Capítulo III

Arquitectura del cuidado

Autor - Irene Vallejo
Alejandro Burgos

Este capítulo es una mirada, un llamado a la importancia y los beneficios de leer, solo al
iniciar vemos como se nos cita al maestro Quintiliano quien dice “los libros hacen los
labios”, esto no es mas que uno de los beneficios de el conocimiento que se obtiene al leer,
esto se refleja en nuestra capacidad de ser críticos como persona ante cualquier situación,
pero además ayuda al enriquecimiento del léxico, lo que se hace evidente en la capacidad
de usar palabras precisas a la hora de comunicarnos y un cambio en la manera de expresar
nuestras ideas, llegando a ser más convincentes y concretos. Al leer conocemos más que
simples cuentos, conocemos la historia que no nos muestran (o en cierto sentido es difícil
de conocer); en nuestro país hay una frase que dice “quien no conoce su historia está
condenado a repetirla”, en palabras simples, el conocer nuestra historia nos permite tomar
nuestras propias decisiones y en sierto sentido no llegar a cometer los mismos errores que
ya alguien cometió. Los libros son la mejor manera no solo de conocer nuestra historia,
sino tambien de llegar a comprender nuestra realidad y como va cambiando nuestra
sociedad.
Además de todo lo ya mencionado, al final del capítulo se habla del cómo se ha podido
demostrar que el leer nos mantiene el cerebro mucho mas activo y más capaz a la hora de
razonar, percibir y memorizar, algo muy necesario a la hora de ser capaces de hablar,
escuchar y no creer en todo lo que nos dicen, pues no nos podrán “echar cuento” (esto
dando por sentado que somos críticos y conocedore, capaces de analizar las situaciones
antes de tomarlo como una verdad). Pero tambien se mejora la capacidad cognitiva, esta no
solo centrada a la facilidad de comprender lo que leemos, sino que tambien a la
comprensión de situaciones presentes en el día a día, tanto en nuestro contexto
universitario, como situaciones directamente relacionado a ámbitos que pueden tornarse
difíciles dentro de la carrera.