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Análisis de datos Psico21

Introducción

Se presentan los datos recolectados por medio de la aplicación del instrumento para identificar y
caracterizar el rendimiento escolar dentro del proceso de alfabetización de niños en el primer ciclo
educativo en condiciones de desnutrición. Los datos obtenidos han sido ordenados en función a cada
objetivo específico planteado y su análisis se muestra a continuación:

1- Determinación de los niveles de desnutrición de los niños que conforman la muestra de la


investigación

Para el alcance del primer objetivo de la presente investigación, el cual fue determinar los niveles de
desnutrición de los niños que conforman la muestra, inicialmente se conoció la edad de dichos sujetos,
la estatura y peso, el índice de masa corporal, y el estado nutricional de cada uno de los infantes. En la
Tabla 1 se presentan los resultados obtenidos.

Tabla 1. Determinación de los niveles de desnutrición de los niños de la muestra de la investigación.

Centímetros Peso
Niño Edad (cm) de Kilogramos IMC Estado
estatura (kg).
Miguel 7 años y 1 Desnutrición
122 18 12.1
Ángel mes severa
6 años y 8 Desnutrición
Juan Carlos 120 16 11.1
meses severa
8 años y 2 Desnutrición
Camila 128 17 10.4
meses severa
Juan 7 años y 6 Desnutrición
125 20 12.8
Manuel meses moderada
5 años y 3 Desnutrición
Valentina 111 15 12.2
meses moderada
5 años y 9 Desnutrición
Sofía 114 13 10.0
meses severa
Desnutrición
Juan Pablo 6 años y 0 116 17 12.6
moderada
6 años y 9 Desnutrición
Ignacio 120 18 12.5
meses moderada
7 años y 3 Desnutrición
Alma 122 15 10.1
meses severa
Santiago 5 años y 8 114 14 10.8 Desnutrición
meses severa
6 años y 5 Desnutrición
Valeria 118 17 12.2
meses moderada
7 años y 2 Desnutrición
Estefanía 122 16 10.7
meses severa
Desnutrición
Laura 8 años y 4 129 19 11.4
severa
7 años y 9 Desnutrición
Rafael 126 21 13.2
meses moderada
8 años y 1 Desnutrición
Marcos 128 20 12.2
mes severa
7 años y 6 Desnutrición
Irene 124 19 12.4
meses moderada
8 años y 4 Desnutrición
Graciela 129 19 11.4
meses severa
Luis 7 años y 11 Desnutrición
127 18 11.2
Eduardo meses severa
8 años y 3 Desnutrición
Isabella 128 21 12.8
meses moderada
7 años y 9 Desnutrición
Daniela 125 20 12.8
meses moderada
8 años y 8
Desnutrición
Patrik meses de 131 20 11.7
severa
edad
7 años y 8
Teresa 125 21 13.4 Normal
meses
8 años y 10 Desnutrición
Rodrigo 132 23 13.2
meses moderada
7 años y 6 Desnutrición
Estefano 125 18 11.5
meses severa
5 años y 9 Desnutrición
Oliver 115 15 11.3
meses severa
6 años y 1 Desnutrición
Leonardo 117 17 12.4
mes moderada
6 años y 5 Desnutrición
Maximo 119 18 12.7
meses moderada
5 años y 1 Desnutrición
Elisa 110 13 10.7
mes severa
5 años y 2 Desnutrición
Samuel 112 15 12.0
meses severa
7 años y 3 Desnutrición
Biamca 122 17 11.4
meses severa
7 años y 8
Juliana 125 21 13.4 Normal
meses
6 años y 8 Desnutrición
Luciano 120 17 11.8
meses severa
7 años y 2 Desnutrición
Leire 121 16 10.9
meses severa
7 años y 5 Desnutrición
Jorge 124 19 12.4
meses moderada
8 años y 5 Desnutrición
Martha 129 18 10.8
meses severa
7 años y 8 Desnutrición
Alejandra 125 19 12.2
meses moderada
7 años y 3
Diego 123 20 13.2 Normal
meses

De acuerdo con Wisbaum (2011), el índice de desnutrición se puede determinar mediante dos métodos:
el primero, la observación directa, a través de la cual se pueden identificar a aquellos niños
extremadamente delgados o con las piernas hinchadas; y el segundo método consiste en el
conocimiento de la edad y en la medición de talla, peso y /o del perímetro del brazo, para
posteriormente ser comparados con los estándares de referencia.

