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Adenoidectomía y amigdalectomía
C. Martins Carvalho, C. Clodic, F. Rogez, L. Delahaye, R. Marianowski
Plan Introducción
■ Introducción 1 La adenoidectomía es la resección de las vegetaciones
■ Reseña anatómica 2 adenoideas, que constituyen el tejido linfoide de la rino-
■
faringe. Se trata de una intervención quirúrgica reciente,
Evaluación preanestésica 2
que se remonta al siglo XIX. La amigdalectomía es la
■ Adenoidectomía 3 extirpación de las amígdalas palatinas, que son el tejido
Indicaciones 3 linfoide de la orofaringe. Es una intervención quirúrgica
Contraindicaciones 3 más antigua, que se describe en escritos hindúes de 3.000
Anestesia 3 años a.C. La amigdalectomía con o sin adenoidectomía es
Colocación 3 una de las intervenciones más realizadas en otorrinolarin-
Técnica quirúrgica 3 gología (ORL). En el 90% de los casos, los pacientes son
Modalidades de vigilancia postoperatorias 5 niños de 4-10 años o preadolescentes. La frecuencia de la
Complicaciones postoperatorias 5 amigdalectomía en Francia, por ejemplo, era de 19/10.000
Postoperatorio habitual y seguimiento 6 habitantes en 1996 [1] .
■ Amigdalectomía 6 En Francia, se realizan alrededor de 50.000 amigda-
Indicaciones 6 lectomías anuales asociadas o no a una adenoidectomía
Contraindicaciones 7 (fuente: Programme de Médicalisation des Systèmes
Anestesia 7 d’Information [PMSI] 2008) [2] . En comparación, en Esta-
Colocación 7 dos Unidos se efectúan 300.000-400.000 amigdalectomías
Técnica quirúrgica 8 anuales [3] .
Estudio histológico de las piezas anatómicas 11 La adenoidectomía y la amigdalectomía han tenido
Modalidades de vigilancia postoperatorias 11 siempre dos indicaciones principales: la resección de un
Complicaciones postoperatorias 11 tejido linfoide inflamatorio, que es el foco de infecciones
Condiciones para la cirugía amigdalina ambulatoria 12 de repetición, y la eliminación de un obstáculo en el caso
de la hipertrofia adenoidea o amigdalina sintomática. Las
Adenoidectomía
Indicaciones
Las indicaciones quirúrgicas más frecuentes son las
enfermedades infecciosas de repetición de tipo otitis
medias agudas, la otitis seromucosa crónica refracta-
ria al tratamiento médico durante más de 3 meses y
los síndromes obstructivos de tipo SAOS en los niños,
en la mayoría de los casos con una amigdalectomía
asociada.
La otitis media aguda no es una indicación de adenoi-
dectomía [1] . En cambio, la otitis media aguda recidivante
con aparición de al menos tres episodios en 4 meses,
separados cada uno de un intervalo libre de 3 semanas
y refractaria al tratamiento médico sí lo es.
La otitis seromucosa asintomática sin alteraciones
audiométricas no es una indicación quirúrgica. En cam-
bio, la otitis seromucosa causante de una hipoacusia de
transmisión superior a 30 dB durante más de 3 meses, a Figura 2. Posición del niño durante la adenoidectomía.
pesar de un tratamiento médico adecuado, es una indi-
cación quirúrgica. En la misma intervención se suelen La edad del niño no constituye una contraindica-
colocar un dren transtimpánico [1] . ción para la intervención, siempre que la indicación sea
Si existe una obstrucción crónica de las vías respiratorias correcta [1] .
