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(L1) “Es necesario aplicar las normas éticas y morales que Dios nos ha
revelado en su palabra a las condiciones metamorfósicas del mundo”
Jaime E. Giles ("BASES BIBLIAS DE LA ÉTICA")
INTRODUCCIÓN
* Cabe señalar, que esta llamada "nueva moralidad" que se impone hoy, no es
tan nueva, ya que forma parte de esa naturaleza pecaminosa del hombre, y es
de lo que hablo el profeta Isaías en sus ¡Ay! del capítulo 5:18-23 de su libro, al
decir:
¡Ay de los que a lo malo dicen bueno, y a lo bueno malo; que hacen de la luz tinieblas, y de las
tinieblas luz; que ponen lo amargo por dulce, y lo dulce por amargo!
* Ahora bien, para nosotros como cristianos existe los que podríamos
denominar como:
- Amor a Dios por sobre todas las cosas (el más importante)
* En este sentido, la ética tiene como objetivo orientar a las personas a fin de
que sepan cómo deben proceder para que su vida sea correcta, especialmente
en relación con el bien y el mal.
* En cambio la ética cristiana: "Es la ciencia de la conducta humana, tal como
está determinada por la palabra de Dios" o nuestro código de Deontología o
Ética Cristiana.
* Por esa razón, la Ética cristiana nos desafía a mejorar nuestra manera de
vivir porque demanda que vivamos bajo las normas de santidad que Cristo
vivió. El Apóstol Juan escribe:
"El que dice que permanece en él debe andar como él anduvo" 1 Juan 2:6.
* Dentro de las pautas Éticas establecidas por Dios, el cristiano, entre los que
se encuentra el ministro, debe ser un ejemplo de vida para el mundo sin Cristo,
tanto en su conducta personal como en su relación con la familia, la sociedad y
las autoridades, entre otras. Por ejemplo, la carta a los Romanos del capítulo
12 al 15, es por sí solo, todo un código de Deontología o Ética Cristiana.
* Por otra parte, hablar de ética ministerial de forma tradicional abarcaría una
amplia extensión de temas que involucran lo ético en la vida de todo ministro,
como: Familia, finanzas, iglesia, sexualidad, conducta, carácter, integridad,
entre otros. Para esto existen además de la Biblia, algunos libros útiles para su
formación como: Ética Ministerial / Joe E. Trull, James E. Carter, Bases
bíblicas de la ética / Jaime E. Giles
a.- LA INTEGRIDAD
* Es por esta razón que el Apóstol Pablo nos insta a pensar con integridad
diciendo:
“Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo
puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de
alabanza, en esto pensad. Lo que aprendisteis y recibisteis y oísteis y visteis en mí, esto haced;
y el Dios de paz estará con vosotros”. Filipense 4:8,9.
b.- LA TOLERANCIA
* La Biblia dice:
“Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu
mente. 22:38 Este es el primero y grande mandamiento. 22:39 Y el segundo es semejante:
Amarás a tu prójimo como a ti mismo”. Mateo 22:37,39
“con toda humildad y mansedumbre, con paciencia, soportándoos unos a otros en amor”.
Efesios 4:2
“Nada hagáis por contienda o por vanagloria; antes bien con humildad, estimando cada uno a
los demás como superiores a él mismo; no mirando cada uno por lo suyo propio, sino cada cual
también por lo de los otros. Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo
Jesús”. Filipenses 2:3-5
* Ante esta realidad, el Señor nos insta a ser tolerantes y cada uno de los
textos leídos son una muestra de ello, porque aunque en ninguno de ellos se
mencione la palabra tolerancia de forma explícita, de manera implícita los
textos nos hablan de tolerancia ya que Amar al prójimo como a uno mismo,
tener humildad, mansedumbre, paciencia, soportar a otros en amor y el estimar
a los demás como superiores a uno mismo, todo esto implica tolerancia.
* Pero, ¿Cómo llegar a ser tolerante? En primer lugar, siendo tolerante con uno
mismo, aceptándonos a nosotros mismos como el Señor nos ha aceptado con
errores y defectos. Si uno aprende a ser tolerante con uno mismo, puede llegar
a ser tolerante con los demás y comprenderlos con más facilidad.
* A veces lo que hacemos es proyectar lo que nos molesta de nosotros mismos
en los demás y ya leímos lo que Jesús Dijo: “Amarás a tu prójimo como a ti
mismo”
* Eso sí, tolerancia no significa aceptar y estar de acuerdo con todo, porque
esa es la connotación que se le ha querido dar en estos tiempos de "nueva
moralidad" en que a lo bueno se le dice malo y a lo malo se le dice bueno.
* Por ejemplo, la Biblia muestra que Jesús toleraba a toda clase de pecadores
y permitía que se acercaran a él, lo que no significa que estuviera de acuerdo
con su pecado, sino que por el contraria el tenerlos cerca de él, le permitía
ayudarlos con sus problemas porque como dice la escritura:
“Y al ver las multitudes, tuvo compasión de ellas; porque estaban desamparadas y dispersas
como ovejas que no tienen pastor”. Mateo 9:36
* Ser tolerante nos enseña, desde el contexto bíblico, que tolerar no significa el
estar de acuerdo con aquello que toleramos, significa que si alguien es de una
raza distinta, otra cultura, otra clase social, otra religión o piensa distinto, no por
ello es nuestro enemigo, sino que como nuestro prójimo merece nuestro amor y
respeto. Porque esa es la voluntad de Dios.
* Como señale hace unos momentos, creo que hasta ahora no han escrito un
código de Deontología o ética para la capellanía escolar e institucional, lo
que nos llevó a centrarnos directamente en la escritura, pero estas
recomendaciones finales están dirigidas para mantenernos en el marco de lo
legal, por ejemplo, en el caso de trato con niños y adolescentes: la “ LEY
ORGÁNICA PARA LA PROTECCIÓN DEL NIÑO Y DEL ADOLESCENTE” (LOPNA).
CONCLUSION
* Ya para concluir, quiero añadir que los ministros o capellanes deben valorar y
respetar a cada individuo como una creación de Dios a pesar de sus errores o
de su moral distorsionada.
FUENTES CONSULTADAS