Aun cabe señalar las manifestaciones de la desnutrición en los niños: son más pequeños de lo que
deberían ser de acuerdo con su edad, pesan poco para lo que corresponde a su altura, y tienen un peso
inferior al peso normal para su edad (Wisbaum, 2011).

Se puede observar en la Tabla 1 que de los treinta y siete (37) niños participantes, apenas tres
registraron un estado normal de nutrición, lo que representa un 8.11% de la totalidad de infantes
estudiados. Así mismo, se obtuvo que un 37.84% de la muestra (catorce infantes analizados) registraron
un estado de desnutrición moderada. Según Wisbaum (2011), un niño con desnutrición moderada pesa
menos de lo que debería según lo que corresponde por su altura.

Por otra parte, el 54.04% de los niños analizados presentaron un estado de desnutrición severa, lo que
representa una cantidad de veinte niños. De acuerdo con Wisbaum (2011), un niño con desnutrición
severa o grave tiene un peso muy por debajo del patrón de referencia según su altura. Según la misma
fuente, este tipo de desnutrición es el más grave, puesto que trastorna todos los procesos vitales del
infante, y eleva el riesgo de mortalidad nueve veces por encima del correspondiente a un niño en estado
normal de nutrición.

A continuación se presenta en la Figura 1 los porcentajes de niños con condición normal de nutrición,
con estado de desnutrición moderada y con estado de desnutrición grave.

Figura 1. Expresión porcentual del estado de nutrición de los infantes evaluados


Como se observa en la Figura 1, el 91.89% de los niños evaluados presentaron un estado de
desnutrición, distribuyéndose de la siguiente manera: el 37.84% de los niños evaluados presentaron
desnutrición moderada, y el 54.05% registró una desnutrición severa, siendo esta la condición
nutricional predominante.

Hay que aclarar que Wisbaum (2011) enfatiza que las manifestaciones de la desnutrición están
vinculadas al tipo específico de carencias nutricionales. Si dicha carencia ha estado presente durante un
tiempo extendido, se refleja en la altura del niño. Por otro lado, si la manifestación de la desnutrición
está relacionada con el peso, entonces se trata de carencias agudas. En base a ello es que se pueden
establecer las diferentes categorías de desnutrición.

2- Identificación y caracterización del rendimiento escolar dentro del proceso de alfabetización de


niños en el primer ciclo educativo en condiciones de desnutrición

Para el alcance del segundo objetivo específico, el cual fue identificar y caracterizar el rendimiento
escolar dentro del proceso de alfabetización de niños en el primer ciclo educativo en condiciones de
desnutrición, se llevaron a cabo una serie de entrevistas a diez docentes, seis de sexo femenino y cuatro
de sexo masculino, con edades comprendidas entre los 29 y los 45 años de edad, con experiencia desde
2 hasta 20 años, entre los que habían profesorados en educación primaria, profesorados en educación
inicial, licenciados en educación y licenciados en educación primaria. Se realizaron preguntas de
presentación, contenido y cierre. A continuación se presentan las respuestas a las seis preguntas de
contenido y a la pregunta de cierre.

- Primera pregunta de contenido: ¿Ha recibido en su clase casos de niños con desnutrición?
¿Cuántos?

Con respecto a esta pregunta, todos los docentes entrevistados afirmaron tener o haber tenido alumnos
con problemas de desnutrición. Las cantidades que señalaron se encontraron dentro del rango de dos a
seis niños desnutridos en las aulas, como se puede observar en la Figura 2. Específicamente, dos
docentes señalaron tener cuatro niños con problemas de desnutrición, otros dos maestros respondieron
tener seis alumnos desnutridos, así como también dos docentes señalaron tener tres estudiantes con ese
mismo estado. Por otra parte, tres maestros señalaron tener dos niños con estado de desnutrición,
mientras que solo uno de los entrevistados reportó tener cinco infantes desnutridos.