superiores causante de SAOS, a pesar de un tratamiento
médico, se recomienda una adenoidectomía. Si existe una
hipertrofia de las amígdalas palatinas, la adenoidectomía
se asocia a una amigdalectomía. En el caso contrario, si no
Anestesia
existe una hipertrofia de las amígdalas palatinas [12] o en La adenoidectomía puede realizarse sin intubación en
los niños menores de 1 año [13] , la adenoidectomía puede los niños en algunos casos. Entre el año y los 6 años,
realizarse sola, con resultados satisfactorios. cuando el niño carece de antecedentes especiales y de fac-
Las rinofaringitis de repetición son muy frecuentes tores de riesgo obstructivo respiratorio (American Society
en los niños y, por sí solas, no suponen una indica- of Anesthesiologists I [ASA I]), la adenoidectomía puede
ción para la adenoidectomía. En cambio, cuando se efectuarse sin intubación [11] . En los demás casos, se
acompañan de una obstrucción de las vías respiratorias, aconseja encarecidamente una protección de las vías res-
de otitis medias de repetición o de otitis seromucosa cró- piratorias y una intubación con un anestésico clásico. En
nica refractaria al tratamiento médico, la indicación de la los adultos, la intervención se realiza siempre bajo intu-
adenoidectomía se añade a las indicaciones citadas con bación. Es obligatorio contar con una vía venosa, que
anterioridad [1] . se coloca tras la pérdida del conocimiento después de la
La hipertrofia de las vegetaciones adenoideas no es inducción.
específica de la edad pediátrica y la utilización cada Una infección de las vías respiratorias superiores
vez más frecuente del nasofibroendoscopio permite diag- aumenta el riesgo de complicaciones respiratorias al
nosticarla en adultos. Esta hipertrofia pocas veces es provocar desaturaciones, pausas respiratorias e incluso
sintomática en los adultos, pero existen cuadros obstruc- broncoespasmos. Por tanto, la intervención se difiere 3
tivos que requieren su resección. Hay que recordar que semanas si el niño presenta signos de broncoespasmo,
ciertas enfermedades más graves pueden manifestarse por laringitis o una temperatura superior a 38 ◦ C [11] .
una hipertrofia del tejido linfoide rinofaríngeo, como un
linfoma o la infección por el virus de la inmunodefi-
ciencia humana (VIH). En los adultos, los adolescentes y Colocación
los niños inmunodeprimidos, cualquier tumefacción del
cavum asociada a una otitis seromucosa unilateral obliga a Algunos cirujanos utilizan la posición de Rose [16] , en la
realizar una exploración radiológica y biopsias del cavum que el cirujano se sitúa detrás del niño, que está en decú-
para descartar un proceso maligno. bito supino, con extensión cervical mediante un rodillo
deslizado bajo las escápulas. Esta posición sólo es posible
si el niño está intubado.
Contraindicaciones En los demás casos, el niño está en decúbito supino
con la cabeza en el mismo eje del cuerpo. El anestesista
Existe una contraindicación absoluta para la adenoidec- se sitúa a la cabeza del niño y la sujeta durante la inter-
tomía: la presencia conocida de una anomalía vascular vención (Fig. 2). El cirujano se dispone a la derecha del
rinofaríngea de tipo carotídeo obliga a anular la interven- niño. La orofaringe debe estar bien iluminada con una
ción, debido al riesgo de lesión vascular y de hemorragia luz frontal o con una lámpara cialítica. Hay que reali-
profusa, con peligro de fallecimiento del paciente [14] . Es zar varias aspiraciones, la primera por parte del cirujano,
infrecuente que los pacientes conozcan este tipo de varia- que aspira la faringe tras la intervención, y la segunda
ciones anatómicas, salvo en algunas enfermedades (como por parte del anestesista, que aspira la nariz y el cavum
la microdeleción 22q11) o si se han realizado pruebas del niño también después del procedimiento, mientras el
complementarias con anterioridad. niño se despierta y llora.
Existen contraindicaciones relativas, como las fisuras
velopalatinas, las fisuras velares submucosas o el síndrome
22q11, debido al riesgo de insuficiencia velar postopera- Técnica quirúrgica
toria [15] .
