Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
zález
Materia: Introducción a la Lingüística Grupo: LL45
Docente asesor: Guadalupe Rivera Gon- Lugar y fecha: Torreón, Coahuila. 28 de
zález Octubre del 2019
Tema de la actividad: Actividad de Número de actividad: 4
aprendizaje sumativa
INTRODUCCIÓN
El modo en que el lenguaje humano ha ido creciendo, expandiéndose y evolucionando a
lo largo del tiempo, ha causado que nuestra manera de examinarlo y comprenderlo haya
ido transformándose; esto, trayéndonos al nivel de conocimiento que existe hoy en la
ciencia de la Lingüística.
En este documento se analizarán todos los pasos de la evolución tanto del lenguaje hu-
mano en general, como de las múltiples lenguas ─desde las más antiguas hasta las más
recientes─, la manera en que vocalizamos ese código de comunicación y el cambio que
ha sufrido el modo en el que hemos concebido la lingüística a lo largo de la historia, con el
fin de estructurar la transformación del concepto que tenemos como seres humanos de
aquello que sirve para nombrar los objetos que nos rodean, traspasar barreras del espa-
cio y el tiempo y expresar de un modo entendible para nuestros iguales la profundidad y
complejidad de nuestro pensamiento.
Todo este análisis se realizará con el objetivo de conocer la evolución del lenguaje y sus
distintos sistemas como lo son las diferentes lenguas, y entender que este no es un fenó-
meno estático, sino que conforme pasa el tiempo, se transforma la cultura y se establecen
nuevos idiomas; el lenguaje va creciendo, estirándose, transformándose junto con las civi-
lizaciones que le rodean, adquiriendo, perdiendo y cambiando sus características confor-
me evoluciona. De este modo, conoceremos de cerca todo aquello que la cultura ha grita-
do con el paso del tiempo, entenderemos de una mejor manera el modo en el que expre-
samos nuestros pensamientos y el modo en el que recibimos las opiniones de los demás,
y descubriremos el poder e impacto que tiene la lengua en cualquier miembro de la socie-
dad, ya que carga con todo el peso de las generaciones pasadas y prepara la expresión
verbal de las expresiones futuras.
1. Evolución de la lengua
1
F. de Saussure, Curso de Lingüística General, Buenos Aires, 1945, pág. 36
2
Ibid, pág. 37
Es algo evidente en la vida cotidiana que la lengua evoluciona con el paso del tiempo, es
decir, los vocablos adquieren nuevos significados y en ocasiones pierden algunos de los
que ya tenían. El idioma se expande cada vez más, adapta a su propia lengua expresio-
nes de culturas ajenas, incorpora nuevas palabras para expresar cosas de modo más efi-
ciente y preciso, la manera de pronunciar los vocablos cambia y poco a poco todo sigue
evolucionando hasta el punto de crear nuevos códigos de comunicación; nuevas culturas
lingüísticas. A continuación, se desglosarán dos de los factores que provocan la evolución
de la lengua:
Cuando las culturas crecen y a su vez lo hacen sus respectivas lenguas, es normal que
los extremos de cada una de ellas encuentren a los demás y se entrelacen, creando nue-
vas costumbres y, por consecuencia, los idiomas pueden llegar al punto de intercambiar y
adaptar expresiones de la civilización con la que se está creando la relación cultural.
De este modo, la cultura se expande y a su vez lo hace el idioma, creciendo cada vez
más, siempre reflejando cada uno de los sucesos en los que se ha visto involucrado, por-
3
G. von der Gabelentz, Die Sprachwissenschaft, pág. 14
tando en cada uno de sus vocablos y expresiones la completa esencia de la cultura, su
historia y su gente.
La lengua, es «un sistema que no conoce más que su orden propio y peculiar» 4, sin em-
bargo, en ocasiones es necesario retroceder un poco en jerarquía y ver el lenguaje como
un todo.
