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FACTORESPOLITICOS

REFORMAS A LA EDUCACIÓN

Ahora ha sido reactivado por la reforma a la ley de educación superior que el gobierno de Guillermo
Lasso envió al Consejo y por la redistribución de recursos a las universidades privadas cofinanciadas
por el Estado. Este nuevo “corte” fue noticia y puso en alarma a universidades y organizaciones
estudiantiles: fue visto como un nuevo golpe a los sectores más necesitados y al público en general de
la región. Pero con dudas sobre cómo algunas de estas universidades administran el dinero de las
becas, la situación no parece tan fácil de resolver. El gobierno no tiene otra opción: para dar
preferencia a las universidades públicas, es inevitable reformar lo que pertenece a las instituciones
cofinanciadoras.

La aprobación de la nueva fórmula por parte del Consejo de Educación Superior (CES) para la
asignación de universidades cofinanciadas fue tomada por ocho universidades privadas, entre ellas la
Pontificia Universidad Católica del Ecuador, la Universidad Católica de Guayaquil y tiendas
denunciadas el 23 de agosto universidad técnica privada. Ocho personas emitieron un comunicado
conjunto asegurando que el gobierno había "recortado más de $12 millones" del presupuesto
destinado a financiar la beca. Lo llamaron "un golpe para los estudiantes desfavorecidos del país" y
llamaron al término "copatrocinador" un "nombre incorrecto".

Sus números suenan terribles: “Bajamos un 10% de los ingresos parciales del IVA, en 2011, a un 3%
el año pasado y finalmente a un 0% el 18 de agosto de 2021”. En su comunicado, las ocho
universidades aseguraron que seguirían respetando a los becarios al redirigir los recursos
institucionales y las inversiones planificadas.
FACTORES ECONOMICOS

PAGOS DE CUOTAS UNIVERSITARIAS

En cuanto al factor económico, uno de los principales temas que podemos señalar que causa estrés a
los estudiantes universitarios en la actualidad es tener que pagar diferentes cuotas mensuales en un
colegio privado o universidad tecnológica, pues como podemos ver la actual crisis económica
provocada por la Pandemia de COVID-19. La economía de Ecuador fue la que más se contrajo en la
historia, con una caída del PIB de 7,3% a 9,6%, según estimaciones del Banco Central de Ecuador, o
una caída, según estimaciones del Banco Central de Ecuador, de 10,9% según el FMI.

Esta crisis por ende impacta a las familias de estudiantes de universidades privadas y a los mismos
estudiantes ya que la mayoria despues de pandemia han tenido un incrementado deficit economico ya
que dentro de muchos casos podemos apreciar que se generó la reduccion de sueldo dentro del 65%
de las empresas funcionarias en el pais y a su vez hubo un incremento del 47% en despidos y
reduccion de personal de las mismas empresas, por ende en la actualidad el pago de las cuotas
universitarias a generado un incrementado estrés que por ende refleja en el ambito academico del
estudiante en función.

SISTEMA TRABAJO – ESTUDIO POR PARTE DE LOS ESTUDIANTES.

Otro factor economico que podemos apreciar es el actual sistema trabajo- estudio el cual dentro de
estos ultimos 5 años en los cuales hemos logrado apreciar una muy grande fisura dentro de la
economia del pais la cual a generado la crisis economica ya plasmada a tenido un incremento
potencial por diversos factores economico-sociales dentro de los cuales podemos indicar que en la
actualidad de cada 10 estudiantes 8 proceden a verse en la obligación a trabajar y estudiar al mismo
tiempo.

Por ende en base a lo anterior nombrado podemos afirmar que los actuales grupos universitarios
poseen un incrementado desgaste fisico y mental lo cual les procede a generar a corto plazo un
elevado nivel de estrés devido a muchos factores como son la falta de descanso y la falta de
organización dentro de los horarios de ambas obligaciones; lo cual podemos indicar que todo esto
procede a reflejar muy aparte de un alto nivel de estrés un descuido potencial de los estudiantes
universitarios con su rendimiento academico.

FACTORES SOCIOCULTURALES.

ADAPTACIÓN DE ESTUDIANTES A LA VIRTUALIDAD POR PANDEMIA.


Siendo que uno de los principales factores socioculturales que nos deja la pandemia es su surgimiento
y desarrollo, acarreando una serie de consecuencias en la población en general y en particular en el
contexto escolar universitario: suspender la instrucción presencial y actividades consideradas no
esenciales.

Sin embargo, la cancelación de la asistencia a clase requiere una transición y posterior transición de la
instrucción a la modalidad en línea, un desafío tanto para los equipos docentes universitarios como
para los estudiantes, hacia una revisión integral del material que originalmente fue diseñado y
configurado para la instrucción presencial sin la planificación necesaria. que exige un nuevo formato
de estas características.

En el campo de la psicología social y emocional, varias autoridades han evaluado las consecuencias
que ha tenido el COVID19 en la población en general. Dado que se trata de una situación inédita,
impredecible e incontrolable, el contexto facilita la aparición de la ansiedad y los consiguientes
problemas de salud mental. Un estudio reciente concluyó que aumentaba los sentimientos de
incertidumbre y malestar psicológico en la población en un 78% y un 6%, respectivamente. En el
mismo estudio se destacan indicadores de miedo, estrés o ansiedad, y se piensa que la ontología de
este fenómeno es muy diversa, como las personas que se quedan sin trabajo, el miedo a infectarse con
el virus o a los que han muerto. un ser querido una, entre otras, la casuística. Y son el miedo, la
ansiedad y el estrés los que han surgido en muchos estudios realizados en la población general.

A su vez, podemos señalar la influencia de este factor como la falta de conocimientos informáticos
y/o tecnológicos entre docentes y estudiantes. La pandemia ha demostrado la falta de recursos y
medios tecnológicos para paliar o paliar estas consecuencias creadas por el COVID19 y su adecuación
metodológica en la educación superior. Es aquí donde se evidencian las consecuencias creadas por el
COVID19 en el contexto universitario y por extensión en la (re)adaptación hacia el modelo de
evaluación digital y la mayor necesidad de competencias técnicas y herramientas de digitalización de
la comunidad universitaria.

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