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EL PROYECTO INDUSTRIAL

Desde el momento en que se trata de proyectos de gran envergadura, la metodología clásica de


proyectos resulta poco útil. El proceso Anteproyecto-Proyecto –Dirección de Obra, según el
tratamiento clásico que se ha estudiado anteriormente es, en esencia un proceso lineal: no es
posible comenzar una fase sin que se haya concluido la anterior. La eficacia necesaria para
desarrollar un proyecto de grandes dimensiones exige métodos diferentes, que combinen el
paralelismo, necesario entre actividades para garantizar plazos reducidos, con la flexibilidad que
permita adaptar el desarrollo a los medios disponibles.
En este ámbito, el proyecto ya no es una colección de documentos que permiten construir una
obra sino que se trata de la organización de un conjunto de medios y actividades para la
consecución de un determinado objetivo. Entran por tanto, dentro de la definición, desde los
estudios previos hasta la construcción y puesta en servicio. El origen del proyecto industrial se
encuentra siempre en alguna institución, empresa u organismo oficial. De aquí partirá la idea
inicial y en ese nivel se tomarán las decisiones importantes relacionadas con el proyecto. La
participación de la empresa o entidad promotora en el desarrollo del proyecto es variable,
dependiendo de los medios técnicos de que se disponga. Es frecuente que la Dirección del
proyecto se encargue a una empresa de ingeniería.
Normalmente en el desarrollo del proyecto encontraremos dos fases secuenciales separadas por
un punto de toma de decisión: la fase de estudios previos, la decisión de acometer el proyecto y la
fase de desarrollo. De la fase de estudios previos se ha hablado anteriormente. Su objetivo es la
producción de todos los datos necesarios para valorar técnica y económicamente el proyecto de
modo que se pueda, en base a ellos, decidir sobre la conveniencia o no de abordar su desarrollo. El
análisis, por parte de la entidad promotora, de los resultados de los estudios previos, conducirá a
una toma de decisión sobre su desarrollo.
La dirección de proyecto
Desde el momento en que se ha decidido llevar adelante el proyecto la entidad promotora
nombra un equipo responsable del desarrollo.
El equipo, que suele estar dirigido por alguien de dicha entidad, será en adelante el que asuma la
total responsabilidad sobre el proyecto y no solamente desde el punto de vista técnico como
pasaba en el entorno clásico, sino también en lo que se refiere a los plazos y los costes del
proyecto. En consecuencia las funciones del equipo de dirección de un proyecto, además de
englobar todas las de proyecto y dirección de obra clásicas, integran también las de planificación y
control del desarrollo del proyecto y todas las funciones económicas y financieras asociadas al
mismo.
El director del equipo adquiere así la máxima responsabilidad sobre el proyecto por delegación de
la entidad promotora. Habitualmente, la construcción del equipo de dirección del proyecto parte
por su cabeza: una vez nombrado su director, es él quien estudia la estructura y composición
necesaria para el equipo y quien selecciona las personas adecuadas como responsables de áreas o
actividades. La primera función del director de proyecto, aparte de la composición de su equipo
consiste en asesorar a laempresa promotora en sus relaciones con las empresas de ingeniería y las
constructoras que van a desarrollar el proyecto. La petición, selección y valoración del as ofertas
de ingeniería, constructoras e instaladoras, constituye una de las primeras fases en el trabajo del
director del proyecto. Para realizar estos trabajos deberá redactar los pliegos de condiciones que
permitan homogeneizar las ofertas a efectos de su selección y valoración. En ocasiones, el director
de proyecto es quien lleva a cabo el proceso de negociación y contratación de servicios de
ingeniería y de construcción. Dependiendo de la modalidad que se emplee en cuanto a la
utilización de empresas consultoras, el proceso es más o menos laborioso ya que las modalidades
son muchas. Desde el desarrollo del proyecto dentro de la empresa promotora hasta la
contratación de una planta “llave en mano”, existen muchos grados y niveles de servicios de
ingeniería utilizables.
Desarrollo del proyecto
En el desarrollo de un proyecto, desde el momento de la toma de decisión antes comentado,
existen una serie de fases que no se llevan acabo en forma secuencial sino que en muchos casos se
solapan, que podrían considerarse como independientes para su estudio en una primera
aproximación. En líneas generales son las siguientes:
• Definición del proyecto
• Ingeniería básica
• Ingeniería de desarrollo
Cada una de ellas integra un conjunto de actividades que se estudiarán a continuación.
Definición del proyecto
En esta fase se definirán las grandes variables del proyecto, así como sus objetivos y las
prioridades asociadas a los mismos. La definición se refiere como mínimo a los siguientes
aspectos:
• Alcance y contenido
• Forma de ejecución
• Equipo de dirección
• Planificación
• Fijación de objetivos y prioridades
En lo que se refiere al alcance y contenido del proyecto, se fijarán los siguientes parámetros:
• Tamaño
• Proceso de producción (tecnología)
• Emplazamiento
• Presupuesto de inversión
• Financiación
En relación con la forma de ejecución, deberá establecerse la modalidad más conveniente entre
todas las alternativas posibles, que son muchas como se ha comentado anteriormente. Las
modalidades básicas a elegir, que deberán ser matizadas en cuanto al grado de asistencia exterior
requerida son:
• Ejecución en directo
• Directo + empresa consultora
• Contratación de planta “llave en mano”
En cuanto al equipo de dirección, deberá definirse en este momento, tanto su estructura como su
composición. Se seleccionará y contratará el personal necesario, en función de los datos básicos
del proyecto ya definidos y según las indicaciones del director que debe haber sido nombrado
anteriormente.
Normalmente el equipo en su segundo nivel está compuesto por una serie de responsables de
actividades a quien se denomina genéricamente ingenieros de proyecto.
Suele haber ingenieros responsables de:
• Ingeniería
• Gestión de compras
• Supervisión en campo
• Planificación
• Gestión económica
Dependiendo de las peculiaridades del proyecto, este equipo básico se adaptará a las necesidades,
añadiendo o quitando algún responsable de actividad.
La realización, ya en esta fase, de una primera programación en cuanto a plazos de desarrollo y a
flujo de inversiones, suele ser conveniente para que el proyecto quede definido en sus aspectos
básicos. Aparte la consideración de que la programación inicial debe pulirse y perfeccionarse en
las fases sucesivas, su necesidad es evidente para la empresa promotora, cuyos estudios
económicos y financieros requieren una previsión de plazos y costes.
La fijación de objetivos y prioridades es básica en esta fase del proyecto. Entre otras cosas es
necesaria para el diseño de un sistema de control de desarrollo. Debe hacerse de modo que se
establezcan unos objetivos parciales y totales y un conjunto de variables asociadas al
cumplimiento de los mismos, variables que serán objeto de control durante el desarrollo del
proyecto. Hay que fijar objetivos en cuanto a:
• Capacidad de producción
• Calidad del producto
• Costes de producción
• Plazos de ejecución
• Presupuesto de la inversión
Entre todos estos objetivos se establecerá un sistema de prioridades que faciliten la toma de
decisión cuando entren en conflicto.
A menudo será necesario en esta fase fijar algunos parámetros básicos adicionales del proyecto.
Dependiendo ya del proyecto concreto que se trate es posible que haya algunas características
importantes que no se han incluido en este esquema. En cualquier caso, el director del proyecto
deberá comprobar que la definición del proyecto es completa en sus aspectos más relevantes y
suficiente para abordar la fase de ingeniería básica.

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