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ESCUELA BÍBLICA “FRAY MAMERTO ESQUIÚ”

UNIVERSIDAD CATÓLICA DE SALTA


CENTRO BÍBLICO TEOLÓGICO PASTORAL PARA AMÉRICA LATINA
(CEBITEPAL)

DIPLOMATURA UNIVERSITARIA EN ACTUALIZACIÓN BÍBLICA

- Nombre del módulo: PROFETAS


- Apellido y Nombre del Profesor: Mariana Zossi
- Apellido y Nombre del Alumno: Silva Russo Roxana

Año: 2022
Consignas del Trabajo Final

1. Te invito a que vuelvas a mirar los videos de las clases y elijas una perícopa de
algún profeta para que puedas trabajar. Recuerda que una perícopa es una pequeña
unidad de sentido, con un principio y un final; digo pequeña para que puedas hacer
todo el proceso que te propongo en no más de 5-7 páginas A4.

2. De esa perícopa te pido que analices lo siguiente:


1. Contexto del profeta: situación histórica, social y cultural.
2. Contexto del texto: parte a la que pertenece, capítulo y/o unidad. Destaca
que está antes y qué después, reconociendo el vínculo que tiene: palabras
que se repiten, personajes que se mantienen en la escena y si existe una
misma geografía y el género literario.
3. Análisis del texto en sí mismo (mirada sincrónica): situación inicial, trama
(que es lo que ocurre en él), personajes y cambios que se producen en el
relato y situación final.
4. Mensaje del texto. 

