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ASIGNATURA : INTERCULTURALIDAD

CICLO : I
SEMESTRE ACADEMICO : 2022 - I
UNIVERSIDAD PRIVADA SAN JUAN BAUTISTA FACULTAD
DE CIENCIAS DE LA SALUD ESCUELA PROFESIONAL DE
MEDICINA HUMANA

LOS PUEBLOS ORIGINARIOS DEL PERÚ

DOCENTES RESPONSABLE DE LA ASIGNATURA MAGISTER


PEDRO CARLOS GARCIA AQUIJE – FIALIAL CHINCHA
PUEBLOS ORIGINARIOS

“Pueblos originarios» es una denominación colectiva


aplicada a las comunidades originarias de América,
corresponde a los grupos humanos descendientes de
culturas precolombinas que han mantenido sus
características culturales y sociales. La mayoría de ellos
con su lengua propia.
El uso del término se ha difundido por su empleo en
los Estudios Culturales, las cátedras universitarias y la
prensa, en los cuales se lo considera una
manera políticamente correcta de referirse a las
comunidades previamente denominadas «indígenas».
«Aborígenes» (del latín ad origine) significa que
vive en el lugar desde el origen.
«Indígenas» significa población de allí.
Una definición más descriptiva, y no limitada a los
marcos de la etimología, «Indígenas, son los
descendientes de quienes estaban en el lugar
antes de la llegada de otros que ahora
constituyen la sociedad mayoritaria y dominante.
Se definen en parte por su ascendencia, en parte
por los rasgos particulares que indican su
diferencia en relación con quienes llegaron más
tarde, y en parte por la visión que tienen de sí
mismos».
Jorge Fernández Chiti argumenta que
otra denominación común para los
pueblos autóctonos de América ―como
«indio»― es etnocentrista e impuesta por
los colonizadores como manera de
destruir su identidad. De este modo el
término «indio» (‘habitante de la India’),​ o
incluso «amerindio», refleja las erróneas
ideas de los conquistadores europeos,
quienes creían haber encontrado en el
continente americano la costa oriental de
la India.
A inicios del siglo XX, Víctor R. Haya De la Torre no tenía
problemas intelectuales para utilizar el término Indoamérica,
refiriéndose a los espacios que antes estaban bajo el dominio
español y portugués.
Decía : “Lo que une a Indoamérica es lo indígena. Todos los
habitantes de Indoamérica, aunque no sean indígenas tienen ya
algo de indígenas por el mero hecho de existir, respirar, vivir
sobre la tierra de Indoamérica
“LA CAUSA DEL INDIO ES CAUSA SOCIAL, NO RACIAL. La causa del
indígena peruano - como la del ecuatoriano, boliviano, argentino,
como la del indígena de toda América - es causa sagrada, no
porque el indio sea indio, vale decir que no sea blanco, sino
porque el indio, en su gran mayoría, es explotado. Nuestro
indigenismo no es el simplista sentimental concepto racial que
ante la estúpida afirmación burguesa de la inferioridad de razas
opone en un amargo grito de revancha la afirmación
contraria de que toda raza de color es superior a la blanca
El problema del indio no puede resolverse mediante la lucha
aislada del indígena porque no habrá solución al problema
indígena sin la victoria contra el imperialismo - que solo podrá
conseguirse mediante la estructuración de un frente de lucha
que agrupe en su seno, a todos los sectores sociales afectados
por éste - y la construcción de la unidad política de los pueblos
indoamericanos en un único estado federal.
El imperialismo en nuestros países tiene su aliado en el
latifundista, cuya clase es dueña del poder político, y cuenta con
la explotación de nuestras clases trabajadoras, especialmente
de nuestros trabajadores indígenas para hacer de ellos sus
mejores instrumentos de explotación. El imperialismo, enemigo
de nuestros países, es el peor enemigo del indio. El cristianismo
sajón ha logrado infiltrar muy profundamente en la clase
dominante de los países donde domina, muy especialmente en
los Estados Unidos, un incurable desprecio racial hacia los
hombres de color, negros o cobrizos.
Y siendo nuestras razas, según ellos ‘razas inferiores’, se deduce
cierta justificación ‘moral’ a la explotación, opresión y servidumbre
de nuestros trabajadores, no solo porque son trabajadores, sino
porque en su gran mayoría no son blancos, o, simplemente porque
no son sajones.
“El problema del indio en el Perú como en cualquier país americano
es problema económico, es problema de justicia social y ésta no
podrá realizarse mientras el imperialismo amenace la soberanía
política de nuestros países y su libertad económica. Por eso, todo
intento de liberación social en nuestros países, está relacionado con
el gran problema general que plantea el imperialismo. No hay
problemas aislados sino aspectos de uno, grande y común. De ahí
que no puede haber luchas aisladas, sino partes de un todo,
secciones de un gran partido, divisiones de un gran ejército, filas de
un gran frente: del frente único de trabajadores manuales e
intelectuales de América: contra el imperialismo yanqui, por la
unidad de los pueblos de América, para la realización de la justicia
social.”
González Prada: “La cuestión del indio más que una
cuestión racial es económica, es social”, No es el color lo
que limita el problema. Indios por sangre hay, desde
Felipillo el traidor, que son verdugos de sus hermanos
de raza. ¡Cuántas veces en eso que en el Perú se llama
Parlamento, en los ministerios y los tribunales, no se
han sentado y se sientan hombres de piel de cobre y de
conciencia negra! En mis viajes por la sierra peruana, he
visto a veces gamonales de raza india, verdugos
implacables, monstruos sanguinarios, sádicos,
despedazando las carnes de los siervos y maldiciéndolos
en quechua. Nuestra lucha por el indígena peruano y
americano, es pues, lucha contra el latifundio; no es
simple lucha de color, que blancos hay por millones
oprimidos en el mundo y hombres de piel cobriza
oprimen sangrientamente en el Perú y América.
El antropólogo José María Arguedas, fue un
indigenista que buscó revalorar esta cultura a
través de las expresiones populares, el folklore y el
arte del mundo andino. Sus propias vivencias
reflejaban el mundo del hombre andino; un
mundo sumido en la exclusión, la tristeza y el arte.
Arguedas analiza los aspectos a partir del conflicto
de castas que existe entre los vecinos (indios en el
caso peruano) y los señoritos (clase burócrata
española). Todo su trabajo se centra en este
problema, tal vez queriendo explicar así el
conflicto entre dominadores y dominados que era
muy debatido por el grupo indigenista de esa
época en nuestro país
José María Arguedas, deseaba la reivindicación de la
cultura quechua que por tanto tiempo había sido aislada
de los demás, él quería que haya un dialogo con las tres
regiones peruanas que solo habitan en un mismo Perú,
especialmente entre la clase criolla y la indígena ya que
entre ellos ha habido acontecimientos que los ha
mantenido distanciados, siempre la clase criolla estuvo por
encima de los indígenas a los cuales los utilizaba para que
los sirvieron a ellos, como empleados, eran maltratados
por parte de ellos, no los consideraban en nada, no lo
consideraban coma seres humanos sino como bestias que
no sienten ni piensan, pero raro que un presidente se haya
preocupado por una mejor calidad de vida. El Perú no solo
es costa, o lima como casi siempre ha sido, sino que es
costa, sierra y selva que juntos forman este gran país.
El hombrecito tenía el cuerpo pequeño, sus fuerzas eran sin embargo
como las de un hombre común. Todo cuanto le ordenaban hacer lo
hacía bien. Pero había un poco de espanto en su rostro; algunos siervos
se reían de verlo así, otros lo compadecían. «Huérfano de huérfanos;
hijo del viento de la luna debe ser el frío de sus ojos, el corazón pura
tristeza», había dicho la mestiza cocinera, viéndolo.
El hombrecito no hablaba con nadie; trabajaba callado; comía en
silencio. Todo cuanto le ordenaban, cumplía. «Sí, papacito; sí,
mamacita», era cuanto solía decir.
Quizás a causa de tener una cierta expresión de espanto, por su ropa
tan haraposa y acaso, también, porque no quería hablar, el patrón sintió
un especial desprecio por el hombrecito. Al anochecer, cuando los
siervos se reunían para rezar el avemaría, en el corredor de la casa-
hacienda, a esa hora, el patrón martirizaba siempre al pongo delante de
toda la servidumbre; lo sacudía como a un trozo de pellejo.
Lo empujaba de la cabeza y lo obligaba a que se arrodillara y, así,
cuando ya estaba hincado, le daba golpes suaves en la cara.
—Creo que eres perro. ¡Ladra! —le decía. etc.
