UNIDAD 7

El Narcisismo. Las tres vías de acceso para su estudio: “la enfermedad psíquica, la hipocondría y la vida amorosa
de los sexos”. Autoerotismo – Narcisismo – Elección de objeto. Nuevo acto psíquico para la constitución
subjetiva: La Identificación con el semejante. Introducción al Estadio del Espejo. Yo ideal: identificación
Imaginaria. Ideal del Yo: Identificación Simbólica. Introducción a los tres registros: Simbólico, Imaginario y Real
de acuerdo a la perspectiva lacaniana.
Pulsión: Fuente, empuje, meta y objeto. Objeto de la pulsión: parcial y contingente.
Destinos: Las tres polaridades: activo – pasivo, sujeto – objeto, amor – odio.
Ambivalencia. La satisfacción pulsional. Primer dualismo pulsional: pulsiones de autoconservación y pulsiones
sexuales.
Otros destinos: Represión y sublimación. Represión primordial y propiamente dicha.

Narcisismo y constitución del yo

Dominar y tramitar excitaciones que
Freud concibe el psiquismo como un aparato encargado de:

de no ser adecuadamente elaboradas producen efectos patógenos…

Freud va a considerar, en este sentido, dos clases de LIBIDO, según el OBJETO investido: Si se trata del yo propio se
trata de libido yoica y si se trata de los objetos, la llamará libido objetal.
Cuanto más gasta una, tanto más se empobrece la otra. “El concepto de narcisismo señala la intelección de que el yo
mismo es investido con libido, y aun es su hogar originario y, por así decir, también su cuartel general. Esta libido
narcisista se vuelca a los objetos, deviniendo de tal modo libido de objeto”.
LAS PERSONAS TENEMOS QUE ESTAR CATECTIZADAS LIBIDINALMENTE
PARA NO ENFERMAR –SER AMADOS PERO TAMBIÉN TENEMOS QUE
AMAR –CATECTIZAR OBJETOS DEL MUNDO- PARA NO ENFERMAR.
¿En razón de qué se ve compelida la vida anímica a traspasar los límites
del narcisismo y poner la libido sobre objetos? Esa necesidad sobreviene
cuando la investidura del yo con libido ha sobrepasado cierta medida.
“Un fuerte egoísmo preserva de enfermar, pero al final uno tiene que empezar a amar para
no caer enfermo, y por fuerza enfermará si a consecuencia de una frustración no puede
amar.”
El concepto de narcisismo le permite dar cuenta a Freud de un estado
intermedio entre el
Autoerotismo
En el que las pulsiones sexuales se satisfacen en forma anárquica, independientemente unas de otras. En este estadio, el
objeto de la pulsión cede su lugar al órgano, que es la fuente de aquél. FUENTE = OBJETO de la pulsión
(BOCA P/EJ. = OBJ. DE PULSIÓN)

Y la elección de objeto
El NARCISISMO supone la convergencia de las pulsiones parciales sobre un objeto
común: el yo como imagen unificada del propio cuerpo.

NARCISISMO PRIMARIO
En el narcisismo primario, el sujeto comienza tomando a su propio cuerpo como objeto de
amor (antes de elegir objetos exteriores), lo que permite una primera unificación de las
pulsiones sexuales.
El concepto de NARCISISMO le permite a Freud dar cuenta del hecho de que no
existe en el
individuo, desde un principio, una unidad comparable al yo; el yo debe
experimentar un desarrollo. Pero las pulsiones auto eróticas SÍ existen
desde el origen. Por consiguiente, algo, una nueva acción psíquica, debe
añadirse al autoerotismo para producir el narcisismo ”.
Aquí es donde entra en juego el concepto lacaniano del ESTADIO DEL
ESPEJO, para explicarnos cómo se produce esta unificación de las
pulsiones parciales en torno al yo.
- Entre los 6 y los 18 primeros meses de vida
- El niño, todavía en un estado de impotencia e incoordinación motriz, anticipa imaginariamente
la aprehensión y el dominio de su unidad corporal.
- Esta unificación imaginaria se efectúa por identificación con la imagen del semejante como
forma total (gestalt).
- La unidad
YOICA viene precipitada por una cierta imagen que el sujeto adquiere
de sí mismo basándose en el modelo de otro.
- Decimos que el narcisismo es la interiorización de una relación .
- El dominio de las funciones motoras y el ingreso al mundo humano se paga como precio una alienación esencial del
Sujeto al otro.
Ahora bien, esta identificación primordial no sólo ocurre en un nivel

…sino también en un nivel

Y por último, entre los registros lacanianos, tenemos lo…

Característica de los tres registros lacanianos: no puede pensarse uno separado de los otros
dos.

Para que se dé la precipitación del niño sobre la imagen del otro, es necesario que haya una
matriz SIMBÓLICA. No es tanto el verse en el espejo como el hecho de que el ver esa imagen
esté sostenido por la mirada del Otro, del primer Otro que es la madre. El niño incorporará lo que
escucha hablar, creando un conjunto de “insignias” inconscientes El análisis revela las identificaciones centrales, cómo el
sujeto se ha convertido en lo que el progenitor profetizó para él, o cómo repite los errores de su abuelo.

