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Con base a los principios de la Nueva Escuela Mexicana, se describe al Supervisor Escolar
que queremos, como una autoridad educativa dispuesta a apoyar a los directivos y
colectivos docentes en las distintas acciones encaminadas a mejorar las prácticas
educativas; estimula en los directivos y maestros el incremento continuo de su
profesionalización; genera las condiciones educativas para propiciar mejores prácticas
docentes y directivas; gestiona con otras autoridades, instituciones, familias y comunidad
para que las escuelas a su cargo, cuenten con condiciones necesarias para apoyar el
aprendizaje y bienestar de los alumnos, así como responder a las transformaciones y
desafíos de la educación actual. Sin embargo en la realidad, la principal función de la
Supervisión Escolar está centrada en las tareas de inspección y administración.
Uno de los principales problemas que afectan a la Supervisión Escolar, es que los aspectos
académicos quedan en segundo plano de importancia, debido a que las mismas
autoridades educativas priorizan la atención de asuntos administrativos, como:
verificación del correcto llenado de Estadística, datos del personal de cada escuela en
plataformas, revisión y compilación de actas de conformación de diferentes comités,
revisión y compilación de cortes de caja de los comités, realización de inventarios,
elaboración sin previa capacitación del Programa Interno de Protección Civil y en los
últimos años se ha puesto de moda el entregar informes con evidencias de cada una de las
acciones indicadas a través de correo electrónico, como campañas: de vacunación, de
diabetes, de orientación sexual, día Nacional de Las Lenguas Indígenas y atención de
diferentes convocatorias. Por lo anteriormente expuesto, las funciones de la Supervisión
Escolar se reducen a las cuestiones administrativas, dejándoles poco tiempo para lo que
debería ser más importante: “Visitas frecuentes a las escuelas para observar el
desempeño del docente” y de esta forma apoyar a que los docentes mejoren su praxis
educativa con impacto en la mejora de los aprendizajes de los educandos.
La Supervisión Escolar, dista de poder cumplir con los principios de la Nueva Escuela
Mexicana, sobre todo en cuanto a lo que corresponde al “seguimiento sistemático al
trabajo educativo de directivos y docentes para asegurar que este se centra en el logro de
los propósitos educativos establecidos en el currículo vigente”, en algunos casos u
ocasiones las autoridades educativas de mayor jerarquía entorpecen el cumplimiento de
esta función, en otros casos depende también del estilo y el tipo de supervisión que
ejercen.
Referencias bibliográficas: