Está en la página 1de 16

INSTITUTO TECNOLOGICO SUPERIOR

DE TANTOYUCA

Contratos mercantiles

Para la Materia:
Derecho mercantil

UNIDAD III

PRESENTA:

MARGARITA HERNANDEZ CRUZ

N° DE CONTROL

213S0043

TITULAR DE LA MATERIA

LIC. ERNESTO LINCE OLGUIN

TANTOYUCA, VER. A 14 DE MAYO DEL 2022


CONTRATOS MERCANTILES
3.1 contrato

Un contrato es un acuerdo jurídico entre dos o más partes que genera derechos y
obligaciones. Los contratos se encuentran regulados en el Código Civil español, a
partir del artículo 1254. El contrato existe desde que una o varias personas
consienten en obligarse, respecto de otra u otras, a dar alguna cosa o prestar
algún servicio.

Se denomina contrato a un documento legal que expresa un acuerdo común entre


dos o más personajes capacitadas para ello (conocidas como las partes del
contrato), que se obligan en virtud de este documento hacia una determinada
finalidad o cosa, cuyo cumplimiento debe darse de manera siempre bilateral, o de
otro modo el contrato se dará por roto e inválido

3.1.1 contrato en general

Es el acuerdo de voluntades, además es un consentimiento de dos o más


personas, para formar en ellos un compromiso, para resolver uno existente o para
modificarlo.

El contrato es una convención por el cual las dos partes recíprocamente o sólo
una de las dos prometen y se obligan para con la otra a darle una cosa o a no
hacer cierta situación. Cabe mencionar que el contrato es un acuerdo jurídico
además es la fuente más importante de las obligaciones y lo encontramos a diario
y se manifiesta en gran instrumento para la circulación de bienes y servicios.

Libertad contractual, nos indica que las partes son libres para celebrar o no
contratos, y al celebrar los obran sobre una igualdad y hay un acuerdo de
voluntades entre los contratantes y fijan términos del contrato, además determinan
su objeto sin más limitación que el orden público.

Por lo que concierne al artículo 1272 del Código Civil para el Estado de Tlaxcala,
refiere; que el convenio que crean o transfieren obligaciones y derechos toman el
nombre de contratos, los derechos personalísimos no son transmisibles ni por
contrato ni por sucesión.
3.1.2 contrato mercantil

El contrato mercantil es un acto por el cual varias personas se obligan entre ellas
para dar, hacer o no hacer. Este pacto genera derechos y obligaciones a las
partes y tiene como objeto actos de comercio.

Se consideran actos de comercio las acciones relacionadas con una adquisición


de un objeto que tiene como características diferenciadoras:

 Finalidad de ganar dinero.


 Estos bienes no son adquiridos para el uso propio sino para el intercambio
posterior.
 Estos actos son realizados por una empresa.
 Los actos son masivos, ya que la finalidad no es el consumo propio sino el
intercambio.

Características del contrato mercantil

Las características principales de los contratos mercantiles van a depender de


cuál sea el objeto del contrato, pero se pueden señalar:

 Contratos reales, consensuales o solemnes.


 Contratos unilaterales o bilaterales.
 SIEMPRE son contratos onerosos.
 Contratos de ejecución inmediata o aplazada en el tiempo.
 Contratos principales o accesorios.

Contratos mercantiles

Algunos contratos que son clasificados como mercantiles según la ley son:

 Contrato de compraventa mercantil.


 Contrato de transporte terrestre.
 Contrato de seguro.
 La fianza mercantil.
 Contratos de pagaré, letras y cheques.
 Contrato de comercio marítimo.
 Contrato de sociedad.
 Contrato de comisión.
 Contrato de agencia.
 Contrato de depósito bancario.
 Contrato de préstamo.
3.2 diferencia entre contrato y convenio

Las diferencias entre contrato y convenio estriban en que las obligaciones o


prestaciones de cada una de las partes son distintas; esto es, en el convenio
existe una paridad entre las partes que buscan un fin común, mientras que en el
contrato el fin que las impulsa a celebrarlo no necesariamente es el mismo.

El convenio y el contrato casi siempre se usan como sinónimos atendiendo quizás


a sus puntos comunes: que se requieren dos o más personas y que es un acuerdo
de voluntades entre los participantes. No obstante, jurídicamente se dice que la
convención es el género mientras que el contrato es la especie.

Existen muchos tipos de contratos. Legalmente, a unos se les llama contratos


nominados (hace referencia a que tienen nombre) y a otros se les denomina
innominados (no tienen nombre, o al legislar no se les atribuyó un nombre
específico).

Así mismo, existen diferentes clasificaciones de contratos, que pueden atender al


número de partes —bilateral, multilateral, unilateral— o a la forma de ejecución de
los mismos —si en un mismo momento quedan consumados (instantáneos) o si su
ejecución transcurre día a día (de tracto sucesivo).

En el caso de los convenios, también tienen su propia clasificación, que es muy


similar a la de los contratos; se usa la misma estructura.

En un convenio las partes buscan modificar o extinguir derechos u obligaciones


que les son comunes, mientras que en los contratos las partes crean obligaciones
y/o derechos, teniendo este último una esencia patrimonial.

3.3 elementos esenciales de los contratos

Consentimiento, objeto, causa y forma

Si no hay consentimiento da lugar a la nulidad o inexistencia del contrato.

Elementos naturales: los impuestos por el legislador, cuando no se renuncia a


ellos (saneamiento por evicción, rc...)

Elementos accidentales: los acuerdan las partes (condición, término, modo

Capacidad para contratar No pueden los menores no emancipados, ni los


incapacitados y a los que por ley se les ha prohibido.

Será nulo el consentimiento prestado por error, violencia, intimidación o dolo.


Otros requisitos para contratar

Pluralidad de sujetos y partes

Capacidad para contratar

Voluntad de contratar

Manifestación de la voluntad, expresión del consentimiento .

3.3.1 el consentimiento

La palabra consentimiento define la acción de aprobación o ―visto bueno‖ para la


ejecución de algo. Por ejemplo, ―necesito el consentimiento de mi
padre para poder tener novio‖. Lo que quiere decir que al consentir algo, se está
otorgando el permiso para la realización de una acción. Como se puede apreciar,
es un término sumamente aplicado en la vida cotidiana y en todos los contextos.

En el campo del derecho el término consentimiento tiene un significado jurídico, el


cual hace referencia a la voluntad manifiesta entre dos personas o más, para
consentir derechos y obligaciones. El consentimiento es manejado dentro del
derecho civil, principalmente en el derecho de contratos y de obligaciones; en
donde cumple un rol vital para la autonomía de la voluntad.

El consentimiento dentro del derecho civil, es una exigencia primordial a la hora de


darle legalidad a los contratos. Por ejemplo al momento de aceptar una herencia o
cuando se va a realizar un matrimonio.

En el derecho penal se utiliza el consentimiento como arma legal al momento de


ejecutar la defensa frente a una responsabilidad penal o civil proveniente de un
acto punible. En este caso la parte demandada puede emplear el consentimiento
como un atenuante, que los ayude a evitar responsabilidades por los actos
cometidos, ya que los mismos fueron hechos con el consentimiento de la parte
acusadora.

Para que jurídicamente, un consentimiento sea válido, es necesario que cumpla


con ciertas condiciones: el individuo debe tener capacidad para obrar, lo que
quiere decir es que ni los menores de edad ni los insanos mentales pueden dar
consentimientos. El consentimiento no debe ser obtenido a través de la
amenaza o intimidación.

En el campo médico, también se usa este término, siendo este muy importante,
especialmente cuando un paciente debe someterse a un tratamiento riesgoso o a
una intervención quirúrgica. El consentimiento en este caso es un documento que
debe firmar el paciente o sus familiares, dejando bien claro que están de acuerdo
con lo que se quiere realizar y que comprenden los riesgos que corre el paciente,
pero que aun así deciden asumir. Una vez firmado el consentimiento el doctor no
podrá ser afectado si algo sale mal, porque tanto el paciente como sus familiares
dieron su permiso para realizar la acción.

3.3.2 el objeto

Se conoce como objeto a todo lo que puede ser materia de conocimiento o


sensibilidad de parte del sujeto, o incluso este mismo.
Como tal, el término en análisis en principio hace alusión a todas las cosas que
puede ser captado por los sentidos o conocido por la razón.

No se debe de olvidar que los sentidos –vista, olfato, oído, tacto, gusto- permiten
que el hombre pueda percibir todo aquello que lo rodea, ya que al poder sentir el
objeto puede ser representado en su mente en forma de idea, no obstante también
puede suceder de forma viceversa ya que las invenciones se crearon porque un
objeto paso de lo abstracto a lo sensible, como por ejemplo: computadores,
teléfonos, televisores, entre otros.

El objeto es el fin a que se dirige o encamina una acción u operación. En otras


palabras, el término objetivo puede ser visto como sinónimo de objetivo, meta,
intención que el individuo pretende lograr a través de sus acciones o decisiones.
En relación a lo anterior, el objeto de cada individuo puede estar vinculado a
diversas áreas, bien sea a nivel personal, laboral, ya que se ajusta a las
aspiraciones o propósitos que el individuo busca para alcanzar su bienestar propio
y el de su familia. Por ejemplo: para el próximo año mi objeto es emprender un
negocio con mi esposo.

Asimismo, objeto son los propósitos o finalidades que contempla una organización
como parte de su misión, permitiéndola crecer y desenvolverse mejor dentro
del mercado, especialmente en su concurrencia, y para ello es esencial la venta
de productos cualitativos, es decir, productos que superen el control de calidad,
satisfaciendo a los clientes a través de productos que cumplan con las
necesidades de ellos.

3.4 formas de los contratos

Los contratos válidos son legalmente vinculantes y ejecutables. Los contratos se


pueden establecer por medio de formas diferentes, como escrito, verbal o tácito
mediante actos y conducta. Los contratos típicos de consumidor implican los de
garantía, vivienda, instalaciones, Internet, empleo y tarjetas de crédito. Cada
estado mantiene diferentes reglas de contrato, así que un acuerdo de alquiler que
es válido en California podría no aplicarse en Nueva York.
Escrito

Los contratos escritos son comunes y fáciles de redactar. Personalmente tú


puedes crear un contrato que esté escrito a máquina o a mano o ponerte en
contacto con una empresa, como legalzoon.com, que prepara documentos legales
en línea. Asegúrate de que los nombres de todas las partes, el propósito del
contrato, las restricciones y cualquier otro aspecto relevante esté incluido en el
contrato. Por ejemplo, si vas a prestar dinero a un amigo, tu amigo debe firmar un
contrato que describa la cantidad del préstamo y los términos de pago. Si vas a
alquilar un apartamento, probablemente firmarás un acuerdo de alquiler o de
arrendamiento que incluya tu nombre, la ubicación del apartamento y los términos
de alquiler, como la fecha de vencimiento, tasas por demora y restricciones, como
no mascotas. Guarda siempre una copia de los contratos escritos que firmes.

Oral

Otro tipo de forma de contrato implica los acuerdos verbales, que normalmente
son válidos aunque difíciles de probar. Normalmente cierras un contrato oral
discutiendo los términos de ese contrato de manera verbal. Considera cuando
contrates un segador para cortar tu césped o un mecánico para cambiar el aceite,
discutir los servicios que necesitas y pagarles después de que el trabajo haya sido
completado sin firmar el contrato. Cerrar un contrato oral puede ser eficiente,
hasta que haya una discusión de contrato y esta discusión se centre en la
interpretación de cada parte sin prueba sustantiva.

Tácito

Los contratos tácitos no son ni orales ni escritos. Estos contratos suelen provenir
de experiencias pasadas. Por ejemplo, después de que entregues ropa en una
tintorería y tomes un recibo del artículo, regresas para recoger la ropa limpia y
pagas por el servicio. Probablemente no discutas tasas para cada artículo y no
firmes un contrato, pero estás obligado a pagar cuando recuperes tu ropa. Un
contrato tácito también puede desarrollarse cuando hay un error. Si tu vecino
contrata un pintor que pinta tu casa de forma incorrecta, entonces puedes hacerle
responsable de pagar al pintor si le observaste y fracasó al informar sobre el error.
Recibiste un beneficio (la casa recién pintada) incluso aunque no contrataste al
pintor directamente.
3.5 modalidades de los contratos

Las modalidades son las distintas formas que puede asumir el contrato de trabajo
para satisfacer necesidades específicas del empleador. La ley de Contrato de
Trabajo regula diversas modalidades de trabajo, teniendo en cuenta las
particularidades y necesidades del empleador. A continuación se desarrollaran los
diversos tipos de contrato.