Fue uno de los defensores de los españoles en la ocupación
en América en su Tratado sobre las justas causas de la
guerra contras los indios, consideró legítima y necesario el
uso de la guerra para conquistar y evangelizar a los
indígenas, sus razones fueron - La inferioridad de los
indígenas ante los españoles - Su idolatría. eran canibalismo
por sus ritos monstruosos - La difusión de la religión
cristiana Juan Ginés de Sepúlveda, diciendo que "estos
bárbaros están obligados a recibir el imperio de los
españoles, conforme a la ley de la naturaleza, y a ellos ha de
serles todavía más provechoso que a los españoles, porque
la virtud, la humanidad y la verdadera religión son más
preciosas que el oro y que la plata" y en ese sentido.
Determinar si las indígenas occidentales eran seres
humanos y verdaderas criaturas de Dios descendientes de
Adam y Eva súbditos del imperio del diablo.
El racismo durante la República
El racismo colonial justificó la dominación de la nueva élite republicana, que
en el pensamiento liberal de la época asumía igual la inferioridad étnica de los
indígenas.
En el siglo XIX se impone la ideología republicano liberal en la América libre,
pero también se difunde el denominado racismo científico, la cual la especie
humana está conformada por distintas razas: negroides, caucasoides,
mongolides, etc. Para esta corriente, la naturaleza biológica del hombre
determina su desarrollo; es decir lo innato se impone a lo cultural. Estas ideas
serán abrazadas por distintos intelectuales peruanos hasta el siglo XX.
La construcción del estado-nación pasara por homogeneizar la población. El
discurso del mestizaje se difundirá, pero encubrirá las profundas divisiones en
el país. Los proyectos modernizadores no incluirán al indígena, sino al obrero.
El futuro del país no está en esa “raza degenerada”, sino en el trabajador de la
ciudad vinculado a la producción industrial y el comercio. Bajo esa mentalidad,
el “nuevo hombre”, no es el habitante de la sierra (tradicional, atrasada), o el
criollo ligado siempre al ocio, sino el obrero mestizo que ha sido educado y
habita la ciudad.
A pesar de su discurso modernizante, el estado oligárquico
del siglo XX, conservara estructuras señoriales heredadas de
la colonia. El gamonalismo y la postración del indio, serán
denunciados por los nuevos grupos indigenistas. El racismo
peruano exhibía tanto el rechazo a una raza, como a toda
una cultura (algunos lamentaban que no se aplicaran
políticas de exterminio como en EE.UU). El gobierno
revolucionario de Juan Velasco Alvarado acabará con las
estructuras semi-feudales de la sierra peruana en 1969. Lo
cual supondrá un quiebre en el plano económico-social,
pero no el plano mental. Un gamonalismo silencioso se
desarrollara en la sociedad peruana. A pesar de todo, la
conversión del indio a campesino, supuso una reivindicación
social y política. La ciudadanía se extiende a los eternos
marginados.
El racismo en el Perú, será en realidad la discriminación
por idioma, cultura y nivel socio-educativo. Gritarle a
alguien cholo, serrano o indio, equivale a decirle
ignorante, sucio o marginal. El dinero blanquea, pero
tendrá sus límites en el origen socio-económico y los
lugares exclusivos frecuentados. Lo cholo aún conflictúa a
los peruanos, a veces conviene serlo y a veces no. Se es
más o menos cholo en relación al otro. Es mejor ser un
cholo limeño que un cholo puneño. La estética occidental
es hegemónica; se multiplican las cholas rubias y los
cholos metrosexuales. La publicidad impone arquetipos
blancos en la sociedad de consumo. El cholo con dinero
desprecia al cholo misio. Las mentalidades oscilan entre el
“mejorar la raza” y acumular más recursos para ser
(auto)aceptados.
LA INMIGRACIÓN REPUBLICANA
Surge así la ideología que consideraba al Perú “un país vacío” , que era
necesario poblar promoviendo la inmigración europea, para asegurar la
superación de las taras raciales de la población no blanca.
La inmigración en Perú es una actividad que se ha producido desde la
época del Virreinato, con españoles y africanos, a lo largo de su época
republicana y hasta nuestros días, con los movimientos migratorios más