Los trastornos de la hemostasia deben detectarse y no El objetivo de la adenoidectomía consiste en resecar las
contraindican la intervención si se instaura un proto- vegetaciones adenoideas sin lesionar los tejidos adyacen-
colo terapéutico adecuado para la anomalía observada. Un tes (el orificio faríngeo de la tropa auditiva, el velo del
estado febril agudo obliga a diferir la intervención. paladar, la pared posterior de la faringe y las coanas) [16] .
La adenoidectomía puede realizarse sola o asociada a contraindique la intervención quirúrgica por el riesgo
una amigdalectomía. En Francia, por ejemplo, la mayo- de lesión vascular y de hemorragia que podría conlle-
ría de los ORL realizan la adenoidectomía por raspado var [14] .
por vía transoral «a ciegas», es decir, sin tener una visión La intervención se continúa con la palpación del
directa del extremo del instrumento cuando está en el velo del paladar y del paladar óseo para descartar
cavum [8, 17] . En la literatura, los autores anglosajones des- una fisura palatina subyacente. En la consulta, la pal-
criben una técnica algo distinta con visualización del pación del paladar en un niño pequeño no siempre
cavum por vía oral mediante un espejo laríngeo deslizado está desprovista de riesgo para el dedo del médico. Si
bajo el velo del paladar. Las publicaciones más recientes existe una fisura velar submucosa, una adenoidectomía
parecen dar prioridad a la visualización del cavum durante parcial permite evitar una insuficiencia velar posto-
la intervención, lo que implica una intubación y el uso de peratoria. Se recomienda resecar alrededor de los dos
otros instrumentos de tipo microdesbridador o aspirador- tercios superiores del paquete adenoideo y dejar el tercio
coagulador [14, 16, 18] . inferior [16] .
Con independencia de la técnica utilizada, la pri-
mera etapa es esencial y es siempre la misma: la Adenoidectomía con cureta o adenótomo
evaluación con el dedo del volumen adenoideo y de
La adenoidectomía con cureta es la técnica más usada,
la ausencia de latido arterial aberrante. El dedo se
para la que se emplea un adenótomo que presenta un
desliza en la rinofaringe y el volumen de las vegetacio-
plano de sección horizontal y, en ocasiones, dientes en
nes se aprecia para guiar el procedimiento quirúrgico.
los que quedan atrapados los fragmentos de las vegeta-
Mediante esta maniobra, también se verifica la ausen-
ciones seccionadas [17] . El tamaño de la cureta se escoge
cia de un latido arterial que podría corresponder a una
en función de la edad del niño; existen varios tamaños
anomalía de posición de un tronco arterial (trayecto
de cureta posible y varias curvas (Fig. 3). La anchura de
carotídeo aberrante en la rinofaringe, por ejemplo) que
la cureta es el factor decisivo, pues debe ser inferior a la
distancia entre las dos trompas auditivas para evitar su
lesión.
En la mayoría de los casos en Francia, esta técnica se
realiza «a ciegas», tras la palpación simple del cavum con
el dedo [19] . Sin embargo otros cirujanos colocan un espejo
laríngeo detrás del velo para mayor precisión, con el niño
intubado [16] .
Una vez finalizada la inducción anestésica y con el
niño dormido, se coloca un abrebocas respetando los
dientes y los labios. El cavum se explora con un dedo.
La cureta se introduce detrás del velo del paladar, tras
lo que se verticaliza y se apoya sobre la pared poste-
rior del cavum en posición medial. Con un movimiento
vertical de la muñeca, se secciona el paquete adenoideo
de arriba hacia abajo con una o varias pasadas (Fig. 4).
