Tema:

Agresividad aumentada en la práctica de videojuegos violentos en adolescentes

de 12 a 15 años de edad

Planteamiento del problema:

Posible aumento de agresión en adolescentes por la practica de juegos de video o
con alto índice de agresión.
El planteamiento de la problemática surge porque en la actualidad es en gran
medida atribuible el que los adolescentes lleguen a desarrollar un aumento de
agresividad en su entorno referido a que tienen una practica exagerada en
videojuegos con las temáticas de violencia, agresión, etc. Mas aun en quienes
rondan la edad de entre 12 y 15 años siendo una edad donde son muy
susceptibles a lo que ven y oyen, supuestamente siendo influenciados en su
mayoría por los juegos ya mencionados, talvez no tomando en cuenta el que no
sea del todo el factor primordial o que sea el único, sino que también influya otro
factor social, familiar, personal o psicológico, partiendo la idea de que se debería
de investigar mas a fondo las razones por las cuales los adolescentes pudieran
tener ese aumento de agresividad hacia quienes los rodean y si en verdad son
influenciados de tal manera por los video juegos, ya que también se tiene el
conocimiento de que hay adolescente que tienen altos índices de agresividad sin
haber juegos de tal categoría y que a la inversa hay quienes juegan juegos con
temáticas violentas o de agresión y no presentan conductas desadaptativas como
tal.

Marco teórico:

ARTICULO 1: Los Videojuegos Violentos y la Agresión ¿Alguna relación

directa?

¿Qué relación existe entre videojuegos violentos y agresión?

Hay un debate intenso y a veces de larga duración sobre la posible relación entre
los videojuegos violentos y la agresividad. Un grupo de investigadores de la
Universidad de Gotemburgo, Suecia, están cuestionando toda la base de la
discusión. En un artículo publicado en abril del 2013 presentan un nuevo estudio
que muestra que, más que nada, una buena capacidad de cooperación es un
requisito previo para el éxito en el entorno de un videojuego violento. 

Los investigadores sostienen que los jugadores no solo aprenden a cooperar, sino
también a comprender contextos complejos, comprender cómo se pueden mejorar
las habilidades y pensar a través de relaciones de causa y efecto. Un grupo
opositor, por el contrario, está convencido de que los videojuegos pueden
fomentar un comportamiento violento y agresivo fuera del entorno de juego. 
Situaciones complejas de juegos
El estudio, escrito por Ulrika Bennerstedt, Jonas Ivarsson y Jonas Linderoth y
titulado "How gamers manage aggression: Situating skills in collaborative computer
games" ("Cómo los jugadores manejan la agresión: Situando habilidades en los
juegos colaborativos"), se presenta en la revista International Journal of Supported
Collaborative Learning-Computer.

El grupo de investigación con sede en Gotemburgo pasó cientos de horas jugando

a videojuegos en línea y observando a otros jugadores. Se centraron en juegos
complejos con representaciones de violencia y acciones agresivas, donde los
participantes tienen que luchar con y contra otros. 
"Las situaciones a las cuales se enfrentan en estos juegos requieren colaboración
sofisticada y bien coordinada. Analizamos cuáles son las características y los
conocimientos que los jugadores necesitan tener para ser exitosos", dice Jonas
Ivarsson, docente en el Departamento de Educación, Comunicación y
Aprendizaje. 

Estrategia y oportunidad
Resulta que un jugador exitoso es estratégico y buen entendedor de técnicas.
Los jugadores desconsiderados, así como aquellos que actúan agresivamente o
emocionalmente, por lo general no lo hacen bien. "La supuesta relación entre los
juegos y la agresión se basa en la noción de transferencia, lo que significa que
los conocimientos adquiridos en una situación determinada pueden ser llevados o
utilizados en un contexto totalmente diferente. 

La cuestión de cómo una situación de aprendizaje debe estar diseñada para que
los alumnos sean capaces de utilizar el material aprendido en la vida real es muy
difícil, y no tiene respuestas claras ", dice Ivarsson. 

"En pocas palabras, estamos cuestionando todo el debate del juego y de

la violencia, ya que no se basa en un problema real, sino más bien en un
razonamiento hipotético", concluye.

Fuente: 
http://www.alphagalileo.org/ViewItem.aspx?ItemId=119031&CultureCode=en

ARTICULO 2: Videojuegos y agresión: el escenario desconocido

11 de octubre de 2013
Un nuevo estudio publicado por Journal of Child and Adolescent sobre un análisis
practicado a 377 adolescentes que bordeaban los 13 años, comprobó que no
existen conductas agresivas, al contrario, los videojuegos pueden jugar un rol
tranquilizador, incluso si tienden a un déficit atencional.
Según Claudio Boza los niños de entre 5 y 12 años comprenden el grupo que más
tiende a la agresividad como también existen niños que tienen miedo de
enrabiarse. Fuente: Universia
Mortal Kombat, Halo o Grand Theft Auto son algunos de los juegos catalogados
como violentos y preferidos por el público adolescente. A pesar de que varios
jóvenes pasan horas jugando, ya sea solos o en compañía de amigos, muchos
padres se muestran reacios a creer que esta dependencia puede provocar efectos
negativos. 

