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DE

Reveloción y vigencio del pensomiento del Primer Jefe de


fos Orientoles y Protector de los Pueblor Libres, Yisionorio
de ki Democracio.

PROTOGO Y NOTAS
rte

M0il TEVlllE0 I s40


IDEARIO DE
ARTIG AS
u-

El Gobierno del Aruguay, eru u.cuerd,o celebrad'o por


eI ]Iinistro de Instrucción, Pública doctor Cyro Gia,m'
bruno, con, el Presidente de la República General At-
tredo Baldomir, resolaló aclquirir la tercera. edición de
la preserute obra, fund.amen[a,ndo la decisión en' los sí-
guientes conceptas:

<<Teníendo en, cuenta el éxito coru qu,e la crítica ha


recibid,o el. <<Id.eario ile Artigas>> d,el, escritor Jua,n Silnsa
Yila; atento a que la primera edición fué distribuída
oticia!,mente en bibliotecas naciowales y extrdnieras y
considerando, llue la lectura clel n»enciottado libro d,ebe
ser recornetudnda entre el al,wm,mad,o de l,as escwelas y
liceos, par cuarlto él retleja, par prim,erd uez, el, tiel
pensamieruto del fwndador de nuestr* nacionalidad.>>

La se.gttnda ed.ición, puesta u ia 't*enta ncr la Edito-


fial Ceibo, se halla agotaCa,
La cttarta eciíción. aparecerá en brete, en la Calec-
ción Clá.sica de la Biblíoteca de Cuitura Uruguaya, de la
cual el señor Silta I'ila. es Director Honorario,

Editorial Ceibo.

TERCERA EDICION
Derechos reservados por el autor para ediciones CEIBO
IDEARIO DE

A RTE GA§
tf-

Revelqción y
vigencio del pensomiento del
Primer Jefe de los Orienfoles y Protector de
los Pueblos Libres, Visionorio de lq Democrocio

SELECCION, PROLOGO Y NOTAS


de

JI,'AN §!TYA Y¡tA


TERCERA EDICION

|¡IIPRESORA t. l. G. U.
MONTEVIDEO
t943
SUMARIO

Pág.

Prólogo I
Eetampa de Artigas 17

DeI pensamiento de Artigas, dijeron 19

Amerieanidad 2L

Cultu¡a 29

Democracia JJ

Enemigoe i¡te¡iores 4t
Federación 47

Finanzas 55

Iomento del fnterior 59

Funciones prÍblicas 63

Libertad 69

Normas morales 81

Patriotismo B9

Peneamientos varios ..... 101


PROI,OGCI
D E T, A PRIMER,,{ B]DICION

Al recu,erdo eI más hondo y el más ako


-
d,e aquellos
-
héroes que los crearon un día, recurren. los pueblos en los
tiempos d,ecisir;os, para inspirarse, para elegir el cannino au'
téntiao, para rsirsifica¡ el sentin.ticnto de Ia patría que eL bien-
estar suele adarmecer ,t' que íuera ert, eI ptsaCo, la más decisipa''
fuerza etnaneipadora.
La l.ínea fundamental de la ideología arüguista, na se
perd,ió rultlca en naestro pueblo v muchas teces ir*píró la
gestión d.e los gobierrws, sin que su saxia deiara de nutrir'
jamús el rumba de la nacionalidad.
Así, el [iruguay retorna, desde Io profundo a la superti'
cíe, al culto de Artigas, porque el destitto reclama pa,ra sus
hijos, el temple moral del Patriarca y la lum'inosidad, de su
pensami.ento que tiene una actualidnd, taru palpitente cono
sí hubiera sido expresad.o pe,ra estos días inquietos y sombríos.
A más de un siglo y cuarto, que su pal'abra fuero pro'
nunciada en la déca.da alucinante de su aaentura por la lí'
berta.d, asombra la rsigenci,a de su ideario que no ha tenida'
aún. la di{usión que coruidero urgente e ind,ispensable, por'
que como un olba que nos airtiera d.esile el pasado, al espíri'
; tu anochecido, en su luz intinita se lué forjando la co¡wien'
cía d.e la ruacionalídad, oríental,
Como utw contr:ibución importante a que esa concien
ci.a se nnantengd. despiertao aígilante y sin' claudica,cíones, he
teunido este ld,eario, tras tatigosa búsqueda que se hizo lle'
uad,era por el caudal de amor que puse en la tarea-
Para ello, he agrupailo el pensamiento del Patriarca, d,e
acuerdo @ sus caracteres tná,s detiníilos, por lo que cad,a ca'
pítulo corresponde a un concepto básico d.e aquellos que ilu-
JL-..{§ SILYA VILA
.rüsnspn el alma. de Artigas hasta transtormarse en pasión
rita.l i¡renuncíable y gue al no ll,egar la tnuerte e¡t el cotn-
bate cien teces o.du*erso, canjeó el Héroe por el destierro tso-
lznto¡io en la soledal. d,el trópico, Iejos d.e las cittilad,es que
no había ama.da.
No pretende, este ldearioo ser una Antalogía. del Pensq,
mí¿ntó de Artigas. No podrá. hacerse ésta, míentrds existan
en la Argentina, millares de d.ocumer,,tos suyos que perñ7.at e-
cen escondid.os en los archioos de la capital y d.e las prouín-
cias con los que nuestro Prócer sostuaiera actiaa catrespon-
d.eneía. De ahí que este libro sólo sea u.n aporte a aqu.el,la
obra d.etírútkta qae algún d.ía se escribirá, (Ntnque es posible
que erl el material inédito qae se estud.ie en el futuro, tto se
hallen tvteüds ideas del tete de los Orientale§, sino, más bíen,
.una reiteración tenaz, como d.e pedagogo o de apóstol, de los
,que tenenoos el honor de publicar en este libro. Mi anhelo
irnpaciente, i.d.entitícado con el de la patria, es que tw petma-
nezca ningúr, uruguayo sin conocer el pensamiento d.e aquel
oisionario, cread.or de la naciona.li.dad. nuestrq que a co-
Ynienzos d,el siglo XIX, se constituyó en el palalín d,e lo de.
mocracia, de la repúblico y de la federación, con palabral
ardi.entes y proféti.cas, con hechos formi.d.ables que olconzatt
para inspirarnos hond,anl,ente erl esta ruta adarasa en que la
trhte real,idad, del mundo supercitsiliza.d,o, col,oca a todos lot
pu,eblos d.e la ti,e.r¡a.
No he altera.do, en mi tarea artiguísta, el sentid,o ni la
lorma d,e los documentos. ilIodernicé, apenqs, ¡tuty pocas p&-
labras, respetand,o como sagrada reliquia, la expresión il.el
Patriarca, junto a la cual he agrega.do la techo y el desüno
gue lleaaba, para, tacílitar la rseriticación por parte de quie-
nes no estuüíeren conformes con el fragmentarístno a eue es-
toy obligailo por exigencia de espacio, reclamo didáctico y
por el ca,rácter popular que he querid,o darle, con el lin ile
qu,e nadie pud,inra mañana, aducír pretefrtos pwa conthu.m.r
ignorand,o el id.eario de Artigas.
Presento, de esta tnartcra, dentro de lo posible, el, Pew
samí.ento puro del caudíllo gaucho, sín la cirautstancia" sin
PROLOGO
los elementos secund.arios que p'ettenecen, a la época yt cafiLo
si el tiem.po hubi.era ofrecido a nti empresa, su má,gico filtro
que tws diera la esencia ideológíca por la que Artigas pro'
yectó la claridad. de su tigura atormentad,a, en las cotrínas que'
¡idas del terruñ.o.
He eairado, además, l,as referencias gue pudieran consl
dcrarse malestas u olensiuas para rutciones y hombres. I[o e¡
necesario negar ni destruir nada ptra que fulgure la estre'
lla intensa d.e su d,estíno. lVo se tame ests actitud co¡no ptt',
derwia ni cobard.ía. Simplemente, no es hora de reabrír aquel
ilramático proceso en el que Artigas fuera oerrcido por la
acumulaclón sin tregtta, de obstáculas gu,e tueron superíotes
a su poilerío material y que lo derrotaron hasta arrirucona'r'
Lo en la soled,ad. puraguaya, pero, del que sale oencedor y agi'
gantada cotÍro ttuÍtcd, hasta no caber en el Río d,e lo Plata y
,canstítuírse en uno de las Líbertadores de A¡né¡icc, sí a los
hechos no las med.imos con. la aara estéril de la' époco pere'
,ced,era erl que se prod,uieron, y los situamos en la perspecthta
limpia d,e la Historia.
Tuao razón Artigas, cuan'do citaba, pd,ro etwotltr&rse en
la posterid,od, a sus enconados adnsersarios, potqu,e eru la In'
m.artalidad, resplandece q.hora su twmbte eotu utl esmalte d'e-
tfinitiuo, Larga es ya la nómina de historiadores arnericanos
que ubícam su ligura en la galería de los Libertadores. Aca-
iaroo imperatioo d.e la aerd.ad y to hici¿ron con nobileza,
"l
,{r.unqu,e falte aún, la unanimidad de las aoces laud,atorías que
no pod,rán tardar mucho para aquel homb¡e que se agitó en
la turbulencia de su época, superá,nd,ola como a.banderado de
id,eas sembrad,as con mano próügar para que las 7ru.eüds ge-
neracíones recogierdÍL el puñad,o de sus claríd.ades sociales, en
ln misma tierra. d,onde fué aiaiero alucinad'o, hasta darl'e, má's
atlá. d,e su sacrificio, el clima espiritual, insustituíble, d.e la
libertaá y de la dcmocracia, Má,s que su cid.a colmad.a d'e dra'
m.áticas peripecias, más que sus palabras foriad.as para la
eternida.d, emociona profund'amente la uni¿lad perfecta de lo
accün y d.el pensamiento d.e Attigos y fluye d,e eso id'entifi'
cación plerta, de eso atambroso consustarwíación, un eietu
JT]AN SILVA YILA
plo insuperable para este pueblo jorsen que é:1. supo plasmar
erL sus dfuts hondos d,e Patriarca, cuando la angustia y la ilu-
síórr llamaroÍL en su pecho d,e bronce y la lucha era tebril y
lo acosabao cuanto más lejarto, la pureza d,e un sueño,
En 1923 se inaugwró en, la Plaza Índ,epend,amcia d.e Moru
teoideo, el lVlonumento a Artígas. El h.omenaje materializí lo
que y(L era recuerdo inolaid,a,ble. Desde entonces, tuuo nti?a-
da y gesto d,e bronce y lcc.uida uruguüya parece cotnenzar en.
ese grdn, centro de su estatua llue si afirma el pasad,o, ha-
bla el lenguaje encend,ido del poraenir conl.o signo d,e a*
luntad heroicu de la patria, en corutituudr el ritmo dscend,ente
de su grandeza.
La, Historia está, llena d,e grand,es frases que se han pwes-
to en, boca, d,e célebres personalidades, sin qu,e muchas d,e
ellas jamós tueran pronu.nciadas. En. aerdad, acontece que se
atribuye a las altas tiguras quc honraron o no) determinados
períodos d.e la Humaruidad,, las palabras que debieron haber
d,icho, las que merecieron expresar o sírnplemente, las que
necesitaban los pueblos, al dar a sus dntepasados, la estatu-
ra del mito.
A nuestro Artigas, no es preciso adjud,ícarle lrases ni ha-
zañas, porque unas ), otras es!án documentad.as. Las colecti-
oidades con tradiciones oscuras o lamenta.bles recurren a la
fantasía que suple, bellamente d üeces, la realídad del ayer,
y@ que los pueblos sin héroes auténticos o innsentados, se djs-
gregan, o decaen en el culto de la patria, al tal,tarles el apoyo
de las col.ummas ídeales desd.e las cuales el pasado nutre e im-
pulsa el poruenir.
Lo que Artigas ha dejado escrito en docurnentos irrefu-
tables y lo que dijera en ocusiones díoersas, está reflejado,
esencidlmente, etu este libro.
No busquemos mérito líterario en la obra intelectual del
Patriarcao realizad,a entre dos comba,tes, en ímproaisad,os cam-
pd.nxentos, míentras llegaba un chasque y otro esperaba com
los caballos listos para la marcha. A pesar de ello, la corres-
pondencía de Artigas tíene unidail expresíua; las i.d,eas se
exponan, con clarid,ad, y luerza lógica; la reiteración, que a
PROLOGO
teces llega a canslr, de los pensamientos fundam.entales, pa-
ra que nadie los oluid,srq, o torciera hasta esc.ul,pirlos en, el es-
píritu de los pueblos, ltace record,w a la antígua pt'osct, cos-
tellana, colmad,a de dignicl.ad. y grand.ezu y má.s que cartds y'
oficios d.irígíd.os a ho¡nbres e institu.ciottes, Íror eI tono sen-
tencioso y la incliruución, a uniuersales generalizaciones, pa-
recetz epístolcs rTwe ltubiera enaiad,o, con sws braa<ts gattchos
tieles, y sus indios que sóla para él lwerom tnansos, al destino,
casí siem,pt'e ignorarla, d,e Ia eternidud..
Tres rwmbos capi,tules totw.arorl las id,eas de Artigas: Po-
líti,catnente, se eondemsaron etu la d,entact"acia, eru l,a repúbli'
ca y en la fedet'ación. Los tres princípias prosíguen con' pal'
pit»rtte oígencia. Los dos prirmeros, ya alcanzad,os, &urtEue no
plenamente, en, Átnérica. El tercero) cot1, sigruos catla día m.,ás
clan'os de próxímt. reafizctción continemtul y unmplid.o, co'
n¡^o sistetn«, in'terna cle la Argen,ti;lu. poca después d,e la
tl..esaparicióru en nÍdestro escenario d.e quien le diera ot"igen
e im.pu,lso it",extíruguible.
Mientros Artigas l.uch,aba par estos iáeoles, con feruor
.:que asombra' grandes liguras de su época eran aristócratüs y
morcárqwicas.
]l{ot's,ltnente, sw acción y su perusaffLiento no se d.iferen-
cit¡ron. Fu.é ju.sto y pred.icó la justicia. Xnflexible cuar¿do el
deli.to no se pudo tolerar; magrláni,mo cuando comprend,ió
las tlaquezas humanas.
De una probid,ad, IÍ.eoada hasta el límite, cwidaba con
m.ás celo los intet'eses del. pueb!.o y del Estado, qwe los pro-
pios y bregaba par el ejercicio de la funclón pública, con
susteridad, sn,graday corno un honor que la patria confería
a sws mejores hombres.
Todu,s sus tnáxintas morales continúan oigentes a traaés
del tiempo y en ellas, nuestra juuentud, puede ínspirarse no-
blemente, para afrontar los días rnás difíciles y am.&rgos.
Desde el pwnto de aista social, Artigas, también se adelantí
a la é¡:oc«. Amigo del ind,io y clel negro, cotno in"dicando a
.4mérica el cami,no d,el anti-racismo, como erxeñando un tra-
famiento que tod.aoía ,ro se otot'ga a aquel,los seres que tan-
JÜAN STLVA YILA
to sirtic¡on a la causa cotutinental. Anhelaba la igualdad an*
te la lev y desdeñé los títulos, «fantasmas del Estaáo>>. Pro-
pició la dktribución d.e tier¡as aptas y no aceptó que se gra-
z'ara a! pueblo, con intpuestos superiores a sus posibílidailes
económicas. Atendíó el progreso de la carnpaña, cotno si pre*
sintiero la función, centralista de las ciudades eru las que no
qztíso entrar, guerrero oencedor, preliriendo gobernar u l,o*
pueblos d,esde una altura junto al río, en catutacto con lo ma-
tlre tierra que no d,eshumaniza y guarda ¡tara el alrna, unc
paz protund,a, una belleza auténtica, una uerdad, d.e agua de
ntanantial.
Artigas twé el caudillo. Bl hombre a quien el pueblo si-
guió siempre en el anÍL&necer de nuestra patría. No tut¡o sol-
d,ad.os mercenarios y rechazó a los que llegoban de las Pro-
airucias alíadas sín el ferxor heroico por la defenso d,el swelo'
amad.o. Su ejércíto fué síempre la montonera gaucha y la iru-
diada, el turbión humano que artastló el aiento en el anca
firme de los potros y que atrcpelló el horizonte porque la
lejanía no tu.üo para eI centauro, colores distantes. Fué el
puebl,o erl arfiLes, el tagabuntlo y el cont¡abandista, el bra.
cero gaucho y el estanciero, lué nuestro campa junto o quien
le habío dado la jutentud, y la hombredad sin Íeto.ceo, por--
que donde esta.ba Artigas, estaba la justícía dunque faltara
la ley que la ciudad fué estructurando lentamente y casi siern-
pre par@ su conxeniencia.
. Por eso, en la histo¡ia de la reuolución rioplatense, Ar-
tigas fué la ¡nu.chedumbre que se expresaba etu el t¡erbo lla-
nleanie de la libertad, frente a los aecínos de las ciwdades, c
las <<elites>> con alma europea,, nacid,as por casualidad em
Buenos Aires y fuIonteaideo y que no sintieron sino mucho.
nuis tarde, la e¡noción auténtica del mu.timiento emancipa-
dor, la aibración del espiritu Ítuel)o, de la criolledail nacíente
e irresistible que no pudo brotar más que en el campo por*
que allí comenzaba la d.iferenciación, la peculíariilad, de Amé*
rica, de lo gracíc de sus colinas y lo protund.íilnil ile sus lla-
tuurq, i m.anítestada para siempre en el silbída del boyero,
en el son lánguido de las guitarras habitadas por cielitot y
PROLOGO,
á,speras en lds décimas corri.d,as de los fogones; en la canción.
est¡emecida de las calandrias y en el desgajamíento sentítnen-.
tal d,e las t¡idal,itas.
El honbre d.e a caballo, et mo¡ador inquieto d,e llanoE
limpios y alcores atajados por arroyos y ríos ínnumerables,
entró en la historia de esta tierra, con Artí.gas, qwíen, lleu6
siempre tras sí, rurnor de multitudes, abejeo caliente de ntutt-
do móoil, harapíento y heroico, siempre d.errotado y ntmcü.
oencido, hasta que al tinal, la Historia le di,ó la razón que
en aida no le permitieron sostene'- ní con la lrente par.tiela
donde se hízo aincha la sangre.
Con haber dado intert¡ención decisiaa al pweblo, ya terl-
dría Artigas, título sobra.d,o para comstituirse en uno d.e lo*
libertadores del continente nueüo. No"die le hubiera hecho
caso a la masa anónima en aquellos tiempos de ari,stocrat:ias
europeds y amerícanas. Mas, no lué sólo el Protector d,e los
pueblos libres y el jete de uno tle ellos, el d,e los orientales.
Artigas predicó también el nueuo uerbo y a principios det
siglo pasad,o, agitaba ya la respland,eciente bandera de lus
ídeas democrá,tico - repablicarurb en medío a los sombríos es-
tandartes tnoruirquicos con que soñaban las hombre,s rnás
encutmbrados de América.
Por eso, el ideario de Artigas tiene moyor signi!ícacíórc
histórica. No fueron. solamente los pensamientos de u.n ham-
bre, sino el programa de un, mouitniemto popwl,ar t¡astísimo
gue h.oy está, consagrado en la letra y en el espíritu de lut
corlstituciones del Plata.
La exahación ile su ligura y de su d.octrina, tras uns
etapa aioid.a tuera de nosotros ntistnos en la que aprend,imos
a mirar para dentro porque el espectácwla exterior que nos
esclaaíza los ojos y el espíritu, es d,ecepcionante, supone urr:.
propósíta tirme d.e consagración a la oriental.id.ad, de atno.
roso culro a la trad.ición uioa de la patría constituída por
todo aquello que pernxarlece, del, trabajo heroico de los qu.e
nos precedieran eÍL el tiempo, pal@ creaL con ello por funC*.
mento, unu cuhura propia cuyo sentido inícial no puede ser
otro que el petuamiento de Artigas.
JÜAN SILVA VILA
En estas pá.ginas, r.tibra y palpita el alma de la nacio
na.lidad uruguaya y ellas ofrecen, corno en un río maraui-
lloso, el tonente de la t¡ocaclón máscula, los saltos de agt+a
de la lucha h.ermasa, la ola rebe'l.de cle la altiuez gallard,ao la
espum.a de la es¡teraruzd y el remanso de la última soledad"
alluyendo todos en u,n caudal ,rl&yor, en el océamo de Amé-
rica,, cwya unión, fué siempre su m.ás terttiente e inalcaruzado
sueño.
Artígas forjó la conaiencía moral. d,e nuestro destíno. En
el yunqwe de su sacrifi.cio, golpeó la aduersidad, sus marti-
.llas d.e angustia. I'a c!,iatriba, la ¡tersecucióm, eI od.io y la
traición. jauría d,e la. {atalidail. mordieron su acción pri'
- -
nlero y su tnemoriu. d,espu.és, en tada el correr del sigl'o XIX,
p(tra cüer d.efinitiv-lmente destrwídos por la oerdad. en la que
,síempte comfía.ra, imperturbabl,e, el aisionario de la Dem'o-
cracia.
Artigtts, habló sientpre pdra América, Al coruocer una
aictoria de, San itÍartírt eru Chile, dispuso que se lesteiara
<el triurrto de las oinlts de la ¡:otria>> 1' et¿ toda su corres-
¡tondencia refieja ltastc dónde estaba irlentificada su cttu,sa
con, la del continente.
I'{o puclo cumplirse el ideel que también otras libert*
dores, en algunos aspectos. aleataron. superando a la é¡toca,
.al siglo y aún. a la dramática actualítlod que xi¡¡imos.
f,o que twé ilusión en elíos, debe ser realidad. etu tuos-
'otros. El tiempo apremia, Los días tiene¡t, sal¡ot' de cemiza,
Vayamos, fraternabnente, hacía la Confederación, de la Lí-
Í¡ertad.
JAAIí SN,VA VTLA.
Montettideo, 1943,
ESTAMPA, DE ABTIGAS 1,¡

«Ea ¡lada parecía un General; su traje era de paisano


y muy sencillo. Pantalón y chaqueta azul, sin vivos ni ltler-
tas? zapato y rnedia blanca de algodón. Sombrero redond.o
. ,con gorro bianco y un capote de bayetón, eran
todas sue
galas y aún todo esto, pobre y viejo. Es hombre de uraa es.
tatura regular y rcbusto. De color bastante blanco, de muy
buenas faeciones, ccn la nariz algo aeuileña, pelo negro y
con pocas canas. Aparenta tener uros 4g años. Su conver-
eación tiene atractivo, habla guedo r pausado. ]io es fácil
sorprenderlo con largos razonamientos. pues reduce la di.
{icultad a pocas palabras y lleno ,1" .or,"}ru erperiencia, tie-
ne una previsión y un tino e¡traordina¡io. Ccnoce mucho el
corazón humano, principa-rmente er de nuest¡os paisanos y
l.í, uo hay quien Io iguale en el arte de marejarlos. Todos
Io rodean y todos Io siguen con arnor, no obstante que si-
guen desnudos y llenos de miseria a su lacio, no por falta
de
reeursos, sino por no oprimir a los pueblos con contribu-
ciones, prefiriendo dejar er mando al ver que no se cumplían
eus disposicioaes en esta parte>).

