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EL PUENTE DE LOS SUSPIROS

Una obra costumbrista moderna barranquina millenial de Federico Abrill

Inspirada en la canción “El Puente de los Suspiros” de Chabuca Granda


Temporada POR CHABUCA – Microteatro Lima

© Federico Alberto Abrill Alfaro

Prohibido la representación y reproducción del presente material de manera total o


parcial sin previa autorización del autor.

E-mail: federico.abrill@gmail.com
PERSONAJES

ELENA, una joven entre 25 a 30.


ÉL, un aparente pintor / poeta de la misma edad.

PUENTE, una voz en off

LUGAR

A punto de cruzar el Puente.

TIEMPO

Presente.
“ES MI PUENTE UN POETA QUE ME ESPERA”
Chabuca Granda

0.

El público entra a la sala. Escuchamos una grabación que dice “Pide un


deseo”. Una y otra vez.

1.

ELENA entra, sola.

ELENA
A veces todo empieza con algo que uno quiere hacer.
Pero no se atreve.
Algo que uno quiere decir.
Pero no es capaz de articular las palabras.
O algo que quisiera desear.
Pero no puede porque le da mucho—

ELENA es interrumpida por una llamada.

ELENA
Franco, ¿por qué me llamas? No me dejas ni pensar.
¿Qué quieres?

¿No quieres que me vaya o no quieres que me vaya molesta?

Yo sé que es tu cumpleaños.
Te saludé, fui a la fiesta, te canté el cumpleaños. Ya está.
YA ME PUEDO IR.
¿Ah, sí? ¿Por qué no te vas entonces con tu amiga esa?
Aunque dudo que sea tu amiga. Estaban tan cerca. Muy cerca. DEMASIADO
cerca, diría yo. Te podría haber contagiado algo, ¿sabes?
Ah.
Bien.
Entiendo.
Según tú…
¿Qué es lo que estabas haciendo?

PUENTE (OFF)
Pide un deseo.

ELENA
Ajá. Okey. Entonces esta chica apareció mientras yo iba a comprar dos gin
para ambos – quiero recalcar que estaba comprando los tragos para los dos -
y de pronto, comenzaron a conversar y te pidió ayuda porque es una turista – y
pobrecita, está sola - y no conoce la ciudad.
Fíjate.
Yo tengo una pregunta: ¿Desde cuándo te convertiste en un guía turístico si
usas Google Maps para llegar a todas partes así sea a la esquina, pedazo de
imbécil?
¡Ah! ¿YO TE ESTOY OFENDIENDO?
Disculpa. No me había dado cuenta que te había ofendido por ir a comprarte
un trago mientras tú hablabas con esa…
No sé si era puta porque de repente, ella no tenía idea que yo existía. Porque
ella sabía que yo existía. Porque si es así, me disculpo y vuelvo.
Esa es una buena pregunta.
¿Le dijiste que tenías novia?
No, no. No hables tanto. Necesito saber. PUNTUALMENTE.
¿Le dijiste que tenías novia?
Sí o no.
Responde.
¡Franco, responde! ¡Sí o no!
¿Sabes qué deseo?
Deseo que…
Deseo…
Deseo que te vayas a la mierda.
No, eso es muy metafórico. Muy poético para ti.
Deseo que no se te pare.
Eso deseo.
Chau.

PUENTE
Pide un deseo.

Cuelga. Decepcionada. En eso, aparece ÉL. Estaba sentado todo este tiempo
a su lado. La estaba dibujando.

ÉL
No te muevas.
ELENA
¿Qué?

ÉL
No te muevas. Estoy terminando tu retrato.

ELENA
Mi retrato.

ÉL
Sí, tu retrato. No te mueves. Solo un rato.

ELENA
No tengo nada por si acaso. No tengo dinero. Para. Deja de dibujar.
Mi celular tiene la pantalla rota. Así que si quieres eso, tampoco es tu día.

ÉL
No es un robo. Es un retrato.

ELENA
¿Y qué estás haciendo aquí trabajando? Son casi las tres de la mañana.

ÉL
Dibujar no es un juego. No te muevas, te lo ruego.

ELENA
¿Dibujando? Ya te dije que no tengo plata.

Por si acaso, no venderás cigarros. Me vendría bien un pucho.
Odio a Franco. Me provoca fumar. Ni siquiera fumo.
Odio todo esto.

