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RESIDUOS SÓLIDOS

El portafolio
Las mil y una posibilidades
Prof. Jacqueline Tipoldi

“El portafolios es un retrato evolutivo del proceso de aprendizaje de un alumno. Representa


lo que el alumno va cambiando y creciendo, muestra un proceso, un desarrollo, una
evolución. Posee elementos que van más allá de la documentación, ya que refleja a la
persona en forma integral”.
Elena María Ortiz de Maschuitz

Comencé a utilizar el portafolios inspirada en los “portfolios” utiliza-


dos por los colegas docentes de inglés. Trabajé con esta herramienta a
nivel de enseñanza Media Básica, Superior (pública, privada) y en nivel
terciario en el IFD de la Costa.
Paso a paso se fueron incorporando actividades, descubriendo con
entusiasmo el abanico de posibilidades y versatilidad de esta herramien-
ta.

FUNDAMENTACIÓN TEÓRICA

Enseñanza Aprendizaje Enseñanza (…) Aprendizaje

Actualmente sabemos que el aprendizaje no es la consecuencia obli-


gada de nuestras buenas prácticas de enseñanza, sino que en nuestras
clases temporalmente limitadas, apenas podemos aspirar que tengan un
primer contacto con el tema y que según sus intereses y motivaciones,
vayan luego profundizando en distintas instancias de aproximación.
Deben ocurrir muchos eventos a nivel de la emotividad y del sistema
nervioso de nuestros alumnos para que desde la enseñanza ocurra casi
mágicamente, el aprendizaje. Estos eventos inevitablemente exceden el
tiempo de nuestras breves y ambiciosas clases. Nuestros alumnos en ge-
neral leen poco, no tienen buenos hábitos de estudio y muchas veces
tienen dificultad para comprender el mensaje de los textos. Se hace nece-
sario entonces un tiempo extra-clase para repensar, repasar y replantear
los temas tratados en el aula, se necesita de un espacio para la
metacognición.

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JACQUELINE TIPOLDI

No es posible mejorar ninguna actividad humana si no se reflexio-


na acerca de su sentido y sus posibles consecuencias. Platón decía: “La
vida que no se examina, no merece la pena ser vivida”.
Arthur Costa (1991) define la metacognición como: “nuestra habili-
dad de saber lo que sabemos y lo que no sabemos… nuestra habilidad
para planificar una estrategia para producir la información necesaria cuan-
do estamos solucionando problemas, reflexionar sobre ello y evaluar la
productividad de nuestro propio pensamiento”
En el momento histórico que estamos viviendo, la globalización
económica y política, la universalización de las comunicaciones, las
nuevas tecnologías y el fluir del conocimiento en forma vertiginosa,
hace que ya no se apunte a transmitir verdades absolutas y acabadas
sino a desarrollar estructuras mentales con la suficiente plasticidad
como para entender los nuevos conocimientos y operar eficientemente
sobre ellos. Los tiempos y las generaciones de alumnos cambian, exi-
giendo nuevas y variadas formas de aprendizaje y de evaluación.
Es así que para llevar a cabo el desafío de enseñar teniendo en cuenta
los nuevos conocimientos que manejamos actualmente en neurociencias
y teniendo en cuenta las necesidades del mundo postmoderno, el
portafolios nos ofrece buenas posibilidades de realizar actividades clási-
cas y también innovadoras, donde debemos poner en juego nuestra pe-
ricia y creatividad.
Nuestro desafío es poner en funcionamiento, con distintos pretextos
y contextos, las estructuras mentales de los chicos diseñando diferentes
actividades que los muevan: fichas de comprensión, cuadros comparati-
vos, jerarquizaciones de contenidos, ordenamiento de herramientas, sín-
tesis, diarios de reflexión, tablas, cuadros comparativos, proyectos de in-
vestigación, planteo de nuevas interrogantes, dudas y conexiones con otros
temas.
En conclusión, las posibilidades son ilimitadas y en esta ocasión
solo mencionaré algunas de las pudimos ensayar.
P. Perrenoud nos dice que tenemos que “tratar los saberes como
recursos para movilizar” y cierto es que a través de las tareas propues-
tas en un portafolios se dan oportunidades valiosas de movilización
de conocimientos para que el alumno vuelva sobre sus huellas recor-
dando, reviviendo y reforzando los estímulos que impulsaron la tarea
del aula.

