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udad de Estambul (turco: İstanbul), situada a ambos lados del Estrecho del

Bósforo en Turquía. Fue la capital de distintos imperios a lo largo de su milenaria historia:


del Imperio romano (330-395), del Imperio romano de Oriente o Imperio bizantino (395-
1204 y 1261-1453), del Imperio latino (1204-1261) y finalmente del Imperio
otomano (1453-1922).
La ciudad fue construida sobre la antigua colonia griega de Bizancio, fundada por el
rey Bizas hacia el año 667 a. C.2nota 13 En el 330 d. C., Constantino el Grande la convirtió
en la nueva capital del Imperio romano debido a su posición estratégica: entre el Cuerno
de Oro y el mar de Mármara, en el punto de encuentro de Europa y Asia. Debido a sus
enormes riquezas, fue conocida como «la Reina de las Ciudades» (Basileuousa Polis),4 y
hasta el siglo XIII fue reconocida como la más grande y rica de Europa.5

Índice

• 1Nombres
• 2Fundación
• 3Historia
o 3.1La Nueva Roma
o 3.2Cuarta Cruzada y Saqueo de Constantinopla
o 3.3Decadencia y Caída de Constantinopla
• 4Referencias
• 5Bibliografía
• 6Enlaces externos

Nombres[editar]
Dependiendo de sus gobernantes y el momento histórico, ha tenido diferentes nombres;
entre los más comunes están Bizancio, Constantinopla y Estambul. El primero proviene del
griego Βυζάντιον, Byzàntion. Provisionalmente Constantino la llamó Nueva Roma (en
griego Νέα Ῥώμη, en latín Nova Roma), aunque este último un nombre más eclesiástico
que oficial. Se le dio también de manera no oficial por sobrenombre la expresión
griega στην Πόλη, stimˈpoli ("a la ciudad").6 Fue conocida por la Guardia varega con el
epíteto nórdico de Miklagarðr (Gran Ciudad).
Desde el periodo otomano, la ciudad fue también conocida como "İstanbul" (‫)استانبول‬,
deformación de στην Πόλη. El nombre de Estambul se oficializó con la Constitución
Otomana de 1876,7 pero no fue estandarizado en Occidente hasta fines de 1929.8 Con el
cambio del alfabeto árabe al latino, las autoridades de la República pidieron oficialmente a
los países extranjeros, el 28 de marzo de 1930, que se refirieran a la ciudad
como Estambul.9

Fundación[editar]
En el año 324, el emperador Constantino I el Grande venció a su rival Licinio a orillas
del mar de Mármara, reunificando el Imperio romano bajo su mandato. Constantino había
considerado reconstruir Troya en una nueva corte imperial pero, tras haber presenciado
personalmente el potencial estratégico de la ciudad, eligió Bizancio como el nuevo centro
de su poder.10
Vista de la Constantinopla bizantina.

El 8 de noviembre de 324 (día domingo), solo unas semanas después de la victoria sobre
Licinio, se llevó a cabo la delimitación del perímetro de la nueva ciudad mediante solemnes
ceremonias. Según el historiador Filostorgio, habría sido el propio Constantino quien trazó
los límites con su lanza, al modo de un ktistes (fundador) griego.11 Juan Lido ha
mencionado la participación en estos ritos paganos del hierofante Pretextato y del
filósofo Sópatro.12
La construcción y asentamiento de Constantinopla se efectuaron a gran velocidad,
quedando las nuevas murallas terminadas en 328, y finalizando definitivamente las obras
tras seis años de trabajos. El 11 de mayo de 330 —día declarado propicio por
los augurios de Sópatro— Constantino inauguró oficialmente la ciudad con unos ritos
tradicionales que duraron cuarenta días. Las celebraciones se festejaron en el hipódromo,
y culminaron con un desfile de la imagen dorada de Tyche (Fortuna) como personificación
de la ciudad,11 que entonces contaba con unos 30 000 habitantes. Un par de siglos más
tarde había alcanzado el medio millón,13 convirtiéndose en una de las más pobladas del
mundo.
El nombre oficial de la ciudad, según las monedas conmemorativas acuñadas en la
década de 330, era Constantinopolis ("Ciudad de Constantino).14 No existen evidencias
que indique que fuese llamada, por su fundador, Nea Roma o Nova Roma ("Nueva
Roma),15 aunque es posible que un decreto imperial, citado un siglo después por Sócrates
de Constantinopla, la denominase "Segunda Roma" (griego: Δευτέρα Ῥώμη, Deutera
Rhōmē), quizás como una afirmación retórica.16 Es cierto, sin embargo, que la ciudad de
Bizancio fue reconstruida a semejanza de Roma, con catorce regiones,
foro, capitolio y senado, y su territorio sería considerado suelo itálico (libre de impuestos).
Al igual que la capital itálica, tenía siete colinas, si bien al principio, no tuvo el mismo rango
que la antigua Roma, por ejemplo fue gobernada por un procónsul, no un prefecto urbano,
tampoco tuvo pretores, tribunos ni cuestores. Aunque tenía senadores, estos ostentaban el
título de clarus, no clarissimus, como los de Roma. También carecía de la panoplia de
otras oficinas administrativas que regulaban el suministro de alimentos, policía, estatuas,
templos, alcantarillas, acueductos u otras obras públicas.
La ciudad fue embellecida a costa de otras ciudades del imperio, cuyas mejores obras
fueron saqueadas y trasladadas a la nueva capital. En el foro se colocó una columna
donde se emplazó una estatua de Apolo a la que Constantino hizo quitar la cabeza para
colocar una réplica de la suya. Se trasladaron mosaicos, esculturas, columnas, obeliscos,
desde Alejandría, Éfeso y, sobre todo, desde Atenas. Constantino no reparó en gastos y
estimuló la construcción privada prometiendo a los dueños de casa donaciones de tierras
de las propiedades imperiales de Asiana y Póntica y el 18 de mayo de 332 anunció que,
como en Roma, se distribuirían gratuitamente alimentos a los ciudadanos.17
La ciudad contaba con un hipódromo, construido en tiempos de Septimio Severo en 203,
que podía albergar más de 50 000 personas y era la sede de las fiestas populares y de los
homenajes a los generales victoriosos del imperio. Sus tribunas también fueron testigo de
tribunales donde se dirimían los casos más relevantes. Hoy en día, el hipódromo solo es
una plaza del centro de la ciudad (Estambul), donde se conservan los dos obeliscos que
se encontraban en el eje de la pista, uno de ellos perteneciente al faraón egipcio Tutmosis
III. Además se construyeron iglesias como la de Santa Irene y la iglesia-mausoleo, donde
fue enterrado el emperador. También se dio gran importancia a la cultura. Constancio II (r.
337-361) fundó la Biblioteca Imperial de Constantinopla y también creó una de las
primeras universidades del mundo al fundar, en el 340, la Universidad de
Constantinopla (aunque fue luego reformada por Teodosio II en el 425). En ella se
enseñaba Gramática, Retórica, Derecho, Filosofía, Matemática, Astronomía y Medicina. La
universidad constaba de grandes salones de conferencias, donde enseñaban sus 31
profesores.

Historia[editar]
La Nueva Roma[editar]
Al morir Constantino, la fragmentación del Imperio romano ya era un hecho. Sin embargo,
esto no se produciría de forma definitiva hasta la muerte de uno de sus
sucesores: Teodosio (recordado por construir el foro de su nombre en Constantinopla). En
el año 395, el imperio quedó permanentemente dividido en dos. Así, la ciudad se convirtió
en la capital del Imperio romano de Oriente, que ha pasado a la histo

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