Manejo Del Estres

Publicado por Eyes Wide Open LLC
© Silvia Casabianca
www.silviacasabianca.com
www.ceusonlineflorida.com
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2007
Todos los derechos reservados
Impreso en USA
Nota importante:
La información presentada en este libro ha sido cuidadosamente investigada. Sin embargo, la autora no
asume responsabilidad legal por cualquier daño que resulte directamente por la aplicación o uso de las
afirmaciones o recomendaciones contenidas en estas páginas. Esta información tiene como propósito
educar a los interesados y no sustituye la consulta con un profesional calificado.
Copyrights – Silvia Casabianca – Eyes Wide Open LLC – www.ceusonlineflorida.com 239-348-0808

Manejo del estrés
para
masajistas terapéuticos
©Silvia Casabianca
2007
Manejo del estrés
Manejo del estrés para masajistas:

Autocuidado, Mecánica corporal, Nutrición y Manejo del estrés
El masaje es por lo regular una profesión de corta duración. Después de cinco a ocho años de
practicarla, bien sea el agotamiento o lesiones como el túnel del carpo, hacen que los masajistas
cierren su negocio o se retiren de la profesión. El agotamiento sobreviene cuando los terapeutas han
dedicado su tiempo a cuidar de otros sin pausa, mientras descuidan su propio bienestar. El exceso de
estrés no sólo compromete la capacidad del masajista para concentrarse sino también su desempeño
en general.
El principal objetivo de este libro es contribuir a que los masajistas profesionales prevengan el
agotamiento y las lesiones causadas por uso repetitivo. Además, se busca dotar a los masajistas de
información útil que les sirva para educar a sus clientes desde una nueva perspectiva, una perspectiva
holista, integral, que les ayude a cuidar mejor de sus cuerpos multidimensionales.
En mi libro El Fin de la Enfermedad propuse que, desde una perspectiva holista, la salud es el
resultado de un estado de máxima consciencia e interconexión con nuestro cuerpo, nuestros
sentimientos, nuestros pensamientos y nuestro espíritu. Un estado que permite a nuestra alma fluir,
libre de ataduras con lo que fuimos en el pasado, nuestras posesiones presentes, lo que podemos
llegar a tener o lo que deseábamos pero nunca sucedió. Este estado especial de consciencia tiene una
correspondencia en cada dimensión de nuestro ser: al nivel físico se manifiesta como una óptima
comunicación entre nuestros órganos y en los niveles sutiles (mental, emocional, espiritual) se da
como libre flujo de energía vital y armonía espiritual. En este estado, la inteligencia de nuestro
cuerpo – o si se quiere, nuestro sanador interior – puede jugar su papel a plenitud y nuestra mente
puede aceptar el flujo y reflujo de los ciclos naturales, escuchando y aprendiendo del cuerpo.
Por otro lado, lo que llamamos enfermedad es ese otro estado en el cual se manifiesta un
desbalance en la más vulnerable de nuestras dimensiones, con síntomas que tienen un claro propósito:
garantizar la adaptación del cuerpo a las circunstancias del medio ambiente y restaurar el equilibrio
perdido.
Para mantener el balance, la respuesta del cuerpo a los estresares está sostenida por tres pilares
básicos que se complementan: apropiada nutrición, actividad física y adecuado manejo del estrés.
Un cuerpo balanceado es saludable y funciona óptimamente. Es importante entender que nuestro
cuerpo tiene una capacidad intrínseca para sanarse a sí mismo y que para poder realizar esta función
no sólo necesita de nuestro apoyo consciente sino que también tenemos que ser conservadores en el
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Manejo del estrés
uso de productos químicos y farmacéuticos que pueden impedir la comunicación entre los órganos y,
por ende, la función óptima de nuestro organismo.
Al abordar los conceptos de salud y enfermedad teniendo en cuenta que somos seres
multidimensionales (físicos, emocionales, mentales y espirituales), enfocamos nuestra atención en la
totalidad del ser y no sólo en la parte sintomática.
Para el masajista, una dieta balanceada, una buena mecánica corporal y un adecuado manejo del
estrés son las claves para mantener el balance de su organismo. Entre más comprendamos y
apliquemos estos conceptos en nosotros mismos, mejor podremos cuidar de nuestros pacientes. Es
improbable que ellos sigan nuestras recomendaciones si nosotros mostramos inconsistencias entre lo
que decimos y hacemos.
Este es un libro práctico, escrito en términos sencillos. Está dividido en tres secciones. La
primera invita a hacer un inventario de hábitos saludables como punto de arranque para hacer
necesarios ajustes en nuestro estilo de vida. La segunda sección examina los conceptos de curación y
sanación e introduce nuevos elementos para comprender la salud y la enfermedad desde una
perspectiva holista, incluyendo la idea de que existe en nosotros un sanador inteligente, capaz de
encontrar respuestas apropiadas para los retos adaptativos que le impone el medio ambiente. La
tercera sección es sobre manejo del estrés. Explica lo que es el estrés, cómo afecta el cuerpo, las
distintas fuentes de estrés y algunas de las estrategias que podemos adoptar para mantener el estrés en
niveles razonables. Al final se dedica un espacio especial a la mecánica corporal. Como usted sabe,
una postura correcta y un buen manejo de nuestro cuerpo a la hora de aplicar masaje, nos hace más
eficientes y nos ayuda a prevenir no sólo lesiones sino el agotamiento.
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Manejo del estrés
Autocuidado para prevenir el agotamiento

La mayoría de la gente aprende por experiencia. Se dice que no retenemos sino un 20 por ciento
de lo que oímos, un 30 por ciento de lo que leemos, pero en cambio nos es fácil memorizar un 90 por
ciento de lo que enseñamos a otros. Instruyendo a nuestros clientes retenemos la información que
queremos compartir con ellos y nos ayuda a reafirmarnos en nuestra intención de mantener la vida
saludable que queremos para nuestros clientes.
El trabajo del masajista no se limita a deslizar sus manos sobre los tejidos blandos, movilizar
articulaciones o hacer compresión sobre los músculos para producir relajación o mejorar el rango de
movimiento. Si la intención es administrar un masaje terapéutico, el masajista debe también
contribuir a educar al cliente en estilos de vida saludables. Nadie consigue cambios significativos de
ningún orden, si continúa haciendo lo mismo que le ha causado problemas en el pasado.
Pero difícilmente podremos llevar vidas saludables o recomendar buenos hábitos a otros si no
nos educamos en materia de salud. La educación contribuye a la prevención, eleva nuestra
consciencia. Educarnos nos ayudará a:
√ Crear un plan de salud, basado en metas realistas
√ Identificar las fuentes de estrés (físicas, emocionales y mentales)
√ Entender el impacto del estrés en el cuerpo
√ Reconocer el estrés y las formas en que reaccionamos a él
√ Controlar la forma en que reaccionamos al estrés:
Cambiando la forma en que percibimos las cosas
Mejorando el manejo del tiempo
Mejorando nuestras relaciones interpersonales y
Creando tiempo para el descanso, la relajación y la recreación.
√ Reducir el impacto de altos niveles de estrés a través de la alimentación, el ejercicio y técnicas de
relajación
√ Aprender a lograr estados de relajación a través de la meditación, el masaje y la recreación
√ Promover la capacidad autosanadora del cuerpo.
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Manejo del estrés
Inventario – Reconociendo nuestras necesidades y prioridades

N.B. Belloc and L. Breslow1 hicieron seguimiento a siete mil personas durante un estudio que tomó 40
años, en Alameda County, California. El estudio demostró que aquellos que vivieron por más tiempo habían
seguido al menos seis de siete hábitos claves de salud: comían regularmente (evitando comer a deshoras);
tomaban desayuno; tenían un sueño de buena calidad y suficiente (más de 6 horas diarias); mantenían peso
saludable; no fumaban; limitaban la ingesta de alcohol y participaban regularmente en algún tipo de
actividad física. Numerosos investigadores han corroborado con otros estudios en Norteamérica y Europa que
los hábitos de vida son determinantes para nuestra salud y han servido de base para elaborar planes de salud a
nivel individual y social.
El primer paso en un programa de salud personal es evaluar dónde se encuentra uno en términos
de bienestar y hábitos saludables. Después, a medida que se gana conocimiento sobre nuestras
necesidades en todos los niveles de nuestra existencia, se puede empezar a definir prioridades. Estas
se pueden registrar en una agenda que incluya los pasos a seguir para conseguir cambios duraderos en
nuestros hábitos de vida, teniendo en mente como meta, el mejorar y mantener nuestra salud y
bienestar.
Cuando hablamos de bienestar, nos estamos refiriendo no sólo a la dimensión física de nuestro
ser. Somos seres biológicos, pero no sólo biológicos. Pensamos pero no sólo somos nuestra mente.
Sentimos pero no sólo somos nuestros sentimientos. Con una visión multidimensional podemos
abordar el cuidado de nuestra salud de una manera integral, entendiendo la interrelación que existe
entre nuestros pensamientos, nuestras emociones y nuestro bienestar físico. Esta visión también nos
permitirá relacionarnos con otros y con el planeta de manera más respetuosa. Cuando nos hacemos
conscientes de nuestra interconexión, que existe entre todas las formas de vida, sabremos con
claridad que, cuando actuamos, el efecto se siente no sólo en todos los niveles de nuestro ser, sino
que hay repercusiones sobre el universo entero. Una visión integral nos permite entender que somos
co-responsables del universo.
El siguiente es un sencillo cuestionario que puede ayudarle a evaluar su estilo de vida. Desde
una perspectiva multidimensional le ayuda a evaluar distintas áreas: el uso de bebidas alcohólicas y
de sustancias que alteran estado de ánimo; hábitos nutricionales; actividad física; cómo se expresa
usted; sistema de apoyo; la forma en que establece sus metas; el uso del humor para disipar el estrés;
tiempo de recreación; autoestima y autocuidado y su vida espiritual. Es importante que responda
rápida y honestamente.
1
Belloc, N. B., L Breslow and J. R. Hochstim (Calif. State Dept. Public Health, Berkeley). Measurement of physical
health in a general population survey. Amer J Epidem 93: 328–336, 1971
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Manejo del estrés
¿Qué acciones está tomando para manejar el estrés en su vida?

Elija la opción que mejor parece corresponder a la forma en que usted vive. Después sume el puntaje
Opción No Se parece Se Así
soy un poco a parece a soy
yo mí mí yo
Consumo alcohol y Bebo alcohol con moderación o nunca bebo. No
sustancias que alteran mi abuso de tranquilizantes, sedantes ni drogas que
estado de ánimo alteran mi estado de ánimo. 0 1 2 3
Dieta/ Consumo comidas nutritivas a diario. No tomo más
nutrición de 2 o 3 bebidas con cafeína por día. Evito el exceso
de sal, grasa animal y azúcar. Bebo al menos 8 vasos 0 1 2 3
de agua por día.
Ejercicio Ejercito al menos tres veces a la semana por al
menos 30 minutos.
0 1 2 3
Expresión Expreso mis necesidades y soy asertivo.
0 1 2 3
Amistades Cuento con apoyo de familiares y amigos. Puedo
pedir ayuda a otros.
0 1 2 3
Metas Tengo metas claras y razonables para mi vida.
0 1 2 3
Humor Me puedo reír de mi mismo a diario.
0 1 2 3
Recreación Saco tiempo para mí mismo.
0 1 2 3
Recompensa Me doy palmaditas en la espalda por un trabajo
bien hecho o cuando estoy satisfecho con mis
esfuerzos. 0 1 2 3
Autocuidado Me honro a mi mismo y me digo que soy una

persona buena y valiosa. Me responsabilizo por
mis acciones. 0 1 2 3
Satisfago mis necesidades espirituales mediante

Espiritualidad lecturas, reflexión, ceremonias, etc.
0 1 2 3
*Fuente desconocida – traducido del inglés por la autora
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Manejo del estrés
Puntajes
En el cuestionario de arriba, su puntaje puede ir de 0 a 33 puntos. Entre más alto el puntaje,
mejores son sus opciones de vida. Estas elecciones positivas le ayudarán a compensar el estrés.
Si su puntaje está entre 0 y 10, necesita revisar su estilo de vida y comenzar a hacer mejoras
significativas. Es vulnerable a los efectos deletéreos del estrés.
Si su puntaje está entre 11 y 22, está haciendo elecciones saludables que le ayudarán a compensar
los efectos negativos del estrés. Sin embargo, cabe hacer mejoras.
Si su puntaje está entre 23 y 33, está haciendo elecciones inteligentes y aumentando su protección
contra los efectos negativos del estrés.
Síntomas de agotamiento:
El agotamiento es una condición causada por estrés prolongado y no compensado, que resulta en
cansancio extremo, disminución de la resistencia a las enfermedades, pérdida del interés en el trabajo y
en las relaciones y poca eficiencia en el trabajo.
Dése cuenta que la palabra clave en la definición anterior es no compensado. El estrés es una parte
normal de la vida, pero para poder lidiar con él, el cuerpo necesita unas ciertas condiciones externas e
internas y tiempo para restaurarse.
Para muchos masajistas, el agotamiento es el resultado de trabajar sin parar por más horas de lo
razonable durante la temporada alta para garantizar que tiene medios suficientes de subsistencia
durante la temporada baja. Otras veces es el resultado de tratar cliente tras cliente sin descanso, a veces
cargando la pesada mesa de aquí para allá y conduciendo entre el tráfico pesado. E incluso en otras
ocasiones, el cansancio viene de no tener horarios o ingresos fijos, de trabajar a cualquier hora del día
o de la noche sin poder programar tiempo para su recreación o su familia. En resumidas cuentas, el
agotamiento es el resultado del exceso de trabajo y la falta de tiempo para cuidar de sí mismos.
Otro factor que afecta al masajista es una mecánica corporal pobre, mala postura y movimientos
repetitivos que causan lesiones osteomusculares y articulares, limitando el movimiento y
comprometiendo el desempeño en el trabajo.
Signos físicos del agotamiento son:
1. Fatiga
2. Dolores en el cuerpo (dolor de espalda, manos o rodillas)
3. Dolor de cabeza
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Manejo del estrés
4. Problemas con el sueño

5. Cambios en el apetito
Signos emocionales de agotamiento incluyen:
1. Frustración
2. Baja autoestima
3. Sentirse incapaz de cuidar de otros
4. Falta de motivación para trabajar
5. Sentirse deprimido
6. Irritabilidad
7. Tensiones en las relaciones interpersonales
Signos mentales de agotamiento incluyen:
1. Considerar dejar la práctica
2. Perder el interés por aprender
3. Desear que el cliente no se presente a la sesión
Signos espirituales de agotamiento incluyen:
1. Dificultad para encontrar gusto o sentido en lo que se hace
2. Aislamiento
Entre las lesiones más comunes que sufren los masajistas se encuentran el síndrome del túnel
carpiano, tenosinovitis de flexores y extensores de la mano, tendinitis del codo y lesiones de la espalda.
Hablemos un poco más en detalle del síndrome del túnel carpiano.
Los síntomas incluyen adormecimiento, sensación de agujetas en el brazo, mano y dedos pulgar,
índice y mediano. En ocasiones la persona notará que se le caen las cosas de la mano, porque ha
perdido sensibilidad y fuerza. Los síntomas presentes en este síndrome son causados por el
pinzamiento del nervio mediano que pasa por entre un túnel formado por los huesos del carpo y el
ligamento reticular o ligamento carpiano transverso.
En el caso de los masajistas, el pinzamiento del nervio ocurre cuando movimientos repetitivos de
la mano y los dedos o esfuerzos de la mano en hiperextensión, inflaman los tendones y el ligamento
reticular o producen subluxación de los huesos del carpo, disminuyendo el espacio disponible dentro
del túnel. Las personas que sufren de artritis, diabetes y problemas de la tiroides (que producen
retención de líquidos) están más predispuestas a sufrir el síndrome.
El primer síntoma de pinzamiento del nervio es dolor. A esta alerta, el masajista debe responder
dando reposo a sus manos dando tiempo al cuerpo de reparar tejidos y disminuir la inflamación, y
revisando la forma en que está utilizando sus manos para que prevenir ulterior inflamación.
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Manejo del estrés
Una férula, utilizada durante varias horas antes de irse a la cama, ayuda a mantener la muñeca en
una posición anatómica óptima con lo cual se disminuye la presión sobre el nervio y se alivian los
síntomas. La férula no debe utilizarse por más de tres horas seguidas pues puede producir
debilitamiento y hasta atrofia muscular, que sólo empeoraría el problema.
En el tratamiento y prevención de esta lesión están indicados ejercicios de estiramiento y pesas
para fortalecer los músculos del brazo y las manos y aumentar elasticidad.
Cuando el masajista no responde al mensaje de su cuerpo, tomando medidas tan pronto como los
síntomas se presentan, la inflamación puede hacerse crónica, se pueden formar adherencias dentro del
túnel y las lesiones pueden tornarse permanentes. En ocasiones, es necesaria la cirugía para tratar de
aliviar el dolor y la limitación causados por la presión sobre el nervio. Sin embargo, lo ideal es evitar la
cirugía que también trae complicaciones indeseables.
Plan de bienestar
Después de hacer el cuestionario que propusimos más arriba, lo que sigue es tomarse el tiempo para
hacer un plan de salud. Incluya metas a corto, mediano y largo plazo. Empiece por hacer una lista de sus
puntos fuertes. Tenga en cuenta que aquellas áreas donde obtuvo los puntajes más altos son aquellas donde
está más motivada para hacer cambios o mantener hábitos saludables. Observe qué cambios puede hacer
para mejorar aún más en esas áreas primero. La motivación es la clave del éxito, como probablemente
usted les recalca a sus clientes. Después de que decida sobre qué áreas se va a concentrar, póngale una
fecha límite a sus metas y empiece un diario (será su herramienta personal de evaluación). Haga
anotaciones con tanta frecuencia como pueda y léalo a menudo para darse cuenta de su crecimiento
personal y recordarse sus metas.
Agregue las respuestas a estas preguntas.
¿De qué se trata su vida?
¿Qué le da sentido a su vida?
¿Cuáles son sus sueños?
Muchas cosas nos traen alegría pero también nos dejan con una sensación de vacío.
¿Está contenta con sus logros profesionales?
Es frecuente que motivaciones inconscientes nos lleven a forzar situaciones para tomar decisiones
que queremos tomar pero no nos atrevemos. Pongo el caso de un cirujano que empezó a sufrir de
artritis en sus manos. Esto lo llevó a examinar la forma en que se alimentaba, sus relaciones familiares,
el tiempo que se dedicaba a sí mismo e incluso si esta era la especialidad que quería seguir ejerciendo
toda su vida. Encontró los mejores tratamientos para su artritis dentro de la medicina alternativa lo cual
lo hizo cambiar de rumbo y encontrar mucha más satisfacción en lo que estaba haciendo.
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Manejo del estrés
He conocido masajistas que han sufrido el síndrome de túnel carpiano y esto las ha llevado a
replantear no sólo su mecánica corporal, sino cuál es la modalidad de masaje que prefieren aplicar.
Algunas han optado por especializarse en Reiki, otras en Trager e incluso una, en masaje oriental
aplicado con los pies.
Incluya en su plan de bienestar cómo planea mejorar sus habilidades profesionales y superarse en
su carrera.
Su plan debe también incluir estrategias para mejorar su educación en materia de salud y bienestar.
¿Se ha suscrito a revistas de salud o revistas sobre su profesión? ¿Busca información sobre estos temas
en Internet?
Entre los recursos que usted podría utilizar está mi propio portal, www.silviacasabianca.com con
mucha información sobre reiki y medicina alternativa.
Otros portales que aportan mucha información son:
* El portal del Dr. Andrew Weil, www.drweil.com. El Dr. Weil ha abogado por una medicina integradora.
Su portal de Internet está lleno de información útil. También recomiendo sus libros.
* Puede encontrar información sobre medicina alternativa en www.healing.about.com.
* Los portales en español www.saludparati.com y www.enbuenasmanos.com tienen información sobre
enfermedades y tratamientos naturales.
* El portal www.terraverda.com ofrece noticias sobre temas de actualidad en el campo de la salud natural.
* Un portal con buena información sobre salud preventiva y alternativa es www.drneo.com.
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Manejo del estrés
Curar vs. Sanar