ÉL
No vendo cigarros, caramelos ni cerveza en lata.

ELENA
Pero seguro luego me querrás cobrar. Me darás la hoja y me dirás: Una
colaboración. Y claro, esa colaboración no va a ser la barra de caramelos que
tengo en la cartera, ¿verdad?

ÉL
Allí te equivocas, no quiero plata.
Hay cosas que uno hace por cobrar.
Hay otras que salen como un río a una quebrada.
Solo es cuestión de bien mirar.

ELENA
¿También me vas a cobrar por las rimas?

ÉL
Soy el árbol caído.
Soy el follaje enredado.
Soy el madero cautivo.

ELENA
Mira, señor extraño con el lapicito. No quiero interrumpir su arte. Ni tampoco
quiero… Sé gritar muy bien. Si me hace daño. Aunque no me está haciendo
daño. Esta noche es muy confusa. Estoy apurada, mire.
Gracias por el dibujo pero no, gracias.
Sí. Eso. Gracias. No gracias.
Thank You. Merci. Me voy.

ÉL
Escuché tu conversación telefónica. Aunque conversación no es la palabra que
mejor ataña.

ELENA
¿Mi conversación?

ÉL
Ese tal Franco – el que llama - no parece nada sincero.

ELENA
¿Qué parte escuchaste?

ÉL
Excepto esas partes donde no gritabas.
Que creo que fueron muy pocas.
Casi toda. Hasta la parte donde te lamentabas.

ELENA
No deberías meterte en las conversaciones ajenas.

ÉL
Yo no me metí en nada. Son las rocas.
Que hacen un buen eco mientras te quejabas.
ELENA
Ya entiendo. Éste es tu modus operandi. Escuchas las conversaciones de
chicas que están desesperadas y luego les dices que no se muevan para luego
venir con tus pinturas y tus palabras bonitas para robarles su cartera, lanzarlas
por el puente y dejarlas sin ayuda.

ÉL
Creo que ves mucha televisión.
Me basta con tu atención.

ÉL se para.

ELENA
Tengo gas pimienta.

ÉL
Tranquila. Yo solo llevo lápiz y papel.

ELENA
Un lápiz puede ser letal.

ÉL
En manos adecuadas, quizás.
Yo no quiero ser un enemigo.
Soy más un amigo que escucharás.
Esta eres tú.

ÉL le muestra el dibujo. Es un dibujo de un universo. Las luces cambian a una


atmósfera mágica.

ELENA
¿Qué significa eso?

ÉL
Eres un universo entero, Elena.
¿No te das cuenta? Un universo entero
Y este lugar te puede dar de todo.
Esperanza. Sueños. De cualquier modo.
Basta un suspiro y el puente te da tu deseo.

ELENA
Esto me pasa por tomar demasiado.
ÉL
Esto te pasa por no saber utilizar los deseos.
Que no se le pare a tu ex.
Eso es muy trivial.
Da un poco de vergüenza teniendo tanta oportunidad.
Convendría algún encanto más especial.

Las luces cambian. Es un momento mágico.

ELENA
¿Qué está pasando?

ÉL
¿No es obvio?

ELENA
Si fuera obvio, no lo preguntaría. ¿Por qué de pronto la noche está cambiando?
¿Qué es ese olor? ¿Es madera?

ÉL
No puedes soltar un deseo así de simple cerca a este lugar.
Debes desear algo diferente. Algo interesante. Algo que vamos a afinar.
Algo para ti, para comenzar.

ELENA
¿Algo para mí? Mira, no necesito en este momento esta charla moralista de
autoayuda. Si tengo que desear algo para mí, quiero… Que explote su cabeza.
No, ¿sabes qué quiero?
Que explote su cabeza en este mismo instante. En frente de esa chica.
Quiero que explote—
¿Por qué estoy hablando contigo?

ÉL
Qué pereza tanto divagar.
En alguien que no vale la pena tratar.
Ahora estás frente a un deseo que se puede cumplir.
¿Por qué gastarlo en alguien que solo te hace sufrir?
De mejor uso vendrá si es para ti.

ELENA
Yo no estoy usando mi deseo para él. Yo solo pedí que… Bueno, pero es
porque… Porque no sé.
ÉL
Es destreza.
De dejar de mirar al otro en vez de mirar en ti.
El puente te da un deseo, Elena.
Pide un deseo. Aguanta la respiración. Cruza el puente. Vive con la decisión.

