Está en la página 1de 8

La 

musicología 
Es el estudio científico o académico de todos los fenómenos relacionados con la música, como sus
bases físicas, su historia y su relación con el ser humano y la sociedad. Sus orientaciones son muy
diversas, hacen énfasis en diferentes áreas de trabajo, objetos de estudio y problemas de
investigación.
La musicología abarca la historia de la música, la teoría de la música y la crítica musical.
Parámetros del sonido.
Los parámetros del sonido son el tono, el timbre, la intensidad y la duración, todos ellos
cuantitativos y físicos, que corresponden a frecuencia, forma de onda, amplitud de la misma y
tiempo.
Estos aspectos se relacionan a su vez entre sí, y dan lugar a los diferentes elementos musicales
como el ritmo, base de toda producción musical, la melodía, producida por la voz y el canto, la
armonía que se refiere a la organización simultánea de sonidos donde se construye el discurso
musical, el silencio o pausa y la forma, dan lugar a la estructura musical (Fubbini, 1988).
El timbre.
de un sonido es la cualidad en virtud de la que podemos distinguir dos sonidos de igual frecuencia e
intensidad emitidos por dos focos sonoros diferentes. El timbre se debe a que generalmente un
sonido no es puro y depende principalmente del espectro. Pero también depende en gran manera de
la envolvente y de la frecuencia.
LA Duración.
La duración física de un sonido y la percibida están muy relacionadas, aunque no son exactamente
lo mismo. La duración percibida es aquel intervalo temporal en el que el sonido persiste sin
discontinuidad.
Intensidad
Es la cualidad del sonido que nos permite indentificar los sonidos como fuertes o suaves, es pues la
fuerza o volumen del sonido. Depende de la amplitud de la onda, a mayor amplitud, más fuerte
suena el sonido.
El tono o altura.
Es la cualidad que nos permite distinguir entre un sonido agudo o alto y otro grave o bajo. Para un
sonido puro el tono viene determinado principalmente por la frecuencia, aunque también puede
cambiar con la presión y la envolvente.
Un tono es una vibración uniforme del aire que es percibida por el oído. Comparado con un tono,
una explosión, por ejemplo, es una vibración corta y fuerte. Un sonido se compone de varios tonos
que suenan simultáneamente y se superponen. Un ruido, en cambio, consiste en vibraciones y
frecuencias irregulares.
Melodía.
Es una sucesión de sonidos que es percibida como una sola entidad. Se desenvuelve en una
secuencia lineal, es decir, a lo largo del tiempo, y tiene una identidad y significado propio dentro de
un entorno sonoro particular.
En su sentido más literal, una melodía es una combinación de alturas y ritmo, mientras que en
sentido más figurado, el término en ocasiones se ha ampliado para incluir las sucesiones de otros
elementos musicales como el timbre. Se puede considerar que la melodía es el primer plano
respecto del acompañamiento de fondo. Pero una línea melódica o una voz no es necesariamente
una melodía en primer grado. En si la melodía se conforma de ritmos, sonidos, alturas, etc.
El motivo.
Es la unidad mínima con sentido musical que funciona como elemento generador de elaboraciones.
El motivo está construido por una o dos organizaciones rítmico-melódicas mínimas, llamadas
células. Se distingue del tema o sujeto por ser mucho más breve y generalmente fragmentario. En
efecto, los motivos suelen derivarse de los temas. En algunos tipos de música (como por ejemplo la
polifonía renacentista o barroca) el motivo se denomina “cabeza de tema.
Intervalo
Es la distancia (en términos de altura) entre dos notas musicales o entre dos sonidos. En general,
suelen medirse según las notas de una escala incluyendo los extremos (por ejemplo, entre RE y FA,
si se cuenta de manera ascendente, hay una tercera), o bien por la diferencia de tonos y semitonos, o
solamente de semitonos. Por ejemplo, una quinta justa es un intervalo de 7 semitonos que se miden
en un teclado.
Ritmo.
Puede definirse generalmente como un «movimiento marcado por la sucesión regular de elementos
débiles y fuertes, o bien de condiciones opuestas o diferentes. Es decir, un flujo de movimiento,
controlado o medido, sonoro o visual, generalmente producido por una ordenación de elementos
diferentes del medio en cuestión.
Se trata de un rasgo básico de todas las artes, especialmente de la música, la poesía y la danza. En
música la mayoría de las definiciones tradicionales aluden al ritmo como fuerza dinámica y
organizativa de la música.
La métrica.