Es el contrato que dura hasta que el trabajador se encuentra en


condiciones de gozar de la jubilación o aparezca una causa natural o
reconocida expresamente por la Ley que lo extinga (Art. 91 del L.C.T.)
Ejemplificando podemos decir que Juan, comienza a trabajar bajo
relación de dependencia en una fabrica metalúrgica, pasado los tres
meses de prueba el empleador no puede dejar sin efecto el contrato,
sino mediara una justa causa. Si llegara a despedirlo sin causa, el
empleador deberá abonar la indemnización por despido del Art. 245
L.C.T, preaviso omitido Art. 232 L.C.T, integración del último mes,
vacaciones y aguinaldo proporcionales. Si correspondiere se le debe
abonar las indemnizaciones agravadas (por no estar o estar
irregularmente registrado, discriminación...)

Debemos entender por este tipo de contrato a aquél en el que se fija


un periodo de duración y que tal periodo debe ser determinado. Es
una excepción a la informalidad que es propia de los contratos
indeterminados. Exige que sea redactado por escrito, fijándose la
causa y el plazo. Como ejemplos podemos citar el contrato que se
celebra para cubrir un cargo por licencia de embarazo o una licencia
gremial, cuyo plazo está claramente determinado. Los beneficios que
tiene este tipo de contrato para el empleador es que puede contratar a
un trabajador durante el tiempo que requiera la necesidad concreta.
Tiene un plazo máximo de 5 años; si se despidiera sin justa causa,
con anticipación al plazo acordado, se deberá pagar
las indemnizaciones comunes, más los daños y perjuicios que pudiera
ocasionar. (Art. 93 a 95 de la L.C.T.)

Es aquel que el trabajador ejerce bajo la dependencia de un


empleador, para la satisfacción de resultados concretos, tenidos en
vista por este, en relación a servicios extraordinarios, previamente
determinados o exigencias extraordinarias y transitorias, y toda vez
que no pueda preveerse un plazo cierto. Este contrato debe
entenderse que comienza y termina con la obra extraordinaria y
transitoria por realizar. (Art. 99 de la L.C.T.) Como ejemplos podemos
citar, el trabajo realizado para cubrir necesidades concretas en un
hotel o casa de comida, por realización de un mega evento.

Es aquel en el cual el trabajador, se obliga a prestar servicios, durante


un determinado número de horas al día o a la semana, inferiores a las
dos terceras partes de la jornada habitual de trabajo (se encuentra
contemplado en el Art. 92 ter de la L.C.T.) Por ejemplo una pizería que
desarrolla su actividad en horas de la noche de 21hs a 2am , en donde
un trabajador cumple 5hs de labor, percibiendo su haber y los
descuentos de la seguridad social en forma proporcional al tiempo
trabajado. Esta modalidad de trabajo prohíbe el cumplimiento de horas
extras, ya que sería contradictorio con el fin de este tipo de contrato. El
mismo, ha permitido situaciones irregulares en la cual el trabajador
cumple jornada completa y se le abona como un contrato a tiempo
parcial, reduciéndose el haber. Por último es necesario señalar, que a
esta modalidad de contrato se le aplica todas las demás normas de la
ley de contrato de trabajo, como las normas referidas al descanso,
suspensión y extinción del contrato de trabajo, etc.

Hay contrato de temporada, cuando la relación entre las partes


originadas en el giro normal de las actividades propias de la empresa,
se cumple en determinadas épocas del año, es decir que
son actividades cíclicas de naturaleza ordinaria. Ejemplos concretos
podrían ser, la recolección de frutos, vendimia o zafra; los hoteles de
zonas turísticas en tiempo de temporada, el trabajo en heladerías.

Es un contrato de tiempo indeterminado y de cumplimiento


discontinuo, es decir que una vez celebrado el contrato, el trabajador
dispone de estabilidad. El empleador debe convocarlos por un medio
de prensa, cada vez que se inicia la temporada. De no hacerlo debería
pagar las indemnizaciones por la ruptura del contrato. Por ejemplo
Juan ingresa a trabajar en el mes de enero en el Hotel del Lago, ya
que en dicha época comienza la temporada, al finalizar la temporada
en el mes de marzo, el contrato se suspende en su ejecución, pero no
se extingue. En el mes de enero del año siguiente al iniciar la nueva
temporada, el empleador tiene la obligación de convocar nuevamente
a Juan para que preste servicio en el Hotel.

