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“LA DESIGUALDAD”

ESTUDIANTE: WALTER RUBEN PASTEN VERA


DOCENTE: JEAN PAUL BENAVIDES LOPEZ
MATERIA: HISTORIA ECONOMICA DE BOLIVIA
AÑO: 2021
INTRODUCCION. –

“La desigualdad no es inevitable, ni es consecuencia de leyes inexorables de la


economía. Es cuestión de políticas y estrategias.” -Joseph Stiglitz.

La desigualdad es un tema de interés común en nuestras sociedades modernas,


está conformada de diferencias y contrastes donde las oportunidades no son
repartidas de la manera más justa. Nosotros como ciudadanos tenemos la
responsabilidad y el deber de combatirla y erradicarla, en busca de una sociedad
equitativa y sostenible para todos los bolivianos.

En este ensayo se trabajará la desigualdad de ingreso en Bolivia, desde cómo se


mide, cuándo nace, los modelos económicos que la han deteriorado o la han podido
regular cómo se percibe en la actualidad, es importante buscar una distribución
más pareja, hasta elaborar diferentes propuestas para poder combatirla, también se
analiza el comportamiento de la desigualdad, la pobreza y alguna evidencia que
muestra el grado de la movilidad social en Bolivia. Uno de los principales objetivos
se enfoca a proveer un conjunto de información que permita tener una idea general
para la discusión sobre los niveles, los determinantes e implicaciones de una
política pública alrededor de estos temas. La revisión sobre el contexto económico
de los últimos años nos ayuda a tener una base importante parta entender como
interactúan dichas variables.

Sobre los hallazgos empíricos provenientes de estudios desde la economía, se llega


a debatir los principales rasgos de la desigualdad, la movilidad y la pobreza. Esta
aproximación no niega que existen diversas formas de tratar el tema, pero, al
mismo tiempo, reconoce que la economía es también un instrumento útil para
indagar estos temas. En particular, el énfasis en “medición de la pobreza” se llega
a justificar por la necesidad de cuantificar la magnitud de este problema, la riqueza
metodológica que se ha desarrollo últimamente y el primordial rol que este flagelo
cobra en las agendas de política pública.
LA DESIGUALDAD EDUCATIVA EN BOLIVIA

Andersen y Molina realizaron un estudio sobre las diferencias que hay entre niños
y niñas en el acceso a la educación y su tiempo de permanencia en el sistema
educativo. Esta es una diferente forma de abordar las desigualdades en el sector
educativo, pues muchos estudios demostraron que la educación de las mujeres
tiene unos efectos importantes para el desarrollo en el largo plazo. Además, el
nivel educativo de las madres usualmente es más importante que la educación de
los padres para los logros de los hijos. Por otra parte, es interesante ver cómo los
distintos autores logran percibir la educación como un hecho que da origen a las
desigualdades en el ingreso o la productividad.

Por ejemplo, después de calcular el índice de Gini para Bolivia entre los años 1992
y 1995, los resultados que van entre 0,53 y 0,56 concluyen que, desagregando el
ingreso, la variable estudio logra explicar casi en su totalidad la
desigualdad, mientras que las otras variablessolo explican una proporción de lo
que se explicado por la educación. Por su lado logra calcular los índices de Theil
y Gini para el área urbana de Bolivia y logra concluir que la educación es la
variable que logra explicar mejor las desigualdades. Adicionalmente, Spatz y
Steiner logran calcular que el índice de Gini urbano 1989-1997 incrementa de 0,49
a 0,52, y la educación es la variable explica de mejor manera dicho cambio,
concluyen que, si hay una mejora en educación, se reduciría el ingreso de los
trabajadores, ya que serían menos escasos. Andersen hace simulaciones con un
modelo de equilibrio general para Bolivia, demostrando que una mejora de la
educación básica llegaría a beneficiaría a los trabajadores que no son cualificados
y habría una mejora en nuestra balanza de pagos a través del incremento de nuestra
competitividad, teniendo en cuenta que los trabajadores con una educación
primaria pueden ganar lo mismo o menos que los trabajadores sin
educación, según un estudio de IISEC.
También, supone que el nivel de educación de una persona puede llegar a
beneficiar a otras personas, como por ejemplo a través de externalidades de
invención. Le permite concluir que la tan mala calidad de la educación pública que
hay en Bolivia produce que la productividad de los trabajadores sea muy
baja, además que la pobreza sea transmitida de una generación a otra, que el
sistema educativo no llega a cumplir su función y propósito como mecanismo de
redistribución y que la educación primaria no es una meta demasiado ambiciosa
para Bolivia. Simplemente, la educación primaria no logra generar efectos
positivos si no está complementada por la educación secundaria o
universitaria. Por otra parte, Villegas comenta que en el área rural la educación no
es la variable que mejor explica la desigualdad del ingreso, sino el sector del
trabajo agrícola o no agrícola, ya que la estructura del mercado laboral es en su
totalidad distinta en ambas áreas.