Es el conjunto de regularidades formales y sistemáticas que caracteriza la poesía versificada y la
prosa rítmica. El estudio métrico comprende tres partes fundamentales: el verso, la estrofa y el
poema.
pulsación.
Puede entenderse la pulsación musical como las señales que reflejan el ritmo de la música y que
permiten establecer una comparación entre los silencios y las notas que componen una pieza. De
este modo, el pulso funciona como una estructura que colabora en la percepción y la comprensión
por parte del oyente.
Figuras.
Una figura musical es un signo que representa gráficamente la duración de un determinado sonido o
de un silencio en una pieza musical.
La manera gráfica de indicar la duración relativa de una nota es mediante la utilización del color o
la forma de la cabeza de la nota, la presencia o ausencia de la plica, así como la presencia o
ausencia de corchetes con forma de ganchos. Cuando aparece situada en un pentagrama con clave
establecida, determina la altura del sonido. Las figuras más utilizadas son siete y se denominan
elementos gráficos de la música de la siguiente forma: redonda, blanca, negra, corchea,
semicorchea, fusa y semifusa.

Silencios.
En música un silencio o pausa es un signo que representa gráficamente la duración de una
determinada pausa en una pieza musical. La manera gráfica de indicar la duración relativa de un
silencio es mediante la utilización de una serie de símbolos diversos cuyos rasgos se modifican,
como por ejemplo la ubicación en el pentagrama o el número de ganchos que tienen.
Armonía.
La armonía es aquello que sucede cuando existen dos notas o más que suenen a la vez. Por lo tanto,
la armonía hace referencia al arreglo de las notas en un acorde, además de a la estructura genérica
de acordes en una pieza musical. Sin embargo, la armonía suele englobar a su vez la construcción
de acordes, la calidad de los acordes y la progresión de estos.
Cuando hablamos de armonía en música, nos referimos a la combinación de diferentes sonidos o
notas que se emiten al mismo tiempo, aunque el término también se utiliza para referirse a la
sucesión de estos sonidos emitidos a la vez.
Tonalidad.
Entendida como una determinada organización jerárquica de las relaciones entre las diferentes
alturas en función de la consonancia sonora con respecto al centro tonal o tónica, que es una nota,
su acorde y su escala diatónica. El grado de consonancia se denomina «función tonal» o
«diatónica», cuyo parámetro fundamental es el intervalo que cada nota forma a partir de la nota
tónica. Este sistema es el predominante en la música de origen europeo desde el siglo XVI al XIX.
La tonalidad, entendida más específicamente como tonalidad o clave de una obra musical (en
inglés, key), es decir, la tónica, junto con los acordes y las escalas asociados, en torno a la cual giran
las frases y progresiones musicales. Este concepto «en clave de» se suele emplear para hacer
referencia a una determinada obra que fue creada bajo las reglas del tonalismo anteriormente
descritas.
Acorde.
En música y teoría musical, un acorde consiste en un conjunto de dos o más notas diferentes que
constituyen una unidad armónica. En determinados contextos, un acorde también puede ser
percibido como tal, aunque no suenen todas sus notas. Pueden formarse acordes con las notas de un
mismo instrumento o con notas de diferentes instrumentos (incluyendo la voz humana) tocados a la
vez, incluso con notas de distintas octavas.
Formalmente, un acorde de sistema tonal posee entre tres y siete notas, las cuales pueden pertenecer
a la misma o a diferentes octavas. Cada tipo de acorde puede presentar como tono fundamental
cualquiera de las doce notas musicales (do, do♯, re, mi♭, mi, fa, fa♯, sol, la♭, la, si♭, si). Este tono
fundamental (también conocido como «nota fundamental», «fundamental», «nota tónica» o
«tónica») determina la tonalidad del acorde y constituye la referencia para sus intervalos.
Las combinaciones de dos notas suelen llamarse díadas, las de tres, tríadas, las de cuatro, tetradas,
las de cinco, quintíadas, las de seis, sextíadas, y las de siete, septíadas.
Textura.
La textura, en general, es el modo en que se combinan la melodía, el ritmo y la armonía en una
composición o fragmento musical. Existen 4 tipos principales de textura: monofonía o monodia,
melodía acompañada, homofónica y polifónica o contrapuntística

a La textura monofónica o textura monódica.


Está formada por una sola línea melódica sin acompañamiento alguno. La melodía paralela de
apoyo a menudo dobla o va paralela a la melodía primaria o base. Es decir, todas las voces e
instrumentos que intervengan cantan o tocan simultáneamente la misma melodía, al unísono o a
distancia de octava.
b Textura Homofonía.
