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Carrera de Derecho
Tarea #2
Alumna:
Curso:
CI 1-9
Profesor:
Fecha de entrega:
Por un lado van a venir los más suaves y van a empezar a instituir reformar para tratar
de solucionar aquellas peleas coyunturas: las más urgentes, las más puntuales para evitar
que se desarrollen en procesos históricos de transformación de la sociedad
Y por otro lado a los más tiranos que van a jugar la carta del orden público y nos
quieren decir que cualquier intento de alzamiento del pueblo es contario al orden publico
y por lo tanto hay que detenerlo y bajo esa carta del orden publico es que se han levantado
un montón de gobiernos tiránicos y despóticos alrededor de la historia y ante eso debemos
estar atentos.
Cuando se empiezan mucho a jugar y reiteradamente seguir jugando la carta del orden
público es porque el pueblo se está moviendo mucho, tanto porque generan estas personas
la preocupación por el orden público es que el pueblo esta empezando a despertar de su
letargo y va a convertiré, a apropiarse de este poder originarios constituyente.
También menciona Jean-Jacques Rousseau de que este pacto social no sea una vana
fórmula, el autor encierra tácitamente el compromiso, que por sí solo puede dar fuerza a
los otros, de que, cualquiera que se rehusé a obedecer a la voluntad general, se le obligará
a ser libre.
Simplificando: el hombre pierde su libertad natural y el derecho limitado a todo cuanto
desea y puede alcanzar, ganando en cambio la libertad civil y la propiedad de lo que
posee. Para no equivocarse acerca de estas compensaciones, es preciso distinguir la
libertad natural que tiene por límites las fuerzas individuales de la libertad civil,
circunscrita por la voluntad general; y la posesión, que no es otra cosa que el efecto de la
fuerza o del derecho del primer ocupante, de la propiedad, que no puede ser fundada sino
sobre un título positivo.
El derecho del primer ocupante, aunque es más real que el de la fuerza, no es verdadero
derecho sino después de establecido el de propiedad. El hombre tiene naturalmente
derecho a todo cuanto le es necesario; pero el acto positivo que le convierte en propietario
de un bien cualquiera, le excluye del derecho a o demás. Adquirida su parte debe limitarse
a ella sin derecho a lo de la comunidad. He allí la razón por la cual el derecho de primer
ocupante, tan débil en el estado natural, es respetable en el estado civil. Se respeta menos
por este derecho lo que es de otros, que lo que no es de uno.
Terminaré este capítulo y este libro con una advertencia que debe servir de base a todo
el sistema social, y es la de que, en vez de destruir la igualdad natural, el pacto
fundamental sustituye por el contrario una igualdad moral y legítima, a la desigualdad
física que la naturaleza había establecido entro los hombres, las cuales, pudiendo ser
desiguales en fuerza o en talento vienen a ser todas iguales por convención y derecho.
“El acuerdo entre dos intereses particulares se forma por oposición al de un tercero”
menciona Jean-Jacques Rousseau pero, hubiera podido agregar que el acuerdo de todos
los intereses se realiza por oposición al interés de cada uno. Si no hubiera intereses
diferentes, apenas si se comprendería el interés común, que no encontraría jamás
obstáculos; y la política cesaría de ser un arte.
Si el Estado o la ciudad no es más que una persona moral cuya vida consiste en la
unión de sus miembros, y si el más importante de sus cuidados es el de la propia
conservación, preciso le es una fuerza universal e impulsiva para mover y disponer de
cada una de las partes de la manera más conveniente al todo. Así como la naturaleza ha
dado al hombre un poder absoluto sobre todos sus miembros, el pacto social da al cuerpo
político un poder absoluto sobre todos los suyos. Es éste el mismo poder que, dirigido por
la voluntad general, toma, como ya he dicho, el nombre de soberanía.
Las leyes que regulan esta relación toman el nombre de leyes políticas y también el de
leyes fundamentales, no sin razón, si estas leyes son sabias, porque si no hay en cada
Estado más que una manera de regularla, el pueblo que la encuentra debe conservarla;
pero si el orden establecido es malo, ¿por qué considerar como fundamentales leyes que
le impiden ser bueno? Además, en buen derecho, un pueblo es siempre dueño de cambiar
sus leyes, aun las mejores, pues si le place procurarse el mal ¿quién tiene derecho a
impedírselo?
El contrato social es aquel pacto que une la sociedad y la mantiene unidad y que está
enfocada en básicamente en el bienestar, Jean-Jacques Rousseau declara que las
personas originalmente están solas, que el estado natural seria estar solo y que la sociedad
entonces sería un avance en este estado natural. Jean-Jacques Rousseau está teniendo en
cuenta solamente los conocimientos de su época ahora pero la sociedad es algo incluso
previo a que el Homo sapiens fuera Homo sapiens ya que incluso los animales forman
sus sociedad, es muy propio de los mamíferos esta vida agregaría.