ELENA
Entiendo. Esto es un momento mágico. Y la única forma en que me dejes en
paz e irme a mi casa es si te hago caso, ¿verdad?
Entonces debo desearle algo lindo. Debo desearle algo bueno. Debo desearle
a ese hijo de puto algo que le guste.

ÉL
A ti, Elena. A ti.
¿Qué es más importante en esta vida?
Sé sincera.
¿Franco o Elena?

ELENA
Yo.

ÉL
Cuesta cuando no se está seguro.
Decirlo de golpe es duro.
Pero hazte la costumbre.
Comienza por ti.
Recuérdate a ti.
E irás de esta quebrada a la cumbre.
Y poco a poco, se te hará costumbre.

ELENA
¿Quién eres tú?

ÉL
Pensé que te lo había dicho.
Soy el madero cautivo.
Soy el árbol caído.
Soy el follaje enredado.
Soy poeta, puente y suspiro.

ELENA
Es que esto es de nunca acabar.
Una va por la vida, fuerte y decidida.
Pero el amor te hace estallar.
Y cuando menos se le pida,
Viene el objeto de tu deseo y te tira.
Bueno fuera de la manera divertida.
Te tira del precipicio sin dejarte preparar.
Maldito, rufián, escarabajo, bicho maltrecho, monstruo de dos patas, cuco, mal
parido, hijo de puta, hijo de dos putas, tres putas, mil putas, motherfucker,
basura inmunda, rata de—
Disculpa, disculpa.
Es la hiel que no deja de salir.
Tienes razón.
Cuesta alejarse del que te hace sufrir.
Porque te das cuenta que eres tú la principal culpable.
¿Por qué estoy rimando?

ÉL
Soy el madero cautivo.
Soy el árbol caído.
Soy el follaje enredado.
Soy poeta, puente y suspiro.

ÉL le sonríe.

ELENA
Tienes razón. Es mejor que lo suelte.
Si total, nunca fue mío.
Y yo tampoco fui suya.
Es mejor que lo suelte.
Gracias por ayudarme, puente, dibujante, ser… de luz. Qué bueno que me
encontré conmigo. Me diste la oportunidad de recuperar mi deseo.

ÉL
¿Qué cosa?

ELENA
No te hagas. De recuperar mi deseo.

ÉL no entiende.

ELENA
Deja de jugar.

ÉL
Señorita, por favor—
ELENA
Gracias. Muchas gracias. ¿Te puedo dar un abrazo? ¿Podemos quizás
tomarnos una foto?

ÉL
¿Qué le pasa? Esto de las drogas hace que la gente se ponga en un plan.

Le da hipo.

ÉL
Por eso yo prefiero tomar. El alcohol mata todo.

ELENA
No entiendo.

PUENTE (OFF)
Pide un deseo.

ELENA
¿Eres tú?

PUENTE (OFF)
Pide un deseo.

ELENA
Tengo un deseo.
Sí.
Tengo un deseo. Eh…

Entra un mensaje. ELENA mira su celular.

ELENA
Déjame desear en paz, Franco.
No, no te voy a contestar ni escribir ni mandar un meme, ¿me entendiste?
Te voy a dejar… EN VISTO.
Porque estoy en paz conmigo misma, porque estoy balanceada, porque
estoy… No me mires así. No te voy a contestar.
No le contestes, Elena. No le contestes. No le contestes.

PUENTE (OFF)
Pide un deseo.

ELENA
¡Un momento! No me presiones.
Estoy cansada de correr cuando me necesitas. Porque eso no te voy a
contestar. Porque ahora debo yo correr para mí.
Lejos de aquí.
Y pedir algo bueno. Algo para mí. Algo que construya.
Un puente.
Aunque muy en el fondo quisiera que nunca se te pare así no puedas—

PUENTE (OFF)
Pide UN DESEO.

ELENA
Ya entendí.
Primero yo.
Primero mi deseo.
Y tú refundido en mis mensajes. Refundido. Me gusta esa palabra.

ELENA guarda su celular.

PUENTE (OFF)
Pide un deseo. Aguanta la respiración. Cruza el puente. Vive con la decisión.

ELENA
Ya sé qué pedir.
Bien.

Cierra los ojos. Desea en su mente. Suena “Puente de los Suspiros”. Cruza el
puente. Oscuro.

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