importantes de Italia y Asia (principalmente china y luego japón) y menor
medida de alemanes, ingleses, portugueses, croatas, árabes u judíos.
El auge de las exportaciones del guano coincide con el incremento del
porcentaje de población extranjera en la capital peruana. Hacia 1857,
Lima llegó a tener un 70% de extranjeros. Los europeos que llegaron al
Perú tomaron posiciones importantes en la vida económica peruana
aunque sin llegar a penetrar en las élites. Hubo miembros de la burguesía
europea que llegaron como empleados de las grandes casas comerciales
de Europa, si bien algunos estuvieron de paso, otros tantos formaron
familias con mujeres peruanas radicando definitivamente en el Perú.
De aquí nace la idea de la existencia de una “República sin
ciudadanos” , donde una minoría se sentía la encarnación de la nación,
con el derecho de excluir a las grandes mayorías
¿Cómo sobrevivir en la jungla política peruana?, es un conjunto de
ensayos que se viene reflexionando agudamente sobre el poder, la
política y los actores que pugnan en el Perú actual enfrenta una suerte
de paradoja del “crecimiento infeliz” debido al desencuentro entre la
promesa neoliberal y la republicana. Por promesa neoliberal se
entiende básicamente el crecimiento económico y el bienestar
material que experimenta el país desde hace casi dos década, durante
la temprana república hubo un vacío de poder en al ámbito local
debido al declive de corregidores, curas y curacas que fue cubierto por
los terratenientes, que acumularon poder político gracias a la
formación de milicias con las que se plegaron a favor de los caudillos.
Estos “terratenientes con poder político” (fenómeno desconocido en la
época colonial) prolongaron la servidumbre de los indios y obstruyeron
el “imperio de la ley” en el Perú rural, haciendo imposible la
constitución de una república en sentido pleno.
Intelectual responsable de la formación del sistema educativo peruano.
Consideraba que éste debía excluir a los indios. Para él el indio era racialmente
inferior y era perder tiempo y dinero intentar redimirlo a través de la
educación, pues éste había llegado a su decadencia definitiva, a lo sumo cabía
protegerlos y defenderlos.
El pensamiento de Alejandro Deústua supone no solo una crítica al
intelectualismo y al positivismo, posiciones filosóficas dominantes en su
tiempo. Para Deústua el esfuerzo educativo del Estado debe orientarse a la
construcción de una nueva clase dirigente educada y pensante. Esto pasa,
según él, por la recuperación de una educación universitaria de calidad, pues
ella es la base y el principio de toda educación nacional, orientada a formar una
verdadera clase dirigente peruana. Deústua ejerció notable influencia en la
filosofía peruana de la primera mitad del siglo XX e introdujo en los círculos
cultos peruanos el neoidealismo europeo de principios de siglo. Esta
orientación, completamente nueva en aquellos momentos, se encuentra
plasmada en sus libros de estética. Entre sus obras destacan: El problema de la
educación, Informe sobre la enseñanza, Apuntes sobre enseñanza
secundaria, El problema universitario, La teoría de los valores y Cultura política.
La grandeza del imperio incaico
Alrededor del siglo XIII d.C. los incas se asentaron en el Cuzco, así
se da inicio al Imperio Inca, desde ahí se expandieron por el
territorio andino, logrando que el Imperio Inca dominase parte
de los actuales territorios de Perú, Bolivia, Chile, Ecuador,
Argentina y Colombia. La organización y administración impuesta
por los incas se convirtió en el Estado más importante y
poderoso antes de la presencia de los españoles.
• Una administración eficaz
• Una comunicación por servicio de correo eficiente el chasqui
• Contaban con una red de camino por todo el imperio
• Practicaban la medicina con operaciones craneanas y
especialidades
• La construcción de grandes fortalezas
• La construcción de grande irrigaciones etc.
El Santuario de Machu Picchu, una de las siete
maravillas del mundo moderno, cuenta con más
de 600 años de historia pero sólo a comienzos
del siglo XX se difundió su existencia, cuando el
explorador estadounidense Hiram Bingham
publicó el hallazgo de las ruinas incaicas en la
revista de la National Geographic.

