Hadas y princesas, escuelas de héroes, historia de misterio, personajes con poderes

especiales, cartas a los protagonistas… ¡Disfrutamos escribiendo sobre muchas cosas

a lo largo del año!

Querido Jordán:

Hola, ¿cómo estás? ¿cómo te sientes? Te escribo esta carta porque ya sabes que no tengo
fuerzas ni para expresarme, ni para hablar. Te quiero contar cómo me siento y quiero
preguntarte cómo te sientes también. Estos días he estado muy deprimida ya que cada día,
cada hora, cada minuto, temo por mi vida. Cada vez más siento que voy a morir, tengo miedo;
tengo miedo de que de un día para el otro quede postrada, tengo miedo de no poder ver más
tu rostro. Te quería decir que esta última salida al balcón fue mágica, aunque no pudimos
hablar sentí que recuperaba todas mis fuerzas; sé que suena tonto pero en serio fue así. Eso
es todo… creo.
Adiós.
Alicia.

Por Miranda

“Avengers school”

En esta escuela hay solamente superhéroes. Las materias que se dictan son: fútbol, tácticas
y físico. Su uniforme es albiceleste. Los estudiantes son Spiderman, Superman, la mujer
maravilla, linterna verde, Hulk, Flash, el capitán América, Doctor Strange y Batman. En los
recreos juegan al fútbol y practican las tácticas que aprenden, por ejemplo: juegan 4-3-3 y
así saben cómo jugarla, esa y todas las formaciones. Los profesores son Messi y Cristiano y
la escuela está en España, al lado del Santiago Bernabéu, ya que allí practican fútbol.

Por Juani

“Iris y su historia”

Había una vez un pueblo llamado Iris. En medio de este pueblo, había un palacio donde vivían
el rey, la reina y su hija, la princesa Lea que estaba cerca de cumplir dieciocho años y sus
padres le estaban buscando un marido. Pero a ella no le gustaban las personas brutas como
los hombres, le gustaban las personas delicadas como las mujeres y se dio cuenta que era
lesbiana pero lo mantenía en secreto ya que estaba mal visto en esa época.

Los pueblos vecinos eran de casas y comercios, pero había uno, el más alejado de todos los
pueblos, que estaba abandonado, ya que hacía unos diez años una peste había matado a
casi todos los pueblerinos. Algunos se habían escondido en cuevas mientras la peste pasaba,
pero finalmente se mudaron a otros pueblos y a ése lo empezaron a llamar “el pueblo
fantasma”, se dice que ahí se esconden las brujas más poderosas de todos los pueblos y era
algo malo porque eran brujas de magia negra.

Pero por ahora eso no es importante, lo más importante es Helena, una pueblerina de 17
años muy linda y amable. Ella trabajaba todos los días en un puesto de collares que ella
misma hacía y que iba llevando por todo el pueblo con ayuda de su caballo. Ella trabajaba
tanto para mantener a su madre que estaba muy enferma. El padre de Helena había muerto,
él trabajaba para el rey, era uno de los mejores soldados. Sin embargo, una vez fue a hacer
una expedición al pueblo fantasma con otros soldados y ninguno volvió.
Volviendo a Helena y al presente, ella estaba muy cansada después de un largo día de
trabajo, ya era medianoche y no había casi nadie en las calles. Por ello, Helena decidió volver
a su casa, pero se cruzó con una misteriosa mujer, no le veía bien la cara porque tenía una
capucha puesta y la luz en las calles era tenue. La mujer se puso a ver los collares de Helena
y le dijo que tenía mucha habilidad para ese trabajo, también le dijo donde había piedras
valiosas para decorar sus collares. Le dio indicaciones en un papel y desapareció
misteriosamente. Helena retomó el camino a casa. Una vez allí, agarró una vela, le dejó una
nota a su madre que ya estaba dormida y empezó su aventura.

Las indicaciones la llevaban al bosque. Helena fue a pie para estar cerca del suelo y así poder
ver las piedras mejor pero era más cansador. Siguió caminando por horas y la vela se estaba
consumiendo completamente. Ya estaba amaneciendo cuando Helena cayó dormida en el
medio del bosque por lo cansada que estaba.
Despertó al atardecer, en una casa abandonada en la que nunca había estado y cuando salió,
vio el límite del bosque y empezó a encaminarse de regreso a casa. Ella se sentía extraña
pero no sabía porqué. Cuando llegó al final del bosque vio que había unas diez brujas
alrededor del pueblo tirando hechizos al escudo que el rey había programado con magia, ya
que los de sangre real nacen con el don de poder manipular el aire, el agua, la tierra y el
fuego. Las brujas querían apoderarse de todos los pueblos, empezando por el principal.

