1. Introducción. La necesidad de ampliar la mirada para enfrentar la pobreza.
2. La medición internacional de la pobreza y las políticas para combatirlas. 3. El crecimiento económico y reducción de la pobreza.
CAPITULO I: INTRODUCCION. LA NECESIDAD DE AMPLIAR LA MIRADA PARA
ENFRENTAR LA POBREZA. La pobreza puede llegar a ser muy cruel, dentro del entorno humano, destruyéndonos moral, social y biológicamente, tomando un gran papel ante nuestro andar. De igual forma ante el marcar del tiempo se ha podido visualizar que el modelo neoliberal adoptado por muchos países de América Latina, incluyendo México, no ha funcionado, teniendo un referente de más de dos décadas, flagelando cada vez más a las personas que se encuentran dependiendo de los “beneficios” que el gobierno pueda darles, haciéndolos cada vez más vulnerables, ante las políticas que buscan recudir las brechas de pobreza. Ante estos modelos que pretenden dar bienestar a la población, están dejando de lado que la población en pobreza o pobreza extrema, no se está tomando en cuenta del todo, aunque debería de ser así, tomando centralmente la medición correcta de esta población vulnerable, aspecto que muchos países europeos están dejando de lado, puesto que no han optado por cambiar la forma en la que miden a esta población, por lo que no hay reflejos de información completa ante esta situación y por ende las políticas sociales y públicas, no tienen el accionar adecuado.. Por otra parte, tenemos a Estados Unidos, con un modelo residual en el que la medición de la pobreza es el tema central, pudiendo llegar a la población que se encuentra en situación vulnerable, apoyándolos, casi exclusivamente. Ante estas situaciones adversas y deficientes, la medición de la pobreza se ha vuelto un criterio esencial en la evaluación del desarrollo de los países y de su gestión gubernamental. Para estas mediciones de la pobreza se tienen tres criterios de medición: el primero, son las mediciones requeridas para la operación de las políticas sociales residuales y de los programas específicos; la segunda, son las mediciones nacionales y la última, son las mediciones comparativas entre países, realizadas por organismos nacionales. En México (200), se llevó a cabo un coloquio internacional llamado “Pobreza, Realidad y Desafío”, dando cabida a la lectura, donde se desarrollan temas como el análisis de la estrategia neoliberal, lucha frente a la pobreza, las debilidades de las políticas sociales nacionales e internacionales, la evolución de los estados de bienestar, experiencias dentro de las prácticas de lucha contra la pobreza, propuestas, nuevos métodos de medición, etc. PANORAMA GLOBAL DE LOS CAMBIOS EN LA ECONOMIA, LA POLITICA ECONOMICA, LA POLITICA SOCIAL, EN LA POBREZA Y EN LA AGENDA PARA COMBATIRLA. David Gordon realiza una crítica ante las políticas antipobreza que manejan el FMI y el Banco Mundial, haciendo hincapié que son ambiguas y que está demostrado que las variables que estos organismos utilizan, son un tanto cuadradas, generando mayor brecha de pobreza, y desestabilidad, por lo que son modelos que no funcionan. Por lo cual el señala un mejor manejo de las políticas europeas, ya que buscan mejorar las condiciones laborales y la cobertura social. Maneja que, con CRUZ RODRIGUEZ DIANA LAURA GRUPO: 4EM23 base en cifras europeas y estadounidenses, se refleja que entre más comprensiva sea la redistribución vía estado de bienestar, menor es la distribución de pobres. Motivo por el cual se proponen diferentes métodos de medición, ya que los métodos utilizados, son un poco rezagados, ante los cambios presentes, que de igual forma existe una subestimación en el cálculo de la pobreza general y mundial. Gordon comenta que el método que considera más adecuado es el de “presupuestos familiares”, que son las líneas de pobreza con base en las canastas normativas de satisfactores de necesidades, tomando en cuenta las tendencias de consumo y el índice de satisfacción de necesidades humanas básicas. Para así estimar un promedio en los montos requeridos para sacar a la población de la pobreza. John Toye por su parte, empata con las ideas que maneja Gordon, afirmando que las políticas instruidas por organismos mundiales de “élite”, hace que haya ciertos desvíos cuando estas son adoptadas por los países, ya que el defiende que las políticas deben ser particulares, dependiendo del tiempo, país, situación, etc., para que haya políticas de acuerdo al contexto particular, así mismo, menciona que la distribución de los recursos debe ser por priorización, a modo de garantizar que exista una posibilidad de supervivencia y que estos recursos no sean desperdiciados. Nora Lustig nos proporciona una visión diferente al relacionar el crecimiento económico con la