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AUTORÍA Y PARTICIPACIÓN EN EL DERECHO PENAL

1. SISTEMAS DIFERENCIADORES Y UNITARIOS DEL CONCURSO DE PERSONAS EN EL DELITO

LOS SISTEMAS DIFERENCIADORES: distinguen entre los diferentes intervenientes en el hecho


delictivo a autores y participes, donde la punición del participe depende de un hecho principal
llevado a cabo por una autor, sin este hecho, la participación del primero sería inexistente

EL PRINCIPIO DE ACCESORIEDAD

Accesoriedad implica cierta dependencia entre personas, hechos, valores o situaciones.


Peñaranda Ramos afirma que el significado primario de la accesoriedad es definir
estrictamente el ámbito de lo punible

Esta figura se analiza en dos sentidos:

1. Desde el grado de realización que debe haber alcanzado el hecho principal, también
llamada accesoriedad cuantitativa
2. Desde la dependencia de los elementos del hecho punible, llamado accesoriedad
cualitativa

Con la accesoriedad cuantitativa surge la pregunta ¿A qué estadio debe de haber llegado el delito
para que sea punible la participación? La respuesta es que el hecho será punible para el partícipe
desde el momento en que sea punible para el autor.

La siguiente pregunta sería ¿Hasta cuándo es punible la participación? En general, hasta el


momento de la consumación, ya que no cabe admitir participación en delitos ya consumados.
Excepto en delitos que se pueden prolongar en el tiempo.

La accesoriedad cualitativa nos hace preguntarnos, qué elementos se deben de exigir en la


conducta del autor para castigar al partícipe, su medida de dependencia. M. E. Mayer hace una
sistematización siendo: accesoriedad mínima, cuando para su punición es suficiente que el autor
principal haya concretado el tipo legal, típica, la accesoriedad limitada, donde la conducta del
autor debe ser típica y antijuridica, y, la accesoriedad máxima, exige que el autor haya actuado
también culpablemente, y la hiperaccesoriedad, que se realiza cuando las condiciones personales
del autor principal se transmiten al partícipe. Conducta típica, antijurídica, culpable y punible.

En la actualidad se sostiene que el criterio más conveniente es el de la accesoriedad limitada, la


conducta del autor debe ser típica y antijurídica, dejando la culpabilidad a lo correspondiente
indivindualmente a cada participe.

También debe de tomarse en cuenta la dependencia de participación del dolo del autor principal,
pues la accesoriedad limitada exige un hecho típico y tomando en cuenta que el dolo y la
imprudencia son elementos del tipo, hay una exigencia d edolo en el autor,ya que si el “autor” no
actúa dolosamente, quien lo apoya sería autor mediato
Para los dleitos imprudentes, se sigue un concepto unitario, no se hace la diferenciación entre
autores y partícipes, pues la participación en un delito imprudente se convierte en un tipo de
autoría imprudente.

Las circunstancias agravantes o atenuantes, se tienen que estudiar interveniente por


interveniente, ya que como dice Jakobs, la culpabilidad es personalísima

Como vemos es necesario establecer un sistema diferenciador entre autor y partícipe, siendo las
siguientes teorías:

1.1.2 la teoría objetivo-formal

Esta teoría fue bautizada por Birkmeyer en 1908, aunque es más antigua, dice que es autor el que
realiza un acto ejecutivo del injusto correspondiente. Parte de un concepto restrictivo de autor, ya
que restringe la acción a la realización de la conducta típica, entonces los participes serán los que
aporte cualquier atribución causal al hecho, partiendo de los tipos penales para definir al autor.

Beling considerado el principal representante de esta teoría concibe al autor como “sólo aquel que
ha realizado la acción típica de un modo acorde con el sentido del lenguaje común” ya que con
este se puede lograr extender los verbos utilizados en al ley hasta alcanzar los casos de utilización
instrumental de otro hombre, lo que por otra parte nos llevaría a renunciar a criterios específicos
de delimitación. Roxin critica esto, pues mediante esta se sacrifica el principio básico de la teoría
objetivo formal, que es el emprender personalmente la acción ejecutiva.

