Ingrid Paola Díaz Capador

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EL CAFÉ COMO BUEN ACOMPAÑ ANTE DE LA JUVENTUD

Tema: Razones para estimular el consumo de café en los jóvenes

Como ya se sabe, el café es una de las bebidas má s tradicionales y conocidas en todo el mundo y
por cada ser humano casi desde pequeñ os, se crece con esta bebida incorporada en el desayuno
de las mesas familiares y se extiende hasta como excusa de acompañ amiento en la visita o la
plá tica, en nuestro país es de fácil acceso, en la mayoría de los casos econó mico y posee todo un
proceso específico detrá s de cada grano que proporciona la taza de café; pero, ¿qué tan
recomendable y aceptable es este producto en los jó venes?. Se afirma que el consumo de la
cafeína produce adicció n debido a que es un alcaloide excitante del sistema nervioso central que
en exceso puede crear dependencia y cuya funció n má s importante es la de estimular la
transmisió n de los impulsos nerviosos entre las células nerviosas o neuronas, así como provocar
ú lceras gá stricas y dañ os en los intestinos. A la hora de hablar de los efectos del café, es
importante tener en cuenta que este producto tradicional está rodeado de mitos de todo tipo y
que las afectaciones o beneficios van a depender de la cantidad de cafeína consumida, pues
como dicen por ahí, todo en exceso tiene repercusiones y se estima que el consumo
recomendable es en cantidades inferiores a 300 miligramos de cafeína al día, lo que equivale a
dos o tres tazas de café, logrando aliviar la fatiga, tonificar el cuerpo y favorecer las funciones
intelectuales al mantener despierto y en estado de alerta a quien la consume.

Mirando la otra cara de la moneda, el ritmo de vida al que se somete el adolecente, llevaría a
pensar que el café es una buena opció n como acompañ ante y en realidad, sí lo es, ya que genera
una reacció n química en el sistema nervioso central que aumenta la energía y activa el estado de
alerta, así có mo los niveles de adrenalina en el cuerpo Una taza de café contiene 3 vitaminas y 2
minerales importantes, en primer lugar, vitamina B2, que ayuda a liberar energía de las
proteínas; segundo, la vitamina B5, que permite lograr retos que requieren esfuerzo; en tercer
lugar, la niacina que es usada por el cuerpo para convertir los alimentos en energía, ayudando a
mantener sanos el sistema nervioso, el aparato digestivo y la piel. Y con relació n a los minerales,
el café contiene magnesio que está presente en la composició n del 60% de nuestros huesos; y
potasio, que facilita a los nutrientes alimenticios llegar a las células y ayudar a expulsar los
excedentes que nuestro cuerpo elimina, todo esto sin contar las atribuciones anticancerígenas y
de minimizació n el dolor de cabeza que posee el café, lo que implica que creencias o mitos
como el hecho de volver al consumidor ansioso o con problemas de adicció n pasen a un
segundo plano, encontrando que la moderació n del consumo es lo que permite sacarle el
má ximo provecho.

Como buenos colombianos, el café está presente en todas las etapas de nuestras vidas, y en la
adolescencia se tiene el primer paso para convertirlo en el acompañ ante perfecto al despertar,
al socializar o al realizar algú n tipo de actividad académico, laboral o deportivo, pues sin darnos
cuenta, esta bebida empieza a ser má s cotidiana de lo que se podría pensar, por esto, conocer el
producto es conocer nuestra historia, nuestra cultura y consumirlo es ser parte de ella y poder
hablar con propiedad de algo que incorporamos como nuestro y que es deber, de aquellos que
valoran su grandeza, conservar la tradició n que acoge el café.

Los grandes y pequeñ os vendedores de café deben ir acogiéndose a los cambios que los jó venes
consumidores imponen a la hora de adquirir este producto, pues las estrategias de mercado
fortalecen esta actividad teniendo en cuenta que hoy en día es comú n ver un grupo de jó venes
en una cafetería disfrutando de una taza de café acompañ ada de plá ticas eternas. Y sí entre
nosotros los jó venes se abren esos espacios, no solo estaremos incursionando en nuestra
cultura, sino que directa o indirectamente estamos apoyando lo nuestro.