pobreza, señalando a su vez, que va a depender de la distribución del ingreso y evolución. La pobreza al ser manejada de forma dependiente con el crecimiento, puede limitar la reducción de esta y el crecimiento económico, por, sobre todo, tratándose de países en vías de desarrollo, donde se pueden desatar injusticias y problemáticas sociales, que puedan afectar al crecimiento. A parte de un incremento en la inversión en capital humano, la autora considera que se deben dar mayores créditos a estas poblaciones, así como un aumento en los subsidios, seguros, protección social, legal, invertir en infraestructura básica. José Luis Calva analiza los cambios económicos en los ochenta, señalando que las políticas económicas viraron respecto al modelo de sustitución de importaciones. Comenta que a partir de 1993, con la crisis, las estrategias neoliberales, se le dieron mayormente prioridad a los mercados y agentes privados, estrategias macroeconómicas restrictivas, dando como consecuencia un aumento de precios y tarifas de bienes públicos, reducción de salarios reales, restricciones de oferta y demanda, provocando efectos negativos en el bienestar social. Calva propone diez instrumentos de política económica viables, para lograr un mejor entorno económico y político internacional. Araceli Damián señala que las políticas económicas neoliberales no han logrado restablecer los niveles, menos altos de pobreza, a inicios de los ochenta. De igual forma nos plante que en los noventa hubo una 2masculinicacon”, sosteniendo que no por reducirse la brecha de educación, la pobreza, por tanto, va a reducir. Damián, mediante diversos datos de fuentes varias, nos comenta que la pobreza mas alta en México, fue durante los años sesenta.
MODELOS DE BIENESTAR SOCIAL EN EL CENTRO Y EN LA PERIFERIA
En este apartado Esping- Andersen desarrolló una tipología de estados de bienestar, donde también nos maneja que anteriormente como era bien sabido, la fuerza de trabajo, con la persona propia eran anexadas monetariamente, ahora, no en todo el mundo, pero es mayor la desmercantilización, ya que el servicio prestado ocurre como un derecho, sin que esta dependa del mercado, aunando a que CRUZ RODRIGUEZ DIANA LAURA GRUPO: 4EM23 maneja diversos servicios que no deberían estar ligados con la capacidad de pago de los individuos. Los estados de bienestar que el maneja están divididos en tres: el primero, es el denominado por la asistencia social, al que llama modelo “liberal o residual”, en este, el individuo debe comprobar que no tiene los medios suficientes, y que, por tanto, necesita la asistencia social, aunque este apoyo es mínimo. El segundo, es un modelo de seguridad social obligatoria, esta provee derechos amplios a los asegurados, pero los beneficios dependen casi totalmente de las contribuciones individuales, dependiendo del empleo, este modelo sigue la subsidiariedad en las familias, por lo que no estimulan la independencia de los jóvenes y de la mujer. El tercer modelo es llamado “socialdemócrata”, donde se podría haber logrado una mayor igualdad a nivel alto y no mínimo, aunado a un estímulo en la independencia individual al otorgar transferencias directas a loa menores, ancianos e inválidos, protegiendo de igual forma el ingreso. Por su parte Eduardo Bustelo pone en tela de juicio las premisas de la política social neoliberal aplicadas en América Latina en los ochenta, donde se recalca que no se han sentado las bases para un desarrollo económico y social que mejore el bienestar de los pueblos y corrija la distribución de ingresos y disparidades sociales. También nos menciona que el objetivo de la creación del estado de bienestar era propiciar protección por parte del sistema a los individuos y a sus familias. Aunque con la falta de dinamismo económico, volatilidad, recesión, etc., ha sido difícil llevar esto a cabo. El autor afirma que ante estas problemáticas, de igual forma nos plantea que las políticas neoliberales centradas en el interés individual, pugnan sobre el desmantelamiento del Estado, acentuando la privatización del espacio público, fomentando el individualismo. Tanto económico, social, educativo, llevando a una desintegración social. Bustelo menciona que lo social debe recolocarse dentro del espacio público, fortaleciendo la democracia y sus instituciones, por lo que se requeriría construir un orden moral de valores compartidos siendo el superior el de la justicia, constituyendo una sociedad autónoma, capaz de generar empleos productivos. Evelyne Huber analizó la dinámica de la política social en América Latina, durante los ochenta y noventa, donde posibilita fluctuaciones de cobertura muy desigual, así mismo advierte que, como la cobertura era limitada a unos cuantos, el control de precios y los