LESIONES PATÓLOGICAS

LESIÓN: HUMEDAD CAPILAR

LOCALIZACIÓN: BARRIO CALARCA CRA 9AN°45-21
TIPO O CLASE: FISICA
La humedad por capilaridad es uno de los problemas más habituales en las plantas bajas
y sótanos de las viviendas, sobre todo en los edificios antiguos o si vivimos en una zona
propensa a la lluvia.
La capilaridad, propiamente dicha, es una propiedad de los líquidos para alcanzar
diversas alturas (que varía en función de diversos factores) cuando se encuentran en el
interior de tubos de reducido tamaño, lo que les permite subir o bajar, venciendo la fuerza
de la gravedad. Esto significa que las aguas del subsuelo pueden ascender por el tubo
capilar hasta llegar a las paredes de nuestro hogar. Este tipo de aguas llevan consigo
sustancias salinas (minerales, sulfatos y cloruros) que, al ascender, se evaporan y
cristalizan permaneciendo en los muros.
Cuando la pared llego al límite de su saturación y ya no pudo absorber más agua, empezó
a aparecer las manchas oscuras, los desconchones, se empapo el ambiente de
humedad. Esta humedad es proveniente del lavadero, también del terreno ya que la
vivienda se encuentra en un nivel inferior el cual está en contacto con el subsuelo.

SOLUCIÓN:
1. Comprobamos cual es la cota más alta a la que llega la humedad desde el suelo.
Medimos y picamos toda la pared desde el suelo hasta 10 cm por encima del
punto más alto de humedad, hasta dejar el ladrillo visto.

2. Una vez tengamos la pared picada, con el ladrillo o la piedra vista y comprobemos
que realmente tiene humedad, dejaremos secar la pared durante 4 o 5 días con
 una buena ventilación en la habitación. Con el paso de los días de secado
podremos observar que el color va cambiando y sabremos cuando se encuentra
lista para el siguiente paso.

3. Para cortar la humedad lo antes posible, debemos localizar la parte superior de la

primera fila del primer ladrillo. Esta será la zona donde trabajaremos. No lo
haremos más abajo de la primera fila ya que nos encontraremos con los cimientos
creados a base de mortero y hormigón donde será más difícil tratar la capilaridad.
Esta zona cuenta con una porosidad diferente, un pegado irregular entre sus
componentes y debemos diferenciarla de la zona anterior tratándolas con
productos específicos para cada una.

4. Con un taladro y una broca comenzamos a hacer agujeros en la junta que separa
la primera fila de ladrillos con la segunda. Realizaremos estas perforaciones cada
12cm coincidiendo con la mitad del ladrillo y la junta vertical de unión.
Taladraremos toda la primera fila a lo largo de la pared. Cuando estemos haciendo
los agujeros, tendremos que tener precaución de no pasarnos para el otro lado del
muro e intentar que se cubra el 90% del espesor de la pared.

5. Sobre los agujeros realizados, aplicaremos aire con un soplador o un compresor

con el fin de eliminar los restos de polvo que puedan quedar dentro. De esta
manera, evitaremos que se produzca una masilla entre el líquido hidrofugante y el
polvo.

6. Una vez limpios los agujeros, procedemos a aplicar sobre ellos la capa
impermeabilizante SikaMur Injecto Cream-100 en formato de cartuchos de 300
ml . Aplicamos esta resina blanquecina en el interior de los agujeros que hemos
hecho a 12cm de distancia unos de otros. Debemos de introducir la cantidad
suficiente como para que se desborde del agujero, así nos aseguraremos que se
expande 6cm para cada lado y toda la superficie queda impermeabilizada.

7. Una vez aplicado SikaMur Injecto Cream-100, dejamos secar unos 7 u 8 días.
Debemos de dejar una buena ventilación ya que el impermeabilizante se
encuentra en formato líquido y el proceso de secado no se produce en el acto.
Una vez seco, podremos aplicar un mortero sobre la zona.

8. Una vez que hemos aplicado SikaMur Injecto Cream-100 y lo hemos dejado secar
durante unos 8 días para que cristalice, podemos aplicar un mortero o pintura
sobre la pared que tenía humedades. Es muy importante destacar que no nos
sirven todos los tipos de morteros ni todas las pinturas ya que, hemos frenado la
humedad por capilaridad, pero no quiere decir que la hayamos eliminado para
siempre.

9. Como queremos un acabado en pintura, debemos de evitar siempre la pintura

plástica ya que, si nos ha quedado algo de humedad puede llegar a ampollarse la
pared. En este caso escogeremos el mortero de cal, cuanto más transpirable
mejor.