D á,maso Antonio Larrañaga,

(1). La palabra Artigas, según Menénilez y Felayo, vendría de


Ia
voz 'oArtiga" que signiiica 'oadoctrinado',. En vascuense, ..Arti, eqai.
?ale a ooencina" y 'oága,, a lugar; por contraccién, Artiaga puilo e.e.i.
bilse Artiga. Ártigas, provendrÍa del latín ..artire,, q"" q"i""" á""i"
noahondar".
Artiga también significa .,tierra pronta. para la siembrao,.
E

18 JUAI{ SILVA VILA


<Artigas era de ta1la regular, cuerpo bien desarrollado"
Ojos Ce á urrrl verdoso olaro, su mirada
al¡ierta pero inex-
los objetos y en las per-
,t:".1t , d.eteniéudose rxluy floeo :n cuenta de todo' Pómulog
il"-., tt""¿o inclucla]¡le qlue se tla]¡a naliz agui'
,ir"-.-fi""tes, cabeza en extrerno tlesarrollada' Sutenía fuerte
higote pero
leña era muy pronunciada, carecía de
de paño con
pllif" "trtldu sol¡¡:e las rnejillas' I)sal:a capote
LucLu-nira en invierno. Su tranquitridad era imperturhable»'
Coronel Antanio Díaz'
BE§" PENg"&IbqrMN?'CI B& AE"&TTG.4.S, ts§JHP-ÜN...

"Artigas
aal -.
ciijo siempre las eosas, con ¿lna clari¿lad meri_
dia¡ra. Sus eartas y oficios, c3_e todas ?as épocas" ciL través
de
sus distintos secretarics, todos orlos ticnr¡r el serla
cle su per-
aonalidacl, como si naiiie, rrá¡r üuc é1, Ias huliese-insp;*A"
y redaetaclo."
Pcbla Blcnco Acexedo.

'oSuyo fné el pensamiento de Ia nación crientaL,,.


Ri¡;era InCarte,

"Escribía eon ¡nueha naturalidad y era capaz cle gran-


des concepciones. Era exacto er¡ sus relatos y a veces,
elo*
cuente."
General de Vedi.a.
o'Estalla
eI Protector dictando a Cos searetarioo que ocu-
paban, e¡l to'no de r¡na ¡nesa de piuo, ras dos únicis
sillas
que había e¡r toda Ia choza. El pisc se encontraba
sembrado
de osteintosos sobres de todas las Fnovincias, distantes algu-
nas de ellas hesta rnil q,inientas ¡niilas de ese centro
le
operaciones, dirigidos a Su Excelencia, el protector.
En la
puerta, estahan los callallos jadeantes de }os correos
qu.e sa_
Iían con igual frecuencia. fniaiada ¡rai co¡rversaeión, la in-
terrurnpió la liegada de un gaucho, y antes de que lrubieran
transcurrido cirnco minutos? ya eI General A*igm estaba
de r¡uevo di.ctanclo a sus secreta¡:ios.r,

R"abertson, aiajero ínglés, al describir el


c 6.rn p u?rerx.to d e P urit ic a ci ó n,
N JUAN SILVA VILA
*Artigas fué un hombre superior' dotado de una fir-
"ut*. y de principios que hubieran hecho e} or'
*"rt-d"
grrlto d* Ios héroes de la antigüed'ad"'
tr eón Bai'd'att' París' 7932'

el eentir comrin de
'oAIlí, en eI ambiente agreste' donilg
los hombres de Ia ciudad sólo veía
barbarie' disolución so'
vié
.r"r#a rebelde a cualquier Ftopósito constructivo'
;l'gtr" cJudillo, y sólo é1, l-a virtualidad de una
"iut, dernocracia
nativas' podían
en formación, cuyos instintos y propensiones
encauzar§e como fuerzuu o,gá,i"us'
dentro de la obra de
había de cumplirse para el
fundación social y política [ue
porvenir de estos pueblos"'
José Enrique Roiló.

.,No me cabe duda alguna gue la personalidad de Artigas


argentino y
ha contribuído a crear ei fedetalismo nacional ptl ll
su recuerdo ha sido atacado en forma
tiespiaCaila'
de lucha' Ilasta 1820'
error de coneepto o por apasionarniento
ino"gul'l" y lu'oát ilejó de ser argentina' Venci'
.o
Jo """1¿o ".
aquella t""l'u po" Ramírez y prisicnero en
e1 Para'
"nd"iuta de actuai conlo persona física' pero espíritu
gory,
su
federales"'
i"goira p"rurrdo en las orientaciones de los
Emilio Rat:ígnani, B d'e agosto ite 1939'
AMERICANIDA,D

Los o!:ientales juraron eu Io -hondo de su corazón, un


odio irreconciliable, un odio eterno a toda clase de tiranía.
Nada era peor para ellos, que humillarse de nuevo y afron-
tarían la muerte misrna antes que degradar el título de ciu-
dadanos que habían sellado coÍr 6u sangre. Pero estaba re-
servado der¡rostrar a ellos el genio arnericano, firmes siem-
pre en Ia grandeza que los impulsó a dejar los pocos inte-
reses que les restar y su país para trasaladarse con sus fa-
milias a cualquier punto donde puedan ser litrres, a pesar
de Ioe trahajos, miserias y ma1es.
A la Jwnta del Paragual; 7 de Diciembre de llll.

Los vecinos orientales se considerar¡ unos con los para.


guayos en todas sus relaciones.

A la Jwnta d.el Paragual: ? de Dicíembre ¿le 1811.

Puede contar en cualquier determinación con este gran


resto de hombres libres, muy seguros de que marcharán gus.
tosos a cualquier parte donde se enarbole el estandart€ con.
servador de la libertad y que en Ia idea terrible, siempre
encantadora para ellos de derramar toda su sangre antes
gue volver a gemir bajo eI yugo, sólo quisieran exhalar sus
alr¡ras con el rínico objeto de no ver sus grillos. Ellos de-
sean no sóIo hacer con sus vidas el obsequio a sue senti-
mientos, sino también a Ia consolidación de Ia obra que
mueve los pasos de los seres que habitan el mundo nuevo.
A la Junta d,el Paraguay; ? ¿l.e Dicíembre ¿l"e 1811.

t
22 JUAN SII,VA VILA
Los orientales tie¡len fijos los ojos en la plotección Ce
ese eobierno. No soll ya unos hombres entusiasrnados los
que la imi;loran; yo presento ahora unos hombres conspro'
ietidos por la neeesidad. Ellos son }os hijos de la victoria'
pero se han vis:o precisados a tomaf stls laureles antes de
¡ecibir de ese Gobiérno, la influencia que del:e hacerloe
i¡rmarcesibtres. tr,a activiclad es la única que puede ccnservar
su existencia de una rnanera útil, aI grara sistema de los
americanos; yo, a uombre de ellos, apelo a la razón y a }a
jresticia de ese Gol:ierno"
Al Gobíerr¡'o de las Proaíneias d'el Ilío d'e la P!'ata; 24
de Dicíem.bre de 1811"

Yo siento inJinito tener que aiejarme de la costa, pero


veo y aguardo la necesidad de hacerlo si son&os atacados v
los auxilios no llegan; de 1o contrario, viéndome yo corr
todos aquellos que se me oflecieron, pasaría a Ia otra banda'
hallaría a los enemigos, ZY qué no harían entonces las arnaas
de la libertad?
Cubiertas de gloria extenderían sus triunfcs hasta dar'
los a nuestro continente entero.
Al Gabernadar de Co*iemtes; 23 d'e Enero de 1812

Dimos miles de pasos glorioso§ para nuestra libertad'


Ilero, un genio rnaligno en medio de n'osotros'-parecía
de-
hi*ur.u solarnente a conducirnos a Xa retrogradación hasta
ponexnos en la gran crisis en que nos hallamos' No 1o dude
lsa Junta, este es el último esfuerzo de la América del Sur'
Aquí se va a fi3-ar nue§tro destino y si el laurel no adorna
resultado de tra eampaña que va a al¡rirse, no queda otro
"1
lecur-so a los honnbres lil¡res para poder serlo'

-1 lc lunta del Faragu'tttt 3 de AbriL de 18]-2'

Si e¡re gr:ande, si este único esfuexzo ¡\e los americanos'


-: ii.-r: otlc ebjeto qrxe verter 5u sangre y ltacer con. 61rg
IDEARIO DE ARTIGAS
cadáveles el monum.errto a la gloria de sus tiranos, ¿de qué
!e servirá a Ia Provincia de1 Faraguay hal¡erse rnantenido
a Ia deír':lsiva?
El geuricXo y etr llanto lle¡rarán toda Ia Aurérica y su
inundaeión Llegará preeisanaente a ese terri.torio; el estruen-
do de las cadenas volverá a resonar por todas partes y e6e
aehio gobierno 6e verá en la precisión de sentirlo ell torno
de eí, sin poderlo rernediar ya.
A la Junta del Paragway; 3 de Abril de 1812.

Ila llegado el caso de dar uil centro al todo y que las


fuerzas americanas deban reunirse en Ia campaña.
A"la luruta del ParagucT; 3 de Abrit de 1812.

Todo estuvo siempre en rni mano? pero, el interés de


A¡nérica era el rrío.
Al Gobierno d,e Baenos Aires; 9 d,e Octwbre de 1812.

Si la libertad, para garantir de sus triun-fos verctraderos


y ostentarse en todo su esplendor en medio de los horrbres,
exige una unión sostenida por todas las virtudes, puede li-
*onjearse ya de su estableciraie¡rto en la liga de la Frovincia
del Faraguay con los orientales.
A Ia Jwnta d.el Paraguay; 75 de No'.-iembre d,e 18tr2.

Esta}¡a eserito en eI Iibro de la injusticia que los ori.e¡r-


tales hal¡íarl de g'ustar acíbar más arnargo que el del Ayuí.
Era preciso que después de hal¡er despreciado su rnérito,
se tre pusiese .en el rol de los crírnenes para ser tratados
como enemisos, unos hombres que, cuhiertos de Ia gtroria,
han entrado, Ios primeros, en la inruortaXidad de Araérica.
Al, Gerueral Sarratea; 25 d,e Diciembre de 7872.

AI fin, todos confiesarr que e¡r Ia constancia del pueblo


21 JUAN SILVA VILA
oriental sobre las márgenes del Uruguay. se garantieron los
prosectos de toda la América libre.
Al General Sarratea; 25 de Diciem.bre d.e 7872.

La hbertad de Ia América forma mi sietema y plan-


tearlo, mi rínieo anhelo.
Al General Sarratea; 77 de Febrero d.e 7873.

Los planes grandes de Ia América en eu revolueión g'1o-


riosa deben sellarse y la Provincia Oriental ha o{reeido sus
cenizas hasta asegurar su consolidación.
At Gobierno de Bwenos Aires; 29 de lwwio d,e 7813.

Todas las personas libres, de conocida adhesió:r a le


causa de América, po<irán ser noml¡rados electores o dipu'
tados.
Circular ilel 15 de Noaiembre d'e 1813.

Mis desvelog no cesarán hasta ver asegurada Ia Provin'


cia contra los tiranos y afiar:'zar la Libertad en sus polos
verdaderos, para que la posteridad venere en sus mayores
Ia iuvestidura de hombres libres. Yo apresuro mis marchas.
para que aparezca en Ia A¡nériea de1 Sur ese día grande de
su salud y consuelo.

Al Ayuntamíento de Monteoideo; 29 d,e fuÍarzo de 7815"

Yo deseo que los indios, en sus pueblos, se gobiernerr


por sí, para que cuiden de sus intereses como nosotros de
los nuestros. Así experimentarán la felicidad práetica y sal'
d¡án de aquel estado de aniquilamiento a que los sujeta la
desgracia. Recorderros que ellos tienen el principal dere-
cho y gue sería una degradación vergonzosa, para uosotros,
na.ntenerlos en aquella exclusión que hasta hov han pade'
ci,Jo. por Eer ind.ianos. Acordémonos de su pasada infelici-
IDEARIO DE ARTIGAS 2&

dad y si ésta loe agobió tanto, que han degenerado de su


ca¡ácter noble y generoso, enseñérrrosle nosotros a ser hom-.
bres, señores de si misuros. Para ello, desros la mayor im-
portancia a sus negocios. Si faltan a sus deberes, castígue-
eeles; si cumplen serl'irá para que los demás se ennaienden,
tomen amor a la Fatria, a sus pueblos y a sus semejautes.
Al Col¡ernad,or d,e Carrientes; 3 d,e Mayo áe 18i"5.

Nosotros no debemos tener en vista Io que podemoo


recpectivamente sino lo que podrán todos los pueblos reuai-
dos, porque a donde quiera que se presenteu los peninsula-
res será a todos los americanos a quienes tendráni que
afrontar.
At Cabílito de lúonte¡síd,eo, 9 ile mayo ¿te 1815.
Eo preeiso que a los indios se les trate con más consi-.
deración, pues no es dable cuando sostenemos nuestros de-
rechos excluirlos del que justamente les corresponde. Su
ignorancia e incivilizació¡r no es delito reprensible. Ellos
deben ser condolidos más bien de esta desgracia, pues no
ignora ese Cabildo quién ha sido su causaute, ¿habremos de.
perpetuarla?
AI Cabildo d,e Corrienteso 37 de enera de 7876.

Acabo de saber eI triunfo que han conseguido en Chi-


le, Ias armas de la Patria, contra el poder de los tiranos.
lVfe es muy satisfaetorio anunciar a ese Cabildo, este Euee-
¡ so? para que sea celebrado en esa Provincia como se ]ra ve.
rificado en Iaí demás. Yo celebraría que ese triunfo sirviese
de ejemplo para dirigir con efieacia nuestros enapeños con.
tra los que hoy intentan nuestra subyugación y en el orien-
te se hiciesen igualmente respetables las armas de la Patria
y se repitiesen las glorias que supieron adquirir por su €ner.
gía y virtudes.
Al Cabilito Globernad,or de Corrientes, 5 de nlarzo de 1817.
25 JUAN SILVA VILA
Sólo por una {ataliilad de la suerte pued'ea e§tar sepa-
rados nuestros af,anes por la eour¿in feliaidad. Eslahonados
íntimamente por las resc,luciones de opinión, interés y
amistacl, nada parece tan justo camo unir ¡luestros esf,uerzos
por man.teuer tan nobne empeiio. No es ya la sola guerra
de opinión c¡uien dirige nuestros pasos, es la do¡ni¡ración
d" tr* extranjero atreviElo que intenta restal¡leeer su feli'
eidad so}¡re nuestras ruinas. Co¡r este {in, marchan <iiputa-
dos ante ese supremo gollierno. Es de e§pera!:se que rea-
nimado el interés que demam.da la salud de tra Fatria, pro'
cure con Ia influencia eI resta]¡lecimiento de la mejor
ar¡nonía. Así, nuestr:os esfuelzos se hará¡r respetatrrles de
cualqnier extranjero; el mundo eBtero venerará Eue§tras
virtudes y la poeteridad nos llenará «ie bendioiones'
At Cs,bíld.o de la Asuttción del Paraguayo jwlio de' 1817'

Si por un fatal principic, la dirergencia de opiniones


nos ha puesto en una alternativa peügrosa, eIla debe cesar
uediando eI sostén de la mutua reciprocidad' Iio ignora la
tonsonancia que hasta hoy guardan los intereses de esa y
de estas Frovincias y es de esperarse que rearrimado clel
mayor celo por su priLblica felicidad, se digne aeeptar nues'
tros votoc siempre decididos por tan feliz resolución'

A Gaspar de Francia, Supremo Dictador d'el' Paragway, Ju'


lio de 7817.
t
Despléguense las ideas que harán feliz la América del
Sur. Sea ella libre de los extranjeros, desterremos de ¡ruestro
suelo, hasta el polvo del antigtlo despotismo y la posteridad
ag:radecida reconocerá en sus I¡ienheehores el mérito de su
felicidad.
At Cabitdo de Santa Fé, 30 de setiembre de 18tr'8.

\¿Ca har que temer siuo faltar a uno§ §entiüoientos


IDEARIO DE ARTIGAS .7?'

qu einspiran eI honor, Ia razén y Ia suerte de la América


del Sur.
Al Gob, Int. de Santo Fe, don Ma.nwel Aldao, 7.' de d.ície¡n-
bre de 1818.

R.uego a Ud. quiera manifestar a Ios pueblos, Io eagrado


de nuestra justicia por Ia salvación general de la América.
Al Cab. de Ss,nto Fé" d,an Estara.íslao López, 5 de dici.embre
de 1818.

Sea todo su empeño en recordar a }as Proviucias el


'deher sagrado de perseguir a Bus opresores y ¡lo a sus her-
ülanos.
Al Gob. d.e Santa tr7é, don Estaníslao López, 5 de d.íeíembre
de tr.818.

Sean los pueblos libres, decida¡r de su suerte y cualquie.


ra que sea su resolución, nadie se atreverá de nlrevo a vio-
larla. Ella será confornne al espíritu que respira la América
por la }iberatridad de ideas y fijeza de su destino.
,41 Cabíld.o d,e Santa Fé, 4 e!,e febrero de 1819.
Nueetra unión es el mejor escudo co&tra toda y cual-
.quier especie de coalición. Demos el ejemplo y deje IJd. que
ee desplome el ¡lniverso sol¡re nosotros.
' At üirector Ronde:aw. t8 d,e lu{.ío ite L819.

Es preoiso que ese Cabitrdo coaclylrve en los esfuerzos y


,que todos uniforrnes propendamos a calmar la borrasca
que amenaza a la -A.mérica del Sud, para qu.e aparezca en
1as Frovincias de la unión eI día sereno de su felicidad.

Al Cal¡ild,o d.e Corrientes, 24 de noaíembre d.e 1819.

Los pueblos, revestidos de dignidacl y resumidos en ¡i


2E JL:AN SILVA VILA
¡-a¡ derechos, se hallan en oportunidail ile representarlos
francamente, expresar sus votosT fijar sus pactos, y decidir
1os i¡tereses de la Nación. Creo tan importante este paso co-
t
i
mo necesario. Todos deberemos conformarnos a este princi'
pio que eerá elemental y el precursor de la co¡rstitucióu de
Ia Libertad en A¡nérica. Tal es el principio que anima mis
ideas. A é1 están cornprometidas las cinco Provincias que
sostienen cou ardor los intereses de la federación. Sin este
requisito, no creo que hayan ter¡ninado los males de Ia gue-
rra intestina, Fijar su término, cede en ho¡ror de los arneri-
canos y proveer de un eficaz remedio, un deber de todos
los Provincianos. Yo a su frente, continuaré la marcha de
Buestros esf,uerzos hasta ver garantidos los intereses de las
P¡ovincias y que los pueblos respiren de su pasada opresión.
Al Cabitd.o de la Prouítwia de San Juan, 78 d,e Febrero'
da 1820.
C{JTTURA

Seau los orientalee tan ilustrados coñro valientee.

Santo y seña del Ejército, 30 de mayo de 7815.

Yo jarnás dejaría de poner el sello de mi aprobación a


,cualquier obra que en su objeto llevase esculpido el título
-de públiea felicidad. Conozco las ventajas de una Biblioteca
FrÍI¡lica y espero que ese Cabildo cocperará con su esfuerzo
e influjo a perfeccionarla, coadyuvando en los heroicos es'
fuerzos de tan virtuoso ciudadano, el Fresbítero don Dámaso
tr arrañaga. For mi parte dará las gracias a dicho paisano,
protestándole r¡ri ¡nás íntiroa cordia.lidad y euanto dependa
de mi influjo por el adelantarniento de tan noble empeáo.
Espero que ese Cabildo contri]¡uirá con su eficacia a imi'
tar los ánimos de los demás compatriotas a perfeccionar
tau importante objeto y que no desmayará en la empresa
haeta verla realizada.
Al Cabildo cle Monteai.deo, 12 de agosto de tr815.

Al maestro de escuela don Manuel Pagola, rro eola'


.mente no lo juzgo acreedor a la escuela públicar sino'que
ee le debe prohibir mantenga escuela privada. Los jóvenes
,deben recibir un influjo favorable en su educación para
que sean virtuosos y útiles a su país. No podrán recibir esta
,bella disposición de un maestro enem.igo de nuestro sistema
y esta desgracia, origen de los naales pasados? rlo debemos
perpetuarla a los venideroo, cuando trabajamos por leYan'
tarles el alto edificio de su Libertad. Tenga la dignación de
.lla¡nar a dicho don Ma¡ruel Pagola ¡sqsnvini§¡dole sobre
JL-t\ SIL\ A YILA
:E ccrr.soiisni3rto. intimarle la ahsoluta privación de Ia
e!.:i.':nza de niñcs ,v amenazarle ecn castigo rnás severo
=i no relrela su mor{lacidad contra el sisterna, El ameriea¡ro
rlelincuente de ¡e ser tanto rnás reprensible, c&am.to es de,
cxecrabie Eu delito.
Al Cabi,ld,o d,e Mantet¡ideo, 76 de setieml¡re de 1815.

tr{e recibido e} prospecto oriental, prinaer f,ruto de la


preEsa del Est.ado, y conveniente para f,omentar Ia ilustra-
ción de nuestros paisanos. Yo propencleré por mi parte a
deseuapeñar Ia confienza que en lrei se ha depositado con
los eccritos que crea conv¡:nientes a realiza,r tan ¡loble co¡no
difícil er:apeño. Entre tanio, ese Cal¡ildo dtebe velar para
c{ue no se a}:use de la imprenta. f,a lil¡ertacn de ella, aI
paso que proporeiona a los l:uenos ciudacla:ros la utitridad
de expresat' sas ideas .v se:: benéficcs a sils eemejautes, im-
prime en los raalvados etr prurito de escribir con brillos
eparentes v contradicciones pe;:liciosas a la Scciedad. La
solidez en nuestras eripr-esas ha Carlo le consistencia pre.
cisa a la situación política, v es difícil se desplome esta
grande obra, si los escritcs que deben perfeccionarla ayudan
a fijar Lo firme de sus {undar:rentcs.
Al Cabi.klo de frlaruteuideo, 23 d,e setíewbre d,e 1815.

Para mí eE muy doloroso que xlo haya en Montevideo.


¡ra solo paisano que encargado de la prensa de a luz sus
ideas, ilustrando a los orientales y procuranclo inetruirXos en
r¡,rs aletleres" Toclo me deneuestra Ia poaa decisión y la falta
de esXriritu públieo que observo en ece puebtro. Yo depositó
ei: ese Cabildo esta con{ianza, ausioso cie verla desempeña-
de '¡ una {rialdad degradante ha ocupado eI asiento de las
rcscluciones. Más eraergía, más actividad. Be lo co¡rtrario.
iom;.ié pior.iáencias rnás ejeeutivas.
1! Ccbildo de Monteoid.eo, 72 de noaíembre de 1815.-
JDE.{F.iO DE AiTTIGAS éJ

-1,1 cil,o. ls Drensa de l,Iontevideo trra salido a luz con.


objt:r:: di:¡os tie ia púbiica estimación. Sobre ellos podríail
f¡r¡ra;.e i::= ::rejcres reflexiones, con ellos ee adelantaría eL
c,,rcr rncir:riento, Ia energía y la ilustración, coadyuvando la
in.rr¡eaia a cisrentar la páblica felicidad.
-41 Ccbild,o d.e fr§onteuideo, 25 d,e nouiembre de 1815.

Espcro los dos tomos que ese Cahiido ¡ue o{rece refe-
rentes al clescuhrineiento de Norte Arnérica, su revolución,
sus varics eonrrastes y sus progresos hasta el añ.o 1807. Yo
celebraría que esa historia tan interesaate la tuviese cada
uno de los orierrtaies. Por f,ortuna, tengo un ejemplar, pero
él no I¡asta para itrustrar cuailto yo deseo y por este medio.
mucho pocLría adelautarse.
Al Cal¡tldo de Manteai.deo, 77 d.e rnarxo ¿le 1816.

Tengo para remitir a ese Cahildo, el cornpendio de Ia


historia de Norte ,A.rnérica, ansioso de que sus luces tr¡asten
para esclarecer las ideas de esos magistractros y todo contri.
Lruya a fijar nuestros adeLantos.
trte¡u.itiré u¡r cuadcrnito cou las instrucciones para fo..
meEtar el progreso de la vacuna. Lo que interesa es que
ese Cabildo, comprendiendo la irnportancia de este sccorro
I¡enéfico a la hr¡mranidad, no sea omiso en propender a La
utilidad de su establecímiento. Por mi parte, sólo espero
ocasiór¡ de remitir la vacuna y dar con ello una prueba de
mi deseo por el bien general.
Al Cabil.do d.e Carricntes, 2 d.e moyo de 7876.

Celebro que vea Ud. Iogrado etr fruto de sus afanes por
instituir la tsil¡lioteca. Lo que i¡rteresa ahora, es perfeccio-
narla y contribuir a que ella sea uir pedestatr de la pública
ilustraeión.
A Larrañaga,9 r!,e junio de 1816.
i

i
32 JUAN SILVA VILA
IIe reeibido la oraeióa inaugural del Vicario General
Dámaso Antonio Larrañaga. Para mí es muy satisfaetorio
que los paisanos demuestren sus eonocimientos y dera honor
a su país. Ojalá que todos se inflamen por un objeto tan
ügrro y cada uno contribuya eficazmente a realizar todas
las medidas tendientes a ese fin. (Refiérese a la fundación
<ie Ia Bibiioteca Nacional).
Al Cabitdo d.e Monteai.d,eo, 22 d.e junio de 19tr6. Í

¡
I
T

r
DEMOCAACIA

La causa de Ios pueblos, no admite, señor, Ia menor


demora.

-4.1 Jefe d.e la Plaza d,e Monteuid.eo, Z0 de mayo d.e lBll.


Yo esperaba todo de un Gobierno popular que haría
su
mayor gloria en contribuir a tra felicidaá á" .r. L""*uoo.. -
A la Jut*a del paraguay, Z d,e d,iciembre ile lll:'
Los ciudadanos aspiran generalmente a concentrar
Ia
fuerza y Ia razón de un gobierno que pueda
conservar sus
derechos ilesos y conciliar .o ."g.r*-idud con
sus progreso§.
A la lunta d.el paraguay, Z de diciembre d.e llll.
Si loe hahitantes de T,a Faz, dejaban su suelo por
huir
de un_tirano que desolación por todas paites, lou
-vertía
orientales abandonaban todo para vivir lejos delt otro que
Ies ofrecía su favor; i este paso debe ser tan
terrible para
Ilos ministros del despotismo, como satisfactorio
pu"u' oo
gobierno popular.
Al Gobíerno de las proaincias d,et Río de la plata, 14 dE
díciembre de LBll.

Puesto al frente de un pueblo armado por


eI voto res.
petable de su voluntad, creí la seguridad
del ironor a" uq.r"t,
bastaute garantido, en Ios principios que
han i*prrlr"do
sus sacrificios.
Al Cobierno Su¡teríor proaincial, 9 de octubre de lgl2.
i

34 JUAN SILVA YILA


Mi autoridad emana de vosotro§, y ella cesa por vuestra
presencia soberana.
A la Asamblea de la Protsincís Oriental, 4 de abril ile 1813.

Olendería altamente a yuestro carácter y al rnío, wrl-


nerando enormemente vuestros derechos sagrados, si pasase
a resolver por naío una materia reservada séIo a vosotros.
A ls AsamÍ¡lea d.e la Prot¡incia Ari,ental, 4 ile Abril de 1813.
EI objeto y fiu ilel Gobierno debe ser conservar Ia igual-
dad, lihertad y seguridad de los ciudadaaos y de los Fue-
blos.
Instrwccione,s s los rept'eserutarutes del Pueblo Oriental para
la Asamblea Corxtituyente de Buenos Aires, 13 da
abríl de 1813.

No hay que invertir eI orden de Ia justicia. Ifirar por


Ios infelices y no desampararlos, sin más delito que su
miseria. Es preciso borrar los excesos del despotismo, Todo
hombre es igual en presencia de Ia ley. Sus virtudes o de-
litos los hacen amigables u odiosos. Olvidemos esta maldita
costumbre que los engrandeciorientos nacen de la cuna:
córtese toda relaeidn si ella es perjudicial a los intereseg
comunes. La patria exige éstos y mayores sacri{icios y ya
no eB tiempo de condescendencias pcrjudiciales.
Al Gobernador de Corrientes, 9 d.e abríl de trBlS.

Conducidos loe negocios públicos al alto punto en que


6e ven, es peculiar aI pueblo sellar etr primer paso que debe
seguirse a la conclusión de las transacciones que espero for-
malizar. En esta virtud, creo yo oportuno reunir en Merce-
des un congreso compuesto de diputados de los pueblos. Y
para facilitar el modo de su elección, tengo. el honor de
acompañar el reglamento confiando en el esnaero de e6a
ilustre corporación que eludiendo hasta el menor motivo de

I
!
IDE.iRIO DE ÁRTIGAS 35
j:- ---:" e-.i ¡:romento de recibir ésta, dé las disposicionee
:::-:.:.¡te: pare que con igual actividad, se proceda en
:-i, r¡ jurisriicción de eea plaza capital de provir¡cia a la
:.--:¡n ie las asaml¡leas electorales, encargando ¡nu-y par-
:-:-j:.¡rn¿nte que los ciudadanoe en quienes Ia mayoría de
'-:::,,.dc,s ha.ea recaer la elección para diputados, eean iu-
-:.ji.:lamente provistos de sue crerlenciales y podereo y ee
: -L.;in ccn 'r.o*a prontitud en eanaino de l{ercedes.
Al Cabildo tle Montet¡id.eo, 29 de {rbril ite l8l\"
Condueido siempre por la prudeircia y ansioso de la
cir¡corCia general, llarné a Ios puebios por medio de sus
dipritados para formalizar eualquier m¿di.da colrrpetente a
=u ulierior telicitlad.
Al Cabild,a d.e Montet¡iiteo) SO de junio de lBlS.

fiallar¡Eio ese Cal¡ildo totlas las eualidacles e¡r el ciuda.


daao Pedro Elizondo para 1a administración de fondos pú-
blicos, es indiferente Ia adhesión a mi persona. póngalo en
pcsesión de tan imporrante Btri¡risterio y a ese Cabilclo toca
telar sol¡re Ia deiicadeza de ese manejo. Es tiempo de pro-
bar la trronradez y'qre l¡¡s a¡merieanos florezcan en virtudes,
OjaIá todos se penetrasen de estos mis grandes deseos por
ia felicidad eomún.

Al Cobildo de Monter¡idea, J de agosto de tlli"

Debe ofrecer y pouer en práctica todas aquellas garan-


tías necesarias pala que renazea y se asegure la co¡rfianza
pública; que se re-.peteo los derechos privados y que no ce
motreste ni persiga a nadie por sus opiuiones particulares,
sicmpre que los que profesan diferentes itleas a ]as nues-
tras) rro intenten perturbar el orden y envolvernos ea ilue.
vas revoluciones.
Al Delegado d.on Miguel Barreiro, 2B de agosto de jBlS.
36 JL.t\ SII,VA VILA
Queda encar.gado este Cabildo de llenar escrupulosa-
meilte ei deber de inspirar al pueblo toda la confianza ne-
eesaria en el acto más sagrado de su libertad. Fara ello
inritará a los ciurladar¡os americanos ar¡unciando simple.
mente que es mi voluntad que el pueblo elija dos repre.
serltantes suyos? uno para Alcalde de primer voto y otro
para Regidor, Los votos serán por escrito y rubricados con
noml¡re y firma de los electores. Así serár¡ echadog en una
caja cerrada prevenida al efecto en easa de cada Juez de
Departar¡rento, se suscril:irá después una lista y pondrán su
nombre en ella en presencia d_e dos ciudadanos que serán
como testigos para evitar todo fraude. Los jueces velarán
para que cada uno dé su voto lil¡remente y que sea uno
por cada sufragante y éste americano. Todo lo cual pre.
vengo a ese Cahildo, ansioso cle que resulte La voluutad del
pueblo gue para su confusión no sea el prineipio de eu
envilecimiento.
Al Cabildo de Manteaideo, 30 d,e nouiembre de lBlS.
Es preciso pensar en ia elección de nuevo Cabiiclo Go-
bernador y deseandc que todo se haga con el mayor orden
y que de un moCo solernlle se exprese la voluntad de los
pueblos en sus gobernadores, he resuelto indicar lo si-
gu.iente:
Que inmediatamente pida a cada Cabildo de tros pue-
blos que Xo tengan, un elector y será un mieml¡ro por caila
rrna de las municipalidades.
Al Cabildo de Monteaideo, l,o cle diciembre de IBLS.

Ciudada¡ros: Yais a decidir .ruestra suerte en e} acto


mismo en que la Ilrovincia os Ilama para la elección de las
autoridedes que deben regiros el año entrante. La expe-
riencia det¡e haberos enseírado que la confianza de los go-
btri::ntc: es eI principio de la salud de un pueblo.
Sois liirres para elegirlos y cle vuestro feliz acierto va
a depenrier. rro la salvaeióu de una persona ni de una fami-
I
1

f
t
IDEARIO DE AR?IGAS 37
li¿' si¡o el bien general. vuestros votos
derlen ser dirigidoe
¿ t:n fin tan digao. Este ee el acto sagrado
en que el ¡rueblo
¿\pone sus derechos y rJeseansa e* Ia confiania
i'ierno para velar por Ia conservación de sus
d"'J ;;-
nos. "oo*loduñ".
Será forzoso que los electores, desprendidos
de toda
r'asión -v sin atender Ia coufusión que en estos
casos intro.
duce espíritu de partido, o o ambición, restablez-
_el "goisn
can el espíritu prilrlico.

A tros Pueblos de Cam.ientes, Z d.e tlicien¡.bre de lgIS.

Ile de cstimar a ese Cabildo, que comprenda y haga


courpr_ender a conciudadanos, de Ia importancia .I""
"losde sus representantes
tiene la elección en un acto en que
san liJ¡res para expresar su volunrad. porque
ya saneiona.
do el Gobierno habrá de sostener su autoridad
contra los
turcultuantes gue prevalidos de la ignorancia popular
ocul-
tan y engrandecen sus pasione., cotrl detrimento
notable del
mismo pueblo.
Al Cabildo Cobernad,or de Corrientes, 4 de Enero
d,e 1816.

Una experiencia dolorosa nos ha ¡nostrado cuán peli-


groso es el camino de las resistencias a Ia voluntad *f"-
rana de los pueblos y cuán imprudente política
proynueve e inflama en ellas eI fuego de Ia "u U lo*
discordia cln-
virtiéndola en un vesto incendio.

A Pueyrredón, l0 d.e octubre d,e 1816.

No es regular que hallántlose los vecinos, protligando


sus scrvicios. se mire sus familias con tan poca
considera.
ción y se les condene a abandonar eus hogares para ruendi.
gar. Sea cual fuere eI derecho de Vedoya lo.
L"."oos que
ocupan y los motivos que ha impulsado"a ese Cabildo
a
proceder al desalojor {uedará éste suspendirlo hasta gue

l
II
38 JUA}J SILVA VÍLA
mejorados los rnomentcs pueda resolYerse con eonocimiento
de las partes.
Nuestro objeto principal, por ahora, debe ser afianzar
loe resultadoe de Ia guerra presente. A ella, det¡en dirigirse
las principales provic{encias. Las de otra especie, deben de'
jarse hasta tiernpo rnás oportnno.
At Cabitd,o Gober¡wrLor áe Cowi'entes, 9 d.e diciernbt'e ik
1816.

1§o tengo la me¡ror dificultad e§ creer la rnorosidanl


eonsigriiente al gobierno de muchos; pero hay dos difieul'
tatles iasuperabtree para reCucirlo a uno: Primero, haber
persona de toda eaa confianza y que eI pueblo f,uesc capaz
de e¡rco¡rtrarla; segundo, que sería forzoso asiguarle uÍl
sueldo para que ao estuviese expuesta a del¡ilidades y Ud.
uo ignora que el Estado no sufraga para ello, por eer cortog
los fondos y graves sus atenciones'
Creo más fácil simplificar el gobierno en el ¡nismo
Cabildo, pana los actos judiciales y de recursos y dejando
aguí los de última apelación, antes que reducir el gotrierno
t uno, eiendo electo por eltroe mismos. Deje IJd. celebren
elecciones el aáo entrante. Entie tanto, eo preciso ir tem'
plando todo e interesando de la causa prlblica a tgdos, por'
qué, de 1o contrario, siempre viviremos inciertos de nuestraa
suerte.

Al Delegad,o Barreh'o, 24 d.e cliciembre d.e 1816.

Los pueblos eon libres a decidir sn suerte y mi deseo


todo, decidido a respetar su suprema resolución. Si la au'
toridad con que nre habéis condecorado, es un obstáculo a
este rernedio, está en vuestras malros depositar en otro lo
sagrado de la piibliea confianza, que ajuste vuestras ideas a
los deberes gue impone la Patria y eI voto de vuestros
conciudada¡os. Yo me doy por satiefecho con haberlos lle'
TDEARIO DE ABTIGAS 39
nado ha--ta el presente con honor y contribuir por mi parte,
c.rl el arisino, a sellar la feücidad del país.
Ciraúar a tos Cubil.d,os, 1l de octubre de tSlT.

Lcs puei:}os deben asegurar su futu¡o destino, eol¡re Ia


ba¡e sólida de la inviolabilidad de sus derechoa.
Al Gobernador López, 2Z de di*íe¡nbre d,e IBIB.

Para mí, nada más lisonjero que los puebloo expreoen


¡u voluntad.
Al Co.bíId.o de Scnta Fé, 4 de tebtero de 1819.

¡
ENEMIGOS IN?TI§TSH,ES

Todo europeo indiferente, §ea vioto por rrosotr:os conlo.


rrir enerrigo irreconcilio.bie. Ellos odia;l nucstro r:curbre y
sóio su in¡:otencia contiene s¿ls crinlirlales vctoa.
Al CneL Galoán, 2 rle febrero d.e lgl.2.

I{o ignora que rni interés es el de todoe los orientales.


,v que si los mori:rentos de una convulsión fueran bastautes
a sofocar nuestroq deheres, ya artes de ahora hubiera
desechado un puesto que no me produce sino azares. Ud"
no lo ignora; per.o la confianza que depositaron en mí loe
paisanos para decidir su felicidad, es superior, en mi con-
cepto, a los contratiempos. Ella me empeña a superar las
tiificultades hasta donde alcancen mis fuerzas. Tome de mi
un ejemplo: obre y calle, que al fin, nuestras operaciones
se regularán por el cálculo de los prudentes.

Carta a Riuera, tZ de cliciembre d,e lgt4.

Yo me glorio de ser hurnanor poro no injusto y ei mi


¡¡roderación ha de servir de estímulo a las pasiones? yo con-
tendré a los hombres en el lírnite de su del¡er
No es mi ánimo derramar la s¿ingre preciosa tle los.
americanos, pero las circunstancias se han cstrechado de tal
modo, que dek,emos hacer respetable nuegtra justicia si de.
seamos que ella trir¡nfe.

Al Gobernador de Corríentes, 26 rJe enero de lgti.


No eonsentiré que obstruyan los pasos a rea\izar la
Iibertatl por la que tan dignamente se sacrifican los pueL,los
4; JUAN §ILYá VILA
qrc la .rnren v yeneran, Si en el con.cepto de do¡¡ Angel Fer-
ná::riez Bia-nco, no Eon sanoc estos principioq yo le fran-
qzearé el paso para que una a los de eu redil.
Fntre ncsotros no qi:eremos lol¡os vestidos de piel de
or-eja. rcr:quc así nos hacen la guerra más odicsa. El que
sea enemigo, declárese y sabremos contrarrestar armas coxt
anlfa! y hombres con hornbres, pero true a fuerza de int¡i-
gas e irrtereseo quieran oscureccr nuestra virtud y haeer
que triunfe Ia indigaidad, es el dolor que ha mr¡cho tiernpo
traspasa ¡ni alma y por eI cual me eacrifico hasta yer rei.
¡ante la justicia.
A! Gobernadar d,e Corricntes, 4 áe lebrera de 1815.

El triunfo de Ia libertad no se asegura mientras existan


cntre t?osotros esos enemigos ocultos o descubiertos, siempre
inflexibles y eiempre irreeonciliables.
Al Cabililo de Cotientes, 77 de abril de 1815.