Se dice que este concepto es restrictivo porque selecciona de entre las atribuciones causales,
aquéllas que se corresponden con la descripción típica (autores), y los aprícipes son quienes
contribuyen causalmente a la realización del hecho, d eforma no contemplada en el tipo penal.
Hernandez Plasencia considera que esta teoría hace renacer la idea de la causalidad, tratando de
hacer la distinción entre causa y condición.

Dicha formulación identifica la realizaion del hecho con la ejecución total o parcial del tipo y
presenta variantes del concepto del acto ejecutivo que se dividen en 2 grandes grupos: las que
identifican el acto ejecutivo con el acto que constituye la referencia inmediata de los términos
típicos (acto consumativo), y las que entienden que a la acción ejecutiva pertenecen, no solo loa
actos inmediatamente descritos por el tipo, sino también actos previos, con lo que aquéllos
forman una unidad inescindible.

Esta teoría es considerada insuficiente para fundamentar la autoría mediata (cuando el autor no
lleva a acabo objetivamente la conducta descrita en el tipo de la parte especial) y algunos
supuestos de delito sirviéndose de un aparato de poder. Pues el principio básico de la
teoríaobjetivo formal es emprender personalmente la acción ejecutiva.

Roxin dice que esta mal llamada objetiva eata teoría pues tiene en cuenta de modo más amplio el
elemento subjetivo al final.

Diaz y García conlledo explica que lo “formal” de esta teoría no significa que sea excluyente de los
elementos subjetivos, sino que pretende dar a entender una oposición a las teorías basadas en la
subjetividad
Otros críticos dicen también que esta teoría confunde realización del tipo con la realización de
propia mano.

Sus defensores como Rodríguez Murillo, sostiene que la base del concepto restrictivo debe ser la
idea de realización (que no es exactamente la ejecución física del hecho), a su vez para Gimbernat,
autor es “aquél cuya conducta es sublime, sin mas, en el tipo de la parte especial”, que con esto
quedaría resuelto el problema de concebir desde la autoría medita, se lograría esta subsumiendo
la conducta del tipo de la parte especial.

Se podría decir que estps acutores, basándose en que el concepto de autor deriva de la
subsunción de la actividad en el tipo de la parte especial, logran la admisibilidad de la autoría
mediata. Pues autor es quien realiza un acto ejecutivo.

Sin embargo siguen oponiendo esta teoría diciendo que esformalmente incorrecta y poco
operativa, ya que nos dice el que hay que realizar pero no el cómo debemos realizar esta
subsunción

LA TEORÍA SUBJETIVA

También llamada teoría del ánimo, se basa en el ánimo concreto que el interviniente en el delito
tenga, so actúa con animo de autor, será autor y si actúa con animo de paríicipe, siempre será
partícipe. Esta teoría surge en el siglo XIX y su principal representante es v. Buri.

La distinción entre autor y aprícipe se realiza en un plano subjetivo, pues atiende al ánimo con que
obran los intervinientes. El fundamento de esta teoría es que se parte de la parte de la teoría
causal de condición y, en base a ella, se niega toda distinción objetiva entre la actividad de autor y
la de el cómplice: ambos no hacen mas que colocar una condición del resultado, y a una condición
no esposible distinguirla de otra condición. El razonamiento a que entonces acude es este: la ley
positiva distingue entre autor y cómplice, estas actividades no se distinguen objetivamente, la
distinción se halla en terreno subjetivo.

En esta teoría es el ánim, no la acontribución al hecho lo que interesa. El animus auctoris se ha


caracterizado desde fórmulas diferentes. La primera es la llamada teoría del dolo, en la cual el
autpr es aquel que tiene voluntad autónoma e independiente, y partícipe es aquel que somete su
voluntad y la hace dependiente de la del autor, también se hace una distinción entre aprtícipe y
coautor donde la diferencia radica en que este ultimo no reconoce una voluntad que domine la
suya.