Dado que la comunicación entre seres humanos ha evolucionado sin tener que pertenecer
necesariamente a una lengua, se mencionarán algunas de las áreas en que esta evolu-
ción se podría clasificar:
No es ajeno para ninguna persona el hecho de que en la antigüedad, los inicios de la civi-
lización temprana, la raza humana no se comunicaba tan eficientemente como lo hace en
la actualidad. Si alguien nos pidiera que imitemos a un hombre en el tiempo de las caver-
nas, la forma de comunicación que viene a nuestra mente son, probablemente, sonidos
hechos por el aparato fonador que imiten llamados de animales, o quizá sustantivos solos,
o verbos sin conjugar.
Sin embargo, sabemos que este modo de comunicación evolucionó y fue mejorando has-
ta lo que existe hoy en día, dividiéndose en numerosas lenguas correspondientes a distin-
tas culturas, creando cada uno de estos códigos de comunicación tan extensos que ahora
permiten expresar lo abstracto del pensamiento, o explicar situaciones en un punto distin-
to de la línea temporal y espacial. Sin embargo, para que el lenguaje alcanzase el punto
en el que se encuentra hoy, hubo todo un proceso que debió atravesar, desde el uso del
4
F. de Saussure, Curso de Lingüística General, Buenos Aires, 1945, pág. 50
aparato vocal para producir sonidos y la asociación de estos para crear vocablos y a su
vez asignárselos a los objetos animados e inanimados alrededor.
Pero si bien es cierto que nuestra interacción con otras personas no solo se basa en las
cosas materiales que nos rodean, sino en pensamientos, opiniones y peticiones de nues-
tra parte, las palabras creadas fueron aumentando en número para representar cada uno
de los deseos, sentimientos, pensamientos y dudas del ser humano, cada vez con más
exactitud, precisión y claridad.
Para que la comunicación pueda existir, es necesario que exista quién emita el mensaje,
el mensaje, y quién lo reciba.
Al hablar en tiempo real, estas tres cosas están presentes, pero ¿qué pasa cuando se de-
sea crear un mensaje para expresar algo a alguien que en ese momento no se encuentra
presente? Actualmente, hay numerosas maneras de guardar un mensaje para que sea re-
cibido en otro punto de la línea temporal. Esto puede hacerse con grabaciones tanto de
voz como de video y escritura en forma de literatura, periodismo, etcétera. Por lo tanto, es
claro que el emisor y el receptor no deben estar presentes en el mismo lugar y tiempo
para que haya una comunicación efectiva, sino que el mensaje puede quedarse petrifica-
do aunque el tiempo pase y se le cambie de localización, y el receptor podrá descubrirlo
cualquier momento después de que el mensaje haya sido emitido.
3. Evolución del concepto de Lingüística
Según F. de Saussure5, la lingüística «ha pasado por tres fases sucesivas antes de reco-
nocer cuál es su verdadero objeto»6, las cuales identifica Saussure como la organización
de la gramática, la aparición de la filología, y por último la gramática comparada.
La Filología, la cual fue definida tiempo después, se enfoca en estudiar escritos ya exis-
tentes y absorber de ellos no solo el mensaje a interpretar por el receptor, sino entender el
contexto en que fueron escritos y el modo en que la cultura funcionaba el tiempo en que el
mensaje fue emitido.
Por último, la gramática comparada se encarga de aquello que nos ha hecho conocer de
otras lenguas y poder aprenderlas con la facilidad de absorber los vocablos clasificados
de manera universal, es decir, entendible para todos. La gramática comparada se encarga
de comparar las lenguas entre sí.
Si bien estos tres temas ya mencionados fueron las primeras incursiones de la lingüística,
es evidente que la ciencia ha cambiado y ahora estudia y abarca temas más amplios,
densos y específicos. Ahora, la lingüística nos ayuda a entender el lenguaje humano en
sus distintas clasificaciones como lo son las lenguas, a comprender a través de ellas mu-
chas otras ciencias, y, obviamente, a entender qué hay detrás de todos los vocablos que
cotidianamente usamos, ignorando el peso que arrastran con ellos.
4. Lengua y Habla
5
En su Curso de Lingüística General. Traducción, prólogo y notas de Amado Alonso. Buenos Aires, 24ᵃ ed.,
1945
6
F. de Saussure, Curso de Lingüística General, Buenos Aires, 1945, págs. 29 y 30
La lengua existe dentro de un pueblo como un entero, es decir, es una estructura que si-
guen todos los miembros de dicha comunidad lingüística. Sin embargo, la realización del
sistema por individual, en cada miembro de la cultura se reconoce con el nombre “habla”,
lo cual representa el peculiar y original modo en que cada persona reproduce su propia
lengua.