3. Ahora puedes dialogar con el texto: ¿qué nos dice hoy el profeta?

4. Por favor pon la bibliografía que usaste.

https://www.mercaba.org/Biblia/Comentada/profetas_isaias.htm
Desarrollo

1. El nombre de Isaías (en heb. Yesa'yahu) significa etimológicamente "Dios salva," y parece


reflejar simbólicamente la misión de "salvación" del gran profeta escritor. En la nota
introductoria al libro que lleva su nombre se dice que es hijo de Amos, que no es el profeta
conocido con este nombre (las grafías de ambos nombres en heb. no coinciden). Aunque
no sabemos cuándo nació Isaías, sin embargo, podemos suponer que fue hacia el 770
antes de Cristo, pues hacia el 740 aparece ya predicando en Jerusalén, lugar de su
nacimiento. El estilo selecto de su lenguaje nos hace suponer también que era de la clase
alta de la sociedad jerosolimitana. Su vocación al ministerio profético tuvo lugar — según
la indicación del libro que lleva su nombre — en el año en que murió el rey de Judá
Azarías, llamado también Ozías; es decir, hacia el 740 antes de Cristo.
En el relato de su vocación aparecen cuatro temas que vertebran toda su enseñanza: 1) la
santidad de Dios, 2) la conciencia de pecado como debilidad y profanación, 3) la
inminencia de un castigo inevitable, 4) la esperanza de salvación.
La idea central de la predicación es la de la "santidad" de Dios, que exige también una
atmósfera de "santidad" en el pueblo elegido" Toda su vida fue consagrada a esta misión
de preparar al pueblo espiritual-mente para que fuera "santo," en consonancia con las
exigencias de la "santidad" divina. Y su labor no sólo se limitó a la predicación en el
pueblo, sino que tuvo intervenciones solemnes, como consejero, en los momentos críticos
de la vida política de Judá. Así, en 734 procuró reanimar al rey Acaz ante la invasión del
ejército siro-efraimita. En 701 intentó reavivar las esperanzas de salvación en ocasión en
que Jerusalén estaba cercada por las tropas de Senaquerib.
Y, por otra parte, en varias ocasiones se opuso a que Judá entrara en coaliciones
antiasirias, por el peligro que esto suponía para la vida religiosa y aun política de la
pequeña nación. Con ocasión de la embajada de Merodac Baladán ante el rey Ezequías,
Isaías puso en guardia a éste contra las posibles intenciones políticas del cabecilla rebelde
babilonio, que ante todo buscaba ayuda para insurreccionarse contra el rey de Asiría.
Sobre todo, el profeta tuvo una influencia decisiva en la reforma religiosa impuesta por el
piadoso rey Ezequías. En su misión profética tuvo primero que hacer frente a la política
antirreligiosa del impío rey Acaz (736-727); con su sucesor Ezequías (727-698), las
relaciones del profeta fueron cordiales, ya que el rey era profundamente religioso, y
procuraba seguir sus consejos. Al morir el piadoso rey, Isaías tuvo que sufrir la persecución
del impío y sectario rey Manasés (698-643), hijo de Ezequías. Según la tradición judaica 1, el
gran profeta fue aserrado por orden del impío rey, perseguidor del yahvismo tradicional.
Cuando Isaías inicia su labor profética, Judá se halla en un gran momento de prosperidad
nacional, pues el rey Azarías (768-740) había vencido a los edomitas, moabitas y filisteos,
con lo que se aseguró el comercio exterior en el Mediterráneo, y el oriental de Arabia,
como consecuencia de haber conquistado el puerto de Elán, en el actual golfo de Akaba.
Pero esta prosperidad es efímera, ya que por el norte se presiente ya la llegada del rey
asirio Teglatfalasar III (745-727), que ha de caer como un ciclón sobre los pequeños
estados de la costa siro-fenicio-palestina. El profeta es el primero en dar la voz de alarma.
Acaz pretende adelantarse a los acontecimientos buscando la alianza del coloso asirio, e
incluso influye para que los cultos idolátricos asirios tengan acceso al templo de Jerusalén. 
En 734 antes de Cristo, una coalición militar siro-efraimita pone sitio a Jerusalén con la
pretensión de sustituir a Acaz por otro (llamado en Is 7:6 "hijo de Tabeel") que se plegara a
sus exigencias de entrar en una liga antiasiria. Con ocasión en que Acaz inspeccionaba los
