Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Personas Jurídicas
comerciantes
En este momento al leer este artículo se presenta una breve reseña de cuáles son las condiciones
que por ley debe de poseer un individuo para se comerciante en república dominicana, pero antes
debemos tener un concepto mas amplio del termino comerciante, se comprende que es una
persona que se dedica a negociar comprando y vendiendo distintas mercaderías como actividad
económica, negocio, oficio o profesión. Los comerciantes son aquellas personas que compran
productos a un determinado precio, para luego venderlo a un precio mayor y así obtener una
diferencia, que constituye la ganancia.
En república dominicana como en todas partes del mundo hay leyes muy definidas en el área del
comercio, cabe mencionar que el comercio juega una parte importante en el desarrollo de
cualquier sistema financiero de cualquier estado constitucional.
Calificación de los Comerciantes. Son comerciantes las personas que profesionalmente se ocupan
en alguna de las actividades que la ley considera mercantiles. La calidad de comerciante se
adquiere aunque la actividad mercantil se ejerza por medio de apoderado, intermediario o
interpuesta persona.
Obligaciones y derechos , dentro de las obligaciones son dos obligaciones especiales impone el
código de comercio a los comerciantes; A) Tener determinados libros y llevarlos con regularidad,
B) Si son casados o se casan, hacer público el régimen bajo el cual están casados o que adoptan al
contraer matrimonio.
Inscribir en el registro mercantil todos los actos, libros y documentos respecto de los cuales la ley
exija esa formalidad;
Llevar contabilidad regular de sus negocios conforme a las prescripciones legales;
Conservar, con arreglo a la ley, la correspondencia y demás documentos relacionados con sus
negocios o actividades;
Los corredores.
Los quebrados que no hayan sido rehabilitados, y
Los que por sentencia ejecutoriada hayan sido condenados por delitos contra
la propiedad, incluyendo en éstos la falsedad, el peculado, el cohecho y la
concusión.
.La Nación, los Estados, el Distrito Federal, los Distritos y los Municipios no
pueden asumir la cualidad de comerciantes, pero pueden ejecutar actos de
comercio para cumplir con sus fines superiores dentro del contexto
económico-social, y en cuanto a esos actos, quedan sujetos a las leyes
mercantiles.
La aplicación del Código Civil en Cataluña como consecuencia del Decreto de Nueva Planta,
comportó la exigencia, también en este territorio, de la licencia marital a la mujer casada. Esta
exigencia resultaba completamente contraria al principio fundamental del sistema jurídico catalán
del reconocimiento de la personalidad de la mujer casada en igualdad a la del marido, que se
muestra, entre otras, en instituciones como las de la pubilla; y muy especialmente en el
predominio del régimen de separación de bienes en los matrimonios catalanes6. La aplicación de
la licencia marital en Cataluña contravenía, además, las necesidades de la sociedad catalana, de
ahí que ya en los tiempos de la II República, cuando Cataluña recupera su poder legislativo, se
aprueba la Ley del 19 de junio de 1934 sobre la capacidad jurídica de la mujer y de los cónyuges,
que tiene como principal objetivo suprimir la aplicación de la licencia marital en el territorio
catalán y, a un tiempo, procurar la llena equiparación entre los cónyuges proclamando su absoluta
igualdad delante de la ley.
La ley catalana sobre capacidad jurídica de la mujer y de los cónyuges entró en vigor el 1 de enero
de 1935. Esta ley se estructura en 8 artículos: el artículo primero establece que: "La mujer tiene la
misma capacidad civil que el hombre. Esta igualdad no impide las disposiciones particulares a uno
de los dos sexos, derivadas de causas fisiológicas, como la fijación de la edad núbil y la prohibición
a la viuda de contraer nueve matrimonio antes de haber transcurrido el período legal" Hay que
advertir que el período legal se establecía en 300 días, que coinciden con el plazo de tiempo en el
que de tener lugar el nacimiento de un hijo disfrutaría de la presunción de la paternidad
matrimonial del premuerto.
Una vez proclamada la plena capacidad de obrar de la mujer, los artículos 2 a 6 se dedican a
procurar la equiparación de los cónyuges dentro del matrimonio. Téngase presente que, pese a
que eso no comportó ninguna modificación del Código Civil, la Constitución de 1931 establecía en
su art. 43 que "el matrimonio se funda en la igualdad de derechos para ambos sexos".
El art. 2 de la Ley de 19 de junio de 1934 disponía que: "El matrimonio no es causa modificativa de
la capacidad de obrar de la mujer' y de esta manera excluía la aplicación del art. 1263.3 CC que
equiparaba a la mujer casada a los menores de edad no emancipados, a los incapaces y a los
sordomudos que desconocieran leer ni escribir, en tanto que para contraer válidamente
obligaciones requerían licencia marital. Por su parte, el art. 3 establecía que "La ley no concede al
marido autoridad sobre la esposa ni le otorga su representación", siendo así que este precepto
viene a sustituir el art. 57 CC que establecía que "el marido debe proteger a la mujer y ésta
obedecer al marido"; así como la no aplicación de l'art. 60 CC que otorgaba al marido la
representación de su mujer. En la misma línea el art. 4 decía que "Los cónyuges pueden ejercer
profesión, oficio, destino, comercio o industria que no les impida el cumplimiento de los deberes
familiares y sin obligar al otro cónyuge". El art. 5 disponía que "Cada uno de los cónyuges podrá,
sin licencia del otro, adquirir por título oneroso o lucrativo, enajenar y gravar sus bienes,
comparecer en juicio y en general, contratar y obligarse y realizar todo tipo de actos jurídicos. Eso,
no obstante, ningún cónyuge no puede adoptar sin consentimiento del otro." El art. 6 disponía
que: "Los cónyuges pueden celebrar entre ellos todo tipo de actos jurídicos, sin perjuicio de la
revocabilidad, bien por actos inter vivos, bien por actos de última voluntad,.
El comerciante debe tener la capacidad necesaria para obligarse y enajenar. Es necesario, pues,
ser mayor de edad y encontrarse en pleno ejercicio de sus derechos para persona poder ser
comerciante.
- Denunciar por escrito ante la Alcaldía cualquier irregularidad cometida por el personal encargado
de la administración del o de los mercados municipales como peculado, cohecho, concusión,
extorsión, chantaje, agresiones físicas o verbales, amenazas y otros similares. Obligaciones.- Los
comerciantes tienen las siguientes obligaciones:
- Pagar oportunamente el canon de arrendamiento por ocupación del puesto, al igual que los
impuestos y tasas por servicios de conformidad con el Código Orgánico de Ordenamiento
Territorial, Autonomía y Descentralización, Código Orgánico de Planificación y Finanzas Públicas,
Ordenanzas Municipales, sus Reglamentos y demás normas conexas.
- Exhibir los precios de venta de los productos incluido el IVA en los casos correspondientes.
- Manipular y ofrecer los productos observando las más exigentes normas de higiene y salubridad.
- Lavar y preparar los productos, previa la venta, en los lugares destinados para estas actividades.
- Ser respetuosos con el público debiendo dirigirse a las personas en forma comedida, con buenas
maneras, evitando proferir palabras que sean contrarias a la moral y a las buenas costumbres.
- Cubrir los gastos por daños y deterioros causados en el local o puesto asignado.
- Informar a la Alcaldía por lo menos con 90 días de anticipación su deseo de dar por terminado el
contrato de arrendamiento.
- Asistir a las reuniones de trabajo, mingas de limpieza, cursos de capacitación y otras actividades,
convocadas por la Administración de Mercados y Ferias de Productos Amazónicos.
- Observar las normas de disciplina, cortesía y buen trato a los demás arrendatarios y usuarios en
general.
- Utilizar los locales y puestos asignados para fines distintos a los establecidos en el contrato de
arrendamiento o documento de asignación.
- Alterar el orden público provocando algazaras, griteríos y/o escándalos en los locales, puestos de
venta o áreas comunales.
- Instalar toldos, rótulos, tarimas, cajones, canastos y cualquier otro objeto que deforme los
locales o puestos, obstruya puertas y áreas comunales, obstaculice el tránsito del público o impida
la visibilidad.
- Hacer mal uso de las instalaciones, como cuartos fríos, áreas de carga y descarga, ascensores,
escaleras eléctricas, entre otras áreas.
Desde el punto de vista jurídico, la principal diferencia radica en que el comerciante está
subordinado a la ley de comercio, todas aquellas leyes mercantiles; y demás leyes que regulen la
actividad comercial, mientras la persona común no.
Por ejemplo, un comerciante que se dedique a la venta de un determinado bien está sujeto a la ley
mercantil en ese país, mientras que la persona común no está siendo subordinada a esa ley
porque no forma parte de la actividad.
Distrito Nacional y en las regiones, provincias y municipios que las leyes determinen. Las
regiones estarán conformadas por las provincias y municipios que establezca la ley.
Ser comerciante en República Dominicana implica tener algunas obligaciones y cumplir con
algunas responsabilidades.
Entre las muchas obligaciones que tienen los comerciantes, el código de comercio establece que
las siguientes obligaciones a los comerciantes:
Matricularse en el registro mercantil;
Inscribir en el registro mercantil todos los actos, libros y documentos respecto de los cuales la ley
exija esa formalidad;
Conservar, con arreglo a la ley, la correspondencia y demás documentos relacionados con sus
negocios o actividades;
Conservar todos los documentos, como facturas, que estén relacionadas con tu actividad.
Cumplir con las exigencias legales de registrar los documentos y los libros.
Todos los años, al cierre del ejercicio fiscal, inscribir en el Registro de Comercio Mercantil, el
Balance de su negocio. Además de, un estado de pérdidas y ganancias y de los cambios en el
patrimonio neto. Debe estar certificado por un Contador Público autorizado.
Para ejercer el libre comercio, los extranjeros deben obtener su autorización legal.
Existen otro tipo de obligaciones como son las relacionadas con los impuestos, y con las
obligaciones que les exigen las diferentes entidades de control del estado como las
superintendencias.
Se supone que todo comerciante debe cumplir con esas obligaciones, pero en la realidad no
siempre se hace, entre otras razones porque el estado no impone una verificación a comerciantes
pequeños o informales, tanto que, tratándose de impuestos, a ciertos contribuyentes que son
comerciantes no les exige contabilidad por tener pocos ingresos.
En consecuencia, no es que los pequeños comerciantes estén eximidos de cumplir con ciertas
obligaciones, lo que pasa es que pesar de que el código de comercio impone esa obligación, ciertas
entidades del estado son flexibles con ciertos comerciantes en el sentido de no exigirles el
cumplimiento de esas obligaciones por sus condiciones de informalidad o por el monto de sus
ingresos o activos.
El régimen económico tiene gran trascendencia sobre todo en caso de separación matrimonial, en
divorcio y en derechos de tipo sucesorio (mortis causa), como son las herencias, aunque también
tiene gran repercusión frente a terceros en los casos de insolvencia de alguno de los cónyuges, por
lo que, si se desvía de lo establecido por defecto por la ley, habitualmente debe estar inscrito en
un registro público.
El Registro Mercantil, tal y como ha sido concebido por el legislador, “es el sistema conformado
por la matrícula, renovación e inscripción de los libros, actos y documentos relacionados con las
actividades industriales, comerciales y de servicios, que realizan las personas físicas o morales que
se dedican de manera habitual al comercio…”. Se instituyó en nuestro país en virtud de la Ley 52-
60, sobre Establecimiento de Empresas Comerciales o Industriales, Registro Mercantil e Inscripción
Industrial y actualmente se rige por la Ley 3-02 de fecha 18 de enero del año 2002, la cual le
otorgó carácter público obligatorio y auténtico, con valor probatorio y oponible ante los terceros.
El Registro Mercantil es administrado por las Cámaras de Comercio y Producción facultadas por la
ley a nivel nacional y bajo la supervisión de la Secretaría de Estado de Industria y Comercio.
Matricular e inscribir todos los documentos de las compañías para que sean conocidos por
cualquier persona interesada a partir de dicha inscripción.
Archivar y proteger los documentos legales de las compañías y/o personas físicas.
Certificar los Libros de Registro de Operaciones de los comerciantes conforme al Artículo 14, literal
f) de la Ley No. 50-87, sobre Cámaras de Comercio y Producción.
El artículo 69 de Código Municipal establece que las patentes municipales se cancelarán por
adelantado.
ARTÍCULO 69.-"Excepto lo señalado en el párrafo siguiente, los tributos municipales serán pagados
por períodos vencidos, podrán ser puestos al cobro en un solo recibo.
Las patentes municipales se cancelarán por adelantado. A juicio del Concejo, dicho cobro podrá
ser fraccionado.
El atraso en los pagos de tributos generará multas e intereses moratorios, que se calcularán según
el Código de Normas y Procedimientos Tributarios".
Por lo anterior, las mismas se deben cancelar del 01 al 30 de cada uno de los siguientes meses,
según corresponde a cada periodo:
Enero I TRIMESTRE.
Marzo II TRIMESTRE.
Setiembre IV TRIMESTRE.
El RNC es administrado y asignado por la Dirección General de Impuestos Internos (DGII), como
código de identificación de los contribuyentes en sus actividades tributarias y como control para
dar seguimiento al cumplimiento de los deberes y derechos de éstos.
El debe hacerse constar en todas las facturas, cotizaciones, al igual que en todos los documentos
que emitan los contribuyentes. Es imprescindible para:
Los contribuyentes, responsables y terceros están obligados a facilitar las tareas de determinación,
fiscalización, investigación y cobranza que realiza la Administración Tributaria, y en especial a
cumplir los deberes formales que se generan a partir del Registro Nacional de Contribuyentes,
tales como los señalados en los literales c), d) y e) del artículo 50 del Código Tributario:
La obligatoriedad de inscribirse en el RNC para la realización de actividades que generaran
responsabilidades tributarias.
La obligación de informar a la DGII sobre modificaciones a los datos contenidos en su RNC, tales
como datos del domicilio fiscal: calle, número, sector, provincia, teléfono, correo electrónico si
tiene, cambio de la denominación social y/o nombre comercial, inclusión o modificación de
actividad económica, cese temporal o definitivo de operaciones.
Las leyes y normas tributarias establecen derechos para los contribuyentes, entre las cuales
destacamos: exigir a sus suplidores la identificación del RNC en las facturas o documentos
contractuales, consultar la validez del RNC, en los medios disponibles por la DGII, solicitar a la DGII,
certificación de que está registrado como contribuyente, modificar los datos contenidos en el RNC,
con la debida notificación a la DGII
Una obligación tributaria nace en el momento que se verifica el hecho generador (son los hechos
que dice la ley que, una vez producidos hacen surgir la obligación del impuesto), lo cual crea el
deber de cumplir con el tributo que corresponde al contribuyente.