Mientras Helena miraba todo desde su escondite, pensaba una forma de ingresar al pueblo;
el escudo no era un problema ya que estaba diseñado para que las brujas no pudieran
atravesarlo. Mientras tanto, una bruja estaba a punto de romper el escudo y el sendero que
había; si llegaba romperlo, conducía a la casa de Helena y no podía permitir que le hicieran
algo a su casa o a su pueblo. Helena tuvo un impulso y fue a enfrentar a la bruja; está tan
concentrada que no se percata de la presencia de Helena y ella aprovecha y la manda a volar
con la mente. Helena estaba confundida por lo que acababa de hacer. Sin embargo, siguió
con su camino y entró al pueblo para dirigirse a su casa. Su madre estaba durmiendo la siesta
a pesar de todo el alboroto afuera. Helena aprovechó para comer algo rápido y fue con su
caballo a dirigirse al palacio para hablar con la princesa. Cuando llega a allí, la vio montando
a su caballo; Helena se acercó y le preguntó qué iba a hacer con las nueve brujas que querían
atacar al pueblo. Ella le respondió que con ayuda de su don y de los guerreros se iba a
solucionar rápido y partió a enfrentar a las brujas.

Helena quería acompañarla pero sabía que iba a recibir un no como respuesta así que decidió
ir a escondidas. Salió sigilosamente del pueblo y se escondió nuevamente al límite del bosque
ya que uno de los guerreros estaba llegando enfrentar a la bruja pero ella lo vio y lo mantuvo
quieto con su magia. Helena, en un esfuerzo de ayudarlo, le quemó la ropa a la bruja haciendo
que ella se queme también. Así, Helena enfrentó a las ocho a brujas desde su escondite pero
le faltaba la más poderosa de las diez que estaba enfrentando a la princesa.
Lamentablemente, Lea iba perdiendo así que Helena salió de su escondite justo antes de que
la bruja le lanzara la princesa un hechizo mortal y la arrinconó con piedras para que Lea se
lance arriba de ella.

Ya con paz en el pueblo, Lea le pidió matrimonio a Helena por su valentía y su belleza; Helena
aceptó. Fueron la primera pareja homosexual y vivieron felices por siempre.
 Por Melina

“Esa no soy yo”

Había una vez una chica que trabajaba en el cementerio en el turno de la noche. Ella se
llamaba Marie y vigilaba que no pasara nada allí. Marie había llevado a una amiga esa noche
para ver una película y no aburrirse ya que nunca pasaba nada. Mientras la estaban viendo,
le llegó un mensaje a Marie que decía “esa no soy yo”; el mensaje se lo había mandado su
amigo pero ella no tenía el celular cerca. Marie se escondió en el baño y cuando quiso salir
se fijó por debajo de la puerta y allí estaba el doble de su amiga con un hacha en la mano.
Marie logró escapar por la ventana y fue a la casa de su amiga donde encontró el cuerpo de
su amiga muerta y el mismo hacha que tenía el doble. Marie gritó de sufrimiento. Los policías
nunca hallaron al doble ni al responsable del asesinato.

Por Yara

“La humana común”

Había una vez una humana común y corriente que anhelaba con todo su corazón tener un
maravilloso don o poder. Un día, su familia fue a su casa de campo, como todos los fines de
semana y Yesul, la humana de 7 años, sintió que un árbol no era como antes. Ella se lo dijo
a su madre pero ésta no notaba nada extraño en su gran jardín. Yesul, con un poco de miedo,
fue a investigar el árbol; fascinada con su belleza se acercó más y más hasta poder tocarlo y
allí se encontró con un duende. Éste le dijo que podía concederle su deseo de tener un poder
si ella quería. Yesul, atónita, le dijo al duende que sí pero al segundo de decírselo, el duende
desapareció. Ella lo buscó y lo buscó pero el árbol tampoco estaba. Al día siguiente Yesul no
sentía nada extraño y siguió con su vida normal hasta llegar a su casa. En la mañana, fue al
colegio como siempre; en su segunda clase, Charles fue a su banco y la empezó a molestar
como lo hacía todos los días pero esta vez algo había cambiado. Yesul, con confianza, lo
enfrentó hasta que Charles le pegó pero ella le devolvió el golpe, excepto que no solo le había
pegado sino que le rompió la mandíbula con el golpe. Yesul empezó a crecer pero al minuto
se tropezó con una pared y cuando abrió los ojos estaba todo el colegio en ruinas. Corrió lo
más rápido que pudo hasta llegar a su casa donde rompió su silla, su cama y por último la
casa. Sus padres, al ver todo esto, no pararon de buscarla pero se dieron cuenta que había
desaparecido.

Por Julieta

“La pelea de dos hermanos perdidos”

En la ciudad de Buenos Aires, había un niño que se llamaba Martín Larreta, familiar de
Horacio Larreta, que se dedicaba a dar comida a las personas. Su marca particular era que
era una persona con comida en la cabeza. Un día, llegó un chico vegano que se negaba a
que las personas comieran su comida. Casualmente, chico vegano era un hermano perdido
de Martín, su mamá es Atenea pero ellos no saben quién es su papá porque toda la familia
se separó después que cayó un cráter en su casa y todos aparecieron en cualquier lado.

Un día, chico vegano se enojó con Martín y se pelearon en la torre alimenticia. La pelea duró
5 horas, Martín peleó con una espada de papas y chico vegano luchó con una pistola de leche
de almendras. Ganó Martín pero destruyeron toda la ciudad. Luego él reconstruyó todo
Buenos Aires y siguió alimentando a toda su ciudad… gracias a él todos en Buenos Aires
comen y ahora es un héroe. Hoy en día, es un mito en Argentina que se cuenta de generación
en generación.

Por Nicolás