Creo importante hacer una distinción entre los conceptos de curar y sanar.
Curar es aliviar (paliar) o eliminar los síntomas, quedándose en las causas aparentes pero sin
explorar el verdadero origen de los mismos. Por ejemplo, una amigdalitis puede ser curada con
antibióticos pero puede presentarse de nuevo si no se explora por qué apareció en un determinado
momento, qué debilitó el sistema inmune permitiendo la infección o qué hábitos de vida están
relacionados con la aparición de la infección.
Sanar es un concepto mucho más trascendente. Se refiere a un proceso de transformación que nos
lleva a la verdadera razón de la aparición de los síntomas, los conflictos, las adicciones y las
infelicidades.
Sanación se refiere a la necesidad de reunificar lo que ha sido separado, reestablecer nuestra
conexión con nuestro cuerpo y con nuestro espíritu. Cuando se busca la sanación, nuestra meta no es
inmediata, sino parte de una búsqueda por alcanzar la totalidad, entendiendo quiénes somos en todas
las dimensiones como seres individuales y colectivos. Sanar significa superar la negación de los
aspectos de nuestro ser que no nos interesa ver.
En este contexto, sanar una infección en la garganta nos puede llevar a preguntarnos no sólo si
descansamos suficiente, si estamos comiendo lo adecuado, si estamos manejando bien el estrés, sino
también si un problema doloroso en la garganta puede estar simbolizando una dificultad para expresar
sentimientos dolorosos.
Los malestares pueden entenderse como mensajes del cuerpo multidimensional que nos llama a
poner atención en un aspecto de nuestra vida sobre el que necesitamos aprender. Si usted desarrolla un
síndrome del túnel carpiano tiene que mirar cómo está utilizando sus manos. Si su espalda duele todo
el tiempo, tiene que revisar su postura y la fortaleza de sus abdominales. Pero también si usted presenta
estos síntomas y no les pone la debida atención, debe revisar por qué es negligente con su cuerpo.
¿Se ama suficientemente a sí mismo?
¿Cuáles son sus prioridades?
¿Por qué está esforzándose hasta hacerse daño?
La curación tiende a ser un proceso pasivo en el cual uno depende por lo general de un experto o
de un agente externo (medicamento o máquina) para ponerse bien o para aliviar sus malestares. La
curación viene de algo que está afuera de nosotros, algo sobre lo que no tenemos control.
Sanar, en cambio, comprende un proceso en el cual, en lugar de depender de circunstancias
externas, nosotros nos hacemos cargo de nuestra propia vida, nuestro cuerpo y nuestras elecciones y
trabajamos para producir los cambios que nuestra salud física, mental y espiritual requieren. La
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Manejo del estrés
sanación es un proceso que nos hace más concientes de manera que dejamos de ser negligentes con
nuestro cuerpo y, al dejar de ignorarlo, aumentamos las posibilidades de tener una vida plena.
El cuerpo tiene una inmensa capacidad para sanarse a si mismo si lo cuidamos adecuadamente.
Incluso cuando creemos que son las medicinas las que nos están haciendo sentir mejor, es realmente el
cuerpo y su capacidad para sanarse lo que ha producido el cambio. Pero para que el cuerpo pueda
reparar y regenerar tejidos, necesita todo el apoyo que podamos darle.
Se nos dice que somos egocéntricos y egoístas cuando pensamos primero en nosotros mismos.
Pero en muchas ocasiones si nos dedicamos sólo a cuidar a otros, inclusive si lo hacemos para
ganarnos la vida, esto crea una situación en la cual nos agotamos y nos resentimos hasta que ya no
podemos dar de nosotros mismos. Nuestra frustración e insatisfacción se la pasamos a otros. Por eso,
sanarnos a nosotros mismos nos hace verdaderamente capaces de cuidar de otros y es en realidad lo
más generoso que podemos hacer.
Los síntomas pueden ser un camino hacia la sanación

¿Por qué el mismo tipo de estresores hace que unas personas se enfermen y otras no? ¿Qué es lo
que determina las respuestas individuales al estrés? ¿Qué es lo que define cuándo, frente al mismo
estresor a veces nos enfermamos y a veces no?
Por lo regular, el estrés causa enfermedad cuando nuestros recursos internos o externos son insuficientes
para compensarlo. Varias clases de estresores, físicos, biológicos, electromagnéticos, químicos, emocionales
y mentales hacen parte de nuestra vida cotidiana. Nos mantenemos sanos cuando el cuerpo está bien equipado
para adaptarse al estrés o sabemos encontrar los recursos externos necesarios para reducir su impacto.
Desde un punto de vista ambiental, las condiciones sanitarias pobres, la contaminación, el
aislamiento, o la presencia de microorganismos virulentos, son causas de enfermedad. Desde la
perspectiva del cuerpo, nuestra respuesta inmunitaria, nuestro estado de ánimo, la predisposición
genética, los cambios bioquímicos y la nutrición determinan nuestra salud.
En el proceso de aprender y adaptarse a los estresores ambientales a través de la vida, nuestro
organismo “programa” emociones, reacciones, comportamientos e incluso síntomas físicos que nos
ayudan a combatir el estrés. Podríamos decir que nuestras respuestas de enfermedad y de salud son
aprendidas y que, una vez aprendidas, estas se vuelven una especie de libreto en nuestra mente que
seguimos sin darnos cuenta. Por ejemplo, nuestra mamá nos decía que no debíamos mojarnos en la
lluvia porque nos enfermaríamos. Y cada vez que nos mojamos en la lluvia nos enfermamos de la
garganta aunque no exista una base científica que justifique el por qué.
Uno de los problemas más inquietantes que se derivan de nuestras visitas al doctor es que cuando
nos diagnostican una condición crónica empezamos a identificarnos con ella y a vivir en función de la
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enfermedad. Por ejemplo, nos dicen que somos diabéticos. La diabetes se convierte entonces en una
especie de identidad y nuestra vida, nuestros pensamientos, empiezan a girar en torno a este rótulo.
Visitamos al médico con frecuencia, nos preguntamos qué comer, cuál es la cantidad apropiada de
descanso, qué suplementos tomar, qué actividades evitar. Leemos y aprendemos sobre nuestros
síntomas. La enfermedad se convierte en tópico de conversación. Las personas con las que hablamos
sobre el tema nos aportan sus experiencias. Oímos sobre el tío que se mejoró haciendo esto o aquello.
La amiga que se murió porque se presentaron estas o aquellas complicaciones. Así, nos vamos
identificando más y más con el diagnóstico e incluso éste puede proveernos inconscientemente de lo
que el padre del psicoanálisis, Sigmund Freud, llamaba “ganancias secundarias”.
Desde una perspectiva que mira los síntomas como símbolos de nuestra vida interior, la diabetes
puede ser un intento simbólico del cuerpo por compensar la falta de “dulzura” existente en nuestra
vida. La enfermedad puede despertar en otros la compasión y comprensión que hemos añorado. Al
nivel conciente estamos combatiendo la enfermedad, pero inconscientemente hay otras fuerzas en
juego porque a través de ella obtenemos un beneficio.
Un resfriado puede, por ejemplo, dar la excusa perfecta a una persona excesivamente responsable
para tomarse un descanso y aislarse un poco de los demás. Sufrir del túnel del carpo nos da una excusa
palpable para faltar a un trabajo que nos está abrumando o para justificar retirarnos de una profesión
que ya no nos satisface.
Al estudiar la enfermedad, la medicina suele quedarse en las causas aparentes y en la prescripción
de tratamientos sintomáticos. Parece obvio que el tratamiento de una infección sea un antibiótico o
incluso un remedio homeopático. El problema estriba en que un tratamiento de este tipo se presta para
que el paciente se identifique con el síntoma. Escuchamos a la gente diciendo “sufro de asma, de
amigdalitis, de migrañas…”. Esto contribuye a que se prolongue la enfermedad y se genere una
relación codependiente (el médico salva al paciente inerme). En cambio, rara vez oye uno decir cosas
como: “cada vez que me excedo en el consumo de dulce, mi sistema inmune se debilita y me hago más
susceptible a los gérmenes o a los alergenos”.
Un aspecto interesante de la forma en que por lo general hacemos frente a la enfermedad es que
pareciera que no estuviéramos igualmente dispuestos a prevenirla como a combatirla. La prevención
requiere visitar al médico con regularidad, preguntarnos qué es lo mejor para comer, cuál es la cantidad
apropiada de descanso, qué suplementos tomar, qué actividades evitar y, además, leer y aprender sobre
salud. Pero siguiendo la línea del menor esfuerzo que es propia de la sociedad de consumo, preferimos
ingerir un par de píldoras que cuidar de nosotros mismos.
Muchos autores coinciden en que la enfermedad puede ser una oportunidad de crecimiento
personal si evitamos convertimos en sus víctimas o que la enfermedad se convierta en el centro de
nuestra vida. Autores de renombre como Louise Hay, Eckhard Tolle, Jeane Carper y Brough Joy se han
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hecho famosos al publicar libros que relatan sus experiencias de sanación. Ellos pasaron la prueba con su
enfermedad y transformaron sus vidas. Podríamos decir que ellos sanaron gracias a su enfermedad.
Muchos investigadores han corroborado que el éxito de un tratamiento no es sólo el resultado de un
buen diagnóstico y un buen tratamiento, sino que también depende de la percepción que el paciente tiene de
su situación, de su sistema de apoyo e inclusive de las características de la atención que recibe.
Que nuestros pensamientos, actitudes y percepciones influencian nuestro bienestar se demuestra
con el efecto placebo. Muchos estudios diseñados para medir la efectividad de un medicamento
utilizan un grupo de control al que se le administran placebos, sustancias no medicamentosas que no
tienen por qué tener un efecto sobre los síntomas. Estos estudios son “doble-ciegos” lo cual significa
que ni el paciente ni el investigador saben quién recibe el placebo y quién el medicamento.
Al menos una cuarta parte de los individuos que reciben placebo experimentan alivio y mejoría
significativa. Por ejemplo, un estudio sobre medicamentos antidepresivos (Khan A, Warner HA, and
Brown WA) dice que el 75 por ciento de la reducción de síntomas y del riesgo de suicidio es debido al
efecto placebo y no al medicamento.
¿Objetivo? ¿Subjetivo? En un enfoque multidimensional del cuerpo, no hay diferencia porque se
sabe que el observador influencia lo observado y lo observado influencia al observador. La fe en el
placebo puede contribuir a aumentar el flujo sanguíneo al cerebro y la actividad neuronal, mientras que
el efecto analgésico de un placebo se explica por la liberación de endorfinas (sustancias opiáceas
producidas por el cuerpo que sedan y alivian el dolor). El estímulo para que el cuerpo produzca sus
propios opiáceos se explicaría por la certeza de que la sustancia administrada producirá beneficios.
Norman Cousins, escribió Anatomy of an Illness, un libro basado en su lucha contra una
enfermedad crónica y progresiva. En su libro, Cousins afirma que la medicación no es siempre
necesaria para curar al paciente pero la fe siempre lo es. El efecto placebo, dice, ha permitido a la
medicina evaluar y entender la relación entre la mente y los cambios moleculares que ocurren en el
cuerpo.
Cuando la investigadora Candace Pert, al comienzo de su carrera, probó la existencia de receptores
opiáceos (moléculas a las que se adhieren las endorfinas) contribuyó a unir las ciencias de la
endocrinología, la neurología y la inmunología, y ratificó la existencia de la unidad entre cuerpo y
mente. Sus estudios sobre la bioquímica del cuerpo no demuestran la existencia de un poder de la
mente sobre el cuerpo, o que el pensamiento domine al cuerpo, sino que la mente se hace cuerpo. Esta
diferencia parece sutil pero las palabras reflejan nuestra manera de entender las cosas. Cuando se
conceptúa que la mente domina al cuerpo se hace énfasis en la dualidad, no en la unidad. El trabajo de
Pert con las “moléculas de la emoción” demuestra que una serie de mensajes fluyen a través del
organismo, transportados por moléculas. Ella denomina mente al producto de esa transmisión de
información. Interesante notar que los chinos vienen diciendo hace 5000 años que los órganos se
comunican entre sí. Sólo en años recientes la ciencia occidental está corroborándolo.
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Manejo del estrés
Después de 40 o 50 años de un movimiento que se enfoca ahora más en la salud que en la

enfermedad, las prácticas alternativas empiezan a ganar terreno demostrando que el cuerpo es
multidimensional y por lo tanto puede ser curado a través de la mente, cambiando nuestros
pensamientos tóxicos por otros más amables; cambiando nuestras actitudes por otras más saludables-
Pero también podemos decir que la mente puede ser sanada a través de la nutrición, la meditación y el
ejercicio, como se ha demostrado, por ejemplo, en el caso de la depresión.
Cuando administramos un masaje o una sesión de reiki, nos es evidente que la relajación profunda
alcanzada por el cliente va más allá de la disolución de la tensión muscular. El cliente experimenta paz
y bienestar también. Con frecuencia, el paciente sale de la sala de masaje feliz de haber descubierto
que su cuerpo es mucho más que un “saco de nervios”, recordando que el bienestar es posible, que en
realidad no hay nada malo con su cuerpo y que él puede hacer algo para compensar el estrés que le está
afectando. (Y, usted, como masajista, ¿cuántos masajes o sesiones de reiki recibe en un mes?)
La psicobiología, la medicina biológica y la psiconeuroinmunología han demostrado de manera
tangible que el cuerpo y la mente son indivisibles. Demos la bienvenida a esa nueva compresión de la
relación entre salud, medio ambiente, pensamientos, percepción, sentimientos, actitudes, hábitos
nutricionales, patrones de respiración y estilo de vida.
Nuestro sanador interior
Es importante entender que nuestro cuerpo es un organismo que se autorregula y contiene, como
quien dice, un sanador interno. Este sanador no se limita a respuestas instintivas, como se entendió en
otros tiempos, sino que también está a cargo de la vigilancia y la comunicación, el almacenamiento de
información, la evaluación, la organización y la expresión del cuerpo como un todo.
Este sanador interior es también responsable de proveer respuestas apropiadas a los retos
adaptativos impuestos por el medio ambiente. Se nutre de la información memorizada y aprendida por
el cuerpo, para poder desempeñar sus funciones y por lo tanto podemos llamarlo un sanador
inteligente.
Tomemos un par de ejemplos del funcionamiento del cuerpo bajo esta perspectiva. Cuando damos
un masaje estamos estimulando los receptores nerviosos del área donde estamos trabajando. El cuerpo
responde a la estimulación produciendo sustancias vasodilatadoras que aumentan la afluencia de
sangre. El aumento del flujo sanguíneo garantiza un mejor aporte de nutrientes y oxígeno a los tejidos
y también una mejor disposición de las sustancias de desecho producidas en las células y acumuladas
en el tejido intersticial. El aumento de actividad en la zona puede significar la resolución de tensiones
crónicas y el realineamiento de las fibras de colágeno garantizando mayor rango de movimiento y
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Manejo del estrés
flexibilidad. Este bienestar puede hacer que la persona empiece a considerar utilizar su cuerpo de
manera más eficiente y cuidadosa para mantener el beneficio proporcionado por el masaje.
El oxígeno que nuestros músculos utilizan para producir energía y garantizarnos el movimiento
viene del aire que respiramos a través de los pulmones. En los pequeños alvéolos del pulmón, los
glóbulos rojos que recorren los pequeñísimos capilares que los circundan, recogen el oxígeno y lo
transportan a los tejidos. Para tal fin, los glóbulos rojos usan una molécula conocida como
hemoglobina que está en parte hecha de hierro. Este hierro procede de lo que comemos. El sistema
digestivo debe remover este elemento de la comida. El sistema circulatorio lleva el hierro al hígado
donde es almacenado, o directamente a la médula de los huesos donde las “fábricas” de hemoglobina
están situadas. La producción de hueso está regulada por hormonas tiroideas (Calcitonina) y hormonas
paratiroideas (HPT) y también es estimulada por la contracción muscular. El azúcar produce la
suficiente energía para que el músculo se contraiga. El azúcar que viene de nuestra comida o de
nuestras reservas, requiere de la insulina para entrar a las células y poder ser utilizada. El páncreas
produce la insulina. Otras hormonas del páncreas regulan la cantidad de insulina que debe secretarse.
Los ejemplos anteriores ilustran cómo un agente externo como el masaje despierta una respuesta
inteligente del cuerpo y también cómo los sistemas del cuerpo interaccionan y se interrelacionan.
Para poder coordinar sus tareas, los distintos órganos requieren un sistema de comunicación que
funcione de la mejor manera posible. El sistema inmune, el sistema endocrino y el sistema nervioso
hacen parte de ese todo inteligente que es nuestro cuerpo y están a cargo de gran parte de la
comunicación del cuerpo. La comunicación se da gracias a una serie de moléculas que recorren el
cuerpo y se ligan a ciertos receptores en la superficie de la célula, indicándole a ésta qué funciones se
esperan de ella.
Un ejemplo sencillo para mostrar la inteligencia de nuestro cuerpo es pensar en cómo las células
que forman nuestra piel tienen una corta vida, de apenas treinta y seis días. Pero, no bien una célula
muere, viene otra a reemplazarla. ¿De qué otra forma podría explicarse que nuestra piel perdure no
sólo un poco más de un mes, sino toda la vida? Nadie tiene que intervenir en estos procesos de
regeneración. No tenemos que asistir a una consulta médica para que se nos formulen fármacos que
obliguen a la piel a formar nueva piel. Sucede sin nuestra participación consciente.
Nuestro cuerpo se renueva por completo cada siete años. Sucede sin nuestro concurso. Sin
embargo, es necesario proveerle buena materia prima. Nuestros tejidos están hechos de los materiales
que provienen de lo que comemos, el agua que bebemos y el aire que respiramos y por lo tanto la
calidad de nuestros tejidos dependerá de la calidad de nuestra comida, aire y agua. Y el funcionamiento
de nuestro cuerpo dependerá también de que reposemos un suficiente número de horas.
¿Quién instruye a nuestro cuerpo para que haga su trabajo de regeneración y reparación? ¿Cómo
sabe el cuerpo que debe producir células de piel en la piel y glóbulos rojos en la sangre? Una sabiduría
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Manejo del estrés
inscrita de forma misteriosa dentro del cuerpo; un sanador que se organiza de acuerdo con un
“software” impreso en nuestros cuerpos sutiles y en nuestros genes para garantizar la supervivencia.
Y, ¿cómo explicar el crecimiento y desarrollo de un niño? Tenemos que asumir que esta
inteligencia existe en nuestro organismo y la comunicación entre órganos y sistemas dentro del cuerpo
es esencial para mantener esta inteligencia interna funcionando.
Los síntomas nos cuentan que nuestro cuerpo está tratando de recuperar el balance cada vez que
un reto adaptativo lo ha sacado de quicio. Es el caso de la diarrea a través de la cual el cuerpo intenta
deshacerse de una sustancia tóxica o una bacteria que lo ha invadido. O el caso de la fiebre, con la cual
el cuerpo busca acelerar el metabolismo para que se produzcan glóbulos blancos más rápidamente,
para garantizar que un invasor sea puesto a raya antes de que produzca daño irreversible.
Sin embargo, a veces la enfermedad nos cuesta la vida.
Lo que derrota a este sanador, que reside en lo más sutil y en lo más recóndito de nuestras
entrañas, lo que rompe el balance y genera enfermedad, es el estilo de vida impuesto o elegido por
nosotros de acuerdo con factores sociales, culturales y económicos. Entre estos factores están la
calidad del agua, la comida y el aire, los roles que jugamos en la sociedad, la calidad de nuestras
relaciones con los demás, el procesamiento de los alimentos, los hábitos dietéticos, la forma en que nos
ejercitamos y respiramos, nuestra autoestima, nuestro sentido de seguridad, nuestra vida espiritual y
nuestras experiencias positivas o traumáticas. Todos estos elementos afectan la manera en que
respondemos frente al estrés, que es una constante de la vida.
Si bien es imposible evitar el estrés normal que conlleva la vida cotidiana, el cuerpo está bien
equipado para lidiar con él. Sin embargo, el estrés excesivo o demasiado prolongado y la falta de
elementos compensatorios, termina por comprometer el balance del cuerpo, entorpeciendo su
capacidad para responder a los estresores.
La importancia de escuchar al cuerpo

Se ha vuelto de uso común que cada vez que presentamos un síntoma nuestra primera reacción es
combatirlo sin tener en cuenta que los efectos secundarios de los productos químicos que ponemos en
nuestro cuerpo pueden comprometer nuestro estado general de salud e incluso el pronóstico de una
condición o lesión.
Tanto en el caso del síndrome del túnel carpiano como en las tendinitis del codo o la mano, o el
dolor de espalda y rodillas, los antiinflamatorios y analgésicos pueden ser contraproducentes. Aunque
alivian los síntomas temporalmente, a largo plazo pueden contribuir a empeorar la condición. Los
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Manejo del estrés
medicamentos pueden saturar los receptores de ciertos mensajes que el cuerpo distribuye entre sus
órganos y que garantizarían la resolución del proceso inflamatorio2.
Por eso es esencial escuchar a nuestro cuerpo.
Es necesario aprender a entender los síntomas como un llamado de alerta de parte del cuerpo y
como un mecanismo por el cual el cuerpo trata de adaptarse a un reto que le ha impuesto el medio
ambiente.
Es entendible que, si nuestra mano empieza a doler, nos sintamos inclinados a tomar analgésicos o
antiinflamatorios para poder seguir trabajando. Pero el resultado será que al anular la advertencia del
cuerpo, lastimaremos los tejidos aún más hasta que la lesión que dio lugar a los síntomas se hace
crónica y sus consecuencias irreversibles. Es como si cuando la alarma de fuego empieza a sonar,
apagamos la alarma en lugar de buscar dónde está el fuego.
Pero en cambio, si reconocemos el dolor como una alarma, si escuchamos el cuerpo, podremos
evaluar la causa del dolor e introducir cambios en la mecánica corporal o aceptar el reclamo del cuerpo
dándole reposo.
Cuando encontramos la verdadera causa de nuestros síntomas podemos encontrar verdaderas
soluciones. Esto nos llama a poner verdadera atención en lo que hacemos y en cómo lo hacemos, en
lugar de aplicar repetitivamente técnicas que aprendimos en la escuela o en lugar de repetir
mecánicamente un movimiento aunque nos esté lastimando.
Viviendo en un mundo en el que predomina la filosofía del trabajo duro, mucha gente trabaja sin
pausa por horas y horas, dejando de lado sus necesidades. ¿Pero, cómo puede una masajista ayudar a
sus clientes a vivir una vida más saludable si ella misma no es consistente con el estilo de vida que está
recomendando? ¿Cómo transmitir relajación si uno está tenso?
Para prevenir el agotamiento, el terapeuta necesita aprender cómo puede obtener una nutrición
balanceada, mejorar su mecánica corporal, darse tiempo para la actividad física y aprender estrategias
inteligentes para manejo del estrés.
Si a consecuencia de un uso inadecuado del cuerpo, su cuerpo experimenta un espasmo muscular
en la parte baja de la espalda, el cuerpo va a sonar alarmas y usted va a sentir dolor. Este síntoma la
previene, diciéndole, si continúa haciendo lo mismo, yo me irrito. Cuando usted comienza a
experimentar dolor de espalda, tiene dos opciones: escuchar o no escuchar el cuerpo. Si escucha,
entonces revisará su postura, la altura de la mesa de masaje, la intensidad con que está aplicando el
masaje, si está tomando las necesarias pausas o no. Cuando se dé reposo y tome medidas ergonómicas,
2
Los antiinflamatorios rofecoxib (Vioxx) y valdecoxib (Bextra), por ejemplo, fueron retirados del mercado en el 2005 cuando se
descubrió que incrementaban el riesgo de enfermedad cardiovascular. La limpieza de las arterias que llevan sangre al corazón depende
también del sistema inmune, el cual se deprime cuando se usan antiinflamatorios.
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Manejo del estrés
como ajustar la altura de la mesa y mejorar su mecánica corporal, el dolor desaparecerá, siempre y
cuando no exista una lesión.
Pero si no escucha y sigue trabajando de la misma manera, entonces el cuerpo empezará a gritar.
El dolor se agudizará y el espasmo puede generar desajustes articulares, todo lo cual que la hará más
susceptible de sufrir lesiones.
Muchas veces la gente no para de trabajar con el argumento de que no puede darse el lujo de no
percibir el ingreso monetario. Sin embargo, lo que con frecuencia sucede es que una vez que el
problema se hace crónico o genera una lesión, la incapacidad y los subsecuentes días sin trabajo, serán
mucho mayores que si se hubieran tomado a tiempo medidas preventivas.
En el caso de una lesión es importante tener en cuenta que el síntoma sigue siendo una alerta que
hay que escuchar.
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Manejo del estrés
Manejo del estrés

¿Qué es el estrés y cómo nos afecta?
El estrés es el resultado de los cambios ambientales que el cuerpo o la mente perciben como una
amenaza, un reto o un conflicto que puede comprometer el balance. Desde el nacimiento, el cuerpo está
bien preparado para hacer frente al estrés porque éste es un componente normal en nuestra interacción con
el medio ambiente, es parte de la vida. Lo que es nuevo, es el estrés crónico, característico de la vida
moderna. Nunca antes ha estado el ser humano sujeto a tantos estresores, tan intensos y variados, con tan
pocas pausas restauradoras y elementos compensatorios.
Todo estímulo que el cuerpo recibe produce estrés. Si es intenso, el estrés puede convertirse en la
causa de lesiones, dolor y mal-estar. Aún cuando no es excesivo, si es repetitivo, el estrés puede producir
desbalance y enfermedad.
Hace cien años, Hans Selye, un profesor de McGill University en Montreal, describió la respuesta
del cuerpo al estrés. Observando ratas de laboratorio vio que éstas respondían a distintos estímulos
(hormonas o sustancias tóxicas inyectadas; frío o calor extremos) de la misma manera. Encontró que
las glándulas suprarrenales aumentaban de tamaño, había cambios degenerativos en los nódulos
linfáticos y se producían úlceras en el estómago y los intestinos. Se afectaba todo el cuerpo.
Selye también encontró que la pituitaria era una intermediaria en la respuesta al estrés. Los
experimentos subsiguientes mostraron que el cuerpo de los animales respondía a las condiciones
estresantes inmediatamente, cambiando sus actividades. Si el estrés se prolongaba, esos cambios se
hacían permanentes. Y si el animal permanecía bajo estrés por un tiempo muy prolongado, estos
cambios agotaban el cuerpo y podían causar la muerte.
El profesor le dio el nombre de alarma a la respuesta inicial, cuando el cuerpo está juntando todos
sus recursos para responder al reto. A la segunda fase de la respuesta, la llamó de resistencia, cuando el
cuerpo está en el proceso de adaptarse al estresor. La tercera fase, la llamó de agotamiento, cuando el
cuerpo ha usado todos sus recursos y sufrido un daño irreparable.
Cuando estamos estresados producimos una cantidad extra de adrenalina y cortisona. Estas
sustancias son necesarias en el cuerpo para responder a los retos adaptativos. Sin embargo, cuando el
estrés se hace crónico o acumulativo, la acumulación de estas sustancias y de sus productos ácidos de
desecho, dañan los tejidos.
En cambio, cuando estamos descansando, recibiendo un masaje o teniendo un rato agradable, el
cuerpo tiene la oportunidad de reagrupar sus recursos para reparar el desgaste natural de los tejidos y
regenerar células.
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Manejo del estrés
Como ya mencionamos, las respuestas individuales al estrés dependen de muchos factores como la
herencia, la nutrición, la resiliencia3, nuestro sistema de apoyo e incluso la forma en que percibimos un
estresor.
Deepak Chopra ha hablado en sus presentaciones sobre un experimento que se realizó con conejos
alimentados con una dieta rica en grasa y colesterol para estudiar la arteriosclerosis relacionada con la
dieta alimenticia. Los niveles de colesterol y triglicéridos subieron en los exámenes de sangre de casi
todos los conejos a excepción de uno de los grupos estudiados. En este grupo de conejos, la elevación
de los niveles de colesterol y triglicéridos en la sangre fue mucho menor que en los demás y estos
sufrieron menos daño en sus arterias. Una vez que los investigadores descartaron la mayoría de las
variables, decidieron observar el proceso de alimentación y así descubrieron que el hombre que alimentaba a
ese particular grupo de conejos, cargaba a los animales en sus manos, los acariciaba y les hablaba. Estos
animales se mantuvieron más saludables porque la persona que los cuidaba amaba a los conejos y les daba
una atención especial. Nuevos experimentos probaron que esto era cierto aunque, por supuesto, el reporte no
habló para nada del amor o las relaciones como variable.
Candace Pert estudió cómo la meditación contrarrestaba los efectos del estrés sobre el sistema
inmune. Ella encontró que el estrés obstruye el libre flujo de las moléculas que llevan la información a
través del cuerpo, entorpeciendo las funciones fisiológicas básicas como la respiración, la circulación y
la digestión. El resultado es que el cuerpo ya no puede llevar a cabo los procesos normales de
regeneración y reparación. Si el estrés continúa, el sistema inmune pierde su capacidad de reconocer
moléculas extrañas al cuerpo o células cancerosas.
La meditación, encontró Pert, relaja la mente y atenúa las emociones. Al nivel físico, el uso de
relajación, meditación, masaje o reiki, estimula la comunicación entre órganos, que es necesaria para
mantener el balance y prevenir la enfermedad.
La relación entre el funcionamiento del sistema inmune y las infecciones, las enfermedades
autoinmunes, el cáncer y las alergias, no es un concepto nuevo. Pero sólo recientemente, la ciencia ha
entendido que la función inmune es básica para entender otras enfermedades como la diabetes, el
cáncer y la enfermedad coronaria.
Radicales libres
El cuerpo responde al estrés produciendo adrenalina y corticoides que al descomponerse dan como
resultado lo que se conocer como radicales libres. Algunos factores ambientales dan también lugar
3
Este término, que ya se ha generalizado, se aplicó en principio a la característica de ciertos metales, capaces de retornar a su forma original
después de una deformación. También lo usan los ecólogos para referirse a la habilidad de ciertos ecosistemas para mantener su diversidad e
integridad después de haber sufrido una perturbación. En general, se usa para definir la capacidad de recobrarse después de un evento traumático
y el aprendizaje logrado gracias al evento estresante, el cual permite un funcionamiento incluso más competente aún en condiciones adversas.
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Manejo del estrés
directamente a la formación de radicales libres como la radiación, el consumo de ciertos antibióticos y

las drogas anticancerígenas.
Los radicales libres son productos químicos altamente reactivos que atacan las moléculas cruciales
para la función celular capturando electrones y modificando estructuras químicas. Ellos afectan el
metabolismo, la actividad hormonal, la síntesis de material genético y el comportamiento celular.
El sistema inmune, como parte de su funcionamiento normal produce radicales libres para
neutralizar virus y bacterias. Aunque una parte de los radicales libres son un subproducto normal del
metabolismo celular del cuerpo, un exceso de estos iones en respuesta al estrés, a la presencia de
campos electromagnéticos o a productos tóxicos puede hacer que los antioxidantes que produce el
cuerpo o que consumimos sean insuficientes para prevenir la aparición de enfermedad.
Los procesos normales de oxidación incluyen la transferencia de electrones de un átomo a otro. En
ocasiones, una molécula con un enlace débil se rompe y queda con un número incompleto de
electrones. Entonces se ha convertido en radical libre.
Los radicales libres también se producen cuando la comida es procesada, hervida, fritada, irradiada
o secada en frío. Los radicales libres son muy inestables y siempre andan a la cacería de electrones en
el vecindario para completarse. Cuando lo hacen desencadenan una cascada de reacciones químicas
creando nuevos radicales libres. Normalmente, el cuerpo puede manejar los radicales libres, pero si
existen en exceso, producen daño celular.
Los radicales libres perturban los patrones de energía eléctrica en los músculos y pueden destruir
las grasas protectoras de la membrana celular, produciendo retención de líquidos y acelerando el
proceso de envejecimiento celular. Muchas enfermedades degenerativas como el Alzheimer han sido
asociadas con la presencia de radicales libres y su efecto sobre el sistema inmune. El cuerpo está listo a
reparar el daño producido por los radicales, pero no puede efectuar esta tarea a cabalidad si su propia
capacidad para reparar y restaurar ha sido comprometida por estas substancias.
El proceso oxidativo del cuerpo explica el envejecimiento. Cuando los radicales libres atacan las
moléculas que participan en la reproducción de las células, estas pueden hacerse cancerosas. Los
radicales libres también pueden dañar las células que están a cargo de remover el colesterol de la
sangre, lo cual puede explicar la acumulación de placa en las arterias y la frecuencia de las
enfermedades coronarias en personas sometidas a constante estrés.
La mejor manera de combatir los radicales libres, como mencionaremos más adelante, es
aumentando nuestro consumo de antioxidantes.
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Manejo del estrés
Distintos estresores
Por lo regular, cuando mencionamos estrés, pensamos inmediatamente en estrés emocional o
mental pues son las formas de estrés más fáciles de reconocer.
Sin embargo, vivimos en un mundo multidimensional y los estresores pueden ser de distintas
clases. Su impacto puede también manifestarse en cualquiera de las dimensiones del cuerpo: física,
emocional, mental y espiritual. Por favor vea la tabla.
En las próximas páginas examinaremos en detalle las diferentes fuentes de estrés y ofreceremos
algunos consejos para reducir tensión y compensar los efectos del estrés sobre nuestro cuerpo.
Estresores Descripción
Físicos, mecánicos Traumatismos, ayuno o insolación. Falta de sueño, Agotamiento, ejercitar
y biológicos en exceso. Mucha oscuridad o demasiada exposición a la luz. Un tiempo
prolongado bajo luz artificial (especialmente luz fluorescente), sobrecarga
de trabajo. Parasitismo e infecciones.
Químicos Contaminación del agua, el aire, la tierra y la comida con productos
químicos.
Electromagnéticos Las ondas de radio que Cruzan el aire llevando señales a los televisores,
celulares y aparatos de radio. Campos electromagnéticos de baja
frecuencia, computadores, electrodomésticos, aviones, son todas fuentes de
estrés electromagnético.
Emocional Una amplia gama de situaciones causan estrés (relaciones, trabajo, estudio,
salud, situación socioeconómica, duelos). Otras Fuentes de estrés
emocional pueden ser las noticias en la televisión o el radio, la recesión
económica, la guerra, problemas de inmigración o seguridad.
Mental Pensamientos conflictivos general ansiedad, miedos y tensiones,
emociones que hacen que el cuerpo produzca ciertas sustancias que al
acumularse producen daño al cuerpo.
Espirituales Pérdida de la conexión con el todo, aislamiento, no encontrar sentido a la
vida, perder interés por el trabajo, incapacidad para relacionarse con los
demás de manera amorosa.
Fuente: Silvia Casabianca. El fin de la Enfermedad. Fundación Arte y Ciencia. 2005
Estrés emocional y mental
No nos es difícil identificar el estrés emocional, hasta el punto de que con frecuencia ignoramos
otras fuentes de tensión. Las relaciones conflictivas dentro de nuestra familia o en el trabajo son las
mayores fuentes de tensión emocional. La estrechez del tiempo y la congestión del tráfico son también
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Manejo del estrés
factores desgastadores que contribuyen al estrés. Los pensamientos y creencias limitantes que tenemos
sobre el mundo, los demás y nosotros mismos alimentan nuestro estrés emocional.
Cuando nuestro jefe nos hace demandas y nosotros nos decimos “No me aguanto esto”, “Todos
están en contra mía”, “Soy una falla” o “Nadie me entiende”, estos pensamientos nos limitan y
aumentan el impacto del estrés que se deriva de nuestros conflictos diarios.
Las relaciones con nuestros clientes pueden ser también una fuente de preocupación. Hay clientes
que nunca parecen estar satisfechos de nuestro trabajo o clientes que hacen constantes demandas, más
allá de nuestra esfera de práctica. Los hay que hacen de la masajista su principal consejera y confidente
y aquellos que nos recuerdan el control que algunos adultos ejercieron sobre nosotros cuando éramos
niños.
Otra preocupación que puede ser fuente de estrés emocional es nuestro perfeccionismo. Cuando
tenemos expectativas poco realistas de nuestros alcances y competimos con otros por atención o
recompensas, podemos experimentar frustraciones que se acumulan en forma de estrés emocional.
También en este caso lo que nos decimos sobre la experiencia hace que esta sea todavía más estresante.
“Los otros reciben más que yo” o “Nunca lo que hago es suficientemente bueno” son ejemplos de las
voces tóxicas que acrecientan nuestro estrés.
A veces no podemos evitar estas creencias limitantes porque se derivan del concepto que hemos
forjado de nosotros mismos desde que éramos niños. Son generalmente un eco de las voces de
personas de autoridad que nos cuidaron en la infancia y a quienes les creímos. Pero es necesario
procesar estos pensamientos y deshacernos de ellos para lograr evitar la forma en que distorsionan la
percepción de la realidad ahondando el estrés emocional sin contribuir soluciones.
Las relaciones o la falta de ellas, son muchas veces el mayor estresor emocional en nuestras vidas.
Sin embargo, el aislamiento tampoco es la solución porque las relaciones también pueden constituirse
en la mejor fuente de salud emocional.
Hay muchas cosas que podemos hacer para optimizar las relaciones, empezando por mejorar la
comunicación (ver más abajo). Sin embargo, en el caso de relaciones abusivas, es muy poco lo que
podemos hacer para cambiarlas y a veces lo más sano es dejarlas atrás. Es por eso que en estas páginas
dedicamos un espacio especial a hablar de las relaciones abusivas, explicando cómo reconocerlas y por
qué debemos alejarnos de ellas.
Casos de relaciones abusivas

Después de un año de matrimonio una masajista joven se sentía confusa, tratando de recordar
quién era antes de casarse.
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Manejo del estrés
“Quiero ser la misma de antes”, decía. “Parece que no pudiera hacer nada al derecho. El siempre
está enojado conmigo. Ya no tengo ni opiniones propias y peleamos por cosas insignificantes. He
llegado hasta el punto de decir que estoy de acuerdo con lo que sea para evitar una pelea”. Pero ni
siquiera esto lo calma y muy pocas veces le trae alguna recompensa emocional.
Es común estar en situaciones en las cuales una discusión con la pareja se vuelve una pelea, o en la
cual uno siente que la otra persona lo está arrinconando a uno o haciéndolo sentir culpable, asustado,
incómodo o inadecuado.
¡Cuidado! Si estos no son simples incidentes aislados sino algo que sucede una y otra vez, usted
está siendo víctima de abuso emocional. Mucha gente tiende a “chantajear” en sus relaciones pero sólo
unas pocas seguirán haciéndolo después de que se les señalan claramente sus límites.
Si usted observa que los comportamientos aquí descritos se repiten, usted probablemente esté en
una relación malsana y aunque aquí nos referimos a la relación de pareja, esto es aplicable a otras
relaciones: entre amigos, entre colegas, con el jefe, con el cliente, el profesor, etc.
Tómese un momento para examinar sus relaciones de pareja en primer lugar. La violencia tiene
muchas caras. Es fácil reconocerla cuando es física, pero el abuso emocional es engañoso.
Si usted está en una relación donde no puede expresar sus opiniones, ni contradecir al otro sin que
se enoje; necesita hacer las cosas como al otro le parece que debe ser; se encuentra participando en
actividades de su pareja sin tiempo para sus propios pasatiempos y visita a los amigos de él pero no
tiene tiempo ni para su propia familia, entonces la están controlando o manipulando.
Hay una característica en especial que nos hace fácil reconocer a las personas abusivas: la gente
abusiva debilita progresivamente al otro, lo ridiculiza, lo minimiza. El abuso nace de la necesidad de
controlar. Se trata de ejercer una identidad y controlar el ambiente de una manera que beneficie al
abusar pero en detrimento de otros.
Pregúntese:
√ ¿Mi pareja me escucha?
√ ¿Me respeta las opiniones e ideas?
√ ¿Cómo me siento después de un desacuerdo?
Si usted está en una relación saludable, usted se siente a salvo y sabe que puede estar en
desacuerdo sin miedo a que la abandonen o la regañen.
Otra masajista tiene un marido que siempre le está recordando cuánto “le debe”. Cuando no la está
ignorando, le pone apodos y hace comentarios derogatorios sobre ella, especialmente delante de sus
amigos, como “Ella se queda en casa viendo la tele mientras yo sudo su comida”, o “Me sorprende que
haya logrado obtener un diploma de masajista”.
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Manejo del estrés
Ella se ha convertido en ama de casa a regañadientes por cuidar de su hijo de seis años. No es feliz
y se siente atrapada. Al hacerla renunciar a su profesión, él también la controla financieramente, de
manera que ella no tiene una cuenta bancaria ni una tarjeta de crédito propia.
Un tercer caso es el de una masajista que está saliendo con una persona que le da un tratamiento
de silencio cada vez que ella está en desacuerdo con algo que él dice o encuentra cualquier excusa para
decir que la relación no va para ninguna parte. Sus padres la trataban de igual manera y ahora está
empezando a percibir el mismo tipo de tensión en el trabajo.
Desafortunadamente, tendemos a elegir lo que percibimos como familiar y en el caso del abuso, a
veces seguimos eligiendo inconscientemente personas y situaciones en las cuales se recrean situaciones
abusivas.
Debemos aprender a reconocer que la intimidación, el desprecio, el silencio y las amenazas son
comportamientos que buscan controlar al otro creando incomodidad y aprensión.
Con frecuencia, la gente no se da cuenta de que está en una relación abusiva. Ellos simplemente
piensan que han hecho algo mal y tratan de corregirlo. Por eso es muy importante reconocer los signos
de abuso.
Observe sus propias reacciones. ¿Se siente miedosa, culpable, insegura o que no la aprecian? ¿Está
haciendo cosas que no quiere hacer? Examine sus relaciones. Puede ser que necesite la ayuda de un
consejero para disolver las consecuencias traumáticas del abuso emocional. No hay razón para permanecer
en una relación o un trabajo en los que usted no puede crecer como persona y en los que no se siente feliz.
Una persona saludable reconocerá y se disculpará por un comportamiento controlador o injusto,
asegurándose de que no vuelva a suceder. En cambio, una persona abusiva continuará mostrando los
mismos comportamientos una y otra vez y estos escalarán en intensidad a medida que la necesidad de
controlar aumente.
¿Qué tan asertivo es usted?
Una persona asertiva maneja el estrés de forma más eficiente. Usted es suficientemente asertiva
cuando puede defender sus derechos e impedir que otro se aproveche de usted. Si usted es asertiva
comunica con claridad lo que quiere, lo que siente y lo que piensa y respeta los derechos y
sentimientos de los demás.
Una persona asertiva no es ni agresiva (no necesita gritar para que la escuchen) ni sumisa (no baja
la cabeza y dice si cuando quiere decir no). La persona agresiva es insensible ante los demás y puede
incluso violar sus derechos. La persona sumisa está siempre situándose en segundo plano y
permitiendo que la pisoteen.
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Manejo del estrés
Mucha gente quiere complacer y ser aceptada o evitar conflicto y por eso evita decir lo que quiere
y lo que siente, pero esto conduce con frecuencia al embotellamiento de sentimientos que se convierten
en ocasiones en “agendas ocultas”, rol de víctima, amargura y resentimiento.
Pregúntese lo siguiente para saber qué tan asertivo es:
√ ¿Le es fácil solicitar ayuda o referir un cliente cuando es necesario?

√ ¿Expresa su disgusto con claridad y sin necesidad de alzar la voz?
√ ¿Proyecta seguridad en sí mismo cuando se comunica?
√ ¿Mira a los ojos cuando habla con la gente?
√ ¿Pide clarificación cuando se siente confundido?
√ ¿Se siente cómodo expresando sus opiniones aún cuando está en desacuerdo?
√ ¿Cuándo está en un grupo, puede participar activamente en las conversaciones?
¿Le es fácil decir NO cuando quiere decir no?
Si le es fácil pedir ayuda cuando la necesita, en lugar de esperar que le adivinen sus
necesidades; si usted puede poner límites y expresar sus sentimientos y si usted contestó sí, a la
mayoría de estas preguntas, entonces usted es muy posiblemente una persona asertiva.
Ninguna relación puede florecer sin que uno sea asertivo. Piense en las veces que usted hubiera
querido decir no a su jefe, su compañero de trabajo, su socio o su cliente. ¿La detuvo el temor a ser
rechazada? ¿Temor a arriesgar su puesto de trabajo?
Recomendaciones para mejorar su comunicación interpersonal

Mejorar su comunicación puede ayudarle a evadir una fuente significativa de estrés en sus
relaciones interpersonales y puede hacerlo más eficiente en su trabajo. La mayoría de problemas
relacionales se deben a una pobre comunicación. Por lo tanto es importante desarrollar la habilidad de
expresar lo que se siente de forma eficiente y de escuchar con atención. Cuando hablamos de
comunicación interpersonal no nos referimos sólo a lo que decimos verbalmente sino también a
nuestro lenguaje corporal y a nuestros gestos.
Una comunicación eficiente requiere que usted esté verdaderamente presente cuando el otro habla.
Hay gente que está preparando su respuesta en lugar de prestar atención a lo que el otro dice. Esto es
comunicación reactiva y no arroja buenos resultados. A veces, un masajista siente que en su papel tiene
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Manejo del estrés
que aportar todas las repuestas que el cliente solicita y en lugar de fijarse en el contexto en que la
pregunta es formulada o la forma en que el cliente está formulando la pregunta, dispara una respuesta
que no resulta satisfactoria.
Es importante prestar atención a lo que la otra persona dice. Esta es la primera regla para una
buena comunicación. La segunda es que si necesita información sobre su cliente, formúlele preguntas
abiertas. Las preguntas cerradas sólo pueden contestarse con monosílabos y no conducen al diálogo.
Otras reglas importantes son no competir durante el diálogo por demostrar quién sabe más o quién
tiene la razón. Pero arriésguese a decir lo que piensa, sin temer un posible rechazo. Piense que nadie es
“monedita de oro” para gustarle a todo el mundo y que si alguno desaprueba sus opiniones no significa
que no lo apruebe a usted.
Para desarrollar las habilidades de comunicación, es importante practicarlas. Empiece poco a poco
hasta que se sienta cómoda y segura.
Si usted está en una relación conflictiva, estos consejos pueden ayudarle a obtener resultados
positivos:
1. Prepárese antes de hablar con el otro. Decida qué tema es el que quiere tratar. Si usted ensaya
mentalmente lo que va a decir, se sentirá más cómodo cuando lo haga.
2. Inicie su comunicación diciendo algo positivo y en primera persona
Por ejemplo: “Cuando eres puntual o me avisas que vas a demorarte siento que estás siendo
considerado conmigo”.
3. Describa lo que la afecta o que usted desea que el otro modifique. Describa (no califique) la
conducta del otro, qué hace, cuándo lo hace, con qué frecuencia y duración.
Por ejemplo: “He notado que en las últimas 4 semanas has llegado bastante tarde sin avisarme”.
4. Exprese cómo lo afecta la conducta, utilizando un lenguaje directo y personal.
Por ejemplo: “Esto me molesta porque en los fines de semana supongo que vamos a compartir
tiempo juntos y me disgusta tener que esperarte. Además, me preocupo cuando no me avisas
porque no sé si estás bien”.
5. Haga una petición de cambio.
Por ejemplo: “Deseo pedirte que cuando tengamos una cita llegues puntual o que por lo menos me
avises con anticipación si algo te retrasa”.
6. Exprese cómo se sentiría usted con el cambio y cómo le beneficiaría
Por ejemplo: “Si sé con seguridad a qué hora vas a llegar puedo planear mejor mi tiempo y cuando
llegues estaré tranquila y no disgustada. Así podremos disfrutar más nuestro tiempo juntos”.
7. Refuerce a la otra persona por prestar atención y tener en cuenta sus peticiones de cambio.
Por ejemplo: “Gracias por escucharme, te quiero”.
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Manejo del estrés
Y tenga en cuenta estos consejos generales:

Cuando usted habla en primera persona es más fácil hacer que el otro escuche. No suena igual decir:
“Usted nunca llega a la hora que es porque yo no le importo para nada” (acusación), que decir “Yo
prefiero que llegue a tiempo o que me avise que va a llegar tarde, para poder aprovechar mejor mi
tiempo”.
Sea asertivo. Como mencionamos antes, una persona asertiva se proyecta a si misma como positiva
y segura. Cuando usted sube el tono de la voz, pierde los argumentos. El otro deja de escucharla y se
concentra sólo en la forma que usted se está comunicando. Defienda lo que le parece correcto.
Valide a los otros tan a menudo como pueda, pero hágalo desde sus sentimientos. Si usted aprecia
a los otros de verdad, no tiene que repetir frases amables sin sentido. Validar a los demás ayuda a
construir buenas relaciones con aquellos que comparten espacio y tiempo con usted.
Pare de criticar a los demás o de compartir una visión negativa del mundo. Trate de desarrollar su
capacidad de aceptación. Ponga atención a su lenguaje corporal para que su cuerpo y su boca estén
transmitiendo el mismo mensaje. Si no es así, usted probablemente no está sintiendo lo que dice. Hay
una diferencia muy grande entre decir lo que uno piensa que es correcto y lo que se siente en el
corazón. Incluso si lo que se siente es enojo, esto se puede expresar sin ofender ni humillar y la otra
persona se sentirá agradecida por la honestidad.
Para mejorar su comunicación con sus clientes:

√ Responda al estilo de comunicación del cliente. La manera de lograrlo es observar con cuidado
cómo se expresa la otra persona. Trate de sentir dónde está el otro: en su cabeza (Dirá muchas
veces, yo pienso y hablará de ideas), o en su corazón (Dirá yo siento y expresará sentimientos).
Sincronícese con los demás.
√ Ponga mucho cuidado a lo que el cliente está diciendo y asegúrese de que entiende lo que él
dice en el contexto al que pertenece. Esto evita malentendidos.
√ Trate de hablar despacio y con claridad para que su cliente entienda bien lo que está tratando
de decir.
√ No ofrezca consejos no solicitados a sus clientes pero sea suficientemente atrevido para dar su
opinión o consejo si usted cree que puede evitar que la otra persona tenga una conducta dañina
para si misma o que afecte a otros.
Sea amable y esté abierto a recibir comentarios críticos. Si alguien lo alaba, de las gracias (No
trate de disminuir sus propios méritos) y si alguien lo critica, acéptelo graciosamente. Los comentarios
de los otros nos ayudan a recordar quienes somos y quienes queremos ser.
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Manejo del estrés
Estrés mental
¿Cómo hacer para manejar nuestros sentimientos negativos y conseguir una sensación de
reconexión con esa parte de nosotros que es perfecta? ¿Cómo hacer para conseguir paz y alegría? Al
parecer esos pensamientos que afectan nuestro estado de ánimo y arruinan nuestro día son los más
persistentes, de manera que vale la pena tratar de deshacerse de ellos, pero ¿cuál es la mejor manera?
¿Qué clase de pensamientos predominan en su mente? Como ya mencionamos, los pensamientos
tóxicos son la principal fuente de estrés mental: críticas, juicios, culpas y dudas. Empiece a observar
sus pensamientos. ¿Puede separar los pensamientos saludables de los que le hacen daño?
¿Qué pasa cuando usted atraviesa una emergencia? Para la mayoría de las personas una crisis es el
momento donde se piensa con más claridad porque hay que estar completamente alertas y la crisis
requiere que actuemos inmediatamente.
En situaciones cotidianas lo más probable es que rumiemos nuestros pensamientos negativos.
Nuestro diálogo interno se queda atrapado en los conflictos o los episodios negativos que sucedieron
en el trabajo. Tal vez nos sentiríamos mejor si simplemente estuviéramos conscientes de que en el
momento presente estamos sanos, salvos y confortables o al menos si pensáramos en el futuro, pero la
mente se va al pasado y nos lastimamos una y otra vez.
Observe sus pensamientos y las emociones que estos provocan. ¿Tienen poder para
perturbarlo? Trate de clasificar sus pensamientos en categorías de creencias limitantes. ¿Giran sus
pensamientos sobre lo que está mal con usted mismo? ¿Lo que está mal con su vida? ¿Con el
mundo? ¿Se pregunta quién lo quiere? ¿Se dice que algo le falta, que usted arruinó esa
oportunidad, que no es suficientemente bueno o que es perfecto y los demás no lo reconocen?
Estas preguntas reflejan algunas de las creencias limitantes que se esconden detrás de
nuestros pensamientos tóxicos; creencias de que algo está mal conmigo, con el mundo o con los
otros; creencias de que algo nos falta o que arruinamos lo que tocamos.
Estos pensamientos tóxicos modulan nuestras emociones y tienen un impacto negativo en nuestro
cuerpo. Producimos adrenalina y cortisona, las hormonas del estrés, no sólo cuando estamos ante una
amenaza, sino también cuando recordamos una experiencia difícil. Nos disgustamos con sólo recordar
lo que pasó aunque estemos perfectamente a salvo ahora.
Muchos maestros espirituales han encontrado que la meditación y la respiración son excelentes
herramientas para mantener esos pensamientos a raya. La meditación nos da la oportunidad de
observar y monitorear nuestros pensamientos y luego dejarlos pasar. Construya afirmaciones y
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Manejo del estrés
repítalas mientras medita. Encontrará que repetir una afirmación una y otra vez relajará su mente y
cuando esta se relaje, se disolverán las tensiones de su cuerpo. Respirar profundamente también es
relajante y mejorará su estado de ánimo.
Use afirmaciones como:
√ Hoy me amo a mi mismo
√ Me acepto exactamente como soy
√ Tengo todo lo que necesito para salir adelante
√ Doy gracias por todas mis bendiciones
Cuando deliberadamente pongamos en nuestra mente afirmaciones que son opuestas a nuestros
pensamientos tóxicos, estos se disiparán. Cuando la mente se relaje, nos sentiremos más contentos y
calmados.
Cuando nacimos, todos nos trataban como princesas y príncipes. Entonces amábamos nuestro
mundo y a nosotros mismos… pero eso fue antes de que nos convirtiéramos en sapos. ¿Quién fue el
malvado brujo que nos transformó?
Un bebé no conoce otra opción que no sea aceptar el mundo tal como es. Sin embargo, desde el
minuto en que nacemos (a veces antes de nacer) nos cuentan historias que terminamos creyendo ciertas
(“usted no puede hacer esto”, “usted es malo”, “usted es mejor que todos”) y terminamos
considerándonos defectuosos o perfectos; percibimos que el mundo o nos da soporte o nos falla.
Después agregamos nuestra propia parte del libreto a medida que tenemos experiencias ambiguas que
malinterpretamos y terminamos escribiendo líneas que luego seguimos como si fueran la absoluta
verdad. Si nos dijeron una y otra vez que no teníamos suficiente coraje para triunfar en la vida,
interpretaremos cada fracaso no como una experiencia más de aprendizaje sino como la confirmación
de que somos perdedores con lo cual se ahondará más nuestra identificación con esa cualidad negativa.
Las creencias limitantes pueden desfigurar nuestras experiencias pero es nuestra responsabilidad
hacernos concientes de esto y salirnos de las limitaciones que nos impiden desarrollarnos en la
totalidad de nuestro potencial.
Relajación
Se supone que los masajistas son los maestros de la relajación. Para eso los buscan sus clientes.
¿Pero qué tantas veces recibe el masajista un tratamiento? ¿Practica relajación en su casa? ¿Lleva una
vida relajada o su vida es un conflicto constante?
Déjeme preguntarle, ¿cómo se siente después de dar un masaje? ¿Drenado o calmado?
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Manejo del estrés
Los masajistas que aprenden a estar verdaderamente presentes mientras dan un tratamiento, que
son capaces de sentir los tejidos bajo sus dedos, que usan buena mecánica corporal, se sienten casi tan
relajados como sus clientes al final de una sesión.
Usted puede encontrar muchos métodos de relajación que compensan el estrés. Vale la pena
dedicar tiempo a aprender una técnica de relajación y practicarla consistentemente. Los investigadores
han encontrado que la relajación alivia la ansiedad, los dolores de cabeza, el insomnio, el dolor y el
estrés ocupacional. Tiene efectos positivos sobre el curso de varias condiciones médicas como la
artritis, la hipertensión y el asma y mejora los resultados de una cirugía. Las técnicas que combinan
visualizaciones y relajación dan aún mejores resultados. Puede usar discos de meditación guiada antes
de irse a dormir. Le ayudarán a tener un sueño reparador.
Pero más que dedicarle quince minutos diarios a la relajación, lo ideal sería vivir relajados y el
camino hacia una vida relajada es elevar nuestra conciencia. La disputa mental entre lo que somos y lo
que querríamos ser es tensionante. Si logramos entender las fuerzas opuestas que se debaten en nuestro
ser, entenderemos que hacemos una elección en cada momento de nuestra vida y que aunque
seguiremos teniendo un lado de luz y un lado oscuro por el resto de nuestra existencia, no necesitamos
actuar desde la sombra. Si buscamos un cambio, éste no consiste en dejar de ser quien somos o en
ocultar la oscuridad que nos asusta, sino en conocernos tan sumamente bien que no actuamos
mecánicamente sino con plena consciencia de lo que hacemos y lo que sentimos.
El verdadero cambio puede comenzar por el comportamiento o la actitud o los sentimientos, pero
todos ellos requieren y conducen a un cambio de perspectiva.
Una de las razones que explican por qué queriendo cambiar no cambiamos es que nos quedamos
atorados en ciertos patrones de comportamiento que conocemos y aunque nos causen problemas, nos
hacen sentir cómodos. ¿Cómo salir de allí? ¿Cómo empezar a sentirnos cómodos con el cambio? No
hay más alternativa que cuestionar nuestras viejas creencias, identificando la forma en que nos
paralizan y nos impiden hacer las elecciones que eventualmente nos conducirían a una vida más plena.
Todo cambio involucra un proceso de aprendizaje. Las experiencias duras del pasado se pueden
transformar para dar lugar a posibilidades nuevas. Si podemos aprender a aceptarnos tal y como
somos, entonces nos ahorraremos la energía que gastamos pensando en lo que podríamos ser. Si
logramos poner nuestra consciencia en todo lo que hacemos, entonces evitaríamos repetir los
comportamientos y hábitos que nos causan problema.
Meditación
¿Habrá algo más apacible que un bebé dormido? Tal vez una persona adulta meditando.
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Manejo del estrés
Muchas personas tienen una idea equivocada de lo que la meditación es y por eso no se atreven a
practicarla. Algunos piensan que la meditación requiere largas horas de estar sentados en una posición
a la que no estamos acostumbrados, quizás recitando mantras en sánscrito. Otros piensan que es irse a
dormir con un disco que induzca profunda relajación.
Es cierto que la meditación requiere práctica y constancia, pero una vez uno aprende a meditar, es
una experiencia tan gratificante que no vuelve a costarnos trabajo practicarla.
Hay varias etapas en el aprendizaje de cualquier técnica de meditación, pero todas tienen en
común tres elementos. Primero se aprende a relajar el cuerpo y esto es relativamente fácil y
suficientemente gratificante. Llega un momento en que con sólo cerrar los ojos y tener la intención de
relajarse, el cuerpo es capaz de soltar todas las tensiones. Con frecuencia esta relajación se logra
concentrándose en la respiración.
La segunda etapa en el aprendizaje de la meditación es dominar la concentración. Especialmente
en el mundo que vivimos hoy, tan lleno de estímulos externos, es difícil concentrarse. Por eso la
meditación se practica con frecuencia en un sitio más bien aislado, donde no existan muchos estímulos
sensoriales. En esta etapa se aprende a aquietar la mente. Lo más sorprendente para una persona que
está aprendiendo a meditar es darse de cuenta de toda la cháchara mental que le impide concentrarse.
Para enfocar la mente hay muchos “trucos”. Los mantras son muy efectivos, e incluso es útil que
sean en sánscrito precisamente porque, como no los entendemos, la mente lógica se cansa y se va a
descansar. Pero no es necesario que sea un mantra lo que repetimos. Podemos repetir números,
afirmaciones u oraciones. Lo importante es ayudarle a la mente a reposar.
Otro método para aprender a concentrarse es observar atentamente una vela encendida hasta que
los ojos dejen de estar enfocados en ella; cerrar los ojos y mantener la imagen del cirio y repetir esto
una y otra vez, nos ayuda a lograr la concentración. También se puede utilizar la imagen mental de una
pantalla en la cual por ejemplo, vemos una semilla germinar hasta convertirse en árbol que da fruto, el
fruto cayendo y abriéndose, la semilla fuera del fruto y otra vez todo el proceso. Si usted es
suficientemente paciente imagínese poniendo números dorados del uno al cien en la pantalla.
Cuando relajación y concentración se han dominado, se puede lograr la contemplación que es un
estado en el cual con la mente y el cuerpo relajados uno puede estar totalmente presente en el
momento.
Los beneficios de la meditación son bien conocidos. Al reducir ansiedad, la meditación contribuye
a normalizar las cifras de tensión arterial, los latidos del corazón y el funcionamiento del sistema
nervioso. El sistema inmune, que se encarga entre otras cosas de la reparación de tejidos, funciona
mejor en las personas que meditan regularmente. Los meditadores ganan serenidad y paciencia y
logran conectarse mejor con sus cuerpos, con otros seres humanos y con todo lo que las rodea. La
meditación disminuye el dolor físico y emocional, procura paz y gozo y contribuye a la armonía entre
los seres humanos.
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Manejo del estrés
Sin dolor, por favor

La gente viene a nosotros buscando relajación y nosotros les podemos proveer además del masaje,
pistas de cómo emprender un camino hacia su sanación.
Cuando un masajista le pregunta al cliente qué tipo de masaje prefiere, es probable que la
respuesta sea, “yo no sé” o “déme ‘masaje profundo’”. Por lo general, esto significa que el cliente
desconoce la diferencia entre diferentes modalidades de masaje y esta es la oportunidad perfecta para
que el masajista lo eduque.
¿Qué es en realidad un masaje profundo? ¿Aquel en el que se hunden los dedos, los codos y las
rodillas en los tejidos del cliente hasta que éste grita o se muerde los nudillos del dolor? ¿Es masaje
profundo aquel en el que se busca “dolor del bueno”? No, definitivamente, no.
Provocar dolor a la larga trae más dolor. En algunas escuelas de masaje se enseña que la irritación
producida por fricción durante el masaje, promueve un estado de inflamación agudo que hace que el
cuerpo vuelva a ocuparse de la zona dolorosa hasta la resolución de la condición.
En mi experiencia, el verdadero masaje profundo no es aquel que lastima sino el que ayuda al
cliente a entrar en un estado de profunda relajación que promueve la sanación. Cuando una persona ha
experimentado dolor y limitación por cierto tiempo, esta persona se convence de que hay algo que está
mal con su cuerpo. Busca alivio pero no cree que pueda existir resolución. Cuando durante el masaje
esta persona se relaja profundamente y el dolor cede, la esperanza reaparece. Ahora la persona sabe
que su cuerpo está bien y estará bien mientras se pueda deshacer de la tensión. Ahora se siente
motivada para el cambio.
Tanto el dolor como una experiencia placentera hacen que el cuerpo produzca endorfinas. No se
busca que el paciente se haga adicto a las endorfinas secretadas para aliviar el dolor. Cuando un
masajista está verdaderamente presente y “siente” los tejidos del cuerpo con el que está trabajando
puede proveer un masaje de verdad profundo. Este masajista no busca sólo proveer alivio inmediato o
complacer a sus clientes, sino promover procesos terapéuticos que requieren tiempo, de manera que
tiene paciencia.
El masajista se conecta con los tejidos bajo sus manos, evalúa la textura del tejido, la tensión del
músculo, la presencia de patrones restrictivos en las articulaciones y sabe bien que el sistema nervioso
registra información constantemente sobre las posibilidades de movimiento, el estado de tensión del
músculo, la limitación de una articulación. De acuerdo con este registro, el sistema nervioso introduce
cambios; el sanador interno empieza a operar.
Uno de los papeles más importantes del masajista es contribuir a la reeducación del sistema
neuromuscular para que cedan las limitaciones y se alivie el dolor. A diferencia del masaje médico que
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Manejo del estrés
se enfoca en una condición específica, el masaje de relajación ayuda al sistema a recuperar sus recursos
y promueve su capacidad autosanadora.
Si me tocan en la mitad de la espalda, sé el punto exacto en que me tocaron sin necesidad de mirar.
La información es enviada al cerebro gracias a receptores existentes en la piel. El cerebro contiene lo
que sería el equivalente a un Sistema de Posicionamiento Global (GPS). Se comunica con la piel y
pregunta “¿qué tipo de objeto me tocó? ¿Es duro, cálido, frío, peligroso?” Los receptores de la piel
proveen la respuesta y el cerebro continúa su investigación: “¿Me gusta? ¿Lo permito o evito?”.
El tacto nos define en relación con lo que nos rodea. Cuando el bebé pasa a través del canal del
parto, recibimos un estímulo táctil masivo que nunca antes experimentamos mientras flotábamos
cómodamente en el útero. Esta experiencia ayuda al cerebro a crear el primer mapa del cuerpo, el cual
será redefinido una y otra vez a medida que crecemos, desarrollamos habilidades motoras y
experimentamos los cambios del medio ambiente. Tanto el tacto como el movimiento son esenciales
para el desarrollo y actualización de este mapa. Y el mapa permite al cuerpo hacer los cambios
necesarios para mantener una función óptima.
El toque es terapéutico por si solo. Los humanos buscamos tocarnos. Sólo poca gente evita ser
abrazada o acariciada y esto es generalmente porque han tenido una experiencia traumática que ha
hecho que dolor (físico o emocional) y contacto físico estén asociados en su mente.
Cada vez que una persona es tocada, su cuerpo responde con la producción de varias sustancias.
Al primer contacto, el toque de un extraño produce una repuesta de alarma hasta que el cuerpo
determina si está a salvo. Eso explica por qué una persona no experimenta relajación hasta después de
varios minutos de empezar un masaje. La rama autonómica del sistema nervioso está al mando y
secreta adrenalina. Cuando finalmente el cuerpo se siente seguro, predomina el sistema parasimpático
y el cuerpo se rinde a la relajación. Los tejidos “almacenan” la experiencia positiva y la mente también
la recuerda, permitiéndonos desarrollar lo que conocemos como confianza. Esta confianza explica
porque es más fácil permitir que nuestros seres queridos nos toquen. Cuando el cuerpo se siente
cómodo con el contacto, empieza a producir endorfinas que son sustancias que alivian el dolor y
producen relajación.
Las endorfinas son sustancias producidas por el sistema nervioso. Ellas modifican la forma en que
nuestras células nerviosas responden a los neurotransmisores. Las endorfinas son liberadas cuando
experimentamos placer, ejercitamos o comemos chocolate pero el cuerpo también produce endorfinas
en condiciones de mucho estrés o dolor.
Al recibir cualquier clase de masaje, el cliente se beneficia del efecto fisiológico generalizado que
incluye la liberación de endorfinas y también del aflujo de nutrientes y de oxígeno que llega a las áreas
que reciben tratamiento. El dolor producido al sobar los “nudos” dolorosos, también promueve la
secreción de endorfinas, pero la compresión y la fricción prolongada producen inflamación. Esta
inflamación puede inicialmente, al aumentar el flujo de sangre en el área, contribuir a la reparación de
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Manejo del estrés
tejidos pero a la larga contribuye a la cronicidad de la condición, generando un dolor que puede
volverse adictivo, aunque la adicción no es realmente al dolor sino a los analgésicos naturales
producidos por el cuerpo cuando provocamos el dolor con el masaje.
Un masajista puede contar conque una persona que se ha hecho adicta al dolor se convierta en un
paciente fiel. Vendrá buscando más dolor, porque quiere las endorfinas… hasta que se canse de ver que
su salud no ha mejorado y entonces buscará otro practicante. Mejor entonces que las endorfinas se
secreten como respuesta a la experiencia placentera.
Estamos tan acostumbrados a la tensión, a hacer grandes esfuerzos y mantenernos ocupados, que
nos cuesta trabajo reconocer el valor terapéutico de la presencia y la sensibilidad. “Profundo” debe
referirse no a la técnica sino a la profundidad de la experiencia. A la profundidad del efecto y no a qué
tan hondo hemos enterrado los dedos en los tejidos. Un cliente educado (y nosotros somos sus
educadores) prefiere regresar por el efecto restaurador del masaje. Si viene en busca de endorfinas es
mejor el placer que el dolor.
Una visión alternativa sobre la función del dolor