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EL PORTAFOLIO... LAS MIL Y UNA POSIBILIDADES

¿QUÉ ES EL PORTAFOLIOS DEL ALUMNO?

El portafolios es el reflejo del proceso de aprendizaje de los alumnos,


de su personalidad, su crecimiento y evolución, por lo tanto todos los
portafolios son diferentes y responden a las necesidades, capacidades,
recursos e intereses de quien lo construye.
Al mismo tiempo hay aspectos comunes: obedecen a consignas com-
partidas por todos los estudiantes, ya que las propuestas se basan en de-
terminadas estrategias de aprendizaje.
Como refleja procesos posee dinamismo, como tiene implícito par-
te de la personalidad del autor es una forma de atender la diversidad y de
llevar a cabo una educación personalizada.
Físicamente el portafolios se desarrolla en una carpeta, un bibliorato
o un sobre al que se le van agregando hojas de trabajo.

¿QUÉ PUEDE INCLUIR EL PORTAFOLIOS?

El contenido del portafolio puede ser muy variado, pero los trabajos
que en él se incluyan tienen que tener como características el estímulo de la
investigación, la autonomía del alumno, la promoción de la reflexión, la re-
solución de problemas, la toma de conciencia de los procesos de aprendiza-
je, la autocrítica, la valoración de sentimientos y opiniones personales.
En el portafolio podemos reunir, reflexiones, autoevaluaciones, comen-
tarios sobre el funcionamiento de los equipos, resultados de trabajos grupales,
proyectos de investigación, informes científicos, dibujos, fotografías, regis-
tro de entrevistas, trabajos de campo o de visitas guiadas, material de interés
comentado, narraciones y otros trabajos escritos, resúmenes, punteos para
orales, mapas semánticos, material relacionado con proyectos de folletería o
investigaciones, grabaciones, dibujos, disquetes, borradores de sus trabajos,
monografías, obras de teatro, sketch e infinidad de actividades propuestas
por el profesor con diversos objetivos.
El contenido del portafolios se pueden clasificar según el grado de
autonomía y pericia en dos niveles:
Nivel básico: son los trabajos obligatorios, generalmente propues-
tos por el profesor y que en consecuencia llevan implícita una entrega
comprendida dentro de ciertos límites de tiempo.
Nivel avanzado: son los trabajos donde los estudiantes que van
adquiriendo mayor autonomía, muestran sus destrezas. Son activi-

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dades optativas o creadas por los alumnos y su entrega se realiza sin


límite de tiempo, lo que permite desarrollar producciones más com-
plejas que impliquen la movilización de funciones cognitivas de alto
nivel.

¿POR QUÉ, PARA QUÉ Y CÓMO USAR UN PORTAFOLIOS?

a-Conocimientos previos y anclaje


El estudio de los conocimientos previos es relevante para lograr el
cambio conceptual. El sujeto construye activamente sus propias estruc-
turas cognitivas, enriqueciendo, filtrando e interpretando los nuevos co-
nocimientos a partir de sus experiencias y de las estructuras preexistentes.
Por esta razón antes de presentar el nuevo conocimiento y mientras se
está procesando, es importante sensibilizar, anclar, cimentar dicho cono-
cimiento, activando las estructuras mentales personales que previamen-
te trae cada alumno.
Hay actividades que ofician de “puente”, entre el conocimiento pre-
vio y los nuevos conocimientos a incorporar, suavizando y facilitando el
salto conceptual.
Antes de comenzar la nueva unidad se puede pedir que escriban
sobre que lo esperan aprender en futuras instancias con respecto a un
tema concreto. Las tablas “C-Q-A”, son un ejemplo. En ellas los chicos
escriben “todo lo que Conocemos” previamente sobre el tema a tratar,
“todo lo que Queremos saber” y luego de estudiar o tratar el tema en
clase “todo lo que Aprendimos”. Pueden trabajar también con el título
del tema, con la consigna de no leer ningún material y escribir todo lo
que les sugiera o les traiga a la memoria.
Otra forma es proponer junto con los diarios de reflexión, frases a
completar del estilo: “Esto me recuerda…”, “En otro momento escuché
algo relacionado con este tema…”, “Esto está conectado con…”, para que
exploren conexiones del tópico nuevo con saberes anteriores.

