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Universidad Central del Ecuador

Escuela de Sociología y Ciencias Políticas


Pensamiento Político Latinoamericano
Nombre del Alumno: Angie Gancino
Curso: Política 5º Semestre Semana Nº: 3

Texto a reseñar: Arguedas Alcides. 1909. Capítulo II. Psicología de la raza indígena. En
Pueblo enfermo. Contribución a la psicología de los pueblos hispanoamericanos.
Competencias académicas del autor: “Poeta, novelista y ensayista boliviano. Historiador y
diplomático. Considerado uno de los más destacados pensadores sociales bolivianos. Se
convirtió en una figura fundamental para la comprensión del indigenismo a partir de su novela
Raza de bronce (1919). Ocupó los cargos de diputado y senador de Bolivia” (Ruiza,
Fernández y Tamaro, 2004).
Desarrollo de la tesis:
Dentro del texto, Arguedas (1909) comienza señalando que es inapropiado utilizar el término
“raza” para determinar aquellas pequeñas variaciones que hay entre los habitantes tanto de
Bolivia como de América Latina, sobre todo porque no se han podido precisar las diferencias
entre la “raza blanca” y la “raza mestiza”. Aquí, el autor nos da una pequeña lista de
diferencias físicas, que ayudan a esta diferenciación entre blancos, mestizos, indígenas y
negros; no obstante, menciona que estas características como el color de ojos, de piel, etc., no
deberían ser consideradas para distinguir a una raza de otra, dado que la mayoría de ellas
depende del clima. Entonces, Arguedas opta por introducir la idea de que se deben considerar
las razas únicamente “desde un punto de vista psicológico” (Arguedas, 1909, pág. 33), y en
base a ello, va hablando poco a poco de las razas: indígena, pura, madre, blanca y negra a lo
largo de su texto.
Ahora bien, hay que recalcar que en la raza que más se centra el autor es en la indígena.
Respecto a ella, Arguedas menciona que el “indio aymara” habita en la región Interandina
desde hace tiempo, y este junto a la “pampa” conforman una sola entidad. Inclusive, se resalta
que son los Incas quienes inculcaron las nociones de divinidad, pues antes de las grandes
conquistas incaicas “los naturales” no adoraban a ningún dios. Así mismo, el autor hace
énfasis en que gracias a la conformación física de la región se plasmaron los rasgos del
carácter y la constitución del indio, que describían a alguien de estatura regular, de color
cobrizo, con labios gruesos, que podía pasar días enteros solamente con puñados de coca y
maíz tostado, que le bastaba el suelo para dormir, etc.
Cabe aclarar, que Arguedas describe al indio como un ser “supersticioso y crédulo” dado que
cuentan con los “yatiris”, quienes resultan ser adivinos que predicen el mal futuro, por ende,
señala que el indio “no sabe determinar de manera lógica su respeto y sumisión a los hombres
superiores o a las divinidades. Su concepción del Dios cristiano es en absoluto fetichista”
(Arguedas, 1909, pág. 40). Entonces, en base a esta idea el autor nos habla sobre la
explotación del indio, pues juzgado por sus creencias que se creían contradictorias, tanto los
curas como los patrones y los funcionarios públicos se encargaron de que el indio fuera
ignorante, maltratado, explotado, etc. Sin embargo, Arguedas nos menciona que cuando
aquella explotación llega a su punto más alto, el indio se levanta y se olvida de su
inferioridad, ya que no existe para él autoridad alguna que lo atemorice; pero en
consecuencia, empiezan también a salir los soldados a fusilar a cuantos puedan, así que esto
termina en revueltas y persecuciones sangrientas.
Universidad Central del Ecuador

Otro punto importante dentro del texto es el papel del indio en los llamados “pongos” y
“taquias”. Pongo es el “colono de una hacienda que va a servir por una semana a la casa del
patrón en la ciudad, y taquia la bosta de ovejas y llamas que se recoge, se hace secar al sol y
luego se emplea como combustible” (Arguedas, 1909, pág. 45). En este sistema se arrienda a
los pongos restantes, pero el indio no puede ser únicamente alquilado, sino que además debe
transportar cosechas obligatoriamente por largas distancias. Esta, es claramente otra forma de
explotación del indio, inclusive, se presentan situaciones en las que indios que poseen el
terreno que labran (comunarios) son estafados, pues las personas con más influencia se
adueñan poco a poco de esas propiedades, comprándolas a precios realmente bajos. En este
panorama, Arguedas nos mencionará otras características de los indios, pues señala que el
indio aymara es aislado y taciturno, no le interesan las conquistas del blanco. Pero a su vez, se
habla de este indígena comunario, quien vive en lugares apartados y es utilizado por el cura,
los vecinos, militares, pasajeros, etc.
Finalmente, en el texto el autor toca el tema de los conquistadores, quienes tienen un perfil
bien claro, son: “brutales, egoístas, interesados, ásperos y dominados por apetitos feroces”
(Arguedas, 1909, pág. 50). Aquí, según Arguedas hay un choque entre la brutalidad de los
conquistadores y la suavidad de los nativos, pero la lucha en vez de resultar enérgica es
únicamente sangrienta, ya que los nativos caen de rodillas. Junto a esta idea, el autor nos
indica que esta la débil busca defensa en los vicios femeninos de la mentira, el engaño, etc.,
pero estos vicios no son innatos, sino que los fueron adquiriendo. Es así, que de ahí en
adelante los seguirá utilizando como arma de defensa contra la raza dominante, y aquí, el
autor nos pone el ejemplo de la primera mentira que tuvo gran trascendencia, la que “ostenta
con pompa el conquistador Pizarro, ejercitándola contra el Inca Atahuallpha, para realizar una
obra de perfidia casi sin ejemplo en los anales del mundo” (Arguedas, 1909, pág. 51).
Inclusive, dentro del tema de la conquista se encuentran ciertas ideas del autor acerca del
alcoholismo y la malnutrición, pues estas características, unidas al exceso de trabajo y la falta
de higiene, son las que minan aquel “vigor prodigioso” de la raza según Arguedas.

Principales conceptos utilizados: raza, crisis agrícolas, olla del pobre, yatiri, indígena,
aymara, explotación, caciquismo, psicología, comunario, dominio, corrupción, ignorancia.

Bibliografía:
 Arguedas Alcides. 1909. Capítulo II. Psicología de la raza indígena. En Pueblo
enfermo. Contribución a la psicología de los pueblos hispanoamericanos.
 Ruiza, M., Fernández, T. y Tamaro, E. (2004). Biografía de Alcides Arguedas. En
Biografías y Vidas. La enciclopedia biográfica en línea. Barcelona (España).
Recuperado de https://www.biografiasyvidas.com/biografia/a/arguedas_alcides.htm

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