Nuestros antepasados no “gestionaron


recursos”, ellos CRIARON el agua, el suelo, los
cultivos; pensaron en el beneficio colectivo, en
el bien común en cada una de sus obras.
José Carlos Mariátegui, pensador social que en su
libro “Siete ensayos de la realidad peruana,” primera
interpretación marxista del desarrollo económico e
histórico del Perú, caracteriza al indigenismo como
una inmensa mayoría de pueblos nativos,
singularizados no solo en el aspecto étnico; sino
también por la clase social a la que pertenecen: ellos
como los oprimidos en su propio territorio.
Para este pensador social el problema del indio no
solamente era étnico, sino y sobre todo el problema
indígena era político, social y económico que se
basaba en el problema de la tenencia de las tierras y
por tanto su solución estaba en la erradicación del
feudalismo.
Para Mariátegui había que fundir la lucha de los trabajadores
urbanos socialistas con la de los campesinos oprimidos por el
feudalismo, las tradiciones de trabajo en común y explotación
colectiva de la tierra podían jugar un papel de facilitador de la lucha
en común contra el poder central, en todos los casos era capitalista
en términos políticos, aunque se sirviese de métodos y relaciones
semifeudales en el campo.
Para el marxista peruano la tarea no era liberar a los indígenas del
feudalismo llevándolos al capitalismo, dado que el capitalismo mismo
se encargaba de preservar las condiciones de opresión, más bien se
trataba de luchar directamente por un régimen socialista:
“hay que dar a las poblaciones indígenas o negras esclavizadas
certidumbre de que solamente un gobierno de obreros y campesinos
de todas las razas que habitan el territorio, los emancipara
verdaderamente, ya que este solamente podrá extinguir el régimen
de los latifundios y el régimen industrial capitalista y librarlo
definitivamente de la opresión imperialista”.
En 1968, se estableció el gobierno institucional de las
Fuerzas Armadas, presidido por el militar Juan Velasco
Alvarado en representación de las instituciones militares.
Este gobierno fue de corte autoritario y verticalista; se
condujo bajo la figura de la revolución, el corporativismo
y la democracia social, junto con el nacionalismo y la
antioligarquía
El 24 de junio de 1969, Velasco Alvarado promulgó la ley
de reforma agraria más importante de la historia de Perú.
Esta contempló la eliminación tanto de latifundios como
de minifundios para forzar la creación de cooperativas
agrarias, para lo cual se determinó la expropiación de
tierras a sus entonces dueños, para después pasar a
redistribuirlas a los campesinos que las trabajaban, hasta
la fecha explotados por sus patrones.
La reforma agraria es considerada como la culminación de una larga
lucha de los campesinos por la tierra. El ideal que seguía era dar en
propiedad a cada familia campesina un área de cultivo que le sirviese
para mantenerse y además producir para el mercado nacional. La
aplicación general de la reforma agraria consistía en estatizar las
tierras más productivas; expropiar, repartir y formar cooperativas con
las tierras de importancia secundaria. La necesidad de mantener los
niveles de producción demandaba que tras la expropiación de las
tierras se continuara con las economías de escala, la parcelación de las
haciendas hubiera conducido a la ruina de una industria agrícola. La
reforma agraria fue aplicada en la costa y en la sierra. Aun cuando no
alcanzó a ser aplicada en la selva, en los años del gobierno militar se