Claudio Boza, psicólogo y docente de la escuela de sicología Universidad Mayor,

asegura que no existe relación entre videojuegos y agresividad. “Estudios antiguos
que se han realizado por televisión en que se demuestra una relación
entre presenciar imágenes violentas y la tendencia a repetir esas conductas. Esto
tenía relación con que el sujeto se identificaba con aquello que estaba viendo, es
decir, actuaba por imitación. Sin embargo, los juegos electrónicos han demostrado
que tienen la capacidad de canalizar la agresión de manera, socialmente, más
aceptable, pero esto va a depender porque en algunos casos los que contienen
más violencia sí pueden incitar. No quiere decir que se entretengan y de inmediato
se practiquen las conductas que se visualizan, como aquellos de temáticas
guerrilleras y no por eso van a andar haciendo la guerra después”, comenta.

Una conducta normal

Es necesario destacar que los niños siempre presentan episodios de furia, lo que
realmente debe preocupar es cuando esos escenarios son de mayor frecuencia
y transgresión de los derechos de otros. “Si miramos a los humanos como
organismos biológicos, no existe ninguno que agreda todo el tiempo y cuando lo
hace es por competencia de alimento. Nosotros no escapamos a eso porque igual
tenemos una base biológica, no atacamos todo el tiempo, pero podemos hacerlo
en muchas ocasiones. Por otro lado, no tenemos los mismos canales exactos que
la biología, entonces, es un impulso que se está expresando de manera más
frecuente que solo cuando hay una provocación. Actualmente la violencia no es
únicamente reactiva o aprendida porque hay conductas de millones de años que
eran para preservar la especie, sin ir más lejos, todos los días comemos y esto en
el mundo biológico es matar”, argumenta el profesional.
Canalización de la violencia
El análisis de los 377 adolescentes expone la tranquilidad que puede generar un
juego, sobre todo en aquellos jóvenes con déficit atencional. Boza cree que esto
no es real puesto que más allá de dar relajación, sólo es un medio para orientar la
ira. “Puede ser que canalicen la violencia, pero no calman, no por el pasatiempo
en sí mismo sino porque están diseñados de otra manera. Están confeccionados
para que alguien quiera seguir divirtiéndose y esto tiene que ver con el deseo.
Igual que las series, terminan y dan un adelanto del otro capítulo que deja
enganchado. Estas historias animadas generan tareas inconclusas y alguien debe
completarlas, hay nuevos niveles, nuevos personajes. Por lo tanto, no serenan,
por eso los padres tienen problemas para cortar esta conducta de dependencia en
los niños. Es más, si alguien juega antes de ir a dormir puede seguir viendo las
imágenes en el sueño por lo que no se completa un estado de sosiego”, explica.

Respetar las clasificaciones

La personalidad no va a cambiar por jugar porque es una construcción compleja
de muchas variables, indica el sicólogo, pero es necesario autorizar a los hijos a
los videojuegos que solo son para su edad. “Hay muchos ataques en algunos por
eso se recomienda a cada grupo de edad su clasificación correspondiente. A los
niños más pequeños estas cargas emocionales le hacen mal porque el contenido
es demasiado provocador, incluso puede llegar a traumar o tienen pesadillas
mientras duermen. La agresión debe ser educada durante el desarrollo, porque no
están preparados para tolerar imágenes muy combativas”, aclara.
 
Enseñar la agresividad
Un niño es violento cuando pasa a llevar los derechos de los demás, pero esto
dependerá del contexto en que está inserto. En el colegio el contexto está definido
por el manual de convivencia estudiantil y si el alumno no lo respeta, los
profesores lo identificarán. “Entre 5 y 12 años es el grupo que más tiende a la
agresividad como también existen niños que tienen miedo de enrabiarse. Hay
que educar estas conductas y explicar que es un estado normal. Todos pasamos
por estas situaciones y es sano liberar tensiones, siempre y cuando se respete el
espacio de los demás. La agresión puede ser positiva o negativa, sirve para la
adaptación, por ende, no es un defecto. Ocurre cuando somos incapaces de
aceptar el punto de vista de otro cuando no hay empatía. En un ataque, siempre
vemos como malo al adversario por eso es importante la empatía, porque permite
ver que todos tenemos algo bueno y malo dentro”, concluye. 

Referencia de internet:
http://noticias.universia.cl/en-portada/noticia/2013/10/11/1055451/videojuegos-
agresion-escenario-desconocido.html