subsidios a productos alimentarios y al transporte, trayendo como consecuencia tasas de subempleo y desempleo, pobreza, recortes al gasto social, etc. Aunado a las aperturas de las economías nacionales, que quebraron a medianas y grandes empresas, por lo que sus empleados perdieron cobertura en salud y seguridad social. Acrecentando más la desigualdad de ingreso y pobreza en América Latina. La autora distingue dos tipos de evolución del estado benefactor en los noventa: la individualización y privatización de las pensiones aunadas a una política social focalizada y una universalización de los beneficios y mantenimiento de la responsabilidad del estado. Por lo que en algunos países se eliminó la responsabilidad del empleador de contribuir a éste, las tasas eran bajas, con ello, pues no había una cobertura universal. Aunque es importante decir que esos programas focalizados si bien no resolvieron el problema de fondo, ayudaron a que no se deterioraran los indicadores que son supervisados internacionalmente, como la mortalidad infantil. De igual forma la autora cuestiona dos ideas difundidas por el Banco Mundial, una que el aumento de la inversión de capital humano reduce la pobreza y la desigualdad, y dos que los esquemas universalistas desperdician dinero en la clase media y alta, afirmando que pierde validez en un contexto donde exista un sistema de impuestos de efectivo para recuperar dicha “pérdida”. CRUZ RODRIGUEZ DIANA LAURA GRUPO: 4EM23 De igual forma Huber señala que el tipos y grado de las reformas llevadas a cabo estuvieron determinados por el balance de poder entre los promotores. De igual forma compara el desarrollo de los estados de bienestar en las ultimas décadas entre los países de Europa Occidental y los de América Latina, donde distingue las siguientes diferencias como el proceso de globalización modificó en mayor grado las economías latinoamericanas y el estado mismo, las instituciones democráticas y las fuerzas internas que apoyan el objetivo universalista y solidario de las políticas sociales de protección, que tuvieron menos fuerza en América Latina, y los partidos políticos, en especial los democráticos de izquierda, los sindicatos tienen menos peso y se debilitaron más con las crisis y los regímenes militares; sindicatos en México, dadas las diferencias en el nivel de endeudamiento y en los problemas para enfrentar pagos, los países europeos estaban en una mejor posición para diseñar por sí mismos sus políticas de austeridad. EXPERIENCIA DE LUCHA CONTRA LA POBREZA Fresneda analiza los logros y deficiencias del sistema de subsidios a la salud en Colombia. La focalización está a cargo del Sistema de Selección de Beneficiarios. Los beneficiarios de los subsidios deben pertenecer a hogares que tengan los niveles 1 o 2 del índice Sisben y se asignan los cupos dando prioridad a ciertos grupos de la población. El índice combina los ingresos del hogar con indicadores directos de condiciones de vida, ponderados a través de un método de componentes principales. El autor relata cómo, en el curso de la investigación, fuera de registro y de forma anecdótica se encontraron testimonios de esa creatividad para acceder a privilegios de forma fraudulenta. Boltvinik muestra que el gobierno mexicano ha seguido al pie de la letra las políticas neoliberales instauradas durante la dictadura de Pinochet en Chile, las cuales están basadas en el principio de la subsidiariedad del estado. Al igual que critica diversas evaluaciones realizadas durante la presente administración, debido a que muchas de estás no han seguido una metodología que permita realmente evaluar el impacto del programa. Poniendo en duda la utilidad de realizar las evaluaciones, ya que las recomendaciones emanadas de estás, no han sido incorporadas al diseño del programa. Una de las conclusiones de este autor es que la apuesta de invertir en capital humano, como lo hace Oportunidades, pierde validez al constatarse que, en México, aun con la elevación de los niveles educativos en las últimas dos décadas, la pobreza ha seguido aumentando. De igual forma una serie de premisas donde nos dice que los menores dejan la es cuela porque entran a trabajar para incrementar el ingreso del hogar, que las redes de protección social no están enfocadas a los más necesitados y, que el uso de indicadores de pobreza sirven para identificar a los mas necesitados y que el apoyo monetario otorgado a las mujeres arroja una mayor transformación en satisfactores para los niños que los recursos manejado por los hombres. También Boltvinik critica la selección de las familias beneficiarias en el interior de las comunidades, ya que las evaluaciones han encontrado que el aumento logrado en la eficiencia en el uso de recursos no es significativo. .