Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Es por esto y porque no está demostrado que cumplan una supuesta función de
aprendizaje de la marcha (Kauffman y Ridenour, 1977; Greensher y Mofenson, 1985),
por lo que los pediatras, bien desaconsejan su adquisición y uso bien indican la
conveniencia de prevenir a los padres acerca de los riesgos que implica su utilización
(Joffe y Ludwig, 1988; Rieder et al., 1986; Johnson et al., 1990; Partington et al. 1991;
Greensher y Mofenson, 1985; Fazen y Felizberto, 1982; Gommans y Stewart, 1985).
Casas, C., Rodríguez, T., Castro, F.J., López, M., Fernández, M.D y Puche, A. (1991).
Epidemiología de los traumatismos craneoencefálicos en la infancia. Anales Españoles
de Pediatría, 35(46), 125-131.
Cervantes, A., Borrajo, E., Canteras, M., López, M. y Pajarón, M (1990). Importancia de
los accidentes en la infancia. Datos de un estudio regional. Anales Españoles de
Pediatría, 32, 493-498.
Chiaviello, C.T., Christoph, R. A. y Randall, G. (1994). Lesiones relacionadas con los
andadores infantiles: estudio prospectivo sobre gravedad e incidencia. Pediatrics, 37,
359-361.
Fazen, L.E y Felizberto, P.I. (1982). Baby walker injuries. Pediatrics, 70(1), 106-9.
James, W. (1988). Despite new regulations, caution a must when baby-walkers are
used. Cannabis Mededical Association Journal, 139, 73-74.
Joffe, M. y Ludwig, S. (1988). Stairway injury in children. Pediatrics, 82(3), 457- 461.
Kauffman, I.B. y Ridenour, M. (1977). Influence of infant walkers on onset and quality
of walking pattern of locomotion: An eletromyographic investigation. Percept Motor
Skills, 45, 1323-1329.
Partington, M.D., Swanson, J.A. y Meyer, F.B. (1991). Head injury and the use of baby
walkers: a continuing problem. Academic Life in Emergency Medicine, 20, 652-654.
Rieder, M.J, Schwartz, C. y Newmann, J. (1986). Patterns of walker use and walker
injury. Pediatrics, 78(3), 488-493.