Las críticas a esta teoría son relevantes a los problemas que en la práctica puede traer como por
ejemplo el caso de dos personas que ejecutan un mismo hecho conjuntamente, pero que al
hacerlo ambos dejan a criterio del otro el que se lleve a cabo, esta teoría nos llevaría a lo que Sax
llamo, “visión fantasmagórica de un hecho sin autor alguno”, donde los defensores de la teoría
dijeron que lo querido por el sujeto no puede contradecir el juicio que se obtenga por el desarrollo
objetivo de los hechos”, lo que nos llevaría a bandonal la teoría subjetiva pura al aportar
elementos objetivos para la determiancion de la autoría y partcipacion. Ohual si un sujeto realiza
de propia mano un hecho delictivo y se sienta subordinado a otro aunque en realidad no sea asi
La segunda vertiente de esta reoría subjetiva es la denominada teoría del interés, la cual sostiene
que el animus auctoris coincide con el sujeto que tiene interés en la causación del hecho, o sea
que autor es el que tiene un interés propio en el hecho, mientras que el partícipe tiene un interés
meramente ajeno. Distinguiendo autores y aprícipes en función d eus interés del resultado.

Encuentra dificultades en diversos casos como por ejemplo cuando el ejecutor doloso actúa en
interpes ajeno, interés que por cierto no existe, se calificaría de partícipe al ejecutpr ya que
aunque no existe dicho interés, el animus con el que actuo fue de mero partícipe.

Algunos autores proponen la concepción de interés propio fundamentando algún tipo de autoría
del ejecutor doloso que actúa en interés ajeno, ya que el interés propio consiste en querer ayudar
a un tercero, el legislador ya contempla estos casos, como el homicidio a perticion de la victima

También aplicaría en el caso de un asesino a sueldo que ha sido pagado y ejecuta el hecho, como
actúa con ánimo de partícipe, tendrá que ser catalogado como tal

Donna en relación a esta teoría nos dice que el Tribunal Supremo Federal alemán considera que la
ejecución por mano propia puede ser expresión de autoría, pero deben de admitirse excepciones,
de ahí que: aquel que cumpla en su persona todos los elementos de la autoría puede ser
considerado como un mero complice en la medida en que su voluntad sólo haya apuntado a
apoyar un hecho ajeno.

Dentro de este criterio se encuentran las teorías mixtas que se dividen en subjetivo-objetivas y
objetivo-subjetivas. Las primeras se basan en el ánimo concreto del autor, introduciendo
elementos de naturaleza objetiva, mientras que en las segundas se afirma que autor es “el que
realiza total o parcialmente el tipo”, según el punto de vista objetivo y aun asi se recupera a
complementación en el aspecto subjetivo.

Pero al margen de estas vertientes las teorías subjetivas no toman en ceunta datos objetivos, y
aello se atribuye su fracaso, pues la mera actitud subjetiva no puede reemplazar la ejecución d ela
conducta, contradiciendo el principio estructural del derecho penal vigente. La determinación de
la intervención de los sujetos quedaría en sus mismas manos, pues sólo ellos sabrían en qué
calidad actuaron.

EL ANTIGUO CRITERIO OBJETIVO MATERIAL

Esta teoría parte de una concepción clásica del delito, en la cual el elemento objetivo de la
descripción del delito estaba conformado por la acción, entendido como sinónimo de causación
del hecho, ponineod de manifiesto que se partía de las ciencias naturales aplicadas al método del
derecho penal, lo cual significo el rechazo de esta teoría ya que no es posible hacer distinciones en
el plano causal naturalístico.

En esa teoría para ser autor, es preciso ser “causa” y quien aporta una “condición” es partícipe,
siendo esa su diferenciación

Bajo esta misma teoría se encuentran la teoría de la necesidad, que dice que el autor es quien
ponga su aportación al hecho una condición necesariam sin la cual no se hubiera producido el
resultado y como conclusión nos lleva a emitir juicios hipotéticos. También esta la teoría dela
simultaneidad, que considera autres a todos los que actúen en la fase de ejecución del hecho,
aprtiendo de la proximidad d ellos sujetos a la producción del resultado. Existen las llamadas
teorías que diferencian según el carácter directo o indirecto de la causalidad, las cuales no se fijan
tanto en la importancia o trascendencia causal de las contribuciones d ellos intervinientes, sino en
la dirección de esa causalidad, si la conducta y el resultado tienen una relación directa.

La ultima es la que se conoce como teoría de la supra ordinación del autor y la subordinación del
partícipe o de la coordinación o igualdad de los coautores.

EL NUEVO CRITERIO OBJETIVO-MATERIAL

Se refiere a la teoría del dominio desarrollada entre otros por Claus Roxin

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