Ideales
La lógica freudiana nos indica que para dirigirnos al objeto debemos renunciar al narcisismo. Es decir, para ser sujetos
del deseo, renunciamos a la posición de objeto de amor del otro. Pero algo en nosotros persiste de esa posición
objetal. “Aquí, como siempre ocurre en el ámbito de la libido, el hombre se muestra incapaz de renunciar a la
satisfacción de que gozó una vez.” Eso que persiste, persiste en los ideales. Como “residuo” de estos procesos de
estructuración del psiquismo en la vida adulta del neurótico, tenemos una serie de instancias psíquicas mencionadas por
Freud y retomadas por Lacan.
1) Yo Ideal: es la primera forma en que el yo se aliena, que es la unidad del cuerpo en la imagen. Es el punto de
partida del yo, y permanecerá como exigencia formal de perfección. Se trata de una formación intrapsíquica que
sirve de referencia al yo para apreciar sus realizaciones efectivas. Su origen es esencialmente
narcisista: “Lo que el hombre proyecta ante sí como su ideal es el substituto del narcisismo
perdido de su infancia; en aquel entonces él mismo era su propio ideal.” Se trata, pues, de una
identificación con el narcisismo de sus padres, por cuanto el niño tiene la potencialidad de cumplir todos los sueños de
ellos.
2) Ideal del yo: es el punto desde el cual, en el nivel del fantasma, el sujeto es mirado por el Otro. El lugar donde se
le dice qué y cómo debe ser para alcanzar esa perfección (yo ideal). Resulta de la convergencia del narcisismo y las
identificaciones con los padres, sustitutos y los ideales colectivos.
Ejemplo:
Si uno conduce su auto a toda velocidad, podría deberse a que ha asumido la imagen de un corredor de carreras

yo ideal. Pero la verdadera pregunta es ¿para quién se

identificándose con él. Esto se refiere al

identifica con ese corredor? Esta es la dimensión del ideal del yo.
El Yo Ideal es el residuo del narcisismo infantil cuando su yo real era también su ideal y tenía
todas las perfecciones.
Extracto de Slavoj Zizek: “El sublime objeto de la ideología…”
“El neurótico obsesivo, -en el nivel fenomenológico ‘constituido’, imaginario-, está atrapado en
la lógica masoquista de sus actos compulsivos, se humilla a sí mismo, impide su éxito, organiza
su fracaso... pero la pregunta crucial es de nuevo cómo localizar la mirada viciosa superyoica,
para la que se está humillando, para la que esta organización obsesiva del fracaso procura
placer.”
Para analizar esto, Zizek recurre al par hegeliano ‘para el otro/para si’: “El neurótico histérico se
vive como alguien que actúa el papel para el otro, su identificación imaginaria es su ‘ser para el
otro’, y la ruptura crucial que el psicoanálisis ha de lograr es inducirlo a darse cuenta de que él
es este otro para el que está actuando un papel –cómo este ser-para-el-otro es su ser-para-sí,
porque él ya está simbólicamente identificado con la mirada para la que está representando
su papel.”
3) Superyó: Esta instancia tiene como cometido velar por el aseguramiento de la satisfacción narcisista proveniente
del ideal del yo-yo ideal, y con ese propósito observa de manera continua al yo actual midiéndolo con el
ideal.

NARCISISMO SECUNDARIO
narcisismo secundario a la característica psicosexual de la demencia precoz, en la
Freud llama

cual el enfermo mental transfiere sobre sí, como único objeto sexual, la

totalidad de la libido que el neurótico orienta sobre todos los objetos

animados o inanimados de su ambiente. Se trata de la amplificación y el despliegue
de un estado que ya antes había existido (NARCISISMO PRIMARIO). No designa únicamente ciertos estados
extremos de regresión, sino que constituye una estructura permanente del sujeto. La retirada del objeto de la
libido explica situaciones tales como los delirios de grandeza, la hipocondria, la
esquizofrenia y la parafrenia.
Dos rasgos fundamentales de carácter:
- Delirio de grandeza (megalomanía) o insignificancia (melancolía)
- Extrañamiento de su interés respecto del mundo exterior (personas y cosas).

Inmunidad al psicoanálisis
Los parafrénicos parecen haber retirado su libido de las personas y cosas del mundo exterior, pero sin sustituirlas por
otras en su fantasía, como lo hicieron los neuróticos. Esto los vuelve incurables. Recordemos que, según
Freud, El resorte fundamental de la cura analítica es la TRANSFERENCIA. En tanto no está
psíquicamente aptos para catectizar nuevos objetos, los psicóticos no pueden establecer
transferencia: fenómeno que requiere cierta condición desplazable de la libido.

DOS MODOS DE AMAR

En la elección de objeto de tipo anaclíctico (por apuntalamiento) las personas
encargadas de la nutrición, el cuidado y la protección del niño devienen los primeros objetos
sexuales: la madre o su sustituto. Por lo tanto, constituyen el modelo para elecciones
futuras.
La elección de objeto de tipo narcisista es la que observamos en ciertas personas (perversos y
homosexuales) cuyo desarrollo libidinal experimentó una perturbación. Esto hace que no elijan su posterior
objeto de amor según el modelo de la madre, sino según el de su propia persona. Es decir: se
buscan a sí mismos como objeto de amor. (A lo que son, a lo que han sido o a lo que
querrían ser).
“Para Lacan el amor es un engaño fundamental por el cual intentamos llenar la brecha insoportable del “Che
vuoi?”, la abertura del deseo del Otro, ofreciéndonos al Otro como objeto de su deseo. En este sentido el amor
es "una interpretación del deseo del Otro: la respuesta del amor es "Yo soy lo que a ti te falta; con mi devoción
hacia ti, con mi sacrificio por ti, te llenaré, te completaré". La operación del amor es por lo tanto doble: el sujeto
llena su propia falta ofreciéndose al otro como el objeto que llena la falta en el Otro -el engaño del amor es que
esta superposición de dos faltas anula la falta como tal en una completud mutua.”

El desarrollo del yo consiste en un distanciamiento respecto del narcisismo primario y engendra una intensa
aspiración a recobrarlo. Este distanciamiento acontece por medio del desplazamiento de la libido a un ideal
del yo impuesto desde fuera: la satisfacción se obtiene mediante el cumplimiento de este ideal.