Supongamos que usted sufre un intenso dolor en la cintura. El dolor limita los movimientos de su
tronco. Su reacción normal será de negación. Estará segura de que apenas haya deambulado un poco el
dolor desaparecerá. Pero el dolor no cede a lo largo del día y todavía está ahí al siguiente. Ahora se
irradia hacia su muslo derecho, y usted se encuentra haciendo piruetas para encontrar la manera de
inclinarse, llegar hasta su pie y calzarse. Cada paso que da se siente como un martillazo en la parte
inferior de su columna. Respira profundo y le duele, estornuda y es una agonía. Hay contracciones de
la pelvis que parece que usted estuviera dando a luz. Probablemente hay un nervio pinchado o
presionado por un disco herniado.
Y ahora ¿qué hace con el diagnóstico? Si va al médico, va a ordenarle radiografías y RM
(resonancia magnética). Va a confirmar que, en efecto, un disco está herniado. El médico va a
prescribirle medicación para el dolor, relajantes musculares, reposo en cama dura.
Usted decide no tomar analgésicos ni antiinflamatorios y guarda reposo en su cama dura. Cambia
su alimentación y toma algunos suplementos. Vitamina C para reforzar el tejido conectivo, complejo B
para apoyar la reparación del nervio inflamado, magnesio para ayudar al cartílago a mantener su
flexibilidad. Come piña que es rica en el antiinflamatorio bromelina, y papaya, que contiene papaína.
Disminuye el consumo de comidas que contengan ácidos grasos omega-6, los cuales son pro-
inflamatorios (se encuentran en las grasas de origen animal, el maíz y algunas semillas). Escucha
discos que inducen relajación, medita y se administra reiki.
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Manejo del estrés
Aunque el dolor limita, usted está confiada en que el espasmo muscular que ha creado su cuerpo es
necesario para inmovilizar su columna y prevenir un daño mayor, de modo que decide respetar el
dolor. Sabe que puede mantenerlo dentro de límites tolerables con terapias como el reiki y técnicas de
relajación, y que puede encontrar posiciones donde el dolor sea mínimo.
En seis meses, siempre y cuando no haya ruptura del anillo fibroso del disco intervertebral
lesionado, el disco habrá vuelto a su normalidad y el cartílago se habrá regenerado. Ejercicios suaves y
estiramientos eliminarán espasmos musculares y usted cuidará de su postura.
Siempre que sufrimos una lesión, el cuerpo nos alerta produciendo dolor. Los receptores capaces
de captar estímulos dolorosos en nuestro cuerpo se llaman nociceptores y son fibras nerviosas que se
comunican con el cerebro cuando son estimuladas. El mensaje comienza al nivel de los nociceptores,
que son excitados por estímulos intensos. Las membranas de las células vecinas se hacen más sensibles
o excitables hasta el punto de producir descargas eléctricas ya sin necesidad de estímulo. El resultado
es el aumento de la sensibilidad tanto a estímulos dolorosos como a estímulos inocuos.
La limitación concomitante al dolor causado por un traumatismo o una lesión tiene como propósito
prevenir más daño. Por ejemplo, en el caso de una fractura, el dolor nos instruye para que no apoyemos
el miembro lesionado, previniendo así el desgarro de los tejidos vecinos al hueso astillado.
En casos severos como el de la fractura o la hernia discal, el dolor es tan agudo y limitante que no
tenemos más remedio que escucharlo. Pero en otros, como cuando aparece un dolor de espalda después
de horas de estar sentados frente al computador, lo ignoramos y seguimos absortos en la tarea que en
ese momento nos ocupa. Si atendemos, escucharemos cómo el dolor nos habla de la acumulación de
tensión que se produce en el cuerpo después de un cierto tiempo de sostener una misma postura, la cual
no puede mantenerse sin la contracción de un grupo de músculos. Estos siempre esperan un relevo y lo
piden a través de una sensación dolorosa. Todo lo que tenemos que hacer, si escuchamos al cuerpo, es
cambiar de postura y el movimiento disipará la tensión. Pero si no escuchamos, el músculo se resiente,
se inflama y el dolor se hace crónico. La tensión muscular se convierte en un espasmo, se deforma de
modo permanente la postura y con el tiempo nuestros huesos se desalinean, ciertos músculos dejan de
trabajar y se acortan, no juegan su papel protector y cuando menos nos damos cuenta, se habrán
debilitado ciertas áreas del cuerpo haciéndonos propensos a una lesión. Típico de la vida moderna, en
extremo sedentaria.
El dolor hace parte de esas respuestas de retroalimentación que mantienen el balance del cuerpo.
Las moléculas que transmiten la sensación dolorosa se llaman prostaglandinas, bradiquininas y
sustancia P. La histamina y la serotonina también participan en este proceso. Hasta ahora se ha
sostenido que la vía de transmisión de esta información es a través de sinapsis nerviosas, pero en
realidad sólo un pequeño porcentaje del estímulo toma este camino, que en este caso sería del receptor
nervioso a la medula, de la medula al tálamo en el cerebro y del tálamo a la corteza cerebral, donde se
hace consciente.
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Manejo del estrés
La sustancia conocida como capsacina, que se encuentra en el ají picante, estimula los nervios de
manera que contrarresta la sustancia P y alivia el dolor. El cuerpo también produce endorfinas para
inhibirlo.
Cuando el dolor es emocional también se producen endorfinas de efecto sedante. Si sufrimos la
pérdida de un ser querido, las endorfinas nos ayudan a mantenernos en ese estado inicial de negación o
ira que protege nuestro psiquismo, mientras éste se encuentra a salvo para entender, procesar y llegar a
aceptar la pérdida.
Si la ayuda farmacológica para aliviar de inmediato un síntoma o una enfermedad es nuestra
primera opción, podríamos reflexionar sobre esto y preguntarnos cuándo es conveniente contrarrestar
una respuesta normal defensiva del cuerpo. Como mencionamos antes, usando el dolor como guía,
podemos dialogar con él y encontrar los límites permitidos de movimiento que evitarán una lesión
ulterior.
Al hacer desaparecer un dolor a toda costa estamos ignorando nuestro cuerpo, silenciándolo a la
fuerza, cortando nuestra relación con él.
Varios métodos naturales ayudan a mitigar el dolor sin interferir con su función. Uno de ellos es el
reiki. Actúa rápidamente sobre un dolor de cabeza o abdominal, muchas veces más rápido que un
analgésico. En ocasiones el reiki hace desaparecer el dolor por completo y en otras sólo se mitiga
mientras termina de cumplir con su misión.
Otros métodos alternativos que han probado ser beneficiosos en el alivio del dolor son la
acupuntura, la terapia craniosacral y la hipnosis.
Hay casos en que el dolor es consecuencia de una enfermedad que requiere atención médica o está
asociado con una condición terminal donde es necesario y deseable usar analgésicos bajo prescripción
médica. En ese caso terapias como el reiki pueden aliviarlo pero no lo enmascararán.
Suzanne E. Simmons, de la National Headache Foundation (www.headaches.org) advierte a sus
afiliados que el abuso de analgésicos puede perpetuar el dolor de cabeza y hacerlo más difícil de
manejar. La medicación para el dolor eleva inicialmente los niveles de serotonina pero su uso
continuado produce una baja en las cantidades de la misma y más dolor, generando lo que se conoce
como jaquecas de rebote. El ciclo sólo se rompe cuando se suspende todo medicamento.
Manejo del tiempo

Parte esencial del manejo del estrés es el manejo del tiempo.
¿Es usted una de esas personas que se repite una y otra vez que no tiene tiempo para nada?
Entonces tal vez deba preguntarse cómo maneja su tiempo. Tal vez está tomando demasiado a la vez o
tal vez no usa su tiempo de una manera razonable.
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Manejo del estrés
Para reducir el estrés es necesario desarrollar la habilidad de manejar el tiempo. Eso le ahorrará
preocupaciones y ansiedad.
Una vez que usted se haga consciente de sus metas podrá anticipar el tiempo que le tomará
desarrollar sus tareas o metas. Primero que todo, clarifique cuáles son sus objetivos a largo plazo y
después defina sus objetivos a mediano y corto plazo. Muchas personas no tienen tiempo para grandes
sueños porque se dejan atrapar en el trajín diario.
Dése tiempos límites que caigan antes de los tiempos límites que otros le han establecido. Me
explico: si, por ejemplo, tiene una cita a las 3 de la tarde, trate de llegar a las 2 y 45 para tener tiempo
de cubrir cualquier imprevisto. Además, su cliente apreciará su puntualidad y el verlo llegar relajado.
Esto le ayudará a construir una clientela.
Para manejar mejor su tiempo:

Use una agenda y marque en su calendario cada actividad y cita con la que se comprometa.
Tenga siempre un plan alternativo (Plan B). Recuerde dejar suficiente tiempo entre citas cuando
calcule el tiempo. No trate de acomodar demasiadas actividades en una hora. Siempre tenga en
cuenta que algo imprevisto puede pasar. Sea flexible con su horario. Está bien dejar de hacer una
o dos cosas planeadas para el día. Para eso se tienen planes B. Trate de ahorrar tiempo
organizando sus actividades de manera razonable. Por ejemplo, recoja su lavandería y compre
sus víveres en el camino a su casa.
Es importante incluir pausas en su trabajo. Usted necesita tiempo para si mismo. No programe a
sus clientes uno detrás de otro. Dése al menos 20 minutos entre citas en un día muy ocupado y 30
minutos en un día menos ocupado. Así podrá relajarse por unos minutos, tomar notas para la historia
clínica, arreglar el espacio y aún tomar llamadas durante los intervalos. Cuando su próximo cliente
llegue, usted está refrescado y listo para escuchar su cuerpo. Piense en lo que tendría que gastar en
medicamentos para contrarrestar los efectos del estrés. Mucho más de lo que gana en una hora.
Y consiéntase tan frecuentemente como pueda. Sienta que merece la pena separar tiempo para
usted, pero no lo deje para un día de estos, cuando tenga tiempo; prográmelo en su agenda.
Evite los campos electromagnéticos

Para la mayoría de quienes viven en países desarrollados, la comida está al alcance de la mano, en
los supermercados, en la nevera o se puede ordenar por teléfono. No tenemos que salir a pescar o cazar
como nuestros antepasados. Vivimos en casas cómodas, podemos viajar largas distancias en poco
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Manejo del estrés
tiempo. Hemos derrotado el frío y el calor desarrollando tecnología que nos mantiene en ambientes
artificiales ideales y tenemos comodidades impensables para nuestros abuelos.
Sin embargo, la misma tecnología que nos ha traído esas comodidades ha hecho que en el
mundo de hoy estemos expuestos constantemente a campos electromagnéticos que son invisibles. La
tecnología ha introducido aparatos eléctricos que producen vibraciones de extrema baja frecuencia
(ELF) las cuales interfieren con nuestro propio campo electromagnético. Las ondas que transportan
información a través de las antenas de televisión, los computadores y los celulares, los aparatos
electrodomésticos y los aviones son fuente de estrés.
La exposición a ondas de radio puede causar serios daños a nuestro organismo. Nuestras células
son tan sensibles que el metabolismo, la actividad de las sustancias que trasmiten información, la
síntesis de material genético y el comportamiento celular en general, pueden ser afectadas por
frecuencias no naturales, las cuales aumentan la presencia de radicales libres en nuestro organismo.
Y ya vimos lo que los radicales libres pueden causar.
Estas son algunas recomendaciones para evitar exposición a campos electromagnéticos:

√ Elija vivir al menos a 50 metros de líneas de alta tensión
√ Coloque su cama lejos de cables y ondas de radio
√ Use un reloj de cuerda
√ No use cobijas eléctricas
√ Coloque su televisor y computador lejos de su cama o al menos desconéctelos de la
pared cuando no los esté usando
√ Siéntese al menos a tres metros del televisor
√ Evite equipos que funcionen con ondas de radio o emitan radiación de cualquier tipo.
√ Use espirales de cobre o piedras semipreciosas sobre el fax, el computador, el televisor,
el VHS y el microondas.
√ Fortalezca las defensas del cuerpo a través de una buena nutrición. Lo ideal es una dieta
baja en grasas y rica en antioxidantes.
√ Si es posible, tenga una pantalla LCD o use una barrera antirradiación para su
computador
El estrés químico también puede reducirse
Ya nos hemos referido al estrés derivado de la vida moderna, que incluye largos viajes de la casa
al trabajo, congestión de tráfico, un sinnúmero de cosas que necesitan hacerse a tiempo, el costo
creciente del gas y la salud, la complejidad de las relaciones familiares y laborales y cómo todos estos
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Manejo del estrés
factores se suman para hacer que nuestro cuerpo produzca adrenalina y cortisona que hacen que
nuestra presión arterial se eleve y nuestro corazón lata más aprisa, aumentando el riesgo de
enfermedades cardiovasculares, entre otras.
También hemos mencionado los estresores electromagnéticos. Ahora enfoquémonos en los
estresores químicos.
La contaminación ambiental procedente de la producción industrial ha deteriorado la calidad del
aire y el agua. Y no estamos hablando de las ciudades industriales donde se puede ver el humo negro
tiñendo el horizonte. Hay lugares en Inglaterra donde el agua contiene Valium y sitios como la Florida,
USA, donde no es posible consumir el pescado que proviene de la pesca recreativa por su alto nivel de
mercurio y plomo.
Como individuos, no hay mucho que podamos hacer para evitar esas sustancias contaminantes,
excepto ser consumidores conscientes que prefieren reducir la cantidad de basura que producen,
reutilizar lo que sea posible y reciclar toda empaquetadura y electrodoméstico.
También podemos ser conscientes y evitar ingerir medicamentos si no está estrictamente indicado,
o consumir comidas con aditivos químicos. Los preservativos y los colorantes que consumimos
también pueden causar daño a nuestro organismo.
La industria de alimentos sigue diciendo que no hay suficiente evidencia para dejar de agregar
sustancias como el jarabe de maíz (high fructose corn syrup) o el monoglutamato sódico (ambas se han
relacionado con la obesidad) a sus productos. Sin embargo, en los últimos 50 años, la industria de
alimentos ha sido obligada a dejar de usar sustancias que ellos defendían como no tóxicas y que al final
probaron ser dañinas (como es el caso de las grasas sintéticas o trans fats que se calcula han causado
alrededor de 30.000 muertes anuales en enfermedades cardiovasculares sólo en los Estados Unidos).
La mejor recomendación es evitar los productos procesados, especialmente si contienen colorantes
y preservativos e inclinarnos hacia los productos frescos, ojala orgánicos, cosecha de la estación y
comidas preparadas en casa.
La razón para recomendar alimentos certificados orgánicos es que los plaguicidas y fertilizantes
que se utilizan en la agricultura se concentran en los alimentos y constituyen también un estresor
químico para el cuerpo de quien los consume. El Ministerio de la Sanidad de España ha alertado sobre
las consecuencias de la contaminación alimentaria por las dioxinas, un producto de la combustión que
es residuo común de procesos industriales e incineradores de basura y que se sabe cancerígeno. Las
dioxinas se encuentran también en las carnes de los animales cuyo pienso ha sido contaminado.
En la casa y el trabajo es mejor preferir productos de limpieza y desinfección que sean
biodegradables y no constituyen un riesgo tóxico.
Los investigadores han probado que muchos de los productos químicos que respiramos o
ingerimos aumentan la presencia de radicales libres en nuestro sistema y afectan negativamente
nuestro cuerpo.
- 40 –
Manejo del estrés
Nutrición, pilar básico de la salud

Lo que sigue son las recomendaciones de la Sociedad Estadounidense contra el Cáncer, para la
prevención y el tratamiento del cáncer. Incluye recomendaciones nutricionales y actividad física. Por
primera vez en la historia de la medicina que llamamos alopática, se han unido la Asociación
Estadounidense del Corazón, la Sociedad Estadounidense contra el Cáncer y la Asociación contra la
Diabetes para hacer educación preventiva, pues sus investigadores han llegado a las mismas
conclusiones sobre cómo el funcionamiento óptimo del cuerpo depende de una buena nutrición.
Las tres instituciones mencionadas arriba lideran en Estados Unidos la educación masiva, el
entrenamiento de profesionales y la investigación, gracias a sus campañas de finanzas nacionales y
locales. La investigación financiada por ellos ha llegado a la conclusión que las enfermedades
cardiovasculares, el cáncer y la diabetes, que causan las dos terceras partes de las muertes en Estados
Unidos, tienen factores de riesgo comunes.
Las estadísticas muestras que dos terceras partes de la población de Estados Unidos tiene
problemas de sobrepeso. La población no sólo se ha hecho más sedentaria sino que también consume
más calorías de las necesarias. Los países europeos, asiáticos y del tercer mundo, en la medida que
adoptan el modelo de vida estadounidenses, siguen el mismo camino. La comida rápida tiende a ser
rica en grasas animales y alta en contenido proteico y calórico y usualmente no incluye fibra, verduras
y frutas que aportan elementos fundamentales a la dieta.
Los lineamientos que se presentan más abajo, incluyen las recomendaciones generales contenidas
en la Estrategia Global de la OMS para la prevención de enfermedades: aumentar el consumo de
frutas, vegetales, cereales integrales y frutos secos; limitar la ingesta de grasas; limitar la ingesta de
azúcares libres; limitar la ingesta de sodio y de caloría. Esta estrategia ha sido adoptada por la
Comisión Europea de Salud Pública.
Los granos, los vegetales y las frutas proveen antioxidantes que el cuerpo necesita para
contrarrestar los efectos dañinos de los radicales libres. Por eso la prevención tiene que basarse en la
adopción de estilos de vida saludables.
En www.mypyramid.gov/sp-index.html se pueden ver las recomendaciones más recientes
publicadas por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos. El portal incluye un aparte que
le permite recibir recomendaciones personalizadas sobre la cantidad de alimentos de cada grupo que
necesita consumir a diario, según su edad, sexo y grado de actividad física (No incluye talla y peso que
podría dar una recomendación más exacta).
Aquí están las recomendaciones. Hay que recordar que es importante consumir una variedad de
comidas naturales y hacer énfasis en productos vegetales.
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Manejo del estrés
1. Coma cinco o más porciones de vegetales y frutas cada día.

· Incluya vegetales y frutas en cada comida y entre comidas.
· Coma distintas clases de vegetales.
· Limite el consumo de papas fritas y otros vegetales fritos.
· Elija bebidas que contengan 100% de puro jugo.
2. Escoja preferiblemente granos enteros en lugar de refinados. Tampoco consuma azúcar

refinada.
· Prefiera el arroz integral, pan integral, pasta hecha de sémola integral y cereales enteros (no de
paquete).
· Limite el consumo de carbohidratos refinados, incluyendo bizcochos, cereales azucarados,
gaseosas y azúcar.
3. Limite el consumo de carnes rojas, especialmente las procesadas (de salsamentaría) y las
ricas en grasa.
· Escoja pescado, pollo o fríjoles como alternativa a la carne de res, cerdo o cabra.
· Cuando coma carne, elija carne magra y porciones pequeñas.
· Prepare la carne al horno o hervida en lugar de fritarla o prepararla en parrilla.
4. Elija comidas que le ayuden a mantener un peso saludable.

· Cuando no coma en casa, elija comidas bajas en grasa, calorías y azúcar, y coma porciones
pequeñas.
· Coma porciones pequeñas cuando consuma comidas ricas en calorías. Tenga claro que “bajo
en grasa” o “sin grasa” no es lo mismo que “bajo en calorías”. Las tortas, galletas y comidas
similares con rótulos de bajo en grasa, tienen muchas calorías.
· En lugar de comidas ricas en calorías como las papas fritas, las hamburguesas, la pizza, el
helado y otros dulces, consuma vegetales y frutas.
5. Adopte un estilo de vida activo.
6. Mantenga un peso saludable toda la vida.

· Compense el ingreso calórico con más actividad física.
· Pierda peso si es obeso o tiene sobrepeso.
7. Si ingiere alcohol, limite el consumo.

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Manejo del estrés
Una buena nutrición debe proveer suficientes antioxidantes para contrarrestar los efectos dañinos
de los radicales libres que incrementan con el estrés. Las verduras y las frutas son la principal fuente de
antioxidantes. En las épocas en que sus niveles de estrés aumentan, puede compensarlos si su dieta se
adherirse a estos lineamientos. No piense en las vacaciones como el tiempo en que usted va a romper
todas las reglas, sino como el tiempo en que usted va a cuidarse más que nunca. No es casualidad que
las estadísticas muestren un aumento de muertes por enfermedades cardiovasculares en los días que
siguen a unas vacaciones.
Alimentos inflamatorios y antiinflamatorios

Hace 20 años un medico desarrolló una artritis reumatoide que lo limitaba como cirujano.
Buscando una cura, y después de varios meses de tomar antiinflamatorios que le irritaban el estómago,
optó por tratamientos alternativos.
Su nueva alimentación excluía las carnes y los lácteos, aunque su doctor le recomendó en contra
de esta dieta. También empezó a practicar meditación, y a ser tratado con masaje, acupuntura y
homeopatía. Cuando después de varios meses su condición empezó a mejorar notoriamente, en lugar
de regresar a su trabajo como cirujano, decidió entrenarse en los mismos tratamientos que lo habían
aliviado. La enfermedad también le dio la oportunidad de aprender que necesitaba cambiar sus niveles
de estrés para mantener la salud.
Por muchos años, ha hecho parte de la sabiduría popular que las carnes y los lácteos afectan
negativamente a las personas con artritis. Pero sólo recientemente, la medicina ha corroborado la
relación entre ciertas comidas y la respuesta inflamatoria exagerada que se observa en enfermedades
como la artritis.
Tendemos a ver la inflamación como una reacción indeseable del cuerpo. Sin embargo, la
inflamación es la respuesta normal del cuerpo para defenderse de un estímulo dañino. Sin la
inflamación, el cuerpo no sería capaz de reparar los tejidos dañados o responder a un invasor.
Los procesos corporales generados por la respuesta inflamatoria garantizan la destrucción,
dilución y aislamiento de los agentes nocivos, se trate de una espina en la piel o una bacteria en la
sangre. La inflamación se manifiesta con enrojecimiento, hinchazón y dolor, signos que nos alertan de
que algo en nuestro cuerpo necesita pronta atención.
Cuando el cuerpo ha estado bajo el efecto del estrés por largo tiempo, pierde su capacidad para
regular la respuesta inflamatoria, que se puede volver exagerada o crónica. Entonces desarrollamos
síntomas que nos limitan y son dolorosos. El cuerpo siempre tiende a volver a lo normal cuando el
peligro ha pasado pero en algunos casos, los estímulos que causaron la inflamación persisten o no
apoyamos al sanador interno del cuerpo con los elementos que necesita para regresar a la normalidad.
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Manejo del estrés
Algunos de estos elementos son el reposo, una cantidad adecuada de vitaminas y minerales y una
buena nutrición.
Los científicos están entusiasmados acerca de los descubrimientos recientes sobre lo que podemos
llamar comidas inflamatorias y antiinflamatorios. Por ejemplo, en su edición de febrero del 2004, el
boletín Health & Nutrition Letter de la Tufts University publicó un artículo que correlaciona tres
condiciones médicas, la hipertensión arterial, la enfermedad coronaria y la artritis con los hábitos
nutricionales.
Las grasas que usamos en la preparación de comidas son precursoras de unas sustancias llamadas
prostaglandinas. Algunas de estas sustancias retardan la repuesta inflamatoria (las que provienen de los
ácidos grasos omega-3, que están presentes en los aceites de oliva y linaza y en el salmón), mientras
que otras exacerban la respuesta inflamatoria (como las que provienen de los ácidos grasos omega-6,
presentes en la grasa animal, el maíz, la semilla de girasol y el aceite de algodón). La mayoría de
comidas procesadas son preparadas con grasas ricas en ácidos grasos omega-6.
El arroz blanco, el pan hecho con harina refinada, la azúcar refinada y otras comidas que tienden a
producir residuos ácidos en el cuerpo, como las carnes y los lácteos, también estimulan la respuesta
inflamatoria. Por otro lado, la mayoría de vegetales, legumbres, tofu y semillas, mantienen la
inflamación a raya. Frutas como la papaya y la piña son ricas en enzimas (papaína y bromelina) que
contribuyen a disminuir la inflamación. El jengibre y las cerezas negras también tienen este efecto.
En resumen, la ciencia está llegando a la conclusión de que una dieta balanceada, rica en comidas
antiinflamatorias, y limitada en comidas inflamatorias, puede contribuir a la mejoría de condiciones
como la artritis y la enfermedad coronaria.
La obesidad pone en riesgo nuestra salud

Con la llegada de los computadores, los videojuegos, los controles remotos y la televisión con
programación de 24 horas, nos movemos menos cada vez. La falta de actividad física es la mayor causa
de aumento de peso.
Hace cinco años, el Centro de Control de Enfermedades del gobierno federal de los Estados Unidos
(CDC) hizo sonar la alarma sobre la epidemia de obesidad que afectaba al país. Las revistas empezaron a
llenarse con artículos con encabezados como “Camine para quemar calorías”, “Adelgace su cintura sin
esfuerzo”, o “Cómo perder 40 libras en una semana”. Estos artículos invitan a la gente a perder peso sin
esfuerzo y se encuentran en millares de revistas y boletines. También abundan los artículos que muestran
la relación entre sobrepeso y cáncer u obesidad y enfermedades como la diabetes.
En el 2000, personas con sobrepeso u obesas gastaron en Estados Unidos más de $35 billones de
dólares en productos y servicios para bajar de peso. Esa cantidad, lo mismo que la cintura de los
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Manejo del estrés
estadounidenses, se ha engrosado desde entonces. La gente está tratando de perder peso o prevenir la
obesidad usando videos, libros, suplementos y otros productos que prometen resultados fabulosos,
resultados que no se ven porque las personas no han cambiado su estilo de vida y siguen acudiendo a
restaurantes de comida rápida y comiendo automáticamente frente al televisor.
De acuerdo con el CDC, la inactividad física y las deficiencias nutricionales son la causa de la
epidemia de obesidad y solamente los cambios en el estilo de vida pueden garantizar que viviremos una
vida más saludable en un cuerpo más delgado. Los cambios en el estilo de vida son necesarios para
mantener el peso ideal y prevenir enfermedades relacionadas con la obesidad, como la diabetes y los
males del corazón. Estos cambios incluyen comer menos calorías, consumir menos comida procesada,
ser más activos y reducir los niveles de estrés. Pero los individuos no pueden cargar con toda la
responsabilidad.
Como mencionamos antes, ciertos aditivos químicos en las comidas, como el monoglutamato
sódico, han sido relacionados con el incremento de peso. Otro producto problemático es la fructosa.
Investigadores alemanes encontraron una relación entre el consumo del jarabe de maíz rico en fructosa y
el aumento de peso. La fructosa no necesita insulina para entrar a las células y se convierte fácilmente en
grasa. Hoy en día ese jarabe de maíz está en casi todas las comidas y bebidas.
En los últimos años, la industria de alimentos ha usado la publicidad para vender productos que
supuestamente contribuyen a perder o a controlar el peso. Por ejemplo, el Concilio Nacional de Lácteos,
gastó en Estados Unidos $200 millones promoviendo la idea de que la leche ayuda a bajar de peso. Pero
en junio del 2005, el Comité de médicos por una medicina responsable, los demandó diciendo que esta
propaganda era engañosa. La campaña estaba basada en investigaciones del profesor Michael B. Zemel,
de la universidad de Tennessee. ¿Quién la había financiado? La industria lechera.
En un informe del 2002 sobre las tendencias en la publicidad sobre control de peso, la Federal Trade
Commission (Comisión federal de comercio de los Estados Unidos) con la ayuda del Partnership for
Healthy Weight Management (Sociedad para el manejo de un peso saludable - que consiste de expertos
de la comunidad científica, la academia, la industria de la salud, el gobierno, los comerciantes y otras
organizaciones) se examinaron las afirmaciones falsas o engañosas contenidas en la publicidad de los
productos y servicios para bajar peso. Encontraron que cerca del 40 por ciento de los anuncios en su
muestra, hacían por lo menos una afirmación que era falsa. Una afirmación que se usaba simplemente
para promover el consumo de un determinado producto. Por desgracia, muchas veces la única fuente
de información a la que el público tiene acceso es la publicidad.
Hemos construido una sociedad que busca soluciones fáciles para cuestiones complicadas. En
nuestra búsqueda de comodidades hemos aumentado paradójicamente, los riesgos para nuestra salud.
Y la industria de la comida tiene libertad para producir productos que afectan la salud de las personas.
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Manejo del estrés
“Lite” no significa lo mejor para su salud

Gaseosas, cervezas, comidas precocidas e inclusive aguacates modificados genéticamente, todos
se han vuelto “lite” en los últimos años. ¿Pero qué significa en realidad ese rótulo? Por definición,
cuando se habla de lite o ligero nos referimos a un producto con menos del 50 por ciento de grasas o
menos del 50 por ciento de calorías. También se usa para designar bebidas con un contenido bajo de
alcohol o comidas bajas en sal. ¿Pero es “lite” necesariamente más saludable?
Informándonos bien podemos evitar equivocaciones al seguir recomendaciones de salud. Por ejemplo,
con las salsas para ensaladas. Tratando de evitar 120 calorías y 11 gramos de grasa en una cucharada de
mayonesa, o 90 calorías y 18 gramos de grasa en una porción de queso azul (Roquefort), la gente prefiere
las versiones Light de estos productos sin leer las especificaciones en el rótulo del producto. Si lo hicieran,
verían que estos productos son efectivamente más bajos en calorías pero tienen un exceso de azúcares y sal
y en realidad sólo son más ligeros en valor nutricional. Una mejor opción sería usar simplemente aceite
que, a pesar de las calorías, nos provee ácidos grasos no saturados (omega-3, anti-inflamatorios).
Otro ejemplo son las comidas con rótulos de “menos sodio (less-sodium)”. La comida procesada
es la principal fuente de exceso de sodio en nuestra dieta, exceso que se asocia con enfermedad
cardiovascular. La ley requiere que el productor corte solamente un 25 por ciento de sodio del
producto original. Sólo los productos marcados “bajo en sodio (low-in-sodium)” tienen los
recomendados 140 o menos miligramos de sodio por porción.
Las personas que siguen dietas bajas en calorías pero aman las gaseosas, buscan gaseosas dietéticas
que contienen aspartame en lugar de azúcar. Sin embargo, se han documentado 92 síntomas asociados con
el uso de este edulcorante, desde dolores de cabeza hasta muerte. Defectos de nacimiento, lupus y
esclerosis múltiple han sido asociados con el uso de aspartame, aunque aún la investigación no es
concluyente.
Sharon Fowler y sus colegas de la Universidad de Texas en San Antonio reportaron recientemente
que quienes beben gaseosas dietéticas no sólo no pierden peso sino que lo ganan. El equipo de
investigadores revisó ocho años de datos de 1.550 personas mexicano-americanas y estadounidenses
entre 25 y 64 años. De los 622 participantes en el estudio que tenían peso normal al comenzar, cerca de
un tercio terminaron con sobrepeso u obesidad.
“Lo que no nos sorprende es que el total de bebidas consumidas estaba relacionado con la
obesidad y el sobrepeso”, le dijo Fowler a WebMD. “Lo sorprendente es que cuando observamos a la
gente que sólo bebía gaseosas dietéticas, su riesgo de obesidad era aún mayor”.
Más interesante aún. Los investigadores encontraron que el consumo de bebidas dietéticas estaba
relacionado con un mayor riesgo de obesidad. “El riesgo de sobrepeso aumentaba un 41 por ciento por
cada lata o botella de gaseosa dietética que la gente consumía cada día”, dijo Fowler.
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Manejo del estrés
No se puede engañar al cuerpo. La comida con poco valor nutricional, comparada con la comida
fresca y natural, no lo mantiene satisfecho por mucho tiempo. Los investigadores llegaron a la
conclusión que las gaseosas dietéticas estimulan el apetito.
Es importante convertirse en compradores concientes y hacer elecciones inteligentes en el
supermercado, pero también hay que tener cuidado y no creer todo lo que se oye o lee. Es necesario
desarrollar un criterio personal, investigar e informarse para crear hábitos saludables que incluyan el
consumo de productos frescos, poco procesados y confiables.
Por qué cambiar una y otra vez de marcas o por qué improvisar comidas con distintos contenidos
de calorías y grasas, sólo porque son anunciados en la televisión. Con frecuencia, las personas que sólo
están tratando de bajar unas pocas libras, se vuelven tan conciente de su apariencia que terminan
obsesionándose sobre las calorías y el contenido de grasa de sus comidas y pueden terminar
desarrollando desórdenes de alimentación (bulimia y anorexia) y obesidad. El mejor sendero hacia la
salud es encontrar lo que funciona para cada cual y apegarse a las elecciones saludables que hemos
hecho.
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Manejo del estrés
Mecánica corporal
Hemos reservado esta sección para hablar sobre la forma en que manejamos nuestros cuerpos.
¿Cuáles son sus consideraciones cuando determina la altura de su mesa de masaje? ¿La comodidad
del cliente? ¿Su propia comodidad? ¿Usted cambia la altura de acuerdo a la técnica que va a utilizar o
al tamaño del cliente? ¿O simplemente sigue las indicaciones que le dieron en la escuela donde
estudió? O, tal vez, usted ha experimentado colocando la mesa en distintas alturas hasta encontrar la
que le parece más cómoda.
¿Se encuentra usted abriendo las piernas exageradamente para ajustar la altura de sus manos a la
mesa? ¿O alza los hombros porque la mesa está un poco alta? Si esto es así, es tiempo de reconsiderar
lo que ha estado haciendo para ver de qué manera puede trabajar más confortablemente y prevenir
tensiones y dolores.
Si considera que el cuerpo funciona como un sistema de palancas, estará de acuerdo con que al
encontrar una postura cómoda para trabajar, podrá tener mejor balance y un mejor efecto de palanca4
(leverage). Una adecuada postura le dará más control sobre sus movimientos, al mismo tiempo que
permitirá que la energía fluya durante la sesión, disminuyendo el estrés sobre su cuerpo.
Todo movimiento depende de las fuerzas que se ejercen sobre el cuerpo y su masaje será más
efectivo si usa una mecánica corporal apropiada que, además, le ayudará a prevenir lesiones. Una
postura inadecuada puede contribuir a causar lesiones de la columna y las articulaciones de los hombros,
las rodillas, las caderas y las manos. También exige un mayor gasto de energía y es fuente de cansancio y
dolor. Esto significa que una buena postura es un requisito para el bienestar.
La biomecánica es una ciencia que mira al cuerpo humano desde el punto de vista de las fuerzas que
actúan sobre él, observando posibles posturas y movimientos, estudiando cuáles previenen las lesiones,
disminuyen el estrés físico y permiten hacer un uso más eficiente del cuerpo. Nuestra mecánica corporal
es “buena” cuando no sentimos presión sobre nuestra espalda u hombros, cuando estamos utilizando la
fuerza de la gravedad a nuestro favor. Para entender las fuerzas en juego cuando adoptamos diferentes
posturas o nos movemos, los investigadores usan programas computarizados que registran lo que sucede
en las articulaciones y músculos cuando estamos parados, caminamos o corremos.
La importancia de la postura y su influencia sobre nuestro estado de salud ha sido reconocida en
diferentes culturas, sistemas médicos tradicionales, terapias y sistemas de ejercicio. Por ejemplo, los
practicantes de yoga, quienes realizan constantemente ejercicios para estabilizar la pelvis y enderezar
4
Efecto de palanca o apalancamiento es la ventaja mecánica que se gana estando en cierta posición para usar una palanca.
Desde una perspectiva mecánica, el cuerpo puede entenderse como una serie de palancas.
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Manejo del estrés
la columna en distintas posturas, aseguran que su práctica los mantiene saludables. Los practicantes de
t’ai c’hi también buscan posturas que permitan un mayor flujo de la energía vital, que en la Medicina
Tradicional China se conoce como Chi (Ki, en Japón).
Los sabios hindúes sostienen que la edad de una persona está determinada por la flexibilidad de su
columna vertebral.
Pilates, una forma de ejercicio que se ha puesto de moda en la última década, enseña a ser más
conscientes del cuerpo, mejorar la postura y lograr movimientos más ágiles, que exigen menos
esfuerzo.
Los médicos osteópatas y los quiroprácticos centran su trabajo en los ajustes de la columna
vertebral para garantizar su alineamiento y hacen énfasis en la importancia de mantener una cierta
curvatura espinal y buena postura para garantizar una buena salud.
Algunas definiciones importantes:
Es importante empezar con algunas definiciones que se usan al hablar de mecánica corporal.
Fuerza: Una fuerza es un empuje o jalón de un objeto sobre otro que lo hace parar o poner en
movimiento. Para producir un movimiento sobre las articulaciones, los músculos deben ejercer una
fuerza sobre ellas.
Gravedad: Es la fuerza que ejerce la Tierra sobre el cuerpo y sus segmentos y que experimentamos
como peso. La gravedad es la fuerza más consistente que actúa sobre el cuerpo y actúa de una manera
predecible, de una manera que podemos describir con exactitud. Nuestra postura está siendo
permanentemente afectada por la gravedad que ejerce una fuerza de tracción sobre el cuerpo.
Clases de fuerzas que actúan sobre el cuerpo humano

Externas
1. Gravedad
2. Objetos que cargamos, arrastramos o empujamos
3. Aire (si estamos caminando o corriendo)
4. Agua (si estamos nadando)
Internas
1. La ejercida por un músculo o tendón sobre un hueso
2. Por un ligamento sobre un hueso
3. Por un hueso sobre otro hueso
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Manejo del estrés
Los huesos constituyen la estructura principal de sostén del cuerpo y conectan unos con otros en
las articulaciones que, como bisagras, aseguran la posibilidad de movimiento en las extremidades y la
columna vertebral. El movimiento se produce gracias a la fuerza que ejercen músculos, tendones y
ligamentos sobre los huesos.
Según su particular estructura, cada articulación permite un distinto tipo de movimiento. Hay
articulaciones que funcionan exactamente como bisagras, girando sólo sobre un eje y permitiendo
solamente movimientos de flexión o extensión, como las del codo o la rodilla. Otras articulaciones
están compuestas de una bola y un receptáculo (enartrosis), como las del hombro y la cadera, y
permiten un rango mucho más amplio de movimiento y aún otras (planas) que apenas permiten el
deslizamiento de un hueso sobre el otro, como las articulaciones existentes entre los huesos del carpo.
El rango de movimiento de una articulación también varía de una a otra persona dependiendo de
su estructura física, su edad, el sexo, la raza y su actividad física, entre otros factores.
Toda fuerza puede definirse por:

a. El punto de aplicación sobre el objeto sobre el que actúa la fuerza
b. La dirección de la fuerza
c. La magnitud de la fuerza
Cuando hablamos de la gravedad, el punto de aplicación es el centro de gravedad (COG), un

punto hipotético en el que la masa corporal parece concentrarse, sobre el que la gravedad parece actuar.
El COG de cualquier objeto es aquel punto donde confluyen todas las fuerzas que actúan sobre el mismo.
En un objeto simétrico, el COG está situado en el centro. Si el objeto se sostiene por este punto, estará en
perfecto balance aún si se voltea o rota. En un objeto asimétrico, como el cuerpo humano, el centro de
gravedad se sitúa cerca al extremo más pesado y en un punto donde la masa está distribuida de forma
pareja. Cuando estamos en posición anatómica (parados con los pies y las palmas dirigidos hacia delante)
el COG se localiza alrededor del segundo segmento sacro (S2). Cuando nos movemos o cargamos
objetos, el COG cambia y la estabilidad del cuerpo depende de dónde quede situado.
La dirección de la fuerza de gravedad sobre el cuerpo es siempre hacia el centro de la tierra. Y la
magnitud de la fuerza equivale a la masa (peso) del objeto que la ejerce.
Sistema de palancas
Una palanca es una barra rígida que puede girar en torno a un punto de apoyo fijo para mover o
levantar un peso más fácilmente. La palanca tiene tres puntos de interés:
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Manejo del estrés
a. El apoyo o pivote
b. La resistencia, carga o peso (Lo que queremos manipular con la palanca y que se
describe como magnitud) y
c. El punto de aplicación de la fuerza o donde se hace el esfuerzo (la fuerza que aplicamos
para levantar o empujar la carga).
La longitud de la palanca entre el punto de apoyo y el punto de aplicación de la resistencia se
llama brazo de resistencia y la longitud entre el apoyo y el punto de aplicación de la fuerza, se llama
brazo de fuerza.
Existen tres tipos de palancas, clasificadas de acuerdo a las posiciones del punto de apoyo y al
punto donde se ejerce la fuerza:
Palanca de primer grado
El apoyo (Ì) está en la mitad, entre el punto de

aplicación (Æ) y la resistencia ().
Por ej: un balancín, unas tijeras, una pinza, una
catapulta.
Hay pocas palancas de primer grado en el cuerpo.