Desde que hemos enarbolado eI estandarte de la Li.


bertad, no nos resta otra esperanza que destrozar tiranos o
ser infelices para siempre. Si los europeos existentes eutre
Ilosotros? nos perjudican, como creo, obligarlos a salir fuera
de la Frovincia o ponerlos eIr puntoE de eeguridad. Esto
mismo estoy practicando en mi provi:rcia. Estoy en el caso
que habrá europeos adictos a mi persona, pero muy raroi
adictos al Sistema. La época nos presenta ooasión de probar
eus sentimientos. Los que tomen un interée co¡x ¡:.osotros,
pueden ser admitidos; Ios dernás, lejos de nosotros.
La esperanza debe hal-¡eraos desengañado: pues no
perdonan medio por realizar nuestra ruina y esto mismo
debe prevenirnos para eludir su eonstante proyecto.
Al Cobernador de Cotientes, 7." de junio d.e l8lí.
]ie diee que han salido log maloe europeoe v Dios
¡uitra que ha',-a enccntrado IJd. Ios buenos. Lo que sí ase.
IDEARIO DE ARTTCAS 43

guro a Lld. es .!il!e expone su opinióa a la ccusura de loe


paisanos. Mi providencia no ha sido conminativa, sino pre-
sersativa de loe malos. Yo bieu eé los resultados de cual.
quier condescendencia en este seniido.
Al Cabe.rruador de Corrientes, 6 de ju!,io de 1815.

Se engancha mi ánimo cuando actrviecto re¡rroducidas er


ese Cahildo laa expresionee de mayor conJianza y que la
actividad en sus providenciaa afiarua los votoe comu¡res, Ee
dc uecesidatl que satrgan de esa ptraza y Bus extraraÉxros to.
doe aquelloe europeos que cn tiempo de nuestros afaneg ma-
uifestaron dentro de eila su obstinada reeisteueia. Tonee las
rncjorea providencias pára que marclren a mi cuartel gene.
ral, con la distinción que no debe grrardarse coasiCeracióu
alguna con aquellos que por influjo y poder conserl'an
eierto grredominio en el pueblo. Absuelva más bien de esta
pena a los infelices artesanos y labradores que pueden fo.
ütentar ei país y perjudicarüos muy poco con su dureza.
Igualmente remítame cualquier americano que por su
eomportamiento se haya hecho indigno de nuestra con-
fianza. Ellos gustarán de nuestros trabajos y acaao entonces,
má¡ condolidoe no amargarán nuestra época. Por ahora,
pocos y bueuos bastan para contrarreotar cualquier esfuerzo
enemigo.
Al Cabildo d,e Monteuideo, 4 de agosto de 1815.

A pesar de las conveniencias que pudiera ofrecer la


existencie de muchoe europeos en esa plaza, mayores soll
las desventajas. Todo Io tergo ¡:reditado y después de un
maduro examen he resuelto salgan los que se crean dignos
de ese castigo. No sería tan inflexible" si no previese los ma.
tres y eI origen de..nuestras desgracias.

A Larrañaga, 25 de ri,gosto de 1815.

Para mí es muy extraño me diga ese Cahildo que ya no


JLiA}i SIL'/A VILA
eri:t€n en ese pueblo aquellos satéliteo poderosos de la ti-
ra¡ía v sr:e eI resto de nuestroc enemigos es un grupo de
ha;ni¡res agcbiados por la ¡niseria y a quienes Ia vigitrancia
tiel Gobierno y ctre los patrictas ha reducido al estado de no
poder atentar contra rruestra existencia. Esta máxima polí-
tiea es frustrada en cLrs resr:ltados. Tengo a la vista los ofi-
cics de ese CatlilCo soJ-.]:e los sueesos de mayo. Apenas se
pres€ir¿aroa los peligros apai:e¡]te§, ese Cabildo afirmó Ia
imilosibilidad de scste¡rer cse punto por la poca {uerza y
rnultiplicidacl de los enemigcs interiores y exteriores y re-.
pe:rtinementc, cr€e asegurada ese Ca]¡iLdo nuestra existen-
cia política con tra reir¡isión de 40 homl¡res, los más cle etrlos
infelices? La vigila*cia quedará burXada en los mornentoÉ,
del conflicto, por los ene*rigos interioles gue si afeetan
vivir guotosos entre nosotros, más es por eonyeniencia que
por convencimiento.
Al C¡¡"bild,o de Monteaideo, 29 de setiembre de 1815.

Me es doloroso decir que su condescendencia ha debi-


litado el rigor e importancia de mi proridencia. Ayer llegó
el Oficial Calderón con nueye indivicluos solamente cuando
en su primera comunicación, ese Cabildo ul.e aseguraba que
hasta el número de 32 debían salir de esa eiudad. Reeonve-
rrido el Oficial dijo que en su salida para Cauelones, ya los
demás estal¡an indultados y que por los adjuntos cficios,
ese Cabildo hal¡ía soltado a los restantes.
Inmediatamente rrie pone eu este destino los 32 sujetoe
indicados. Este es el lugar destinado para su purificación.
De 1o contrario, tornaré otra providencia que afiance en lo
sueesivo, el sosiego y la felicidad de la provincia.

Al Cabililo de Monteaiileo', 9 de octubre de 18X5,


'Iodo enemigo de Ia Libertad, no hará más que atentar
contra nuestro sosiego. De ese resultado) calcule ese Cabildo
r:ltericre: consecuencias, con los enemigos gue existen e[tre
ir!,-:oiro:. Po¡ 1o mismo, ordené oue lne remitiese todos loe,
IDEARIO DE ARTIGAS 45

hombres malos que llor su influjo pudiesen envolveruos en


nuevos males y me es dotroroso deeir q,e sü condescendencia
ha del¡ilitado el vigor e importaneia de rni provitleucia.
Al Ct¡l¡ildo cle Manteo¡ideo, 9 de octubre de j.gli,
Nada me dice ese Cai¡itrdc, de Ia rcrnisión del resto de
europeos qu_e tengo peclidos. Ellos son el principio de todo
eatorpecimiento y }os paisanos desmayan al ver la frialdad
de los rnagistrados. No r¡re ponga ese Cal¡ildo en eL extremo
de apurar mis providencias. Ya estoy eansado t1e exper.i.
meatar contradicciones y siendo Ia ohra Ce interés de todos
los orientatres elloc deben, conmigo, apliear el hombro a la
sentencia. El que no se halle capaz de esta resolución huya
más bien de ,uestro sr¡elo. Pocos y b,e*os sor¡los i¡astante
para clefenrie¡: nuestro suelo del primero que intente inva.
dirnos.
Al Cabiída de Llonteaideo, l-2 de nouiem,bre d.e trgti.

Ese Cabildo, también coúIo yo dehe conocerlos y que


eI fiu de sus insiauaciones como el de sus gacetas, no es el
aüror a la pírhxica felicidad, sino sorpreirder e1 juicio cle los
puel:los y aJrro'.,ec}:.arse Ce sus rlrromentos desgraciados o
para cinientar la desconfianza o para introrlucir Ia confu.
sión, pero la experiencia ha_ acreditaclo que todo es en vatr!.o
y que a pesa¡: de las convulsiones "inteetinas, los es{uerzos
son unifornles para reáistir a los enernigos del país y opre-
sores de Ia Lihertad.
Al Cabililo Gobernad,ar cle Corrientes, Zl de nouientbre de
lBts.

No sé por qué fatal principio siernpi.e veo fr..rstrad.a"


mis provide¡rcias sobre Ia seguridad de los españo]e:. Ei1c,:
desaparecen de los pueblos e¡r los rnomento-i que .ielríar
aprehendidos por loo patriotas y reo inutllizai:¡ I,¡ óri=
-r
+. JUA§ SILVA YILA
re! eoil ¡ó1o el fru¡o de te¡1e! en este deetino los más iufeli-
c€s y acrso los mencs perjudiciales.

At Cal;ild.o d.e Írlonteuideo, 25 de áicientbre d,e 1815.

Adjunto, deeretada, la presentación del europeo José


Alonso. Etr y todoe los }icenciados han rrarchado a Monte-
rideo para disponer de sus casas e intereses y ese Cabildo
1os hará regresar a este destino con preve¡xción que es m'-.,i
úItima insinuación eobre este particular.
Yo cada día esicy más persuatlido que esa clase d¿
hor¡nl¡res son perjudiciales en todas partes y en ninguria má$
que en $,{ontevideo.
Al Cabildo rie Monte¡.¡ideo, 78 d,e junio d.e 1816,

EI que conspire contra la patria, sea fueilado inmedia.


tamente y el español, portugués o a¡rtericano que Be advierta
soepechoso y capaz de perjudicarnos, re¡nítamelos a6egura-
dos que yo los poudré a seguro de toda tentativa.

Al Cahild,o de fllpntet¡ideo, 29 de junio de 1816,

Reclamo a ese Cabildo la mayor exactitud en la remi*


sión de los españoles licenciados y demás que se crean per-
judiciaXes a nuestro sistema. Cualquier eondescendencia de-
be ser criminal en estos rllomertos cle complicación.
Al. Cabitdo de Monteoitlea, 6 de jutio de 1816.

i
I
FED§RACIÚN

Yo nada podía temer, porque Ia fuerza estaba en mi


mai1o, pero todo lo eedí por rro e;rsangreutar¡ro¡
entro her-
rrrallos y me contenté cor¡ separarnoa.
Ahora, nos ofreeemos nuevamente loe orientatres:
con-
Eerva!:emos otra vez Ja libertad en nuestro euelo
y se noa
riejará plantarla por ilosotros mismos, dejándouos
ios auxi-
lios competeutes de acuerdo al sistema de confederación.
A d"an. J. Garcín de Zúñi6a, lS de noui.embre de lLl2.

La Conetitución garantirá a Ias provincias Unidao, una


ferma de gobierno republicaua y que asegure a cada
una de
ellao, tie las violencias domésticu., o.rrpr*ión de
sus dere-
chos, tribertad y seguridad cle su .olrur^"iu que
con Ia fuersa
a_r¡nada intente alguna de ellae sofocar loJ principio,
p*
eiamarios.

Irtst,uccíomes a los rept esent*ntes del FuebIo Oriental, para


la Asamblea Canstituyente ile Bwenos Air.es, lS de ábr¿t
d.e 1813.

La Provincia Oriental entra separadamente en una


firme liga de amistad con cada rrnu de las otras, para su
d.e-
fensa comírn. seguriCa{ de_ su liber¡ad y para su
noutua y
general felicidad, obligándose a asistir a cada uaa
,ie las
otras contra toda violencia o ataques hechos sol¡re ellas
o
sobre alguna de ellas, pcr rnotivo de religión, sob"runía,
tráfico o algrín otro pretextoo cualqu.iera qLre sea.
a los representantes der, puebro orientar para
Instrucciotres.
la Asambleo Cowtituyente ¡le Buenos Aires, B ae ,itrl
de 1813.
4d JL-{.; SIL\¡A VILA
La Conjederación es el único eistema para el pacto re'
cíproto co¡r las provincias que formen nuestro Estado.
Instruccione.s o los represent&ntes del Pueblo Oriental para
lo Asamblea Cotxtituyente de Buenos Aires, 13 de Abril
de 1813.

Los pueblos miran en nosotros eu gostén y elLca harán


igaales reela¡naciones a medida que no§otros, ostentando
nuestra grandeza, resuciterlos la de ellos y faeilitemos a la
ma6a, eI sistema augusto de tra confederaeión. Felices esa
gran Provincia y ésta, si aniquilando Ia nueva esclavitud,
restablecemos el sistema popular que selló la Eangre de
nueotros hermanos en los primeros díae de la revolueióu.
Al Gobíerno del Paragu.ay, 30 d.e iutt'io de 1813.

.Iamág procederemoe e violar los sentimientos, el grado


de arraistad y fraternidad que siernple nr¡s han sido recípro'
cos, habiéndose estrechado más los vínculos por el dogura
general de la Revolución que ha unido más íntimamente
rluestros interesee.
Al Teníente Goberncdor de Corrientes, 75 de febrero de
1814.

Si el ironor con que nos hemos conducido en todos los


períodos de la revolución y la virtud que sierupre heüros
ostentado, no basta a inspirar en nuestros hermanos, la con'
Íianza bastante a hacer compati]rles sus planes de armonía,
ni a mí ni a }os orientales tendrán que increpárseuos porque
se perpetúen los distt¡rbios y las calamidades consiguientes.
At Cabilito de frIonteuiáeo, 25 de febrero cle 1814.

Si mis pensarrientos hul¡ieran sido menoe delicadoe, yo


me a\ergonzaría de hahe¡los concebido' pero atlorador eter'
no de la sol¡eranía de Los pueblos, sólo vne he valido de Ia
oLeüe¡rcia con que me han honrado para ordenarles que
IDEARIO DE ARTIGAS 49
Eean Ubres. Yo lo ri:rico que hago es auxiliarlos como a ami-
gos v hermanos, pero ellos solos son Ios que tienen el dere-
cho de darse la forma que gusten y organizarse como les
agrade y bajo su establecimiento formalizarán a consecuen-
eia su preciosa Liga entre si mismos y con uosotros, decla-
rándome yo su protector.
Al Cabililo de Corrientes, 29 de marzo de l|l4.
Los Congresos han sido dispuestos por los pueblos libres
para huir aI estruendo de las facciones y evitar la algara.
bía consiguiente a los grandes tumultos que por su natura-
leza, irnpiden se oiga a la raz6n, se consulte al juicio y se
dé todo el nervio de que es susceptible un resultado de me-
ditación. Por consecuencia nada se adelantará si faltare al
Congreso el sosiego que sirve de motivo a su reunión, sea cual
fuere la materia de sus discusiones, sóIo la tranquilidad pue-
de darle pulso y madurez. Las grandes repúblicas, en medio
del atolondramiento, de la confusión, del tumulto, muchas
veces de la sangre, dieron con este descubrimiento feliz qáe
al momento pusieron en práctica como único apoyo de
equidacl social, en unos momentos cn que es tan difícil con-
ciliar los cspíritus,
A su Comisionad.o don Ju.an Fco. f,/edoya,9 de mayo de IBl4.

Que nada sea capaz de contrariar nuestra unión y en


lo sucesivo, sólo se vea entre nosotros, una gran familia de
hermanos.
Al muy benemérito pueblo de Buenos Aires, 20 de abril
de 1815.

Yo espero en estos días los di¡rutados de Bucnos Aires


con los cualcs trataré todos los asllntos que son de nues¡ra
atención en la actualiclad y tendrá consisuientemente entre
ellos, lugar la organización de un plan de defensa general
que ponga a todas las provincias del Río de Ia Plata a cu.

I
I
áO JUAN SILYA VILá,
frierto de toda fatalidad disputando su independeucia con
dignidad y grandeza hasta condueir eomo eiempre sus yir.
tuosos esfuerzos al templo de la victoria,

Al Cabildo de Monteo;ídeo, g de mayo ile 1815,

Conducido riempre por la prudencia y ansioso de le


concordia general, Ilamé a Ios pueblos por medio de sut
diputados para formalizar eualquiera medida cornpetente a
su ulterior felicidad. No pudirnos acordar con los diputacloe
de Buenos Aires, Ios principios que debían fijarla, en cuya
virt¿rd se retiraron sin haber coneluído el ajuste preeiso.
Creyendo que lo irnportante del aeunto ciebía sujetarse aI
escrt¡tinio de la expresión gereral, convoqué a un Congreso
de todos los diputados que hasta aquella fecha ge habían
reunido, tanto de la Banda Oriental como de los demáe
pueblos que tengo etr honor de proteger. Ya re¡rnidoe en esta
villa de Ia Concepción del Uruguay eI 23 rlel corrienteo ex.
puse lo urgente de lae circunstancias para no dejar en pro.
blema estos resultados. Califiqué las proposiciones. Su
conveniencia y 6u disonancia en todas y cada una de eul
partes y después de muchas reflexiones resolvié tan respe.
table corporaeión marcharse nuevarnente ante el Gol¡ie:rno
de Buenos Aires, que a noml¡re de este Congreso General
representasen la uni{ormidad en eus intereses y la ceguridad
que reclaEean eus Frovinciag.
Al Cabililo de Monteaideo, 30 de ju.nio de l8lí.
El Gobie¡no de Misioaee está eucargado de no perrnitir
tráfico algrrno al Faraguay, de esta clase. Guardareooos así
el equilibrio tan precioso entre provincias hermanas y Ia
eserupulosidad necesaria con las que han renuneiado nues-
tra fraternidad. Los huques del comercio inglés gue hayau
parado clerechos en cualguiera de los puertos de la presenta
Confederación Orientalr fa no deberáa pagar sobre los rnig.
mos frutos que introduzcan, pero los frutos o efectos gue
vengaü de otras proüucias, que uo ectéD ea eI rol de Ia.c
IDEANIO DE áR?IGAS 51
Grientales, deberán pagar los derechoe aunque
en aguello§
haran pagado los mismos o Eayores.
.41 Gobernodor de Cotíentes, IZ de sedenrbre de lBlS.
El año 16 será remarcat¡le en Ia hietoria por elheroia¡ao
cc, que estos pueblos supieron defender sus derechos con-
tra la au¡bición más desenfrenada por srebyugarlos.
de.!1mos eeperar y nada cle]re¡nos temer euando
f.A"-lo
uuestros 6s.
crificioe sor por un objero tan digno. f,a unión
y e}tra nos coronará de glorialiendo renaee""o.
i"-J.
'ado oo.-
otros Ia época feliz que llena a la pcsteridad "ot."
de consuelo.
Al, Cabildo de Corrientes, JZ de enera de lB16.

En el camino del hon-oro del que jamás me he


separado,
me he hallado aI frente de los.ug"odl, dereehos,i"'*i
pu-
tria que he defe¡rdido y defenCerá hasta donrle "al
r¡ri vida rne anime; contrariando esos Gobiernos
*pi"
"f .t'a"r""
unánime de esta Frovincia
lJue no ha omitido sacrifieio ni
fatiga para coadyuvar a Ias ideas sagradas de
lilrertud, Je
c_onstituirse legalmente y de repreuát"ru"
por sÍ misma,
dándose Ia ergani-zación local qu-e rrrejo*
convenía a eus in-
tereses y respondía a Eus necesidades; sin
por esto rornper
de ningúa modo las vínculos de unión y iraternid_d
taia necesariog son para el imperio de Ia S";
libe"r"a a" io.
pue,trlos contra eI poder de los tiranos.

á Pueyrredón, l0 de octwbre áe tgt6.


La unión 8e va consolidando ír¡timamente y creo
que
no habrá entorpecirniento capaz de retardar to.
progr.;or,
de sellar el tri¡rnfo de Ia libertacl.
Al, Gabernador Aldoo, 2Z de d.iciembre de lBlB.

Los puebloe están libres y eon árbitros de su


¡uerre. por
más g-ue en variag épocas se les haya convocado
a llenar t¡n
eagrado debero han visto siempre desmentidas
sue aejores
2 JLAI{ SILVA VILA
e-rFeranza:.por la arrogancia de un pueblo que creyé presi-
di¡ la suerte de los otros. No ha bastado a contener este gol-
pe de arbitrariedad, la respetabilidad de los nombreso Junta
de Representantes, Asaml¡leas y Congresos. Los más aagra-
dos derechos se han confundido y los rnejores deseos han
sido contrastados en Ia preponderancia de un partido exclu-
sivo. Inmediatarnente proclamado Frotector de las Provin-
cias que se hallaban en abatimiento, ellad han visto mi con.
ducta hasta ver atianzados los intereses de la Liga en lo
sagrado de su confianza.
At Cabild,o d.e la Prouincia d,e San Juan, 18 ctre febrero
de 1820.

El deber elemental de nuestra libertad civil es que los


pueblos de cada Provincia sean armados y garantidos de su
seguridad por sus propios esfuerzos. Si esa medida no se
imptranta, la guerra civil se continuará al favor de las intri-
gas y de Ia mala fe.

At Cabitilo cle Santa Fe, 79 de lebrero ite 1820.

Desengáñese Ud. UIi coaducta es siempre uniforrne. Si


Ias circunstancias varían, no por eso mi constancia deja de
ser acrisolada. Mi interés no es otro que el de la causa. Si
es injusta en sus principios, no del¡ió Ud. haberla adoptado.
Ild" ha elegicno el chogue de las armas y estoy resueito
a resistirlas. En sus resultados conocerá que es más fácil
ceda ,A.rtigas al imperio de la razón que al dei poder y las
circunstancias.
En consecuencia, Io hago a UC. responsable de la san-
gre qiüe se derrame por tan frívolos pretextos y de los entor-
pecimientcs del sistema por esos motivos inciertos. Obre
como guste, gue yo no haré rrás qrie llenar mis deberes.

-41 C.otr¡tnrlante General. d,on, Francisco Ramírez, B de mayo


de 1820.
iDEARIO DE ARTIGAS 53
]{e ha l1euado de dolor el ver los trabajos que les han
¡t¡brerenido con el engaño con que Ramírez los sedujo. Los
re:ultados de ese fatal día van hasta la destrucción de Ia
Prori-ncia; éste ee el objeto que se propuso Ramírez, divi-
üéndonos para que nos atacásemos uno§ a otros; pero te-
niendo esto en coasideraeión, ro es permitido qr" ."
sangriente una guerra entre hermanos y traigo reunidae "r- to-
tlas las tropas y fanoilias para que se vuelvan a sus casas y
se acabe todo. Este es solamente el objeto que me trae, no
el de castigar a nadie, pues bien corrozco qo" Io. han enga-
ñado y sólo vengo a estrecharlos como a hijos y volverlos a
unir a todos para que juntos defendamos el sistema.
Al Cabildo d,e Misiones, 1l de agosto ite 1820.

Yo no hice otra cosa gue responder con Ia guerra, a


los manejos tenebrosos del Directorio y a Iu gr".iu que éI
me hacía por considerarme enemigo del centralismo" eI cual
distaba entonces un paso del realismo.
Al General paz, eru Asunción, en 1846.
Tomando por modelo a los Estados Unidos, yo quería
,la
autonomía de las Provincias, dándole a cada Estado su
Gobierno propio, su Constitución, su bandera y el derecho
de elegir sus representantes2 sus jueces y sus Gobernatlores
entre los ciudadanos naturales de cada .Estado. Esto era Io
qo" provineia y para las que
Io- había pretendido para mi
me habían proclamado su Frotecto". Hacerl"- así, hab'ría
sido darle a cada uno lo suyo.
Al General paz, en, Asunción. en 1846.
I

E
FINAI{ZA,§

Habieado felizmente uniformado nuegtros eenti'niento¡


liberales con algunos puebloa occidentales y todos los orien
¡
tales y deseando restablecer por medio del comercio, Iae
guiebras a que los ha sujetado la guerra eivil en que Be
hallabau envueltos, he dispuesto se abran los puertoe de to.
dos los pueblos de Ia preseute fede¡ación, franque,ri\rdose
.Dtre ellos eI libre tráfico y deseando que las utilidadee re.
dunden en beneficio de los mismos pueblos.
10 de abríl ile 1815.

No se me esconde Ia necesidad que tenemos de fondor


para atender a mil urgencias, pero la voz solo
ción- me hace temblar" Los males de la guerra -Contribu-
haa eido
trascendd¡rtales. La miseria agobia a todo el país. Yo ansío
con eI mayor ardor verlo revivir y sentiría mueho cualquier
medida que en la actualidad ocasionase cualquier atraso.
Nada habrÍa para mí tan lisonjero, nada más satisfactorio,
que eI que 6e arbitrase lo conducente a restableeer con
prontitud los surcos de Ia vida y prosperidad geueral y que
a su fomento y progreeo debiésemos el poder faeilitar lo
preciso a las necesidades proporcionando de ese modo los
ingresos suficientes a la caja púIlica. Yo no puedo prescin.
dir de la rnayor escrupulosidad en este particular, y más
en las cireunstancias actuales, en que me parece que va es
tiempo de recoger el fruto de tautos afanes haciendo eerrir
nuestras victorias a la felicidad general err cuyo obseguio
han sido tantos esf,uerzos.
'Al Cabílilo de
Montetsideo, 2 d.e mayo de lBLS.
]U.1,N SILYá VILA
Der-uelra ese Calildo, con la mayor exactitudo la con-
tribución que se sacó.
Al Cabildo de Monteui,ileo, 73 de junio de 1815.

En caso de .llegar a ese puerto, algunos buques del co-


mercio inglés, se les admitirá con la restricción de que Ia
introduceión de sus efectos al interior debe ser privativa
de los americanos, quienes, en retorno, podrán conduci¡
efectos del país para sus cargamentos.
Al Cabíldo de Monteaid,eo, ST de julio de 7815,

Procure ese Cabildo que en la administración pública,


se guarde la mayor economía, tanto en los sueldos como en
el menor número de los agentes, debido a la indigerrcia de
Ia Provincia. Todos y cada uno de sus individuos deben
convencerse de la necesidad de hacer algún sacrificio en
obsequio de su patria.
Al Cabild,o de Monteuídeo, 4 de agosto de 1815,

He respondido aI Comandante de las fuerzas de Su


Majestad Británica, acerca del comereio inglés, que mis
puertos están abiertos, que la seguridad de sus intereses mer-
cantiles garantida, debiendo los comerciantes, para exportar
e importar sus.mercaderías, reconocer por puertos precisos,
Colonia, Montevideo y Maldonado. Que dichos comereiantes
ingleses no pueden traficar a Buenos Aires, mientras nues-
tras desavenencias con aquel Gobierno, no queden allana-
das. Y si no le acomoda, he agregado, haga Ud. retirar todos
los buques de la costa que yo abriré el comercio con quien
más me convenga.
Al Cabitito d.e Monteoi.deo, B d.e @gosto ite 1815.

Los ingleses deben reconocer que ellos son loe benefi-


ciadcsy por lo mismo, jamás deben impo4emoa; aI contra-
IDE.ARIO DE ABTIGAS 57
rio, Eometerse a las leyes territoriales, según Io verifiea¡r
la-" naciones todas y Ia misma Inglaterra en sus puertos.
Al Cabildo de Monte¡¡id.eo, B de agosto de lBlS.

Remito a Ud. la plarrilla tle derechos que debcrán co,.


brarse en los puertos de esta pror.incia, scg-rin el arreglo
provisorio. Exigidos en esta {oi:ma, Ios rler.-,r,hr,-o, I,r. b.rq.lcs
podrán marchar libremente a sus tlestinos rcsnccli1ros,
cor].
prevención de que Ios buques del comcrcio iuglós
<1uc hayan
pagado en cualesquiera de la presenrc confcrk:raciór,
o.i,ro-
lal, fa no deberán pagar sobre los mismos frutos quc intro-
duzcan o extraigan, nuevos derechos, cn ninsrin puJrto
dc la
misma; pero los frutos o efectos que ycng¿rn cÍe otras
vincias que r¡o estén en eI rol de las o*-icntalcs, dcbcrán ¡;ro*
pa-
gar los expresados en este Reglamento, aurrque en
arlucllos
puertos hayan pagado los mismos o mavores.
Al Gobernador Da Silaa, d.e Coruientes, f2 d,e setietnbre de
1815.

Todos deben acordarse que la patria exige cle sus hijos


el mayor sacrificio y gue no debemos apurar sus recursos
para que ella no quede exhausta. Ese cabildo s¡be c,a,tos
fondos debería tener a esta fecha, si la tlilapidación no
hubiese sido consecuente a los clesastres. Fenetratlo de
los vcr-
daderos irrtereses de csa provincia no dudo pondrá
cficaz
remedio a tantos males y al paso que no. áisminuya
los
gastos precisos? contenga el exceso de lo superfluo.

Al Cabildo de Conientes, I0 de noaienrbre ile lBlS.

Estoy informado de Ia iueficacia con que ese Cabildo


ha mirado el cobro de Ios intereses del Estado. Acaso a esta
falta de escrupulosidad es atribuible Ia inobediencia con
l¡re
Ud. ha mirado el deber de remitir a mi eonoeimiento los
estados mensuales en todo este año y debe creerse respon-
sable de eaa indolencia y de cualquier otro
pueblo ee eu juez y su acusador y debe tercer ser delin
€u€r¡t€ ante un juez tan BcYero.
Al Cabílilo de Cor¡ientes, 6 de not¡icmbre ile 1817.
§'0M§NTO DEt INTEBIOB ¡,

La eempaña debe ciemprc progreEar.


A l* lunta del Ptragu.ay,20 de dicicmbre de ltll.

Creo precieo ¡nuaciar a ese Cabildon Ia ueceeidad do


establecer un correo semanal, tanto para est¡echar nuestra¡
relacionee como para evitar tanto chasque, cou Io que indi-
vidualmente oe perjudica el vecindario. Apure al Ádmini+
trador de Correos de esa ciudad para cI estable precirc de
?a.ta, , cuanto deba eontribuir a su formal arreglo.
Al Cabíl¡lo de ll{anteoidco, SI de julio ile lBtS.

Sería conveniente, antec de formar eI plan y arreglo de


campaña que ese Cabildo publicase uu Bando y Io trans.
cribiese a todoe los pueblos de Ia Provincia relativo a
llue
loe hacendados poblasen y ordenasell sus estauciaa, po" .i o
por medio de sus capataces, reedificando eus poseriouea,
eujetando sus haciendas a rodeo, ma¡cando y poniendo todo
en eI ordeu debido para obviar Ia confusióo drr" hoy ee er-
perimenta después de una rr.ezcla general. prefije el térmi.
no de.dos meses para operación tan interesante y el que
hasta aquella fecha no hubiese cumplido esta dátermiaa-
ción, ese Cabildo debe conminarlo con la pena que Eus te-
rrenos eeráu depositados en b¡azoe útiles que con su lalor
fomenten la población y con ella Ia prosferidad del peli
Al Cabildo de Monteaideo, 4 de agasto de lgli .
a- JtA:\- SILYA YILA
Yele ese Cabildo eobre la eonservación de nuestra cam*
paña. De lo contrario, noE expond¡emos a mendigar.
Al Cabildo de Monteuideo, I de agosto de 1815.
En lo sucesivo, don Fernando Torgues recabará la apro-
bación de ese Cabildo en la repartieión de terrenos y entre
tanto, tenga la bondad de proclamar en los pueblos la nece*
sidad de poblar y fomentar la campaña según mis últimas'
insinuaciones. ejecutando las medidas que se crean más efi*
caees para la realizaeión de tan importante, objeto.

Al Cabililo d.e Monteoideo, 7B ile agosto de 1815.

A cada individuo que quiere poblar, sin más mérito


que presentarse, se le coucederá el terreno que pida' Para
ello, el alcalde del pueblo le dará gratis un papel de seguri-
dad del terreno donado ein más obligación que la de po-
blarlo en el término de cuatro meses? en cuyo tiempo, si no
lo hubiese hecho, podrá ser donado a otro cualquiera que
después de aquella fecha lo denuncie.
Al Alcald,e y pueblo de Irc llíbaraso 72 de febrero de 1816"

Si no ha tenido efecto la invitación de ese Cabildo


para poblar las costas del Llruguayo al menos quedará satisfe-
cho el Gobierno con haber llenado sus deseos y los vecinos'
no tendrán que lamentarse de su desgracia después de pro'
porcionárseles su felicidad.
Ellos llorarán algún día esta pérdida cuándo tengan los
conocimientos bastantes para calcular loe resultados de §r't,
indolencia.
Al Cabililo de Monteuideo, T9 de moyo de 1876.

Estos robustos brazos indígenae darán un nuevo eetado


a estas fértiles eampañas que por cu decpoblación no dea*
eub¡en todo Io que en sí encierran.
IDE.4,RIO DE ÁRTIGAS 61
Es preciso que ese Cabildo nos provea de algunos ritilee
Ce l;--\¡anzas. arados, azadas, picoo y palas y también algu-
¡e-. hacira: pa¡a que estos infelices indígenas abipones q-ue
a,:alan de llegar en número de m ás de 400, e^pieeen- a
tr,:'rmar sus poblaciones y emprender sus tareas. Es necesario
s-¿e remita las semillas de todos los granos que se crean
úti1es para su subsistencia, como Io demanda el adelanto de
la Pro',-incia y son mis deseos.
Al Cabiklo d.e lllonteoideo, 22 d,e junio de 1816.

Marcha por eI correo, una cajita con muestra de Ia


pólvora que en su primer ensayo me presenta eI puelrlo de
Coneepeión de las Misiones. Si en medio de la ercare, de
sus recursos, han podido emprender un negocio de tanta
importancia, ¿qué no harán hallándose fomentados?
For lo mismo, es mi ánimo, fomentar aquella institu-
ción. Su progreso, por ningún aspecto? puede sernos deg_
ventajoso y por lo mismo, lo creo digno de nuestra primera
atención. Así, todos a por{ía, se empeñarán eu descubri-
mientos útiles y el Gobierno tendrá la satisfacción de ver
promovida la industria del país y con ella su adelantamieuto.
At Cabil,do de Monteoideo, lB cle jutio de 1816.

Para proveer a los enfermos de los alimentos que tlis-


pusiese eI facultativoy abastecer de leíra, agua y demás ar-
tículos indispensahles, recurrirá al alcalde territorial de la
villa, que por él serán suministrados, dando el corespon-
diente reeil¡o visado por el cirujano, para que tenga toda
Ia formalidad de documento aI tierrpo de abonar diehos ar_
tículos por los fondos del Estado. Pondrá especial cuidado
en distribuir diariamente con Ia mayor econornía y medida
Ios intereses de cocina, sin que llegue a escasear nada de
cuanto contribuya a la asistencia prescripta por el méüco
y cada mes presentará un estado de los artíeulos de esta es.
€: JT {T
SILVA VILA
FÉii: gtre - haran consumido y otro del número de eafer-
ri.-¡ i-.n l,¡:icia¡ de los curados y estado de salud.
!1¿171,.1.;!r-,¡r-s para el control d.e un hospital militar creado
en FloritJa, 14 de lebrero de lBlZ.
FUNCtrON§§ PÚBIICAS

Cuando Be trata de salvar los interesee públicos, ee 8a-


crirican 1os pafiiculares.
Al Teniente Félix Gómez, eru &wtouí, lB0I.

Ei tiempo es eI testigo de desengañaraoe y éI dará a


entender rlue yo no tengo enemigos, sino ].os qrle se oponen
a la públiea felicidad y que serán ¿'lnicamente mis amigos
los que contribuyan a fijarla. Los hectrros sou los que {orrnan
los l¡ourbres públicos y la vohrntad general ilecidirá eI que
sea cligno de esta confianza. Yo y todo cuidadano estará
riependiente de eeta ley a la qlre tenemos ligacla ¡tuestra fe-
Iicida.d.

A! Sargento Mayor d.e Corrientes, 27 de lebrero ite tBtS.

La pureza de mi condueta debe ser nol:ma de los demáe


subalternos. De 1o eontrario, ellos serán responsables de
sus defectos y yo e.o podré mirar con i.ndiferencia su casti-
go. Al tenor de las eabezas, se mueven los lrliembros del
cuerpo polítiao y según sus virtudee son la trascendencia a
Ia eociedad.

,§l Gobernador de Corríer"tes, g de abril de 1815.

Me mandará una relación de todos los empleados y


una propuesta igualrnente de aquellos patricios que pueden
desernpeñar aquellos servicios. Para ello, eiempre p.opoogu
Ios hombres que por sus conocimientos, adhesión y prud.en-
cia merezcau la púlilica estimación. Ellos serán colocadoc
con ¡ni aprobación para evitar la confusión originada pre-
]LAN SILVA VILA
6,,I
parte en nues'
sujetos qle sin tomar
ci¡rmente por aqüellos
tros afanes, o"' u""Ji"JJi-;;i;'
*1:t"1 P" *"'"1:^1'*i:
amerlca'
los europeog' Deben sef,'
na se dará importancia a ,a Provincia
nos precisamerrte' v ;;;
;*J';ió,,io'.hijts de
que pudieran origrnarse'
il."'"rrrrt los celos ¿te 1815'
Al Cabililo de Monteoideo' 28 de iun'io
la-salvación de ese pue'
En ese Cabililo he depositatlo dolor verle expirar en
mayor-
blo. Está exánime ,"*J "f la Patria
,,lanos cle sus ,*ri"t
it;; S;+ los Pa'lres deaún me so'
más inexoruUt"' po""t*
i"b"'; de lo contrario que
l*t"**ioio' No es difícil ese
bran bríos putu fi'*u' " que arrancan de mi eora'
Cabitrilo calcule los sentimieutos
zón esas exPresiones' de tantas almas sensr'
Ellas van u"iildu* del clamor to infelicidad' Por
bles que tt 'li*";':; """-lü'r*u:--il:
sacr'Iieios tan estériles'
Re'
lo urismo, oo *ffit;;;i administración en la
frénese "t d"to'¿u'l;ü"t"*
14,
Tejor- los magistrados dig'
economía pública"i'ot
tit'i*o' háganse
tut tr¡endiciones de eus conciudadanos'
rros de sí y merece'a"
cle 7875'
Al Cabilito ile Monteuíileo' B de iutio
pavor estimaeión' pero
El }¡ien puede ser digno fr6 !¿ ád"t beneficio de
las varias "o*pu"I"io;";
;' permiten ",,
los intereses c:"*-1::'.^::"
los partidari"- 1' ;;;;"*"titt' v cualquier excelc¡on
pto"idcneias
este iin son tlictatlit mi* con'
de la ley será un *i*
a" excitar lot ""lot en los demás
eI peor de los males y para
ciuiladanos' n*" "J "i"tamente de la ley' I{o será
evitarlo sean toclos iguales a presencia
se'perjurliquen los.pu'1""111:'
exmaño que en ;;;;;;"
cuando el Estado itt*"
t" p"'jodi"u sujeto al duro impeno
de las circunstancias'
9 d'e iulio d'e 1875'
At Cabitito d'e Monteuiileo'
de
Lo que iuterega e§ que Ud' se porte como hombre
IDEARIO DE ARTIGAS 65
hier- qtre castigue a los delincuentes y premie a los yirtuo-
Fs.i qite l-lene la justicia rectameüte, sin atender empeños ni
R-icnes, gue los trate con cariño para que de ese modo se
L:-:¡ obedecer y amar.

"1 -4.ndrés Artigas, Carnandante de Misiones, Z? de agosto da


1815.

En Ia actualidado todo deben esperarlo Ios eiudadanoe


de sus magistrados y ese Cabildo se halla suficierxtemente
ar¡torizado para abrir los cimientos que deben sostener el
alto edificio de nuestra Libertad. Yo por mi parte. no haré
n.ás gue multiplicar mis afanes para poner el sello a tan
grande obra.
Al Cabíli!,o de Momteaideo, 7I de setiembre de lBlS.

La patria exige de nosotros eI mayor sacrificio y si todo


Jo S"" hasta hoy se ha trabajado Iuese por reeo¡ropensa de
los sueldos, acaso todos habríamos sido sepultados con la
patria, en eI olvido. Los. magistrados deben ser los ejemplos
de virtud para que sus virtudes sean imitadas por ."* ..i¡.
ditos.
Al Cabílilo de Corrientes, 9 de naoíembre de LglS.

BI Cabildo debe ser unr argos que todo Io prevea, ins.


peccione y rernedie. Nuestro Estado naciente, sólo presenta
dificultades y allanarlas es obra del tino y tre la p.ird"o"ia.
Los magistrados son los encargados de perlecciorailu y nada
eerá tan esencial eomo celar la administración del Esiado y
reunir todos Ios intereses que deben formar la salud publica.
Al Cabililo de Montevifuo, l0 d.e lebrero d.e lB16.

Yo felicito, a ese Cabildo y a los pueblos orientales gue


han depositado en ese Cabildo Ia r"p""sentación de sus de.
reehos, su gloria, su suerte y su felicidad. Espero que ese
T6 JUAN SILVA YILA
Cabilrlo no los dejará desairados. Yo por rri parte, o§lezco
mis esiuerzos y no cludo que altamente penetrado de sus de'
teres, llenará Io sagrado de esta confianza. Iiuestro Estado
naciente sólo presenta diiicultades; allanarlas es obra del
tino y cle la prudencia. Los rnagistrados son los encargados
de perfeccionarlo y nada será tan o]¡vio como eelar la adn¡i'
nistración del Estado y los inteleses clue deben formar Ic
ralud priLblica.
Al Cabik!,o de Monte¡¡id.eo, 9 tle ¡narzo de 7876.

Ee un error creer que los ernpleos c{e un país li}rre, cla'


rán a nadie sul¡siste¡rcia: lo primero, porque siem¡rre serán
de poca duración y lo segundo, porque en Euestno estarlo
de indigencia, jamás se podrá con el simple empleo, avcn'
trlrar la suerte de un ciudadano'.. Yo soy de parecer que
aproveche tld. la oportunidad de los terrenos que se están
repartiendo en la Provirlcia, pidiese alguno y al dedicarse
a eu cultivo, hallaría en élo su descanso y el de su familia.
A uru solici.tante d,e ennpleos, 24 ile warzo da 1816-

Es preciso que ese Cabildo convenza a sus conciudada-


uos que los cargos que da la patria a sus hijos, son de honor
y empeño por la felicidad pribiica. Esto dicta un sistema
liberal a cliferencia del antiguo que sólo cedía en utilitlad
y honra <tre los particulares. El que no se conforrne con
esta liberalidad de sentimientos será reputado por egointa y
enemigo de la felicidad común.
Al Cabildo de Cotientes, 4 de abril ile 1816.

Es preciso que siguiendo el sendero de la justiaia pro-


eure ol¡rar rectamente y no neacular el honor de un nragir.
trado que del¡e velar más los intereses públiaos que el de
lor particulareo.
Al Cabilda de Corríentes, 25 de abril de 1816.
;

i
I

i
IDEARIO DE ARTIGAS 67
\omlrará a otro gue teuga mejores virtudes para cfuo
así formemos ciudadanos capaces de hourar el decoro de ur¡
gobierno que siernpre justo en sus prineipios, debe igual-
mente se¡lo en sus resultados,
Al Cabíklo de A[onteuideo, 24 d,e mayo de 1816"
No sabemos el tiempo que Ee ernpleará en esta lueha y
los recursos que eoná precieo agotar. Por ].o mismo es preciso
cor-qervar escrupuloaarüentc los fondos de Ia Provincia y
emplearlos eolamente en artículos de primera necesidnrl y
en tros casoo precisos. En un estado rnás florecie,n,te, lae ero-
gacionee no serán super{luas, pero en el nuestro, sólo de}¡eu
respiandecer las virtudes y el entusia¡mo por la sagrada
cau6a? mác que eI oro y Ia plata,

Al Cabild.o de Corrientes, 22 de enero de 7817.

Lo que intereea guardar ea Ia claridad en laa cuen.


tas, su especificación y documentación. Este es eI orden quo
reencargo a ese Cabildo. For é1, es fácil de notarse cualquier
exorbitancia en los gastoe.
For lo mismo he creído un deber mío recomendarlo a
ese Cabildo por su exaetitud, que yo por mi parte Ie doy
las gracias emplazándolo a ¡us más cabaleq desempeños, que
la Patria no le eerá desagradecida en el premio.
Al. Cabild.o d,e Coruientes, 22 ile enero de 7818.

,l
LIBER AD

Unión, compatriotae y estad segnroe de Ia victoria. He


conr-ocado a todos Ios patriotas caracterirados
r de t" -"oo.
todoe: todos, se ofrecen coilr 6us
llersonas
""*p;;
y bienee a
tril;uir a Ia defensa de nuestra juita .uour" A Ia empreea,
compatriotas, (Jue el_triunfo es nuestro;
vencer o morir, sea
nuestra cifry¿ y tierrblen esos tiranos de haber
.*"it*ao
tro enojo, sin advertir que los araericanos del sur l"r.
egtá¡¡
dispueotoe a defender su patria y a morir
antes aon honor
gae vivir con ignomini. uf."rioso cautiverio.
"o
Desd,e Merced.es, proclama ¿te| lI
d.e abril de 1811.

EI Ejército ma¡cha a dar libertad a los habitantes


suelo que pisa, objeto de que no puede del
p""."irai" ii ;;:
cualesguiera qo" ."áo las
1::f::
(lrrtJan. iroposiciones gue se Ie
At Mariscal d,e Campo Elío, 2A de mayo de lgtrI.

quiero que persona alguna venga forzada,


, .N:
runranamente
todos vo-
deben empeñarse eu su libertad; quien
quiera, deseará permanecer egclavo. En no Io
cuanto a las familiae
siento infiuito no se hallen Ios medios
de poderlas contener
en suc casas: un mundo entero me sigue;
¡etarda mis mar-
chas; yo me veré cada día más llen]o de
obstácul." p*"
obrar; ellos me han venido a encorutrar, de
otro _oa. yi oo
Ios hab¡ía admitido. por esros *r;t;;;;cargo
a Ud. que se
empeñe en que no salga familia alguna;
aconséjelas IJá. que
les será imposible seguirnos, qr" t"l"gu"an
casos en que rlog
veremos precisados a no poderlas eseoltar
y será peor verse
desamparadas en unos parajes porque
n"üe podrá ,ul"ri;;
I
I
73 JUAi\ SILVA VILA
por Éi !1o se
convexrcen por estas razones' déjelas {Jcl' que
obren como gusten'
A don' Monwel Vega' 3 d'e nouíembte de 1811"

l\Iantengamos la mejor confraternidad


y dando un centro
iJeae, fijémoslas eir la patria' Sus días
catramitosos
" ""*itr-
reclaman rruestra§ energías; ella nos
distingue' ella nos de'
cide a perecer antes de gue el on1-obi3
y la vergüenza mar-
presoindir
q""" l- época de nuestroJ ctías y L[a' haciéndonoe
de todo lo xnás, nos pondrá en las marlos
el medio cle dar
.t *a* brillante triunfo a la libertad'
Gobernadat de Corrientes' 7'4 d'e not¡iembre
de 7817'
Al
cuya eola
En muy poco tiempo, se vió un ejército fruevo
divisa era la libertad'
A la Junta ile Paragway, 7 de d'iciembre d'e L811'
:

Yo tuve la satisfacción de ofrecer al Gobierno de Bue'


nos .Aires, que llevaría el estandarte de la libertad' hasta
los muros de Mo,rtevideo, siempre que se concediese a loe
oiudadanos, auxilio de munieiones y dinero'
A la lunta d,e Poraguay, 7 d'e ilicíembre ite 1871'
permitir jamás qr¡e su
Detervninados los orientales a no
suelo eea entregado impunemente a un extranjero' destinan
todos los instantes a reiterau La protesta de ¡ro dejar las
armas hasta que é1 no haya evacuado el país'

A la Junto d,el Paragway, T cle d'íciembre d'e 1811'

Reducidos por urla reunión: de cireunstancias' a espe-


rarlo todo, sólo de rlosotrcs misnaos, Ia más perfecta uniót'
es 1o único que debe caracterizarnos: al penet¡:ante
grito de
la patria, toáos debe¡:ao§ ser uno y fijándonos solamente en
ea1rarlu, nada capaz de arredrarnos puede presentarse
I
IDEARIO DE ARTIGAS 7L

iluestros o;'os. La causa es justa, no Io dudamos y por más


que mil incidentes se opongan & nuestra digna resolucióno
de]:e¡noe eeguirla haeta el extremo. Si de una parte, nos eon
negados auxih'os, detr¡einos conocer que siendo preciso no so.
focar nuestrae ideas, en nuestras manos está com.servar el tro.
no de la lil:ertad y si una vez Io abanclonarnos, rro volve-
rernos a ter¡er la misma proporción, quedándorros sólo el
triste recuerdo de haber o]¡rado como hombree libres.
Al, Gr¡bíenrc de lus Prauinciss Aníd,as del. Río d.e la l,lota, 74
d,e diciem.bre de 1811.

[s un cuadro capaz de comproneter la hurnanidad. hasta


el exceso. La miseria no se ha separ:ado de sus filas. Desde
el principio, todo se ha reunido para atormentarlas y yo, no
tengo ya con qué gocor¡erles. \o se pueden expresar las ne-
cesidades que todos padecen expuestos a la mavor inclemencia.
Sus miembros deenudos se dejan rer po¡ todas partes y un
poncho hecho pedazos líado a la cintura es todo el equi-
paje de los bravos orientales; mi1 reces he separado rni
vista de un cuadro tan consternante: he recurrido a la
pero su resignación impone ia ley de la ternura y es
preeiso ceder. He sido testigo de las más tristes expresiones
de sus privaciones.
La piedad, la compasión sobran para erigir el rnás pron.
to auxilio en favor de unos hermancs que courpran su Ii- .

bertad a precio de infelicidades. La gloria de la patria es


.Bocorrer a tan ilustres defenscres.

Atr Gobierruo de las Prooineias, 24 de emero ile 1812.

Nada trrabrá capaz de hacer¡roe variar; las peores cir-


cunstaneias, eI mundo entero empeñaclo en combinarse para
que los orientales al¡andonen el trono de su libertad, no eerá
capaz de separarlos de su primer sentimiento. Su augusta
voz tro¡rará siempre en torrio de raosotros, avisándonos que
.eólo ella puede presentar al hombre, Ia grandeza que le e§
72 JUAN SILVA VILA
propia. El honor, la justicia, todos noe grita que naci"'rog
libre-..
Lüertad, tú nos darás loe triunfos y aúu aI dejar nuea-
tra sangre, alzarás tu mano augusta y nos presentarás el
laurel que tanto amamo§!
Al Gobernailor d.e Corrientes, 25 de erwro ile 1812.

No ha habido modo de decidirlas a que dejen de seguir


a eete ejéreito. Ellas llegaron hasta el exeeso de ofrecerme
sue vidas formando entre los soldados antes que resolveree
¿ abandonar a sus padres, hermanos, esposos? precisamente
en las circunstancias en gue el afecto y el auaor a su liber.
tad, daban la señal de marchar a prepararles suo antiguos ho.
gares con el precio de su sangre. Yo no he podido coirte.
nerlas y Ia mayor parte de ellas han repasado ya el Uru-
guay. No hay remedio; seguirán con nosotros? pero le repito
que tada influirán en las operaciones a que estoy determi-
nado, ni la menor consideración hacia elles será capaz de
eutorpecerlas ni quitarles u;rsolo ápice de activi.dad.
Al Gobernador de las Praoincias, T0 de abril de 1812.

Todo está todar,ía en mi marro? y penetrado del sistema


santo, derramada tanta sangre por é1, vueltos todos pobres y
Ilenos ele trabajos sóno por implantarlo, es preciso no per-
mitarr¡os gue tantas pérdidas y desvelos se prodigasen sólo
para costener una tiranía nueva. Yo voy a continuar rnis sa-
crificios, pero por la lüertatl.
A d,on Tomá,s García de Zúñ.íga, 2A diciembre de lBlZ.

Yo estoy ya decidido: propenderé siempre a Ios triunfos


de la verdadera libertad. La razón y la justicia sancioaarán
mi proceder.
A la lunta d,el Paraguay, 20 d,e díciembre ile 18tr2.
IDEARIO DE ABTIGA§ 73
La euestión es sóIo entre Ia libertad y eI despotismo;
a¡¡estros opresores, no por su patria, sóIo por eerlo, {ormarr
el objeto de nuest¡.o odio.
Al Ge.neral Sarratea, 25 de dici.embye d,e lglZ.

Ciudadanos: haeernos respetables es Ia garantía indes-


troctüle de vuestros afanes para conservar tra libertad.
A ln Asamblea de la Praaíncia Oríental, 4 d,e abril de ILIJ.

Nuestra historia es la de Ios héroes. Etr earácter cons-


tante y sostenido que hemos ostentado, anl¡nció aI mundo
la época de Ia grandeza. Ceni,4 y ruina, sangre y desola-
ción, ved ahí el cuadro de Ia Banda Oriental y el preeio
costoso de su regene¡ación. Pero eila es pueblo libre.
A la Asamblea d,e la Prooittcia. Oriental, 4 de abri,l d.e lgLS.

Yo continr¡aré siempre en Eis fatigas para Ia libertad


y grandeza de este pueblo. La energía nivelará sus
Ilascg
ulteriores hasta su consolidaeión y en rnedio de los mayo-
res apuros, no me prostituiré jamás. Libertad, iguald.ad, se-
guridad, son nuestros votos; libertad, igualclad, seguridad,
serán Euestros dignos frutos. Coronarán nuestro afán y esa
inrnortal Provincia nos retornará sus efusiones, dirigiéndo.
eetroe nosotros cor! igual motivo.

Al gobierno d,el Paraguay, lZ ile abril. d.e lgll.


Las bases de la lüertad, no me parecen ur.ás respetables
que loa meclios para su seguridad.
Al General Rond.eau, lZ d.e abril, iLe IglS.

La Provincia Oriental está alarmada contra eI despotis-


mo: si sus prosélitos se han multiplicado rella no es merloe
Iibre,

á
lt JUAN SILVA VILA
Sería muv ridícu.lo que no mirando por sí, prodigaao
ru a Monte¡'ideo, y mañana ofreciese a otro
sarigre frente
nllero cetro de hierro, el laurel mismo {r:e va a tomar de
robre sus nrurallas. La Provincia Oriental no pelea por el
restablecimiento de la tiranía en Buenos Aires.
Instrucciones par& el ciud,ailano Larrañaga en sw nweua Co-
misión srute el Gobierno de Euemos Aires, 29 de junio
d,e 1813.

Inflámese de nueyo el primer entusiasmo de Ia revo.


lución. Bultran todas aquellas virtudes sutrrlimes y que re.
aazoa en los ciudadanos la energía.que en todas partes ha
aeor:apañado aI grito sarlto de Ia libertad.

At Cabildo de Corrientes, 29 rie marzo de 1814.

1\[e veo en grandes aprietos porque todo eI mundo vio-


lre contra mí. Los amigos me han faltad'o en el mejor tiem-
po y yo he de sostener la lil¡ertail y la independencia de mi
persona hasta ¡Borir.

A Felipe Gabe, 13 de setiembre de 7874.

Yo he ordenado en todos Ios pueblos libres de aquella


opresión, que 6e levante una bandera igual a la de mi Cuar-
tel General: blanca en medio, azul en los extremos y en me-
rlio de éstos, unos listones eolorados, eigno de la distinción
de ¡ruestra grandeza, de nuestra decisión por la República,
de la sangre derramada para sosterler nuestra Iii¡ertad e in-
dependencia. Así lo hau jurado estos beneméritos soldados
ell tres de enero de este presente año, después que ee cre-
yeron asegurados para ver respetables sus virtuosos esfuer-
zos. Ellos subsisten y subsistirán mientras haya tiranos que ,
§uperar. Nada les es más di{ícil que sobreltrevar esa igno-
miaia y creo que los déspotas no se gloriarán sino sobre
eus cadáveres. TaI ha s ido la 'grandeza de nuestro carácter
y ella debe empeñar a los demás como patriotas, a mante-
TDEARTO DE ARTTcAS 75

nerse con ciignidad si no queremoo que }a posteridad llore


nues'rra debilidad y retiro, como hoy de]¡emos cle lamen-
tan1o3 de la inacción de nuestros noayoreo.

Al Gabernador de Corríentes,4 de lebrero de 1815.

Por un favor del cielo he sido llamado a]. mando de


1as }{isione6, para libertal los siete pueblos de esta banda
del tiránico tlorninio, bajo el eual han estado quince añol
girniendo los infelices indioe.
Se oe acerca y alumbra ya la hermosa luz de la liber-
tad; sacutlid ese yugo que oprimía yuestros pueblos; des.
€ansad en eL seno de mis armas, seguros de mi proteccióu;
yo vengo a amllararos, a buscaros porque sois mis seme-
.jantes y riis hermanos.
Proclama a los indios de &Iisíones, 73 de nl.Gtzo de 1815,

Hasta el presente yo no he hecho más que cumplir


con los de}¡eree de un buen ciudadano empeñando los es-
fuerzoe que han estado a rii alcance para ver a la Provin-
.cia libre de tiranos. Allanado gloriosameute este paso era
de necesidad tocar toclos los resortes que afianzasen en Io
sucesivo eI triunfo de Ia lii:ertad. Por lo mismo he eon-
tinuado mis afa¡les en pro de las provincias vecinas, creyen-
do adelantar con este suceso la inviolabilidad ulterior de
uuestros derechos.
Al Cabilda de Monteuid.eo, 25 d,e marzo d.e 7875.

EI triunfo de la libertad es eeñalado en todos los pun.


tos y ya no dista ese día grande de ver entre otros pueblos.
nacer la pazr'La !¡uena arneonía y la fetricidad.
A losé Da Silaa, 9 d.e abril de 1815.

Desde lo alto de esos muros de Mo¡rtevideo que sostu.


yieron antes el poder indigno de los déspotas, se ostente
it
1i
í,
I
l
75 JUAif SILVA VILA
el solio augusto de Ia libertad, rodeada de tod.a su grande-
za y esplendor y de las demás virtudes de los héroee de
gne fué cor.stante ereadora en todos los tiempos y que en
lcs días de gloria que se nés destina¡¡, sean los padres de
la patria, los prinoeros err coroflarse.
Al Cabildo de fuIanteaid.eo, g d,e m,ayo d,e 1815.

Veudrá tiempo en que del¡amoe hacer oste¡ltacióu de


nuestra grandeza y que lae ar¡nas orientales no se rindan a
Ios tiranos ni a loe enemigoe de nuestra lihe*ad.
A Andrés Arti.gas, Com.sndawte de Misiones, 15 d,e junio
de 1815.

- Deje Ud. gue hablen y prediqr.ren contra mí. Esto, ya


sabe que existía aun entre los que me conocían, cuanto rrás
eutre los que no me conoeen. $Iis operaciones son más po-
derosas que sus palabras y a pesar de suponerme el hom-
bre más ariminal, yo no ha¡é más que proporcio¡rar a los
hombres, Ios medios de su felicidad y desterrar de ellos, aque-
lla ignorancia que les hacía sufrir el nr.ás pesado ¡,ugo de Ia
tiraaía. Seamos libres y seremos íelices.
A Andrés Artigaso 2Z de agosto d,e l1l5,
Todo tirano tiembla y enrnudeee al nrarehar majestaloeo.
de los homl¡res Iibres.
Al Cabílilo de Corríentes, 29 de octubre d.e lgli.
Active sus provideucias para establecer Ia sereuidad de
los días alegres. La espera desengañará al pueblo que Ias
conu¡Isioneo, lejos de fijar la libertad, Ia destruyen.

Al Cabíl¿lo de Corrientes, 2g d,e octub?e d,e lBlS.

Mis medidas están ya tiradas, y eI oriente hará respe-.


tar su libertad con pesar de sus enemigoa. Lo que iuteresa
IDEARIO DE ARTIGAS 77
es Ia energía de Ios magistrados para un fin tan digno y
que ese Cabililo, penetrado de Ia fatalidad que nos amena-
za en cualquier moÍnento desgraciado dirija sus esfuerzos
para coadyuvar a que todos sean gloriosos. La decieión es uná-
nime y fir¡ne en todos los orientaleo. Su genio uragnánimo
v guerrero eólo necesita direación y confianza. Yo por mi
parte Ia he jurado ante las aras de la patria, Yo iré die-
tando mis providencias de preeaución y todo lo que pueda
contribuir a fijar una époea gloriosa.
Al Cabilád de trlonteuídeo, 72 de enero de 1816.

Cou libertad, no ofendo ni temo.


Lema de Artígas para el escudo de lc Prooincia Ori.en
tal, Yéase el folleto de 1816 que contiene la <<Orcción Inat^r-
gttral d,e la Biblioteca Púbtica>>, por Dámaso Larrañ,aga.

Queriendo ser libres, la multiplicidad de enemigos eólo


eervirá para redoblar nuestras giorias. Los orientales saben
desafiar los peligros y superarlcs.
Por más que las complicaeiones eu-B.enten, nada temo
tanto corrro que se acabe Ia moderaeión y que tengamos que
batirnos unos a otros. Al meilos. si Buenos Aires no cambia
de proyecto, ni podré ser inciiferente a sus hostilidades y
eiu desatender a Portugal, yo sabré castigar le osadía de
éste y contener la imprudencia de aguélla.
Al Cabilda de Montet;ideo, 6 de junío d,e 1816.

Es preeiso que ahora más que riunca se reilol¡le la ener.


gía y
estén ustedes con cuatro ojos al ver venir las cosas.
Los mo¡nenios aun no son apurados. Da tiempo cl proyecto
de invaeión para tornar providencias? pero nunca está de-
más la precaución. No me guarden indulgencia con nadie;
al que ande rnaleando remítanmelo por acá. Entretanto
rroy apurantlo las medidas para el logro de un plan que
78 JUAN SILVA YII-A
contenga vigorosamente loe esfuerzos del enernigo y acaso
nos dé la gloria sollre sue ruinas.
Al. Comund,ante Ríaera, 7876.

No ee combinable con los intereses europeos, nuesl.ra


e:ristencia política. Por 1o rnismo, es un empeño obstirra-
do contra eI sistema y éste se ha for¡r¡alizado con las arürno?
con la guerra y eon la destrucción cle los tirar¡os. Sirr ella,
son infructuosos nuestros sacr:ificios y uunca debe¡¡ cernoü
tan agradal:les que cr¡ando inarchamos a redoblarlo$ corrtr¿¡
un extranjero siemp;:e envidioso tle uuestra felicidad y em-
peña,lo siemi,re en nuestra ruina.
Al CabilCo de Ccnientes, 16 de jwnio da 71116.

Yo he |resentido el disg..;:to cor que marchan tras tr:o-


pas de la P¡or-incia de Corrieltes v er¡ mis filaa no quicr<>
hombres qlre tenrarl el peliso. Lcs hombres gue tengo eI
honor de mrniar pelean por su libertad r prodigan srls 6o-
crificios hasta asesurar los intereses de estas pro;'inr:ias. fln
consecuencia, los hombres c¡ue me siguen dei¡en ser volun-
tarios y toda operación que no parta de este principio et
para mi desagradable. Sin embargo eso llo obsta para que
Corrientes cuente siernpre con rnis esfuerzos y protección.
Al, Cabild,o de Corrientes, 25 de agosto de 1816.

El giro de la revolución debe mectrirse por el de los sl¡-


cesoú. Al frente de vosotros, en seis años de trabajoo, he
acreditado suficientemente mi amor al paía y a los sagrador
intereses de nuestra libertad. Por e}lo, hemos combatido c
los enemigos exte!:iores e interiorea y en uredio tle las gra-
ves eonrplicaciones, eI triunfo siernpre ee tlecidió por la jur-
ticia.
A los Pueblos d.e la Conted.eraciñn, 76 d,e nouíeml¡re de 1816.

Ee propio de lor libres. preferir Biempre la gloria a Ia


IDEARIO DE ARTICAS /Y

ignnminia y ese Cabildo det¡e estár seguro que un earácter


eostenido no ceelerá fácilmente a la bajeza. Por fortuna_.gl- =-
estado de nuestras armas uo es tan deplorable para qudr Sé*- ... r'3\
mos reputados como el juguete de la fortuna. Tg!§,'debe
esperarser1eIaerrcrgíadelosorientalesydccu''ileuucdo
por et eostén de Ia lil¡ertad. ,' :- ,i ' .
:, .
:

AlCabitá,odehIontel;íileo'7gd'ediciembrei!elB16......,.'
'",
La inacción no nos ha Ce salvar, ni la ronca voz de l¿¡ Ii- ,

Ilertacl en Ia Icbreguez de loe momer:tos o en urertrio tle 1o*-''-


polrlados. La Íttexza armada en campaíra es quien h¡¡ de
operar sobre el enemigo y aterrarlo.
Al Cabildo de Conientes, 22 de enero de. 1Íj1.7.

Es preciso que hallemos en nuestra energía eI urejor


sostén y que la decisión sea el rnejor apoyo aún en loe úrl*
timoo apuros. Aún no hemos empeñado la guerra de ¡ecur-
sos. Es visto gue ella intimará aI enemigo más que la gue-
rra arrnada.
Al Cabildo de Corríerutes, L2 d,e lebrero de 18L7.

Gloria a los libres de Oriente, que supieron triunfar so-


bre los tiranos. Felicito a ese Cabildo y demás conciudada-
nos por los honores del tri¿rn{o. El coronará las sienes de
Ios libres. si con Ia misma eficacia toricg somos empeñador
en Ia persec¿rción de loe tiranos.
Al Cabildo de Corríentes. 9 de e*ero de 7BlB.

Amar su libertad ec de seres racionales. Perderla, er ttre


cobardee. Los orieutale¡ ¡ro han olvidado sus ragrado¡ de*
berea.
ál Cabílilo d,e Sun lo*éo setierubre de 1818,

I
BO JUAN SILVA VILA
Mi decisión por la libertad de loe pueblos, será siem-
pre superior a todos log contrastes.

Al Cabi.lilo de Santa Fe, 7g de mayo de lBI9.

Fara mí, nada ee tan obvio como dejar a los puebloe


€n €u lil¡re elección y si ellos creen asegurada su suerte
sólo eon promesas, celebraré que el tieropo ponga término
aI desengaño sobre tanta perfidia.
AI Cabililo de Coníentes, 27 d,e mayo d,e 1819.
Cuando iepasé el Uruguay, fuéo compelido por mis ene-
migos. Ya hahía prevenido este daso como posible, y mi re.
solución de br¡sear hombres tribres para coadyuvar en los
esfuerzos. Este es todo mi deseo y por llenarlo, no dude [Id.
estarán prontas mis tropas y las demás que tengatl las otras
Prol'i¡cias de ia Liga. luego que se prese¡:.te algún enemigo
con algrrira partida e¿ obsen'ación de las costas que las creo
expuestas.

AI Jefe de las fuer:cs de Entre Ríos, Co¡nondante Rica¡do


Lópe=,2A de fubrero de 1820.
NOBMAS MOBATES

Sostener los hombres eI primer yoto de sus corazones,


es Io que da dignidad a eus obrag.

A don Mariano Yega, 79 de nooíembre de 1817,

La causa de Ia llumanidad, ee la nueetra.


Al Coronel Galaá,n, 2 de febrero de 1812.

¿No bastó haber estado todo en mis manos y devolver.


Io todo?
Al, Dr. Paso, 23 d,e diciembre ile 1812,

No hay circunstancia capaz de reducirme a variar de


opinión. Esclavo de m i grandeza, sabré llevarla al cabo,
dominado siempre de mi justicia y razón. Podrán arrancar.
me la vida, pero no envilecerme. El honor ha formado siem.
pre mi carácter. EI reglará mis pasos.
Al General Sarratea, 11 de tebrero de 1813,

Mi houradez es superior a los contrastee.

Al Marqués d,e Alegrete, 4 de not¡íembre ile 1814.

Para que triunfe Ia justicia, se ha de castigar eI vicio


y premiar la virtud.
Al Cabílilo d,e Corríentes, 20 da enero d.e 1875,
a7 JüAr'l sll,va VILA
Yo no tengo enemigos, sino los que se oponeu a la f'e'
li':idad pírir1ica.
A Juan B. Méndez, 21 de tebrero de 1815'
Reeordemos Io pasado, ansiosos <trel bien futuro'
A José Da Sil,ua, 70 de ahil de 1815'
La posteridad sólo podrá disfrutar de los henéfieoe
frutos de nuestros hrazos af,anosos.y Ia pequeña porción que
el atraso general deja en nosotros, aumenta en gloria lo qrre
nos rebaja en tranquilidad, dejando al fin, a &ue§tros hi-
jos, en nuestros sepulcros, el santuario doncle deban ado'
,uo lu. virtudes cívicas ereadoras de las dulzuras que los
acompañarán desde su cuna venturosa'
Al muy benem,érito pueblo de Buen'os Aíres,
2 de qbril ile 1815,

Formaliee sin pérdida de tiempo, los esclarecimientoe


cornpetentes, trasmitiénilome seguidamente 1o que resulte,
bien para satisfacer la justicia pública con el castigo de
ellos, si son delincuentes, I;ien -rara satisfacer ctebidamen'
te el honor de esos individuos, en el caso contrario, debien'
do esto servir de guía a ese Cabildo, en los casos que ul-
terior¡:rente puedan ocurrir.
Al Cabitdo de Morutet:ideo, 73 d'e iu'nio d'e 7815'

Asuntos de tal tamaño y en estas cirounstancias? sort


de una exigencia irnprescindible: un r¡rinuto de derrora, es
una desventaia, y la actividad ha sido lo que siempre ha
contril¡uído más a la gloria de nuestros sucesos.
At Cabitito d,e Monteaicleo',73 de iunio de 1815'

Siento ver con esos grillos a hombres que trran peleado


y pasado trabajos por la Causa. Etr Gol¡ierno de Euenos Ai'
IDEARIO DE ARTIGAS 83

:::. rle los mairda a ustedes para c{L1e los fusile, pero? yo
r-. i'.o lo-. motivos. Aquí me dice (señalando el papel que
::-r¡ en la mano), que ustecles ¡ne han hecho la guerra,
: ::.r \-c =é que ustedes no son los que tienen la aulpa, sino
] -. ,:ue la iran declarado y rne llaman traidor y asesino eü
l-. L--andos y gacetas, florque defiendo los derechos de loe
¡.-i..ntales y de las otras provineias que mo har:, pedido
: ro:ccrión.
Si es que ustedes me han hecho la guerra, 1o ¡nismo ha'
c¡n rnis jeies y oficiales, obedeciendo lo que yo les rnan'
rl¡,. coruo l¡.abrán cbedecido ustedes lo que sus superiores
les urandavon; y si hay otras catisasr ro no tengo naáa que
1'er con eso ni scy verdugo del gobicrno Ce Bue;ros Aires.

-4i TIayor Antonio Díaz y atras jetes, en Pa7'sandri, el 16 tle


junio áe 1,815.

No es tiempo de forrentar rivalidades que apaguen el


allor a la Fatria y el amor a Ia causa pública. Tan malo es
condenar al. inocente como absotrver al culpable. Yo deseo
que triunfe la justicia, que los delitos no queden impunes.
La resolución es cualidad de las almas grandes y la justi-
cia quien las §irige al rnejor fin. Searnos inflexibles con este
deber y sereüros feli'ces.

A{, Gobernc¡d,or d,e Caniantes, 2 de iulio d.e 1815.

Yo me glorio de la moderaeión con que me }le co¡rdu-


cido en ntedio de los fuertes contrastes y de los afanes que
he prodigado en obsequio -de la libertad.
Al Director clel Gabierno de Eweruos Aires, don {gnacio
I Aluarez, l0 ile julio áe 1815.
I
El pronto castigo es el rnejor: freno para colrtener a
tros ctelincuerites.

Al Cabildo de Moruteaid,eo, B de agosto de 1815.


84 JUAN SILVA VILA
De todos eed amigos, si nadie os proyoca y sed de to.
dos ene-igos, si os quieren oprinoir.
Proclama a las tropas de Misiones, 23 de setietnbre d.e
1815.

Su carta se hace tanto más apreciable cuanto manifies-


ta Ia prudencia que ha habido por nuestra parte, propo-
¡rieudo la paz antes de empeñar la guerra. For lo .misrno, la
justicia triunfa y Iluestros aJanee vau corouados de lau.
reles.
A Andrés Artígas, Comand,ante de Misíones, 23 de setiem-
bre de 1815.

No ignora Ias veces que nos han engañado, por tro qare
siempre es preciso unir la geuerosidad a la cautela.
A And.rés Artigos, Comanda¡tte d.e Misiones, 7 de octubre
de 1815.

Guardo sobre Ios fondos de la Frovincia, tanta €scru-


pulosidad, qoe hasta la fecha no he recibido ni un solo
oeútavo que no haya sitio por conducto o co¡rocimiento de
ese gobiemo.
Al Cabildo d,e fuIonteoídeo, 9 d,e nouíenabre de 1815.

Bl honor exige r.er resplandeciente Ia justicia y Ia pre-


sencia del reclamo de los infeli.ces, no dejar sin examen Ia
aplicación de las leyes.
Al Cabililo d,e Monteaideo, 2 d.e d.iciernbre de 1815.

Es preciso gue los hombres vean gue se castigan los de-


Iitos para que entren en la eociedad por la carrera del
honor.
Al Dei,egad.o Barreira, B de diciembre d,e 1815.
IDEARIO DE ARTIcAS g.r

Nada tenemos f¡ue esperar sino de nosotror rni¡¡rrrg


' A Qüemes, 5 d,e lebrero il"e 1816.

Ee euperfluo que empleemos -to precioso del tiempo en


cuestioneg inútiles. Los títulos son los fantasmae de los Er
tados y sobra a esta ilustre Corporaeióa tener la gloria de
sostener eu libertad sobre el seguro de sus derechoe. Este
rasgo es superior a cualquier otro hcmenaje y eternizará
eiertamente Ia mernoria de sue representantes. El mundo
espectador observa aún nuestros menores movimientoe y Ior
hombres libree mirarán eon indignaeión que besemos toda.
rría las cadenag de nuestro envilecimiento. La España re.
compeusó los servicios de Nfontevideo con esa gloria efí-
rnera y su memoria debe sernos odiosa.
Hemos roto I os vínculos con Ia península y debemot
borrar hasta Ias heees de [uestras artiguas arnarguras.
Al Cabild.o d,e {l[onteai.d,eo, 24 ile lebrero de 1816.

El que no entre al orden de Ia sociedad, por la espe-


ranza del bien, es forzoso que Io arredre el temor de la
pena.
Al Cabild,o de Monteuideo, 77 d,e marzo de 1816.

Esae comunicaciones están ajustadas a las vicisitudes de


los tiempos y no al imperio de la razón. Acaso Ia suerte
deje de sernos ingrata y los rerá en esos momentos mudar
el tono de sus resoluciones.
Al Gob, de Santa Fe, don Mari.ana Yera, enero ile 1817.

La suerte nos ha deeairado, pero ella podrá canearse


de sernos ingrata.
Al Gobernador d,e Santa Fe, d,on Mariono Yera, B d.e lebrero
d,e 1817.
:,: JÜAT*' SILVA VILA.
Le: he ccncedido licescia, porque me he compadecido
de .u situacióq y me pareee que han purgado suficiente'
uerte su delito. Le comunico para que si caen por esa ju'
risdicción, los amoneste? como lo he hecho y si continúa¡l
en nuevos excesos? sea sin indulgencia su castigo.
Al Gobernadar de Santa fe, don Mariano Yera, 4 de agosto
de 1817.

Salud y iibertad.
Puríficación,7 de noaíembre de 1817.

Los hombres no Ee burlarán de nuestro esfuerzo, ni del


honor con que peleamos por la justicia.
Al Gobernador de Santa Fe, don Maria'no Vera, 10 de di¡:íew'
bre d,e 7817.

El tiempo no me da lugar a reflexiones sino a obrar.


Al Cabild,o d,e Santa Fe, 29 d'e noaiembre de 1818.

Bl brillo del poder se eclipsa ante el brío de la jus'


ticia.
Al. Cabililo de Santa Fe, 30 d.e setiembte de 7818.

Fenetrado de los males que afligen a los infelices pri'


sioneros compañeros de armas y conmovido mi corazón por
tan fatal desgracia, he resuelto lil¡rar-te con esta fecha, dos
mil pesos para que ellos sean distrihuídos en beneficio de
nuestros compatriotas en los varios puntos que se ha]lan des'
tiaados.
Tú deberás escrilrirles, asegurándoles mi cornpasión y
deseo de su alivio y exigirles el recil¡o couespondiente, re'
¡:ritiéntlomelos con el tuyo para el descargo de mis haberes.
A su herntana Manuel, 73 de marzo d,e 1819'
iDEARIO DE ARTIGAS B7

Debes escrillirles coa encarecimieuto a los afligidos pri.


eioneros que no se apartatx de mi consideración. Ya ves
los r¡rorne¡rtos qLre han corrido hasta hoy; la desgracia siem-
pre ha marehado con la miseria. Hoy, que respirannos u-c
aire más llenéfico, es de mi primer cuidado remediar las mi.
senias de Uels. y las de todos. Acaso el cielo quiera proteger
mis votos y ver triunfante la Patria contra el poder de los
tiranos. R.ecomienda mucho a aquellos Cornandantes que €n
lae di.trih*ciones lro me olviilen a los desgraciados .oldudo.
igualmente que a los oficiales.
A su hermano Xlanuel, 14 de marzo de IBlg.
EI abuso que usaste en llaidcnado, clesrniente la gene.
rosidad de tus sentimientos de que estaba penetraclo, de que
me gloriaba como hermano y que te honraban como ciudada.
uo. Su defecto fué para mí un crimen. Y ansioso del bien no
puedo autorizar el menor mal y nada tiene de extraño que,
ansioso del ¡emedio de otros, empezase por mi hermano.
' Celebro que corrozcas el principio d.e tus padecimientos
y ellos siryan de reforma a la enmienda.
'A su hermano Munuel, 14 d.e marzo
d,e lll9.
lVfenos doloroso me hubiera sido un contraste de la
guerra, que ver debilitados los resortes que animaban las
€ol¡ounes e§pe]:anzas.

Al Cabildo de Santa Fe, lZ de mayo de 18j9.


Feliarnente, hoy, no necesito la pensión gue me acordó
etr General Francia, porque con los productos de esta cha.
c¡ra? teirgo 1o suficiente para vivir y hasta me permiten ha-
cer donativos a los pobres de mi veciadario.
Al General Paz, en. Asunci,óa en 1846,
i
PATBIOTISMCI

Todoe los patriotas ,earacterizadoe de Ia campaña, a los


gue he convocado, ee of¡ecen con sus personas y bienes a
coutribair en la defensa de nuestra justa causa.
Arengc a sus tropas: 1 d"e abril de 1811.

A la empresa, compatriotae, que el triunfo es nuestroi


vencer o morir sea nuestra cifra, y tiemblen los tiranos de
haber excitado vuestro enojo, sin advertir que los americanoa
del sur están dispuestos a defender su patria y a morir antea'
eon honor que vivir con iguominia en afrentoso cautiverio.
En Merced.es: 77 d.e abril de 1871,

Sólo aspiro aI bien de mi patria en la justa causa que


sigo,y ei algún día los americanos del sur nos vimos redu-
cidoe al abatinriento, hoy estarnos resueltos a hacer valer log
dereehoe que los tiranos mandones nos teníau usurpados.
A Antarúo Pereira, 70 de mayo de 1877, en. Sa.nta Ltwía.

Estoy seguro de que eI premio de la mayor considera-


ción, jamás será suficiente a doblar mi constancia ni hacer-
me incurrir en tan horrendo crimen, como igualmente el
hallarme siempre dispuesto a despreciar las promesas extra-
vagantes que por medio de su agente me insiuúa.
A Antonío Pereira, T0 de mayo de 7877, en Santa Lucí.a.

Las tropas todas me merecen igual atención y eetoy


persuadido que, a no ser ta¡rto su valor, no ee podría haber

1
S3 JUAN SILVA VILA
co$eguido una acción €on tantas ventajas sol¡re los enemi-
€:os?tan heroica para sus triunfadores y que en todas sue
partes justiiica el honor de las armas de nuestra patria.
A Rondedu. Parte de ia butalia de Las piedras, tr9 de mayo
de 181tr.

Todo, todo está pronosticando el innrediato estrago y


ruina de los tiranos y Ia alta gloria de nuestra drlce pa.
tria, Ia que hará eterila la memo¡ia de sus dignos hijoe.
A Rondeau, 19 de mayo lBIl.
oficiales y rni tropa, animados del entusiasmo que
-IVlis
ee debe a Ios sagrados derechos que defienden, no d"s"an-sa.
rán haeta tanto que sus Lrrazos quiebren las cadenas del des.
potismos y vayari después a recibir los de sus hermanos, del
mismo modo que han abrazado los de 1os habitantes todos
de esta carnpaña, libres ya para defentler su patria y resuel.
tos a soste&er la ca¡isa hasta perder Ja vida.
Al Je,fe ile l,a Plaza d,e Monteuideo, 20 de mayo d.e lBlL.

Entre cuantas autoridades ha c reado Ia política no


hay alguna, ui rnás honrosa ni más sagrada qo" tu de los
cabildos; no hay otra que permita eI dulcísimo atril¡uto
de padres de la patria? título casi divino, bastante a llenar
los deseos de Ia ambición más gloriosa; pero, tampoco hay
¡Iguna que denigre más los nombres de los q*" uLo.urr dL
ella o al¡audonan los deberes que les impone: su memoria
es llevada con horror hasta las futuras generacioneo.

Al Cabildo de Monteuid,eo, 2l d,e m.ryo d,e trgLl,

Me juzgo en grandes epuros cuaado trato de hacer pre.


eente el carácter que han demostrado toclos los señoree ofi-
ciales que he tenido eI honor de mandar e& es¿a acción.
E1los se han disputado a porfía el celoo aetividad e intre-
IDEARiO DE ARTIGAS 9I
pidez, rlistinguido valor y todas las virtudes qtle deben ador'
nar a ur¡ verdailero rnilitar; ellos ¡ne han hecho verter Iá'
grimas de gozo, cuando he considerado la justicia cou ![ue
.m.€recen el dulce título de heneméritos de la patria'
A la Jwnta G" de las Prouíncias d.el Río d,e la Plata, 30 il'e
mayo de 1817.

La superioridad de Ia fuerza de los enenaigos, sus po'


eiciones ventajosas, su {uerte artillería y particularmente el
estadlo de ¡ruestra caballería, Ia ruayor parte armada de pa'
Ios con cuchillos enastados, hace ver iududahlernente qtre
lae verdaderas ventajas que llevan nuestros soldados sobre
Ios eselavos de los tiranos, estarán siempre selladas en §1tg
€orazo¡les i¡eflamados del fuego gue produce el amor a ls
patria.
A la Junta G. de las Froq)inci.as ilel Río de lo Plata, 3A de
mayo d,e 7811.

Eetos son los momentos en que me considero elevado


por la fortuaa, al grado de felicidad más alta por cuanto
las armas a mi mando han podido contribuir a perfeccio'
nar la grande obra de libertad de mi amada patria y dar
a la Junta Gubernativa de las Frovincias del Río de la Pla'
ta, que la'representa' un día tan glolioso.
A la lwntu C, de !.us Prwincías d,el R.ío de la Platc, 30 de
m,ayo de 1811.

La generosidad distingue a la gente americana y la


tropa enardecida cedié a los impulsos de nuestros oficia-
les empeñados en salvar la vida de los rendidos.

.4 la iunta G. del. Río de la Flata, 30 d,e ruayo ¿le 1811.

Mis tropas enardecidas se empeñairan más y más, y sus


rostros serenos, pronosticaban las glorias de la patria.
A la Junta G. ilel Río de la Plata, 30 de mayo de 1811.
g¿ JUAN SILYA VILA
No eeamo¡ más amantes de más glorias gue de
cidad de queEtra patria.
la feli_
Al Cam*ndante Galoán, 14 d,e not¡iembre de lBll, en.
Arroyo Negro.

Yo tuve el hono¡ de dirigir una división de paisanoe,


con solo doscientos cincuenta soldados veteranos
y lrevando
con ellos eI terror y el espanto a los ministros de
la tiraníar.
hasta las inmediaeioues de l{ontevideo, se pudo
lograr lu _*
morable victoria del lB de mayo en los campoe
de Las pie-
dra_s, donde nail patriotas armarfos en
su mayor parte d.e cu-
chillos enastados, vieron a sus pies novecientos
sesenta sol--
dadoe- de las mejores tropas españólas, perfectamente
bien
ar¡:rados. Entonees dije al gobierno que Ia patria
podía con-.
tar con tantos soldados, cuantos eran Ios americanos
que ha-
bitahan la campaña y Ia experieneia ha demostrado
.obrudo,
bien que ¡ro me engañaba.
A la Junta de la proaincia del paraguay, Z d,e d.i.ciembre
d,e lBtI.

- El fuego patriótico electrizaba los corazones y uada era.


bastante a detener su rápido curso. No eran
los paisanos suel-
tos, ni aquéIlos que debían su existeneia
a su jornal o sueldo,
los que se movían solamente. Vecinos estal¡lJcidos,
res de buer¡a
p..""J"]
suerte y de todas lae comodidud". qrl ofrece
este suelo, eran los que se eonve¡tían repentinameute
en sol-
dados, Ios que abandonaban sus inter"rlr,
vnilias, Ioo que iban acaso por primer
.o, casas, sus fa-
a vez. a presentar su
vida a los riesgos de Ia guerra, Ioe qo" dejaban
Jcompañada+
de un triste llanto a sus mujeree e hijos, eu fin,
io. qr"
sordos ala voz de la naturaleia, oían sóio la de la patriJ
A Ia lunta de la prottincia del paraguay, Z d.e d.ícíembre
de 18il.

tiu puñado de patriotas orientales, cansado


ya de hu-
IDEARIO DE ARTIGAS 93

millaciones había decretado su libertad en Ia Villa de lVfer'


cedes ofreci.endo al templo del patriotiemo el voto de ven'
cer o morir libres y Para ello era preciso gue los puñalee
de los paisanos po-§asen por encima de las bayonetas vete'
ranas así se verificó prodigiosamente y la primera voz de
los vecinos orientalee que llegó a Buenos Airee fué acompa'
ñada de la victoria del 28 de febrero de 1811, día ¡nemorable
que había señalado la Providencia para sellar los generoaos
fusos de la libertad en este territorio y día gue uo podrá
¡eeordarse sin emoción, cualguiera sea ¡rue§tra §uerte'
A ia Junto del Paragua!,7 de diciembre de i811"
Yo no soy vendible, ni quiero más premio por mi em'
peño gue ver libre mi nación del poderío español; y cuaado
uis días terrnirien, al estruendo del cañón. dejarán mis bra'
zas Ta espada que empuñaron para defender la patria'
Al General d.e la Pezwela, iunio ite 1814'

Felices nosotros que henoos sabido coxlservar el ardor


primero de la revolución, aquel ardor, aquel fuego precioso
que hace los encantos del entusiasúao y nos presenta en rrle'
dio de estas oscilaciones, con toda la aptitud bastante para
destruir e! imperio de las pasiones.
A la Junta del Paraguay, B de tebrero de 1813'

E[e conservado siempre la misma intención y viendo tan


felizmente concluído en mi país, el objeto primordial de Ia
.guerra, el retiro a mi casa ha sido el solo fin de mis deseos.
Si no obstante eso, creen mis paisanos, necesaria rni perso'
ua para el arreglo de esta carnpaia, yo lo acepto gustosísimo;
pero, tra.iciouaría mi delieadeza si no expusiese que para ve-
rificarlo nG rne es preciso ni graduación ni despacho alguno'
A Rod.rígu'ez Peña, 25 de agosto d,e 1814.

La pobreza no es un delito y nc obetante que yo, mis


r

94 JUAN SiLVA VILA


oficiales.y scldados, accmpañados de este benemérito vecin-
dario, andarnos cinco aílos rodeados de ]"a rniseria, ello no
ha bastado a sofocar sus sentimientos de ltonor sino a esfor.
zarse por realizarlos y concluir Ia obra porque tan digna-
ú1e¡1te se sacrificaron. Si este ejemplo no sirve de lección a
Ios demás puehlos hal¡remos' eoaclt¡ído que se acabó en ellos
la virtud.
Al Gobernador dc Corrientes,4 de febrcro de 1815.

Deuigrado injustamente, pero siernpre patriota, el objeto


prirnordial de la revolución fué sienrpre rni r¡orte.
Al Ct&áIito G. d.e Buenos A.íres, 29 d.e abril de L815,

Frescindiendo de todas las necesidades que tenemos de


fondos, bastaría Ia que se uluestra en la miseria que a€orrl-
paña a la gloria del bravo ejército que tengo etr honor de
mandar, vestido sólo de sus laureles en eI largo período de
cinco años, al:anclonado siernpre a todas tras necesidailes en
Ia rnayor extensión imaginable y sin otro sccorro que 1a eo.
peranza de hallarXa un día.
Al Cabild.o de Mantet¡íd,eo, 2 de mo,yo de 1815.

No se perclonará diligencia ni empeño, hasta rao eatis-


facer al mundo entero? de nuestros grandes deseos y de la
honradez que envuelve eI noml¡re de oriental. Espero que
ustedes lo conservarán, haciéndose dignos de sí y de la ee-
tiynació:a de s¿ls coneiudadanos,
A los Diputad,as Bc¿rreiro, García, Cabrera y Andi,no, Zg
d,e julío de 1815,

&fi patria ]Be ernpeña a no ser gravoso? y sí, agradecido.


Al Cabilda de Montet¡ideo, 31 d.e juíio d.e 1815.

Ea mí obrau de acuerdo Ia responsabilidad y el com-

J
IDEARiO DE ARTIGAS 95

prcmiso. Ese Cabiido no ignora cua&to se retardarían nues..


tros esfue¡:zos sólo por falta de precaución. En los peligros
crecen las ansiedaúles y
el. entusiasmo general qnedaría para-
Iizado cou la indolencia de los magistrados. Etrlos deben ser
inexorables si la Fatria ha de ser libre. Si ove reclamaciones
no hallará un delincuente. Entretanto que nuestra exister¡cia
polítiea leo se mire asegurada yo no puedo respouder a Ia
inviolabilidacl de sus personas.
Al. Cabildo de illa*teo*id.eo, 29 de setiembre de 1"8].5.

El que ¡ro se halle eapaz de aplicar conmigo el hornl¡ro'


para sostener tra obra Ce ir¡ierés pal'a todos lcs orientales,
huya más ]rien de nuestro suelo. Pocos v l:uenos somos bas.
tafites para defender auestro suelo del primero que i.ntente
invadirnos.
Al Cabild,o d,e Monteuideo, 24 de moaiem,bre de 1815.

Cuando se enar:bola nuestra bandera, tpre sea paira rro


bajartra con deshonor de los orieiltales. ¡Yiva ia patria y mue-
ran los tiranos!
A Andrés Artigas, Cornand,ante de ifisiones, 29 de no-
oie¡nbre de 18L5.

Tenga entendido que entre los hombres libree, ¡ro ten-


drán aceptación los débiles.
Al Cabildo de hlorute¿*ideo, 9 de ntd,raú ile 1816.

Pensaba dar algo, rnensualmente, e ectas tropas que"sahe


Ud. cuánto se han sacrificado, cuánto sirven y que hasta eI
presente no ealen de la rniseria. Era rrri ánimo reunir fondos
con este solo objeto. Ocurramos a las primeras ¡lecesidadec.
Ya tenernos algún armamento. Cuidaremos ahora de los sol.
dados. Yan para seis años que se alimentan con solo palabrae
s JUAN SILYA YTLA
y no ed Iógico gue otroe diefruten del beueficio debido a
su-' esfuerzos'
Al Detegado Barreiro, mayo de rB16.

Quedo inJormado de la celebración de las Fieetas Mayae


-v qtre ellas hayan contribuído a formar etr espíritu. priblico
es todo lo deseable.
Al Cabíldo de Monte¡i.d.eo, 4 de jwnio áe 1816.

El entusiaemo es general y esta señal precu¡sora de las


victorias me asegura qu,e todos nuestros sacrificios deben eer.
.nos gustosos al ver que los enemigos no han hecho más que
inllamar el amor a la patria y que nos hallamos coronadog
de laureles contra todas sus esperanzas.
Al Cabildo de lllonteuideo, 29 de junio d.e 1816.

Ile visto que eI cuerpo de artillería está muy bajo en


sus plazas y pudiera aumentarse recogiendo todos los more-
nos lilres y agregándolos a dicho cuerpo. Es preciso que en
esto como en todo lo demás, excite el amor patrio de los
conciudadanos para facilitar aquellas erogaciones que ce-
diendo en beneficio público, lleven la recomendación de ser
voluntarias. Ellas inspirarán ].a clol¡le confianza de que todo
ee sacrifica cuando interesa a la salud de la Fatria. Esta sa-
tis{acción es el poderoso resorte que inflama el espíritu prl-
blico ;' que hará a Iruestros paisanos sobre enérgicos, te-
¡oibles.
Al Cabitilo de Monteaideo, I.o de juli.o ¿l"e lB16"

Encargado ese Cabildo de mantener el orden que hasta


hoy ha conservado Ia Provincia: |o marcho a deserrpeñar eI
objeto de la guerra y espero que los resultados anunciarán
al mundo entero que los orientales estaban destinados para
romper las cadenas del despotismo y salvar la Patria. Tengo
IDEARIO DE ARTIGAS 97
el hoaor de anunciarlo a eee Cabildo. El cielo proteja mic
voto6.
Al Cabildo d,e Montetsides, 19 ¿l,e jutio ite lBt6.

Todo saerificio es eorto para conseguir nuestre libertad.


Nueetro propósito, por lo mismo, debe ser morir con gloria
o acabar eon los tiranos. Ea tan críticos momentoa ese Ca.
bildo debe reveetirse de toda energía y no guardar la menor
condeeceudencia.

Al Cabildo de Monte.uideo, 29 ile julío de 1816.

En eI camino del honor, del que jamás me he separadon


uoe he hallado al frente de los derechos sagrados de mi pa-
tria que he defendido y defenderé hasta donde el soplo de
Ia vida me anime.
Al Director S. ilc la Prouincio d.e Buenos áires, 10 ile oo
tubre d,e 7876.

Cuando me falte gente, he de peleaf con perro! cim¡-


rionee a rois eneunigos.
Expresíón atribuí.d,a a Artigas por la trad,inió4 segin
afirmó Isidoro de María en 1887.

¡Oh, qué dulce es el uombre de la patria y gué áspero eI


camino de Ia virtud!
Al Director S. de la P¡ouíneia de Buenos Aires, 10 il,e oo
tubre d,e 7876.

No conseguiremos jamás eI progreso de nuestra felici-


dad si la noaldad se perpetúa aI abrigo de la inocencia. Lle-
gado es el tiernpo en gue triunfe la virtud y ffue los perver-
6os no se confundan corr los b¡r.enos. Loe primeros ep la re-
preeentación de Ia confianza de un pueblo, deben rcr los
98 JUAN SfLVA VILA
ejemplares donde aprenden las virtud.es los demás ciudada.
nos.
AI Cabildo dc Monteaiáeo,1B de noaí¿m.bre ile 1816.

Los males se perpetuarán si cada ciudadano no se mani'


fiesta interesado en la defensa del país y si no hacemor
un esfuerzo digno de uuestra grandeza y propio de unos pue'
blos que aman su libertad. Es llegado el caso en que la Pa'
tüa demande los mayores sacrificios de eus hijos. Los pasa'
dos son inútilee si no empeñamos otros contra un extranjerp
eediento de nuestra dominacióu.
Al Cabílilo ilc Soriano, T de diei.emb¡e de 1816,

Es preciso suponerlos extraños a la historia de nuestros


sucesoso creerlos menos interesados en coüservar los eagra'
dos derechos, para suscri-bir urxos pactos que envilecen eI
mérito de nuestra justicia y cubre de ignominia la sangre de
sue defensores.

A los Comísionados Gíró y Durá.n ante Buqrlas Aíres, 26


d,e d,ícíembre d,e 1816.

EI Jefe de loe Orientales ha manifestado en todos loa


tiempos que ama demasiado a eu patria para sacrificar eI
rico patrimonio de los orientales al bajo precio de la ne'
ceeidad.

A los Com.ísionailos a B. Aíres, 26 de diciembre ile 1816.

grandeza de loe orientales sólo ee comparable a aí


La
misma. Ellos saben desafiar Ios peligros y superarlos; reviven
a Ia presencia de sus opresores. Yo, a su frente, marcharé
donde primero se presente el peligro.
Al General Pu.eyrredón, 73 ile cii,cicm'bre ¿le 1817.

Ese Departamento debe y aun puede prodigar los ma'


IDEAÉié DE ARfIGAs 99
yores esfuerzo§. Etr país Io reclama y tra patria lo exige de
sus hijos. Searnos inf,lexibles por mantener esta dignidaá que
hace todo el honor de los orientales y ese oolo rasgo d.e-su
patriotismo hará tra Frovineia {eliz.
At Cabililo d,e San, losé, setiembre de lgll,
Los hechos llevan estampados el sello de nuestra dig.
nidad: reunamos nuestros esfuerzos hasta dar a la patria Á
día de gloria y a las provincias el goce de su libertad.
Al, Goben¡aCor de Santa Fe, dan, Estaníslao López, i d,e
diciembre de lBlB.

Yo no pienso descansar. Si ellos acudieran también a


eBEe punto eu razón de hallarse ,ra L-d. de este lado, no se
alarme, que mis moriniientcs serán rápidos, al mismo tiern-
po que IJd. penetra en los pueblos de arri-l¡a, Lo que interesa
es que el 'Ienierite Cairé apresure su entracla por el lbicuy,
a ver si logramos reuni¡ las dos dirisi¿nes pu"a *ur"har si
fuere posibXe hasta Santa lrlaría. para mí es indudable que
si los portugueses se ven est¡echaCos en su territorio, Cu'ado
volverá al Continente. Es tarea difíeil, como lo dicen sus
comunicaciones? pero debemos hacer este esfuerzo, porque
si no todo 'está perdido. fo riejo fuerza suficiente prr,
"o*.
tenerlos, a la vez que los apuramos en su teruitorio. IJd. con.
tinúe sus esf,uerzos por ese puxto, que los míos, ete esta parte,
,serán vigorosos. Salud y T ihs¡¡ad.
A -4ndresito, 19 de mayo de lll9.
Es preciso que cada legua que el eneadgo ovanse, t,
cueste mucho trabajo y mucira saugre.
Al Comanclante ile la Vanguardía, lZ de noaiembre de
1819.
I
P§NS.{MIENTOS VARIOS

IUis atenciones de jefe, no me permiten dediearme a es-


peeulaciones detenidas sobre los auxilios y providencias be.
néfieas hacia estos vecinos que pueden considerarse conoo la
plantación de un pueblo Euevo; peto? §u sabia penetracióu
teniendo presente la situación y las necesidades, nada olvi-
dará de cuatlto conciuzca a mejorar -cu suerter particularmente
sobre asignación de tien'as v prorisión de iustrumentos para
eu cultivo y para formación tie hahitaeiones.
A!, Gobierno d-e las Protncias Cnidcs del R.ío de la Plnta,
X4 de di¿iembre de 1811.

Aunque nuestra situación no permite formar una rela-


ción bastante exacta, incluso e} Padrón que se ha lormado
de las familias que siguen aI ejército. Por él rerá que su total
asciente a cuetro mil treinta r- u¡r almas s conocerá que un
número tan coneidera}le entor¡,ecería demasiado mis opera-
ciones en lo sucesivo,y qüe va e: tiempo de seíralarles un eg-
tablecimiento, en cuya elección consiste acaso, todo cuanto
en estas circu¡rstancias puede hacer,.e en su favor.
Ellos eolicitan ocupar el punto de la Concepción del
Uruguay, donde Ia abundancia de terreno§, su fertilidad, la
población actual y las relaciones comerciales harían más fáeil
su colocación y menores sus privaciones; y yo creo que las
circunstancias todas pre-.entan un motivo de conveniencia
en que seaa cumplidos sus deseos.
La situación del arroyo de la China debe considerarse
eomo un estrepuerto de consecuencia para todos los puntos
que abraza el río; Ia facilidad de fortificarle y sostenerle, y
lae demás ventajas que ofrecerÍa si las tropas portuguesa§ ros

Á
IO2 JUAN SILVA VILA
obligasen de nuevo a tomar posición en la Banda Oriental,
y de otra parte, las utilidades que resultarán al Estado, al
darle un fom.ento rápido en su población, artes, agricutrtura
y comercio, como adquiriría sin duda con el establecimiento
de este numeroso pueblo, me haee¡r creer que llevará a bien
laa ideas de estos vecinos.
Al Gobierno de las Pror¡incías ünidas del Río d.e la PLa.ta,
74 de díciernbre de 1811.

Por un contraste singular de las cireunstancias, neinaba


con secreto placer la determinación ueagnánima de u.ris pai:
saüos en el acto misrno que ternía fuese un obstáculo para
Ios r¡rovimieatos rnilitares; y si me consideraba er¡ la y¡ece.
sidad de contribuir a su quietucl por todos los rredios, tam.
bién conoeía. una obligación sagrada de auxiliarlos en 1o
posible.
Al Gobierno de las Proaincias Unidas det Río d,e Iw Plata,
74 d,e dici.ernbre de 1811.

Yo sé bien que no debo lisonjearme de la seguridad de :

una expresión de juslicia a favor r:río y del pueblo digno


que me sigue.
Al Gobíerno de Asunci.ón, 75 ctre naaiembre de 7812. i

¡A cuánto arrastra Ia iniquidad de log hombres!


Al General Sarratea, 17 d,e lebrero el,e 1813.

La mejor garantía, el mejor apoyo de nuestra existeneia,


es la fuerza. E[agámosnos reopetahles en medio de ellos y en-
tonces dejarán de atentar contra uosotros.

^ Memorias d,el. Coronel Cú,cet'es, febrero d,e L813.

Si Ia experiencia del pasado debe servir de leccioues aI


IDEARIO DE ARTTGAS 103
futuro, yo rlo puedo suspender las hostilidades sin que ellas
queden garantidas de un rnodo que inspire confianza pú.
blica de los puebloc orientales y dernás que Ie siguen.
Al Coronel, IÍortiguera, 12 il,e febrero ite l1ti,
Jarnás lle dejado Ce ver cuanto nos ee necesaria la paz
y jamás he intentado poner trabas a su restablecimiento.
Al Cabildo G. de Buenos Aires, 29 de abrit de IBIS.

Para mí, nada es tan lisonjero como ver planteado el


ordea y que los perturbadores no queden impuues.
A!, A3'untamíenta de jlontetideo, 3 de agosto de 1815.

La industria y e} ccnercio son lcs canales por doncle ae


conduce la felicidad de los pueblos.
Al Cabildo de tr[onteuideo, B de agosto de 1815,
Es preciso que ella sea desmentida para que los pue.
blos y eI mundo entero sean desengañados.
Ud. irnpuesto en los porrnenores, debe tomar a su cargo
la réplica y ojalá sea Ia primera con que se estrelle Ia im.
. prenta de esa ciudad.
Al Delegado Barreiro, adjutándole un número de <<La
Gaceta>> d,e Buenos Aires, en el cual se empleaba la intriga
co¡tl,o GrnLü corltra Artigtts: 31 de agosto de 1815.

Con huques nada pueden hacer a Ud. que debe esperar.


los a pie firme. Si fuera para repasar? con ellos, su gente ya
habrían intentado el iesem]¡arco en esta costa y no en.la
op,uesta. Ud. sabe que a ellos les interesa hacer sus movirnien,
tos aparentes? pero? aún cuando intentasen pasar a esta ban-
da, realmente, ¿qué podrían hacer a Ud. habiendo retirado
todos los reeursos de calalladas y ganados? Será preciso que
ellos pasen todo eso y que éstos se multipliquen cuauto máe
'I .¡ JLAN SILVA VILA
ar..ercen de la costa del Paraná. Ud. debe retirar todo au-
=ilio r- el vecindario que quiera seguirlo, poniéndose siempre
a ura distancia en que no pueda ser sorpr:endido por Ios
parasuavos en Ias rsrarchas de una noche; rnanteuer siempre
a las inmediacio¡res de ellos, partidas pequefias de observación
gue puedan moverse con facilidad y observar sus movimien-
tos. Si ellos avanzan, continúe Ud. su retirada y entonces,
deme parte? que yo lo que quiero es que avancen y traigan
bastantes recurso§; si no los traen, ¿cónao han de marehar?
Si Ios paraguayos quieren hacernos la g uerra, gue salgan
fuera.
A And.rés Artigas, Comand,ante d'e Misíones, 27 de no
aiembre de 1815.

sea malo, que.lo pague. Si quieren autoriuar sus


El gue
excesos con mi nombre, ya he dicho que mi honradez rro
abriga delitos. Que muestre¡l rnis órdenes o mis oficios y ellos
servirán de acusación o de resguardo a sus operaciones; sin
etrIos, todas sotr voces al viento y conviene remediar esos ma'
les para que la unión ponga el sello a otros trabajos.
Al Com.anclante Ríuera, 78L5.

El tiempo será el mejor testigo y él admirará cierta.


mente la conducta del Jefe de los Orientales.
A Güemes, 5 de lebrero ile 1816.

Después de Ia revolución, no ha quedado otra riqueza


que eI deseo de adelantar.
Al Cabililo d,e Conientes, 25 de abril d,e 1816.

Con solo los chamrias tengo bastante pora €scarrrrerr'


tarlos.

Al Gobernad,or cle Santa Fe, ilort, Ma¡iüno Yerar T d'e mayo


de lBlB.
iDÉahIo DE AhTIc¿.s 10§

Bendito sea Dios! Le doy gracias por haberme conce-


dido la vida hasta ver a mi patria independiente y consti-
tuída.
Palobras proruuncíadas trente a un ejemplar de la Cons-
titucióru Oriental de 7830, según, atirnr,,6 el sabio Bomplaná
a doru Sal"^atJor Giménez.

¿Entonces, mi nomh¡e suena todavíei err *i país?


(Le eontestaroa que sí.)
Es lo que me resta después de tantos trabajos; hol'vivo
de limosaa.
Diá,logo con el Sr. BeatLrepaire Rohan, en los aledañas
de Asunción en 131i.

Yo no debo mo¡ir en la cama. si¡ao montado en mi ca.


ballo. Tráinganlo gue yos a mont¿rlo l
Sus úhím.as palabras, según t'ersión de --l.sunción García,
pronunciad,as el 23 de setiembre de 1"85ü en Poraiuay.
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