servicios del abastecimiento del agua, Isaías le salió al paso, prometiéndole la ayuda de
Dios y un signo portentoso en prueba de la promesa. El rey, hipócritamente, rechaza la
oferta, porque secretamente había solicitado ayuda del rey asirio,  y es entonces cuando
Isaías profirió su famoso vaticinio del Emmanuel.  El profeta, airado, anunció la invasión de
los asirios, que Acaz secretamente había llamado como aliados, despreciando el auxilio de
Yahvé. En efecto, las tropas de Teglatfalasar III conquistaron Damasco en el 731 antes de
Cristo y se anexionaron la parte septentrional del reino de Israel. En 721 cayó Samaría en
manos de Sargón (721-705), sucesor de Salmanasar V (727-721). Al subir al trono Ezequías,
hijo de Acaz, en 727, las perspectivas religiosas de Judá cambiaron totalmente, ya que el
joven rey emprendió una profunda reforma religiosa, en la que tuvo mucha influencia el
propio Isaías. Del piadoso rey hace el texto sagrado el mejor elogio: "Obró la rectitud a los
ojos de Yahvé, como lo había obrado David..., y después de él no hubo igual entre los
reyes de Judá, ni entre los anteriores a él." Purificó el templo de las huellas idolátricas que
había dejado su padre y después arrasó los otros lugares de culto: "Destruyó
los bamoth (lugares altos), y destruyó los masseboth (estelas erigidas en honor de las
divinidades cananeas), y cortó el aserah (bosque sagrado, dedicado a Astarté, diosa de la
fecundidad), e hizo pedazos la serpiente de cobre que había hecho Moisés, porque hasta
aquel día los israelitas le quemaban incienso y le habían impuesto el nombre de
nejustan." En esta reforma religiosa se procuró llevar al extremo la centralización del culto
en el templo único de Jerusalén. Sin duda que en toda esta empresa tuvo mucha
importancia la predicación de Isaías. En lo político, Ezequías procuró atraerse el resto de
israelitas del desaparecido reino del norte, invitándolos a ir a participar del culto
jerosolimitano . Sin duda que en esta labor las insinuaciones del gran profeta consejero
tuvieron gran influencia, ya que él invitaba en su predicación a la unión de todos los
descendientes de Jacob. También en lo relativo a alta política exterior Isaías trabajó para
que Ezequías se mantuviera como vasallo del rey asirio.
 Carácter personal de Isaías.
Dotado de excepcionales condiciones humanas por su genio y su educación literaria
esmerada, Isaías figura a la cabeza de todos los profetas del Antiguo Testamento. En
primer lugar se ve en su persona una gran firmeza de carácter, que le da seguridad en los
grandes momentos de su vida profética. Enfrentado con situaciones críticas para su
nación, siempre se mantuvo a una altura de independencia de carácter que le liberaba de
todo compromiso político humano. En los primeros años de su carrera profética hace
frente a la hipocresía de Acaz, y cuando ya está en el trono un rey profundamente
religioso como Ezequías, el profeta se mantiene dignamente alejado de todo lo que pueda
empañar su libertad de acción religiosa. hace frente a la frivolidad de los cortesanos, los
cuales derrochan en lujos, mientras que los pobres no tienen lo necesario para la vida. No
tolers la falsa religiosidad de los que pretenden cubrirse ante Dios con sacrificios y
ofrendas en el templo. Todo ello no tiene valor para el profeta mientras no haya
arrepentimiento de corazón y comprensión de las necesidades del prójimo
Isaías 2: 1-5
Visión de Isaías, hijo de Amós, acerca de Judá y Jerusalén:
Al final de los días, estará firme el monte de la casa del Señor en la cima de los montes,
encumbrado sobre las montañas. Hacia él confluirán los gentiles, caminarán pueblos
numerosos. Dirán: Venid, subamos al monte del Señor, a la casa del Dios de Jacob.
El nos instruirá en sus caminos, y marcharemos por sus sendas.
Porque de Sión saldrá la Ley, de Jerusalén la Palabra del Señor.
Será el árbitro de las naciones, el juez de pueblos numerosos. De las espadas forjarán
arados, de las lanzas, podaderas. No alzará la espada pueblo contra pueblo, no se
adiestrarán para la guerra.
Casa de Jacob, ven, caminemos a la luz del Señor.
En el primer versículo pone en contexto la visión. Explica quien recibió la visión, donde la