En la textura homofónica las diversas voces se mueven simultáneamente con los mismos valores
rítmicos pero con distintas notas, formando acordes sucesivos. Por lo general, las texturas
homofónicas solo contienen una melodía primaria o principal. El soporte armónico y el soporte
rítmico a menudo se combinan, por lo tanto según la terminología de Benward y Saker, se etiquetan
como soporte armónico y rítmico. Cuando todas las voces tienen casi el mismo ritmo, la textura
homofónica también puede ser descrita como homorrítmica.
c Polifonía.
En la textura polifónica o textura contrapuntística suenan simultáneamente múltiples voces
melódicas que son en gran medida independientes o imitativas entre sí, de importancia similar y
ritmos diversos. Si las voces se imitan unas a otras (esto es, cantan o tocan melodías similares pero
con cierto retraso unas respecto de otras) se trata de polifonía imitativa. Un caso estricto de
polifonía imitativa es el canon. Las texturas polifónicas pueden contener varias melodías primarias
o básicas. Es una textura característica de la música renacentista y también aparece frecuentemente
en el período barroco. Un ejemplo es el motete Versa est in luctum de Alonso Lobo.
d melodía acompañada.
Como su nombre indica, está formada por una línea melódica principal que es acompañada por
voces y/o instrumentos que ejecutan melodías o acordes secundarios. En esta textura existen
múltiples voces como en la polifonía, pero solo una, la melodía, destaca de manera prominente y las
otras forman una base de acompañamiento armónico.
El estilo musical de finales del siglo XVI llamado monodia (ligado a la Camerata Florentina) no
utiliza propiamente la textura aquí definida como monódica, sino la melodía acompañada. Sin
embargo, recibió ese nombre ya que, en contraste con el estilo dominante entonces, era una sola voz
la que conducía el discurso musical sobre un acompañamiento instrumental de acordes.
Además de los tipos anteriores que son los más comunes, existen otras clases de texturas no tan
habituales como la politemática, la polirrítmica, la onomatopéyica, la combinada así como texturas
mixtas o compuestas, entre otras.
Textura no melódica.
La textura no melódica no es muy frecuente y se puede encontrar en algunas composiciones sobre
todo de música académica contemporánea. Esta textura tiene lugar cuando en una obra musical los
sonidos armónicos ocultan o bien excluyen por completo el contenido melódico de la pieza. De tal
manera, que no pueden distinguirse melodías propiamente dichas.
Micropolifonía.
Es un tipo de textura más reciente, característica del siglo XX. En palabras de David Cope se trata
de «una simultaneidad de diferentes líneas, ritmos y timbres». La técnica fue desarrollada
por György Ligeti, quien la explicó así: «La compleja polifonía de las voces individuales está
enmarcada en un flujo armónico-musical, en el que las armonías no cambian súbitamente, sino que
se van convirtiendo en otras; una combinación interválica discernible es gradualmente haciéndose
borrosa, y de esta nubosidad es posible sentir que una nueva combinación interválica está tomando
forma». «La micropolifonía se asemeja a los clústers, pero difiere de ellos en el uso que hace de
líneas más dinámicas que estáticas».
Tratamiento melódico del texto.
Existen tres estilos melódicos: el silábico, en el que cada sílaba se corresponde con una sola nota; el
neumático, en el que cada nota se corresponde con un número de dos a doce notas; el melismático,
en el que las sílabas pueden corresponderse incluso con docenas de notas
Melismático:
A cada sílaba del texto le corresponden más de tres notas musicales. En música, melisma (del
griego, “canto”) es la técnica de cambiar la altura musical de una sílaba de la letra de una canción
mientras se canta. A la música cantada de esta forma se la conoce como melismática.
Silábico
A cada sílaba del texto le corresponde una nota musical. Se conoce como silábica la técnica en la
cual cada sílaba del texto está emparejada con una simple nota. Según Jesús Giralt i Radigales,
puede hacer referencia a la música de la Antigua Grecia, en la que una nota larga se sustituía por
una sucesión de notas breves, o al Canto gregoriano, en el que se cantaban varias notas sobre una
misma sílaba.
Neumático.
A cada sílaba del texto le corresponden dos o tres notas musicales. Los signos neumáticos son
figuras gráficas dibujadas para expresar diversos contenidos prosódicos y sintácticos (acentos y
signos de puntuación), que pasaron a ser melódicos (de tono), rítmicos y tímbricos.