Figura 2. Resultados de la primera pregunta.


Cade señalar que, según Rodrigo (2004) que las dos terceras partes de la población a nivel mundial, ha
tenido por lo menos un episodio de desnutrición, y según Wisbaum (2011), aun cuando la nutrición es
un derecho fundamental establecido en la Convención sobre los Derechos del Niño, la desnutrición
continua siendo una amenaza para la supervivencia, la salud, el crecimiento y el desarrollo de las
capacidades de los niños a nivel mundial, así como también representa una amenaza para el progreso
de sus respectivos países.

- Segunda pregunta de contenido: ¿Cómo clasificaría el tipo de rendimiento de estos niños?

Se presentan en la Tabla 1 las respuestas a dicha pregunta por parte de los docentes entrevistados.
Como se puede observar en la misma, nueve de los diez docentes clasificaron el rendimiento de los
niños con desnutrición como bajo o deficiente y sólo uno de ellos señaló que presentaban un
rendimiento escolar regular.

Entre los docentes que respondieron que los niños que presentaban un cuadro de desnutrición tenían un
rendimiento bajo en comparación con aquellos niños con condiciones normales de nutrición, ocho de
ellos señalaron que estos se encontraban continuamente desconcentrados, distraídos, cansados,
desmotivados, sin energía, sin entusiasmo, y no solían involucrarse en las actividades extracurriculares.
Del mismo modo, alegaron que estos niños solo pensaban en la hora de la comida y se distraían por el
hambre que tenían.

Así mismo, señalaron que estos niños no contaban con las condiciones físicas y mentales para poder
aprender. Aunque estos niños quisieran aprender, se les dificultaba mucho comprender las lecciones, se
distraían y se sentían continuamente agotados, por lo que requerían de una mayor atención y de que le
explicaran varias veces lo contenidos. De igual manera, muchos no hacían las tareas para el hogar
porque se les olvidaba hacerlas, o sino la hacían pero las dejaban incompletas, atrasándose así en el
programa escolar.

También, los docentes afirmaron que los alumnos con problemas de nutrición se quejaban de la
cantidad de contenido, señalándolo como demasiado. Además, para cumplir con los objetivos escolares
estos chicos tenían que esforzarse mucho más que los demás niños, así como también para prestar
atención, para concentrarse, y para comprender y analizar los temas.