Este paquete se recupera por aspiración de la orofaringe,
porque se debe evitar su broncoaspiración. Para evaluar
la eficacia del procedimiento y, en ocasiones para com-
pletarlo, se desliza un dedo en el cavum al final de la
Figura 3. Material quirúrgico necesario para la adenoidecto- intervención.
mía: abrebocas de Jennings, depresor lingual angulado y cureta La adenoidectomía por raspado [17] suele realizarse sin
o adenótomo de Moure (en este caso, sin dientes). intubación en los niños, según ciertos criterios citados con
Técnica quirúrgica
Evolución de las técnicas
de amigdalectomía con el tiempo
Se han descrito dos métodos quirúrgicos: la amigda-
lectomía extracapsular, donde se efectúa una resección
total del tejido linfoide amigdalino mediante una disec-
ción pericapsular, y la amigdalectomía intracapsular,
donde la resección es parcial, sin identificar la cápsula
amigdalina, que se conserva. Se aconseja realizar una
amigdalectomía extracapsular en los casos de amigdalitis
de repetición, porque la resección del tejido amigdalino Figura 7. Instrumental para una amigdalectomía. De
debe ser completa para evitar cualquier recidiva. En cam- izquierda a derecha y de arriba abajo: pinza de tracción amigda-
bio, en las indicaciones obstructivas, como el SAOS, se lina de Bourgeois; portaagujas; abrebocas de tipo Boyles Davis o
puede plantear un procedimiento parcial de amigdalecto- Kilner; pinza de tracción amigdalina; elevador del velo; peine de
mía intracapsular, porque el objetivo de la intervención Jost; pinza de disección; tijeras de Metzenbaum; pinza bipolar
es eliminar el obstáculo [28] . angulada.
En el pasado, se realizaba la amigdalectomía extracapsu-
lar con un amigdalótomo (Sluder) en los niños, pero esta amigdalina, para no traumatizar los músculos de los pila-
técnica se ha abandonado progresivamente desde hace res anteriores y posteriores. Se puede efectuar con un
unos 20 años, sustituyéndola por la amigdalectomía extra- peine de Jost, una espátula roma, tijeras de Metzenbaum
capsular por disección [7] . Esta última técnica, con pinza o con el dedo del cirujano para liberar la amígdala de los
monopolar o bipolar, es la más utilizada en los niños y músculos adyacentes y de los pedículos vasculares después
adultos en la actualidad. de la coagulación progresiva con la pinza bipolar.
Desde hace unos 10 años, han aparecido otros instru- En el polo superior, debe realizarse una hemostasia cui-
mentos quirúrgicos y las técnicas han evolucionado, con dadosa del pedículo superior antes de seccionarlo. Una vez
el uso de la radiofrecuencia y del microdesbridador. que el polo superior se ha liberado, el procedimiento se
continúa hacia el polo inferior. El despegamiento se efec-
Amigdalectomía extracapsular túa hasta el surco amigdalogloso, que es la zona de unión
por disección con el tejido linfoide de la base de la lengua. La hemosta-
sia también debe ser cuidadosa en el polo inferior antes de
La primera etapa de la intervención es la colocación de liberar toda la amígdala, debido a la presencia del pedículo
los paños quirúrgicos y del abrebocas. inferior.
La exposición es óptima cuando se visualizan los polos
superiores e inferiores de ambas amígdalas. En ocasiones, Tercera etapa quirúrgica: amigdalectomía
esta visualización es difícil debido a una hipertrofia de contralateral
la base de la lengua. En caso de dificultad, la recoloca-
Se realiza del mismo modo.
ción de la pala del abrebocas puede ayudar a obtener una
exposición mejor, al desplazar la base de la lengua.
Después de colocar el abrebocas, el tubo de intubación Cuarta etapa quirúrgica: verificación de la hemostasia
puede haberse introducido unos centímetros, lo que pro- La verificación de la hemostasia de los lechos amig-
voca una intubación selectiva. Por tanto, el anestesista dalinos se realiza al final de la intervención con la
debe verificar su situación correcta antes de continuar la pinza bipolar. Algunos cirujanos cierran el abrebocas unos
intervención. minutos y después reexploran los lechos amigdalinos para
El instrumental utilizado se muestra en la Figura 7 y las detectar una posible hemorragia invisible por la compre-
etapas de la intervención, en la Figura 8. sión de la pala sobre la base de la lengua.