La diferencia de este contrato con el contrato de trabajo eventual, es


que este último, se refiere a necesidades transitorias de la empresa y
no a una actividad que es normal aunque se interrumpa en cada
temporada.

Por último es importante señalar que en este tipo de contrato no se


aplica el periodo de prueba y que a los fines de la
antigüedad (indemnizaciones, vacaciones...), se computa únicamente,
el tiempo efectivamente trabajado. Se aplican todas las normas del
contrato de trabajo y se encuentra contemplado en el Art. 96 de la
L.C.T.
3.5.1 compra-venta mercantil

Concepto de Compraventa Mercantil que proporciona el Diccionario Jurídico


Mexicano (1994), de la Suprema Corte de Justicia de la Nación: (escrito por José
María Abascal Zamora) El Código de Comercio no define la compraventa por lo
que hay que recurrir a la que da el artículo 2248 del Código Civil para el Distrito
Federal, según el cual «habrá compraventa cuando uno de los contratantes se
obliga a transferir la propiedad de una cosa o de un derecho (mexicano), y el otro,
a su vez, se obliga a pagar por ello un precio cierto y en dinero».

A la compraventa comercial se refiere el artículo 371 del Código de Comercio,


para el que son mercantiles todas las que se hagan con el objeto directo y
preferente de traficar. Dicho precepto recoge el concepto que establece el artículo
75 fracciones I y II de dicho Código de Comercio, que atribuye carácter comercial
a todas las adquisiciones, enajenaciones y alquileres verificados con propósito de
especulación comercial respecto de bienes muebles, sea en estado natural, sea
después de trabajados o labrados; así como a las compras y ventas de bienes
inmuebles, cuando se hagan con dicho propósito de especulación comercial. El
propósito de especulación comercial debe ser el principal y existir en el momento
de celebrarse el contrato. Así, si compro un automóvil para mi uso personal, el
hecho de que escoja uno de un modelo y marca determinada, con miras a tener
un coche «más comercial» cuando me deshaga de él, no califica de mercantil mi
adquisición. Como tampoco lo sería si comprado el vehículo y sin haberlo usado
aún, recibiera una buena oferta y me decidiera a venderlo, obteniendo una
ganancia. Esta última venta será comercial, pero no la primera operación, porque
entonces no había en mí la intención o ánimo de especular. El resultado final del
negocio no influye en la calificación de la comerciabilidad de la compraventa. Así,
si el automóvil de mi ejemplo lo adquirí para usarlo y, pasado el tiempo lo vendo
haciéndome de una ganancia, esta circunstancia no convertirá en mercantil la
compraventa. Viceversa, si adquirí el bien con el ánimo de especular y, no
obstante ello, me veo obligado a venderlo con pérdida, la compraventa es
comercial, porque así correspondería a la intención que tuve al realizarla. Salvo
que el adquirente sea comerciante en sentido jurídico (por ejemplo: un industrial
que adquiere materia prima, la transforma y vende), no será compraventa
mercantil la que se haga de bienes que se adquieren para lucrar con ellos una vez
transformados. Por ejemplo: un pintor, respecto de las lonas, marcos, aceites y
pinturas que adquiere para el desempeño de su arte. Pero no hace desaparecer el
carácter de mercantil la circunstancia de que los bienes sufran una cierta
elaboración, en tanto que el ánimo principal sea lucrar con la reventa o posterior
alquiler y no con el trabajo de transformación. Por ejemplo: un comerciante que
adquiere papel para venderlo, lo corta e, incluso, le imprime alguna marca.

3.5.2 préstamo mercantil

Un préstamo mercantil es un contrato traslativo de dominio por el cual el prestador


entrega al prestatario bienes fungibles, con obligación de este último de restituir
otro tanto de la misma especie y calidad. El Código Civil Federal lo regula bajo la
denominación de mutuo. El préstamo se contrae bajo la condición de que las
cosas prestadas se destinen a actos de comercio y no para necesidades ajenas
de este, y presume que los préstamos realizados entre comerciantes se hacen en
tal concepto y con dicha expresión.