b-Autoevaluación y aprendizaje a partir de los errores


Saturnino de la Torre nos dice que “ el error no posee un valor educa-
tivo por sí mismo,” pero es una pista para tener una información sobre la
forma de pensar del alumno y un instrumento a la hora de seleccionar la
estrategia adecuada a aplicar, ya que “toda mejora pasa por el cambio y no
siempre se consigue sin fallos o equivocaciones”.

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En el sistema de portafolios se trabaja en un contexto donde el error


es permitido y los intentos fallidos son aceptados como transición.
Con el correr del tiempo se generan los suficientes espacios para su-
perar dificultades, buscar soluciones reales a los problemas y promover
cambios positivos y productivos.
El portafolios es una oportunidad para plantear autoevaluaciones
de todo tipo. A través de preguntas de calidad o en forma narrativa, libre
y abierta, los alumnos se expresan sobre sus aprendizajes, toman con-
ciencia de lo que saben y de lo que les falta aprender, pasando desde el
estado de incompetencia inconciente, al estado de incompetencia
conciente, lo que genera incomodidad, tensión y necesidad de saber más.
Actividades donde se sintetiza lo aprendido en un período, como
por ejemplo: “Lo que aprendí …”, “Lo que me pareció más importante
en esta semana…”, pueden ser de utilidad para saber que fue lo que cap-
taron, como fue incorporado y si les resultó interesante.
Otras frases a completar como: “No comprendí…”, “Me resultó difí-
cil …”, “Me quedaron dudas sobre…”, pueden ayudar al profesor a re-
forzar algunos conceptos, a descubrir los errores y dificultades, volvien-
do a insistir en forma general o personalizada.
De esta forma el alumno plantea sus dudas, descubre los fallos al
analizar sus procesos y toma al error como algo natural, propio del apren-
der propiciando el cambio evolutivo.

c- Retroalimentación
Leyendo los aportes espontáneos de los chicos e induciéndolos con
tareas especiales, el profesor obtiene insumos valiosísimos para
autoevaluarse, corregirse o reafirmarse en sus prácticas.
Pueden plantearse actividades del tipo: “Lo que más me interesa de
la clase…”, Lo que menos me interesó…”, “Si mi profesor pudiera…”.
También es una herramienta valiosa para conocer mejor al grupo
humano con el que se trabaja ya que en estas tareas por lo general los
jóvenes se abren y comparten sus sentimientos, especialmente en este
momento en el que no tienen muchas oportunidades de sentirse escu-
chados, valorados y atendidos.
Al comenzar el portafolios generalmente les pedimos una “Carta para
el lector del portafolios…”, donde cada uno escribe algo de su identidad:
personalidad, familia, preferencias de música, deportes, tiempo libre etc.
Algunas ideas que los impulse a escribir en otras instancias durante
el año pueden ser: “Lo que más me fastidia…”, “ Cinco cosas sin las cua-
les no podría vivir…, “Mis viejos…”, “Una misión peligrosísima”...

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d- Inteligencias múltiples-Inteligencia emocional.