Al final de la intervención, es necesario realizar un
Primera etapa quirúrgica: incisión de la mucosa recuento de las gasas y comprobar que no haya lesiones
faríngea y exposición del plano extracapsular dentales.
El polo superior de la amígdala se sujeta con la pinza de Con esta técnica, O-Lee ha evaluado que la interven-
tracción amigdalina hacia la úvula en la línea media. Esta ción dura 24,5 ± 7,8 minutos, en un estudio reciente que
maniobra permite visualizar bien el plano de disección, incluyó a 106 niños de 2-10 años [32] .
que es el límite entre la cápsula amigdalina propiamente Algunos cirujanos prefieren la pinza monopolar a la
dicha y el pilar anterior. La incisión se realiza a este nivel, bipolar para la disección y la hemostasia.
lo más cerca posible de la amígdala para conservar el pilar
anterior, con bisturí o con tijeras de Metzenbaum, depen-
diendo del cirujano, para situarse en el plano de disección Amigdalectomía extracapsular
amigdalina extracapsular. Este plano es reconocible por con amigdalótomo
el color nacarado y la consistencia fibrosa de la cápsula
amigdalina [17, 31] . El amigdalótomo o Sluder es una pinza en forma de
La disección subsiguiente depende de esta primera guillotina en la que se introduce la amígdala y después
etapa quirúrgica, sobre todo para el cirujano principiante, se secciona. Esta técnica se ha utilizado durante mucho
porque expone el plano de disección. En caso de flemón tiempo debido a su rapidez (menos de 1 minuto), pero
periamigdalino o de amigdalitis de repetición, este plano se ha abandonado de forma progresiva, porque se rea-
puede ser fibroso, adherente y difícil de disecar. liza sin intubación y, por tanto, sin protección de las
vías respiratorias superiores. Este procedimiento ya no
Segunda etapa quirúrgica: disección pericapsular y se enseña, pero el 12% de los médicos con práctica pri-
hemostasia de los pedículos vasculares vada aún lo utilizan según una encuesta de la Association
La disección se realiza de arriba hacia abajo y de la des Anesthésistes-Réanimateurs Pédiatriques Français rea-
superficie a la profundidad, en contacto con la cápsula lizada en 1996 [7] .
tres elementos: una hoja rotatoria, un mango conectado La amigdalectomía intracapsular con microdesbridador
a un aspirador y un motor [5, 28] . El cirujano selecciona está indicada en la hipertrofia amigdalina sintomá-
la velocidad y el sentido de rotación con un pedal. La tica, porque permite una reducción considerable del
hoja está ligeramente angulada y tiene un diámetro de 5- volumen amigdalino; alrededor del 95% del volumen
7 mm. El extremo de la hoja tiene una cara cortante y una tisular se secciona y se aspira. La amigdalectomía intra-
cara protegida, para actuar sobre la zona de resección sin capsular con microdesbridador es tan eficaz como la
lesionar los tejidos adyacentes, sobre todo los pilares del amigdalectomía extracapsular convencional en el SAOS
velo; la velocidad de rotación es de 2.000 rotaciones por infantil [27] , pero la resección del tejido amigdalino es
minuto [5] . incompleta y deja intactos un 5% de tejido y la cáp-
El procedimiento se realiza bajo anestesia general, con sula amigdalina, por lo que se prefiere la amigdalectomía
intubación orotraqueal, después de colocar un abrebo- extracapsular por disección en los casos de amigdalitis de
cas como se ha descrito antes para la amigdalectomía repetición.
