Sesión 1- Orientación al tratamiento – Aprendizaje de nuevas habilidades

La primera sesión tiene como objetivo que los pacientes entiendan la naturaleza y el
propósito de la ansiedad y qué puede hacer que la ansiedad se convierta en un
problema. Para ello, describiremos la ansiedad y el miedo como emociones
adaptativas q

Estrés sesión 2 y 3 Aceptación de la Ansiedad

También: Metáfora de las dos manos: Las dos luchas

Objetivo: conseguir la aceptación del contexto como alternativa al control de la

ansiedad y evitación. Esto se logra explorando suavemente la utilidad y los efectos y
costos de las múltiples estrategias que el paciente ha utilizado para hacer frente y
gestionar la ansiedad y alentando a los pacientes a hacer espacio para nuevas
soluciones

EJERCICIO DE LA TRAMPA DE DEDOS CHINA (Hayes et al, 1999)

Una trampa china para dedos es un tubo de paja tejida de aproximadamente 13 cm de

largo y 1cm de ancho. Terapeuta y paciente cogen una trampa de dedos china cada
uno y hacen el ejercicio juntos. Primero, introducen ambos dedos índices en el tubo,
un dedo en cada extremo. Si uno intenta sacar los dedos, el tubo atrapa y aprieta,
causando molestias. La única manera de recuperar algo de libertad y espacio para
moverse es empujar los dedos primero y luego deslizarlos hacia afuera. El propósito de
este ejercicio es que el paciente descubra, a través de la experiencia, que tratar de
alejarse de la ansiedad, aunque sea aparentemente lo más lógico (igual que tirar del
dedo hacia fuera, en la trampa para dedos), solo sirve para crear más problemas:
cuanto más te esfuerces, más se aprieta la trampa, por lo que te deja menos espacio
para moverse e incluso más molestias. Por el contrario, hacer algo contradictorio,
como empujar los dedos hacia adentro en lugar de hacia afuera apoyándose en la
incomodidad, efectivamente termina la lucha.

LA LUCHA CON EL MOSTRUO y el FOSO (Hayes et al, 1999)

El contenido de esta metáfora puede hacerse a modo de dialogo
socrático. El objetivo es que el paciente relacione el ejercicio con su
experiencia de lucha.
Se pregunta al paciente si su ansiedad se parece a una persona que
estuviera unida a un monstruo con una cuerda y con u foso entre ambos.
Mientras el monstruo está tranquilo, durmiendo y tumbado, esa persona
no puede verlo, pero en cuanto despierta se hace insoportable, insufrible,
y esa persona tira de la cuerda para conseguir tirar al monstruo al foso. A
veces parece que se calma al tirar de la cuerda, como si se diese por
vencido, pero lo que ocurre a la alarga es que cuanto más tira esa
persona, más cerca está del límite del foso y, por el contrario, más grande,
amenazante y fuerte está haciéndose el monstruo. Así, la situación es que
la persona tiene que estar continuamente pendiente del monstruo, por si
se levanta, tirar de la cuerda y, además, cuando ella tira, el monstruo
también lo hace, lo que le lleva en ocasiones a estar ella misma al borde
del abismo. Y, mientras, su vida se limita a estar pendiente de la cuerda.
A esa persona le gustaría no estar atado al monstruo, pero eso, no es algo
que pueda cambiarse, de manera que se plantea qué puede hacer,
basado en su experiencia. Una posibilidad para hacer su vida es soltar la
cuerda y ver al monstruo. Otra que su vida se limite a estar pendiente de
la cuerda.

«Dejar ir» en la práctica.

Para facilitarlo, se presenta un

ejercicio de doce minutos de mindfulness para que los pacientes practiquen el prestar
atención a un solo enfoque, su respiración y a aprender a mirar y permitir ir y venir a
otros eventos privados, como pensamientos, sentimientos y sensaciones.