Docente Respuesta
1 “Efectivamente tienen un rendimiento menor que el resto de los niños que gozan de buen
estado de salud, ya que estos niños están constantemente cansados, distraídos, pensando
seguramente en que tienen hambre o cuando llegara la hora de la comida, por lo que no
tienen la concentración adecuada para aprender el tema que se está dando en el aula.
Además tienen una notable desmotivación por las actividades que se están realizando, las
realizan por hacerla y simplemente cumplir con lo que deben hacer pero sin entusiasmo
alguno de efectuarlas”
2 “Definitivamente el tienen un rendimiento mucho menor que en comparación con los otros
niños, es evidente que no van al ritmo de la clase y les cuesta mucho más involucrarse
activamente en las actividades del aula así como en actividades recreativas”.
3 Bajo, definitivamente lo clasifico como un rendimiento bajo, ya que no están al cien por
ciento con sus capacidades físicas y mentales para poder analizar y comprender la
información que se les quiere transmitir. La mayoría del tiempo se encuentran pensando en
la hora de la comida y fatigados, imagino debe ser la falta de energía por la desnutrición
que presentan”.
4 “Deficiente, aunque ellos quieren aprender y tienen entusiasmo con la clase se les dificulta
aprender las lecciones, por lo que se atrasan con las actividades que se les envía a casa, y
hay que prestarle atención constante para asegurarse que están comprendiendo la clase así
como explicarle los temas varias veces. Por lo general debo hacer un resumen de lo que
vimos anteriormente para que ellos refresquen la memoria y puedan rendir un poco más, y
revisar si realizaron las asignaciones enviadas para su casa, ya que en la mayoría de los
casos no traen la tarea completa o indican que se les olvido hacer la tarea, hay que tener
mucha paciencia en la enseñanza de los alumnos con problemas de desnutrición”.
5 “Definitivamente tienen un bajo rendimiento escolar”.
6 “Lo clasificaría regular”.
7 “Lo clasifico como deficiente no rinden al máximo de sus habilidades ya que se sienten
constantemente agotados y se encuentran distraídos, en su hogares no realizan las debidas
asignaciones por lo que se atrasan con el programa escolar. Además a veces presentan poca
tolerancia con el resto de sus compañeros, les molesta de manera más rápida las
situaciones”.
8 “No tienen un rendimiento completo en las horas académicas, constantemente se quejan de
que son muchas cosas por aprender y dicen estar cansados, lo cual no es normal para un
niño de su edad que tiene energía para estar activo todo el día”.
9 “Su rendimiento se ve disminuido por la capacidad de respuesta que tienen los niños con
problemas de desnutrición”.
10 “Tienen un déficit bajo, aunque cumplen con los objetivos le cuesta mucho más ya que
deben trabajar mucho para comprender un tema o enfocarse mucho para lograr prestar
atención. Es decir hacen un esfuerzo por prestar atención no es algo que se les dé en forma
natural”.
Tabla 1. Respuestas a la segunda pregunta de contenido.

- Tercera pregunta de contenido: ¿Puede mencionar cuáles son las características observadas en
el proceso de alfabetización de los niños con desnutrición?

A continuación, se presenta una lista sin orden jerárquico, de las características que los docentes
entrevistados señalaron haber observado en sus estudiantes con problemas de nutrición:

 Presentan dificultad para memorizar los contenidos.

 Presentan dificultad para recordar los contenidos.

 Tienen escasa retención a mediano plazo.


 Son muy apáticos hacia las actividades escolares, dentro y fuera del aula de clases.

 Son muy apáticos hacia los contenidos que se enseñan.

 Se encuentran continuamente desanimados.

 Se evidencia que están faltos de energía, lo que los limita en las actividades y les complica el
aprendizaje por más que quieran aprender, así como también les afecta en las prácticas físicas.

 Están constantemente cansados. Prefieren dormir o practicar juegos pasivos en vez de hacer
actividades físicas más exigentes.

 Necesitan dedicar mucho tiempo para aprenderse una lección, más de lo que un niño normal
requiere.

 Les falta motivación.

 Se les dificulta prestar atención en las clases.

 Son apáticos con las tareas para el hogar.

 Confunden lo que leen o lo que se les explica, con mucha facilidad.

 Necesitan que las lecciones sean explicadas varias veces para comprenderlas.

 Requieren que las preguntas formuladas sean repetidas para poder pensar en las respuestas.

 Bostezan muy a menudo.

 Se les dificulta concentrarse en un solo punto.

 Se distraen con bastante facilidad, pensando en las cosas que les gustaría hacer y/o jugar.

 Suelen dejar incompletas las tareas.

 Desean irse pronto a casa.

 Son muy tranquilos.

 Constantemente se perciben muy distantes.

 Se sienten inseguros acerca de las lecciones estudiadas.

 No participan o intervienen en clases, al sentir que no dominan los contenidos.

 No retienen completamente los contenidos enseñados.


 No responden de la misma manera que sus otros compañeros en el proceso de enseñanza-
aprendizaje.

 Se ven deprimidos, tristes y apagados.

 Son poco sociables y prefieren estar solos.

- Cuarta pregunta de contenido: ¿Ha notado alguna disminución en la capacidad de


alfabetización de los niños? ¿En cuáles capacidades?