Tratamiento semántico del texto (Word painting)
El figuralismo es una técnica de composición musical aplicada a la música vocal, que estuvo activa
entre los siglos XVI y XVIII, en consonancia con los presupuestos estéticos del Renacimiento y del
Barroco. Consistía en subordinar la música al texto creando para la música una serie de figuras de
todo tipo (melódicas, rítmicas, polifónicas, texturales, etc.) que subrayaban el sentido profundo del
texto musicalmente, con el sonido.
Esta técnica en lengua inglesa recibe la gráfica denominación de «word painting», que literalmente
quiere decir "pintar (musicalmente) las palabras". Por ejemplo, las melodías ascendentes
acompañan a textos que hablan de subir o ir hacia arriba, mientras que una música grave y oscura
acompaña a un texto sobre la muerte.
Periodo histórico.
El periodo histórico es todo aquel que es anterior al periodo actual que figura en la aplicación.
La historia de la música es el estudio de las diferentes tradiciones en la música y su orden en el
planeta a lo largo del tiempo.
Ya que en toda cultura conocida hubo alguna forma de manifestación musical, la historia de la
música abarca todas las sociedades y épocas. No se limita, como es habitual en algunos ámbitos
académicos, a Occidente, sin embargo, a menudo se utiliza la expresión «historia de la música» para
referir exclusivamente a la historia de la música europea y su evolución en el mundo occidental.
La música de una determinada sociedad está estrechamente relacionada con otros aspectos de su
cultura, como su organización económica, su desarrollo tecnológico, tradiciones, creencias
religiosas, etc.
En música es el estudio de las diferentes tradiciones en la música y su orden en el planeta a lo largo
del tiempo, compone los siguientes periodos:
• Música en la Prehistoria (50 000 a. C. -5000 a. C.)
• Mundo antiguo (5000 a. C. -476 d. C.)
• Música de la Edad Media (476-1450)
• Música del Renacimiento (1450-1600)
• Música Barroca (1600-1750)
• Clasicismo (1750-1820)
• Romanticismo (1820-1900
El Barroco.
El Barroco fue un período cultural que abarcó desde la segunda mitad del siglo XVI hasta la
primera mitad del siglo XVIII. Se difundió por toda Europa y América Latina, así como por otras
regiones colonizadas por los europeos.
El barroco contrastó con el Renacimiento por expresar una sensibilidad pesimista, desengañada,
crítica y compleja. Esto se debe a que la literatura y el arte barrocos representan una época
inquietante desde el punto de vista psicológico, cultural y social, además de político y económico.
El barroco se puede definir como el “arte de parecer”, ya en las artes, ya en la literatura. Tres
elementos pueden ser considerados fundamentales de su estética: el efectismo, la espectacularidad y
la emocionalidad.
El término barroco se usó por primera vez a mediados del siglo XVIII en pleno contexto de la
Ilustración o Iluminismo. Originalmente, el significado de barroco fue tomado de portugués
antiguo, pues "barroco" designaba un tipo de perla de forma irregular.
En la época de la Ilustración, los iluministas Diderot y Rousseau usaron esta palabra para describir
de manera peyorativa el arte de ese período, al que consideraban estrambótico y confuso. Sin
embargo, la historiografía posterior ha reivindicado el valor estético de este período.
Antonio Vivaldi (Venecia, 4 de marzo de 1678-Viena, 28 de julio de 1741).
Fue un compositor, violinista, impresario, profesor y sacerdote católico veneciano del Barroco. Era
apodado Il prete rosso («El cura rojo») por ser sacerdote y pelirrojo. Se le considera uno de los más
grandes compositores barrocos, su influencia durante su vida se extendió por toda Europa y fue
fundamental en el desarrollo de la música instrumental de Johann Sebastian Bach. Su maestría se
refleja en haber cimentado el género del concierto, el más importante de su época. Compuso unas
setecientas setenta obras, entre las cuales se cuentan más de cuatrocientos conciertos, para violín y
una variedad de otros instrumentos musicales, y cerca de cuarenta y seis óperas. Es especialmente
popular como autor de la serie de conciertos para violín y orquesta Las cuatro estaciones. Muchas
de sus composiciones las escribió para el conjunto musical femenino del Ospedale della Pietà, un
hogar para niños abandonados. Vivaldi había trabajado allí como sacerdote católico durante
dieciocho meses y estuvo empleado de 1703 a 1715 y de 1723 a 1740. También tuvo cierto éxito
con costosas representaciones de sus óperas en Venecia, Mantua y Viena. Después de conocer al
emperador Carlos VI del Sacro Imperio Romano Germánico, se trasladó a Viena y esperaba el
apoyo real. Sin embargo, el emperador murió poco después de su llegada y el propio compositor
murió en la pobreza menos de un año después. Después de casi dos siglos de decadencia, su música
experimentó un renacimiento a principios del siglo XX, con mucha investigación académica
dedicada a su obra. Muchas de las composiciones de Vivaldi, que alguna vez se creyeron perdidas,
han sido redescubiertas, en un caso tan reciente como 2006. Su música sigue siendo muy popular y
se interpreta regularmente en todo el mundo.