extracapsular por disección [3, 13, 33] . La resección se efec-
túa en paralelo al borde libre de la amígdala, de abajo
hacia arriba, con cuidado para no lesionar los pilares ni la
Amigdalectomía por coblación
úvula, y de medial a lateral. El tejido amigdalino se sec- La resección por coblación puede utilizarse para la amig-
ciona con la hoja rotatoria y se aspira con la cánula. La dalectomía intra y extracapsular. El funcionamiento de
pérdida de sangre es escasa y la hemostasia puede com- este método se basa en una corriente de radiofrecuen-
pletarse mediante una compresión del lecho con una gasa cia que, aplicada sobre una solución salina conductora, se
embebida en suero fisiológico con o sin adrenalina (1 mg transforma en energía cinética capaz de romper los enla-
de adrenalina en 10 ml de suero fisiológico) e incluso con ces moleculares con una energía baja [35] . De este modo,
el uso de una pinza bipolar si es preciso. se puede lograr la disección con una difusión de calor
de reintervención quirúrgica por hemorragia tardía pos- • la ruptura de la pared faríngea durante la intervención
tamigdalectomía en una población de 41 niños con quirúrgica inicial;
enfermedad de Von Willebrand de tipo 1 y en quienes • una hemorragia profusa con un flujo elevado;
se realizó una adenoamigdalectomía [41] . • la visualización de un hematoma de la base de la lengua,
La hemorragia precoz puede producirse en el 1,4% de del suelo de la boca, del velo del paladar o de la pared
los pacientes, en la mayoría de los casos en las primeras lateral de la faringe;
8 horas; sólo afecta a un 0,1% de los pacientes entre la 8a y • uno o incluso dos antecedentes de reintervención qui-
la 24a hora [42] . rúrgica para realizar hemostasia;
El riesgo de hemorragia tardía postamigdalectomía se • una hemorragia tardía cuando la cicatrización de los
estima en un 2-10% según algunos autores [43] y en un lechos está casi finalizada;
3-4% según otros [3, 44] . • la existencia de un signo de Claude-Bernard-Horner
Windfuhr ha publicado una serie de 7.132 pacientes que puede sugerir la presencia de un «seudoaneurisma»
(adultos y niños) en quienes se realizó una amigdalec- carotídeo y hacer que se realice una tomografía
tomía asociada o no a adenoidectomía; el 2,86% de los computarizada (TC) con contraste e incluso una
pacientes tuvieron una hemorragia postoperatoria, de los angiorresonancia magnética (angio-RM) en este caso.
que el 63% eran varones [45] . En el 77% de los casos, En estas circunstancias, está indicado llevar a cabo
fue una hemorragia precoz en las primeras 24 horas. una cervicotomía homolateral con ligadura de la arteria
Según el autor, la edad (menores de 4 años o mayores de carótida externa en un punto distal a la arteria tiroidea
70 años), el sexo masculino, los antecedentes de amig- superior para lograr la hemostasia.
dalitis de repetición y de mononucleosis infecciosa son Windfuhr ha publicado un estudio retrospectivo que
factores de riesgo de hemorragia postamigdalectomía. recoge los casos de mortalidad o secuelas graves por una
Según Walker, la técnica quirúrgica no influye en la tasa hemorragia postadenoidectomía y amigdalectomía. Los
de hemorragia postamigdalectomía; en cambio, la edad es distintos casos descritos corresponden a pacientes con
un factor de riesgo, con un 0,6% de hemorragia postamig- trayectos arteriales aberrantes y variaciones anatómicas.
dalectomía en el grupo de 0-4 años (308 niños) frente a En ellos, las consecuencias son nefastas para el paciente,
un 10,1% en el de los mayores de 18 años (238 pacientes), su familia y el médico. Los signos de alerta consisten en
con p < 0,001 [43] . hemorragias episódicas y repetidas que ceden de forma
Desde el punto de vista clínico, la hemorragia pos- espontánea y la edad inferior a 12 años. Este autor acon-
toperatoria puede manifestarse por la expulsión de seja una exploración cuidadosa de la orofaringe antes de la
expectoración sanguinolenta abundante y el diagnóstico cirugía y una disección lo más cercana posible a la cápsula
se establece con rapidez. En ocasiones, la hemorra- amigdalina [14] .
gia se deglute y el diagnóstico se realiza al explorar Las complicaciones respiratorias son sobre todo la
la orofaringe con el depresor lingual y una luz desaturación postoperatoria con broncoespasmo y/o
frontal. laringoespasmo.
Por tanto, el cirujano debe explorar los lechos amig- En pacientes con SAOS, las complicaciones respiratorias
dalinos en la sala de despertar, antes de que trasladar graves se producen en la primera hora de postoperatorio
al paciente al servicio de hospitalización convencional en el 70% de los casos, mientras que las complicaciones
y antes de reanudar la alimentación. La explora- respiratorias leves pueden aparecer hasta la 6a hora [2] .
ción se repite después antes del alta, tanto si ésta Los factores de riesgo de complicaciones respiratorias
se da el mismo día (cirugía ambulatoria) o el día postoperatorias indicados por la SFAR son la gravedad del
siguiente. SAOS y el grado de desaturación arterial postoperatoria.
Cualquier hemorragia precoz requiere una reinter- Hay que citar otras complicaciones menos súbitas, que
vención quirúrgica bajo anestesia general para realizar son de tipo quirúrgico.
hemostasia sin demora, lo que puede llevarse a cabo con • Los traumatismos dentales no son infrecuentes, bien
una pinza mono o bipolar después de visualizar el vaso durante la intubación al apoyar el laringoscopio en la
responsable. En ocasiones, puede requerirse una ligadura arcada dental superior, o bien al colocar el abrebocas al
vascular con pinza o incluso una sutura de los pilares principio de la intervención. El diente se puede luxar
para lograr una hemostasia satisfactoria, pues el proce- de forma parcial, pero permaneciendo en el alvéolo; en
dimiento de hemostasia puede verse dificultado por la tal caso, hay que recolocarlo bien en el alvéolo y adver-
retracción del vaso en los músculos faríngeos adyacentes tir al paciente cuando despierte. Hay que prestar una
o por la presencia de un tejido de granulación, que es fria- atención especial a los dientes rotos o totalmente luxa-
ble debido a la cicatrización. En las formas graves, se debe dos, pues pueden migrar a la faringe y después al árbol
plantear de forma individualizada la ligadura de la caró- respiratorio.
tida externa homolateral, tras localizar la arteria tiroidea • Las quemaduras labiales, sobre todo de las comisu-
superior. Si el centro cuenta con los medios adecuados, ras, pueden producirse cuando se utiliza la coagulación
la embolización arterial puede ser una alternativa a esta monopolar.
ligadura [2] . • Las lesiones de la mucosa faríngea de los pilares ante-
Cualquier hemorragia diferida requiere una explora- riores o posteriores pueden producirse cuando hay
ción física ORL y una hospitalización durante 24 horas dificultades quirúrgicas, si no existe plano de disección,
para vigilancia. Si existe un coágulo que ocupe el lecho sobre todo después de un flemón periamigdalino.
amigdalino, se debe retirar para visualizar el origen de • También pueden producirse lesiones de los músculos
la hemorragia. Si no se observa una hemorragia activa faríngeos en caso de disección difícil. Exponen a una
(lechos amigdalinos libres y secos) ni signos preocupantes lesión vascular de los troncos arteriales perifaríngeos.
(hemodinámica y concentración de hemoglobina norma-
les), se debe realizar una vigilancia en una unidad de
hospitalización convencional, con exploraciones periódi- Condiciones para la cirugía amigdalina
cas de los lechos. Si hay una hemorragia activa, se debe ambulatoria
reintervenir al paciente sin demora, teniendo en cuenta
la inducción anestésica con el estómago lleno, así como La amigdalectomía realizada de forma ambulatoria per-
una posible hipovolemia o anemia, que se debe corregir mite el regreso del paciente a su domicilio la misma tarde
de inmediato. de la intervención. Se deben cumplir las siguientes condi-
Es excepcional que el origen de la hemorragia sea un ciones:
tronco arterial perifaríngeo, pero algunos signos pueden • ausencia de enfermedades concurrentes, sobre todo res-
alertar de ello: piratorias;
• ausencia de trastornos de la hemostasia; [12] Joshua B, Bahar G, Sulkes J, Shpitzer T, Raveh E. Adenoi-
• edad superior a 3 años; dectomy: long-term follow-up. Otolaryngol Head Neck Surg
• ausencia de SAOS; 2006;135:576–80.