Todos los docentes entrevistados afirmaron haber detectado en los niños con desnutrición, la
disminución de diversas capacidades y actitudes necesarias para la alfabetización de los niños, entre las
cuales señalaron las que se presentan a continuación:

 Prestar atención a las clases.

 Interés por hacer las asignaciones.

 Interés por los contenidos.

 Concentración.

 Retención de la información.

 Capacidad energética.

 Ánimo de participar en actividades físicas.

 Comprensión y análisis de las lecciones.

 Resolución de problemas matemáticos y en general.

 Constancia para culminar las actividades.

 Disciplina para hacer las tareas indicadas para el hogar.

 Capacidad lectora.

 Comprensión lectora.

 Razonamiento lógico.

 Participación en clases.

 Capacidad visual.
 Capacidad lingüística.

 Capacidad de respuesta.

 Interacción y establecimiento de relaciones interpersonales con demás miembros del entorno


escolar.

Por lo que se refiere a las secuelas de la desnutrición infantil, el CENFEM (2016) indica que esta puede
ocasionar daños a nivel cognitivo irremediables, de manera que las capacidades de los sujetos se vean
afectadas tanto en su época escolar como en su época laboral, debido a que si no se cuenta con una
alimentación adecuada, el sistema neuronal no se desarrollará como debe ser.

- Quinta pregunta de contenido: ¿De acuerdo a los niveles de alfabetización (por debajo del nivel
funcional, nivel funcional y lectura avanzada), podría clasificar los niveles que usted ha
observado en los niños? ¿Por qué?

Con respecto a esta interrogante, se puede decir que siete de los diez docentes entrevistados
manifestaron que el nivel de alfabetización observado en sus estudiantes estuvo por debajo del nivel
funcional. En la Tabla 2, que se muestra a continuación, se reflejan las respuestas de cada uno de los
docentes, y la justificación de tal afirmación. Sin embargo, hay que recalcar que algunos de ellos se
refirieron al nivel de alfabetización de toda la clase, otros solo señalaron el nivel de alfabetización de
los niños con desnutrición, y solo uno de ellos fue específico tanto para los niños sanos como para los
niños con problemas de nutrición (Docente entrevistado Nº4).

Docente Nivel de
Niños a los cuales se
entrevistad alfabetización Justificación
refirieron
o Nº señalado
Porque solo leen textos con símbolos
Por debajo del nivel Todos los niños de la
1 conocidos, asociándolos. De resto, se
funcional clase
les hace muy difícil la lectura.
Porque no leen las palabras
Por debajo del nivel Niños con problemas completas, sino que completan la
2
funcional de desnutrición frase con lo que relacionan
visualmente.
Todos los niños de la Porque pueden leer textos cortos,
3 Funcional
clase pero no hacen lecturas corridas.
- Niños que no - Porque comprenden las palabras sin
presentan problemas ayuda y leen las lecciones del libro,
-Funcional
de nutrición. aunque presenten problemas para leer
4 -Por debajo del nivel
- Niños que tienen corrido.
funcional
problemas de - Porque solo leen ciertas palabras
desnutrición. que recuerdan de lecciones anteriores.
5 Por debajo del nivel Todos los niños de la -Porque en los primeros cuatro años
de enseñanza la mayoría de los niños
no saben leer ni escribir
correctamente, y se apoyan de lo que
funcional clase.
puedan para hacerlo. En este nivel el
objetivo es que ellos aprendan a leer
y a escribir bien.
Porque aún no saben leer y reconocer
Por debajo del nivel Todos los niños de la las palabras de forma correcta, solo
6
funcional clase. leen el principio de las frases y suelen
confundir las palabras.
Porque si se lo proponen logran leer
Todos los niños de la las oraciones, aun cuando les cueste
7 Funcional
clase. un poco y suelan confundir las
palabras.
Porque a pesar de que les cueste un
Niños con problemas
8 Funcional poco más que a los otros niños,
de desnutrición.
alcanzan los objetivos.
Por debajo del nivel Todos los niños de la Porque están en una etapa inicial de
9
funcional clase. aprendizaje
Porque no manejan de manera
acertada las habilidades básicas del
Por debajo del nivel Todos los niños de la
10 habla y de la escritura, se confunden
funcional clase
mucho y se apoyan en ayudas
visuales y las asocian a las palabras.
Tabla 2. Respuestas a la quinta pregunta de contenido.