recibió y a continuación explica de qué se trata. El segundo versículo describe a la casa del
Señor (Sión) asentada sobre los montes y tomando un papel protagónico. El tercer
versículo describe como todos los pueblos quieren ir hacia ella a recibir la ley. En el cuarto
versículo se da esta enigmática visión de paz. Dios será el árbitro de la paz y las naciones
harán instrumentos de labranza sus armas de guerra y ningún pueblo adiestrará a su gente
para la guerra. En el quinto versículo termina invitando a la casa de Jacob a caminar por
los senderos del Señor.
Contexto esta ubicada entre aquella contra el culto de los ídolos (Is 1: 29-31) y la teofanía
y el juicio de Dios (Is 2: 6-22). En el capitulo 3 el profeta sigue denunciando los excesos y
habla de la anarquía en Jerusalén (Is 3: 1-15). Contexto histórico Esta perícopa está en lo
que se conoce como el primer Isaías que comprende los capítulos del 1 al 39. Esta primera
parte del libro engloba historias del periodo del rey David hasta lo que corresponde al
tiempo bajo la influencia del imperio Persa. Se calcula que este libro fue escrito alrededor
del 850 A.C.
Muchos de los acontecimientos de este primer Isaías están influidos por la política
internacional del imperio Neo-Asirio11. Una de las mejores pistas acerca del año en que
fue escrito es el pasaje donde en descubre su vocación profética (Is 6:1), que sucedió el
año en que el rey Ozíaz murió. Es probable que el rey haya muerto entre el año 742 al 736
A.C. 12. La muerte del rey marco el fin de una era de relativa independencia de Judá. El rey
asirio Tiglath-pileser III llegó al trono en el 745 A.C y comenzó a expandir su imperio.
Conquisto pequeños estados como Siria y Palestina. Sus sucesores siguieron la misma
política militar expansionista 13. El profeta vivió bajo la amenaza de la dominación Asiria la
mayor parte de su vida. Muchas de sus monarcas Asirios. Por ejemplo, la mayor parte del
capítulo 7 y 8 de Isaías trata de las acciones del rey Ajaz durante la guerra Siro-Efraimita.
Poco tiempo después Sargon III invadió Samaria y destruyo el reino de Israel del norte , y
distribuyó a los israelitas a lo largo del imperio. Durante el asedio de Jerusalén en el año
701 A.C por parte del emperador asirio Senaquerib. Algunos académicos piensan que
Jerusalén fue perdonada porque existían buenas relaciones entre Judá y Asiria. Dicen que
jóvenes princesas judías fueron dadas en matrimonios a los reyes Tiglath-Pielseser III y
Sargon II 15. Todos estos acontecimientos no podían dejar indiferente a nadie y menos al
profeta. El cual se preocupaba constantemente por el destino de los Israelitas restantes en
el reino del sur. Ante la constante amenaza de guerra y destrucción la visión de paz de
Isaías (Is 2: 1-5) suena como bálsamo.
Narrador: este narra la visión del profeta en tercera persona. Al principio dude si existía
algún narrador o era el profeta hablando. Pero puedo observar cierto desapego de la
experiencia. En otras narraciones el mismo autor reclama la experiencia y dice frases como
“vi”, o “contemple”, etc. En este pasaje el uso de la tercera persona me hace pensar que
hay un narrador. Dice “Visión de Isaías, hijo de Amós, acerca de Judá y de Jerusalén” y
después procede lo que va a suceder al final de los tiempos (Is 2: 1). Este es un narrador
omnisciente. Narra con lo que va a pasar . Sión estará elevada sobre las montañas y hacia
ella irán todos los pueblos.
Profeta Isaías: este es un personaje importante, aparece al principio de la perícopa. No
habla, el narrador describe lo que vio en la visión. No se describe que emociones
experimento al recibir esta visión. Esta es la segunda visión que tiene y la recibe antes de
ser purificado por el ángel y descubrir su vocación como profeta del Señor (Is 6: 1-13). Esta
visión es diferente a aquella donde descubrió su vocación en la cual se describen sus
emociones de su sorpresa y miedo (Is 6:5). Poco se sabe de él. No se sabe a qué se
dedicaba antes de ser profeta, se sabe que tenia acceso al rey y estaba dentro de los
círculos de poder del reino. Eso no significa que siempre lo escucharan. Se sabe que tuvo