Beethoven
Beethoven nació el 16 de diciembre de 1770 en la ciudad de Bonn, al oeste de Alemania. Allí,
durante sus primeros años de vida, estuvo expuesto a una exigente formación musical por parte de
un padre obsesionado en convertirle en «el nuevo Mozart».
Tal cuestionable ambición, unido a un no menos peligroso carácter ligado al alcoholismo,
repercutió directamente en la vida personal, académica y social del joven Beethoven, no solo
haciendo de él un niño introvertido y miedoso, sino un mal estudiante demasiado cansado para
atender las lecciones de la escuela después de pasar las noches ensayando ante el piano.
En cualquier caso, sin justificar los medios que pulieron su talento, la realidad es que con tan solo
siete años, Beethoven ya era capaz de dar recitales de piano que dejaban al público boquiabierto;
entre ellos, al mismísimo Christian Gottlob Neefe, que quedó tan impresionado con la habilidad del
pequeño Beethoven, que se interesó en guiar, enriquecer y perfeccionar su formación. Así, a los 10
años abandonó la escuela para dedicarse enteramente a la música y a los 16, la nobleza de Bonn le
financió un viaje a Viena para aprender de los mejores, entre ellos, del mismísimo Mozart; pero al
poco de llegar a la capital de la música, su madre cayó gravemente enferma y tuvo que regresar a
Bonn.
Dice la tradición que Beethoven tuvo la oportunidad de tocar el piano en un recital en el que Mozart
estaba presente y lo dejó tan fascinado que llegaría a decir: «Este joven hará hablar al mundo».
Tras la muerte de su madre, su padre cayó en una profunda depresión que obligó a Beethoven a
hacerse cargo de sus hermanos pequeños tocando la viola y dando clases de piano. Por suerte para
él, no tuvo que alargar este tipo de trabajos por mucho tiempo, pues su extraordinario talento cada
vez era más conocido y eran varias las personas interesadas en financiar su completa dedicación a la
música. Y así pasó más de 10 años en Viena como un músico económicamente independiente hasta
que, pasados los 30, empezara a experimentar serios problemas auditivos. Beethoven probó
diferentes procedimientos para curar su eminente sordera, pero nada funcionó. Tal fue su
impotencia, que valoró el suicidio, pero sabía que aún tenía todavía mucha música que regalar al
mundo y siguió componiendo hasta su muerte a los 56 años, dejándonos un legado musical de
nueve sinfonías, 32 sonatas, dos misas y una ópera que le consagran como uno de los mejores
músicos de todos los tiempos.
Género.
Musical es una categoría que reúne composiciones musicales que comparten distintos criterios de
afinidad, tales como su función (música de danza, música religiosa, música de cine...), su
instrumentación (música vocal, música instrumental, música electrónica...), el contexto social en
que es producida o el contenido de su texto.

Concierto
Se define como concierto cualquier espectáculo en el que se ejecuta una o varias composiciones
musicales, ya tenga lugar en un espacio cerrado o al aire libre, que mantenga cierta unidad.
Se trata de la puesta escena de una función musical (con diversas composiciones sueltas) en directo.
Esto quiere decir que el concierto requiere de la presencia de los músicos tocando sus instrumentos
y ejecutando diversas canciones.
Estructura. Tradicionalmente el concierto se ha compuesto en forma de sonata según el concepto
clásico o barroco, con modificaciones para permitir el virtuosismo del solista, en especial las
cadencias (muchas veces llamadas por su término italiano cadence en plural, o cadenza en singular).
El Motete.
(del francés motet, y este de mot: 'palabra, mote') es una composición polifónica nacida en el siglo
XIII para ser cantada en las iglesias, ...
El motete es una forma musical con una historia que abarca muchos siglos y en su primera etapa es
quizás una de las formas más peculiares de la Edad Media porque en un principio todas sus voces
tenían textos diferentes que se cantaban de manera simultánea.
Orquesta.
Es una compañía de músicos, que con un director, tocan instrumentos de cuerda, viento y percusión.
En una orquesta la parte principal del sonido es producido por los instrumentos de cuerda. Una
banda está formada por un conjunto de intérpretes de instrumentos de viento y percusión.

También podría gustarte