Por ej: Cuando extendemos la cabeza, el punto de
apoyo está en las articulaciones intervertebrales,
el esfuerzo lo hacen los músculos extensores de la
cabeza y la resistencia es el peso de la misma.
Palanca de Segundo grado
Por ej: Una carretilla, un cascanueces.
En el cuerpo, un buen ejemplo de este tipo de palanca

es cuando andamos de puntillas. El punto de apoyo lo
encontramos en le articulación metatarsofalángica, la
resistencia es el peso del cuerpo y el esfuerzo lo hacen
los músculos plantiflexores.
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Manejo del estrés
Palanca de tercer grado
Por ej: El uso de un bate de baseball. Si usted es

diestro, su brazo izquierdo es el apoyo, su mano
derecha hace el esfuerzo y la bola es el peso.
La mayoría de articulaciones en el cuerpo

funcionan como palancas de tercer grado.
Ventaja mecánica:
La ventaja mecánica, o eficiencia, se refiere al uso de una palanca de tal manera que sólo un
pequeño esfuerzo es necesario para superar una gran resistencia.
Aunque las palancas de segundo grado son las más eficientes, la mayoría de palancas en el cuerpo
son de tercer grado donde la magnitud del esfuerzo es mayor que la resistencia, pero estas palancas de
tercer grado son las que permiten una mayor velocidad y rango de movimiento.
Cuando damos masaje, tengamos en cuenta que podemos usar nuestro cuerpo como una serie de
palancas; así entenderemos que su eficiencia depende de cómo lo utilizamos. No es muy diferente de la
forma en que debemos usar el cuerpo para empujar eficientemente un mueble o un cochecito. Los seres
humanos instintivamente usamos todo el cuerpo para ejercer una fuerza, como podemos comprobar al
observar el movimiento libre de un niño que aún no ha sido “amaestrado”.
¿Recuerda cuántas veces su profesor le dijo que al dar masaje dejara que el esfuerzo “viniera desde sus
pies”? Ponga atención a esa recomendación para evitar tensiones y lesiones en sus hombros, codos, muñecas
y columna. Cuando se inclina desde los pies los tobillos son el punto de apoyo y el cuerpo entero está
funcionando como palanca. Entre más larga la palanca, más eficiente.
Use el cuerpo entero para mantener conscientemente su columna alineada mientras se inclina desde los
pies para aplicar compresión o hacer tracción de un miembro. Mientras hace compresión asegúrese de que
de que alinea sus articulaciones de tal manera que la línea de esfuerzo pasa por el centro de cada coyuntura,
desde los pies hasta la parte del cuerpo que usted está utilizando (pulgar, mano o codo). Esto previene el
desgaste de las articulaciones porque distribuye el esfuerzo a lo largo de una cadena de articulaciones.
Cuando usted utiliza su cuerpo como una serie de palancas, entenderá bien que su eficiencia
depende de cómo las use. Por ejemplo, cuando hacemos compresión no se trata de empujar los tejidos
del paciente. En realidad una compresión no debería costarle al masajista ningún esfuerzo. Una
compresión efectiva debe ser el resultado de saber cómo utilizar el peso del propio cuerpo para
- 52 –
Manejo del estrés
reclinarse sobre el cliente. Si usa una buena mecánica corporal, usted irá apoyando su peso poco a
poco sobre el cliente, usando la fuerza de gravedad, en lugar de poner en tensión sus músculos.
Hay dos requerimientos para hacer esto correctamente. Primero, el masajista necesita aprender a
sentir los tejidos del cliente. De esta manera, a medida que se apoya sobre el paciente, podrá equiparar
el peso que pone sobre el cliente con la resistencia que encuentra bajo sus manos. Y segundo, para
reclinarse sobre el cliente sin lastimarlo o lastimarse, el masajista debe saber manejar adecuadamente
su cuerpo.
Hay diferentes técnicas para lograr lo anterior. Por favor visite el portal de John Latz y lea su
excelente artículo sobre Connective Tissue Massage para aprender más sobre sus conceptos de
mecánica corporal (www.johnlatz.com). Las fotos son ilustrativas de una buena mecánica corporal.
La teoría de Latz está basada en el modelo de estructuración integral de Rolf, el cual busca la
alineación del cuerpo a lo largo de una línea imaginaria que iría de la planta del pie al tope de la
cabeza. El movimiento, de acuerdo a Rolf, es una elongación a lo largo de este alineamiento.
También puede explorar los conceptos que se usan en la práctica de Yoga, QiGong y T’ai C’hi.
Estas prácticas antiguas de India y China se concentran en la energía del cuerpo y trabajan desde el
convencimiento de que podemos aumentar nuestra energía mediante buenas técnicas de respiración y
una correcta postura.
En el T’ai C’hi, por ejemplo, el equilibrio central es fundamental. Los practicantes se concentran
en el sacro como centro, concientes de su posición en el espacio, su relación con las articulaciones de
la cadera y la parte posterior de la cabeza.
Las siguientes recomendaciones le pueden ayudar a prevenir lesiones y agotamiento:

1. Manténgase conciente de su postura. Su cuerpo es su instrumento, úselo con cuidado.
2. Evite la creación de hábitos que puedan volverse patrones restrictivos. No repita ciertas acciones
sólo porque son parte de una técnica que le enseñaron. Sienta el cuerpo del paciente y aplique sólo
aquellas acciones que usted siente que los tejidos necesitan.
3. Recuerde hacer estiramientos y cuidar bien de sus manos. Los estiramientos mantendrán su cuerpo
flexible y disiparán las tensiones creadas por su trabajo.
4. Observe las posturas que adopta no sólo al hacer masaje pero también mientras maneja, se sienta
al televisor o duerme. Un buen descanso es esencial para recobrarse después de un día de duro
trabajo.
5. La mecánica corporal debe ser complementada con el uso de principios ergonómicos. Asegúrese
de que su mesa de masaje tiene una altura que le permite trabajar alineando adecuadamente su
cuerpo y extremidades y si se sienta al computador siga las recomendaciones ergonómicas.
6. Desarrolle un programa de ejercicio que fortalezca sus extremidades y especialmente sus manos.
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Manejo del estrés
Mi última recomendación es que si su cuerpo está disparando sus alarmas, hay que escucharlas. Si
empieza a presentar síntomas de lesiones por estrés repetitivo o se siente adolorida y exhausta, dése
una vacación y si los síntomas persisten, consulte a su médico.
- 54 –
Manejo del estrés
Cuestionario
Por favor lea con cuidado y haga un círculo en la opción que usted considera correcta.
1. ¿Cuál es la razón principal por la que los masajistas se retiran de su profesión?

a. Competencia
b. Falta de entrenamiento
c. Falta de clientes
d. Agotamiento
2. Los principales elementos para una vida saludable son:

a. Comer menos, trabajar más, ser feliz
b. Evitar las situaciones incómodas
c. Una nutrición balanceada y un buen manejo del estrés
d. Cuidar a tantas personas como sea posible
3. La duración de los cambios en el estilo de vida depende de:

a. Adquirir hábitos saludables que se practican a diario
b. Ganar conciencia sobre la salud y ponerse metas realistas
c. Disfrutar de la mejoría de la salud
d. Adquirir una perspectiva multidimensional
e. Todas las anteriores
4. Entre los hábitos de vida saludable están:

a. No beber alcohol o hacerlo con moderación
b. Expresar nuestras necesidades y ser asertivos
c. Construir un buen sistema de apoyo
d. Todas las anteriores
5. El agotamiento se caracteriza por:

a. Estrés duradero y problemas de aculturación
b. Falta de claridad mental y manejar largas distancias
c. Sentirse frustrado a todas horas y dormir más de la cuenta
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Manejo del estrés
d. Cansancio, menor resistencia a las enfermedades y pérdida de interés por el trabajo
6. Una mecánica corporal pobre y una mala postura, aumentan las posibilidades de sufrir de
agotamiento.
a. Verdadero
b. Falso
7. Los signos físicos del agotamiento incluyen:

a. Fatiga y cambios en el apetito
b. Frustración e irritabilidad
c. Falta de interés por aprender más
d. Aislamiento
8. Los signos mentales del agotamiento incluyen:

a. Fatiga y cambios en el apetito
b. Frustración e irritabilidad
c. Falta de interés por aprender más
d. Aislamiento
9. La mejor manera de prevenir el agotamiento es: _______________________________
10. Dos diferencias entre sanar y curar son:

a. ....
b. ….
11. Una buena postura mientras trabaja:

a. Aumenta su comodidad y previene lesiones
b. Ayuda a proveer un mejor masaje
c. Previene el agotamiento
12. Una buena mecánica corporal permite:

a. Un uso más eficiente del cuerpo
b. Evitar el dolor de espalda
c. Prevenir el agotamiento
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Manejo del estrés
13. Nuestro centro de gravedad:

a. Está situado alrededor de S2 cuando estamos parados en posición anatómica
b. Es la fuerza más consistente que actúa sobre el cuerpo humano
c. El punto alrededor del cual sufrimos la mayoría de lesiones
e. Ninguna de las anteriores
14. Una palanca es:
a. Un aparato que hace el trabajo de mover una carga, más fácil
b. Un hueso largo en el cuerpo
c. Una carga que debe desplazarse
d. Una varilla que se usa para cambiar el centro de gravedad
15. Una masajista puede usar la gravedad para hacer una mejor compresión
a. Cierto
b. Falso
16. Estudios muestran que al menos _______ de individuos que reciben un placebo, experimentan
alivio de los síntomas y muestran una significativa mejoría de síntomas.
a. Uno por ciento
b. Un cuarto
c. Cincuenta por ciento
d. Diez por ciento
17. “Sanador interior” se refiere a:

a. Información que tienen nuestras células y que les permite contribuir a la regeneración
de los tejidos
b. La capacidad del cuerpo para adaptarse al medio ambiente
c. Respuestas instintivas del cuerpo
18. El estrés se define como:

a. La escasez de recursos ambientales para uno sanarse
b. El desbalance resultante de las tensiones emocionales
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Manejo del estrés
c. El resultado de los cambios ambientales que el cuerpo percibe como amenaza

d. La falla de los sistemas del cuerpo
19. La siguiente afirmación es cierta sobre los radicales libres:

a. Los procesos de oxidación son frecuentes
b. Los radicales libres dañan las células y aceleran el envejecimiento
c. Son reacciones químicas que tienen lugar en el ambiente
d. Son esenciales para el correcto funcionamiento hormonal
20. Las ondas de radio, los químicos que contaminan el aire, el agua y las comidas:
a. Producen antioxidación
b. Estimulan el crecimiento celular
c. Causan daño en nuestro organismo
d. Ninguno de los anteriores
21. Los pensamientos conflictivos causan:

a. Producción de endorfinas
b. Infecciones virales
c. Se traducen en ansiedad, miedos y tensiones musculares
22. Las relaciones abusivas son una fuente de estrés emocional y mental. Una pareja abusiva nos
hace sentir:
a. Confusos, incómodos y sin valor
b. Enojados y tristes
c. Culpables y temerosos
d. Todos los anteriores
23. La gente abusiva se distingue en particular por un rasgo. Ellos:

a. Ejercen su identidad y controlan el ambiente
b. Pierden con facilidad el control en cualquier circunstancia
c. Debilitan progresivamente a sus compañeros
d. No tienen opiniones personales
24. Una diferencia entre una persona sana y una persona abusiva es:
a. Una persona sana se disculpa cada vez que comete el mismo error
- 58 –
Manejo del estrés
b. Una persona abusiva se disculpa sólo cuando puede reconocer el mal comportamiento
c. Una persona sana no sólo se disculpa sino que se asegura de no volver a presentar el
mismo comportamiento
d. Una persona sana nunca se porta mal
25. El desarrollo de las habilidades de comunicación:

a. Reduce una buena parte del estrés en las relaciones interpersonales
b. Nos garantiza promociones en el trabajo
c. Es imposible. Nuestros patrones de comunicación no pueden cambiarse
d. Ninguna de las anteriores
26. Haga una lista de cuatro elementos que podrían mejorar la comunicación interpersonal:
a. ..
b. ..
c. ..
d. ..
27. Es importante incluir pausas en el trabajo como masajista. Ellas

a. Mejoran nuestro desempeño
b. Nos dan tiempo para cuidar de nosotros mismos
c. Nos dan tiempo para escribir reportes
28. Haga una lista de 4 recomendaciones nutricionales de la Sociedad estadounidense contra el

cáncer
a. …
b. …
c. …
d. …
29. Una dieta saludable debe contener:

a. Grasa animal y muchas nueces
b. Una buena cantidad de radicales libres para proteger las células
c. Suficientes antioxidantes para contrarrestar el estrés
d. Pocas calorías
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Manejo del estrés
30. Entre las recomendaciones de la Sociedad estadounidense contra el cáncer están:

a. Treinta minutos o más de actividad diaria
b. Mantener el peso ideal
c. Limitar el consumo de bebidas alcohólicas
31. La inflamación debe ser contrarrestada tan pronto como aparece

a. Cierto
b. Falso
32. Son comidas antiinflamatorias las que:

a. Son ricas en ácidos grasos omega 9 y 6
b. Son ricas en ácidos grasos omega 3
c. Frutas como la papaya que contiene papaina
d. B y C son ciertas
33. Dos sustancias que aparecen con frecuencia en los rótulos de la comida procesada y que al
parecer están relacionadas con el aumento de peso son:
a. Monoglutamato y prostaglandinas
b. Endorfinas y sal
c. Monoglutamato sódico y jarabe de maíz rico en fructosa
d. Ninguno de los anteriores
34. Es preferible tomar gaseosas endulzadas con Aspartame si se quiere una nutrición saludable
a. Cierto
b. Falso
35. En el masaje conocido como “deep tissue”:

a. El dolor es sanador
b. Los nudos de tensión se disuelven y nunca reaparecen
c. Se producen endorfinas y es posible que se produzca una adicción al dolor
d. El cliente necesariamente experimenta alivio
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Manejo del estrés
Referencias
1. Casabianca, S. (2005) El fin de la Enfermedad. Otra visión del cuerpo humano.
Fundación Arte y Ciencia.
2. Foster, M.A. Visualizing Bones in Body Mechanics, Massage & Bodywork.

In http://www.massageandbodywork.com/Articles/DecJan2007/SomaticAnatomyDJ07.pdf
August, 2007
3. Khan A, Warner HA, and Brown WA. (2000) Symptom reduction and suicide
risk in patients treated with placebo in antidepressant clinical trials. Arch Gen Psychiatry.
4. Latz, J. Connective Tissue Massage. In http://www.johnlatz.com, February, 2007
5. http://www.amtamassage.org
6. http://www.cancer.org
7. http://www.medsci.uu.se/occmed/webkurs/trends/emf.htm
8. http://www.mypyramid.gov
9. http://www.silviacasabianca.com
10. http://www.stress.org/job.htm
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Manejo del estrés
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Manejo Del Estres

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Manejo del estrés para masajistas:

Autocuidado para prevenir el agotamiento

Inventario – Reconociendo nuestras necesidades y prioridades

¿Qué acciones está tomando para manejar el estrés en su vida?

Autocuidado Me honro a mi mismo y me digo que soy una

Satisfago mis necesidades espirituales mediante

*Fuente desconocida – traducido del inglés por la autora

Signos físicos del agotamiento son:

4. Problemas con el sueño

Curar vs. Sanar

Los síntomas pueden ser un camino hacia la sanación

Después de 40 o 50 años de un movimiento que se enfoca ahora más en la salud que en la

Nuestro sanador interior

La importancia de escuchar al cuerpo

Manejo del estrés

directamente a la formación de radicales libres como la radiación, el consumo de ciertos antibióticos y

Estrés emocional y mental

Casos de relaciones abusivas

¿Qué tan asertivo es usted?

Pregúntese lo siguiente para saber qué tan asertivo es:

√ ¿Le es fácil solicitar ayuda o referir un cliente cuando es necesario?

Recomendaciones para mejorar su comunicación interpersonal

Y tenga en cuenta estos consejos generales:

Para mejorar su comunicación con sus clientes:

Sin dolor, por favor

Una visión alternativa sobre la función del dolor

Manejo del tiempo

Para manejar mejor su tiempo:

Evite los campos electromagnéticos

Estas son algunas recomendaciones para evitar exposición a campos electromagnéticos:

El estrés químico también puede reducirse

Nutrición, pilar básico de la salud

1. Coma cinco o más porciones de vegetales y frutas cada día.

2. Escoja preferiblemente granos enteros en lugar de refinados. Tampoco consuma azúcar

4. Elija comidas que le ayuden a mantener un peso saludable.

5. Adopte un estilo de vida activo.

6. Mantenga un peso saludable toda la vida.

7. Si ingiere alcohol, limite el consumo.

Alimentos inflamatorios y antiinflamatorios

La obesidad pone en riesgo nuestra salud

“Lite” no significa lo mejor para su salud

Algunas definiciones importantes:

Clases de fuerzas que actúan sobre el cuerpo humano

Toda fuerza puede definirse por:

Cuando hablamos de la gravedad, el punto de aplicación es el centro de gravedad (COG), un

El apoyo (Ì) está en la mitad, entre el punto de

Hay pocas palancas de primer grado en el cuerpo.

Palanca de Segundo grado

Por ej: Una carretilla, un cascanueces.

En el cuerpo, un buen ejemplo de este tipo de palanca

Palanca de tercer grado

Por ej: El uso de un bate de baseball. Si usted es

La mayoría de articulaciones en el cuerpo

Las siguientes recomendaciones le pueden ayudar a prevenir lesiones y agotamiento:

1. ¿Cuál es la razón principal por la que los masajistas se retiran de su profesión?

2. Los principales elementos para una vida saludable son:

3. La duración de los cambios en el estilo de vida depende de:

4. Entre los hábitos de vida saludable están:

5. El agotamiento se caracteriza por:

d. Cansancio, menor resistencia a las enfermedades y pérdida de interés por el trabajo

7. Los signos físicos del agotamiento incluyen:

8. Los signos mentales del agotamiento incluyen: