo)

• Contribuye a generar una representación espacial del propio cuerpo en relación al mundo externo
(localización y conciencia del uno mismo) (Pfeiffer, Serino and Blanke, 2014)

El Sistema Vestibular como Contribuyente al Sentido de Movimiento y Gravedad Contribuye a:

• Regulación del alerta (que a su vez influye en la atención)


• Desempeño motor.
• Control postural y capacidad para asumir diferentes posiciones contra gravedad.
• Tono extensor anti-gravitatorio.
• Co-contracción de tronco superior y cuello.
• Coordinación motora bilateral.
• Movimientos oculares compensatorios.

Patrones de Disfunción

Dos tipos de problemas principales de procesamiento vestibular:


– Hipo reactivo: función vestíbular que impacta la discriminación del movimiento y el nivel de
alerta
– Hiper reactivo y temeroso por las sensaciones vestibulares

HIPER REACTIVO:

Inseguridad gravitacional: (pueden presentarse todos o solo algunos)

– Se pone ansioso al ser movido en el espacio.


– Ansioso o temeroso frente al movimiento, subiendo y bajando escaleras, escalando, o
deslizándose hacia abajo en equipos de juegos/plaza.
– Evita despegar los pies del suelo o actividades de equilibrio como caminar sobre cunetas.
– Desagrado ante movimientos inesperados.
– Desagrado ante ser movido hacia atrás en el espacio, incluso al otorgarle soporte en la cabeza y
tronco.
– Se mueve muy cuidadosamente.
– Evita saltar de peldaños u otras superficies.
– Se muestra temeroso al levantarlo en el espacio.
– Miedo a las experiencias de movimiento de la vida diaria
– Evitación de colocar la cabeza en nuevas posiciones

Infantes y niños pequeños: angustia al ser movido.


Pre-escolares: temerosos a las sensaciones de movimiento
Niños escolares: repertorio de estrategias de movimientos limitados y pobre participación en
actividades de motoras gruesas.
¿Qué puede explicarlo?
– Pobre modulación vestibular del input de los otolitos
– Problemas propioceptivos que involucra pobre modulación del input vestibula

Aversión al movimiento: (pueden presentarse todos o solo algunos)

– Disgusto al ser movido en el espacio.


– Nauseabundo después de experiencias en movimiento, tales como andar en auto.
– Experiencias de mareo.
– Experiencias de vértigo o mareo prolongado después del movimiento

HIPO REACTIVO:

Hipo-responsividad / Registro: (pueden presentarse todos o solo algunos)

– Baja alerta expresada en un nivel de actividad aumentado o descendido.


– Demuestra pobre control postural.
– No siempre reconoce arriba y abajo cuando tiene los ojos cerrados.
– Frecuentemente experimenta dificultades de orientación espacial.
– Tiene dificultad para atender a las tareas.

DIFICULTADES VESTIBULARES-BILATERALES

El sistema vestibular central se encuentra hipo-reactivo debido a ineficiencias en el tallo cerebral.


Incluimos los problemas posturales oculares.

– Pobre extensión en prono (boca acajo le cuesta estirar el cuerpo tipo super man)
– Pobre co-contracción y estabilidad proximal– cuello y tronco superior
– Pobre control postural
– Pobre mantencion del campo visual estable
– Puede desear estimulación vestibular intensa y tener alerta baja (no para quieto y tiene poca
atención o parece estar siempre cansado)
– Generalmente tienen una duración corta del NPR (nistagmo post rotatorio, son movimientos
oculares que se dan siempre que hacemos movimientos rotatorios prolongados)

• Indicadores de pobre integración bilateral

– Puntuaciones bajas en pruebas de coordinación bilateral


– Evita cruzar línea media
– Ambos lados del cuerpo no están bien sincronizados

Podría estar afectada la especialización hemisférica


– Retrasos en el lenguaje
– Problemas visual-perceptuales
– Retraso en establecer dominancia de MMSS

• Conductas en el hogar y en la escuela


– Pobre postura
– Parece ser débil
– Aparenta ser de desarrollo típico con un CI (coeficiente intelectual) sobre promedio

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