Utilización del hemisferio derecho
Tenemos muy pocas oportunidades para trabajar, para desarrollar y
conocer otras capacidades, habilidades y destrezas de nuestros alumnos.
A través de sencillos cuestionarios y preguntas dirigidas a sus pre-
ferencias, podemos tener idea en que tipo de tareas se sienten más segu-
ros y por esa vía hacerlos transitar hacia el conocimiento de una forma
más amena y afectiva.
Se pueden proponer actividades en que demuestren lo aprendido
dando libertad a que cada alumno se exprese donde se siente más fuerte
ya sea investigado a través de trabajos escritos o mediante dibujos, foto-
grafías, caricaturas, mandalas, etc.
Podemos pedir un proyecto de póster sobre un tema que les gusta-
ría investigar, el proyecto de un publicartel por ejemplo contra el alcoho-
lismo o un dibujo en el cual después de informarse sobre el tema, imagi-
nen y plasmen una situación. Por ejemplo: “Paisaje de la Tierra en el
momento en que comenzó la vida…” o “El antecesor común de los
homínidos”.
El estudiante antes de dibujar necesariamente debe buscar mate-
rial sobre el tema, leerlo, informarse y finalmente dibujar lo investi-
gado.
Es estimulante descubrir habilidades en chicos que en la clase se
muestran pasivos, poco sociables o indiferentes y muchas veces estas ac-
tividades dan pie para una apertura o para un diálogo más fluido, obser-
vándose un progreso por el solo hecho de sentirse acompañado y valo-
rado.
En general, todas estas actividades promueven el acercamiento en-
tre el docente y el alumno convirtiéndonos muchas veces en el oído, la
mano, la palabra o el alma, dispuesta a compartir sus emociones y a
apoyarlos en sus dificultades.

f- Autonomía y aprendizaje significativo


Nos esforzamos en nuestras planificaciones para relacionar los con-
tenidos del currículo con eventos de actualidad que puedan acercar los
aprendizajes del aula a la vida cotidiana, para que resulten significativos y
reales para nuestros educandos. A veces lo logramos…, a veces nos resul-
ta imposible.
En el portafolio pueden instrumentarse actividades que estén desti-
nadas a investigaciones sobre temas de interés personal, que estén rela-

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cionadas con la disciplina, aunque para dar mayor libertad, pueden o no


estar relacionadas con el programa actual.
Comentarios de noticias, artículos de diarios, películas, documenta-
les, etc. elegidos por los alumnos, donde cada uno sea el protagonista y
generador de sus propios aprendizajes, puede despertar un interés per-
sonal genuino, obteniéndose un mayor compromiso, gusto por la lectu-
ra, por la disciplina y gratificación por la tarea.
Hay artículos de revistas, pasajes de libros, imágenes, fotografías,
pensamientos, letras de canciones, relacionadas con nuestro trabajo que
puede seleccionar el joven y que seguramente es más atractivo que un
material elegido por nosotros.
Un valor agregado sería el solicitarles el fundamento de la elección,
comentarios del contenido y la explicación de su significado.
También el profesor creativo puede tomar alguno de estos materia-
les como insumos para diseñar otras actividades en otras instancias de
clase.

g- Enseñanza prosocial y valores


Juan C. Tedesco en su libro “El nuevo pacto educativo” hace alusión a
que estamos viviendo un debilitamiento de la capacidad socializadora de
la familia, debido a las modificaciones que ha sufrido y agrega que “ los
contenidos de la socialización primaria son trasmitidos con una carga afectiva
diferente a la del pasado”. Es posible que ese debilitamiento agregado a la
escasez de tiempo compartido entre padres e hijos, socave la educación
en valores de la familia actual. Como consecuencia se observa la apari-
ción temprana de conductas indeseables, la falta de proyectos personales
que aliente a los jóvenes y el desapego a la vida.
Partiendo del supuesto que uno de los modos más eficaces para la
inhibición de las conductas violentas y agresivas es el de equipar a los
individuos con repertorios de conductas positivas y prosociales que re-
sulten funcionales al momento de presentarse los conflictos, podemos
planificar actividades que refuercen estos aspectos, en ocasiones descui-
dados por la familia postmoderna.
Para lograr un equipo adecuado de respuestas alternativas debemos
fomentar el conocimiento de sí mismo y de las relaciones humanas, la
asertividad, el autocontrol, la valoración de los sentimientos, la autoestima
y la creatividad en la búsqueda de soluciones.
A partir de estas premisas, podemos diseñar actividades en el
portafolios donde podamos simular situaciones conflictivas realistas para
analizar, propuestas de reflexión acerca de la automotivación, autoanálisis

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de debilidades y fortalezas, cuentos y lecturas que toquen temas sencillos


pero que valga la pena valorar.

¿CUÁNDO USAR EL PORTAFOLIOS?