discípulos continuaron su labor (Is 8: 16) y también tenia hijos (Is 7:3 ; 8: 1-4)
Los pueblos: los versículos 2 y 3 narran la respuesta de los pueblos al ver a Jerusalén
elevada sobre los montes. Estos se verán atraídos hacia ella y se dirán entre si “subamos al
monte del Señor” (Is 2:3), allí estos serán instruidos en los caminos de Dios y marcharán
por sus sendas. En el versículo 4 se narra que los pueblos convertirán sus armas en
instrumentos para labrar la tierra. Es una lástima que este versículo sea tan parco , no
ofrece ningún tipo de narración sobre el sentir del pueblo. En otras narraciones de visiones
en la Biblia se describe las emociones de aquellos que están en la visión. El versículo 5
narra como alguien invita a la casa de Jacob a unirse, no se sabe si es el profeta o las otras
naciones que lo invitan a la casa de Jacob a unirse a la procesión. ¿O ya estaba la casa de
Jacob en la procesión y el pueblo les pide que los lidere en su peregrinación hacia Dios? No
se sabe, el texto no abunda en detalles
Árbitro y Juez: En el versículo 5 hace su aparición el árbitro y juez entre las naciones. No lo
dice el texto, pero da a entender que Dios será el árbitro y juez de esos pueblos
numerosos que han venido a Sión a recibir la ley. Casa de Jacob: de entre todos los
pueblos este es al único que se llama por su nombre. No se sabe si se une a la procesión
hasta el final o si estaba desde el principio. Esta alusión de casa de Jacob posiblemente sea
una referencia a Israel. Jacob se cambió el nombre al tener un encuentro con un ángel del
Señor (Gen 32: 29).
Género literario Por el estilo y forma literaria de los oráculos, suele ser considerado como
el gran poeta clásico del AT: amante de la brevedad y concisión, sabe ser incisivo,
utilizando imágenes originales y escuetas. Su lenguaje es culto. Así como el texto de Oseas
es difícil por los modismos que usa, el de Isaías tiene de dificultad el que utiliza un
riquísimo vocabulario, muchos de cuyos términos son exclusivos. Su dicción es armoniosa:
gusta de emplear aliteraciones, sinonimias y otros muchos recursos literarios.
Análisis del mensaje En el primer versículo se habla de la “visión de Isaías, hijo de Amós,
acerca de Judá y de Jerusalén (Is 2: 1). Creo que este es un mensaje para el reino del sur el
cual tiene por capital Jerusalén, que aún no ha sido sometido por el imperio Neo-Asirio.
Esta visión la recibe Isaías antes de su la confirmación de su vocación profética por parte
de Dios. Es misteriosa, pues no se sabe nada de Isaías en este momento, sólo que es hijo
de Amós. Después en el segundo versículo presenta la primera imagen escatológica. “A
final de los tiempos estará firme el monte del la casa del Señor, sobresaliendo sobre los
montes, encumbrado sobre la montaña.” (Is 2: 2). Israel esta representado en la figura de
Sión . Es una visión con una gran esperanza. Presenta un gran horizonte que esta irradiado
de divinidad , pero por otro lado también se mescla una hegemonía religiosa y unidad
política para lograr finalmente alcanzar la paz. Cuando el profeta habla de que “hacia él
confluirán las naciones, caminaran pueblos numerosos”(Is 2: 2-3) proyecta la imagen de
un rio que fluye. Nadie será forzado, sino que será un proceso natural, como las aguas de
un rio que fluyen ellos irán a la montaña, será un proceso armónico, aunque eso implique
ir subiendo la montaña. En el tercer versículo se explica la razón de esta peregrinación.
“Dirán: vengan, subamos al monte del Señor, a la casa del Dios de Jaco: él nos instruirá en
sus caminos y marcharemos por sus sendas, porque de Sión, saldrá la ley; de Jerusalén , la
Palabra del Señor” (Is 2,3). Es importante subrayar que esta es una procesión
internacional, de muchas naciones. No es una peregrinación de carácter individual, sino
que los peregrinos invitan a otros a acompañarlos. El propósito de esta peregrinación es
aprender los caminos de Dios. Opino que esta visión escatológica puede significar que los
gentiles serán receptivos a las enseñanzas de Dios y se dejarán guiar por El. Todas las
naciones convergen hacia Sión para aprender de El, y de allí sale toda la enseñanza para el