• criterios habituales de proximidad del domicilio y del [13] Sargi Z, Younis RT. Tonsillectomy and adenoidectomy tech-
ambiente familiar. niques: past, present and future. ORL 2007;69:331–5.
Estos criterios habituales consisten en poseer un telé- [14] Windfuhr JP, Schloendorff G, Sesterhenn AM, Prescher A,
fono, un medio de locomoción, vivir a menos de Kremer B. A devastating outcome after adenoidectomy and
30 minutos de un centro hospitalario, así como tener tonsillectomy: ideas for improved prevention and manage-
la capacidad de comprensión y de autonomía para este ment. Otolaryngol Head Neck Surg 2009;140:191–6.
tratamiento. Es indispensable la presencia de una tercera [15] Bakhos D, Pondaven S, Devault M, Lescanne E. Comment
persona en el domicilio después de la intervención y la faire une adénoïdectomie chez l’enfant ? Ann Otolaryngol
Chir Cervicofac 2009;126:162–4.
noche siguiente.
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La vigilancia hospitalaria postoperatoria debe ser de
adenoidectomy. Oper Tech Otolaryngol Head Neck Surg
6 horas y el procedimiento anestésico debe evitar las
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náuseas y los vómitos, además de proporcionar analgesia [17] Guerrier Y, Benevant R. Adénoïdectomie, amygdalectomie.
postoperatoria. La analgesia se continúa en el domicilio En: Portmann M, Guerrier Y, editors. Traité de technique chi-
con los protocolos analgésicos preestablecidos. rurgicale ORL et cervico-faciale. Tome III Paris: Masson;
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tica y, en ocasiones, asociados a corticoides durante un breathing. Oper Tech Otolaryngol 2005;16:229–31.
breve período. En la práctica pediátrica, se prescribe para- [19] Dhanasekar G, Liapi A, Turner N. Adenoidectomy techni-
cetamol en jarabe en dosis de 15 mg/kg/6 h, es decir, una ques: UK survey. J Laryngol Otol 2010;124:199–203.
dosis cada 6 horas asociado y alternando con fosfato de [20] Al-Mazrou KA, Al-Qahtani A, Al-Fayez AI. Effective-
codeína en dosis de 1 mg/kg/4-6 h. ness of transnasal endoscopic powered adenoidectomy in
Es posible administrar una dosis de corticoides de tipo patients withchoanal adenoids. Int J Pediatr Otorhinolaryn-
prednisolona (1 mg/kg/día) la mañana siguiente a la gol 2009;73:1650–2.
intervención e incluso durante varios días con fines anal- [21] Ezzat WF. Role of endoscopic nasal examination in reduc-
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Si se realiza una amigdalectomía ambulatoria, se Otorhinolaryngol 2010;74:404–6.
entrega a los progenitores documentos por escrito al alta [22] Pagella F, Matti E, Colombo A, Giourgos G, Mira E. How
del niño, consistentes en la prescripción al alta, el informe we do it: a combined method of traditional curette and
quirúrgico, la cita de control, así como las indicaciones power-assisted endoscopic adenoidectomy. Acta Otolaryngol
que deben seguirse en el domicilio y un número de telé- 2009;129:556–9.
fono de contacto por si fuera preciso. [23] Manach Y, Van Den Abbeele T, Lescanne E. Complications
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Cualquier referencia a este artículo debe incluir la mención del artículo: Martins Carvalho C, Clodic C, Rogez F, Delahaye L, Marianowski
R. Adenoidectomía y amigdalectomía. EMC - Cirugía otorrinolaringológica y cervicofacial 2013;14(1):1-14 [Artículo E – 46-330].
Disponibles en www.em-consulte.com/es
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