La ley reconoce tanto el préstamo regular como el préstamo irregular: el Código de


Comercio denomina a ambos como préstamo, en tanto que el Código Civil
Federal, los distingue como comodato y mutuo, respectivamente; se regula solo en
el Código Civil Federal bajo la denominación de comodato. La diferencia
sustancial entre los préstamos regular e irregular consiste en que el primero tiene
por objeto bienes no fungibles de los que solo puede hacer uso el prestatario, con
obligación de restituir esos mismos bienes; en el segundo, los bienes son
fungibles y el prestatario adquiere el derecho de disponer de los mismos, ya sea
consumiéndolos, transformándolos, vendiéndolos, etc. Con la obligación de
restituir otros tantos de la misma especie, cantidad y calidad.

3.5.3 deposito mercantil

Por el contrato de depósito una parte recibe de otra, que la entrega, una cosa
mueble, con obligación de guardarla y restituirla cuando sea reclamada (art. 1.758
C.C.). Es un contrato de carácter real, pues basta la entrega de la cosa para
quedar constituido y perfeccionado, sin exigirse formalidad alguna. En él persiguen
las partes una finalidad estricta de custodia, lo que permite diferenciarlo de
otros contratos (v. gr., prenda, transporte).

Nuestro Código de Comercio aparte de dedicar reglas especiales al depósito en


almacenes generales (arts. 193 a 198) de aludir a los depósitos bancarios en
algunos preceptos (art. 175, 177, 180), dicta normas de carácter general que
habrán de ser aplicados a toda clase de depósitos en cuanto no se opongan a lo
que con carácter especial establezcan los estatutos de las entidades depositarias
(art. 310). En defecto de unas y otras normas entrarán en juego las del Código
Civil.

El depósito nunca constituye por su propia esencia o naturaleza


una operación de comercio. El carácter mercantil proviene de
su adscripción al tráfico peculiar de un empresario especialmente cualificado para
recibir depósitos o de que se cumplan en la operación los requisitos
del artículo 303.

3.5.4 contrato de adhesión

Un contrato de adhesión es un documento elaborado por el proveedor de un


producto o servicio en que en el que de forma unilateral se establecen los términos
y condiciones (precio, garantía, tiempo de entrega, etc.) aplicables en la
adquisición de un producto o servicio.

Se llama contrato de adhesión porque el consumidor no participa en la redacción


del contrato y si está de acuerdo firma el mismo. Si no lo está, no lo firma.
Ejemplos de algunos contratos de adhesión son: energía, agua corriente, gas, pre
dial, telefonía, televisión de paga, etc.

La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) cuenta con un registro público


de contratos de adhesión, en el que hace un previo análisis de los contratos
presentados por los proveedores para evitar prácticas abusivas, y así otorgarles
una inscripción en dicho registro. El registro de los contratos de adhesión es
obligatorio.
La Ley Federal de Protección al Consumidor (LFPC) establece como principio
básico la información adecuada y clara sobre los diferentes productos y
servicio. La información con la que debe contar el contrato son las características,
precio, especificación correcta de cantidad, composición, garantías, tiempos de
entrega, entre otros.

3.6 contrato de asociación en participación

3.6.1 concepto

El contrato de asociación en participación (o también llamado Joint Venture) es


una alianza temporal entre dos o más personas en la cual los integrantes de la
asociación suman esfuerzos y recursos con el fin de comercializar, desarrollar,
producir un producto u ofrecer un servicio. Algunas personas deciden unir sus
esfuerzos y recursos para aumentar su participación en el mercado al que
pertenecen, aumentar la gama de productos y servicios que ofrecen, entre otras
finalidades que puede tener el contrato de asociación en participación.

Este contrato puede ser realizado tanto por personas físicas como empresas. En
este contrato los participantes se repartirán las utilidades o pérdidas de las
operaciones comerciales para las cuales han reunido sus esfuerzos.

Mediante este contrato las partes buscan una utilidad común mientras cada una
conserva su nombre y personalidad (ninguna absorbe a otra ni son fusionadas). El
objeto de la asociación en participación es variado y no requiere necesariamente
un aporte en dinero, sino que el aporte será libremente decidido por cada uno de
los asociantes.