Cabe señalar que, de acuerdo con Chall (1990), la categoría por debajo del nivel funcional abarca desde
el iletrado hasta aquel que es capaz de leer apoyándose en lo visual y asociándolo a la lectura, tal y
como lo que alegaron los docentes para indicar que sus alumnos se encontraban en este nivel de
alfabetización. Además, según este mismo autor, en el nivel funcional se ubican los sujetos que son
capaces de leer textos simples, que fue el otro nivel que algunos docentes mencionaron para ubicar a
sus estudiantes, por ser estos últimos capaces de leer frases y textos cortos, pero no de leer textos
corridos y complejos.

De igual forma, hay que destacar que en todos los niños, independientemente de sus condiciones de
nutrición, la alfabetización se inicia en los primeros años de escolaridad y es a partir de ella y del
transcurrir de las etapas educativas que estos van aumentando su nivel de alfabetización hasta alcanzar
el nivel de lectura avanzada.

- Sexta pregunta de contenido: ¿Ha notado alguna diferencia en el proceso de alfabetización de


los niños con algún grado de desnutrición con relación a los niños que tienen una nutrición
dentro del rango normal?
Con respecto a esa pregunta, el primer docente entrevistado afirmó haber notado diferencias en el
proceso de alfabetización de los niños con problemas de desnutrición y los niños con condiciones
normales de nutrición. De manera que señaló que los niños desnutridos se mantienen constantemente
apagados y que requieren del incentivo y la motivación continua para hacer las actividades y para
participar en clase.

Por su parte, el segundo docente entrevistado indicó que la diferencia observada fue en el ritmo de
aprendizaje, ya que los niños con desnutrición aprendían más lento que los niños desnutridos, pero que
con mucha constancia era posible obtener resultados satisfactorios en su proceso de aprendizaje.

Además de ello, el tercer docente entrevistado afirmó que la única diferencia observada era en el ritmo
de aprendizaje, que se les dificultaba un poco más que al resto de los chicos.

De igual forma, el cuarto docente entrevistado señaló que entre estos dos grupos de niños, la única
diferencia que había radicaba en el ritmo con el que aprendían.

Por otro lado, el quinto docente indicó haber notado una diferencia bien demarcada entre los niños con
problemas de desnutrición y los niños en estado normal, puesto que los primeros se distraían más de lo
común, además de que presentaban dificultades para la comprensión y la retención de información.

Así mismo, el sexto docente entrevistado también afirmó haber notado una diferencia en el proceso, y
respondió que los niños con desnutrición se caracterizaban por ser muy pasivos dentro del aula y no
interactuaban y/o participaban constantemente en clases.

Sin embargo, el séptimo docente entrevistado alegó no haber notado diferencia alguna entre el proceso
de alfabetización de los niños con desnutrición y los niños con nutrición dentro del rango normal.

Todavía cabe señalar que el octavo docente entrevistado indicó que sí había notado ciertas diferencias,
específicamente al prestar atención y al comprender los temas, que les costaba mucho más a los niños
con problemas de desnutrición.

Por su parte, el noveno docente entrevistado indicó que el proceso de alfabetización entre niños con
condición normal de nutrición y niños desnutridos es bastante diferente, a tal extremo que tuvo que
utilizar nuevas estrategias de enseñanza, señalando desde su perspectiva que la malnutrición influía en
el ritmo de aprendizaje, volviéndolos más lentos en ese proceso.

Finalmente, el décimo docente entrevistado manifestó haber notado diferencias en el proceso de


alfabetización de estos dos grupos de niños, alegando que los niños con desnutrición se mostraban muy
apáticos, cansados, sin ganas de hacer las tareas y demás actividades, expresaban que no les gustaban
estas últimas y que preferían jugar que estudiar.