mundo. Es interesante que Israel no toma la iniciativa de ir hacia ellos. Israel no sale al
mundo a convertir a los gentiles, sino que estos son atraídos hacia Sión y ellos responden a
la iniciativa de estas personas. El cuarto versículo es para mí el clímax de esta visión. “(El)
será el árbitro entre las naciones, el juez de pueblos numerosos.” (Is 2,4)
Mensaje actual del texto La moralidad de las armas modernas. En su mensaje para la 50
jornada mundial por la paz el Papa Francisco analizó la situación actual. Y el panorama no
fue muy alentador, sin embargo, fue valiente al denunciar esto. “El siglo pasado fue
devastado por dos horribles guerras mundiales, conoció la amenaza de la guerra nuclear y
un gran número de nuevos conflictos, pero hoy lamentablemente estamos ante una
terrible guerra mundial por partes.”Sin dobles y con mucha claridad afirmo que “la
violencia no es la solución para nuestro mundo fragmentado. Responder con violencia a la
violencia lleva, en el mejor de los casos, a la emigración forzada y a un enorme
sufrimiento, ya que las grandes cantidades de recursos que se destinan a fines militares
son sustraídas de las necesidades cotidianas de los jóvenes, de las familias en dificultad…
En el peor de los casos, lleva a la muerte física y espiritual de muchos, si no es de todos.”
En su exhortación Evangelii Gaudium dedica una sección a la guerra. Allí explica, que “la
mundanidad espiritual lleva a algunos cristianos a estar en guerra con otros cristianos que
se interponen en su búsqueda del poder, prestigio, placer o seguridad económica.”
Reconoce que “el mundo está lacerado por las guerras y la violencia.” Y “le duele
comprobar cómo en algunas comunidades cristianas y aún entre personas consagradas,
consentimos diversas formas de odio, divisiones, calumnias, difamaciones, venganzas,
celos, deseos de poder, etc (y nos pregunta) ¿A quien vamos a evangelizar con esos
comportamientos?” Nos pide a todos los cristianos del mundo a “dar un testimonio de
comunión fraterna que se vuelva atractivo y resplandeciente. Que todos puedan admirar
como nos cuidamos unos a otros, cómo nos damos aliento mutuamente y nos
acompañamos.” Termina diciendo que “pidamos al Señor que nos haga entender la ley del
amor. (Nos dice que hay que) rezar por aquel con el que estamos irritados…y no hay que
dejarse robar el ideal del amor fraterno.”
Mientras estemos en este mundo y vivamos bajo los efectos de la avaricia, el egoísmo, el
poder, siempre habrá envidias, odios, deseos de poder que nos llevarán a situaciones de
violencia. Pero el hecho de que estas situaciones existan no nos debe de robar la
esperanza de desear un mundo pacifico. Un mundo más seguro, donde la gente no muera
por las armas fabricadas por los humanos. Ya tenemos mucho de qué preocuparnos con
las enfermedades como el cáncer, diabetes, etc. y también tenemos muchas catástrofes
naturales como huracanes, terremotos, incendios, etc.
A modo de conclusión: Es importante no leer un texto aisladamente, es importante
comprender el contexto en que el texto fue escrito y la relación que este tiene con otros
pasajes de la escritura. Aprendí mucho sobre la influencia del Imperio Neo-Asirio y la
profecía de Isaías. También aprendí varios textos de la escritura que se relacionan con este
texto y ayudan a comprender un poco mejor el texto.
La imagen de la montaña, la ley y los ríos que fluyen del templo y Dios como soberano.
Considero que es importante leer las distintas posiciones y al final hacer un
discernimiento.
Considero que, aunque es difícil alcanzar esta paz utópica de la que habla el profeta no por
eso debemos de descartar el poderoso mensaje que contiene. No hay que domesticar la
palabra de Dios, pues tiene un gran potencial para cambiar al mundo. Sin embargo, antes
de pensar en erradicar toda la violencia en el mundo. Primero hay que trabajar en uno
mismo y erradicar la violencia que hay en nosotros. Muchas veces hemos dado muy poco
testimonio los cristianos.
No se puede leer un versículo aislado, sino que hay que leerlo en conjunto con toda la
escritura.

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