Los asociantes pueden reunir todos los recursos que deseen, ya sean materiales o
inmateriales, como lo son: estrategias de venta, fuerzas laborales, maquinaria,
capital, tecnologías, participación y dominio del mercado, ventas y redes de
distribución, productos, entre otros. Los asociantes pueden decidir
libremente como serán distribuidas las utilidades o perdidas independientemente
de la cantidad de recursos que aporte cada uno de ellos. Se puede establecer que
cada uno de los socios le corresponda un porcentaje fijo de las utilidades o
pérdidas generadas por este contrato, o bien puede ser elegida libremente la
manera de repartirse las utilidades o perdidas.
La administración de la asociación en participación puede ser colaborativa entre
varios o todos los asociantes o puede ser realizada por un solo asociante.

Esta asociación ofrece varias ventajas como lo es el compartir los riesgos, costos
y recursos operativos. A su vez se pueden disminuir esfuerzos, posicionarse
mejor competitivamente dentro del mercado, aumentar el poder económico para
operar, acceder a nuevos recursos, extender el número de
clientes, manejar mayor información, ganar nuevos asociados de negocio entre
otros beneficios.

Principales características

Las principales características del contrato de asociación en participación son:

 Es una asociación temporal (puede ser a corto, mediano o largo plazo).


 La asociación en participación no crea una nueva empresa (persona jurídica).
 Cada asociante podrá aportar diferentes cosas (muebles, automóviles,
maquinaría, estrategias de venta, entre otros) a libre elección de los
participantes en el contrato de asociación en participación.
 Los asociantes podrán elegir libremente cuanta participación tendrá cada uno
de ellos en las utilidades o pérdidas.
El contrato de asociación en participación no tiene personalidad jurídica propia ni
razón social o denominación. Si lo que se pretende mediante la asociación en
participación es la creación de una nueva empresa se deberá de utilizar alguno de
los contratos de creación de empresa (contrato de sociedad anónima, contrato de
sociedad por acciones simplificadas o contrato de sociedad de responsabilidad
limitada).
Si se desea ser acreedor de las utilidades o perdidas de una empresa mediante la
adquisición de una parte de la misma se deberá de usar el contrato de
compraventa de acciones y participaciones.
Por el contrario si lo que se desea es que una persona comercialice productos u
ofrezca servicios a nombre de otra se deberá de utilizar el contrato de comisión
mercantil.
3.6.2 Formas del contrato
Los contratos válidos son legalmente vinculantes y ejecutables. Los contratos se
pueden establecer por medio de formas diferentes, como escrito, verbal o tácito
mediante actos y conducta. Los contratos típicos de consumidor implican los de
garantía, vivienda, instalaciones, Internet, empleo y tarjetas de crédito. Cada
estado mantiene diferentes reglas de contrato, así que un acuerdo de alquiler que
es válido en California podría no aplicarse en Nueva York.

1. Escrito
2. Oral
3. Tácito

3.6.3 Contenido del contrato

El contenido del contrato es el conjunto de derechos y obligaciones generados por


el contrato.

De una parte las facultades, prerrogativas y derechos y, de otra, las cargas


deberes y obligaciones.

El objeto del contrato son las cosas, deberes y obligaciones que competen a cada
parte.

El contenido depende de la reglamentación autónoma de las partes. Pueden


establecer pactos, cláusulas o condiciones que tengan por conveniente, siempre
que no sean contrarias a las leyes, la moral y el orden público. Una vez
respetadas, las partes pueden establecer el contenido contractual que les parezca
más acorde a sus intereses.

LA CONDICIÓN.

NOCIÓN GENERAL Y REQUISITOS.

La celebración de un contrato bajo determinadas condiciones afecta a la eficacia


del mismo. Tales condiciones son admisibles conforme al principio de autonomía
contractual.

Una vez conformes las partes en someter el contrato a condición, esta se


convierte en condición esencial. Requisitos de la condición:

 El suceso tiene que ser posible.


 Las condiciones no pueden ser contrarias a las leyes y a las buenas
costumbres.
 El acaecimiento del suceso no puede depender de la voluntad de los
contratantes.
CONDICIÓN SUSPENSIVA Y CONDICIÓN RESOLUTORIA.

 Condición suspensiva: cuando la eficacia del contrato


depende del acaecimiento de la condición. Es decir, hasta que no
se produzca el evento, los efectos de los contratos estarán en
suspenso.

 Condición resolutoria: El contrato genera efectos, cual si no


existiera condición; pero, el acaecimiento de la condición supone
la ineficacia sobrevenida del contrato (se resuelve el contrato por
la condición).

También podría gustarte