El portafolio no tiene por qué ser usado todos los días, sino cuando el
desarrollo de las clases lo requieran.
La frecuencia de uso la determinan el docente y el alumno, aunque
hay algunas normas preestablecidas.
Cuando comienza un tema para activar los saberes previos, cuando
culmina para efectuar su autoevaluación, cuando el chico desee realizar
un comentario sobre algo interesante, cuando desee concretar una pro-
ducción: investigación, escrito, dibujo, fotografias, etc.
La entrega del portafolios también es voluntaria, aunque se puede
aconsejar su corrección por ejemplo, mensualmente. Esta modalidad de
entrega va acorde a los tiempos de cada alumno y favorece a la agenda
del profesor, ya que si todos los alumnos entregan el portafolios simultá-
neamente, se crean problemas de falta de tiempo, incomodidad en el
traslado y lugar de archivo. Si vamos corrigiendo a medida que se va
haciendo la entrega, paulatinamente, se facilita y optimiza la tarea.

EVALUACIÓN DEL PORTAFOLIOS E


INDICADORES DE LOGROS

La utilización del portafolios implica apostar a la evaluación perma-


nente y formativa, ya que se está observando el proceso progresivamen-
te, mientras el profesor va guiando, corrigiendo y aconsejando.
Los alumnos a su vez organizan, ordenan, comparan sus trabajos,
comparten sus buenas ideas, intentando superarse y aumentando las ex-
pectativas de sí mismos.
Una de las diferencias más notorias con otras formas de evalua-
ción es el manejo del tiempo, ya que el alumno puede trabajar a su
ritmo (con ciertos límites), permitiéndonos escanear el esfuerzo du-
rante un período extenso, con actividades de su gusto, sin presiones
y sin estrés.
Con el portafolios permitimos que la evaluación se desarrolle de for-
ma procesual, no limitada a ciertos días, provocando la descompresión y
alivianando la carga emocional de los escritos y pruebas.

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Hablamos de una evaluación formativa porque los alumnos se com-


prometen con el trabajo, llevan a cabo tareas con correcciones
personalizadas, pudiendo regular el grado de dificultad seleccionando
desde las más simples hasta las más complejas, tomando conciencia del
valor de la perseverancia y de la responsabilidad.
También es una de las pocas oportunidades en que podemos realizar
una evaluación personalizada: alumno-docente, atendiendo las dificulta-
des de aprendizaje que puedan surgir y proponiendo tareas de acuerdo
al perfil de cada uno.
En el momento de formular la propuesta de construcción del
portafolios, los alumnos deben estar al tanto de las pautas que vamos a
tener en cuenta en la evaluación y que indicadores de logros vamos a
manejar al momento de la corrección, para dejar claras las “reglas de
juego”.
Un ejemplo de aspectos importantes que se pueden tener en cuenta
para la evaluación de los trabajos son los siguientes: presentación, labo-
riosidad de los trabajos propuestos, aportes personales creativos, comen-
tarios originales del material.
En la presentación se puede tener en cuenta la prolijidad, orden,
organización y la armonía de los trabajos.
La realización de trabajos propuestos toma en cuenta la responsabi-
lidad, el cumplimiento y el acabado del trabajo, sobre todo en aquellas
actividades que fueron sugeridas por el profesor.
El material comentado valora la búsqueda de temas de interés, la
lectura comprensiva o procesamiento del material en cuestión, la correc-
ta producción de texto, la argumentación, entre otros.
Los trabajos autogestionados creativos son el sello que hacen la di-
ferencia entre las distintas colecciones de trabajos y puede ir desde las
más simples decisiones a la hora de elegir el diseño de un dibujo, hasta la
profundidad de una reflexión cuando se emiten opiniones, argumentos
y valoraciones.
La elaboración personal hace referencia a la laboriosidad de los tra-
bajos realizados, ya que hay muchos niveles en el grado de cumplimien-
to de las distintas propuestas.
Al corregir, es aconsejable no utilizar las clásicas calificaciones sino
una pequeña devolución con conceptos que animen a evolucionar, ha-
ciendo un sintético detalle acerca de cómo mejorar, o según el caso elo-
giando los progresos realizados.
Es muy positivo comentar sus trabajos con frases sinceras y
personalizadas como: bien logrado, ahora te conozco un poco más, buen