dieron dos normas importantes desde el punto de vista del acceso a la
tierra y de seguridad de la tenencia. En 1974 el gobierno militar
promulgó la Ley de Comunidades Nativas y Promoción Agraria de las
Regiones de la Selva Alta y Selva Baja, para regular el acceso a la tierra
en la región amazónica.
La reforma educativa fue dirigida por el general Alfredo
Carpio Becerra. La educación fue considerada como un
factor decisivo para la consolidación de las reformas
estructurales, para una verdadera transformación de la
sociedad era necesaria una reforma educativa
La visión de la educación que se tenía en el gobierno incluía
no solo al trabajo realizado en los centros educativos, sino
que se extendía a todo lo que influyera en la formación de
individuos. Así, hubo un énfasis en la necesidad de
incorporar a la comunidad al proceso educativo, lo que se
vio reflejado en la creación organismos como los Núcleos
Educativos Comunales, cuyo principal motor era incentivar
la movilización y participación popular en la educación. La
integración de la comunidad en los esfuerzos educativos
iba más allá de la escuela, se veía la obra educativa como
una responsabilidad colectiva.
POBLACIÓN INDIGENA AMERICANA
En un reciente estudio, denominado Latinoamérica Indígena en
el Siglo XXI, realizado por el Banco Mundial, se expusieron los
aspectos más importantes de la evolución de la situación
económica, social y demográfica de la población indígena en
Latinoamérica.
los últimos censos se encontraron alrededor de 42 millones de
habitantes indígenas en la región en 2010, de los cuales más del
80% se encuentran en México, Guatemala, Perú y Bolivia.
A pesar de que en los primeros 10 años del siglo XXI salieron casi
70 millones de personas de la pobreza en Latinoamérica, la
población indígena no se benefició en la misma proporción. Las
comunidades indígenas representan aproximadamente un 8%
de la población total de la región, al mismo tiempo representan
el 14% de personas pobres y el 17% de personas en pobreza
extrema.
Los PIA son las poblaciones Isconahua, Mashco Piro,
Machiguenga, Mastanahua, Murunahua y Chitonahua; por
otro lado, están los PICI que son los pueblos Yora o Nahua,
Machiguenga y Amahuaca. Un acontecimiento histórico
que cerró las vías de comunicación entre los pueblos
aislados y la sociedad occidental fue la época del caucho,
durante el fin del siglo XIX y principios del XX, en donde se
explotó en condiciones de esclavitud a cientos de
indígenas, lo cual ocasionó su huida.
No obstante, el alejamiento se está reduciendo porque las
empresas extractivas están cada vez más interesadas en
sus territorios. Se tiene registro, según Deza, de que en las
reservas territoriales Murunahua e Isconahua existe la tala
ilegal de madera y que en otras áreas protegidas se practica la
minería ilegal.
Aun hoy entonces, todo lo que
concierne a los pueblos
originarios en el Perú, no es un
tema cerrado, sino abierto a
desarrollos y cambios.
Al final de la sesión, al termino de la sesión será capaz de analizar y
comprende la situación de los diversos pueblos originarios del Perú y las
migraciones

1. Elabora un informe, de los pueblos que se le denomina originarios


2. Analiza y argumenta sobre el problema del indio peruano según los
antropólogos peruanos
3. Elabora un informe del gobierno que reivindicó al campesinado
peruano
4. Argumenta los motivos del incremento del racismo y la discriminación
en la sociedad peruana
5. ¿Cuál es su opinión sobre las reformas de Juan Velasco Alvarado?

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