DESIGUALDAD EN EL MERCADO DE TRABAJO

El mercado laboral no se valorará los empleos de una manera equitativa. En varios


de estos casos, esto se debe a la abundancia de mano de obra o exceso de oferta.
Relacionado a otros casos, se debe a que el mercado es un reflejo de los prejuicios
de las sociedades hacia diversos oficios y hacia las personas que ejercen estas
profesiones. Se podría decir que trabajo doméstico es quizás el ejemplo más
conocido de estos prejuicios, pero existen muchos más.

Si queremos unos resultados más equitativos del mercado laboral, se necesita de


instituciones de apoyo, como el salario mínimo, también la negociación colectiva
y leyes que nos garanticen la igualdad de trato para todos, sin importar el tipo de
contrato que tengamos.
También son necesarias algunas políticas públicas de apoyo, como los servicios
públicos de atención y la educación para la primera infancia que logra permitir a
los padres poder entrar con una mayor facilidad al mercado laboral al reducir el
costo de acceso.

Todas estas medidas son especialmente importantes para los trabajadores de


ingresos bajos, los cuales varios de estos son “marginales”, que con frecuencia
incluyen a las mujeres, los jóvenes y los migrantes. Estos grupos se logran
desempeñar mejor cuando los mercados laborales tienen sus instituciones de apoyo
que pueden llegar a incrementar sus ingresos, también pueden limitar la incidencia
de trabajo mal remunerado y reducir la desigualad que hay.

Los mercados laborales están influenciados de igual manera por las políticas
sociales. Los programas de asistencia social logran tranquilizar la desesperación
de los trabajadores y su probabilidad de llegar a ser víctimas del trabajo forzoso o
de diferentes formas de explotación. Las prestaciones por desempleo pueden
mejorar la adaptación al mercado laboral, como también mejorar la capacidad de
los trabajadores al negociar mejores salarios. De igual manera, los programas de
garantía del empleo lograrían mejorar el respeto del salario mínimo. Las
prestaciones asociadas a un empleo, corren el peligro al de actuar como un subsidio
a los salarios bajos, a menos que estos no sean complementados con otras políticas
como el salario mínimo.

Son necesarias las políticas para apoyar esos períodos en que no se debería trabajar:
cuando somos adolescentes y deberíamos dedicarnos a estudiar, cuando no
podemos trabajar debido a alguna enfermedad o discapacidad o cuando nos
jubilamos. Lograr garantizar que los individuos y las familias puedan privarce de
trabajar durante esos períodos, precisa de políticas sociales de apoyo. Esto se logra
demostrar gracias a los datos, por ejemplo, muestran una relación negativa entre la
cobertura y los niveles de pensiones y la tasa de participación de los adultos
mayores en la fuerza de trabajo. Existe por lo tanto una necesidad, la de garantizar
que los trabajadores tengan un ingreso suficiente que les permita estar fuera del
mercado laboral, al combinar algunos regímenes contributivos de pensiones con
las garantías mínimas para todos.

Varios países que están en desarrollo han ampliado sus programas de asistencia
social, lo que es una evolución positiva gracias a su eficacia para reducir la
pobreza. Pero gracias al bajo nivel de las prestaciones, este tipo de políticas deben
ser complementadas con otras medidas de protección social que puedan llegar
proporcionar un apoyo extra a los trabajadores y así obtener un mayor efecto
redistributivo.
Algunas de las políticas requieren financiamiento, por eso es necesario que los
países puedan contar con una base imponible, que sea lo suficiente para financiar
la redistribución y la voluntad política de lograr incrementar las rentas públicas, si
es necesario.
CONCLUSION. –

Como conclusión podemos decir que, si no mejoramos nuestra democracia, y al


mismo tiempo democratizar la economía, cualquier cambio que haya será en vano
y sin ningún tipo de prosperidad. La economía nos ayuda como una herramienta
para lograr entender a nuestra sociedad, para buscar el bienestar y la sostenibilidad
de la democracia. No es suficiente mantener elecciones cada cierto tiempo, con
órganos independientes del Estado. Como ciudadanos debemos de ir más allá de
esos factores para lograr comprender la democracia, y entender más que todo, la
importancia y los beneficios en todo ámbito posible.

La información obtenida de este este trabajo sirve para implementar intervenciones


específicas destinadas a reducir las desigualdades y mejorar el nivel de acceso a
los servicios de salud y trabajo, como por los planificadores y tomadores de
decisiones, encargados de generar e implementar políticas dirigidas a disminuir la
exclusión social y formular mecanismos de redistribución económica, a fin de
elevar el nivel de equidad social.

La desigualdad es un problema común para todos y siempre se tiene que buscar la


mejor manera para combatirla, pero lo más importante siempre será actuar. Se nos
enseñó que lo más realista que podemos hacer, es no hacer nada. Sin embargo,
dentro de las herramientas que podemos utilizar como la economía, se pueden
encontrar variados mecanismos para afrontar de una manera posible y efectiva la
desigualdad en nuestra sociedad moderna.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS

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