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trabajo pero breve, muy interesante, bien planeado, buen intento, ¿dedi-
caste suficiente tiempo?, progreso evidente, etc., ya que comprueban que
realmente lo leímos y que nos importa lo que han aportado estimulándo-
los a continuar el esfuerzo.
Otra instancia de intercambio docente-alumno constituye la devolu-
ción del portafolios: luego de que el profesor lee las producciones, corri-
ge los errores, comenta los distintos trabajos y evalúa al estudiante, éste
puede discutir con el profesor y argumentar los distintos fundamentos y
significados de sus obras.
En síntesis, el portafolios es una herramienta de evaluación
polifacética, que nos brinda datos sobre las características de la persona-
lidad de los estudiantes, repertorio de destrezas que maneja, habilidades
y dificultades, adaptación y resolución de problemas prácticos, reflexio-
nes acerca de los métodos utilizados, resultados de ejercicios y proble-
mas, herramientas conceptuales que manejan, jerarquizaciones y crite-
rios que maneja en sus valoraciones.

CONCLUSIONES

Comencé a investigar y ensayar tímidamente esta herramienta en el


año 2003 y cada día surgen nuevas ideas para trabajarla, más fundamen-
to para utilizarla y más razones para recomendarla y compartirla.
Hasta el año 2006, todos los alumnos que intervinieron en la expe-
riencia opinaron en la evaluación que el Portafolios les había resultado
positivo en algún aspecto.
Incluso padres y psicopedagogas de alumnos con dificultades de
aprendizaje expresaron su conformidad con este recurso.
Los alumnos que además destacaron aspectos negativos, referían al
“esfuerzo” y al “tiempo” insumidos en las tareas o a los aspectos
organizacionales.
Dejo a modo de conclusión reflexiones que alumnos y algunos pa-
dres volcaron en ella:
“…No se puede negar que a este portafolio lo acompañaron
anécdotas muy divertidas y que cada vez que lo mire las voy
a recordar…”
“… con el portafolios comprendí que tengo que esforzarme
para entender lo que no entiendo, ya que quiero llegar en
realidad a la meta que me tracé desde muy chica: salvar vi-
das humanas y no voy a parar hasta lograr mi propósito …”.

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“Me gusta este trabajo del portafolio porque me gusta inves-


tigar temas interesantes…”.
“…Te digo que aunque al principio no me gustaba la modali-
dad que tenés para enseñar , ni el portafolios, creo que la pa-
ciencia y perseverancia hicieron que me adaptara y así me di
cuenta de que es más fácil y más divertido aprender a tu
manera (o sea, a mi manera)…”
“…Me siento satisfecho con todo lo que he aprendido con
este portafolios a lo largo del año ya que a pesar de no agra-
darme mucho la materia comprendí e incorporé todos los
conocimientos y pude enriquecerme..”
“…lo que me fascina es que es diferente la forma de trabajar
que el resto. Nunca me había divertido ni había podido dar
mis opiniones sobre los temas dados. Me gustaría que todo
los años fueran así de buenos…”

Eduardo (padre):
“…Incuestionablemente fue una propuesta que lo motivó y
llevó a exponer lo mejor de sí. Gracias por proponer un traba-
jo tan agradable e incentivante”

Myriam (madre):
“…Pienso que lo más importante aquí fue la propuesta de
este portafolios, dinámico y activo que se transformó en otra
fuente de estudio realizada por los alumnos…”, “… a veces él
no demuestra lo que es ni lo que vale, pero en estas páginas
tal vez quede mejor reflejado. Muchas veces no se anima a
mostrar lo que hace…”

Jorge y Mónica (padres):


“…Para quienes no tenemos una formación sólida en la ma-
teria, el portafolios significó un acercamiento a ella, a través
de la lectura de los trabajos y a través de sus láminas…”

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BIBLIOGRAFÍA

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De la Torre, S. Aprender de los errores. Magisterio del Río de la Plata (Ed). (2004).
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