En líneas generales, se puede decir que nueve de los diez docentes que participaron en la investigación,
afirmaron haber observado diferencias entre el proceso de alfabetización de niños con condición
normal de nutrición y el proceso de alfabetización de niños con problemas de desnutrición. Es decir
que, el 90% de los docentes entrevistados afirmó haber notado alguna diferencia en ello (ver Figura 3).

Figura 3. Resultados referentes a la sexta pregunta elaborada.


Así mismo, señalaron que la desnutrición les afectaba en el ritmo de aprendizaje, en la concentración,
en la atención, en la comprensión, en la falta de energía, de interacción y en el interés por las
actividades escolares.

Lo anterior permite afirmar lo que ya la UNICEF (2004) ha mencionado, y es que para que un niño o
niña aprenda, es necesario que esté saludable, que esté bien nutrido, y además, que existe una relación
clara entre el desarrollo integral y la nutrición.

-Pregunta de cierre: ¿Hay algo que no le haya preguntado y que debería haberlo hecho? ¿Hay
algo que quiera añadir?

A continuación, se presentan los aportes realizados por los docentes entrevistados:

1. Los niños no tienen la culpa de su condición de desnutrición, y por tal motivo no se les puede
tratar de una forma distinta al resto de los niños, de manera que como docentes hay que
ayudarlos y tratar de alertar a las personas que se crea pertinente para que su situación cambie.

2. Es posible observar el estado de desnutrición en los niños, porque presentan una contextura
física muy delgada para su edad, tienen manchas blancas en el rostro, lucen frágiles, faltan
mucho a la escuela por motivos de salud, e incluso el uniforme les queda cada vez más grande.

3. Deberían realizarse campañas de servicio social para ayudar a las familias de escasos recursos a
alimentar a sus hijos y también para concientizar a la población acerca de las responsabilidades
que implica traer niños al mundo, para que sepan elaborar una planificación familiar y tomen
las decisiones más adecuadas según sus recursos económicos.

4. Deberían crearse en las instituciones educativas, departamentos de asistencia social


especializados para abordar la problemática de niños con desnutrición, de manera que evalúen a
estos chicos, hablen con sus padres y/o representantes y busquen de manera conjunta ayudas
económicas.

5. Deberían realizarse más investigaciones referentes al presente tema en estudio, ya que los niños
se merecen todo el apoyo necesario para su desarrollo integral.

Conclusiones

Para la presente investigación, cuyo objetivo general fue estudiar el proceso de alfabetización de niños
desnutridos en el primer ciclo escolar, se llevó a cabo la determinación del estado de nutrición de un
total de treinta y siete niños del primer ciclo escolar y se elaboró un instrumento de recolección de
datos, el cual fue aplicado a una muestra de diez docentes, datos que posteriormente fueron procesados
y analizados y a partir de los cuales se desprendieron las conclusiones que se presentan a continuación.

Se determinaron los niveles de desnutrición de los niños que conforman la muestra de la investigación,
obteniéndose que, de los treinta y siete niños analizados, sólo tres de ellos presentaron un estado
normal de nutrición (8.11% de la muestra), catorce registraron un estado de desnutrición moderada
(37.84% de la muestra), y los otros veinte fueron diagnosticados con un estado de desnutrición severa,
siendo esta última la condición predominante, representando el 54.04% de la muestra. De manera que
el 91.89% de los niños evaluados presentaron problemas de desnutrición.

Se identificó y caracterizó el rendimiento escolar dentro del proceso de alfabetización de niños en el


primer ciclo educativo en condiciones de desnutrición. Se obtuvo que todos los docentes entrevistados
tenían alumnos con problemas de desnutrición, entre dos y seis estudiantes con esta condición. Así
mismo, nueve de los diez docentes clasificaron el rendimiento de los niños con desnutrición como bajo
o deficiente y sólo uno de ellos señaló que presentaban un rendimiento escolar regular.

Aunado a ello, los docentes entrevistados manifestaron que si bien es cierto que en los primeros años
de enseñanza todos los niños presentan dificultades para leer y escribir correctamente, el rendimiento
de los niños con problemas de desnutrición fue menor con respecto al rendimiento de los niños sin
problemas de desnutrición.

De igual forma, entre las características observadas por parte de los docentes entrevistados en los
infantes con problemas de desnutrición, se registraron las siguientes: dificultad para memorizar y
recordar los contenidos, para prestar atención en clases, para concentrarse, poseen escasa retención a
mediano plazo, se distraen con bastante facilidad, muestran apatía hacia los contenidos que se enseñan
y hacia las actividades escolares y las asignaciones para el hogar, se encuentran continuamente
desanimados, desmotivados, cansados, faltos de energía, bostezando, prefieren dormir o practicar
juegos pasivos en vez de hacer actividades físicas más exigentes, necesitan dedicar más tiempo de lo
que un niño normal requiere para aprenderse una lección, confunden lo que leen o lo que se les explica
con mucha facilidad y requieren que las lecciones y preguntas sean explicadas varias veces para
comprenderlas y para responder, no participan o intervienen en clases (al sentirse inseguros de los
contenidos), no responden de la misma manera que sus otros compañeros en el proceso de enseñanza-
aprendizaje, suelen dejar incompletas las tareas, desean irse pronto a casa, son muy tranquilos, muy
distantes, lucen deprimidos, tristes y apagados, son poco sociables y prefieren estar solos.

Del mismo modo, todos los docentes entrevistados afirmaron haber detectado la disminución en la
capacidad de alfabetización de los niños con problemas de desnutrición, señalando una disminución en
los siguientes aspectos: en el interés por los contenidos y por hacer las tareas, en la concentración, en la
retención de la información, en prestar atención a las clases, en la capacidad energética y en el ánimo
de participar en actividades físicas, en la comprensión y análisis de las lecciones, en la resolución de
problemas matemáticos y en general, en la constancia para culminar las actividades, en la disciplina
para hacer las tareas indicadas para el hogar, en la capacidad y en la comprensión lectora, en el
razonamiento lógico, en la participación en clases, en la capacidad visual, en la capacidad lingüística,
en la capacidad de respuesta, en la interacción y en el establecimiento de relaciones interpersonales con
su entorno escolar.

Por lo que se refiere a los niveles de alfabetización, se obtuvo que siete de los diez docentes
entrevistados manifestaron que el nivel de alfabetización observado en sus estudiantes estuvo por
debajo del nivel funcional. Sin embargo, destacaron que la alfabetización es un largo proceso que se
inicia en los primeros años de escolaridad, y estos niños apenas se encontraban en una etapa inicial para
adquirir habilidad en lectura y escritura.
Finalmente, se puede afirmar que el proceso de alfabetización de niños desnutridos en el primer ciclo
escolar tiene una marcada diferencia con el proceso de aquellos niños que no presentan problemas de
desnutrición, de manera que dicha condición disminuye su ritmo de aprendizaje (haciéndolo más lento
en contraste con el de los niños sin problemas de desnutrición), así como también viéndose
principalmente afectados en la concentración, en la atención, en la comprensión, en la energía, en la
interacción y en el interés por las actividades escolares.

En futuras investigaciones, se sugiere evaluar el proceso de alfabetización de niños desnutridos en el


primer ciclo escolar.

Así mismo, se propone estudiar el proceso de alfabetización de niños con problemas de desnutrición y
con problemas de violencia intrafamiliar en el primer ciclo escolar.

Se sugiere además, estudiar la alimentación de los niños desnutridos en el primer ciclo escolar y se
recomienda también proponer la creación de un departamento dentro de las instituciones educativas
para dar seguimiento a la situación de los niños con problemas de desnutrición.

Se recomienda llevar a cabo un estudio técnico-económico para determinar la factibilidad de la


creación y puesta en marcha de un comedor escolar.

Fuente adicional consultada:

Wisbaum, W. (2011). La desnutrición infantil. Causas, consecuencias y estrategias para su prevención


y tratamiento. España: UNICEF.

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