Cuando se escribe, se necesitan los materiales para hacerlo, incluso si es solo con el
dedo en la tierra, es necesaria la tierra para plasmar el mensaje. Sin embargo, cuando se
habla en voz alta, solo es necesario el aparato fónico, el cual es parte de nuestro cuerpo.
Así que, estas ciencias se encargan de analizar cómo se utiliza el propio cuerpo para pro-
ducir mensajes, emitirlos y recibirlos sin necesidad de usar nada más.
Cada lengua toma ciertos sonidos que pueden ser producidos por el aparato vocal, y los
acomoda de un determinado modo con el fin de crear vocablos, como se explicó anterior-
mente en el área de la evolución del lenguaje. Es importante considerar que los sonidos
que pueden crearse con el aparato fónico parecen no tener límite. Sin embargo, cada len-
gua incluye una cantidad limitada de estos sonidos y los caracteriza de modo que se vuel-
ven un sello del idioma.
Es evidente que, sin esta parte tan importante de la lengua, la comunicación no sería tan
eficiente y efectiva, y sin la fonética y fonología para estudiarla, es probable que no se pu-
diera aumentar el conocimiento acerca de cómo funciona el aparato fónico.
7
En su Curso de Lingüística General. Traducción, prólogo y notas de Amado Alonso. Buenos Aires, 2ᵃ
ed.,1955
CONCLUSIÓN
Personalmente, lo que más me impresiona de todo es que, no solo existe una estructura
de palabras y sonidos para cada cultura, sino que dicha configuración absorbe cada día
los sucesos por los que atraviesa su pueblo. Me parece increíble que, cada que habla-
mos, cada que expresamos algo, ya sea por medio de la voz o la escritura, la cultura ha-
bla a través de nuestras palabras. Con cada uno de los vocablos que utilizamos, acarrea-
mos la historia completa por la que ese término atravesó; jalamos desde sus raíces aque-
llo que el idioma ha presenciado, abrimos heridas y las dejamos sangrar, o cantamos vic-
torias, glorias que parecen estar enterradas en el pasado pero que en realidad viven en
los sonidos de nuestra boca y las letras que escriben nuestros dedos.
Es realmente asombroso ver cómo el lenguaje ha crecido y cambiado tanto: cómo antes
la raza humana solo imitaba sonidos de objetos existentes, y cómo ahora nos es posible
expresar inquietudes y pensamientos abstractos, planes, anhelos, fantasías, sentimientos
agobiantes, sensaciones emocionales.
Sin embargo, es claro que las lenguas nunca dejan de crecer, de cambiar, de entrelazarse
unas con otras, de incorporar más y más historia a cada palabra. El lenguaje universal
tampoco dejará de crecer, sino que cada vez aparecerán más modos de que las personas
de distintas lenguas se comuniquen sin tener que hablar la del otro. La cultura crece y el
lenguaje lo hace, siguiendo sus pasos. Si la historia avanza, la lengua lo hace. Por conse-
cuencia, la ciencia de la lingüística siempre tendrá más que analizar y estudiar. Como el
lenguaje está siempre en constante desarrollo, la lingüística también seguirá creciendo,
pues su campo de investigación continuará ampliándose.
Me resulta emocionante el saber que siempre habrá más que descubrir, más que obser-
var y más que compartir. La lingüística es, realmente, una de las ciencias más impresio-
nantes, con más contenido para estudiar y más descubrimientos para transmitir. Es más
que gratificante ver su gran evolución y saber que tiene mucho más hacia dónde crecer.
BIBLIOGRAFÍA
Quilis, A. (2010). Principios de fonética y fonología. Madrid: Arco Libros. (pp. 7-30).
Von Der Gabelentz, G. (1891). Die Sprachwissenschaft. Ihre aufgaben, methoden und
bisherigen ergebnisse. Leipzig: Weigel.